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Puntos a tratar
5) Explicación acerca del mundo de la vida. ¿Qué son las imágenes del mundo?
9) Actos ilocuionarios/perlocucionarios.
13) Medios de regulación en la sociedad: dinero (utilidad), valor real del entendimiento y
poder (eficacia).
Explicación claves
El positivismo significa el fin de la “teoría del conocimiento”, que pasa a ser sustituida por
una “teoría de las ciencias”.
Jurgen Habermas
La Reforma eliminó las barreras entre el clero, las órdenes religiosas y el estado laico. EL
Renacimiento fue el auge del humanismo, pone la herencia grecoromana a disposición de
una ciencia, una jurisprudencia y un arte emancipados de la Iglesia; allanó el camino para
el sistema jurídico moderno.
Las estructuras simbólicas del mundo de la vida se deforman a través del medio dinero y
del medio poder. Esta “deformación simbólica” tuvo que ver con tres revoluciones: la
Revolución industrial, la Revolución democrática y la Revolución educativa.
Las tres revoluciones cimentaron sus pilares en una sociedad legal, en tolerancia religiosa y
en la producción agrícola basada en el trabajo asalaridado, aspecto que generó una lucha
de tensión, una burguesía artesanal (orientación en función de necesidades) y una
burguesía mercantil (orientación en función del lucro).
Se puede nombrar a esto un proceso pro individualizado que capacita al individuo para
participar selectivamente según sus propios criterios y deseos
Se destaca que “En este aspecto de temas se refleja la filosofía programática de Horkheimer
de una ciencia social interdisciplinar” (Habermas, 2010:910).
La pretensión de validez son las razones que se manifiestan a favor de la verdad del
enunciado o de la eficiencia de la regla de acción. Un argumento parte de una razón o
fundamento (ground), es una manifestación problemática con un propósito, establecer una
pretensión de validez.
5) Explicación acerca del mundo de la vida. ¿Qué son las imágenes del mundo?
Habrá entonces una interpretación mítica del mundo que mediante la analogía el mundo
adquiere sentido; el mundo es controlado imaginariamente con base en fenómenos
correspondidos por poderes míticos. Se creará una realidad que será un juego de
perspectivas, una peculiar confusión entre un mundo humano (cultura) y un mundo no
humano (naturaleza).
Los procesos de entendimiento tienen como meta un acuerdo que cumpla las condiciones
de un asentimiento racionalmente motivado al contenido de una emisión o una
manifestación. El entendimiento es inmanente altelos humano. Ciertamente, lenguaje y
entendimiento no se relacionan entre sí como medio y fin. Pero sólo podemos explicar el
concepto de entendimiento si somos capaces de precisar qué significa emplear oraciones
con intención comunicativa.
Es dentro del lenguaje que los individuos efectúan un proceso de entendimiento mismo en
el que ninguno de los implicados tiene el monopolio de la interpretación. EL lenguaje es un
medio de comunicación que persigue el entendimiento; los actores para entenderse entre
sí persiguen cada uno determinadas metas. “La universalidad de la pretensión de verdad es
una apariencia” (Habermas, 2010:164). Lo que en cada caso se acepta como verdadero es
un asunto de convención. Es por medio de la crítica que hay interpretaciones alternativas.
7) ¿Qué es el proceso de racionalización?
9) Actos ilocuionarios/perlocucionarios.
Habermas retoma a Austin para explicar los actos locucionarios, los ilocucionarios y los
perlocucionarios; al primer tipo lo denominó Austin como el contenido de las oraciones
enunciativas, el hablante expresa un estado de las cosas; el segundo tipo, el agente realiza
una acción diciendo algo (afirmación, mandato, promesa, confesión; el tercer tipo busca
causar un efecto sobre su oyente.
Los puntos primordiales se dan en el caso de un acto ilocucionario pues éste permite la
autosuficiencia del hablante al efectuar la intención comunicativa, “debe entenderse en el
sentido de que la intención comunicativa del hablante y el objetivo ilocucionario que busca
conseguir se siguen del significado manifiesto de lo dicho” (Habermas, 2010:335).
