DECLARATORIA DE MUERTE PRESUNTA

SEÑOR JUEZ QUINTO DE PRIMERA INSTANCIA DEL RAMO CIVIL.

ANA MARÍA LÓPEZ LARA DE RABANALES, de cincuenta años de edad, casada,

modista, guatemalteca, de este domicilio, actuando bajo la dirección y procuración del
Abogado Auxiliante, cuya oficina profesional situada en la sexta calle dieciséis guión
veinte de la zona uno de esta ciudad señalada para recibir notificaciones; atentamente
comparezco a promover DILIGENCIAS VOLUNTARIAS para la declaratoria de
muerte presunta de mi esposo RAFAEL RABANALES RODRÍGUEZ, y para el efecto
expongo:

H E C H O S:

I.- Con fecha dos de mayo de mil novecientos setenta y uno, contraje matrimonio civil
con el señor RAFAEL RABANALES RODRÍGUEZ, sin adoptar régimen económico
del matrimonio, habiendo procreado un hijo de hombre RAFAEL RABANALES
LÓPEZ, quien actualmente tiene la edad de quince años cumplidos.

II.- Nuestro matrimonio transcurrió felizmente, hasta que el día primero de marzo de
mil novecientos setenta y seis a eso de las quince horas, mi esposo desapareció
misteriosamente al salir de su trabajo en el Edificio El Patio situado en la zona cuatro de
esta ciudad, sin que hasta la fecha se haya tenido noticia alguna de su paradero,
desconociéndose si vive o nó; siendo su ausencia total e ininterrumpida desde aquella
fecha.

III.- En vista de su prolongada ausencia, promoví ante este mismo tribunal las
diligencias para obtener la declaratoria de ausencia correspondiente, diligencias que
fueron declaradas con lugar y fecha quince de octubre de mil novecientos setenta y seis.

IV.- Con fecha diez de febrero de mil novecientos setenta y siete, y a mi solicitud, este
mismo tribunal emitió resolución por medio de la cual se me confirió la administración
de los bienes del ausente, tomando en cuenta mi calidad de cónyuge.

V.- Comparezco a promover las presentes diligencias para que se declare la muerte
presunta, en vista de que persiste la ausencia de mi esposo desde el momento de su
desaparición, ignorándose su paradero desde hace más de seis años.

VI.- Ejerzo mi acción como cónyuge del ausente, y porque según el testamento otorgado
por mi esposo antes de su desaparición con fecha cinco de febrero de mil novecientos
setenta y cinco, en esta ciudad ante los oficios del Notario José Luis Palma Sandoval, la
compareciente, juntamente con mi menor hijo Rafael Rabanales López somos las
personas que tenemos derecho a suceder en los bienes del ausente como herederos
testamentarios.

D E R E C H O:

El Artículo 63 de nuestro Código Civil establece “Transcurridos cinco años desde que se
decretó la administración por los parientes, o cinco años desde que se tuvo la última
noticia del ausente, podrá declararse la muerte presenta de éste, y en tal caso, podrán sus
herederos testamentarios o legales pedir la posesión de la herencia”. En consecuencia,
habiendo transcurrido más de cinco años desde que se tuvo la última noticia del ausente
y también de haberse decretado la administración de sus bienes, queda expedita la vía
para ejercer la acción que ahora promuevo.

P R U E B A S:

Ofrezco probar mi dicho con los siguientes medios de prueba:

DOCUMENTOS: Los cuales consisten en:

1.- Certificación de la Partida de Matrimonio celebrada entre la compareciente y el

presunto fallecido, extendida por el Registro Civil de esta Capital.

2.- Certificación de la partida de nacimiento del hijo que procreamos, RAFAEL

RABANALES LÓPEZ, extendida por el Registro Civil de esta capital.

3.- Certificación de la resolución de fecha quince de octubre de mil novecientos setenta

y seis, por medio de la cual se declaró la Ausencia de mi esposo, extendida por este
mismo Tribunal.

4.- Certificación de la resolución emitida con fecha diez de febrero de mil novecientos
setenta y seis, por medio de la cual se me confirió la administración de los bienes del
ausente, extendida por ese mismo tribunal.

5.- Certificación de la Partida de Nacimiento del presunto ausente.

P E T I C I O N:

A. DE TRAMITE:

1.- Que se tenga por conferida la Dirección y Procuración del presente asunto, al
Abogado Auxiliar, y como lugar para recibir notificaciones la dirección señalada;

2.- Que se tenga por acompañados los documentos que se presentan, y por ofrecidos los
medios de prueba relacionados;

3.- Que se corra Audiencia de las presente diligencias y se oiga al Ministerio Público.

