Existe la magia, ¿Existe la magia?, ¡Existe la magia!

Por Luis Iván de la Fuente

Miles de años atrás ha sido un tema que ha tocado la conciencia e

incógnita de los humanos. Desde los brujos de las tribus más
antiguas, pasando por el oráculo de Delphos en Grecia, la alquimia
en la edad media, las brujas perseguidas en la inquisición, los
Chamanes de América y Celtas, hasta el ocultismo, magia
ilusionista y trucos de entretenimiento.

¿Será una realidad o la necesidad del ser humano por creer en

fuerzas ocultas con poder sobre nuestras vidas y sobre las cosas?
Tal vez la magia es un nombre pobre para llamar a todo aquel
evento que no cuadra con nuestros modelos de razón y experiencia.
Magia ha sido un término tan manipulado en nuestro tiempo, que
el tan solo oírlo, nos hace pensar en charlatanería o fantasía.
Y ahora es más común llamarle a la magia: eventos sobrenaturales.

Resulta muy interesante como cinco personas pueden darle un

diferente nombre con un significado y connotación totalmente
diferente a un evento fura de lo posible. Por ejemplo, imaginemos
cualquier evento que la razón normal no puede dar explicación;
un religioso diría que es un milagro, un estudioso de lo paranormal
diría que fue una fuerza del más allá, un físico diría que fue una
manifestación de la física cuántica, un ateo diría que sólo fue un
acontecimiento del cual desconocemos su razón y un niño diría con
emoción que es magia. ¿Cuál será la verdad? O tal vez sea una
confusión de términos, siendo una misma fuerza y origen, como
Dios, que es llamado de muchas formas y entendido de diferentes
maneras.

El universo tiene muchas formas de funcionar, o tal vez sean pocos

principios manifestados de diferentes maneras. Una de las leyes
más profundas y magnas es que el universo sólo se compone de
dos elementos: energía e información. La energía cuando se
concentra se puede convertir en materia, y la información es lo que
hace que la materia sea una piedra o una rosa, una ardilla o una
ballena azul. A esta combinación de energía con información se le
puede llamar: un campo infinito de potencial puro, y es aquí donde
todo puede pasar en una infinita cantidad de probabilidades y
sincronicidades.
La magia vive exactamente en este espacio, entre la materia y la
información en conjunto con nuestra atención y nuestra intensión.
El límite está en nuestra mente, influida por dos efectos: la mente
solo ve lo que cree que puede ver, y la mente solo puede hacer lo
que está educada para hacer. Cuando juntamos atención (un deseo)
y le imprimimos intensión (voluntad), las leyes del universo
comienzan a trabajar para manifestarlo, lo cual visto de otra
manera es el acto de configurar o unir información con energía.
Por lo que me hace preguntarme nuevamente, si la magia existe o
no…