En los actos perlocucionarios “Su sentido sólo podemos identificarlo valiéndonos de las
intenciones que persigue el autor y de los fines que se propone realizar […] Tales efectos
[perlocucionarios] se producen siempre que el hablante actúa orientándose al éxito y para
ellos asocie los actos de habla con intenciones y los instrumentalice para sus propósitos,
que sólo guardan una relación contingente con el significado de lo dicho” (Habermas,
2010:335.
Con el acto perlocucionarios el hablante no se sigue del contenido manifiesto del acto de
hablar; este objetivo sólo puede determinarse averiguando la intención del agente.
La razón instrumental es una razón “subjetiva”, explica desde el sujeto cognoscente y del
agente, pero no desde la perspectiva del objeto percibido y manipulado; el aparato
categorial de la razón instrumental está hecho para posibilitar a un sujeto el control sobre
la naturaleza, pero no para decir a esa naturaleza objetivada qué es lo que con ello se le
está inflingiendo.
El mundo de la vida mismo se cosifica, no solo la forma de pensar sino la forma de existir
de los sujetos. Hay una “peculiar asimilación de las relaciones sociales y de las vivencias
personales a cosas, es decir, a objetos que podemos percibir y manipular “Habermas,
2010:406).
EL individuo humano empieza pensando en términos enteramente sociales, se rige por una
satisfacción recíproca de intereses. El control social depende del grado en que los individuos
de una sociedad son capaces de asumir la actitud de los demás que se encuentran
implicados con ellos.
13) Medios de regulación en la sociedad: dinero (utilidad), valor real del entendimiento y
poder (eficacia).
Medios como el dinero y el poder pueden ahorrar en buena parte los costos que entraña el
disentimiento. Los medios de control sustituyen al lenguaje en funciones específicas, el
dinero, permite la generalización y transmisión de expresiones simbólicas que llevan
inscritas una estructura de preferencias.
Habermas elabora cuatro características básicas del medio dinero: 1) Es libre para gastar su
dinero en cualquier mercancía o combinación de mercancías disponibles en el mercado que
pueda obtener con ese dinero. 2)Puede elegir entre fuentes alternativas de suministro de
las mercancías deseadas. 3) Para comprar puede elegir el momento que estime oportuno.
4) Es libre para considerar los términos que en virtud de esa libertad de tiempo y fuente,
puede aceptar o rechazar o en los que puede tratar de influir en un caso concreto.
Las ciencias modernas sirven al progreso técnico pero no a la comprensión del mundo y de
sí mismo, de la que tienen necesidad los ciudadanos implicados en los procesos de la
comunicación.
Debido a una actitud objetivante se transforman las relaciones instrumentales lo mismo las
relaciones sociales que las relaciones intrapsíquicas. Lo intrasíquico es la constitución de
hiperpersonalidades construidas a base de “ciegas personalidades” percibidas como
destino. Los momentos postmodernos difieren de los modernos respecto a que “Las
histerias clásicas casi han desaparecido, el número de neurosis compulsivas decrece
drásticamente y en su lugar aumentan las perturbaciones narcisistas.
Hay un desencanto juvenil que proviene desde los años sesenta del siglo pasado donde los
medios de comunicación de masas han abierto espacios de opinión pública donde son los
mismos medios quienes jerarquizan el horizonte de comunicación y también le quitan sus
limitantes, cuestión que lo hace ambivalente.
Son respuestas entendidas como conflictos que pueden comprenderse como una
resistencia contra una colonización del mundo de la vida.
Resumen de la obra
Esta reflexión (la Teoría de la acción comunicativa) es una explicación acerca de los cánones
críticos de la modernidad y el racionalismo occidental que mediante un juicio basado en las
ciencias sociales según los fundamentos filosóficos post renacentistas define lo
cuestionable que el estado social es debido a costes culturales y psico-sociales en la
actualidad.
Este estado social cuestionable se define como una creación de una cultura pequeño
burguesa la cual basa en la Sociología su manifestación atómica a través de un tránsito que
se ha gestado de comunidad a sociedad debido a una racionalización cultural y social.
La racionalidad la entiende Habermas como una comprensión moderna del mundo y es un
aspecto que tiene que ve más con la forma que con el conocimiento, donde los sujetos
capaces de “lenguaje y de acción hacen uso del conocimiento” (Habermas, 2010:31).
