Programas y Territorio

Artículo / Article 149
SALUD COLECTIVA. 2016;12(2):149-171. doi: 10.18294/sc.2016.976

Volver a pensar en salud: programas y
territorios
Thinking about health once again: programs and
territories
Hugo Spinelli1
1
Doctor en Salud Colectiva. RESUMEN Este artículo, de naturaleza conceptual, discute desde la teoría crítica la ló-
Director del Instituto de
Salud Colectiva, Universidad
gica programática en el campo sociosanitario como una respuesta técnica sin preguntas,
Nacional de Lanús, Buenos frente a los territorios entendidos como espacios con preguntas a la espera de traduc-
Aires, Argentina. * ciones. El propósito es poner en discusión la lógica programática, herencia de la pla-
nificación y expresión de la razón instrumental, para desde allí discutir la concepción
temporo-espacial como eje para pensar y actuar frente a la complejidad de lo social, re-
conociendo otros saberes y prácticas. Las preguntas, las respuestas, los saberes y el hacer
en el campo sociosanitario constituyen los ejes de la reflexión sustentada en conceptos
que buscan desarmar el proyecto ideológico que representan los programas mediante el
análisis de su base científica (componente epistemológico de la técnica), que es antagó-
nico a cualquier proyecto de emancipación.
PALABRAS CLAVES Epistemología; Planificación Social; Planes y Programas de Salud;
Percepción del Tiempo; Incertidumbre; Medio Social.
ABSTRACT This article, of a conceptual nature, uses critical theory to discuss the
programmatic logic within the sociosanitary field as a technical answer without any
questions, provided to territories or spaces with questions awaiting translation. The
purpose is to put programmatic logic, which is the legacy of public health planning
and an expression of instrumental reason, into discussion, and in this way examine the
temporal-spatial conception as an axis for thinking and acting within the complexity of
the social world, recognizing other knowledge and practices. The questions, answers,
knowledge and actions in the sociosanitary field constitute the focus of a reflection
rooted in concepts that seek to deconstruct the ideological project represented by health
programs through an analysis of their scientific basis (the epistemological component of
the technical), which is antagonistic to any emancipatory project.
KEY WORDS Epistemology; Social Planning; Health Programs and Plans; Time Percep-
tion; Uncertainty; Social Environment.
Salud Colectiva | Universidad Nacional de Lanús | ISSN 1669-2381 | EISSN 1851-8265 | doi: 10.18294/sc.2016.976
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SALUD COLECTIVA. 2016;12(2):149-171. doi: 10.18294/sc.2016.976 Spinelli H.
INTRODUCCIÓN LA CIENCIA NO PIENSA Y LA PEREZA

DE LA FILOSOFÍA
Los intelectuales son, en cuanto

detentores del capital cultural, Mario Testa señala la ausencia de marcos
una fracción (dominada) de teóricos que superen las determinaciones
la clase dominante. biológicas en los cinco grandes ámbitos del
Pierre Bourdieu(1) poder técnico en salud: la docencia, la inves-
tigación, los servicios, la administración y la
Este texto se estructura sobre la base de población(13). Es decir que tanto los profesio-
las siguientes preguntas: ¿por qué las po- nales, como los técnicos y la población están
líticas en el campo sociosanitario tienden imbuidos de las concepciones biológicas que
a expresarse a través de programas?; ¿son desplazan lo social del proceso salud-enfer-
los programas la mejor respuesta desde el medad-atención, lo cual facilita la medicali-
Estado a las necesidades de los conjuntos zación y la expansión de la biopolítica(14).
sociales, en términos de ampliación de de- Cuando Heidegger dice: “la ciencia
rechos y reducción de desigualdades?; ¿los no piensa”, nos señala que la ciencia no se
conocimientos de los trabajadores del campo mueve en la dimensión de la filosofía y que,
sociosanitario alcanzan para abordar la com- aunque depende de ella, olvida pensar y, en
plejidad de lo social?; ¿necesitan saber más, ese olvido, sacrifica la pasión que representa
o desaprender mucho de lo aprendido?; ¿se la pregunta. Y ante la falta de preguntas,
trata solo de un conflicto de lo político, o hay domina lo instrumental que, con sus destellos
además un conflicto epistemológico? y brillos, encandila y produce “parpadeos”(15).
El propósito de estas preguntas es poner Pensar es tratar de escapar de las respuestas
en discusión, desde la teoría crítica(2), la pla- totalizantes que niegan que “la polisemia es
nificación y la programación social como ex- el elemento en el que el pensamiento debe
presión de la razón instrumental(3,4) y, desde moverse para ser riguroso”(15 p.98). A su vez,
allí, entender el territorio como espacio de Bachelard destaca “la pereza de la filosofía” al
lo singular y sitio del hacer, donde lo rela- señalar el poco espacio que ocupa en ella la
cional y lo simbólico se expresan atrave- filosofía de las ciencias y afirma que “el pen-
sados por capitales y campos que exceden samiento es una fuerza, no una substancia”(16
la simplicidad epistemológica que sustentan p.20)
. En línea con esa argumentación, recu-
los programas(5,6,7,8). Esa dinámica exige una peramos a Marcuse, quien advierte sobre la
cartografía permanente que acompañe dia- capitulación del pensamiento(17), y a Tovillas,
crónicamente al territorio, el cual no es que destaca el llamado a la reflexividad que
estático, ya que se reconfigura de manera hace Bourdieu:
permanente(9). De este modo, procuramos
cuestionar el proyecto ideológico que repre- ...los individuos casi todo lo ignoran por
sentan los programas, mediante el análisis una doble razón: por la racionalidad
de su base científica, componente episte- limitada de la cual disponen (o por el
mológico de la técnica, al cual entendemos tipo de racionalidad), y porque lo ordi-
como antagónico a cualquier proyecto de nario, al naturalizarse por la costumbre,
emancipación(10). Nos proponemos buscar no forma parte de un juicio reflexivo,
preguntas, y no repetir respuestas, por lo que es decir, no es puesto en cuestión por
recurrimos a distintos conceptos, utilizando el individuo, volviéndose evidente pro-
la teoría como caja de herramientas(11), con ducto del hábito social.(18 p.47)
la intención de volver a pensar en salud, más
allá de la biomedicina(12,13). En línea con el ejercicio de la reflexi-
vidad que propone Bourdieu, vale retomar
el concepto de elucidación formulado por
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Castoriadis: “saber lo que se piensa y pensar lo sociológicas del estructural-funcionalismo(25)
que se hace”(19), para pensar desde una praxis y las teorías económicas desarrollistas.
fundante, dado que la fundamentación no La implementación estuvo atravesada por
tiene efecto de transformación, y fundar y fun- la polémica entre desarrollo o depen-
damentar no son sinónimos(20), como tampoco dencia, centrada en si el crecimiento era
lo son ser jugador o ser comentarista de un un tema económico o de naturaleza social
juego. En este sentido, resulta necesario dife- y política(26,27,28). No es necesario señalar
renciar entre discursos, prácticas e impacto de cuál fue la postura que triunfó. La planifi-
las prácticas, para no equivocar el camino. cación se consolidó como resultado del
La pregunta es central para el pensa- trabajo teórico realizado por la Comisión
miento, por lo que debemos renunciar a las Económica para América Latina (CEPAL).
“respuestas de laboratorio”. Preguntar, pensar La conceptualización dominante fue la del
y hacer en el campo sociosanitario consti- Estado como un lugar de concentración de
tuyen los ejes de la reflexión de este trabajo, poder y un ámbito de racionalidad con cohe-
lo que nos obliga también a pensarnos en el rencia interna y capacidad de manejo de la
contexto de América Latina, para evitar los totalidad de su gestión. Esas ideas se demos-
cientificismos(21,22). traron falsas, pero fueron, y son, funcionales
a la idea de la planificación como técnica
para la solución de los problemas sociales.
LOS PROGRAMAS COMO Así, la atención se centró en el crecimiento
RESPUESTAS económico y no en la cuestión social. Las
propuestas consistían en que lo social se
Raíces históricas solucionaría con posterioridad al desarrollo
económico a través del “derrame”. La hi-
En el siglo XX, el Estado de Bienestar pótesis, nuevamente, se demostró falsa,
pensó tres elementos superpuestos para ya que los procesos de acumulación no
controlar la pobreza y la exclusión: pobla- fueron sinónimo de distribución. Faltaba
ciones objetivos, un conjunto de reglas y mucho para conocer las investigaciones de
prestaciones, y un cuerpo de trabajadores Thomas Piketty que demuestran que en los
especializados, para lo cual se requería de la dos últimos siglos los países con más desa-
identificación de las poblaciones objetivos, rrollo económico fueron los que más am-
su constitución estadística, jurídica y admi- pliaron las desigualdades al interior de sus
nistrativa; la creación de derechos y asigna- sociedades(29).
ciones; y la conformación de un cuerpo de El objetivo del desarrollo económico
trabajadores del campo de lo social que ges- abusó de la planificación como técnica. Su
tione el sistema(23). Esta lógica fue perdiendo principal error fue reducir lo social a un
legitimidad al demostrarse que saber no es enfoque administrativo de los problemas,
sinónimo de entender y que, por más saber entendiéndolo como administración de las
que se desarrolle sobre las poblaciones, no cosas y subestimando el gobierno de las per-
siempre es suficiente para entender las tra- sonas. Los planificadores tomaron el camino
yectorias singulares personales y/o colec- indicado en el siglo XIX por Saint-Simon, para
tivas. Una sobreabundancia de información quien era necesario pasar del gobierno de los
estadística con métodos y técnicas cada vez hombres a la administración de las cosas(30).
más sofisticados no pudo evitar la consti- Así, los problemas fueron concebidos como
tución de sociedades heterogéneas marcadas de reproducción y crecimiento, pero no se
por las desigualdades(23). planteaba como problema el cambio(13).
La planificación se origina en la década Esto derivó, en primer lugar, en el abordaje
de 1960 en América Latina, en el marco estructural-funcionalista y, luego, en la teoría
de la Alianza para el Progreso(24). Sus refe- general de los sistemas(31,25), que tendían a co-
rencias conceptuales fueron las corrientes sificar lo social(32).
152
Los planificadores pensaban que los en las rutinas y transformar intereses hege-
trabajadores iban a realizar lo estipulado mónicos en conocimientos verdaderos, que
en las normas y en los planes diseñados los universitarios suelen repetir como ver-
desde los niveles centrales, para organizar dades universales, sin poder reconocer que
un futuro que entendían como predecible. muchas veces solo representan la “verdad
El reino de la razón instrumental no tuvo lí- europea”, lo que expresa la colonización de
mites ideológicos(4) y también el socialismo su pensamiento(10).
real cayó rendido ante ese canto de sirenas. Los egresados universitarios tienen, en
El énfasis estaba puesto en el desarrollo de general, una mirada reducida de los pro-
técnicas y herramientas. No era necesario blemas; sin embargo, se sienten habilitados
pensar, y esa esperanza en lo instrumental para formular programas que abordan la
llevó a Freud a calificar al hombre moderno complejidad de lo social. Desconocen que
como un dios con prótesis(33). el programa dará cuenta, a lo sumo, de la di-
mensión del problema relacionada con la es-
pecificidad de su conocimiento, pero no de la
Raíces epistemológicas totalidad de las dimensiones que componen
el problema. La persistencia en América
La planificación se nutre de la matriz Latina de las llamadas “enfermedades olvi-
epistemológica de la modernidad, que en- dadas” –tuberculosis, chagas, paludismo,
tiende que la naturaleza puede ser controlada sífilis, etc.–, el crónico déficit habitacional,
y que el hombre debe “tomar posesión de ese el agravamiento de la cuestión ambiental y/o
reino”(34 p.18). Entonces, la razón ya no solova la existencia de porcentajes importantes de
a explicar la realidad, sino que pasa a ser la población sin servicios de agua y cloacas –a
única forma de producir verdades(35 p.12). Así, pesar de las declaraciones internacionales
el mundo es entendido como poseedor de de cobertura del 100% que se vienen rea-
un orden que era necesario descifrar: todo lizando desde mediados del siglo pasado–
debe tener su razón, no hay espacio para la son algunos de los ejemplos que demuestran
incertidumbre, conocer el orden que rige al la permanencia de los problemas a pesar de
objeto permitirá transformarlo y así dominar la multiplicidad de programas existentes. Esa
la naturaleza y la historia. En ese marco, situación expresa que más allá de la técnica
la verdad aparece como el producto de la para la solución de esos problemas, hay en
enunciación del sujeto cartesiano. La razón juego dimensiones político-económicas e
se presenta como la gran ordenadora de un ideológico-culturales que los constituyen
sistema que se visualiza como totalizante y, como problemas complejos y que superan
a su vez, reducible a la unidad (el uno que la simplificación que la razón instrumental
lo explica todo). Madel Luz afirma que el co- hace de ellos(4).
nocimiento “será interventor y clasificador”(34
p.4)
. En este sentido, Boaventura Santos señala
que la ciencia moderna reduce la com- Escolástica y universidad
plejidad al concebir que para conocer es
necesario dividir y clasificar, para luego es- Las universidades surgen en Europa
tablecer relaciones(10). Esa forma de entender entre los siglos XII y XIII, en el marco de la
la ciencia sienta las bases de la creencia en la escolástica –corriente filosófica teológica
infalibilidad del conocimiento, la solidez del medieval– cuyo método de trabajo era el
discurso y la verdad científica, en la que el principio de autoridad, basado en que una
hombre aparece reducido a la conciencia, y la proposición era aceptada solo por el hecho
ideología reemplaza a la mitología(34). Santos de estar afirmada en un texto considerado
califica a esa racionalidad –que Horkheimer y verdadero. Y como los textos eran los escritos
Adorno designan como instrumental– con el sagrados, funcionaban como referencias in-
adjetivo de indolente, al resistirse al cambio eludibles para la interpretación de la realidad


