Sie sind auf Seite 1von 1

LAS FUERZAS QUE ESCLAVIZAN

En la trama social que nos toca vivir,


con facilidad nos perdemos y poco a
poco caemos en patrones de
conducta o hábitos que nos
esclavizan.
Que sutil puede llegar a ser el límite
entre lo que me esclaviza y lo que me
libera, entre lo que me da vida y lo
que me mata lentamente.
Las relaciones, el trabajo, los amigos,
la familia...¿cuando se convierten en ataduras que nos ahogan y
cuando impulso que nos ayudan a volar?
La cotidianidad nos va atrapando en un juego de sobre vivir, día a día
se repiten los mismos acontecimientos y cuando nos detenemos en
esta vida acelerada, nos damos cuenta que somos prisioneros del
tiempo, del trabajo, de todo lo que “Tenemos que hacer” día a día para
según nosotros “Seguir viviendo”...y es que la vida es tan sencilla.
Al dejarnos atrapar por la obligación hacemos compleja a esta vida,
nos enrolamos en una carrera inhumana casi sin darnos cuenta, y casi
hasta olvidamos respirar, respirar es libertad.
¿Qué es lo que nos esclaviza? Todo aquello que hacemos sin alegría,
todo aquello que nos quita la pasión por vivir y la paz interior, lo que se
convierte en obligación y lo hacemos por que “Tenemos” que hacerlo.
La palabra “Tengo” viene de algo aprendido e impuesto desde afuera,
“Tener que hacer” es una obligación impuesta por alguien más, en un
principio nuestros padres, las figuras de autoridad y luego nuestro
verdugo interior.
El punto aquí es cuestionarios si realmente lo “Tenemos” que hacer o
lo “Necesitamos” hacer.
Cumplir una necesidad se relaciona con llegar un estado de
completud. Yo necesito respirar, comer, necesito amar, necesito
aprender. Cumplir primero con las necesidades básicas y luego con
las trascendentes me ayuda a completarme como Ser humano, que no
lo mismo que cumplir una obligación.

23-12-2016

Das könnte Ihnen auch gefallen