Habrá entonces una interpretación mítica del mundo que mediante la analogía el mundo
adquiere sentido (relaciones de semejanza y de contraste); el mundo es controlado
imaginariamente con base en fenómenos correspondidos por poderes míticos. Se creará
una realidad que será un juego de perspectivas, una peculiar confusión entre un mundo
humano (cultura) y un mundo no humano (naturaleza).
El ser humano construye su mundo según lo interno y lo externo, “el mundo subjetivo
representa la totalidad de las vivencias a las que en cada caso sólo un individuo tiene un
acceso privilegiado” (Habermas, 2010:81).
La cultura se construye con base en una relación con al realidad “para los integrantes de
una misma cultura, los límites de su lenguaje son los límites de su mundo”, interpretar es
asimilar (Habermas, 1980:87). Teniendo en cuenta la cuestión elemental de las imágenes
del mundo entendemos que un retrato es “un ángulo de mira bajo el que la persona
representada aparece de determinada manera” (Habermas, 2010:87).
Las imágenes del mundo determinan lo que acaece en el mundo, fijan el marco categorial;
no pueden ser verdaderas o falsas; le dan sentido a la vida humana, posibilitan
manifestaciones susceptibles de verdad, por lo que se vuelve un carácter asegurador que
inmuniza a la verdad contra otras alternativas de interpretación, pero son una suposición.
Los sistemas de interpretación son una continua transición como procesos de aprendizaje,
con base en ello es que existe el mundo objetivo, el mundo social o el mundo subjetivo
(tradición cultural). Por medio de la crítica hay interpretaciones alternativas.
Las acciones sociales se orientan por valores culturales y estos últimos no cumplen función
expositiva. Es dentro del lenguaje que los individuos efectúan un proceso de entendimiento
“con pretensiones de validez que pueden ser reconocidas o puestas en cuestión”
(Habermas, 2010: 1354). Dichas acciones se llevan a cabo en un mundo objetivo que es un
conjunto de todas las entidades sobre las que son posibles enunciados verdaderos.
En básico señalar que todos estos planteamientos hasta ahora mencionados se sustentan
en la reflexión de pensadores como Husserl, Schütz, Wittgenstein, Winch, Heidegger y
Gadamer. El autor hace énfasis en la comprensión, misma que no es introducirse en los
estados mentales de un sujeto extraño, es decir, la comprensión no es empatía.
Hasta aquí se establece toda una comprensión lingüística que se direcciona en el ámbito de
la apropiación del lenguaje y cómo comunicamos ese conocimiento. En la comunicación
cotidiana el hablante actúa en la emisión de un contenido suponiendo parte de su
significado en el oyente: “una manife3stación nunca tiene significado completo por sí
misma” (Habermas, 2010:163)., por lo mismo: “La universalidad de la pretensión de verdad
es una apariencia” (Habermas, 2010:164), lo que en cada uno se acepta como verdadero
es un asunto de convención. Aquello que perdura como un “clásico” es lo que resistido la
prueba de la crítica histórica (Habermas, 2010:173).
Luego de la parte introductoria de su obra, Habermas retoma a Max Weber, para explicar
su idea de racionalidad con arreglo a fines que es puesta en práctica desde la sociedad viejo
europea, ésta última es a su vez un resultado de un proceso histórico-universal de
racionalización.
Por otro lado analiza el postulado de racionalización social de Marx, estudio que señala a
ésta como una imposición directamente con el despliegue de las fuerzas productivas.
Asimismo habla de Horkheimer y Adorno, llama a la Escuela de Fráncfort como una
interpretación weberiana. Al proceso de racionalización social lo denomina como el
aumento de racionalidad instrumental y estratégica de los contextos de acción.
(Respecto al proceso de Ilustración) “Todos los errores, en política y en moral, tienen como
base errores filosóficos que provienen a su vez de errores físicos. No existe sistema religioso
ni extravagancia sobrenatural que no se funde sobre la ignorancia de las Leyes de la
naturaleza (Habermas, 2010:188), según cita de Cordocet.
Por su parte, Max Weber reconstruyó los procesos de racionalización social viendo tal
progreso como una evolución de las imágenes religiosas del mundo. Luego, el otro lado de
la ciencia es que diversos fenómenos como el Renacimiento y la Reforma propiciaron
innovaciones técnicas que desde ese momento condujeron a una metodización de la vida.
