Deed reson
10. Esclavos y libertos en la produccién vinicola
y alfarera en el Ager Barcinonensis:
de la marginalidad al éxito econémico
Ontor, Otzstr ,Ciisan Carreras
En la antigtedad, en la mayoria de casos, resulta dificil vincular los actos jurk
cos a personajes concretos presentes en la epigrafia monumental, en las fuentes
historicas o incluso en la arqueologia
Una de las posibles excepciones la constituye la produccién cerdmica del mundo
romano, de la que disponemos de una abundante documentacién epigratica (instru
‘mentum domesticum), que permite acercarnos al problema de la representatividad
juridica,
‘A pesar de que la ley civil romana no tiene la figura de agente directo, las
fuentes documentan el uso de personal dependiente (esclavos) ¢ incluso libre
(libertos) para realizar transacciones ocasionalmente o de forma permanente
en nombre de sus amos (AvsERr, 1994, p. 46). Cicerén (ad fam. 13; 12.29; 1338)
alude a agentes (libertos, procuratores) junto con la familia (en este caso esclavos),
realizando negocios comerciales en las provincias en nombre de negotiatores como
A. Trebonius, L, Lamia 0 L, Bruttius
la prictica de representacién comercial por parte de un esclavo o liberto
como institor venfa sancionada por la actio institora, es decir, la posibilidad de
relamar judicialmente frente al pretor contra el principal que habia puesto al frente
de su negocio aun dependiente suyo, juridicamente incapaz. Esta actio aparece
documentada en el Digesto 1433.3: Ulpiano se refiere al agente indicando como
“BL factor slams institor, porque insta gestionanddo un negocio y no importa mucho que
haya sido puesto al frente de un comercio o de cualquier otra negociacién’ En el Digesto
aparecen todo tipo de oficios como la de cultivar los campos, llevar una mesa de
cambio, una tienda, un negocio o una industria (pe. bataneria), por lo tanto la
prictica de usar institores era comin en la vida econémica romana,
También es de gran interés la figura del procurator, un personaje de origen
servil 0 ingenuo que recibe del dominus el encargo de gestionar una o diversas,
fincas, y que no debe confundirse con la figura del vilicus (VERBOVEN, 2002, p. 271)
Mientras cl vilicus se encarga de la gestion diaria, el procurator es el responsable de
las decisiones importantes, y puede no residir siempre en la finca (Pl. Ep. 3.192).
El procurator es considerado un offcium amicitiae, es decir, una térea que puede
desarrollar algin miembro de los amici del dominus, y que puede o no ser remu-310 Oriol Olest. César Carseras
nerada (VERBOVEN, 2002, pp. 239-249). Epigraficamente, entre los procuratores de
fincas o patrimonios predominan los ibertos, aunque posiblemente ello sea debido
también al poco interés de los hombres libres en manifestar en sus epitafios o
monumentos su papel como precurator. Bn realidad, un procurator de un amicus
dificilmente indicaria esta tarea, aunque si indicaria probablemente la amicitia
(Vernoven, 2002, p. 255)
“Tanto a figura del institor como la del procurator pueden coincidir en una misma
propiedad o familia, y asi lo indica de nuevo Ulpiano (D. 14.35.18) al mencionar
como un procurator puede a su vez designar un insitor, que responders en sw actio
institora ante el propio dominus como si él mismo lo hubiera designado.
El territorio de la Colonia lulia Faventia Barcino constituye un buen campo de
estudio para el andlisis de las formas de negocio relacionados con la produccién
de vino, y sobre todo con la produccién alfarera de las énforas que contenian este
producto, Desde hace unos afios, se ha venido realizando un estudio microhistérico
del territorio de esta antigua colonia romana para analizar la promocién de algunos
personajes que aparecen reflejados en la epigrafia monumental de la ciudad y en
las marcas de Anfora y dolia locales (Bunt et Aum, 2005; CARRERAS ¥ OLESTI, 2008;
Otsstr y CARRERAS, 2008).
