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Harry Potter el Heredero del Fénix por Pazu

Resumen:

Harry pelea con Voldemort, ambos se lanzan la misma maldicion que el Lord utilizo para acabar
con Harry cuando tenia un año, Voldemort muere pero Harry quedo vivo...

cuando todos se dan cuen ta de lo que paso ven a un Harry mas pequeño y aferrado a... Draco
Malfoy...

el director les contara otro secreto bien guardado pero que tambien tenia conocimiento el chico
Gryffindor...

Harry es el heredero del Fenix y a tomado como "amo" a Draco Malfoy...

¿que pasara ahora con los dos?

Categorías: Harry Potter, Libros Personajes: Albus Dumbledore, Albus Severus Potter,
Bellatrix Lestrange, Bill Weasley, Blaise Zabini, Cedric Diggori, Charlie Weasley, Dean Thomas,
Draco Malfoy, Fred/George Weasley, Ginny Weasley, Harry Potter, Hermione Granger, Lucius
Malfoy, Luna Lovegood, Minerva MacGonnagall, Narcisa Malfoy, Neville Longbottom, Oliver
Wood, Pansy Parkinson, Remus J Lupin, Ron Weasley, Seamus Finnegan, Severus Snape, Sirius
Black, Theodore Nott, Tom Ryddle/Voldemort
Géneros: General
Advertencias: Ninguno
Desafíos: Ninguno
Series: Ninguno
Capítulos: 23 Completo: No Palabras: 55729 Lecturas: 70975 Publicado: 03/01/09 Actualiz
ado: 16/11/10
Notas de la historia:
mi primer nuevo fic en etse nuevo año ^^ espero les guste ^^