Weber “entiende la ciencia moderna como un destino que hiciese pensar su poder sobre
la sociedad racionalizada” (Habermas, 1980:200).
Durante ese momento se funda la racionalidad práctica, los sujetos aprenden a controlar
su entorno, el individuo actúa de forma racional con arreglo a fines. El concepto de eficacia
en los medios racionales retoma fundamental importancia.
Ahora, Weber es crítico respecto a esta racionalización con arreglo a fines “<el empleo de
una determinada técnica, por ‘avanzada’ que sea no se decide lo más mínimo sobre el valor
estético de una obra de arte>” (Habermas, 2010:220).
Tanto Weber, como Habermas en su interpretación, ven esta evo0lución científica como un
aumento de complejidad, es decir, el uso de medios técnicos, sólo incrementa la ‘riqueza’
artística en el sentido de valor. Con respecto a una interpretación moderna del mundo, ésta
dependerá siempre de las imágenes del mundo que sigan vigentes y que “siguen todavía
ligadas a las formas de pensamiento mágico” (Habermas, 2010:224).
En otras palabras han sido las imágenes del mundo aquellas que determinaron la dirección
de la acción, una acción basada en intereses, pues estos dominan directamente la acción l
de los hombres. Comentario que es mencionado como crítica.
Todo este proceso antecede a la tesis de la pérdida de sentido que tanto Weber como
Nietzsche lo nombran nihilismo, éste último lo dramatiza, y Habermas no puede ser más
contundente al respecto: “En tal caso los últimos hombres’ de esta fase de la cultura podrían
en verdad aplicarse esta frase: especialistas sin espíritu, gozadores sin corazón, estas
nulidades se imaginan haber alcanzado una etapa de la humanidad nunca conseguida
anteriormente” (Habermas, 2010:291).
Por eso también el autor señala que “la medicina no se pregunta si la vida es digna de vivirse
y qué condiciones” (Habermas, 2010:295), esa falta de espíritu la reflejan cuestiones como
<Racionalización-relaciones medio-fin>, pues las ciencias dan respuesta a cuando
preguntamos qué hacer para dominar técnicamente la vida. “Dejan de lado la cuestión de
si debemos y queremos dominarla y de si en el fondo ese dominio tiene sentido”
8habermas, 2010:295).
Según el pensamiento weberiano habría que tomar lo anterior en consideración para darle
un enfoque diferente, por lo que a “acción” se le definió como comportamiento humano.
Un agente en el mundo de la vida tendría fines de acción que tienen que ver con el éxito,
que es la realización en el mundo de estado de cosas deseado. Es ejercerla mediante acción
u omisión calculadas. “A una acción orientada por el éxito la llamamos ‘instrumental’”
(Habermas, 2010:331).
Ambos aspectos determinan todo tipo de acuerdos, mismos que son alcanzados
comunicativamente y el acuerdo tiene que tener una base racional, además, “no puede
venir impuesto por ninguna de las partes, ya se a […] instrumentalmente…. Ya sea
estratégicamente” (Habermas, 2010:333).
Acto ilocuionario, significa lo dicho, acciones teleológicas, intenciones del agente; efectos
perlocucionarios, el hablante actúa orientándose al éxito. Es un asociación de actos de
habla, con intenciones y los instrumentaliza para sus propósitos.
“Esto sólo podría evitarse si lográsemos mostrar que el empleo del lenguaje orientado al
entendimiento es el modo original, frente al que el entendimiento indirecto la comprensión
indirecta, el dar a entender o el hacer que el otro entienda, se comporta de forma
parasitaria” (Habermas, 2010:334).
El objetivo perlocuionario no se sigue del contenido manifiesto del acto de habla, se busca
un efecto, es algo externo a lo dicho. O Bien: “los fines perlocucionarios son algo que el
hablante, si quiere tener éxito, no puede dar a conocer, mientras que los fines
ilocucionarios sólo pueden conseguirse haciéndolos expresos” (Habermas, 2010:338).
Entonces, los objetivos perlocuionarios no pueden “confesarse” como tales, son acciones
estratégicas encubiertas; uno de los participantes por lo menos se comporta
estratégicamentre “mientras engaña a los demás sobre el hecho de no estar cumpliendo
las presuposiciones que en el caso normal son necesarias para conseguir los fines
ilocucionarios” (Habermas, 2010:339).
