Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
Partimos de una idea muy básica: un balón por jugador. Uno será el que
"pilla" y el resto de jugadores intentarán escapar. Es un buen ejercicio de
calentamiento y que puede utilizarse muchas veces pero, y esto, es
fundamental, con variantes distintas cada día.
La mecánica es muy sencilla. Ambos jugadores se colocan uno en frente del otro y a la señal uno es el
que "pilla" y otro el que intenta escapar. No pueden pasar entre los "bultos", tienen que rodearlos; eso sí,
pueden cambiar de dirección cuando quieran.
Es un ejercicio que se puede utilizar con todas las edades, pero es especialmente efectivo en los
categorías más formativas.
OBJETIVO PRINCIPAL:
- Que los jugadores boten y dominen el balón con ambas
manos y con la cabeza levantada, ya que tienen que ver por
donde perseguir o escapar. Es un ejercicio muy simple, pero
muy efectivo y que puede resultar divertido para los jugadores.
VARIANTES:
Para variar el ejercicio tenemos infinidad de
posibilidades.
Voy a utilizar este ejercicio para explicar la diferencia entre un ejercicio mecánico, poco elaborado
(incluso improvisado) y uno en el que el entrenador se "lo curra", y en el que la mejora del propio
ejercicio es de un 200%.
La primera parte es igual en ambos casos: colocamos 2 o más conos simulando defensores en el centro
del campo como nos muestra el gráfico y a los jugadores en otras dos filas:
Después de una pequeña pretemporada (aspectos de condición física), siempre me gusta que en los
primeros entrenamientos no haya demasiada confrontación: es decir contacto físico, choques entre
jugadores, etc. He leído algunos libros sobre esto y dicen que es bueno empezar poco a poco en este
aspecto.
Pero claro, YO quiero ver a los jugadores en acción, ver qué cosas saben hacer, ver qué cosas les cuestan
más. En definitiva, conocerlos y tener un punto de partida. Os dejo unos cuantos ejercicios en los que
trabajamos bote y manejo de balón, cambios de mano y ritmo, finalizaciones.... Y le añadimos, en
algunos de ellos, un pequeño toque competitivo, algo que siempre gusta a los jugadores y hace que se
esfuercen más y se lo tomen más en serio.
Comenzaríamos con unos simples ejercicios en los que trabajamos los diferentes
cambios de mano y los cambios de ritmo. Colocamos a los jugadores en filas (todos
con balón) y les decimos, por ejemplo, en cada obstáculo (sillas, carros de balones...)
hagan un determinado cambio de mano ("vieja escuela"):
El hecho de colocar los carros a diferentes alturas hace que, cada vez que el jugador
hace el ejercicio y cambia de fila, tenga que cambiar el ritmo, el número de botes, la
distancia... Esto les obligará a estar más concentrados y no repetir por repetir.
A esto le podemos añadir todas las finalizaciones que se nos ocurran o ver
realmente qué saben hacer estos jugadores que tenemos entre manos: reconozco
que este es un aspecto que trabajaba poco en mis inicios y con el tiempo he
aprendido que es algo bastante importante: finalizar.
Hay que buscar que los jugadores no se aburran y desconecten. Por tanto
podemos trabajar en ejercicios cortos e intensos y cada 3 o 4 minutos cambiarles
alguna norma: el tipo de cambio, la finalización... Eso les hará ver que el ejercicio
es distinto y, al mismo tiempo, les obliga a estar concentrados.
Podemos utilizar el mismo circuito para trabajar las salidas y las paradas. En cada
obstáculo los jugadores deberán hacer una parada en un tiempo, seguida de una
salida directa o de una salida cruzada o de una salida en reverso. Para practicar la
parada en dos tiempos, me gusta que la acción siguiente sea un tiro, por lo que
dejaremos este gesto técnico tras superar el último obstáculo.
Con sólo esto y mezclando todas estas variantes y alguna más que se os ocurra podemos tener
ejercicios "distintos" para muchos entrenamientos.
Os explicamos otras opciones. Ahora el entrenador dice un número y esa es la única silla u obstáculo que
tienen que rodear. Por ejemplo si el entrenador dice el 3, los jugadores harán bote de velocidad hasta
llegar al último obstáculo, lo rodearán (con las normas que les hayamos puesto) y finalizan (libre o cómo
les hayamos propuesto).
Un pequeño cambio: ahora hay que rodear el obstáculo que dice el entrenador pero, además, hay que
hacer un cambio cada vez que pasamos junto a un obstáculo. Este ejercicio es muy bueno para ver su
grado de concentración y su habilidad en el manejo del balón y del propio cuerpo, con continuos
cambios de mano y de ritmo.