1. Capitulo uno: muerte y renacimiento… por Pazu

2. La historia de Fasten Potter por Pazu

3. Tuyo… Mío… no! Tuyo! por Pazu

4. Dormir…Reunión…Conversaciones…Despertar… por Pazu

5. Habitación de las chicas… por Pazu

6. Discusiones y conversaciones de… ¿adultos? por Pazu

7. Acercamientos en la mansión Malfoy (Parte 1) por Pazu


8. Acercamientos en la mansión Malfoy (Parte 2) por Pazu

9. Preparativos para ir de compras… por Pazu

10. Gringotts y una carta… por Pazu

11. Salida de compras y… por Pazu

12. Adiós Marca Tenebrosa… (1° parte) por Pazu

13. Adiós Marca Tenebrosa… (2° parte) por Pazu

14. Despertares… por Pazu

15. La llegada de Narcisa Malfoy por Pazu

16. Narcisa Malfoy o es… ¿Black? por Pazu

17. ¿Despedidas? por Pazu

18. Volviendo a Hogwarts… por Pazu

19. Tren a Hogwarts… por Pazu

20. Hogwarts… por Pazu

21. La prometida de Malfoy… por Pazu

22. Ellos, los Slytherin (Esos dos meses) 1º parte. por Pazu

23. Ellos, los Slytherin (Esos dos meses) 2º parte por Pazu
Capitulo uno: muerte y renacimiento… por Pazu
Notas del autor:
espero k les guste, are este fic lo mas corto posible ^^
Capitulo uno: muerte y renacimiento…
La batalla estaba en su apogeo, las luces rojas, verdes, moradas, azules, doradas, plateadas… se
entrelazaban, chocaban o pasaban al lado de la otra, sin importar el que estaba a su lado, sin
importar que efecto podría provocar al tocar el objetivo, algunas no llegaban a su destino,
chocaban con algo que no era necesario destruir como una pared, una ventana o una puerta, los
gritos de dolor, de furia y rabia se entremezclaban en una tétrica melodía, las palabras fieras y
seguras al decir la maldición provocaban eco en las otras habitaciones, los cuerpos caían
inconscientes, muertos o con un dolor agonizante, las mesas volaban, las sillas se rompían en las
paredes, los cuadros eran quemados sin misericordia, todo era un caos, el caos de una batalla…
- VOLDEMORT!!!!!!!!!! – se escucho el grito de la entrada del lugar
Todos se quedaron inmóviles, mudos y expectantes, solo se podían escuchar la respiración entre
cortada de los que aun se mantenían en pie…
Un chico de 17 años se encontraba en las puertas del gran comedor del colegio Hogwarts de
magia y hechicería, el que hace algunas horas atrás era el más seguro de todos los colegios de
magia, ya que había sido atacado por mortífagos guiados por el mismísimo Lord Voldemort.
Harry Potter se encontraba apuntando con su varita al denominado Dark Lord, se acerco a él con
paso firme y con su mirada llena de seguridad…
- miren a quien tenemos aquí al niñito de Dumby, ¿qué? ¿Te cansaste de esconderte detrás de la
túnica del vejete? – le dijo burlón
- hoy todo esto se acaba… - le dijo desafiándolo
- púes es lo que yo deseo Potter, quiero que hoy mueras delante de tus amigos - con una sonrisa
superior
Harry sonrió desafiante y guardo su varita en la túnica
- que crees que haces Potter ¿quieres que te mate? – le dijo burlón
- no me creas tan patético Voldemort, es hora de que nos enfrentemos de verdad – Harry abrió
sus brazos y expulso su magia provocando una gran expansión de magia pura…
Con la expansión de la magia que había liberado provoco que varios de los que estaban allí
fueran literalmente lanzados a la pared y quedando inconscientes, solo un rubio que había
alcanzando a lanzar un fuerte escudo había quedado en pie y un viejo director casi agotado por la
pelea, ambos mirando atentos la escena dispuestos a lanzarse a defender al moreno de ojos
verdes con sus vidas si era necesario…
Voldemort miro seriamente a aquel muchacho que osaba enfrentarle abiertamente, dejo de lado
su varita y comenzaron una descomunal pelea, los hechizos eran esquivados hábilmente, pero se
notaba que el mayor llevaba ventaja, Draco estaba a punto de ayudar a Harry cuando este creó un
arco dorado y una flecha plateada que apareció junto al arco listo para ser lanzada, Voldemort
creaba un escudo visible de color negro a su alrededor, Harry poso sus manos en su “arma”
hecha de magia y le disparo, la flecha se incrusto en el escudo y lo destruyo en mil pedazos.
Al parecer por fin había destruido la protección del Señor Tenebroso…
Los rivales se miraron con profundo odio, ambos sabían lo que diría el otro, levantaron su manos
sin darse cuenta al mismo tiempo y sin pensar en los efectos lanzaron el único hechizo capas de
acabar con la vida de alguien siendo sus cuerpos lanzados con fuerza hacia atrás…
- noooooooooooo!!!!! – fue el desesperado grito que lanzo el aristocrático rubio ante tal visión,
comenzó a correr desesperado hacia el lugar donde se encontraba el cuerpo sin “vida” del
muchacho que al fin había podido acabar con Lord Voldemort
Una luz dorada comenzó a cubrir el cuerpo del niño-que-vivió y una nube oscura hiso
desaparecer el cuerpo del azabache momentáneamente para la vista del rubio, cuando la nueve se
disipo vio aún sentado y desnudo oji-verde, Draco actuó por inercia y se arrodillo para colocarle
su túnica para tapar la desnudes del Gryffindor, el rubio había quedado a escasos centímetros de
la cara del moreno (quien no tenía sus lentes), este le miraba con curiosidad, inocencia e interés
ladeando su cabeza hacia un lado como hacen los cachorritos, Draco se sorprendió, algo malo
debía haber pasado para que Harry estuviera vivo y actuando así de ¿perdido?, un grito lo hiso
pararse y alegrase del moreno…
- DRACO MALFOY alégate de mi ahijado! – rugió el ahora libre de cargos y de injustas
condenas Sirius Black
Poco a poco los presentes de aquella batalla comenzaban a despertar, enemigos y aliados
comenzaban a recuperar su conciencia, vieron con asombro que en un lado del gran comedor
estaba el cuerpo inmóvil de Lord Voldemort y al escuchar el grito de Sirius vieron al chico Potter
junto a un pasmado Draco Malfoy que se encontraba ya parado y mirando fríamente al hombre…