Las perlocuciones son asimetrías y restricciones, por el contrario, en las ilocuciones todos
los participantes armonizan entre sí sus planes individuales de acción sin reserva alguna.
Ejemplos ilocucionarios: nombrar a alguien, amonestar, presentar, revelar; no hay efecto
perlocucionario alguno. Un fin perlocucionario se logra cuando el hablante oculta que actúa
estratégicamente.
Por lo tanto: “Cuento, pues, como acción comunicativa aquellas interacciones mediadas
lingüísticamente en que todas los participantes persiguen con sus actos de habla fines
ilocucionarios y sólo ilocucionarios” (Habermas, 2010:334).
Desde este perspectiva, el hablante podrá entender el sentido (ilocucionario) si sabe las
intenciones del oyente. El hablante entabla con su imperativo una “pretensión” de poder a
la quien se somete el oyente cuando la acepta.
Las exigencias son manifestaciones tácticas de voluntad; las pretensiones de validez son una
fuerza motivadora de tipo racional. Una pretensión de poder es una imposición por medio
del potencial de sanción. Una exigencia es un acto ilocucionario y esto tiene una estrecha
relación con el término “entendimiento” mismo que “tiene el significado mínimo de que (al
menos) dos sujetos lingüística e interactivamente competentes entienden idénticamente
una expresión lingüística” (Habermas, 2010:354).
Hay funciones del entendimiento lingüístico como asegurar una relación interpersonal,
servir a una exposición de un estado de las cosas y manifestar vivencias subjetivas. Así
mismo habrá aspectos imperativos en donde l hablante se refiere a un estado que desea
ver realizado en el mundo objetivo. Rechaza un imperativo es rechazar una pretensión de
poder, no se basa en una crítica, es expresión de una voluntad.
Reto mando la racionalización social se debe tener en cuenta que las acciones sociales se
coordinan a través del entendimiento, dependen de un proceso de interpretación.
Los medios de regulación a los que la acción raciona se refiere son el dinero y el poder; pese
a todo esto, el más importante “principio de integración” es el entendimiento. Por eso el
proceso de acumulación, sin el entendimiento se genera un movimiento autodestructivo.
Horkheimer se refiere a una pérdida de racionalidad en donde “las acciones sólo pueden
ser ya enjuiciadas”, planificadas y justificadas bajo aspectos cognoscitivos. (Habermas,
2010:395). Es su famoso principio de razón instrumental.
La razón instrumental se basa en una razón subjetiva, sólo admite como conciencia a la
racionalidad formal, es “la capacidad de calcular probabilidades y de elegir así los medios
adecuados para un fin dado” 8habermas, 2010:296).
La racionalización de las imágenes del mundo es un problema del destino del hombre que
se basa en la razón instrumental (Una forma dominante de racionalidad). Hay una
subjetivación de la razón: racionalización de la moral y el arte.
“La disociación de arte y razón convierte las obras de arte en mercancías cultura les y
convierte su consumo en una serie de mercancías ocasionales, sin relación con nuestras
verdaderas intenciones y aspiraciones” (Habermas, 2010:396).
Esta situación se origina en el siglo XVI cuando diversas corrientes como el protestantismo,
el humanismo y la moderna evolución científica critican el orden social al poner en juicio la
unidad de las imágenes religiosas y metafísicas del mundo.
Esta racionalización conlleva una pérdida de libertad, el individuo se orienta cada vez menos
con base a su súper ego y se acomodan cada vez más a los imperativos del entorno. Es una
“autoalienación de los individuos, que tienen que adaptarse en cuerpo y alma a las
exigencias del aparato técnico” (Habermas, 2010:404).
El mundo de la vida mismo se cosifica, no sólo la forma de pensar s ino la forma de existir
de los sujetos. Hay una “peculiar asimilación de las relaciones sociales y de las vivencias
personales a cosas, es decir, a objetos que podemos percibir y manipular” (Habermas,
2010:406).