y sus problemas. Desde esta perspectiva, los Planificación y razón moderna
problemas debían adaptarse a lo que estaba
escrito, es decir, la realidad expresaba el error La planificación expresa los principios
si contradecía al texto. El saber pasó a ser epistemológicos de la razón moderna –ac-
concebido como universal y objetivo y, por tores racionales, desarrollo y progreso– la
lo tanto, no necesitaba ser contextualizado. cual se relaciona con una idea del tiempo
Esas ideas, incorporadas por Santo Tomas a que tiende a ampliar el futuro y reducir el
la iglesia católica, constituyen la matriz que presente(10). De allí que la planificación esté
estructuró las universidades del mundo occi- presente en un amplio espectro ideológico-
dental y el pensamiento eurocéntrico. político que pretende hacer sencillo y pre-
La escolástica también sentó las bases decible el comportamiento de los sujetos
del derecho natural cuyas ideas se expre- (certidumbre). Esa fortaleza de la que también
saban en cuatro proposiciones(9): 1) una presume la programación es, a su vez, la
cosa se define por su esencia; 2) definir esa mayor debilidad, ya que los problemas so-
esencia genera competencia entre sabios (la ciales –en su mayoría– se caracterizan por
iglesia, el príncipe o el sabio) que son las su complejidad, su carácter relacional y si-
voces autorizadas para definirla; 3) el de- tuacional y, por lo tanto, por su singularidad.
recho natural no puede remitir a un estado De allí deviene la incertidumbre que carac-
que preceda a la sociedad; 4) lo primero es teriza a lo social.
el deber (no existe la idea del derecho). Los La planificación aparece como una
escolásticos oponen la acción a la pasión, y fórmula mágica que, una vez aplicada, por
tienen una representación estática de la rea- simple evolución, permite una situación de-
lidad que domina en la razón moderna(36). seada. Toma de los escolásticos la idea de
Esto naturaliza una concepción temporo- ubicuidad, en tanto capacidad de encon-
espacial que persiste hasta nuestros días, trarse en más de un sitio a la vez. Es así que,
sobre la cual descansa la planificación y, por como técnica, alcanza amplia cobertura dis-
ende, la programación. ciplinar, y no menos confusión conceptual.
Para salir de la escolástica es necesario Se desconoce que lo propio del plan es que
invertirla, de manera tal que sean los pro- falle y que, frente a los problemas complejos,
blemas los que provoquen a los textos y los resultados son situacionales: buenos para
así, en vez de textualizar los problemas, se unos y malos para otros(41). La planificación
problematicen los textos(37). De esas nuevas hereda la lógica del Discurso del método y
prácticas podrían surgir otros textos, no en del espíritu normativo que tiene el pensa-
el sentido de verdades universales, sino en miento y la obra de Descartes(42).
el sentido de saberes situados(38,39). Ello exige La planificación se basa en las matemá-
trabajar los problemas a partir de preguntas, y ticas, pilar de la racionalidad fundante de la
no de respuestas de las cuales se desconocen ciencia que permite la construcción de un
las preguntas; no jerarquizar solo la verdad método para la búsqueda de certezas. De allí
científica, sino también la importancia social su obsesión por contar, desde la aritmética,
de la aplicación del conocimiento(40). Hemos pero no de contar, en tanto narrar. La razón
demorado mucho en aprender que las dis- aparece como el camino hacia la verdad, así
ciplinas no siempre coinciden con los pro- el mundo y el cuerpo serán entendidos como
blemas y que, a lo sumo, pueden cubrir máquinas ocultas tras ecuaciones que pueden
parte de su complejidad(41). Pero, aun así, definirse algebraicamente(4). El pensamiento,
se continúa negando que el mundo de las al quedar asociado a la matemática, separa
experiencias es mayor que el mundo del al sujeto del objeto como premisa de la abs-
conocimiento(10), lo que nos muestra que hay tracción. El imperativo será que la razón
urgencia de otras epistemologías. debe enfrentar a la tradición, por lo que se
producen saberes y prácticas descontextuali-
zadas. El Iluminismo va a reducir la ciencia
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al criterio del cálculo y lo que no se adapte de buena parte de la ciencia– lo cual termina
será sospechado de no ser científico. Es en transformándose en una prisión(13,44) para los
este sentido que Adorno y Horkheimer con- científicos, al llevarlos a una “encerrona”
sideran totalitario al iluminismo(4). teórica en la que los saberes se tornan dogmas
La discusión sobre la planificación puede y se pierde la capacidad de formular preguntas
abordarse como un problema epistemo- porque abundan las respuestas. Nietzsche se-
lógico o instrumental (técnicas y métodos). ñalaba hace más de un siglo que toda con-
La visión predominante es la instrumental, vicción era una cárcel(20).
que ha buscado el éxito perfeccionando Carlos Matus y Mario Testa sustentan las
técnicas y/o métodos y desconociendo el críticas a la planificación tanto en cuestiones
problema epistemológico que la sustenta. epistemológicas, como metodológicas, lo
En la Figura 1 se representa el eje histórico- cual se plasma en un seminario(45) en el que
conceptual que va de la planificación nor- confluyen ambos y que influencia varias pu-
mativa a la planificación estratégica, eje del blicaciones posteriores que reflexionan sobre
cual Mario Testa se despega enunciando el la crisis de la planificación y dirigen su mirada
pensamiento estratégico (pensamiento rela- hacia el gobierno de las instituciones y de la
cional)(43). Pero la figura quedaría inconclusa sociedad(46,47,48). Tanto Testa como Matus, en
si no señalamos la existencia previa de una sus últimas producciones, abandonan la idea
razón instrumental propia del sujeto carte- de planificación.
siano, que excede a la planificación, y sobre Las críticas a la planificación exceden el
la cual esta se asienta. campo sociosanitario. Henry Mintzberg, eco-
La ausencia de una reflexión epistemo- nomista canadiense y profesor de la McGill
lógica es el problema de la planificación –y University, uno de los grandes gurúes del ma-
nagement a nivel mundial, señala el ocaso de
la planificación estratégica al describirla –iró-
nicamente– como el sistema formal que las
PROBLEMA INSTRUMENTAL empresas tienen para elaborar y operaciona-
(TÉCNICA Y MÉTODOS) lizar las estrategias que ya poseen. Dentro de
la planificación, Mintzberg critica el desco-
nocimiento de las estrategias como patrones
PLANIFICACIÓN PLANIFICACIÓN emergentes, ligadas a lógicas de procesos, en
NORMATIVA ESTRATÉGICA lugar de ser entendidas como la capacidad de
predecir el futuro, como pretenden los plani-
ficadores. Mintzberg no cree que la estrategia
pueda ser formalizada, ya que la considera
creativa y no ajustada a fórmulas, capaz de
envolver procesos complejos, sofisticados,
sutiles y hasta inconscientes a nivel individual
RAZÓN PENSAMIENTO y/o social. A su vez, señala tres falacias de la
INSTRUMENTAL RELACIONAL planificación estratégica: la falacia de la pre-
(sujeto cartesiano) (estratégico) dicción, la falacia de la independencia y la
falacia de la formalización(49).
PROBLEMA EPISTEMOLÓGICO
Planificación y programación
Figura 1. Las limitaciones de la planificación: No es casual que los programas predo-

