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La corbeta “Descubierta”
La corbeta “Descubierta”
El acorazado Richelieu:
Un gigante olvidado, el acorazado Richelieu y la Segunda Guerra Mundial
Introducción
Su nombre se tomó en homenaje a los antiguos y
pequeños buques de dos palos que artillaban una úni-
ca batería, en general, no superior a 20 piezas, que
El concepto moderno de corbeta se gestó en los durante la época de la navegación a vela realizaban
despachos del almirantazgo británico durante labores de exploración así como de protección a los
los complicados años de la Segunda Guerra Mun- mercantes que surcaban las líneas comerciales in-
dial como fruto de las necesidades que surgie- tercontinentales hostigados por piratas y corsarios
ron de mantener abiertas las imprescindibles ru-
tas comerciales marítimas de la metrópoli con Para servir de escolta a dichos convoyes se preci-
el resto del mundo, pues sólo a través del mar saba un tipo de buque, económico de construir para
llegaban a ésta todo tipo de suministros nece- abordar su producción en masa, con unas condiciones
sarios para la supervivencia del país y el man- marineras aptas para la navegación oceánica y equi-
tenimiento del esfuerzo bélico como cereales pado con un armamento adecuado para la lucha anti-
para alimentar a la población civil, materias submarina así como para contrarrestar amenazas aé-
primas para su industria, combustible, armamen- reas. Su velocidad no obstante, no tenía por qué
to y, una vez declaradas plenamente las hosti- ser muy elevada dado que el andar de los mercantes
lidades entre los Estados Unidos y las fuerzas a proteger no superaba en el mejor de los casos los
del Eje, la llegada de ingentes cantidades de doce o catorce nudos
tropas que se fueron concentrando por todo el
país hasta el asalto al Muro Atlántico de Hit- Estas pequeñas pero solventes unidades se popu-
ler a partir del crucial Día D, aquel histórico larizaron en las filas de otras marinas aliadas co-
6 de junio de 1944 mo la canadiense y el concepto pronto evolucionó al
de “destructor de escolta” desarrollado por la US
Todo el transporte se organizaba en convoyes Navy ante la necesidad de dar protección a buques
de buques mercantes agrupados en grandes forma- más veloces que los mercantes como los de su flota
ciones debiendo ser escoltados por unidades de acorazados y especialmente, a la joya de la co-
provistas de medios antisubmarinos ya que gran rona de cualquier armada, los vitales portaaviones
cantidad de ellos fueron víctimas, especialmen- que marcaron desde entonces el inicio de las opera-
te durante la primera mitad del conflicto, de ciones aeronavales, la guerra moderna en el mar. En
los submarinos alemanes que atacaban con la este caso, se trataba de navíos de mayor porte, ar-
táctica conocida como manadas de lobos, y que mados con una potente combinación de medios de gue-
le costó a los aliados, un enorme precio en vi- rra antiaérea y antisubmarina, amén del ya mencio-
das humanas y millones de toneladas hundidas nado incremento de velocidad, alcanzando fácilmente
por la kriegsmarine los treinta nudos
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La clase Fletcher de destructores de escolta estadounidenses, fue una da las más populares de las proyectadas
durante la Segunda Guerra Mundial. Muchas de estas unidades acabarían integrándose en las flotas de países aliados
como fue el caso de los que llegaron a conformar la 21ª Escuadrilla de Escoltas conocidos popularmente como los
“cinco latinos” En la imagen, el Alcalá Galiano con su elegante estampa cabalgando las olas
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Para entender la génesis del proyecto de las el hecho requería, finalmente el Almirante Excmo.
