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Escuela de Filosofía
CI: 20955184
Antes de comenzar a hablar del “Concepto de oposición dialéctica de Hegel” no
está demás advertir que debe considerarse aquí “Concepto” bajo cierto marco de
coordenadas, no debe considerarse este como algo fijo e inamovible en el tiempo ya que
iría en contra del propio espíritu de este ensayo y del pensamiento de Hegel, esto
una vez hecho esta salvedad, cabe preguntarse si existe una dialéctica en Hegel y si esta
anteriores. Pero antes de desarrollar cada una de estas y como se relacionan de manera
inseparables una con la otra es necesario hacer una pequeña digresión para atender al
debate que tenía este con el “Idealismo Trascendental” de Immanuel Kant, Que por
cierto Hegel considerara como base y punto de partida de la filosofía moderna. Los
puntos a los que hay que atender en Kant es que para que algo sensible se pueda
convertir en un objeto de pensamiento y por ende de conocimiento, este primero debe
articularse por ciertas categorías puras del entendimiento. El análisis de estas categorías
a priori y como estas se relacionan con el objeto inmediato da a entender que ninguna
lógica puede atribuirse a los objetos de experiencia inmediata. Es decir, que en los
objetos del mundo no se encuentran las reglas que fundamentan la actividad del pensar,
ya el sujeto viene dotado con una maquinaria inmanente en este que da sentido al
mundo, el mundo en sí carece de significado, solo este sujeto puede dotar de sentido al
filosofía moderna, que la verdad de las cosas está en la unidad sistemática aportada por
el pensamiento. Hegel no pone en duda que el mundo externo exista, pero sí que este
ciencias, sino también a las tradiciones filosóficas anteriores a Kant que consideraban
los objetos de intuición como un entes reales separados del pensamiento que era propio
Hegel estará de acuerdo con Kant en que la metafísica tradicional ha fracasado, pero no
indivisible no se puede pensar como algo ajeno a la experiencia, de alguna manera todas
estas cosas debe estar inscritas en lo mudable, inmediato y finito. Y aunque en primera
vista pueda parecer imposible, ya que estas cosas se nos aparecen en nuestra experiencia
como cosas individuales, divisibles, efímeras, etc. Como a continuación veremos, Hegel
nos hará entender que esta infinitud, multiplicidad es parte constitutiva de la actividad
de la razón. Por lo cual se separara de las corrientes dualistas del ser y pensamiento, y
Identidad:
Hegel pasara entonces a construir su metafísica con ciertas esencialidades que deben
dar cuenta a todos estos problemas que hemos bosquejado anteriormente, el primero que
una identidad a sí y es en torno a ésta que las demás categorías deben tematizarse, otro
punto importante que nos indicara Hegel es que la identidad no es un punto de partida,
entender que esta tautología es vacía en sí. Si decimos que un gato es un gato, no se está
diciendo nada realmente, esta nada de hecho es justo lo contrario que se buscaba al
suministrar esta ley como principio para las demás esencialidades o categorías, para
romper esta tautología habría que afirmar algo mas (el gato tiene rayas amarillas), este
mostrarse no como lo inmediato arrancado del ser si no como un proceso de síntesis del
unificación lograda a través y contra las múltiples determinaciones que pueden ser
un ser vacio, sino con algún contenido que nos obligue remitirnos a su diferencia a su
del propio pensamiento, cuando pensamos en algo, como “lo rojo” para ser identificada
esta cualidad se debe comparar con todo aquello que es distinta a ella, es decir su no-ser,
pero a su vez para que se diferencie de cada una de estas negaciones determinadas se
debe identificar a sí misma. Lo que muestra esto es que estas categorías no son
independientes entre sí, sino dos momentos donde una necesariamente remite a la otra y
analizando un poco más, se puede fijar en que esta diversidad o diferencia que en un
principio se mostro como una negación indeterminada, una pura nada. Ahora muestra su
ser, el ser distinto de la identidad original, el ser lo otro de la identidad. Pues esta
identidad original.
Oposición
anteriormente, pensar el objeto como idéntico a sí mismo era lidiar con una tautología
vacía, por lo que había que introducir lo desigual con su otro. Este momento (en el cual
separados. Por ejemplo, si afirmamos que una cosa es distinta de otra, se expresa desde
alguna determinación y como toda determinación es negación de su determinación
opuesta, entonces la cosa contiene en sí misma la negación de ese otro, es decir, una
no sea cualquier diversidad, sino una diversidad específica, determinada (la cosa es
ello en la cosa a su otro, incorporando la negación en cada una de las cosas que están en
relación. El otro de la cosa no es pues cualquier otro, sino su otro, es decir, su negación
lo negativo son pues dos momentos en la unidad constitutiva del objeto, momentos que
son, por una parte autónomos, y por la otra, están íntimamente relacionados. Lo positivo
(Identidad y lo Múltiple) que son indiferentes uno del otro, por el contrario hemos
probado que uno no se puede concebir sin el otro, que están en un mutuo intercambio,
momento hemos insinuado el porqué no se debe concebir un concepto como algo fijo e
inerte, ahora entendiendo el motor de la razón se puede una respuesta más precisa a
esto, y es que al pensar un concepto este siempre tendrá dentro su ser, su identidad pero