¿problema instrumental o epistemológico? minen en territorios marcados por las des-
igualdades: el proyecto político-económico
Fuente: Elaboración propia.
e ideológico-cultural que representan es


antagónico a la disminución de las desigual- Concebir la planificación como una
dades, mucho más al cronificarse en el tiempo cuestión técnica llevó a un sinnúmero de
ya que, dado su carácter externo a lo local, adjetivaciones, por ejemplo: administrativa,
incrementa las debilidades institucionales económica, regional, rural, urbana, social,
del Estado, allí donde más se lo necesita. sectorial, anticíclica, centralizada, descen-
La lógica de los programas es funcional a tralizada, compensadora, democrática, eco-
cuatro cuestiones: las fuertes desigualdades nómica, estructural, flexible, imperativa,
sociales(23); los bajos niveles de ciudadanía; indicativa, global o integral, normativa, ope-
las bajas capacidades de gobierno en los fun- rativa, participativa, por etapas, estratégica,
cionarios del Estado a nivel local, regional y situacional(41,53). Estos adjetivos procuran ma-
nacional(32); y los obstáculos epistemológicos quillar lo que es imposible de ocultar. Los téc-
de los egresados universitarios para entender nicos saben pero, en general, no piensan, por
el juego social(8,50,51). lo que toman lo instrumental como un todo
Las acciones de gobierno, al quedar en explicativo. De allí que tengan –y anhelen
manos de universitarios, pueden reducirse a aún más– herramientas para administrar ob-
los contenidos de sus saberes, los que estruc- jetos, a los cuales conciben como inertes,
turan respuestas sin preguntas bajo el formato pero no están preocupados por obtener co-
de programas, y así niegan consciente o in- nocimientos acerca de cómo gobernar per-
conscientemente lo político. Es por esto que sonas y trabajar con problemas complejos y
las diferencias ideológicas que se observan cadenas de problemas, y así siguen pensando
en una elección, entre los partidos políticos que juegan solos.
que participan del juego democrático, se re- La cultura de la planificación consistió
ducen al analizar las acciones que realizan –y aún consiste– en planificar a nivel central,
cuando llegan al gobierno. Esta situación identificando unilateralmente los problemas
¿es solo una cuestión de recursos de poder y las respuestas, y administrando los pro-
o hay también cuestiones epistemológicas gramas en los que se desagrega el plan a nivel
en juego? La pregunta nos remite a la articu- local. El texto de referencia del campo de la
lación entre lo político y las políticas: lo po- salud en América Latina sobre el método de
lítico (nivel ontológico relacionado al poder) planificación fue la publicación realizada por
representa un conjunto de valores y prin- CENDES/OPS bajo el título Programación en
cipios que pueden opacarse por el diseño y salud(54). Es así que la programación se define
la ejecución de las políticas (nivel óntico que desde una concepción mecánica, infalible
refiere a lo empírico)(52). y sin fallas, una verdadera máquina, que
Los cuadros técnicos “no saben que no permite una dinámica lineal:
saben, y entonces, hacen lo que saben”,
dice Matus(41) al señalar cómo ese conoci- La programación es la reproducción con-
miento específico que constituye la especia- ceptual de las actividades y tareas que
lidad del profesional es insuficiente frente a hay que realizar para lograr un resultado
la complejidad de lo social. Por tal motivo, –un producto– previamente definido y
la única respuesta que pueden imaginar son las secuencias correspondientes. Un pro-
“los programas”, diseñados a partir de un co- grama es el resultado de esa elaboración
nocimiento sincrónico y descontextualizado con las asignaciones –de recursos y res-
que constituye una mirada acotada sobre la ponsabilidades administrativas– que ga-
complejidad del territorio. La razón instru- ranticen la viabilidad de la propuesta(43).
mental es dominante en las universidades,
y tiene poco que ver con las preguntas/ Plan integrado, esquema o conjunto
problemas que surgen del territorio, así el ordenado de acciones, actividades, mé-
saber disciplinario queda hipnotizado con todos y procedimientos encaminados
respuestas que aparecen como soluciones a la consecución de un objetivo (reso-
mágicas. lución de un problema u obtención de
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un resultado). Acciones orientadas a política neutra y universal, y así transforma

prever y disponer los recursos para lograr intereses hegemónicos en conocimientos
determinados fines. Toda actividad pro- verdaderos(10). Uno de los tantos ejemplos en
gramada se descompone en etapas y este sentido se encuentra en la obra de Marcia
éstas en operaciones(55). Angell(57), ex editora responsable de The
New England Journal of Medicine, en la que
Un programa de salud está constituido señala la falsedad de la objetividad científica
por un conjunto de recursos reunidos al demostrar los intereses económicos de la
y aplicados para proporcionar a una industria farmacéutica en la construcción de
población definida unos servicios orga- evidencias.
nizados de forma coherente en el tiempo A partir de los fracasos de la planificación
y en el espacio en vistas a conseguir los social y económica en América Latina, tanto
objetivos deteminados en relación a un Mario Testa, como Carlos Matus (entre otros),
problema de salud determinado(56). reconocieron una distancia infranqueable
entre los modelos racionales de la planifi-
Los programas sociosanitarios –y su ra- cación y el juego social(13,32,41,43). Esta discusión
ciocinio– llevan más de 50 años y, dada la no es menor en nuestros países, en los que se
persistencia de los problemas, no pareciera nos propone seguir planes y/o ejecutar pro-
ser la manera más eficaz ni más eficiente gramas como si fueran soluciones mágicas.
para resolverlos. Sí, quizá, la más cómoda
y funcional a la racionalidad de los univer-
sitarios. Los programas se multiplican en los La fragmentación de los sujetos, los
organigramas de un gobierno siguiendo los territorios y los problemas
nombres de las facultades o la estructura cu-
rricular de sus carreras dominantes; en tanto, Los programas se proponen como res-
en los ministerios de salud, se sigue la ana- puestas a los “diagnósticos técnicos”, en
tomía del cuerpo humano (sistemas, órganos general, bajo el formato de enlatados pro-
o partes de un órgano) o se centran en de- ducidos por organismos internacionales. La
terminadas enfermedades. En promedio en- mayoría de esas propuestas suelen ser modas
contramos entre 25 y 50 programas en los efímeras, pero se acumulan al interior de las
distintos ministerios de salud, tanto a nivel instituciones del Estado como capas geoló-
nacional, como de las provincias argentinas. gicas y persisten como racionalidades –en
El programa es la inserción vertical en el te- tanto formas de conocimiento– ya sea a través
rritorio, respuesta a lo individual y recorte de técnicas, discursos, procesos de trabajo
de la realidad que parte de la clasificación y/o dinámicas organizativas. Lo único que no
como condición del conocimiento, pero cambia con el tiempo son los problemas, que
que desconoce que no es el conocimiento, no solo aumentan en cantidad, sino que se
ya que este tiene la potencia de disolver la vuelven más complejos y singulares. En sín-
clasificación(4). tesis, los programas no salen del papel y las
Al analizar las gestiones de diferentes promesas no se plasman en soluciones. Los
gobiernos podemos ver que los programas sujetos de la ciencia no siempre pueden en-
terminan siendo la expresión más desarro- tender que “las modas técnicas” constituyen
llada de la política, de allí la obturación de el problema y no la solución.
lo político que los programas realizan. A la Los programas fueron, y son, las formas
gente le llegan “respuestas” más o menos de dar respuestas, por parte del Estado, a los
parecidas a las del gobierno anterior y bas- problemas y/o demandas de los conjuntos
tante alejadas de las promesas de la campaña sociales. En sus orígenes, en el campo de la
electoral. El programa, en tanto técnica que salud, tuvieron mayor impacto ya que enfren-
determina el hacer, elimina lo político –valor taron situaciones epidemiológicas dominadas
que le da sentido al hacer– y lo convierte en por enfermedades de carácter infeccioso que