Se dieron cuenta que eran libres de las garras de cara-de-serpiente alias Lord Voldemort y los
aurores, los de la orden y algunos alumnos comenzaron a apresar a los mortífagos que aun
seguían vivos. Los mas cercanos se quedaron en el lugar, Dumbledore, Remus, Sirius, Ron, Nev,
Herm también estaba Draco, su padre (que se había vuelto espía para la orden), Severus, Blaise,
Theo, Pansy y otros aurores arreglando los inmuebles y llevándose los cuerpo juntos con los
medimagos…
Sirius se acerco a abrazar a su ahijado, pero este lo empujo lejos, todos quedaron impactados al
ver ese rechazo y Padfoot no pudo evitar tener una mirada herida y confusa al ver esa reacción de
su querido ahijado.
Harry trato de ponerse en pie cayéndose dos veces al intentarlo, Remus se había acercado a
ayudarle pero también fue rechazo por el menor, cuando por fin lo logro comenzó a dar pasos
vacilantes hacia el menor de los Malfoy, todos quedaron anonadados por la acción, Harry estiro
sus brazos hacia el rubio, su mirada libre de lentes dejaban ver cariño y necesidad desesperada
por alcanzar su objetivo, el príncipe de Slytherin solo tenía los ojos abiertos como platos, pero no
decía nada ni menos podría moverse por la impresión de ver lo que estaba haciendo Potter, este
antes de poder llegar a su meta trastabillo y cayó en los fuertes brazos del rubio, que de una
forma instintiva había rodeado la cintura del azabache con sus brazos para que no se cayera,
Harry se aferro al rubio como si fuera un salvavidas…
- ¿Draco? - susurro el oji-verde mirándolo con admiración
Draco se sintió en las nubes al escuchar su nombre con ese tono de voz del “menor”, lo decía con
tanta ternura que le había llegado hasta su corazón, al tener que bajar su cabeza para verlo a los
ojos y sentir su delgado cuerpo entre el suyo pudo percatarse que Harry era más pequeño de lo
que imaginaba, si es que no se había achicado en la batalla algo imposible… ¿cierto?
- suéltalo maldito!!!!! de seguro que le lanzaste una maldición por atrás, maldita serpiente
rastrera!!!!! – soltó Sirius al ver el comportamiento de su casi hijo.
Sin pensar en las consecuencias de sus actos e impulsivo como siempre tomo a su ahijado y lo
alejo del rubio y sus amigos se acercaron al azabache para verlo, mientras que los amigos del
rubio se le acercaban para saber lo que había pasando en la batalla, ya que muchos habían visto
solo los últimos hechizos lanzados, pero un grito desgarrador los callo para ver como trataban de
estabilizar a un moreno de miraba verde desesperada por deshacerse del agarre estirando sus
brazos para llegar al rubio…
- Draco, Draco, Draco, Draco, Draco… - llamaba desesperado peleando con los fuertes brazos
que lo sostenían
- no Harry… cálmate!!! – le decía desesperado Sirius por tener quieto a su ahijado
- vamos Harry reacciona – le decía preocupada Hermione
- Draco, Draco, Draco, Draco… - era lo único que decía el Gryffindor con lagrimas en los ojos
El rubio no pudo soportar que le hicieran eso al azabache, así que se acerco a él y este al ver que
su rubio se le acercaba tomo todas sus fuerzas que le quedaban y pudo deshacerse del abrazo de
esos malvados seres que lo alejaban de su preciado rubio
Draco se sorprendió del fuerte agarre que sufrió de parte del Gryffindor, este había enterrado su
cabeza en su pecho, mientras que le abrazaba fuertemente, el rubio no le quedo de otra que
devolverle el abrazo…
Todos en el gran comedor se quedaron atónitos por el actuar de Harry, menos uno que siempre
tenía las respuesta a todo lo que pasaba a su alrededor…
- será mejor que vayamos todos a un lugar mas cómodo para conversar, es momento que sepan lo
que esta pasando…
*********
Pansy, Theo y Blaise no quisieron alegarse de su amigo y ahora todos los anteriormente
nombrados se encontraban en la sala de los menesteres, sentados en unos cómodos sillones,
Dumbledore estaba en un enorme sillón individual a la cabecera de todos, Lucius, Severus,
Remus y Sirius compartían un sillón al lado derecho de Dumbledore, Draco y Harry estaban
sentados juntos al lado izquierdo del director, Harry estaba en las piernas del rubio jugando con
una snicht que le había dado el rubio - que en primera estancia se la había ofrecido el director
pero Harry no había aceptado acurrucándose más al rubio en una forma muda de protección
hacia ese viejo feo, pero Albus se la había pasado a Draco para que se la diera a Harry y este
había aceptado gustoso -ahora jugaba como un niño pequeño sin importarle el resto excepto
Draco, los amigos del Gryffindor y del Slytherin compartían un enrome sillón que se encontraba
al frente del director…
- Harry es un heredero del fénix… - soltó sin más el director
Continuara…
Notas finales:
Y que tal esta ne… vale la pena seguir? O ya se me esta yendo la olla? Alguien está por allí? TT-
TT lo admito mala decisión al subir el fic -.-
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La historia de Fasten Potter por Pazu
Notas del autor:
Wooo nunca imagine que iban haber tantos comentarios en el primer capi quede KO al ver tantos
n.n muchas gracias por dejarlos m dan mas ánimos a seguir con la historia quizás este capi les
aburra un poquito ya que es más bien un capi de explicaciones mas que todo pero = espero k les
guste, espero k m dejen algún comentario que con tantos en el primero no sé si alguien quiera
dejarme uno n.nQuiero acotar algo!!!! yo no tengo internet en mi casa, antes podía pasarme
horas sin que me cobraban por que usaba los compu de la U, pero ahora que estoy de vacaciones
ya no puedo u.u así que algunas veces puede ser que no actualizo tan pronto por no tener dinero
n.n’ así que espero m entiendan, así también como que me demore en contestar los comentarios,
he decidido que los voy a copiar y contestar en mi casa para después llegar y pegar n.n así todos
tendrán sus respuesta y yo no me sentiré mal por no contestarles n.n ufff k largo m salió la nota
jejjeeAhora a leer

