Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
GUIA 0001
SARA PÉREZ
ESTUDIOAVELLANA.COM
Bienvenida! RETOMANDO LA ILUSIÓN
Sea cual sea el proyecto que tengas entre manos, puede que ni haya
nacido o puede que esté estancado o quizás te aburra
profundamente. Para ese proyecto quiero volverte a ilusionar.
Así que antes de nada, elige ese proyecto con el que vas a volver a
encontrarte. Aprender inglés, comenzar una tesis, un blog, lanzar un
producto, comprarte una casa, organizar el despacho, tú sabes mejor
que nadie que necesitas.
No tienes que aplicarlas todas, con que elijas tres de ellas ya habrás
hecho más que el resto, ya notarás una nueva ilusión, un toque
mágico.
ESTUDIO AVELLANA
REFLEXIONES.
¿POR QUÉ LO HACES?
Los porqués mueven el mundo, la razón de por que haces algo, el fin último, es lo
que normalmente te hace seguir y luchar. Y eso querida, a veces hay que
visualizarlo y recordarlo.
Si te dejas llevar por el día a día tu razón última quizás se nuble, ya no sabrás
porque lo haces, simplemente te dejas llevar por la marea, por las tareas. Piensa
que todo lo que estás haciendo es por algo, por alguna razón, búscala.
Encuentra tu gran PORQUÉ del proyecto!
Por ejemplo, cuando comencé a estudiar inglés reconozco que había días que no le veía el
sentido a tanto esfuerzo, a tantas horas de trabajo. De vez en cuando necesitaba
recordarme porque había decidido que esa era mi prioridad y tenía que conseguir
aprenderlo en menos de seis meses: alcanzar el trabajo de mis sueños. En todas las
entrevistas me pedían el idioma.
Así que en cuanto me sentía un poquito decaída, volvía a visualizar mi gran porqué. Me veía
en esa gran empresa, trabajando en lo que me gustaba, lo visualizaba.
Soy una tía muy visual, siempre lo he sido. Incluso cuando estudiaba
necesitaba fotos, colores, notas que me hicieran recordar mejor la
lección. Créeme una foto puede hacer que cambie tu energía totalmente
cuando te pongas con tu proyecto.
Busca por Internet o en alguna revista esa imagen o foto que se acerque
lo más posible a ese fin último que tiene tu proyecto. ¿Conseguir vivir en
un chalet precioso? ¿Llegar a tener tu propia consulta? ¿Poder vender tus
productos?
También hay que reflexionar sobre otras razones que están dentro de tu cabecita
linda. ¿Te da miedo dar el primer paso? ¿No te gusta hacer esa tarea? ¿Qué te está
frenando?
Coge papel y boli y empieza a contestar a estas tres preguntas, sé sincera contigo
misma, nadie te va a leer. Siempre hay algún factor (tonto o no) que hace que no
avancemos y nos sintamos desmotivadas.
Y ahora a buscar soluciones claro, sino no sirve de nada tanta reflexión Avellanera.
¿Qué tengo que hacer para salvar esos primero obstáculos? ¿Pedir ayuda a
alguien que sepa? ¿Delegar ciertas tareas que me dan miedo? ¿Cambiar de
proyecto porque realmente no lo quiero hacer?
Por ejemplo, cuando comencé el Blog Estudio Avellana tenía claro que quería hacer las
cosas diferentes desde el principio. Yo siempre había trabajado con Blogger, pero esta
vez quería probar Wordpress. Detecté que este era un primer freno para mí que hacía que
no quisiera empezarlo, aprenderlo desde cero, entender cada funcionalidad.
¿La solución? Un par de consultas a amiguetes que entendían del tema, un día buceando
por Internet y los miedos se habían ido… y tenía un blog recién estrenado!
Tengo un lema: Siempre hay que dar el 120%. No vale con hacer bien tu
trabajo, ofrece siempre un extra! Algo muy tuyo, algo que sorprenda, que
aporte y sobre todo que no te pida nadie.
Esto refresca tu trabajo y además conseguirás mejorar tu reputación, la
confianza y te diferenciarás del resto, ¿ya has elegido ese 20% adicional?
ESTUDIO AVELLANA
PLANNING.
OBJETIVO CONCRETO
Sea de lo que sea el proyecto, márcate un objetivo, aunque sea solo para ti,
no hace falta que lo sepa tu jefe.
Trata que sea lo más concreto posible, y mejor con un número. Así podrás
comprobar en todo momento (de manera objetiva) si ya lo has alcanzado o
te queda todavía por recorrer. Sé realista, tampoco te desmotives nada más
empezar por fa please!