requerían, como condición de efectividad, materiales y el personal técnico abocado a la
una alta cobertura, por lo que la respuesta se resolución de los problemas se vuelven inefi-
realizó a través de programas centralizados a cientes e ineficaces, y en ello colaboran los
nivel nacional como, por ejemplo, las cam- distintos componentes del programa: estruc-
pañas de vacunación frente a la epidemia de turas normativas; sistemas de información y
poliomielitis en los años cincuenta. Pero al evaluación; “expertos”; manuales de proce-
complejizarse la situación epidemiológica de dimientos y de buenas prácticas; evidencias
los conjuntos sociales –mal llamada “tran- científicas y guías clínicas; etc.
sición epidemiológica”(58)– se necesitó incluir Todo el despliegue programático se
otras dimensiones que proponían cambios, realiza bajo el discurso de construir “políticas
como los aspectos relacionados a acciones de Estado”, volviendo a la idea de pasteurizar
intersectoriales y/o modos de vida y, por lo lo social al concebirlo exento de conflictos.
tanto, la condición de efectividad requería La distribución de los recursos económicos,
incluir el tema del territorio y la gestión materiales y del personal que lleva adelante
social de los problemas. Allí, los programas los programas, en sus diferentes niveles y
debieron enfrentar dimensiones sociocultu- funciones, contrasta, en general, con las ne-
rales y fueron perdiendo efectividad frente cesidades de las comunidades asentadas en
a la imposibilidad de traducir los distintos el territorio, en las que lo relacional ocurre
saberes y concepciones del mundo puestos bajo dinámicas muy distintas a las de esos
en juego por distintos actores/agentes. Esto programas. Tenemos allí dos lógicas que no
señala las limitaciones del pensamiento de la dialogan: una –la de los programas– pensada
epidemiología moderna centrada en el eje lu- cual diagrama de Venn y, la otra –la del te-
gar-tiempo-persona, incapaz de reemplazarlo rritorio– que se configura en términos de un
por el eje territorio-historia-sociedad(59). nudo borromeo(61).
La modernidad instala la idea de que, en La mirada desde el programa es reduc-
la relación entre ciencia, técnica y sociedad, cionista ya que desconoce las singularidades
a la ciencia le correspondían los temas de y los aspectos culturales que se ponen en
la naturaleza, mientras que la política se en- juego en cada territorio. Así, se cosifica lo
cargaba de los temas de la sociedad(60). En social y se lo simplifica sobre la base de “la
los últimos tiempos, esa relación presenta solución” que proviene de la racionalidad
otros desafíos, dado que “los nuevos” pro- de los técnicos que, en general, residen muy
blemas de la cuestión social han roto los lí- lejos del lugar donde se implementa el pro-
mites entre ciencia y política y se presentan grama. La duplicación de las acciones y/o
como objetos híbridos(60), mezclando dimen- superposición entre diferentes programas es
siones de la naturaleza y de la sociedad, y una muestra de la ineficacia e ineficiencia
desafiando prácticas y saberes tanto de lo po- que, en general, no se discute, ya que sus
lítico como de lo científico. Esos objetos hí- técnicos rara vez entran en comunicación y,
bridos interpelan de manera simultánea a la a veces, ni se conocen.
ciencia y a la política, como lo vemos en las Los programas y sus reuniones de capaci-
violencias, la fertilidad asistida, las nuevas tación, seminarios, jornadas, etc., producen
estructuras parentales, los bancos de cé- un efecto de cascada que afecta lo operativo:
lulas madres, la genética y sus aplicaciones, el nivel nacional convoca al personal de las
etc. Estos son algunos de los ejemplos que provincias, estos al personal de los muni-
entran en conflicto con los viejos disposi- cipios y estos a los responsables de las insti-
tivos conceptuales de lo programático, que tuciones territoriales. Los encuentros tienden
se dirigen verticalmente al territorio sin di- a caracterizarse por personas portadoras de
ferenciar culturas ni procesos sociales y le distintos conocimientos y experiencias, con
asignan al nivel local muy baja capacidad de capacidades técnicas y simbólicas muy dis-
tener/producir conocimientos. En esa lógica, tintas y que trabajan en territorios de lo más
los problemas se fragmentan, y los recursos disímiles. A pesar de ello, se pretende que
158
entiendan y apliquen las mismas normas para notaremos el poco desarrollo que tienen allí
lograr los mismos resultados: una verdadera los programas ya que “el juego” está centrado
apuesta a lo mágico. Las reuniones se pro- en la institucionalidad y el ejercicio de la ciu-
graman como si fueran miles los funcionarios dadanía. Con lo cual, podríamos afirmar que
y trabajadores del nivel municipal y territorial el número de programas de un gobierno es
con disponibilidad de asistir, cuando en rea- inversamente proporcional a los niveles de
lidad son muy pocos o, mejor dicho, son ciudadanía que existen en ese país.
siempre los mismos los que cargan sobre sus
espaldas las tareas y los viajes, de los cuales
vuelven con distintas normas, sistemas de LOS TERRITORIOS COMO
información, guías y asistencias a capacita- PREGUNTAS
ciones. El profesional que asiste a las convo-
catorias no siempre muestra ni comenta con
sus colegas las novedades porque conoce Los programas son respuestas sin pre-
que, en general, la recepción no es la más guntas. Los especialistas que “saben” y for-
amistosa. Todo el esfuerzo se compensa –a mulan las respuestas a los problemas no
veces– con un dinero que entra al nivel local parten de preguntas sino de certezas. Los
a través de los Programas de Transferencia de programas expresan las huellas del colo-
Renta Condicionada impulsados por los orga- nialismo científico en el saber universitario.
nismos internacionales(62), o por el acceso a Vale aquí la advertencia de Nietzsche: “El
viajes –formas encubiertas de turismo cien- desierto crece: ¡ay de aquel que esconde
tífico– a lugares nacionales o internacionales, desiertos!”(15 p.41). Así, los programas se repro-
viáticos o suplementos salariales que comple- ducen, mientras lo territorial se reduce a la
mentan los ingresos, aunque no pocas veces participación social, a los agentes sanitarios
esos privilegios producen fragmentación en el o promotores territoriales. La lógica progra-
colectivo de los trabajadores. Como cada pro- mática devuelve como verdades reveladas
grama crea su propia lógica administrativa, saberes ancestrales que fueron arrebatados
sus procedimientos y formularios, su lenguaje por la ciencia a las propias comunidades,
y sus códigos, se transforma en un laberinto por ejemplo: la formación de cooperativas
al que pueden acceder quienes lo conocen, de trabajo, la lactancia materna, el parto na-
reforzando desigualdades en los conjuntos tural, la comensalidad, el cuidado de adultos
sociales por cuestiones administrativas. Los mayores, los modelos productivos de base
programas atomizan a los habitantes del terri- familiar, las huertas comunitarias, etc.
torio, los que son reducidos a problemas, ca- En el año 1937, Ortega y Gasset denominó
rencias o enfermedades que, no pocas veces, a los profesionales universitarios como los
serán su única identidad frente al Estado. bárbaros modernos, en el sentido de que cada
¿Los programas son la única forma de vez sabían más de menos(63). Santos afirma:
relación posible entre el Estado y los con- “La ciencia moderna produce conocimientos
juntos sociales? Entendemos que no, ya que y desconocimientos. Se hace del cientista un
los programas representan un obstáculo para ignorante especializado y se hace del ciu-
reducir las desigualdades al fragmentar los dadano común un ignorante generalizado”(64
problemas, el territorio y los sujetos, y fo- p.88)
. Esas afirmaciones interpelan a los univer-
mentar el asistencialismo, en el cual no hay sitarios en tanto sujetos epistémicos, más allá
derechos, sino una oferta que se impone a de la ideología y/o filiación partidaria.
partir de un diagnóstico externo. El programa Los saberes científicos son necesarios y
solo puede justificarse como parte de lo ur- muy útiles en determinados casos, pero el te-
gente, pero nunca como parte de lo impor- rritorio necesita –y tiene– otros saberes que
tante. Su persistencia en el tiempo señala el no siempre se sustentan en la ciencia, de allí
fracaso en solucionar los problemas. Si ana- la importancia de una ecología de saberes en
lizamos los países con menos desigualdades, permanentes procesos de traducción(10). El