Capitulo dos: La historia de Fasten Potter

- Harry es un heredero del fénix… - soltó sin más el director

********************

¿Qué quería decir con eso el director? Se preguntaban todos los de la habitación, menos un
azabache de ojos azules y un castaño de ojos dorados, que se miraban nerviosamente y con
temor…
- que saben ustedes – les dijo seriamente el profesor de pociones
Sirius se tenso y Remus suspiro tristemente para luego mirar hacia los presentes…
- James nos conto a mí y a Sirius un secreto de su familia, según le había contado su abuelo, un
miembro de la familia Potter se unió con un fénix >>>
>>> Fasten Potter un joven de veinte años era un aventurero, él era el próximo heredero de la
cabeza Potter al ser hijo mayor de la familia y fue comprometido como era costumbre en esos
tiempos con una joven doncella que ni siquiera conocía, ella era la hija del patriarca Wollerth una
familia muy respetada en esa época, pero Fasten “no la amaba” y tampoco quería ser el patriarca
de la familia ya que a él solo le gustaba viajar por el mundo y conocer sus secretos, pero aun así
debía tomar sus responsabilidades. Su familia viendo la tristeza en su corazón le financio su
último viaje por dos años, dio su palabra de mago de estar de vuelta después del tiempo
establecido y salió nuevamente a su último viaje queriendo encontrar algo incalculable que le
permitiera vivir algo más confortable con su condena, atado a un lugar como un patriarca de
familia debe ser…
Le quedaba solo un día para volver a Londres, a su hogar, con su futura mujer y siendo el cabeza
de la familia, sin proponérselo llego hasta lo que hoy es la Antártica, siempre le había gustado la
nieve, paseo por el lugar encontrándose con varias criaturas mágicas realmente fascinantes,
quería llegar mas allá así que despreocupadamente comenzó a adentrarse a esas blancas tierras,
había ya caminado durante horas, viendo su reloj de pulsera se dio cuenta que debía volver en
cinco horas más antes del que el pacto se cumpliera, despreocupado como estaba no vio que en el
camino la nieve estaba suelta, piso sin prevenir antes y la nieve cedió, cayó por un hoyo cayendo
dolorosamente en una cueva. Al levantar la mirada y gracias al rayo de luz que provenía de la
abertura que el provoco, podía ver un esplendido lugar, grandes rocas afiladas estaban colgando
del techo como también a sus lados había rocas de hielo con extrañas figuras, aventurero como
era no midió las consecuencias de sus actos y siguió el único camino que tenia la cueva, utilizo
su varita para darle luz al lugar, camino por varios minutos hasta toparse con algo que jamás
creyó ver, algo que todo aventurero sueña con ver, al final del túnel había como una especie de
habitación circular, en la pared del fondo en medio de esta, un fénix negro estaba congelado, el
había escuchado muchas leyendas de estos seres tan magníficos, los fénix negros eran los más
fuerte en las diferentes especies de fénix, pero tenían una debilidad y era el hielo, según la
mayoría de los magos estos fénix, como eran catalogados varias criaturas que eran de color negro
eran discriminadas y matadas atrozmente, ya que se decía que eran especies oscuras, malignas y
sanguinarias, algo que el aborrecía ya que él había viajado por muchas partes y conocía mucho
más que esos llamamos especialistas en criaturas negras y el sabia que los fénix eran seres
pacíficos y bondadoso, los fénix negros eran atacados por que ellos eran mas temperamentales y
territoriales, por eso atacaban a cualquiera que osara tocar su “propiedad”, Fasten como un niño
viendo el dulce más grande del mundo se acerco hasta la “prisión” del fénix, ya que este tipo de
fénix no soportaban mucho el hielo, no morían por ello, pero si lo debilitaban, vio que el hielo
tenía varias marcas, algún mago debió haberlo encerrado, Fasten viendo la integridad y la
majestuosidad de la criatura, junto todo su poder en sus manos para poder romper el hielo, libero
su magia y se debilito de sobremanera cayendo dormido en la nieve.
Fasten despertó al sentir como algo duro, suave y frio (n/a: hey que están pensando ¬¬
pervertidas nomas) le acariciaba a cara, al abrir de apoco los ojos se topo muy cerca de la cara
del fénix, se sentó apresuradamente topándose con los hermosos ojos verdes que tenia la criatura,
Fasten le miraba anonadado por tan semejante fénix, era hermoso sus plumas brillaban tan
oscuras como la noche, su pico era liso y suave ya que recodaba como se sentía en su mejilla, y
esos ojos, esos atrayentes ojos verdes como las esmeraldas, Fasten estaba tan maravilladlo
examinando al ave que no se dio cuenta que solo le quedaban un par de minutos para volver a
Londres, sintió como le costaba respirar y comenzaba a sentirse débil, miro asustado el reloj
dándose cuenta que solo le quedaba tres minutos para volver, trato de aparecerse pero algo se lo
