Sie sind auf Seite 1von 4

¿Leer poesía o escuchar poesía?

Cualquiera de estas puede ser un


ejercicio placentero si aprendemos a apreciar los contenidos y los
elementos formales que la hacen posible, tales como la medida, el
ritmo, la pausa, la rima y, claro está, los juegos de palabras. La poesía,
a simple vista, se diferencia de la prosa por su estructura, pero también,
por algo más importante: mientras que la prosa reproduce las formas
naturales y cotidianas del lenguaje, la poesía construye con el lenguaje
una realidad condensada o sorprendente, o que apele a las emociones
de quien escucha o lee.

:V

1
Los niveles de interpretación
Cuando te enfrentes a un poema por primera vez, léelo varias veces, aunque no
comprendas todo. Déjate llevar por los sonidos (si lo lees en voz alta), por el
ritmo, las repeticiones, la cadencia1. Identifica lo que te produce su lectura, ¿qué
estado de ánimo se desata en tu interior cuando lo escuchas? Toma notas de esa
primera impresión. No tiene que ser nada muy elaborado, algunas palabras que
definan lo que sientes o piensas en torno al poema.
Primer nivel de interpretación
Vuélvelo a leer, esta vez con todos los recursos que necesites, para hacer una
lectura académica del texto. Busca las palabras, los conceptos o las referencias
que no conoces o no entiendes. Luego, haz un ejercicio que se conoce como
prosificación. Consiste en convertir el poema en prosa: toma cada verso o cada
estrofa y conviértelos en cláusulas2 regulares. Observa este ejemplo de José Martí:
PRINCIPE ENANO
En prosa, este poema trata de lo siguiente:
Para un príncipe enano
se hace esta fiesta. Se anuncia celebración que elogia a un bebé,
Tiene guedejas rubias, que tiene mechones rubios y largos hasta los
blandas guedejas; hombros. Sus ojos, aunque son oscuros,
por sobre el hombro blanco
luengas le cuelgas. brillan tanto y están tan llenos de inquietud,
Sus dos ojos parecen que los hacen parecer estrellas. El niño es la
estrellas negras: persona más preciada e importante, como si
¡vuelan, brillan, palpitan,
fuera de la realeza, así que lo defenderá y
relampaguean!
El para mí es corona, protegerá.
almohada, espuela.

1
Cadencia: Se refiere a las combinaciones de ritmos, pausas y cortes en el verso; a la distribución del ritmo y
las repeticiones del sonido o del movimiento (en el caso de la danza).
2
Cláusula: es un conjunto de palabras que, formando un sentido completo, encierran una sola oración o
varias íntimamente relacionadas entre sí.

2
Notarás que la diferencia entre poesía y prosa tampoco estriba totalmente en la
disposición de frases cortas (versos) o en la belleza de las palabras utilizadas, pues
ambos textos describen hermosamente la apreciación a un hijo. Lo que distingue
a la poesía es su condensación, la búsqueda de la palabra perfecta que encierre
todas las palabras que naturalmente necesitaríamos para expresar lo que sentimos
o lo que queremos comunicar. Muchas veces, esa palabra perfecta se encadena a
otras melódicamente (ya sea de forma simétrica o asimétrica), de forma que
cuando lees en voz alta (con pausa y coherencia) verás cómo se despierta en ti un
sentido innato de musicalidad. ¡Estás haciendo el papel de poeta a la inversa!
Primero el/la poeta traslada realidades amplias y discursos largos a unidades
compactas, y tú como lector(a) revertirás el proceso para ver qué quiso decir.
Debes comprender que no hay una interpretación única y perfecta para cada
texto. Lo que logremos sacar del poema dependerá de los conocimientos
culturales que tengamos, y del grado de imaginación que pongamos en nuestra
lectura. La imaginación es importante a la hora de leer poesía, pues lo que quiere
el/la poeta es eso, que tu imaginación vuele como voló la suya cuando concibió
el poema.
Segundo nivel de interpretación
Luego de leer el texto y entender de qué se trata, conviene pasar a un nuevo nivel
de lectura. Es un poco más difícil, pues requiere mirar con una lupa, y saber un
par de cosas sobre lo que se conoce como lenguaje retórico o de figuras retóricas.
Recordemos que las lenguas humanas empezaron siendo unidades fónicas que
imitaban sonidos de la naturaleza, y, más tarde, unidades gráficas que intentaban,
por medio de símbolos, compactar una realidad. Si piensas en los textos
fundacionales de las civilizaciones (los mitos), antes que en prosa, los humanos
hablamos poesía.
Así que el lenguaje retórico es una de las muestras más significativas de nuestra
inteligencia como seres humanos: convertimos sonidos primitivos a la
complejidad comunicativa de hoy. Además, conocer los recursos que utiliza el
poeta para crear ayudan, sin duda alguna, a apreciar mejor el valor de cada pieza.
También, enriquece la interpretación. Las figuras retóricas son juegos,
combinaciones y patrones que el poeta usa para traducir la realidad tangible a una
no tangible, solo posible en el mundo de las ideas y la imaginación. Y ese mundo
es tan amplio como lo serán las posibilidades. Sería imposible dedicarnos a
estudiar todas las figuras retóricas, pero prestaremos atención a un grupo selecto
para discutirlas.

3
Figuras Retóricas
Recursos fonéticos
a. Aliteración: la repetición o combinación de sonidos en una misma frase
b. Asonancia: la repetición dentro del verso, de una misma vocal en sílabas
acentuadas
c. Onomatopeya: uso de sonidos de nuestro lenguaje para imitar sonidos no
lingüísticos.
Recursos sintácticos
a. Anáfora: repetición de una o más palabras al comienzo de la frase o del
verso
b. Epítome: repetición de una o más palabras al final de la frase o del verso
c. Anadiplosis: repetición de una palabra o más al final de un verso y al
comienzo del siguiente
d. Hipérbaton: alterar el orden sintáctico normal de las oraciones en el verso
e. Paranomasia: juego de palabras que consiste en utilizar dos palabras de
sonidos parecidos, pero de distinta significación
f. Retruécano: repetir en una frase los elementos de otra, pero en orden
inverso
g. Sinestesia: juego de palabras que consiste en desplazar un adjetivo de un
campo sensorial a otro.
h. Paralelismo: reiteración de la misma estructura sintáctica en versos
seguidos
Recursos semánticos
a. Comparación (símil): comparar un elemento real con otro mediante
un nexo gramatical explícito
b. Metáfora: comparación indirecta entre dos elementos
c. Metonimia: sustitución de un término por otro con el que guarda una
relación de dependencia o contigüidad
d. Antítesis: emplear palabras de significado opuesto
e. Gradación: una serie significativa ordenada de menos a más, o de más
a menos
f. Animalización: consiste en otorgar cualidades asociadas al reino
animal a objetos o personas.
g. Personificación: atribución de cualidades humanas a animales o seres
inanimados
h. Apóstrofe: invocación dirigida a una persona o cosa personificada
i. Hipérbole: exageración expresiva de una idea

Das könnte Ihnen auch gefallen