territorio no necesita de planes y programas lógica del acontecimiento en la que no se
sino de ciudadanía y de trabajadores del predicen los objetivos a futuro, sino que se
campo sociosanitario que desarrollen vín- los reconoce al volver la mirada hacia atrás y
culos basados en el cuidado desde lo arte- se identifica lo construido que, en general, se
sanal de su tarea, en procesos relacionales ubica lejos de lo pensado/imaginado, sobre
mediados por lo simbólico(10,65,66,67). Estos tra- todo en su trayectoria(69,70).
bajadores tienen prácticas muy ricas, impreg- A priori, adjudicamos al territorio, y a
nadas por “el caos” con el que se les presenta las preguntas que de él surjan, la supremacía
lo social ante sus racionalidades estructuradas sobre cualquier teoría, en el sentido de in-
en lógicas de orden y clasificación. Esa con- vertir la escolástica y problematizar los textos,
figuración epistémica produce mucho ma- para buscar pistas que permitan conformar un
lestar y no menos sufrimiento, ya que lo que marco conceptual que respete los saberes téc-
no se entiende se sufre. Para instalar nuevas nicos que han demostrado eficacia, pero que
praxis se debe permanecer fiel a la sentencia vaya más allá, para facilitar pensar, entender,
de Paulo Freire, quien señaló: “donde los interpretar y actuar frente a lo fortuito, lo dis-
pies pisan, la cabeza piensa”(68). Las dificul- continuo, lo diferente, lo aleatorio, la dise-
tades para entender lo territorial y moverse minación y las multiplicidades, que se dan
en una dinámica relacional, en escenarios de en el territorio. Para todo ello es necesario
complejidades crecientes y/o caos, induce superar las falsas dicotomías instaladas en el
al dominio de una lógica centrípeta que re- pensamiento: historia/naturaleza, consciente/
produce más que produce, y lleva a que los inconsciente, cuerpo/alma.
profesionales tiendan a atrincherarse en sus En las líneas que siguen buscamos volver
instituciones como forma de defensa ante a jerarquizar las preguntas como inicio del
eso “externo” que incomoda y desestructura, pensamiento, para así poder producir en-
y que cada vez se entiende menos, ya que cuentros y acontecimientos. No se pretende
los problemas son más complejos y más dis- construir nuevas jaulas de hierro(43), ni pres-
tantes a sus epistemes. cripciones infalibles. El propósito es poder
El territorio nos demuestra que la epi- volver a pensar y, en función de ello, desa-
dermis no es el límite del individuo y que si rrollar praxis que en su devenir construyan
vamos más allá de la piel de cada sujeto se espacios de libertad, reduzcan desigualdades,
pueden trascender los factores de riesgo para desarrollen ciudadanía y construyan nuevas
pensar en términos de interacción y juego institucionalidades en los territorios. Esto
social, y descubrir las vulnerabilidades so- exige categorías muy diferentes a las utili-
ciales y las lógicas de poder (macro y micro), zadas por la planificación y la programación,
como también la potencia que subyace en por lo que desarrollaremos algunas de esas
el territorio. Trabajar allí no implica pensar categorías para discutir la cosmovisión que se
con las categorías de la planificación/progra- nos ha impuesto desde la ciencia universal.
mación con las que la mayoría de los univer-
sitarios son formados e interpretan lo social.
Las preguntas marcan el camino del Lugar y territorio
pensamiento, y la posibilidad de formularlas
se relaciona con la riqueza del marco epis- La geografía crítica diferencia entre lugar
témico y teórico. Enfrentar lo no pensado, y y territorio. El primer concepto –el más tra-
aceptar el derrumbe de las certezas, permitirá dicional– es entendido como la ubicación
realizar preguntas y evitar la naturalización, geográfica de las personas en un tiempo
la queja y/o la anécdota. Por ello no se debe determinado mientras que, el segundo, sos-
temer abandonar lo conocido que no resulta tiene que los grupos poblacionales a través
útil, para aventurarse en lo desconocido en de su accionar modifican el medio físico en
un viaje sin certezas de éxito, apostando y interacción con otros grupos y construyen
siendo fiel a las apuestas, inscriptos en una –con autonomía relativa– ese lugar donde
160
habitan(5). Milton Santos, geógrafo bra- Recuperamos el territorio, no desde una

silero –nieto de esclavos–, concibe el terri- concepción romántica, sino que recono-
torio como el área del acontecer solidario, cemos, como bien señala Milton Santos(7),
marcado por la contigüidad de los sujetos y que puede ser hogar o cárcel para el sujeto,
por sus procesos de interrelación que cons- por eso mismo debe ser trabajado de manera
truyen lo identitario en los conjuntos so- integral y diacrónica, buscando dar cuenta de
ciales, en los que interviene el territorio al la demanda técnica en tanto saber situado,
forzar y/o facilitar esas interrelaciones. El pero sin dejar de tener presente los compo-
territorio no es sinónimo de violencia, es si- nentes ideológico-culturales y económico-
nónimo de complejidad y caos, sumergido políticos que constituye cada problema.
en estructuras que son estructurantes pero a El territorio es una construcción humana,
su vez estructuradas por la acción de los su- inacabada, en permanente movimiento y
jetos individuales y/o colectivos(5,6,7,8,71). transformación(7).
El territorio tiene un carácter dinámico,
por lo que debe ser entendido dentro de una
lógica procesual, fruto de un conjunto de Tiempo y espacio
acciones producidas por actores y objetos.
Reconocer el valor social de los objetos no Los cambios en las ideas sobre el es-
es otra cosa que aceptar que los objetos pacio y el tiempo son centrales para entender
no son “cosas” sino productos de la acción la modernidad y sus momentos, y cómo
social(5,6,59). Para Harvey, el territorio es una han afectado los procesos productivos, los
construcción –a través de un devenir his- valores individuales y los procesos sociales
tórico– que expresa las condiciones y los y, por lo tanto, la producción de nuevas
modos de vida de los conjuntos sociales, subjetividades(73), y cómo se crea y legitima el
atravesados por relaciones de poder(71). poder social(10), y allí el rol de la ciencia he-
El territorio es un caleidoscopio que se gemónica es central. En 1915, Albert Einstein
complejiza a medida que nos acercamos y, –desde la física, con la teoría general de la
frente a aquello que a la distancia aparecía relatividad– produce un cambio en la con-
como homogéneo, toma relevancia lo sin- cepción tiempo-espacio. Pero también el arte
gular. Las miradas sobre el territorio no hacen suele anticiparse a la ciencia: el libro Alicia
más que describir la configuración de una en el país de las maravillas publicado en
trama laberíntica propia de lo social, atra- 1865(74) o la película Matrix(75) son algunos
vesada por dimensiones económico-políticas de los ejemplos que colocan en juego otras
e ideológicas-culturales que reconocemos visiones sobre lo temporo-espacial.
tanto en lo macro como en lo micro. Asumir La escolástica entendía el tiempo como
el territorio como singular no significa su re- el número o medida del movimiento, según
ducción a la materialidad, sino concebirlo un antes y un después, una condición de los
como espacio de lo relacional-simbólico, en seres temporales. En tanto, para Kant, era una
el que actúan capitales y campos que se crean forma a priori de la razón pura: espacio y
y recrean y pueden excederlo. Bourdieu di- tiempo eran categorías con las que la sociedad
ferencia entre el espacio social y el espacio se organizaba(76). Para Heidegger, el espacio
geográfico, reconociendo que los agentes era casi insignificante, un pasar, en el que lo
sociales –al igual que los objetos–, según temporal aparece como lo perecedero(10,77).
su posición en el espacio social, construyen El tiempo tenía importancia en tanto misterio
capitales simbólicos, y así las estructuras so- en el cual se da la existencia, en un proceso
ciales terminan por convertirse en estructuras de llegar a ser(77).
mentales y sistemas de preferencias, que ex- Marshall Berman entiende a la moder-
presan jerarquías y distancias sociales. A esa nidad como una manera de experimentar el
traducción del espacio social en el espacio tiempo y el espacio(78), conceptos interpretados
físico la denomina “efectos de lugar”(72 p.119). de manera diferente según la época, tanto en


el ámbito de la vida privada como de la vida como interacción no necesariamente racional
pública. En la modernidad ambos conceptos ni teleológica, compuesta por elementos de la
aparecen, desde el sentido común, exentos razón, del deseo, y de la cultura en combina-
de conflictos y ambigüedades, acompañando ciones inciertas. Trabajar el tiempo presente
de manera subordinada al progreso(78). como tiempo de la acción no significa negar
En el relato de la modernidad, el futuro la importancia del pasado ni del futuro, a los
aparece como promesa de progreso, el cuales rescatamos a través de las siguientes
pasado, como lo dejado atrás por el progreso, preguntas: ¿por qué? para encontrar los sig-
en tanto que el presente será irrelevante por nificados del pasado, y ¿para qué? para en-
su “fugacidad”. Se asume que el futuro es pre- contrar los sentidos del futuro(82), sin por ello
decible y así se podrá controlar la naturaleza entenderlo como predecible, pero aceptando
y asegurar el progreso. Esa lógica de lo tem- la proyección del deseo.
poral se encuentra en la planificación, la que Santos señala dos procedimientos cen-
ignora el viejo proverbio chino que afirma: trales en su Epistemología del Sur, obra en
“el arte de la predicción es muy difícil, sobre la que se identifica la influencia de la idea
todo cuando se quiere predecir el futuro”. de “tiempo ahora” de Benjamin. Así, define
Para Walter Benjamin el futuro era algo al presente como un pasado incompleto y,
vacío y homogéneo, por lo que formula el al futuro, como presente incumplido en su
concepto de “tiempo ahora” que entiende momento de incumplimiento, por lo que
al presente como pasado del futuro y como propone un doble trabajo sobre el presente:
futuro del pasado(79,80), asignándole una re- como un pasado incompleto, o como un pre-
levancia central al presente. Ideas similares sente incumplido.
encontramos en Nietzsche quien, en su obra Tanto Benjamin, como Bloch y Santos
Así habló Zaratustra, piensa las tres fases del le asignan centralidad al presente, dado que
tiempo desde la eternidad como continuo las acciones se dan en el presente y no en
presente(81). Las concepciones de Benjamin el futuro(10). Santos propone invertir la lógica
contradicen la idea del tiempo dominante en dominante y postula expandir el presente y
la racionalidad eurocéntrica, la cual comprime reducir el futuro para crear un espacio-tiempo
el presente, al que concibe como fugaz y lo que dé cabida a las infinitas experiencias so-
transforma en algo cuasi inexistente, a la vez ciales existentes en un proceso de traducción
que expande el futuro, a través de una repre- sin sacrificar identidades(10). En este sentido,
sentación lineal del tiempo. Santos recupera Castoriadis entiende que “el tiempo es nada
de Ernest Bloch la siguiente reflexión: si solo o es creación”(83).
vivimos en el presente, no se comprende que Santos recupera de Bloch el concepto
sea tan pasajero. Esto lleva a reformular de “todavía no”(10), como alternativa al pensa-
manera radical la concepción del tiempo do- miento binario del todo/nada que expresa lo
minante en nuestras epistemes(10 p.151). estático. El concepto de “todavía no”, que no
La idea ya mencionada de Benjamin es “todo” ni “nada”, en tanto dimensiones es-
de “tiempo ahora” refuerza el concepto de táticas del pensamiento occidental, no tiene
acción que, trasladado al territorio, rompe sentido ni dirección y, por lo tanto, puede
con la hipótesis de una solución externa, al terminar en desastre o esperanza(10).
poner en juego las fuerzas sociales frente a los La concepción del tiempo dominante
problemas(79,80). Ante la pregunta ¿cuándo?, nos lleva a señalar la tensión entre me-
la modernidad colocaba la respuesta en el didas urgentes y cambios civilizatorios(10).
futuro, pero a partir de Benjamin la respuesta Sergio Arouca, referente de la reforma sani-
está en el presente, con lo cual la idea de taria brasileña, afirmaba que la reforma era
“tiempo ahora” construye un puente con- un proyecto civilizatorio y no un proyecto
ceptual para la acción. Este proceso demanda técnico-gerencial, ya que se precisaban va-
un sujeto capaz de formularse preguntas que lores que eran propios de la civilización
den lugar a la acción, a la que entendemos humana(84).
162
La idea de tiempo no debe confundirse normativa requiere, para su cumplimiento,

