Un cometa es un cuerpo menor del Sistema Solar que órbita alrededor de este
en forma elíptica y con grandes excentricidades. Compuesto básicamente por
hielo, que al acercase al Sol se activa y se produce la sublimación de este. La sublimación no es más que la volatización de los componentes del cometa, es decir un cambio de estado de sólido a gas sin pasar por el estado líquido. Fruto de esta sublimación es la aparición en el cometa de la cola cometaria entre otras características. Los cometas se pueden clasificar de muchas formas, según su tamaño, su edad o su órbita. Básicamente podemos decir que hay tres tipos de cometas: Cometas de la familia de Júpiter (FJ), de período corto, cuyas órbitas tiene períodos orbitales menores de 20 años así como pequeñas inclinaciones orbitales. Cometas tipo Halley (HT) con períodos entre 20 y 200 años, sería de período medio. Y los cometas de periodo largo (LP) con períodos de más de 200 años. Estos últimos cometas provienen de la nube de Oort, los dos primeros del cinturón transneptuniano. Otra clasificación complementaria que se usa a modo de estadística de tamaños es la siguiente:
Tipo de cometa Diámetro (km.)
Cometa Enano: 0 – 1,5 Km. Cometa Pequeño: 1,5 – 3 Km. Cometa Mediano: 3-6 Km. Cometa Grande: 6-10 Km. Cometa Gigante: 10-50 Km. Cometa “Goliat”: >50 Km.