impedía, iba a morir allí en la nada, sin que su familia supiera que le había pasado…
- al parecer tienes un pacto joven aventurero – le hablo mentalmente el gran fénix
- tu… tu… - dijo totalmente asombrado y nervioso al darse cuenta que el fénix se podía
comunicar con el
- te propondré algo humano y deberás decidirte antes de que sea tarde… - le dijo suavemente
Fasten solo asintió mudamente
- veras humano, ahora mismo moriría una y otra vez por la eternidad…
- pero…
- no interrumpas joven imprudente aun no termino – le dijo algo molesta para luego seguir con
su historia – esto que ves es un campo creado por unos malditos magos – ante el tono de voz que
había puesto el fénix, tembló viviblemente después de todo el un mago – pero no te preocupes a
ti no te pienso hacer nada… como te decía el campo es de magia “fría” utiliza como poder el frio
del hielo y como bien sabes, el hielo es mi peor enemigo, no es capaz de matarme, pero tampoco
tengo la fuerza suficiente como para salir de aquí, mis fuerzas se debilitaran y moriré para volver
a revivir y así seguiría en un ciclo interminable hasta que el campo de magia se destruya, tú
fuiste capaz de destruir la celda que me mantenía atrapado pero aun así no serias capaz de
destruir el campo, veo que te queda poco tiempo de vida, por ese trato que has hecho con tu
familia, te propongo que nos unamos en uno, tomarías mi fuerza para que puedas salir y tu no
morirías ya que el trato no sería eficaz ya que si no alcanzas a llegar a tu destino volverías a
renacer perdiendo una año de tu edad…
Fasten vio todas las posibilidades rápidamente, no tenía tiempo para pensar mucho solo una duda
le carcomía por dentro – pero… entonces tu tomarías mi conciencia?
- no, seriamos uno, tu y yo seriamos un mismo ser
- acepto – dijo firmemente el joven – pero dime cómo te llamas
- Alash –le dijo la suave voz del fénix
El fénix comenzó a extender sus enormes alas y cerrar sus ojos, Fasten sin saber la razón cerro
los ojos y extendió sus brazos, sintió como su magia lo rodeaba y como otra magia distinta a la
de él se le iba uniendo, esas dos magias se entremezclaron, Fasten sintió como su cuerpo se
elevaba hasta estar al frente del gran Fénix negro, abrió los ojos y estiro sus brazos para tocar el
pico del ave y así una luz dorada los envolvió, el joven humano sintió como algo se aplacaba a su
cuerpo y de allí cayó al suelo suavemente…
Fasten despertó nuevamente en la cueva que ahora se encontraba a oscuras, no vio nada a su
alrededor se preguntaba si todo había sido un sueño, cuando reviso su reloj y se dio cuenta con
asombro que el tiempo limite había terminado y aun estaba vivo lo que quería decir que todo
había sido verdad…
- Alash, Alash – llamaba mirando por los lados de la cueva, hasta que una voz llego a su mente
- humano cierra los ojos…
Fasten obedeció, cuando los cerro se encontró en un prado hermoso y al frente suyo se hallaba el
fénix negro
- estamos en nuestra mente
Le contesto a la muda pregunta que tenía
- escúchame ahora somos uno, pero como nuestra unión fue cuando ambos no estábamos recién
nacidos tenemos por decirlo de una forma dos personalidad, escúchame Fasten, ahora que yo
estoy en tu cuerpo tu podrás morir cuando desees, como sabes bien los fénix no morimos hasta
que nuestro compañero muere, así que cuando estés unido a tu compañera y esta muera tu
morirás junto a ella, pero yo no lo haré, como leal a ti que me has sacado de ese lugar, todos tus
descendientes tendrán un varón como primogénito y yo “habitare” en ellos, pero solamente seré
completamente uno con aquel que tenga el verdadero poder para soportar mi poder, ahora Fasten
es hora de que vuelvas a casa…<<<<
- <<< luego de unirse con el fénix, Fasten Potter volvió a Londres y se caso con esa joven ya que
pudo darse cuenta de que era la mujer que amaba, desde ese momento la rama de Fasten Potter
siempre el primogénito fue un hombre y aunque el resto de la familia nunca supo de que Fasten
tenía a un fénix en su interior, este se encargo de que sus primogénitos les contara a sus
descendientes, su abuelo le conto por que todos los de la familia creyeron que James sería
elegido como el portador apto de Alash, pero al parecer era Harry…
- lo suponía, después de todo James no mostro ningún poder especial antes de que naciera
Harry… - dijo abatido Sirius al ver como su ahijado estaba durmiendo en el pecho del rubio
apretando firmemente la pelotita dorada
Todos estaban en un silencio procesando la información…
- y Potter sabía algo? – pregunto seriamente el oscuro profesor de pociones
- no, nosotros no le dijimos nada – dijo culpable el lobito
- la verdad es que yo me entere por el joven Harry – dijo calmadamente el director
- que quiere decir!, pero si nadie fuera de la familia Potter y nosotros sabíamos lo del heredero
del fénix – dijo curioso y preocupado Padfoot