con lo urgente, donde nadie puede detenerse de alta concentración de poder y/o hege-
a pensar, el ritmo se acelera, enceguece y monía cultural, y aun así presenta grados de
arrastra todo, y lo urgente desplaza a lo im- incertidumbre. La idea de objetivos –dominio
portante. Esa “locura” que priva de libertad de lo estático– es más cercana a la cultura
al sujeto deja como consecuencia ansiedad, occidental, mientras que la de procesos –do-
depresión y estrés. Paul Virilio sostiene que minio de lo dinámico– se aproxima más a la
la velocidad rige y destruye todo y, en esa cultura oriental.
destrucción, genera el olvido y la visión del El proceso no tiene como finalidad el
espacio entra en crisis, amenazada por el incumplimiento, sino que debe tender a su
tiempo(85,86). Es esa urgencia y la ilusión en realización, sin por ello ignorar la condición
el futuro lo que lleva a que se planifique lo diacrónica del juego social(87,88). En el terri-
que no se hace y se haga lo que no se pla- torio, el diagnóstico es de poca utilidad ya
nifica. Hay más olvido que memoria ya que que la foto nunca es la película, así que
la apuesta es definir el futuro, el mismo que debemos permitirnos jugar. El “debe ser”,
los textos sagrados del judaísmo prohíben propio de la planificación normativa, ignora
explorar por ser propiedad del mesías. En el juego y exalta el diagnóstico, por lo que no
los tiempos actuales, todo transcurre muy puede tomarse como punto de partida sino,
rápido, no hay tiempo para pensar, solo se a lo sumo, como el punto de llegada, que
trata de hacer –de manera irreflexiva– y para dará inicio –seguramente– a otros procesos,
ello el sujeto cartesiano exige herramientas marcados siempre por la incertidumbre, con
buscando la solución en lo instrumental, in- excepción de los problemas simples, en los
capaz de pensarse a sí mismo, olvidando los que los saberes técnicos normados suelen
fracasos sistemáticos de su accionar instru- tener fuerte impacto. Pero no son esos los
mental en el campo social. problemas que dominan el juego social en
el territorio.
En una sociedad totalmente moderna, Luego de su experiencia en la planifi-
la tragedia de la modernización –inclu- cación normativa, Mario Testa reflexiona
yendo su héroe trágico– llega natu- sobre el método CENDES/OPS y afirma: “le
ralmente a su fin. Una vez que el dimos valor 0 a una variable cuyo único valor
desarrollista ha eliminado todos los no podía ser 0”. ¿Y cuál era esa variable?: el
obstáculos, el mismo se interpone en su poder y, por lo tanto, el conflicto. Varios años
camino, y debe desaparecer.(77 p.62) más tarde, en Montes Claros, estado de Minas
Gerais, Brasil –cuna del proceso que culmina
en la Reforma Sanitaria Brasileña–, Mario
Testa, en un trabajo de asesoría en salud que
Objetivos y procesos realiza junto a Mario Hamilton, un médico le
dice: “no se trata de fijar normas sino de des-
La idea de objetivos es central a la pro- encadenar procesos”. Años más tarde, com-
gramación y conlleva una noción de linea- pleta aquella frase con la pregunta ¿para qué
lidad, causalidad y certidumbre, apropiada desencadenar procesos?, y se responde: “para
para problemas simples, pero no para pro- construir nuevos actores sociales” y, ante un
blemas complejos. Para estos últimos se nuevo ¿para qué?, afirma: “para instalar otros
corresponde la idea de procesos que, en ge- temas de discusión en la agenda del Estado”.
neral, involucran distintos actores, objetos e Ese conjunto de ideas son centrales en su
intereses en un devenir atravesado por incer- pensamiento y reflejan su autocrítica sobre
tidumbres, razón, deseo, cultura, conflictos y su época de planificador(12,89,90,91).
azar. La idea de procesos es más pertinente Para el homo academicus, la idea de
para el territorio que la idea de objetivos, pensar en términos de procesos –y no de obje-
dado que esta última, en tanto formulación tivos– representa un obstáculo epistemológico


muy fuerte, ya que su historia de socialización voluntad de poder en tanto acto de libertad
estructuró la idea del cumplimiento de obje- y superación. Para Nietzche, todo querer es
tivos y en ello se basa su cosmovisión (plano un querer ser más(20). Para Deleuze, los sujetos
de la trascendencia). Aunque si lo hacemos re- son potencias tanto en acciones como en pa-
flexionar, reconocerá que, en general, cumple siones, y no se definen por la esencia, ni por
muy pocos de los objetivos que se plantea. Y el juicio de los sabios, tal la propuesta del de-
si le pedimos que analice retrospectivamente recho natural(9).
su historia vital y laboral, y examine si sus El territorio no siempre representa un
logros fueron parte de una lógica de obje- juego pautado, muchas veces expresa el
tivos o de procesos, descubrirá una realidad caos, lo impredecible, que no es sinónimo
no pensada que lo estructura, en la que la de desorden. El caos no fue objeto de la
mayoría de sus logros son parte de procesos ciencia, que con su concepción determi-
relacionados al deseo, más que a la razón nística y lineal de los fenómenos lo desterró
–plano de la inmanencia–, y la mayorías de para preservar “el orden y el progreso”, ex-
sus obras inconclusas se relacionan con obje- presión clave del positivismo. Recién con el
tivos. La idea del devenir y el rol del deseo en desarrollo de la teoría del caos y los sistemas
las acciones están lejos de poder ser pensados complejos, entendidos como sistemas diná-
por el sujeto cartesiano, aunque se demuestre micos muy sensibles a las variaciones en las
que es central en sus prácticas. Guattari asocia condiciones iniciales, el caos alcanza estatus
la idea del devenir con lo que Ilya Prigogine científico. El caos expresa cómo pequeñas
denominó “procesos disipativos” en tanto variaciones en las condiciones iniciales
rompen con la idea tradicional de lo lineal y pueden implicar grandes diferencias en el
del equilibrio(87,88). comportamiento futuro, lo que imposibilita la
predicción. Esos conceptos se ubican en las
antípodas de la planificación/programación
Potencia y caos que pretende predecir el futuro.
El trabajador sociosanitario reconoce el
En la modernidad, las obras de Baruch caos como parte del territorio pero no puede
Spinoza y Friedrich Nietzsche fueron pio- entenderlo dado que su propia configuración
neras en trabajar el concepto de potencia(20,92), epistémica se lo imposibilita porque le llega
el cual no fue –ni es– parte de los paradigmas codificado –dotado de significación– por
de la ciencia “normal”(93), a pesar de que los la cultura (incluyendo en ella a la ciencia).
sujetos que habitan en el territorio expresan Esa codificación –expresión de lo colonial–
en sus relaciones no solo poder, sino también sustituye la experiencia, tal como señala
potencia y caos. Magariños de Morentín: “El hombre no tiene
La idea de potencia se encuentra en frente a sí un mundo sino un espejo de sus
Aristóteles en relación con la idea de acto, a propios sistemas semióticos de identificación,
tal punto que usa de manera indistinta los con- de modo que no selecciona lo que existe en
ceptos de potencia y posibilidad. Solo sobre la el mundo sino lo que de conocido percibe en
base del acto se puede entender lo potencial. el mundo”(94 p.88). Por lo cual cada trabajador
La relación potencia-acto se entiende como el leerá la realidad a partir de la “clausura sim-
paso de entidades menos formadas a entidades bólica” que opere en ese instante, mientras
más formadas, lo que expresa lo dinámico que la ciencia y los medios realizarán un
de la relación(36). La potencia se define como proceso industrializado de construcción/fa-
“el poder que tiene una cosa de producir un bricación de la realidad(94).
cambio en otra cosa […] es la potencialidad re- En esa línea de pensamiento, los pro-
sidente en una cosa de pasar a otro estado”(36 gramas actúan como clausuras simbólicas
p.2863)
. El acto precede a la potencia, la que re- sobre la percepción de la realidad de los su-
presenta una capacidad que puede ser actuada. jetos, y los alejan de las ideas de potencia
La potencia es trabajada por Nietzche como y caos con las cuales conviven en el juego
164
social. Deleuze señala que el libro, en tanto línea de segmentaridad rígida o molar que
espejo del mundo, expresa el triunfo de la delimita objetos, sujetos, representaciones
escolástica(9). De allí la exportación de ideo- y que, con sus sistemas de referencia, co-
logía desde el centro hacia la periferia y la rresponde al plano de la organización y,
necesidad de toma de conciencia del signi- por lo tanto, marca, delimita y planifica;
ficado de la ideología que han recibido, o línea de segmentaridad flexible o mole-
siguen recibiendo, los pueblos del sur desde cular que corresponden a los flujos, a los
los sistemas centrales de poder(95). devenires, a las transiciones, a las intensi-
dades, a las nuevas composiciones que no
coinciden exactamente con el segmento,
Razón y deseo: programas y ya que procede por umbrales y va a consti-
cartografías tuir devenires.
línea de fuga o de desterritorialización –en-
Deleuze y Guattari desarrollan la idea de tre las que oscilan las líneas anteriores– que
territorio junto a los conceptos de desterrito- es segmentaria, es abstracta, no preexiste
rialización y reterritorialización(9). Para ellos, sino que se traza, se compone y no se sabe
el territorio ya no es solo el espacio de lo de antemano si va a funcionar como línea
vivido sino también un sistema percibido, en de fuga, o qué va a interceptarla(9,87,88).
el que conviven procesos de agenciamientos
que permiten romper con lógicas codificadas La lógica axiomática –propia de la pla-
o sobrecodificadas, espacios y estructuras que nificación y los programas–, lejos de trazar
no aportan más que perturbaciones y defor- líneas de fuga creadoras y procesos de des-
maciones en vez de llevar más lejos a las má- territorialización, bloquea todas las líneas y
quinas deseantes(87,88). El deseo, en sus textos, las somete a un sistema puntual. Así logra
supera el lugar que Freud le asignó –los límites detener y cristalizar la creación de la acción,
de la familia en tanto lugar de lo privado–, en tanto novedad, la que se reduce a mera
por el contrario, lo consideran como un prin- repetición(9,88). La planificación y la progra-
cipio inmanente, de allí lo de producción mación representan, en el territorio, la línea
deseante, en el sentido de que el deseo hace de segmentaridad dura que niega el devenir.
fluir y no cesa de efectuar el acoplamiento Sin embargo, son esas líneas las que definen
de flujos continuos y de objetos parciales la necesidad de cartografiarlas para aproxi-
(fragmentarios y fragmentados)(9,87,88,96). El te- marnos a interpretar lo social que allí se
rritorio solo puede albergar caos o armonías produce y/o reproduce.
provisionales, señalan estos autores que en- Tanto para Deleuze como para Guattari,
tienden a los territorios como fuera de nuestro la territorialidad es una característica central
alcance, ya que se están trazando y, por lo de los agenciamientos, ya que son creados
tanto, no somos más que una línea y solo nos en el territorio, en un movimiento de des-
queda cartografiar las estrategias del deseo en territorialización y reterritorialización que
el campo de lo social y la producción de sub- se repite de manera incesante(9,88). El agen-
jetividades que de allí surgen(9,87). ciamiento es la unidad mínima, no es la pa-
Entienden que el territorio está atra- labra, ni la idea o el concepto, ni tampoco el
vesado por flujos de distintas intensidades y significante en el territorio(9). Es una noción
direcciones(9,88). En él se configuran estratos más amplia que la de estructura, sistema o
–capturas– que aprisionan intensidades o forma y tiene componentes heterogéneos
fijan singularidades, constituyendo molé- –tanto del orden biológico, social, ma-
culas que pueden –o no– confluir en estruc- quínico, gnoseológico, imaginario, etc.– que
turas molares(9,88). Para Deleuze y Guattari, ponen en conexión ciertas multiplicidades
los individuos y los grupos están constituidos pertenecientes a distintos órdenes(9,88). Hay
por tres tipos de líneas que los atraviesan y agenciamientos muy diferentes: mapas-
componen: calcos, rizomas-raíces, con coeficientes de