corbetas clase Descubierta, tenemos que acudir Sr. D. Salvador Moreno firmará la autorización para
a los tableros de dibujo de los ingenieros que abordar el desarrollo de unos buques que vinieran a
comenzaron a diseñar los guardacostas tipo Ri- atender la reiterada petición en el ya lejano y con-
gel, paradigma del largo periplo que debía re- vulso año 1943
correr cada proyecto de desarrollo que nuestra
industria naval se proponía realizar en aquella Tras diversos estudios y conside-
época víctima de sus propias limitaciones, y raciones presupuestarias, se resol-
que conducía a los arquitectos navales y a los vió concebir 6 corbetas de propul-
astilleros, a continuos callejones sin salida sión diesel de diseño íntegramente
obligando a variar una y otra vez los diseños español, siendo ordenadas oficial-
planteados, lo que a menudo provocaba que que- mente tres años más tarde
daran sólo en eso, apenas unos planos, unos
cálculos anotados en carpetas, unos presupues- Serían necesarios otros tres años
tos absolutamente inviables, como fue el caso más para definir los detalles cons-
de los mencionados guardacostas, o a continuos tructivos y por fin, en 1949, las
retrasos en la construcción y entrega, permane- seis unidades mencionadas verán la
ciendo los buques tantos años en la grada, que luz, de momento sólo sobre el pa-
cuando por fin eran lanzados al agua, resulta- pel, con los nombres de Descubier-
Otra interesante vis-
ban unidades ya obsoletas ta de la “Descubierta”
ta, primera de la serie y que como
deslizándose magestuosa- marcan los cánones y costumbres,
mente al mar por la gra-
La complicada situación para gestionar ade- da inclinada nº 4 de los
dará nombre a la misma, Atrevida,
cuadamente el control marítimo de las provin- astilleros de la Ciudad Princesa, Diana, Nautilus y Villa
Departamental
cias españolas de ultramar, especialmente en lo de Bilbao
referido a Guinea Ecuatorial y Sáhara Español,
condujo a que la Dirección General de Marruecos Se pensó también en la posibilidad de que mien-
y Colonias elevara al Ministerio de la Marina, tras la flotilla integrada por estos modestos pero
repetidas solicitudes de equipamiento para aten- resolutivos navíos, operarse en misiones en el Medi-
der como convenía tan importante misión para el terráneo, los cañoneros clase Pizarro, ya reconver-
interés nacional tidos en fragatas, harían lo propio con nuestros in-
tereses en el Atlántico; esas eran en principio, las
Ante la insistencia y considerando efecti- directrices marcadas por el Estado Mayor de la Arma-
vamente, la evidente necesidad y atención que da (EMA)
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Desplazamiento: 951 Tn
Eslora: 75,56 m
Manga: 10,20 m
Puntal: 5,20 m
Calado: 4,08 m
Propulsión: 2 motores Diesel de 1.500 CV ca-
da uno. 2 hélices
Velocidad: 16 nudos (máxima 18,5 nudos)
Autonomía: 8000 millas a 12 nudos
Dotación: 115 hombres
Se decidió que la artillería principal la inte
Armamento: 1 cañón de 105 mm; 12 ametralla- grara un montaje del cañón naval de 105 mm seme-
doras antiaéreas de 20 mm, en tres montajes jante al de la imagen, profusamente utilizado en
los buques de la kriegsmarine. En ella se observa
cuádruples; 4 morteros; 1 varadero lanzacar- a los sirvientes del mismo durante un ejercicio
gas de profundidad de adiestramiento en aguas del Mar del Norte
Alzado y planta del proyecto final aprobado en 1949 tras largos años de desarrollo
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su construcción
porque el vertiginoso desarrollo en la tecnología
de guerra producido en las armadas de las potencias
participantes en el recién finalizado conflicto mun-
dial, dejaba obsoleto cualquier intento innovador
El 8 de marzo de 1946 se firma el decreto de por parte de nuestros arquitectos navales
autorización por el que se encargan las seis
unidades previstas al Consejo Ordenador de
Construcciones Navales Militares, y que en 1947
cambiaría su nombre por Empresa Nacional Bazán
de Construcciones Navales Militares, S.A., fun-
dada por el gobierno del general Franco, so-
ciedad estatal creada a iniciativa del Insti-
tuto Nacional de Industria; a lo largo de las
décadas en las que permaneció en funcionamiento
llegarían a construirse más de 130 buques tanto
militares como civiles para el mercado nacional
e internacional, lo que llegaría a convertir a
la industria naval española en la referencia
mundial de calidad y tecnología que hoy es per-
sonificada en la heredera de la ”Bazán”, la ac-
tual Navantia Otra curiosa vista de la “Descubierta” alistándose para su bota-
dura. Se puede apreciar las largas quillas de balance de 22,5 mts
y las elegantes líneas de su obra viva que le conferían unas cuali-
Existían tres posibles ubicaciones para el dades marineras más que probadas
desarrollo del proyecto, pues el Consejo regu- De cualquier modo, estos buques presentaban unas
lador disponía de astilleros en Ferrol, Cádiz y características distintivas del resto de unidades
Cartagena, eligiéndose este último para el mis- integrantes de nuestra Armada resultando muy mari-
mo y asignando el 96 como número de construc- neros y capaces de soportar las más duras condicio-
ción para la Descubierta nes de mar pese a su relativo reducido tamaño (solo
75,5 metros de eslora) contando con una proa lanzada
Las distintas líneas de diseño mantenidas y quillas de balance de más de 20 metros que mejora-
por la DIC y los astilleros, así como las limi- ban en mucho tanto su hidrodinámica como estabilidad
taciones técnicas que a continuación se mencio-
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Para dificultar su detección visual presen- morteros lanzacargas y dos raíles desmontables
