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1968
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TEOFILO TORTOLERO
DEMENCIA PRECOZ
Y OTROS POEMAS
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Un poeta nos explicaba cómo pudo ver un día a alguien
que marchaba caminando a la vez sobre ambas orillas
de un ancho y caudaloso río. El cauce era dilatado y la
corriente impetuosa, pero considerables eran el poderío
y el entrenamiento del mago. Y sin embargo, aun para
él, decía Michaux: "Qué difícil era, oh, qué difícil". Se
trata, en efecto, de El País de la Magia, de este poeta
de las graves ocurrencias que es Henri Michaux, pró-
ximo a veces a Arraud pero con más gusto que éste para
la anécdota y no totalmente inmune a las seducciones
del chiste. Mas no es chiste eso de los ríos sobre cuyas
..._ opuestas orilh!s uno quiere caminar simultáneamente.
La poesía misma es sin duda uno de esos ríos. En la
perspectiva de alguien que vive trepado a una pro-
fesión no literaria, la poesía es como el caudal que
desde un cerro se ve discurrir a lo lejos. Puedo acer-
carme a la corriente, y eso es lo que hago. Pero no puedo
sino circular por una orilla. Al poeta le veo en la otra.
Sin dejar la mía, quisiera estar también en la orilla del
autor. Es difícil y esa dificultad debiera hacernos meditar.
Acerca de De17UJncia Precoz trataría yo de decir que tam-
bién el gran poeta que es su autor me parece atormen-
tado por el ansia de dominar orillas opuestas: la de la
belleza y la del sentido. ¿Son éstas las orillas de la poe-
sía? Quizás sean también - y .sobre todo- las de la
vida. En aquéllos en los que el anhelo de expresarse
poéticamente se da con tanto apremio como en Teófilo
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Tortolero, es legítimo creer que el arte no es un ejer-
cicio con el que se intente amenizar el quehacer del
vivir: es más bien el esfuerzo mismo de vivir, empresa
de vida o muerte. Es así como Tonolero tenia oecesa-
¡iameu.te que ser, pese a las apariencias, eso que es en
~ libro: el poeta de lo cotidiano y a la vez de lo tras-
cendental. Nos muestra, por ejemplo, lo aventuroso que
resulta ensayar
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la lucha por !~.. unidad se da dentro del poeta pero taro~
bién en el mundo y .en el tiempo. Es así como se nos
habla de alguien que vive en lo actual y que sin em·
bargo fue
y sobre
"los lagos y lo manso que fui .. . 11
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realidad de algo que ya no sabemos si· es nuestro, si co-
rresponde al nosotros que somos o casi somos, o si más
bien corresponde a un mundo que fuera y C3,$i no es, que
se va desvaneciendo hermanándonos en la nada. Su libro
{ermiua abriendo una contem,\>lación sobrecogedora que
podría definirse diciendo que es el negativo del pan-
teísmo, su vértigo recíproco, nacido al asomarse a las
simas de lo nulo, al entrever la solidaridad en lo nin-
guno, al sentirnos en comunión con el Gran-Todo-de-la-
nada-de-los-casi:s, de que habló Miguel Hernández.
..J::a fuerza angustiosa que emana de este libro no .gos con·
mueve tan sólo por la gravedad de los temas que en
lo más íntimo -d.e sus poemas se entretejen. No debe
ni remotamente pensarse leyendo a Teófilo Tortolero
en lo que no podría sino aparecer como temeraria tarea:
la de escribir ensayos en verso. Las turbadoras imágenes
que usa, el ritmo de sus versos, a veces rotundo y a
veces descuidado y lacio como rehusándose hasta en lo
sonoro a coagularse en conclusiones; todo ello tiene
en primer lugar valor poético. Es como poeta que hay
que saludar, y muy alto, a Teófilo Tortolero. Como to·
dos los buenos versos, los suyos pueden ser llanamente
leídos y luego leidos, diríamos, a trasluz para captar
entonces en filigrana aquellos perfiles en que la belleza
y ei sentido se dan finalmente confundidos.
. }OSÉ SoLANES
10
Al Dr. ]osé Solanes;
a los seres de mi afecto.