desterritorialización variables(9). El agencia- dinámicas que nos obligan a pensar también
miento es esencialmente libidinal e incons- en términos de rizomas(9). La capilaridad y la
ciente, no produce bienes sino que mezcla porosidad del territorio permiten la invención
cuerpos, en un conjunto de representaciones de posibles, en tanto lo arborescente atraviesa
que desembocan en comportamientos, in- las instituciones y los aparatos de poder y se
versiones, en tiempos y espacios sociales, mueve en una lógica centrada-genealógica,
culturales, estéticos y/o cognitivos(9,87,88). de relaciones binarias que siempre fijan un
Guattari revela que, en las sociedades punto, un orden(9,88). A su vez, lo rizomático
industriales, existe toda una serie de micro- desarrolla una lógica descentrada conformada
rredes de poder y disciplina que conforman por líneas, al contrario de las estructuras que
“un régimen político miniaturizado” e invisi- se definen por un conjunto de puntos y posi-
bilizado que forma parte del sentido común ciones, de relaciones binarias entre los puntos
de los individuos. Todo es político y a la y de relaciones biunívocas entre las posi-
vez todo es macropolítica y micropolítica, ciones. El rizoma es combinación de un punto
así el territorio expresa la lucha –o resis- con cualquier punto, no se deja reducir a uno,
tencia– por su transformación, es decir es el ni a lo múltiple, no se conforma por unidades,
espacio de la micropolítica en tanto afectos sino por dimensiones, no tiene ni principio
y conversaciones que expresan lo múltiple y ni fin y puede establecer conexiones transver-
lo relacional(96). La micropolítica no sabe de sales sin que pueda ser centrado o clausurado,
“condiciones” es puro devenir en el plano de posee múltiples entradas, salidas y líneas de
la inmanencia, es espacio del trabajo vivo y fuga(9 p.13). Hay una relación de tensión y de
de los vínculos(9,65,96). complementariedad entre el árbol raíz y el
Los modelos organizativos hegemó- rizoma, no son dos modelos que se oponen,
nicos del mundo industrial son antagónicos ya que mientras uno actúa como modelo y
a la dinámica de los territorios, en los que como calco trascendente, el otro actúa como
conviven diseños arbóreos con diseños ri- proceso inmanente que destruye el modelo
zomáticos. Esto nos permite pensar a los y esboza un mapa, incluso constituyendo
trabajadores en el territorio como artesanos sus propias jerarquías. Por eso se reconocen
en un “ser ahí”, arrojados al mundo, que líneas rizomáticas en los árboles, y puntos de
–no pocas veces– tienen que pensar lo arborescencia en el rizoma(9 p.26).
impensado, atravesados por el juego de la En la cultura occidental predomina el
micropolítica, en la que se mezcla lo in- pensamiento arbóreo, que se relaciona con
dividual y lo colectivo, lo consciente y lo el dominio del plano de la trascendencia
inconsciente, el deseo y la razón, todos en tanto representación de una realidad ex-
elementos innegables de lo humano, que terior –que trasciende al sujeto. En la cultura
constituyen los procesos relacionales. Esos oriental domina el plano de la inmanencia,
dispositivos están muy alejados de los or- como fenómeno psíquico inmanente al
ganigramas, los cuales provienen de la con- sujeto, que no lo trasciende ya que es inhe-
figuración del ejército prusiano y se basan rente a él y va unido de un modo inseparable
en la experiencia de la Iglesia católica apos- a su esencia, aunque racionalmente pueda
tólica romana y de los centuriones romanos distinguirse de ella(9). Deleuze afirma que es
y, como diseño organizacional, representan necesario trabajar el plano de la inmanencia
lo vertical arborescente (árbol-raíz) de na- en oposición al plano de trascendencia, con-
turaleza jerárquica, con centros de signifi- cebido como una realidad superior(9). Por el
cancia y de subjetivación, otorgados por el contrario, el plano de la inmanencia es el
lugar que ocupan las personas(9). plano de los acontecimientos, de las singu-
El pensamiento no es arborescente y laridades y de las intensidades en continuo
cuando toma tal forma no hace más que pro- movimiento(9,88).
ceder por calcos –copias– y así termina por La idea de rizoma nos permite entender
no pensar(9). En el territorio se producen otras otras configuraciones en el territorio, ya que
166
no se trata de culturas a doblegar ni de te- En la lógica de la planificación-progra-