1. El ‘Ager Barcinonensis’: el marco
1.a Colonia lia Faventia Barcino (la actual Barcelona) fue una fundacién de Augusto
del 16-10 aC. aproximadamente, que sirvié para asentar los veteranos de las
‘guerras cAntabras (29-19 a.C.), junto con otras colonias hispanas. Se escoge como
emplazamiento un punto en la costa NE de la Hispania Tarraconense, franqueada
Por una montafia (Mons Jovis— Montjuic) y dos rios (Rubricatum —Llobregat y
Bactulo — Bes6s), y ocupado tanto por comunidades ibéricas layetanas, como por
las cercanas fundaciones urbanas de Bactulo e lluro, Como sucede con frecuencia,
tuna nueva fundacién supondré wna divisiOn del territorio circundante (centuratio}
y la asignacién de tierras (deductio) a los nuevos colonos (Pat, 1997).
a deductio de una colonia de derecho romano, como es el caso de Barcino
(D. 50.5.8), implica la adsignatio de la tierra a las colonos, tierra que por lo tanto
se convierte en propiedad efectiva, dominium, del colono ciudadano romano. Es
precisamente en este momento cuando aparece la primera toponimia romana
en el territorio barcinonensis, correspondiente al nombre de los final o pracdia
asignados a determinados colonos.
En el derecho romano, el nombre del primer propietario, un colono augusteo
en este caso, es el que se mantiene como vocabulum fundi, una denominacién,
especifica para esa parcela de tierra que se mantendré en el tiempo. La razn era
Ia fiscalidad: el registro de los fundi era una parte del census (ScHULTEN, 1913). La
cuestién era clara para los agrimensores.Eiclavos libros ena prods vincolayalfreaencl Ager Barcinonensit dela marginalidad..)
Asi, cuando Higinio Gromatico (L.7-8) ofrece un ejemplo de como inscribir
los func concessi en los registros fiscales (forma), menciona el caso de un fundus
Seianus, concedido aL. Manilius (Eadem ratione terminabimus fundos exceptos sive
concesses, et “in’ forma sicut loca publica inscriptionibus demonstrabimus. Concessos
Jfuncios similiterostendemus, ut “fundus Seianus concessus Luci Manilio Sei filio”). Es
‘decir, se mantiene el nombre del antiguo propietario. Un caso paralelo lo ofrece
‘Varrén, mencionando nuevamente un fandus Seianus que parece nuevamente un
caso de referencia (Res Rusticae 3.2.7-8), Sin duda la comcidencia de nombres
provocé problemas a los agrimensores, ya fuera en el momento de la asignacién
‘como una vez repartidos los lotes, pero estos se debian acrecentar al transcurrir un
cierto tiempo y producirse herencias, adquisiciones, ventas, divisiones, dotes, etc
Asi lo recoge Sivculus Flaccus (Th. 126.267), que menciona una controversia de
modo entre dos propietarios que reivindican un mismo lote con un mismo nombre
Volviendo al caso del Ager Barcinonensis, es logico suponer que la deductio
colonial, con la privatizacién y denominacién de los fund asignados a los colonos,
supuso la primera definicién de los espacios rurales, y el establecimiento de un
censo de propiedades privadas a partir de los nombres de los propictarios.
Esta forma catastral original, basada especialmente pero no tinicamente en los
Jundi (pués recogeria también otro tipo de tierras, como las tierras piblicas, terras
de arriendo, etc ), configuraria un mapa de propiedades de época augustea, ala
{que se le afiadirian posteriormente los cambios ulteriores.
Esta forma original se ha perdido, pero la toponimia latina parece haberse fosili-
zado en la documentacién medieval en topénimos acabados en “-anum’ y “ana
{que responderian a antiguos fundi y praedia de los primeros colonos romanos del
siglo 1a.C, (OLEst, 2005).
‘Algunos topénimos latinos no tan sélo aparecian citados en los cadastros me
dievales, sino que incluso han perdurado hasta nuestros dias en el nombre de pobla
ciones actuales como Cornellé (Cornetiane), Gava (Gavano), Lliga (Liciano) o Vallirana
(Waleriana)
Coincidiendo con la deductio de Barcino, todo el territorio se dedicar4 a una
{ntensa produccién vinicola, que aparece constatada con numerosas instalaciones
de prensado de uva, piscinas de decantacién de liquidos y zonas de almacenaje en
dolia. Ademis de las estructuras arqueol6gicas de produccién vinicola, también se
documentan centros de produccién de énforas — los envases que comercializarén
este vino hasta distintos puntos del imperio. El detalle mis interesante de la pro
duecién de estas ighnae’ — centros producrores de cerdmica— es
algunos de suis productos como las Anforas 0 dotia con sellos que podian identificar
a los distintos responsables de la produccién desde los propietarios a los operarios.
[A primera vista, estas marcas permiten establecer una distincién entre personal
servil identificados por cognomina, en la mayoria de casos de origen griego como
marcaban
1, ambi un L. Sens aparece menconade como cas de referencia enel capitulo XX de a Lex de Glia
alpina (Cuaron, 196, 9).