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ARSENICOS
1
Libidinal
Yolvía un espejo
retornaba en pedazos
.... de batas blancas de enfermeras saltonas
15
pero qué hago del corazón que me muerde
qué te hago a ti qué me haces
Ya regresan
cállate que llega mi muerto!
y debo preguntar por mis amigos
debo bailar para decir que me contento
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II
Escucha hermanita
cómo se rompe en mi pecho la seda!
alguien se quiere llevar mi inocencia
reza para que no suceda di Padre nuestro
tócame para que este mal se vaya
Estoy contigo
pero no quieres sentir
que me rompen adentro
no pones el oído como te digo
(y si mi madre viviera te diría que sufro
porque conocía mis demonios
17
ella me dio agua bendita
me puso en el pecho la palma)
18
111
19
Soy alto para tus tristezas
soy bajo para que me canten esa canción
que me gusta
20
IV
21
V
22
VI
23
Guarda arcoirjs
no se pierda en el mar de alta noche
la loba celofán de vientre
24
VII
25
.....
CAlDAS
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No somos ángeles
aunque recemos en el comedor
con el hocico del animal rapado
la migaja en el cielo de la boca
29
pero mi sombra llama a la puerta
de aire pulmonado
30
Guardé la boca hacia el rincón llorando
suplicando a la madre del arroz (mi verdugo)
pero siguió la cuchilla en las venas
31
Todos sufrimos esta noche en el patio
reunimos los ojos en un sólo lienzo
y comprendemos
que no falta una gota en ese paño
32
Hay pasto amargo a la izquierda de esa estrella
la rodea una herida tres veces ovalada
que baja de radio al campo de los grajos
33
Brahms
es terrible la llama en la caída
los golpes y aletazos a la puerta del aire
Brahms
son terribles sus coágulos sus cachorros de espuma
flotando al río de la epilepsia
34
Me aproximé al trono funerario.
Sus patas de bálsamo se desplomaban
en el lago derecho
35
No hace hora esta noche
sólo el aire en los tubos de hueso
la helada la muerta la perdida
......
36
DILUVIOS. RESURRECCIONES
Hoy es Diluvio. Y a están con nosotros los pájaros gritando
clavando sus picos en el Arca
39
Si volviera con el ala caída en la mejilla
y sus patas sangrantes brillando en el sol
a la entrada del templo
rendido y rojo en el aire su phunaje
·\ -hasta caer finalmente a la última tierra
yo llevaría su dolor suplicante
a los ojos lluviosos de Palas Atenea
40
" ... la canción del regreso se hace tarde . .. "
4.1
Encontré sus ovarios en el lago
aún no despertaban los soles
en la melena de los cedros
pero la majestad fragante me vencía
42
He terminado
Ven por mi
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OTROS POEMAS
•
HA ROLDO EN ITALIA
BERLIOZ, 2 p. m.
a Viltar-roel-París
47
VENECIA.
a Lourdes Gotto
48
ORFEO
a Eugenio Montejo
49
a lrma Salas
A cuadros escoceses
recibe tu daño mi alma enferma
y eres tan niña que ciertamente no pareces
la húmeda maldad
goteando desde el jardín hasta mi lecho
50
a Luis Alberto Crespo
51
a Mario Abrett
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Sufre la madre y gira como el gallo
tiéndese en el paño de nácar
a sofiar con la sed
guarda la razón de su vientre
las batallas de abejas
pero siempre nos mira desde su potestad
..... con lástima
y lame el dolor de cabeza
moviendo la cola siempreviva
52
MUELLE CUATRO
53
INDICE
Prólogo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 5
Dedicatoria . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11
DEMENCIA PRECOZ
A.rsénicos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13
Caídas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 27
Diluvios. Resurrecciones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 37
-0TR.OS PoEMAS
Haroldo en Italia 47
Venecia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 48
Orfeo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 49
Muelle cuatro 53
DEMENCIA PRECOZ
Y OTROS POEMAS
DB TEOFILO TORTOLBRO
FUE IMPRESO EN
EDITORIAL ARTE.
LA BDICION
ESTUVO AL CUIDADO
DE BAICA DAVALOS,
EN FEBRERO DE 1968.