- así es, pero a sus quince años recibió una carta de Gringotts pidiéndole que fuera a buscar algo
que sus padres habían guardado para cuando el cumpliera los quince años, al parecer Lily y
James queriendo dejar preparado a Harry en el caso que ellos faltaran – hubo un triste silencio
sobre todo por parte de dos de los integrantes de los merodeadores – así Harry se entero, al
parecer sabe más de lo que yo sé, el me conto ya que necesitaba hablar con Fawkes, así que
deberemos esperar a que Harry recupere su conciencia…

- ¿Qué quiere decir director? – pregunto preocupada la castaña

- lo que quiero decir señorita Granger – suspiro un momento y cerró los ojos – creo que
empezare explicándole que Harry ahora a perdido en total dos años de edad…

- pero ¿Por qué? – pregunto contrariado el pelirrojo

- los fénix al morir renacen de sus cenizas, una capacidad que le es otorgada al heredero del fénix
peo de una forma distinta, es por eso que Harry está con vida, perdió un año de existencia por
volver a la vida…

- es por eso que ha perdido dos años, por que cuando era bebe Voldemort también lo “mato”, por
eso sobrevivió pero a cambio perdió un año – dijo sabiamente la más inteligente del grupo de los
Gryffindor

- así es señorita Granger…


- es por eso que siempre ha sido más pequeño (de altura) que los demás – dijo Nev

- así es, ahora al parecer también se a empequeñecido algunos centímetro – dijo enternecido
Remus

- pueden dejar de preocuparse de estupideces y enfocarse en el problema - dijo ásperamente


Snape

- tranquilo mi muchacho – le sonrió con estima el director – como iba diciendo al volver a
“renacer” Harry a perdido otro año de edad, por lo que su mente en este momento se encuentra
totalmente desordenada y desorientada, según lo que el mismo me dijo deberían pasar algunas
semanas hasta que el pueda volver a ser “el miso” otra vez, ya que en este momento esta su
instinto fénix en lugar de la consciencia de Harry.

Todos estaban cayados procesando la información que el director estaba narrando, hasta que
alguien tomo la palabra

- pero por qué Potter no quiere estar lejos de mi hijo – dijo el señor Malfoy que era la primera
vez que hablaba desde que habían llegado

- pues eso es algo fácil de explicar, como todos sabrán cada fénix toma a un compañero de por
vida, pues este es el caso, aun no se fue “Harry” o el “fénix” quien decidió que Draco era el
mago elegido como su compañero.

-en otras palabras Draco es el amo de Potter - penso para si Snape

- eso quiere decir que es la pareja definitiva, es decir el amor de su vida, su alma gemela –
pregunto Pansy algo preocupada

Draco al escuchar esas palabras se alarmo un momento…

- no señorita Parkinson, solo están unidos por lealtad – dijo mirando hacia el joven Malfoy

Este en un principio se sintió aliviado pero aun así sintió una punzada de ¿decepción?, algo que
no paso desapercibido por los ojos de su padre…

- así que joven Malfoy, usted de ahora en adelante se preocupara del joven Potter, tendrán que
estar todo el tiempo juntos hasta que Harry pueda valerse por si mismo…

Draco asintió sin protestar, algo que sorprendió a varios del lugar, preguntándose por qué no
reclamaba, porque siempre habían sido enemigos ¿cierto?

- no puedo hacer nada para cambiar la situación, sería una pérdida de tiempo el reclamar – dijo
maduramente el príncipe de las serpientes, algo que enorgulleció a sus compañeros

- es decir ahora Potter tiene 15 años en realidad – dijo seriamente Theo


- así es Nott, cuando Potter ingreso a Hogwarts tenía 10 años, algo que nunca se me paso por la
cabeza – dijo con una sonrisa cálida

Todos se quedaron pensando, ahora que lo veían la situación con toda la información ahora se
podía explicar porque Harry siempre había sido más pequeño que los de su curso. Todos
miraban a Harry al verlo dormido plácidamente en los brazos del rubio, se veía tan indefenso y
frágil, y pensar que era aquel que era capaz de soportar toda la magia de un fénix, vieron como
en transe como tenía aferrada la Snicht en su mano y su cabeza descansaba plácidamente en el
pecho del rubio y este le acariciaba distraídamente el pelo…¿Le estaba acariciando el
pelo? ¿Draco Malfoy estaba acariciando a Harry Potter?

Draco estaba tan o más sumido en sus pensamiento que los otros presentes en la habitación,
pensando en lo que podría hacer con un Harry para él solito… negó con la cabeza al aparecer
ciertas imágenes que no eran para nada santas… Draco se percato del sepulcral silencio del lugar
y miro sorprendido como todos le miraban fijamente más específicamente a su mano que estaba
acariciando los suaves cabellos de Harry…

¿El acariciando a Harry…?

Draco sin poder evitarlo se sonrojo un poco y al parar de hacer esa caricia, el “bello durmiente”
comenzó a despertar…

Continuara…

Notas finales:
Siento que el capi terminara ahí u.u pero creo que ahí quedo bien jojojo X3 creo que han
quedado dudas, espero k todas sus dudas me las dejen en un comentario así podre colocar más
detalles en el fic, trato de poner toda la información pero algunas veces se me olvida que no
están en mi mente y algunas cosas las dejo como sabias XD así k seria de muxa ayuda que me las
dejaran n.n Matta ne!
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Tuyo… Mío… no! Tuyo! por Pazu
Notas del autor:
Holas aquí otro capi, espero k les guste, es algo más largo que los otros capi creo X3 iba a
agregar más cosas pero creo que quedo bien allí… Otra cosita, me voy a demorar un poco más
en mis otros fic ya que estoy en un momento de bloqueo XD! Y me ha costado más de lo normal
en seguir… a tambn termine el fic El ex-rubio ahora pelirrojo, así que para aquellos que no la
han leído pues aprovéchen se van a reír muxito XD! bueno ahora a leer n_____n

Capítulo tres: Tuyo… Mío… no! Tuyo!

