Vigilantes del más allá, Guardianes de dos Mundos.

“La realidad es tan rica en matices, y a veces, tan extravagante y divertida, que se
ríe de la fantasía de los humanos”

“Frase Extraída del libro de lo Increíble”

Qué difícil es pensar que el alma Humana pueda ser atrapada y obligada por siglos a
permanecer sujeta a un constante vigilar, transformándola en un guardián incansable,
siempre presto a obedecer la voluntad que fue impresa en su esencia por un Experto en el
arte de manipular espíritus y someterlos por siempre. Hoy queremos hablarles superficial
pero con enfocada vehemencia de una de las áreas que encierra el tomo de los misterios:
“LA NIGROMANCIA”.

En el pasado no existían empresas donde pudiésemos acudir para tomar los

servicios de guardianes de seguridad que se apostaran en nuestras puertas; y realizaran
rondas de vigilancia en propiedades personales o familiares, cuidando todo aquello que
representara algo de valor para nosotros. Por este Motivo, existían prácticas más extremas
que aseguraban que las puertas de una ciudad así como los tesoros de un acaudalado señor,
jamás fueran tocados por otro, ni por errores del destino y si así sucediese, pobre del
desdichado que se topaba con ellos.

En algunas culturas de la antigüedad se solía enterrar a personas vivas en los

cimientos de las futuras construcciones, para proteger el edificio de posibles infortunios.
Cuentan que, cuando fue levantada la ciudad de Tavoy, en el sur de Birmania, colocaron un
delincuente en el hoyo de cada poste, para alejar a los malos espíritus. Este rito también fue
utilizado por los druidas.

En España así como en Venezuela, los Indios y Negros esclavizados, acompañaban

a su señor, al entierro de una dote (Una Forma de referirse a un entierro de piezas de valor,
generalmente monedas o morocotas de oro); y al finalizar el entierro el señor regresaba
SOLO a su domicilio, mientras el esclavo reposaba muerto en una tumba donde para
siempre por curiosos y secretos rituales quedaba su espíritu atado a la tarea de alejar a los
cazadores de tesoros y curiosos de aquella fortuna que se guardaría hasta que apareciese
un elegido digno de recibir dicha riqueza.

Los Faraones eran enterrados con esposas y a veces con sequitos enteros vivos,
igualmente costumbres indígenas de las culturas sudamericanas e inclusive en ciudades de
oriente era necesario que los difuntos fuesen acompañados en sus sepulcros por allegados y
familiares.
 ¿Pero, porque esta Horrible Practica?

Por increíble que parezca JOAQUÍN TRINCADO lo explica sencillamente en unas de las
máximas de la Escuela Magnético Espiritual de la Comuna Universal (EMECU); la fuerza está en
la unión de un solo QUERER UNÁNIME de todos, el poder de un ente desencarnado,
no radica en sus músculos, radica en su poder espiritual, y en el universo todo esta
solidarizado, el COSMOS es un Espíritu inmenso, que se compone a su vez de espíritus
mas pequeños, en analogía o buscando similitudes para comparar y poder explicar; es
como un cuerpo humano conformado por pequeñas células y átomos vivos que trabajan
en armonía para sostener un sistema de vida. El ritual para esclavizar un alma, tiene un
carácter bastante NIGROMANTE, para explicarlo aquí, pero puedo asegurarte que era lo
bastante efectivo como para chantajear un desencarnado para que siempre actuara bajo
una programación que se activaría solo si, existiese una amenaza que irrumpiera en su
área de acción.

Cuando el desencarnado reaccionaba, podía en silencio acercarse al curioso, y

asestarle heridas, causar visiones terroríficas, perder a los caminantes, poseerlos y
empujarlos al suicidio, y no termina allí, se adhería a los vagabundos atrevidos
atormentándolos hasta la locura o la muerte. Pero las Resistencias a veces son más
feroces, algunos humanos tenían voluntades y ambiciones muy fuertes y
enfrentaban estas maldiciones con astucia y verdadera sangre fría, he aquí donde
entraba en acción el secreto de la cadena solidarizada, un espíritu se apoyaba en la
fuerza que le otorgaban otros desencarnados que fueron afines en todas las generaciones
que acompañaron a su estirpe, y ocurrían verdaderos enfrentamientos donde ya sabemos
quienes resultaban vencedores y quienes se sumaban a la lista de fallecidos y locos por
acciones de ejércitos espirituales.

Esto explica el porqué de la inclinación a hipnotizar y someter a un ente

desencarnado para que vigilara nuestras pertenencias, realmente era una vigilancia
efectiva. Pero aunque usted no lo crea aun en nuestros tiempos se siguen generando
soldados espirituales, la tradición continúa e incluso muchos se prestan voluntariamente
para este papel considerando un honor cargar sobre sus hombros tan desdichada tarea.

Expertos Grupos de Exorcistas y no precisamente pertenecientes a la Iglesia

Católica, sino de Hermandades más antiguas que esta; recorren el mundo liberando
aquellas almas castigadas en un purgatorio esclavista, actuando como Psicólogos de las
criaturas del más allá que logran desatar los nudos que unen a los desdichados muertos
a valores terrenales. No es una tarea fácil pero muchos espectros han logrado retirarse a
descansar y lo inverosímil es que se rumora que otros muertos se unen a esta campaña
liberadora, prefiriendo actuar como intermediarios entre el mundo de los vivos y el muerto
para liberar a sus homólogos que nublan su existencia fantasmal, bajo el yugo
Nigromante.
 Hasta acá nuestro tema, recuerden que hablamos de no dar detalles, solo
abordaríamos descripciones superficiales para que usted poco a poco valla observando lo
que se esconde detrás del velo de la realidad, esperamos una pronta visita para que nos
acompañes en esta búsqueda aparentemente irreal en un mundo mágico llamado tierra.