Habermas aborda una crítica a la razón instrumental según la perspectiva de la Teoría Crítica
bajo tres determinantes: 1) burocratización acelerada, 2) fascismo (resistencia al
movimiento obrero) y 3) la cultura de masas. Lo anterior en realidad es la transformación
del eje de pensamiento de la Escuela de Fráncfort de filosófica a social, a raíz de la cultura
de masas.
Este potencial instrumental permite a la cultura de masas, sin necesidad de presión ligar la
conciencia de anchas capas de la población a los imperativos del status quo. El momento
de una andanada razón-instrumental lo q representa el nazismo, con un pueblo de clases
retrasadas condenadas por la evolución industrial, acorraladas por las técnicas de
producción masiva, con costes psicosociales de racionalización con lo que pudieron
manipular los deseos reprimidos del pueblo alemán.
El nazismo fue “acelerar los procesos de modernización social en una nación” y “podemos
describir al fascismo como una síntesis satánica de razón y naturaleza, exactamente lo
opuesto a esa reconciliación de los dos polos, que siempre soñó la filosofía (Habermas,
2010:421).
Es interesante que el autor retoma a Wittgenstein para hacer un análisis del concepto de
regla mismo en el que define que la comprensión simbólica de una acción está ligada a la
capacidad de seguir una regla. Según Wittgenstein “alumno que aprende mediante
ejemplos de una determinada serie numérica ha entendido la regla que le subyace cuando
“puede proseguir él solo” (Habermas, 2010:476). Para saber si alguien se desvía de una
regla, primero hay que conocerla. Seguir una regla significa seguir en ‘cada’ paso particular
la misma regla.
EL individuo se rige según una satisfacción recíproca de intereses, asimismo, el control social
“<depende del grado en que los individuos de una sociedad son capaces de asumir la actitud
de los demás que se encuentran implicados con ellos>” (Habermas, 2010:503).
Según Mead para poder salvaguardar el respeto que se debe a sí mismo, un individuo tiene
que actuar en contra del juicio moral de todos sus contemporáneos. Para reaccionar la
única forma es acudir a una comunidad superior (analizar): “Una persona puede llegar al
extremo de enfrentarse con todo el mundo que le rodea…, pero para poder hacer eso tiene
que hablarse a sí misma con la voz de la razón. Tiene que abarcar las voces del pasado y del
futuro” (Habermas, 2010:572).
Hay, pues, una definición común, algo en donde se pueda negociar directamente. EL
lenguaje es vital en todo aquellos que pueda convertirse en componente de una situación.
Una situación representa un fragmento del mundo de la vida con vistas a un tema. Un tema
surge en relación con intereses y fines de acción de por lo menos un implicado.
Hay perturbaciones de la reproducción cultural, como pérdida de sentido, así como crisis
de legitimación y de orientación. Los participantes en la comunicación se mueven en un
horizonte de posibilidades irrestrictas de entendimiento. La integración de una sociedad se
efectúa ‘sólo’ bajo las premisas de acción orientada al entendimiento.
EL mundo de la vida está regido por la comprensión mítica de éste pues gobierna las
orientaciones actuales de acción. El mito liga el potencial de la acción orientada al
entendimiento.
En el capítulo VII, Habermas, se detiene a hacer una reconstrucción sociológica acerca del
pensamiento de Parsons, personaje que funda sus estudios en tres grandes pensadores que
lo antecedieron: Weber, Mead y Durkheim.
Parsons desarrolló una teoría de la cultura a partir de Durkheim, Freud y Webber. Su
primera gran obra su tituló “Th estructure of social action” en donde analiza el concepto de
acción racional con arreglo a fines “para mostrar que el utilitarismo no puede dar razón de
la libertad de decisión del sujeto de la acción” (Habermas, 2010:698).
Medios como el dinero y el poder pueden ahorrar en buena parte los costos que entraña el
disentimiento porque desligan la coordinación de la acción de la formación lingüística de
un consenso, neutralizándola frente a la alternativa acuerdo falta de entendimiento.
Los medios de control sustituyen al lenguaje en funciones específicas, por ejemplo, “El
medio dinero permite la generalización y transmisión de expresiones simbólicas que llevan
inscritas una estructura de preferencias”.
4) Es libre para considerar los términos que en virtud de esa libertad de tiempo y fuente,
puede aceptar o rechazar o en los que puede tratar de influir en un caso concreto.