Draco sin poder evitarlo se sonrojo un poco y al parar de hacer esa caricia, el “bello
durmiente” comenzó a despertar…

*********

Harry comenzó a abrir lentamente sus ojos, mostrando en un principio unos verdes más intensos,
o quizás era el efecto causado por no estar usando sus lentes, que al parecer ya no necesitaba,
Harry miro a su alrededor rápidamente, asustándose un poco y separando su rostro del pecho del
rubio algo alarmado, para luego mirar hacia donde había estado recostado encontrándose con la
cara de quien buscaba…

- Draco… - dijo alegremente con una enorme sonrisa en la boca

Draco sonrió imperceptiblemente y asintió con la cabeza

- creo que sería buena idea que le mostrara al joven Harry quienes somos – le dijo con estima el
director

- es que acaso también nos olvido? – Dijo verdaderamente preocupado Nev – entonces porque
recuerda a Draco?

- tranquilo señor Longbottom, como dije anteriormente es solo momentario, puede ser que nos
recuerde pero vagamente, recuerden que es recién un polluelo por decirlo de una forma, acaba de
nacer y puede estar un poco desorientado, cuando ya pase un tiempo podrá recuperar su esencia
– dijo calmadamente y seguro de lo que hablaba – y no es que se acuerde del joven Draco sino
solamente que al ser la primera persona que vio y supo su nombre cuando lo llamo Sirius, Harry
solo dice Draco porque es una necesidad para el tener la atención del joven Malfoy ya que es su
compañero, no sé muy bien pero supongo que por ser la primera persona que vio sintió que era
su compañero o guardián, aunque esto es una suposición el joven Harry nunca me dijo como él
iba a elegir a su compañero… - diciendo lo ultimo mas para él que para los demás

Todos asintieron a lo que el director hablaba…

Pero Draco en un momento de la explicación cuando el viejo-come-caramelos-de-limón dijo que


Harry no se acordaba de él, que solo era por ser su compañero y lo último que quizás solo era su
compañero por verlo a el primero, se decepciono enormemente, pero queriendo arrancar la
melancolía de su interior Draco hiso un movimiento para que Harry se levantara.

El algo molesto por tenerse que separar del rubio se paro, todos pudieron ver que Harry ahora era
más chiquito media aproximadamente 1.61 (n/a: qué casualidad = que yo -.-‘ x k será no¿?),
estaba sin sus gafas dejando ver unas brillantes e inocentes ojos verdes pero eran más verdes
como un verde esmeralda.

Draco iba hacia donde estaban sentados los amigos de Harry y los suyos, cuando sintió una mano
aferrarse a su brazo, miro hacia el azabache este solo le sonrió inocentemente, Draco se quedo
mirándolo por unos largos minutos pero al ver que no estaban solos desvió su vista para ponerla
hacia el frente.

Puso a Harry a su lado enfrente del enorme sillón donde estaban los chicos sentados…- veras
Harry, el es la comadre… Ron Weasley – dijo al final cuando vio la mirada fulminante que le
lanzaba cierta persona – tu mejor amigo – dijo con un tono algo mordaz

Harry miro al chico pelirrojo, ojos celestes y algunas pecas y le sonrió encantado, se veía
simpático, aunque no le había gustado el tono de voz que había usado el rubio en la última frase,
¿acaso era malo que él fuera su mejor amigo?

- ella es Hermione Granger – señalando la chica que estaba al lado del pelirrojo

Harry se asusto un momento al ver como esa chica de pelo “enredado” y chistoso se le lanzaba y
le abraza asfixiándolo un poco

- Granger suéltalo lo asfixias – le dijo el rubio molesto

Herm no le dio importancia y limpiándose las lagrimas que había derramado por la felicidad de
ver que su mejor amigo estaba sano y salvo y algo de tristeza al ver como se encontraba en ese
momento.

Harry se le acerco y le limpio las lágrimas con sus manos y le sonrió tiernamente para después
abrazarla fuertemente y darle un besito en la mejilla, queriendo así aliviar un poco a la castaña.

Draco solo miro molesto la escena para apartar rápidamente al azabache para que se pusiera al
frente de… - el es Neville Longbottom – le dijo algo serio

El azabache miro al rubio que estaba algo serio ¿acaso habría hecho algo mal? O ¿ese chico le
caía mal?, el más pequeño miro atentamente, el castaño le sonreía, esa sonrisa era cálida y
cariñosa, Harry no pudo evitar devolvérsela

Draco siguió con las presentaciones – ellos son mis amigos, Theodore Nott…

Lo miro atentamente, pelinegro, alto y de ojos café oscuro, se veía frio e indiferente, pero algo de
él le agrado y le sonrió y le dijo un callado hola, que el pelinegro le contesto secamente
-… Pansy Parkinson

Se fijo en la chica, rubia, pelo liso y largo, ojos azules y piel pálida, no pudo evitarlo y le sonrió
abiertamente, la chica lo examinaba evaluativamente y eso le hiso sonreír divertido ante el
interés que mostraba la chica