B. DE FONDO:

1.- Que al resolver en definitiva, se declaren con lugar las diligencias que promuevo;

2.- Que en consecuencia, se declare la muerte presunta de mi esposo RAFAEL

RABANALES RODRÍGUEZ, fijando como fecha de la muerte de la que se deduzca de
conformidad con los datos aportados al proceso;

3.- Mandar, que al estar firme el fallo, se extienda Certificación del mismo, para los
efectos de la inscripción en el Registro Civil y Registro de la Propiedad
correspondiente.
 C I T A D E L E Y E S:

Ley citada y los artículos: 55,63,68 del Código Civil; 29,44,51,61,401,403,411,417 del
Código Procesal Civil y Mercantil, Decreto Ley 107.

Acompaño duplicado y dos copias del memorial y documentos relacionados.

Guatemala, 17 de abril de 1984.

f)
EN SU DIRECCIÓN Y AUXILIO
f)
Abogado y Notario
SELLO.
***********************************

RESOLUCIÓN DEL TRIBUNAL:

JUZGADO QUINTO DE PRIMERA INSTANCIA DEL RAMO CIVIL: Guatemala,

treinta de abril de mil novecientos ochenta y dos.

Se tiene a la vista para resolver, las diligencias que en la vía voluntaria promovió la
señora ANA MARÍA LÓPEZ LARA DE RABANALES, con el objeto de obtener la
Declaración Judicial de Muerte presunta de su esposo RAFAEL RABANALES
RODRÍGUEZ, y de las mismas,

CONSIDERANDO:

1.- Que con la Certificación de la Declaratoria de Ausencia extendida por este mismo
Tribunal, se establece que efectivamente, el señor Rafael Rabanales Rodríguez
desapareció el día primero de marzo de mil novecientos setenta y uno, a eso de las
quince horas, en esta capital;

2.- Que con la certificación de la partida de Matrimonio extendida por el Registro Civil
de esta capital, se establece que ANA MARÍA LÓPEZ LARA y RAFAEL
RABANALES RODRÍGUEZ, contrajeron matrimonio civil en esta capital, con fecha
dos de mayo de mil novecientos setena, por lo que la compareciente tiene la calidad de
cónyuge del presunto ausente.

3.- Que en el Ministerio Público, al evaluar el traslado que el fue conferido, se ha

manifestado con opinión favorable a la procedencia de lo solicitado y que no hay
ninguna objeción que hacer a la misma;

4.- Que con los demás datos procésales se establece claramente que desde la fecha de
desaparición del señor Rabanales Rodríguez, han transcurrido a la fecha más de cinco
años desde que se tuvo la última noticia de su paradero, habiendo persistido tal ausencia
en forma ininterrumpida, artículos 42,55 y 63 del Código Civil: y,
CONSIDERANDO: Que de acuerdo con nuestra legislación civil sustentiva, se
considera ausente para los efectos legales, la persona que ha desaparecido de su
domicilio y cuyo paradero se ignora, siendo éste precisamente el caso que se conoce por
este Juzgado; que la Administración de los bienes del presunto ausente puede ser
ejercida por el cónyuge e hijos del ausente, cumpliéndose en el presente caso este
supuesto, por cuanto la solicitante ha comprobado su calidad de cónyuge del presunto
ausente; y que, de conformidad con el mismo orden jurídico civil, transcurridos cinco
años desde que se decretó la administración de los bienes del ausente por los parientes o
cinco años desde que se tuvo la última noticia del ausente, podrá decretarse la Muerte
Presunta de éste, y en tal caso, podrán los herederos testamentarios o legales pedir la
posesión de la herencia. Artículos 42,55 y 63 del Código Civil; 401,402,403,411 y 417
del Código Procesal Civil y Mercantil.

POR TANTO: Este Tribunal con base en lo considerado, leyes citadas y lo que para el
efecto prescriben los artículos 157,158 y 159 de la Ley del Organismo Judicial, al
resolver, DECLARA:

I.- Con lugar las diligencias promovidas por la señora ANA MARIA LÓPEZ LARA.

II.- En consecuencia, decreta la Muerte Presunta del Señor RAFAEL RABANALES

RODRÍGUEZ, fijando como fecha presunta de la misma, el día primero de marzo de
mil novecientos setenta y uno de las quince horas, en esta capital.

III.- Manda que, al encontrarse firme el fallo, se den las certificaciones solicitadas para
los efectos de su inscripción en el Registro Civil y Registro de la Propiedad, de
conformidad con la ley. NOTIFÍQUESE.

Media firma del Juez firma del

secretario.