El lenguaje es un medio que no requiere de algo más que de él mismo. El dinero necesita
un anclaje institucional, está relacionado con la propiedad y el contrato. En el lenguaje
discurren tradición cultural y socialización. De nuestra lenguaje materna no podemos
desconfiar. EL medio dinero funciona de modo que la interacción queda desligada de los
contextos del mundo de la vida.
Por otro lado, Habermas hace una nítida explicación acerca del medio poder, que de inicio
lo separa de cuestiones como la aplicación de la violencia física “el poder representa la
materialización simbólica de masas de valor, sin tener él mismo un valor intrínseco”
(Habermas, 2010:778).
El poder tiene un valor generalizado: la eficacia en la realización de fines (lo mismo que en
el dinero era la utilidad). “Para quien tiene el poder está previsto un criterio análogo al de
rentabilidad con que poder calcular el éxito de sus decisiones […] Bajo estas condiciones,
quien tiene el poder puede condicionar las posturas de los sometidos al poder sin necesidad
de recurrir a la disponibilidad de estos a la cooperación” (Habermas, 2010:779).
El poder puede enajenarse pero no puede circular tan sin restricciones como el dinero, el
poder sólo es un medio. No queda atado a determinados poseedores de poder y a contextos
particulares.
Particularmente “el poder tiene que someterlo a prueba [quien lo ostenta] para demostrar
que su poder es tal poder. El poder sólo puede resultar duradero y utilizarse para realizar
fines de un colectivo a través de organizaciones. Poder-respaldo-medios de coerción.
Dinero-respaldo-oro. Por lo tanto el poder necesita de la legitimación. Tiene la posibilidad
de infringir daño al desobediente: “como quien tiene el poder puede hacer uso de su
facultad de definición y decidir qué fines han de considerar fines colectivos” (Habermas,
2010:781).
Refrendar o rechazar el poder por parte de los sometidos implica enjuiciar normativamente
los fines colectivos, ellos criticaran qué tan colectivos (de interés general) son es tos.
De esta manera recordamos lo siguiente: tanto el dinero como el poder son valores
materializados simbólicamente, el primero tiene un respaldo en oro; el segundo, en fines
colectivos y la realización de estos.
Es así que: “Tanto las reservas que sirven de respaldo como los valores reales son tales que
pueden ejercer una fuerza motivadora de tipo empírico y sustituir a una motivación racional
basada en argumentos y razones” (Habermas, 2010:784).
El influyente no tiene cargo pero ejerce autoridad que genera consenso, pueden provocar
en los demás la disponibilidad de asumir obligaciones “ejercen autoridad en una virtud de
fuerza crítico apelativa que nos empuja al ‘engagement’” (Habermas, 2010:785).
Sus antecedentes fueron la Reforma y le Renacimiento, considerados pro el autor como los
dos grandes acontecimientos de la modernidad temprana. Estas revoluciones precursoras
fueron “elaboradas hasta ese momento solo por élites culturales en las órdenes monásticas
y en las universidades” (Habermas, 2010:799).
La Reforma eliminó las barreras entre el clero, las órdenes religiosas y el estado laico. El
Renacimiento fue el auge del humanismo, pone la herencia grecoromana a disposición de
una ciencia, una jurisprudencia y un arte emancipados de la Iglesia; allanó el camino para
el sistema jurídico moderno.
Las tres revoluciones cimentaron sus pilares en una sociedad legal, en tolerancia religiosa y
en la producción agrícola basada en el trabajo asalariado, aspecto que generó una lucha de
tensión, una burguesía artesanal (orientada en función de las necesidades) y una burguesía
mercantil (orientada en función del lucro).
En este aspecto el hombre, al no contar con medidas de cuenta para medir los resultados
de sus esfuerzos utilizan el dinero para tal efecto: “los hombres, por tanto, utilizan el dinero
como criterio incluso en las tareas que no tienen por objeto incrementar el stock de utilidad
de una sociedad” (Habermas, 2010:808).
Esto generó un potencial problema de percepción pues se cree que la solución racional de
los problemas de control sólo es posible por la vía de un comercio y trato sujeto a cálculo,
con el dinero o con el poder.