taban un perfil bajo con un largo castillo y para el fondeo de minas (cuando las necesidades
reducida superestructura en dos niveles, un operativas lo precisaran), así como paravanes
sencillo palo que disponía de cofa para el vi- de rastreo
gía y vergas para antenas de comunicación y su Dotación: 113
característica más distintiva: carecían de chi-
menea a fin de que el penacho de humo de los Una de las primeras dificultades que hubo que sal
gases de exhaustación no las delatara en la dis var para comenzar la construcción de las corbetas
tancia, siendo conducidos los mismos a través fue la de conseguir la licencia de fabricación en
de un complejo sistema de tuberías hasta la lí- España de los motores a la empresa suiza Sulzer
nea de flotación del navío, algo que provocó no Frères, pues tras la finalización de la guerra mun-
pocos quebraderos de cabeza a sus diseñadores. dial y hasta el año 1953, España estuvo sometida a
un férreo aislamiento internacional que abocó a la
Tras el largo y complicado proceso de dise- maltrecha economía nacional a la más estricta autar-
ño, la Descubierta quedó definida como sigue: quía con las implicaciones que en su debilidad aca-
rreaba a la hora de hacer frente a un proyecto tan
Desplazamiento: 995 Tn estándar, 1.101 p.c. ambicioso y que ponía en juego todo el músculo in-
Eslora: 75,50 m máx, 68,00 entre p.p. dustrial y técnico de la época. El modelo desarro-
Manga: 10,20 m llado fue construido en la fábrica de motores de
Puntal: 5,20 m Bazán Cartagena resultando finalmente óptimo para
Calado: 2,78 m estándar, 2,98 m p.c. cumplir satisfactoriamente las expectativas del di-
Propulsión: 2 motores Diesel Sulzer-Bazán seño sobre el papel, como por otra parte así se con-
tipo 6-MD/42-50 con 2 ejes y hélices cua- firmaría dada la longevidad de las últimas unidades
tripala cuya potencia conjunta sumaba los que causarían baja en la Lista Oficial de Buques de
3.200 bhp la Armada (LOBA) a principios de la década de los
Velocidad: 18 nudos 90 del siglo pasado, constituyendo así, los primeros
Autonomía: 3.450 millas a 18 nudos; 8.000 a buques de cierto porte de la Marina en ser propulsa-
12 nudos. dos por combustible diesel y no por combustión de
Combustible: 107 Tn de gasoil carbón utilizada habitualmente hasta entonces
Dotación: 115 hombres
Armamento: 1 cañón de 105 mm; 4 de 37/80 en La Descubierta arbola su quilla en la grada nº 4
montajes sencillos. En su amplia toldilla de la factoría de Cartagena en 1950. Allí serán
se contemplaba además la instalación de construidas finalmente cuatro de las seis unidades,
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haciéndolo las dos últimas en los astilleros ga- que por otro lado, fueron las dos únicas en ser en-
ditanos tregadas a la Armada bajo el diseño original, mien-
tras que las restantes fueron sometidas a importan-
tes reformas durante su construcción para ser moder-
nizadas bajo el plan de cooperación hispano estado-
unidense de 26 de septiembre de 1953. Hubo entonces
que regresar al concepto constructivo habitual con
el consiguiente aumento de pesos a pesar de lo cual,
no perdieron condiciones de estabilidad y navegación
demostrando de este modo que el diseño de los inge-
nieros había sido todo un acierto además de un lo-
gro tecnológico y conceptual de la industria naval
española
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en acción
período, y así, participaría en el desembarco de tro
pas de Infantería de Marina en Cabo Bojador a fin de
proteger el estratégico faro allí situado, hostiga-
do por tropas enemigas y en la vital operación de
Su entrada en servicio tuvo lugar en 1954 y abastecimiento desde el mar de los 7500 hombres
junto con su gemela, la Atrevida, nuestra pro- atrincherados en Sidi-Ifni que permanecieron sitia-
tagonista es destinada en un primer momento a dos por el enemigo hasta el mes de junio de 1958
la Base Naval de Canarias en labores de patru-
lla y vigilancia marítima fundamentalmente en- Resuelto el conflicto, por lo menos momentánea-
tre el archipiélago y las colonias continenta- mente, con la firma de los acuerdos de Angra de Cin-
les. Esta época será la que marcará su particu- fra del primero de abril, la Descubierta cambia su
lar bautismo de fuego al ser destacada en la teatro de operaciones navegando a las tropicales
defensa de la costa y como escolta a convoyes, aguas de la Guinea Ecuatorial Española, con la mi-
misiones éstas, tal y como se apuntó al princi- sión de sustituir al veterano buque Cánovas del Cas-
pio del presente ensayo, inherentes a su propio tillo
diseño conceptual, así como a otras más especí-
ficas en acciones de guerra:
Mapa de las operaciones
durante el breve pero decisivo
Efectivamente, desde octubre de conflicto, la guerra de Sidi
Ifni, durante los años 1957 y
1957 y hasta mediados del año si- 1958, que de alguna manera,
guiente, se desarrollan los gra- marcaría el principio del fin
de nuestra presencia en los
ves acontecimientos bélicos con protectorados africanos, fru-
el enfrentamiento entre el gobier to de las políticas de una épo-
ca anterior, la del reparto
no del general Franco y las tro- colonial entre las potencias
pas del Ejército de Liberación mundiales del siglo XIX, y del
que España, a pesar de ser ya
Marroquí por el control de los considerada como una nación de
territorios españoles del Sáhara segundo orden, se vería benefi-
ciada con el control de los
Occidental, Protectorado del Sur mismos. Llegaba la época de la
Escudo de los y Sidi-Ifni descolonización y el nacimien-
territorios espa- to de un sinfín de jóvenes na-
ñoles de Ifni en ciones.
