Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
La inmigración en la Biblia esta presente desde que Adán y Eva son expulsados del Huerto,
Abraham fue un inmigrante, Jacob también lo fue, José en Egipto, el pueblo de Israel en el
éxodo hacia la tierra prometida, el reino norte cuando son deportados por los Asirios y el
reino sur de Judá cuando son llevados a Babilonia y el inmigrante por excelencia es
Jesucristo, el evangelio de Juan 1 dice que el Verbo que estaba con Dios se hizo carne, es
decir, vino y vivió, hizo su habitación entre nosotros, y mas aun siendo niño tuvo que huir
de Belén a Egipto, se le recuerda al pueblo de Israel ser compasivo con los inmigrantes, el
Señor les dice “acuérdense que ustedes también fueron inmigrantes” parece que al ser
humano a veces se nos olvidan algunas cosas. El Dios de la Biblia es un Dios peregrino,
que esta en constante movimiento.
Nos dirá esta narración bíblica que en los días de los Jueces hubo hambre en la tierra y
como es común en situaciones de crisis las personas buscan otros lugares donde vivir
mejor, tanto Elimelec, su esposa Noemí junto a sus hijos Mahlón y Quelión emprenden
viaje desde Judá a los campos de Moab buscando un mejor bienestar. Pasados 10 años se
casan sus hijos y muere Elimelec y mueren también sus hijos. Quedando tres viudas.
A veces nos preguntamos ¿puedo estar peor de lo que estoy ahora? Tal vez fue la pregunta
de esta familia, por algo emprendieron el viaje. Y la respuesta es SÍ, si podemos llegar a
estar peor, claro, esto no es algo que pensamos en las situaciones de crisis y esto nos puede
llevar a tomar las decisiones incorrectas.
¿Cual es la situación de Noemí? Hace de inmigrante junto a su familia a causa del
hambre, y ahora viviendo en otra cultura queda viuda y sin hijos.
El Pastor Juan Zúñiga en su libro “fui forastero y me recibisteis” escribe sobre los duelos
del inmigrante, y menciona que el 1er) duelo es por haber dejado a la familia, amigos,
padres, cónyuges y hasta hijos, 2) está el duelo por enfrentarse a una lengua o a una forma
de hablar distinto 3) está el duelo al enfrentar una cultura diferente a la propia, costumbres,
valores y religión distintos 4) el duelo por la tierra, los paisajes, colores, olores y
luminosidad 5) el duelo por el cambio de status social 6) el duelo que produce el contacto
con la sociedad de acogida (hacer frente a prejuicios, racismo, clasismo, etc.) 7) también se
produce un duelo por los riesgos que se corre por desconocimiento del territorio.
En medio de la nostalgia que significa vivir en otro lugar que no es la tierra que añoramos
un consejo que da es que “no podemos conducir mirando todo el tiempo por el espejo
retrovisor, se tiene que mirar hacia delante, dejar lo que ha quedado atrás por muy hermoso
que te haya parecido” la invitación es a mirar hacia delante.
Noemí habiendo oído que el Señor había visitado a su pueblo dándoles el pan nuevamente
decide volver con sus nueras a Israel, una de ellas le sigue; Rut quien le dice la famosa
frase 1:16-17 “Pero Rut respondió:—¡No insistas en que te abandone o en que me separe
de ti! »Porque iré adonde tú vayas, y viviré donde tú vivas. Tu pueblo será mi pueblo, y tu
Dios será mi Dios. Moriré donde tú mueras, y allí seré sepultada. ¡Que me castigue
el Señor con toda severidad si me separa de ti algo que no sea la muerte!” ¿cuál es el
milagro aquí? Que no es una frase de una novia a su novio sino de una nuera a su suegra.
Ambas llegaron a Belén, Noemí y Rut, y este es el texto donde me quiero detener, es un
texto cargado de emoción, de historia, no es una simple frase, es un testimonio de una
familia, es una historia de vida, y debemos preguntarnos de inmediato lo que Noemí va a
decir ¿es posible? El texto de Rut 1:21 dice:
“Yo me fui llena, pero Jehová me ha vuelto con las manos vacías. ¿Por qué me
llamaréis Noemí, ya que Jehová ha dado testimonio contra mí, y el Todopoderoso me
ha afligido?”
¿Qué esta queriendo decir Noemí? “Me fui con las manos llenas, pero el Señor me ha
hecho volver sin nada. ¿Por qué me llaman Noemí (Placentera, dulce, mi alegría, mi
dulzura, dice llámenme Mara, es decir, amarga) NVI. La NTV dice “¿Por qué llamarme
Noemí cuando el Señor me ha hecho sufrir”
Es por eso que preguntaba al principio ¿es posible estar peor de lo que estamos ahora? Y la
respuesta es SÍ. ¿qué dirían los predicadores de la prosperidad ante estas dos frases
“el Señor me ha hecho volver sin nada” y “el Señor me ha hecho sufrir” y si a este le
agregamos el de otro justo en sufrimiento, Job, que dice “Aceptaremos solo las cosas
buenas que vienen de la mano de Dios y nunca lo malo? 2:10.
Noemí dice “yo me fui llena” rica, no en dinero y propiedades, sino en la posesión de un
marido y dos hijos; una madre rica, pero ahora privada de todo lo que hace que el corazón
de una madre sea rico.