rritorios a ocupar, sino de trabajar en la di- mación y en la de los territorios podemos iden-
versidad de culturas que el territorio arrastra, tificar dos encadenamientos conceptuales, no
produce y acumula bajo formas de árbol-raíz necesariamente dicotómicos: uno propio de la
y de rizomas, en procesos de agenciamientos cosmovisión occidental del mundo, formado
que señalan la presencia de la micropolítica por los conceptos poder, razón, plan, pro-
y el deseo(9,88,96). grama, objetivo, técnica, fundamentar, orga-
El concepto de lugar soporta sin pro- nigrama; y otro, subalterno, más relacionado
blemas el mapa, dado que ambos comparten a la cosmovisión oriental, conformado por los
sus situaciones estáticas y pueden dialogar conceptos potencia, deseo, acción, devenir,
sin conflictos. En cambio, para el territorio, proceso, cultura, fundar, rizoma.
el mapa resulta insuficiente, exige ser carto- La separación entre teoría y práctica,
grafiado en línea de manera de dar cuenta herencia de la escolástica, difiere de la in-
de lo dinámico y de las transformaciones, vitación que realiza Santos a pensar que la
de la creación de nuevos sentidos y nuevos comprensión occidental del mundo que nos
mundos, de las líneas de fuga, de las for- constituye como sujetos epistémicos es muy
maciones del deseo así como de aquellos limitada frente a la diversidad de saberes y de
dispositivos que van quedando obsoletos. “otros mundos” que son invisibilizados por
La cartografía se transforma en teoría al ras- la clausura simbólica que realiza el cono-
trear esas intensidades que buscan expresión cimiento hegemónico(10). Por ello, debemos
para entender las dinámicas del territorio, enfrentar y superar el pensamiento que na-
los agenciamentos, lo molecular y lo molar, turalizó en nosotros –en tanto sujetos epis-
la macro y la micropolítica, la raíz-árbol y témicos– el universalismo y reconocer que
lo rizomático, los poderes macro y micro, aprendimos una teoría general a pesar de su
las potencias, etc. En ese proceso de carto- irrealidad, lo cual es funcional para negar
grafiar no hay protocolos posibles ya que su el trabajo de traducción de los distintos sa-
práctica es netamente micropolítica y sin- beres que se encuentran en el territorio(10,34).
gular. Ante ello, solo debe regir el imperativo Para romper con la herencia de la razón
de intervenir, de jugar, de desencadenar pro- moderna y el pensamiento occidental domi-
cesos sin certezas, pero fiel al deseo y a las nante es necesario acercarse a otros presu-
apuestas que se generan, tratando que las puestos epistemológicos. De allí que Santos
acciones sean el puente entre la potencia y plantee la ecología de los saberes y la tra-
el poder(9,87,88,96). ducción intercultural como un pensamiento
basado en experiencias prácticas, en luchas
sociales y en trabajos de campo, tratando
Una ecología de saberes en el territorio de evitar “los epistemicidios”, proceso que
explora más allá de los saberes científicos
Los conceptos desarrollados hasta aquí y procura que la traducción intercultural
confrontan con los programas y nos señalan sea el procedimiento que posibilite enten-
cómo estos últimos “programan” a sus eje- dimientos entre las diversas experiencias de
cutores que responden de la misma manera lo territorial(10).
ante diferentes problemas, en diferentes lu- Santos señala que vivimos en un tiempo
gares y tiempos. ¿El éxito de los programas de preguntas fuertes y respuestas débiles,
será robotizar a los trabajadores? dado que la crítica ha ido perdiendo los sus-
Aceptar la ecología de saberes(10) implica tantivos para quedarse con los adjetivos. Esa
una reformulación de las bases epistémicas sobreabundancia de adjetivos y anulación
del conocimiento dominante en las univer- de sustantivos es clara expresión de la crisis
sidades y en la mayoría de los profesionales, del “homo academicus” que se traslada a la
independientemente de la carrera, la ideo- sociedad(97), y expresa que “los conflictos epis-
logía política, la edad y el género. temológicos son siempre, inseparablemente,


conflictos políticos”(98 p.15) y, en tanto con- posibles y para ello trata de contraer el futuro y
flictos políticos, en nuestro continente, se- sustituir ese vacío que constituye el futuro, por
ñalan su matriz colonial. posibilidades plurales y concretas, utópicas
La experiencia social es mucho más y realistas, que se construyen en el presente
amplia que la validada por la tradición cien- a partir de las actividades de cuidado que
tífica y filosófica occidental, incluso por la actúan tanto sobre las posibilidades (potencia-
ciencia social tal como la conocemos. Es lidad), como sobre las capacidades (potencia).
necesario otro modelo de racionalidad, a Así, se sustituye la idea mecánica de deter-
la cual Santos llama razón cosmopolita, en minación por la idea axiológica del cuidado,
contraposición a la razón indolente, que que reemplaza a la mecánica del progreso y
es la razón moderna tal como la venimos a la idea de planificación. El elemento sub-
describiendo(4,10). Santos fundamenta su pro- jetivo lo constituye la conciencia anticipatoria
puesta en tres procedimientos sociológicos: y el inconformismo, que busca una relación
la sociología de las ausencias, la sociología más equilibrada entre experiencias y expecta-
de las emergencias y el trabajo de traducción. tivas, por lo que le asigna importancia a las
Intenta así ir más allá de la comprensión del “señales” y a las “pistas”, reconociendo en
mundo que se hace desde occidente y que se ellas las semillas de lo que puede ser decisivo
relaciona con una singular idea del tiempo en el futuro. El “todavía no” es la manera en
y el espacio. Para ello, propone expandir que el futuro se inscribe en el presente y lo
el presente (sociología de las ausencias) y expande(10).
contraer el futuro (sociología de las emer- La traducción que propone Santos(10) se
gencias), y así crear la situación témporo- basa en la imposibilidad de una teoría uni-
espacial necesaria para conocer y valorizar versal. La traducción debe permitir la comu-
las experiencias de los territorios y evitar el nicación e inteligibilidad recíproca entre las
desperdicio de prácticas singulares que no experiencias, sin desconocer lo subalterno en
pueden ser interpretadas por una teoría ge- cada una de ellas, así como sus componentes
neral, pero sí traducidas sin que pierdan su artesanales no replicables. Ese proceso de tra-
singularidad(10). ducción incluye tanto teorías como prácticas
La sociología de las ausencias propone que precisan deconstruir las epistemes euro-
ampliar el presente, uniendo a lo real exis- céntricas, coloniales y neocoloniales que
tente lo que le fue sustraído por la razón y producimos y/o reproducimos consciente y/o
produjo un desperdicio de experiencias. inconscientemente. Lo cual requiere no solo
Busca expandir el campo de las experiencias un trabajo técnico, sino también un trabajo
sociales disponibles y multiplicarlas a través emocional, político e intelectual que nos
de la ecología de los saberes. Se propone lleve a preguntarnos sobre ¿qué traducir?,
transformar lo ausente en presente, los im- ¿entre qué?, ¿cuándo?, ¿quién traduce?, ¿con
posibles en posibles y así volver reales expe- qué objetivos?(10).
riencias alternativas a las hegemónicas. Esto El trabajo cotidiano en el territorio es
requiere sustituir la monocultura del saber centralmente micropolítica, y en ella par-
por una ecología de saberes que libere las ticipan los trabajadores a través del trabajo
prácticas sociales de su carácter residual, y vivo en acto, por el cual tienen la potencia-
permita abrir espacios a las posibilidades de lidad de inventar sus cotidianos a través de
diferencias, que reconozca la multiplicidad y apuestas(65,66). Para las especificidades téc-
diversidad de prácticas sociales, y recupere lo nicas que el territorio requiera, los equipos
local al desglobalizarlo. La sociología de las deberán contar con apoyo especializado
ausencias es un conocimiento argumentativo matricial(99). En síntesis, se propone com-
que más que demostrar persuade, convence, primir el futuro para ampliar el presente y
no es racional, es razonable(10). así tener más acción y menos planificación,
La sociología de las emergencias se es decir, menos predicción y más apuestas,
propone expandir el campo de las experiencias lo que significa más acción centrada en el
168
fundar y menos discursos centrados en el fun- Los territorios son un campo fértil para
damentar. Todo ello exige hacer presente al las preguntas. Sin embargo, repetimos las res-
presente, más “tiempo ahora”, más “todavía puestas, tanto en las prácticas como en los
no” y más procesos. discursos. Se dice que hay dos formas de fra-
casar: pensar sin actuar y actuar sin pensar, y
no es infrecuente que ambas situaciones se
PARA SEGUIR PENSANDO cumplan. Dejamos de pensar. ¿Por qué?(15).
¿Podremos permitirnos el ejercicio de las
preguntas para volver a pensar?
Vivimos tiempos paradojales: mientras, Es necesario entender que no hay un
por un lado, nos recorre un sentimiento de método ni una técnica para intervenir en el
urgencia por cambiar la realidad y recla- juego social del territorio. Este texto expresa
mamos que es necesario hacer algo ya, por el esfuerzo por salir de los modelos raciona-
otro, hay un sentimiento casi opuesto acerca listas que dominan las formas de trabajar y
de que las transformaciones que necesi- de pensar lo social, para pasar a dinámicas
tamos son a largo plazo, relacionadas a di- marcadas por el juego, el devenir y la in-
mensiones culturales, civilizatorias. Es decir certidumbre que son propias de lo social.
que no es posible cambiar todo ahora y no Desde allí nos ubicamos para poder finalizar
basta con tomar el poder; por el contrario, este trabajo de una manera abierta, sin fór-
es necesario transformar antes este Estado mulas ni recetas, y con más preguntas que
moderno, cuya crisis es producto del neoli- al momento de comenzar a escribirlo. Solo
beralismo. Se trata, de crear o refundar otro nos acompaña la certeza de la necesidad de
Estado sin olvidar la historia, en un proceso volver a pensar en salud más allá de lo bio-
de prácticas fundantes en las instituciones y médico, y así encontrarnos con las preguntas
en el territorio(10,32,50,100), ya que el descrédito que conforman ese juego infinito que cons-
sobre los programas no implica el descrédito tituye lo social como un todo(101).
de los problemas en el territorio(10).
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Recibido: 19 de febrero de 2015 | Versión final: 14 de abril de 2016 | Aprobado: 3 de mayo de 2016
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SALUD COLECTIVA. 2016;12(2):149-171. doi: 10.18294/sc.2016.976

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Los intelectuales son, en cuanto

Salud Colectiva | Licencia Creative Commons Reconocimiento — No Comercial 4.0 Internacional | BY - NC

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Figura 1. Las limitaciones de la planificación: No es casual que los programas predo-

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un resultado). Acciones orientadas a política neutra y universal, y así transforma

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habitan(5). Milton Santos, geógrafo bra- Recuperamos el territorio, no desde una

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La idea de tiempo no debe confundirse normativa requiere, para su cumplimiento,

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no se trata de culturas a doblegar ni de te- En la lógica de la planificación-progra-

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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 7. Santos M. Por uma geografia nova: Da crítica

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