África Occidental
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En aquellas aguas será testigo de algunos de día a día, las autoridades españolas ven imprescindi-
los últimos episodios de nuestra historia colo- ble organizar una operación armada de evacuación de
nial. En octubre de 1968 Guinea Ecuatorial se los nacionales del avispero guineano, iniciándose
independiza de la metrópoli española, si bien, lo que vendrá a denominarse como Operación Ecuador
a la ya vetusta Descubierta, aún le restarán
importantes y meritorios servicios que prestar
a la Armada, participando activamente en la
Operación Ecuador durante las eficaces y exito-
sas operaciones de evacuación en la primavera
de 1969 junto con el resto del operativo dise-
ñado por el mando naval
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Las labores diplomáticas son delicadas y com gado Manzanares decide dividir la fuerza para reali-
plejas de manera que la combinación del empleo zar dos operaciones en Bata y Fernando Poo, también
de la fuerza debe ser cuidadosamente planifica- conocida como Santa Isabel extremando el cuidado pa-
da. En febrero del año siguiente, una operación ra no enardecer aún más a la población y que la pro-
anfibia conjunta de tropas francesas y españo- pia operación se convirtiera en un baño de sangre,
las parte de Fuerteventura bajo el paraguas de así que el material y unidades de Guardia Civil, se-
un ejercicio de adiestramiento convencional de- rían embarcados en las playas sin presencia de tro-
nominado ATLÁNTIDA 69, integrado por el todavía pas de Infantería de Marina que permanecerían a bor-
poderoso crucero Canarias, el petrolero de flo- do y preparadas para un rápido despliegue mientras
ta Teide y los enormes transportes de ataque que la población civil que así lo deseara, era em-
Castilla y Aragón, a los que se les unirán ya barcada en cuatro buques mercantes desplegados a tal
en aguas de Guinea, la fragata Pizarro y la pro efecto.
pia Descubierta destacados de forma habitual en
Santa Isabel junto con el embarque a bordo de
secciones de Infantería de Marina de manera que
pudieran ser desplegadas con prontitud en cual-
quier situación que así lo demandara, como así
hubo de hacerse en varias ocasiones en las que
se destacaron trozos de desembarco del Pizarro
y de la Descubierta para proteger a la pobla-
ción civil que acudía a los muelles para su em-
barque en su triste regreso, teniendo que aban-
donar apresuradamente no solamente enseres y
propiedades sino los recuerdos de una vida en
tierras africanas
El petrolero de la Armada “Teide” jugó un papel fundamental en el de
Durante el mes de marzo, la situación se sarrollo de las operaciones abasteciendo de combustible en la mar a to-
das las unidades participantes de manera que ninguna de ellas tuvo que
agrava; Macías instaura la dictadura en el país abandonar el teatro de operaciones y mantener así el poder disuasorio
siendo asesinado el líder opositor Anastasio de una flota combinada dispuesta a intervenir en cualquier momento. Es-
pecialmente “convincente” resultaba la presencia del anticuado pero aún
Ndongo poderoso crucero “Canarias”, que con sus cañones de 203 mm podía batir
objetivos tierra adentro a 20 km de distancia
Ante el cariz que toma la situación, el man-
do operativo de la flota dirigido por el CN Del-
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Bibliografía
* BUQUES DE LA ARMADA ESPAÑOLA: LOS AÑOS DE LA POSTGUERRA
Juan Luís Coello Lillo, S.L. AGUALARGA EDITORES, 2000
* http://www.revistanaval.com
* http://escoben.blogspot.com.es
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