Por ejemplo, cuando presenté mi tesis de fin de máster, mi objetivo era ser la mejor
de toda la clase. ¿Ambiciosa? Sí, puede ser, pero sabía que podía conseguirlo! Tenía
que sacar un sobresaliente, no me conformaba con menos.
Así que trabaje duro durante meses con ese objetivo en mente, y finalmente lo
conseguí. Es increíble lo que tu mente y cuerpo pueden hacer cuando te crees tú
misma que puedes conseguirlo…
Como cualquier objetivo que te plantees en la vida, siempre tiene que haber
una fecha tope. Es más, esto motiva para ir planteando mini retos en tu
proyecto, con diferentes fechas a la vista.
Elige una fecha ya, márcala en rojo en tu calendario, y piensa cómo vas a
conseguirlo. Si no te pones un tiempo de realización lo irás dejando y
dejando, ¿otro proyecto más abandonado? No!
Por ejemplo, esta guía. Este mini proyecto, tenía una fecha tope en mi calendario. Y
había que terminarla sí o sí. Ya no importaba lo que habría avanzado antes, ahora
había llegado el momento de terminarla para ese día.
Y me senté, y me puse a escribir. Tal cual. A veces la sensación de fecha o urgencia es
buena, al menos para ponerse por fin manos a la obra!
Soy una mujer de hábitos, y creo que es el secreto del “éxito” de muchos
profesionales. Casi nada llega con un atracón, o de la noche a la mañana,
llega después de muchos pequeños pasos cada día.
Además, esto lo hace todo mucho más fácil, incluso si es un proyecto que te
da pereza! Trata de ayudarte con alguna herramienta, como una cuadricula
donde cada día taches que has realizado esa tarea del día o una nota en el
frigorífico que te recuerde que tienes que hacerla.
Lo idóneo, es que sea siempre a la misma hora, así te será más fácil crear un
nuevo hábito.
Por ejemplo, cuando me propuse aprender inglés, tenía otros mil proyectos a la vez.
No podía dedicarme solo a eso (aunque yo sabía que en aquel momento era mi
prioridad!). Como sabía que un idioma no se aprende de la noche a la mañana, fui
dando pasitos poquito a poco.
Reserve una hora al día, por la tarde, para dedicarlo solo al inglés. Además, para no
aburrirme, cada día me centraba en un área diferente: un día escuchaba música, otro
repasaba la gramática, otro leía… y voilà! El hábito dio sus frutos después de varios
meses
Puede que una parte que te esté desmotivando sean esas tareas que odias. Y
sí Avellana, lo siento, pero siempre las habrá en todo proyecto. Pero tú vas un
paso por delante y las vas a localizar.
Escribe en un papel todas esas tareas del proyecto que no te gustan o que
odias o que te aburren. Aquí tienes dos opciones: delegarlo a alguien o
automatizarlo todo lo que puedas. Eres muy creativa, lo sé, seguro que ya se
te están ocurriendo ideas!
Por ejemplo, una de las tareas que me quitaba mucho tiempo y energía con uno de mis
clientes era la estrategia en Twitter. Además, realmente no veía resultados, en este caso
concreto no merecía la pena perder tanto tiempo en esta red social.
Para no salirme directamente y abandonarla (pero si centrarme en otras más
importantes y rentables) automatice todo. Cada vez que publicaba en Facebook e
Instagram se publicaba también en Twitter. Una tarea menos, y a centrarse en lo
importante.
ESTUDIO AVELLANA
HERRAMIENTAS.
UN ELEMENTO DE PAPELERÍA SOLO PARA ÉL
Esta idea sabías que llegaría! Seguramente si me estás leyendo, si formas parte
de esta comunidad Avellana es porque la papelería te gusta.
¿Ya has elegido tu proyecto verdad? Pues ahora elige un elemento de papelería
solo para él. Escoge una carpeta, archivador, cuaderno, clipboard, funda de
plástico… Da igual, pero necesitas algo físico con lo que empezar (o devolver la
ilusión).
Por ejemplo, cuando trabajaba en una multinacional francesa, cada producto que
lanzábamos tenía su propia carpetita. Con sus datos, sus presentaciones, toda la
información que necesitaba para tenerla a mano. El simple hecho de releer esas hojas de
plástico ya me hacía ilusión.
Si es que con muy poquito podemos ilusionarnos de nuevo…
Por ejemplo, cuando abrí el blog y elegí una carpeta con fundas para ir guardando
todo lo relacionado con él, la llené de pegatinas. También, coloqué en la portada el
logo, añadí unos separadores por temáticas y unos toques de washi tape.
Ya tenía mi carpeta personalizada, y lista para llenarla de ideas, papeleo,
imprimibles… Comenzaba la aventura en ese mismo momento!