Ahora ya no hay que rodear los obstáculos. El entrenador dirá dos números: el primero indica la silla
hasta la que hay que ir botando y tocar con la otra mano; el segundo número indica el objeto hasta el que
hay que volver, siempre botando con los pies apuntando hacia la canasta objetivo (aquí podemos
introducir, según el nivel de los chicos, bote normal, entre las piernas). Una vez han vuelto al primer
obstáculo, a meter canasta. (En el gráfico de ejemplo que mostramos a continuación, el entrenador dice
3 y 1.). El 0 implicaría volver a la línea de salida.
Por último, hay que rodear los objetos u obstáculos, saliendo a la señal del entrenador pero siguiendo un
circuito prefijado en zigzag. Esta variante está muy bien para que los jugadores levanten la cabeza
cuando van botando, ya que se van a cruzar varias veces.
Introducimos alguna norma:
Prohibido coger el balón en ninguna circunstancia (les obligamos a que tengan que cambiar su
velocidad, mirar al contrario, ver quién pasa...)
Se puede tocar e intentar lanzar el balón fuera del adversario que, en este caso, tendrá que volver
a empezar (ya no sólo botan sino que pueden intentar sacar una ventaja).
Una vez ya hemos trabajado bien la parte técnica (ver la primera parte), el aspecto competitivo les hará
hacer el ejercicio con mayor intensidad y concentración, poniendo en práctica lo ya expuesto. Este tipo
de ejercicios pueden hacerse con chavales de todas las edades, incluso con profesionales (siempre
adecuando las normas establecidas al nivel de los jugadores). Incluso éstos, los profesionales, tendrán un
buen "pique" por intentar ganar.
APRENDER JUGANDO
Hace unos días recibimos una consulta. Era un entrenador con bastante experiencia pero que llevaba
muchos años llevando equipos semi profesionales y, en esta ocasión, tenía que llevar el equipo de su hijo,
de apenas 7 años de edad. Estaba un poco nervioso, a pesar de su experiencia, y nos preguntaba cómo
debía afrontar los entrenamientos de un equipo de minibasket.
Bueno amigo (espero que le sirva a más gente). Te pongo unos cuantos juegos para hacer algo más
divertido el entrenamiento y para que los chicos aprendan a jugar al baloncesto divirtiéndose. Hay
muchos más pero ésta es solo una pequeña muestra:
CARA Y CRUZ:
Llamado también "tigres y leones", es uno de los juegos más sencillos de explicar y
aplicar, y los chavales suelen divertirse bastante. Colocamos a todos los jugadores con
balón separados por un metro como indica el gráfico. Los de una fila son "caras" y los
de la otra fila son "cruces".
El entrenador dirá una de esas dos palabras, por ejemplo "cara", y los jugadores de esa
fila tienen que llegar botando hasta la línea de fondo sin ser pillados por los de la otra
fila ("cruces"). Se les va dando puntos a los equipos. Hay muchas posibles variantes:
Empezar botando.
Bote alterno.
Bote con la mano débil.
Diferentes posiciones para comenzar: sentados, de rodillas, tumbados boca arriba, saltando...
LOS COLORES:
Todos los chicos con un balón botando libremente por la cancha de juego. En un
momento determinado, el entrenador dirá un color y todos jugadores, sin dejar de botar,
deben ir a tocar algo de ese color. Por ejemplo, el entrenador dice "blanco" y los
jugadores van botando hasta las líneas del campo que son de color blanco. Si el
entrenador dice rojo, los jugadores van botando a tocar una baldosa de la pared que es
roja, o una portería, la zapatilla de un compañero...
EL CORTA HILO:
Cualquier tipo de carrera o competición con equipos suele gustar bastante a los chicos y se pueden
practicar un montón de gestos técnicos:
Todos los jugadores con balón. Colocamos un aro menos que jugadores tenemos (si hay 10 jugadores
colocamos en el suelo 9 aros). Uno se la queda y el resto ocupa un aro. A la señal del entrenador todos
deben cambiar de aro (el que se la queda debe buscar uno libre) y el que no encuentre ninguno vacío se
la queda. Para empezar (ver imagen), podemos hacer que todos empiecen en el centro y el que se quede
sin aro, es el primero que se la "queda". Podemos establecer algunas variantes:
Con el bote.
Tener que parar en un tiempo al caer dentro del aro.
No poder ir al aro contiguo.
Tener que "visitar 3 aros distintos" antes de poder volver al mismo.
EL PAÑUELO:
Un clásico que todos conocéis. Hacemos dos equipos y cada jugador tiene un número. El entrenador se
coloca en medio con un pañuelo, dice un número y saldrá un jugador de cada equipo. El que coja el
pañuelo y lo lleve hasta su línea de salida sin ser pillado gana un punto. Si alguien pilla a otro compañero
que lleva el pañuelo, ese equipo gana el punto. Variantes:
LAS LÍNEAS:
Todos los jugadores botando con balón. Uno se la queda y los demás escapan. Sólo
pueden andar y moverse, sin salirse, botando por las líneas del campo.