Nuestra Identidad

Lectura Bíblica: 1 pedro 2:9

Introducción:

¡¡ Buenas noches hermanos !! Cómo han podido darse cuenta el tema para esta noche
se titula: “Nuestra Identidad” pero ¿que es identidad? Es importante definirlo, así que el
diccionario expresa o define esta palabra de la siguiente forma: “Circunstancia de ser una
persona o cosa en concreto y no otra, determinada por un conjunto de rasgos o
características que la diferencian de otras.” ¿Interesante no ? Podemos entonces
parafraseando decir que identidad es poseer un conjunto de rasgos que nos determinan.
Esta noche Vamos a estudiar esos rasgos que determinan o caracterizan a un Cristiano,
Para ello he decidido hablarles de un personaje, un héroe de la verdad que dejándose usar
por Dios hizo una extraordinaria labor y es digno de tomar en cuenta y además es uno de
mis personajes favoritos, sin más preámbulo quiero que esta noche estudiemos la vida de
Martín Lutero y como con la ayuda de Dios es su vida llevó una Identidad Cristiana.

Desarrollo:
Martín Lutero nació en Eisleben, Sajonia Alemania 10 de noviembre de 1483. Nuestro
personaje provino de un humilde hogar, su Padre era minero y trabajaba con esfuerzo para
poder sustentar a su familia, siempre se esmeró por darle la mejor educación a su hijo
Martín, le enseñó del temor a Dios y constantemente oraba pidiendo a Dios que su hijo
siempre lo tuviera presente el nombre del Señor. Es importante resaltar que el libro del
conflicto de los siglos habla de este hombre como un hombre honrado, franco, inteligente,
temeroso de Dios que seguía con convicción lo que señalaba su deber sin importar las
consecuencias, su conciencia le hacía desaprobar las tradiciones y dogmas de la iglesia
católica que dominaba el mundo para esta época. El quería que su hijo fuera abogado pero
Dios tenía para él una gran misión aunque Martín primero tuviera que formarse como un
teólogo y fraile católico desaprobando así la voluntad de su padre y causándole
problemas a su relación.

La niñez de Martín estuvo llena de privaciones y necesidades, su primera educación la

recibió en una pequeña escuela que se encontraba a una distancia considerable de su
aldea y continuamente tuvo que cantar de casa a casa para así ganar un poco de dinero
para su sustento, una vida abnegada y la rigidez de la enseñanza de la época fueron
formando el carácter de nuestro personaje.

“Las ideas religiosas lóbregas y supersticiosas que prevalecían en su tiempo le llenaban de

pavor. A veces se iba a acostar con el corazón angustiado, pensando con temor en el
sombrío porvenir, y viendo en Dios a un juez inexorable y un cruel tirano más bien que un
bondadoso Padre celestial”.CS

A pesar de este panorama tan desalentador el siguió adelante estudiando, tenía sed de
conocimiento y un ingenio e inteligencia privilegiada.
 Cuando tenía 18 años ingresó a la universidad de Erfurt, allí su situación económica era
más favorable pues su Padre había podido con su laboriosidad formar una hacienda. Esto y
rodearse de buenas compañías, amigos provechosos borraron un poco los sedimentos de
tristeza que dejará en su carácter su primera educación. Se dedicó a estudiar los mejores
autores, atesorando con diligencia sus maduras reflexiones y haciendo suyo el tesoro de
conocimientos de los sabios. Aun bajo la dura disciplina de sus primeros maestros, dió
señales de distinción; y ahora, rodeado de influencias más favorables, vió desarrollarse
rápidamente su talento. Por su buena memoria, su activa imaginación, sus sólidas
facultades de raciocinio y su incansable consagración al estudio vino a quedar pronto al
frente de sus condiscípulos. La disciplina intelectual maduró su entendimiento y la actividad
mental despertó una aguda percepción que le preparó convenientemente para los conflictos
de la vida.CS54 130.3
El temor del Señor moraba en el corazón de Lutero y le habilitó para mantenerse firme en
sus propósitos y siempre humilde delante de Dios.