Para Adorno, lo que Weber llamó “burocratización” fue un “mundo administrado”, una
misión del máximo espanto; para Luhmann, una presuposición trivial. El proceso evolutivo
es la puesta en práctica de un potencial de aprendizaje, sin embargo “La racionalización del
mundo de la vida hace posible que la integración de la sociedad se polarice hacia medios de
regulación o control independientes del lenguaje” (Habermas, 2010:837).
Es una realidad donde ese especialista sin espíritu se guía por actitudes cognitivo-
instrumentales frente a sí mismo y frente a los demás. Y peor aún: “El deber ético frente a
la propia profesión queda sustituido por actitudes instrumentales frente a una ocupación
que ofrece oportunidades de ingreso y de carrera” (Habermas, 2010:844).
Por su parte es imprescindible la tesis de la colonización interna propuesta por Marx misma
que explica a la mercancía como un objeto de doble carácter en donde se da un proceso de
autovalorización del capital. Se da una relación, hay un intercambio de fuerza de trabajo
por capital variable. Hay un mecanismo de control de un proceso de producción
autoregulado. El concepto de relación de reflexión nos permite entender le proceso global
de acumulación como un proceso de explotación reificado, anónimo. La fuerza de trabajo
se define por acciones concretas relacionadas de cooperación y rendimiento abstracto. Es
una fuerza alienada por productores.
Lo que a “Marx le importa [es] desenmascarar la ilusión de que la fuerza de trabajo sea una
mercancía como cualquier otra” 8hjabermas, 2010:857).
La ‘mercancía’ es una fuerza de trabajo “viva”, es falso que no surja con la finalidad de ser
vendida; que no pueda separarse de sus propietarios; que sólo pueda ser puesta en
movimiento por sus propietarios. La fuerza de trabajo concreta una transformación
abstracta en un proceso de cosificación. La abstracción real es una objetivación del ámbito
de la acción integrados socialmente.
Por lo tanto habrá una orientación racional con arreglo a fines por valores y debido a una
actitud objetivante: “transforman en relaciones instrumentales lo mismo las relaciones
sociales que las relaciones intrapsíquicas” (Habermas, 2010:858). Toda orientación por
valores de uso, en el proceso de acumulación es en realidad una “apariencia”, “el sistema
capitalista ‘no es otra cosa’ que la forma fantasmal de unas relaciones de clase que se han
vuelto anónimas y se han convertido en fetiche” (Habermas, 2010:862).
En esta sociedad totalmente administrada hay un control social que todo penetra, es un
modo de socialización represivo donde se excluye la naturaleza interna donde los medios
de comunicación de masas son un elemento fundamental.
Hay un desencanto juvenil que proviene desde los años sesenta del siglo pasado donde los
medios de comunicación de masas han abierto espacios de opinión pública donde son los
mismos medios quienes jerarquizan el horizonte de comunicación y también le quitan sus
limitantes, cuestión que lo hace ambivalente.
Los medios de comunicación de masas acaparan y condensan simultáneamente los
procesos de entendimiento pero: “nunca pueden quedar fiablemente blindadas contra
posibilidades de ser contradichas [las pretensiones de validez transmitidas por los medios
masivos de comunicación] por actores capaces de responder autónomamente de sus
propios actos y de sus propias opiniones” (Habermas, 2010:926).
Son respuestas entendidas como conflictos que pueden entenderse como una resistencia
contra tendencias a una colonización del mundo de la vida. “La teoría de la acción
comunicativa representa una alternativa a la filosofía de la historia; esta se ha vuelto
insostenible” (Habermas, 2010:934).
“con el concepto de acción comunicativa de una razón instrumental al uso del lenguaje
cuando este uso se orienta al entendimiento, vuelve a considerar a la filosofía capaz de
cumplir tareas sistémicas y a exigirle ese cumplimiento.
La teoría de la acción comunicativa constituye un marco dentro del cual puede retomarse
aquel proyecto de estudios interdisciplinarios sobre la pauta selectiva de racionalización
que representa la modernidad capitalista”. Las ciencias se desprenden poco a poco de los
residuos de imágenes del mundo y renuncian a una interpretación de la naturaleza y de la
historia en su conjunto”.
Este estudio comprende una amplia reflexión acerca del potencial lingüístico que se
reproduce en la vida social del individuo.
Octubre 2011
Bibliografía: