Lecci6n 11
Las reformas econdmicas y sociales
de la ideologia liberal
Jorge J. Montes Salguero
]. BSTRUCTURA ECONOMICA
A) La agricultura: la revoluci6n agraria y proteccionismo
Enla sociedad del Antiguo Régimen, la tierra era la fuente principal de pro-
| duccién de manera que el dominio y la propiedad sobre ella constituyen las bases
~ de esa sociedad, Los datos sobre la tierra en este periodo, en especial hasta los
afios sesentta del siglo XIX, no son muy fiables pero siguiendo a Tortella, dicemos
que de 10,5 millones de hectareas de suelo cultivado, unos 9 millones estaban
dedicadas a cercales a principios de la centuria; las tierras cultivadas se convirtie-
ton en 16 millones de hectdreas hacia 1860 y en 18,8 millones a principios del
siglo Xx.
La guerra de la Independencia agudizé la crisis que la economia espaiiola ve-
nia arrastrando desde las tiltimas décadas. El Estado se hallaba totalmente colap-
sado por la falta de recursos y por la incapacidad para poder hacer efectivos los
jmpuestos. Como afirma Fontana, el hundimiento del aparato administrativo, la
émancipacién de los territorios americanos, Jasuspensién de las remesas de me-
tales preciosos y el esquema de propiedad de la tierra determinaron la crisis eco-
“nomica de la Espafia del siglo xix.
A finales del siglo xvi todavia subsistia en muchos Ingeres el viejo régimen
sefiorial como regulacion general de la explotacién de la tierra. Par otro lado, cs
bien sabido que las tierras pertenecian en gran parte a lalglesia y a entidades pa-
‘raeclesisticas (Hospitales, Hospicios, Universidade, Ordenes Militares, Inquisi-
ion) o a entidades como los municipios, en régimen de propiedad amortizada,
es decir no enajenable.
193Cultura Buropeaen Espatia
Por su parte, la nobleza acumulaba también numerosas propiedades, con fre-
cuencia constituidas en régimen de mayorazgo, vinculadas de forma tal que el
titular del mayorazgo slo podia transmitirlas «mortis causa» con arreglo a un or-
den sucesorio especial, necesitando autorizacion de la Corona para tomar dinero
a préstamo con garantia sobre sus tierras vinculadas o para cualquier decisin,
sobre las mismas.
Las tierras vinculadas en régimen de mayorazgo y les tierras amortizadas en
manos de las personas eclesisticas, estaban fuera de comercio y no podian com-
prarse ni venderse con libertad.
La tierra en el Antiguo Régimen arrastraba una serie de caracteres que, fina
lizada la guerra de la Independencia, comienzan a modificarse. Muchos de ellos’
eran verdaderas lacras debido al inmenso poder que tenfa el gremio de genaderos.
(La Mesta). Uno de ellos era la prohibicién de cercar las heredades a fin de que _
tras la cosecha pudiese pastar el ganado, lo que se suprimi6 por decreto el 8 de
junio de 1813 que establecia libertad de cercamiento y arrendamicnto de las tie-
tras. ‘También se suptime la prohibicién de roturar las tierras baldias, es decir,
Ios terrenos sin cultivar, quc se incorporaban al Estado, Comienzan después las _
xeformas tras la abolicién del régimen sefiorial de 1811 y mds tarde, en 1837, el
declive de la Mesta, lo cual aumenté las tierras de cultivo. Por su parte, después
dela crisis de la Guerra de Ja Independencia entre 1820 y 1834, se dictaron diver:
sas medidas proteccionistas en materia de cereales prohibiendo Ja importacién
de trigo de otros paises y procurando que la produccién nacional fuera suficiente.
Estas medidas, junto con Ja desamortizaci6n, propiciaron segiin Nadal una gran
expansi6n en el cultivo del trigo. Bn los primeros sesenta afios del siglo x1x se ob-
serva una répida expansién de la superficie cultivada en cereales, con lo que au:
menté su productividad advirtiéndose, s6lo a partir de la etapa de Alfonso XII,
un descenso de la superficie triguera como consecuencia de la llegada de los ti-
gos americanos y rusos. Vicens Vives argumenta que cl aumento de las superficies
Cultivadas no se debe tanto a la desamortizacién como a las tierras desvinculadas.
Junto con la expansién del cultivo del trigo se aumentaron también las vifiedos,
coavirtiéndose Bspafia a finales del sigio xrx en uno de los primeros productores
de y exportadores de vino. A ello ayud6 una voraz plaga de filoxera que afect a
Jos vifiedos franceses. Continuamos siendo uno de los mayores paises producto-
res de aceite de oliva. En cualquier caso los datos sobre importacién y exportaci6n.
son muy escasos y, como nos indica Tortella, las estadisticas de la época son poc
fiables.
194Las refrrinas econdmicas y sociales de la idcologia Uberal
B) La propiedad agraria y sus reformas
Como hemos dicho en el epigrafe anterior, el esquema de propiedad de la tie-
tra del Antiguo Régimen estaba mAs proximo al feudalismo. Bse modelo entra
en toda Europa en su filtima y definitiva crisis: es la etapa de las revoluciones
purguesas liberales que luchan por un cambio en el plano politico y econémico.
En 1808 habia en Espafia un régimen absolutista, sin partidos ni libertades polf-
ticas; la propiedad de la tierra estaba vinculada a manos muertas, esto es a la aris-
tocracia, ala Iglesia y a los municipios; el sistema gremial encorsetaba las rela-
ciones de trabajo en el 4mbito artesanal y manufacturero, etc. Era evidente que
las ideas de libertad, no podfan conjugarse sin una reforma a fondo que modifi-
cara el medio de produccién basico: la tierra.
1. La disolucién del régimen sefiorial
Puesto en marcha el sistema constitucional a partir de las Cortes de Cadiz, se
planteé la abolicién del régimen de los sefiorios. No hay que olvidar que una de
Jas ideas de la Revoluci6n Francesa de 1789 implicaba la reforma de Ja propiedad
de la tierray ello suponia finalizar con el régimen sefiorial y, como consecuencia,
abolir los sefiorios jurisdiccionales y solariegos. En Espafia esta operacion fue
realizada por un Decreto de 6 de agosto de 1811 en el que se establecié la aboli-
cion de la jurisdiccién sefiorial y de los derechos sefioriales. Pero la medida no se
extendia a los sefiorios territotiales o meramente solariegos los cuales, de hecho,
se copvertian en propiedades privadas.
La interpretacion precisa del caracter jurisdiccional, o no, de Jas diversas rentas
que percibjan los sefiores, dio lugar a numerosos pleitos ante la justicia (por lo
general sustanciados en contra de los intereses de los campesinos) y de ahi que
Ia cuestion sefiorial se convirtiera en cuestién agraria.
En los afios posteriores, con Ja vuelta de Fernando VI, la muerte del Antiguo
Régimen quedaba aplazada. La sublevacion de Riego volvié a dar paso al espiritu
de las leyes de la Constitucién de 1812 y, como consecuencia; durante el trienio
liberal (aunque de manera transitoria) se fue hacia la culminacién de la abolicién.
En efecto, en 1820 se aprobé un Decreto que abola las vinculaciones, lo que afec-
taba en primera instancia a los mayorazgos. Pero tanto mayorazgos como: vin-
culaciones serian restablecidos en 1823 tras la vuelta de Fernando VII.
Serfa ala muerte del monarca, en 1833, cuando se tomaron medidas de
y definitivas en orden a la supresién de las relaciones econdmicas del /
Régimen. En 1837 un Decreto de 26 de agosto (inspirado directamente
1811) acababa con el régimen sefiorial, pero favorecia abiertamente a los 2
grandes propietarios territoriales, que pasaban de ser sefiozes a ser prop)