Por ejemplo, cuando tengo mini proyectos entre manos (como esta guía, lanzar un
producto, un sorteo, escribir un artículo…) consulto mi Evernote donde tengo mil
ideas apuntadas.
Si me siento bloqueada, imprimo esas notas y comienzo a analizarlas, a
subrayarlas, a realizar notas a lápiz. Esto me ayuda a pensar, a tener ganas de crear
cosas bonitas.
ESTUDIO AVELLANA
ENTORNO.
FORMACIÓN PARA MOTIVARSE
Por ejemplo, cuando empecé a tener clientes con servicios de Marketing Digital me
di cuenta de que el diseño me encantaba. Quería realizar visuales realmente
atractivos y lanzar campañas lo más profesionales posibles, así que me motive con
un curso de Photoshop.
A partir de ahí no he dejado de utilizarlo, de aprender nuevos truquis y me ha abierto
las puertas a más clientes. Todo lo que te puedas formar hoy, te servirá en el futuro
para algo.
Por ejemplo, con Estudio Avellana, no paro de leer libros relacionados con
mi área para aprender y para poder enseñarte un montón de cositas.
Para motivarme, reservo justo la hora antes de dormirme para ir
avanzando. Relajada, con mi tablet en mano y una libreta en la mesilla,
me dedico a eso simplemente, a leer y a aprender.
Te propongo que crees una carpeta nueva para ese proyecto a empezar,
ese simple hecho conseguirá que sientas que has empezado. Personalízalo
con un bonito icono, y guarda todo lo que necesites.
Si ya tiene carpeta, dedica unos minutos a revisarla, a limpiarla, a eliminar
lo que no te sirva. Te tienes que sentir cómoda con ese huequito para el
proyecto, ya que pasarás muchas horas accediendo a esa carpeta!
Por ejemplo, cuando tuve que ponerme a buscar un nuevo empleo lo primero que hice
fue una carpeta de CV. Y no solo guarde el Curriculum, cartas de presentación y todo lo
que podía ir necesitando, también diseñe un Excel.
En este Excel comencé a registrar a los contactos, a quién había enviado el CV, las
fechas… Este simple documento me dio la sensación de empezar realmente.
Sentirse estancado a veces nos alerta de que tenemos que movernos. ¿Has
probado a trabajar en otro lugar? Si trabajas en casa, prueba un día con tu
portátil en el sofá para dedicarte a ese proyecto. Y si trabajas en una empresa,
prueba a leer alguna documentación en la calle o en alguna sala de reuniones.
El simple hecho de cambiar, te airea y despeja tu mente. Puedes asociar un lugar
diferente a ese proyecto en concreto (y así no te recuerda a otro trabajo o a
alguna tarea que te guste menos).
Por ejemplo, me he dado cuenta que detecto mucho mejor los errores y faltas de escritura si
leo desde el móvil. Esto me sirve para cambiar un poquito de aires, irme a la cocina con el
móvil y repasar los posts o los artículos. Y ya de paso, me tomo un dulce ;)
A veces nos desmotivamos o nos venimos abajo porque sentimos que nadie
nos comprende o no tenemos con quién desahogarnos. Tu entorno no tiene
porque tener los mismos intereses o preocupaciones que tú, por eso tienes
que buscarlo!
Prueba a encontrar comunidades afines a ti en las redes sociales, blogs con
los que interactuar, ferias, eventos… Piensa que siempre habrá alguien en la
misma situación que tú! (O que ya lo haya pasado). Esté organizando su boda,
aprendiendo un nuevo idioma, lanzando un negocio…
Por ejemplo, cuando empecé en el mundillo digital las redes sociales eran algo
anecdótico y había muy poquitos blogs que existían. En mi entorno tampoco estaba de
moda eso de que las empresas fueran digitales y estuvieran en las redes.
Acudir a eventos relacionados con el tema me sirvió para compartir mis
preocupaciones y debatir sobre nuevas ideas.
Por ejemplo, para mí las tarjetas de visita fueron ese clic que necesitaba. Cuando
las recibí en casa, con mi nombre, mi correo nuevo y mi logo, fui consciente de
que estaba empezando algo nuevo. Algo mío.
Ah! Y se me olvidaba, tienes que empezar mañana mismo por alguna de las ideas, sea
cual sea, este es el primer requisito
Espero que hayas disfrutado con mi guía, y sobre todo, te vuelvas a ilusionar con ese
proyecto. Yo te doy las gracias, porque por ti yo sigo ilusionada con el mío.
Te espero por Estudio Avellana, con muchas ideas para planificar tus proyectos y
organizar mejor tu vida creativa. Cualquier cosita, duda, sugerencia, opinión, estaré
encantada de charlar contigo a través de mi email sara@estudioavellana.com o por las
redes sociales!