- …y Blaise Zabini

Se le quedo mirando un momento, chico alto, pelo negro azulado largo hasta los hombros a
sujetados a una coleta baja hacia atrás, ojos azules, este le sonreía divertidamente, pero en sus
ojos se veían tristes y Harry no pudo evitar abrazarlo cariñosamente y poner su oído en su
corazón, sufría y quería aliviarlo un poco, empezó a tararear una nana, en el fondo de su
subconsciente Harry había escuchado alguna vez esa nana cuando era pequeño, alguien se la
cantaba para que pudiera dormir o cuando tenía problemas en casa de sus tíos…

Todos pudieron escuchar la cálida y tranquila nana que tarareaba Harry con una melodía
encantadora, que te hacia sumir en un tranquilo y apacible estado de relajación, uno de los dones
de un fénix…

Harry paro de tararean la nana y se alejo del pecho de Blaise cuando sintió que su corazón estaba
más calmado, le sonrió tristemente y este le sonrió igual comprendiendo por que había tarareado.

Harry se dio vuelta y vio que Draco miraba un punto inexistente en el espacio, su mirada era
serena, pero los puños apretados firmemente le demostraba que sus sentimientos estaban
confusos, por un lado tranquilo gracias a Harry, pero por otro lado se sentía una gran furia en el
alma del rubio, algo que el azabache no comprendía, se le acerco temeroso y lo abrazo
fuertemente, mirando hacia arriba para ver el hermoso rostro de su “compañero”.

Draco suspiro y cerró los ojos antes de mirar a Harry y sonreírle… no le había gustado para nada
que el azabache se acercara así a Blaise, pero no era su culpa, porque Harry no tenia que quererlo
a él…- el es mi padre Lucius Malfoy – le indico

Harry lo miro y se asombro de ver a alguien tan parecido a su rubio, aunque fuera más alto y
tuviera el pelo mas largo, lo miro fijamente un rato, se veía frio pero guardaba muchas cosas
dentro, le sonrió y dijo algo que todos quedaron asombrados

- papa Luc – dijo con un tono de broma

Todos esperaban la reacción de la cabeza de los Malfoy, quizás una mirada furiosa o una frase
mordaz, pero solo le sonrió con superioridad pero sin maldad y le revolvió sus desordenados
cabellos, Harry le sonrió de vuelta.

Nadie podía hablar, hasta Draco quedo impresionado por cómo había actuado su padre, solo
despertó de su letargo gracias a que alguien le jalaba el brazo insistentemente…
- el es mi padrino Severus Snape – le dijo mostrándole al oscuro y frio profesor de
pocionesSeverus le miraba como siempre, con desprecio y odio, aunque para el pequeño fénix le
era completamente indiferente ya que podía saber los verdaderos sentimientos que había en las
personas...

- mi padrino – dijo dudoso

- no mío – dijo apuntándose a el

- mío – dijo Harry apuntando al rubio

Draco negó con la cabeza – tuyo – apunto a Harry – mío – se apunto a el

- mío – dijo apuntando a Draco – tuyo – apuntándose a el

- no, no, no mira escucha cuando algo te pertenece se dice mío – dijo - cuando algo es de otra
persona la apuntas y dices tuyo

- tuyo – dijo apuntándose hacia el mismo – mío – apuntando al rubio

- no… - dijo algo molesto al ver que Harry no le entendía

- tuyo… - dijo aferrándose al rubio – tuyo, tuyo, tuyo…

Snape viendo la desesperación de su ahijado quiso ayudar – no, debes de decir mío

Harry lo fulmino con la vista – tuyo – dijo enojado

- no… m-í-o – remarcando cada letra, sin darse cuenta que eso más molestaba al azabache

- tuyo! – grito el azabache (n/a: por si no se entendió Harry quería decir que Draco era suyo X3)

Draco trato de no gritar desesperadamente y al final dejo que esa extraña discusión quedara así.

Los otros personajes que se encontraban en la habitación trataban de no reírse, compadeciéndose


del rubio, después de todo debía tener mucha paciencia de ahora en adelante.

- mira Harry el es Remus Lupin – le dijo para despistarlo y que dejara esa absurda discusión

Harry miro un momento a Remus y con curiosidad se abrazo al cuello del mayor, el castaño
sintió el abrazo del azabache y se inclino para abrazarlo mejor. Harry comenzó a oler el cuello de
Remus y este rio despacio a las cosquilladas que le provocaba inconscientemente el menor.
Harry sintió el olor a lobo que desprendida el mayor, pero no le daba miedo es más le gustaba, lo
hacía sentir protegido y querido, el era como él era una criatura mágica, el azabache se separo
despacio del mayor y le sonrió…
- lobito – dijo cariñosamente

Remus junto con la mayoría se asombro que Harry le dijera así, después de todo casi nunca
sacaban el tema de la condición de Remus, pero el azabache lo dijo con tanto cariño que el
castaño no pudo más que sonreír y asentir, para después volver nuevamente a sentarse
correctamente

- y el es Tu padrino – remarcando el tu

Harry se dio media vuelta con una sonrisa, sonrisa que murió al ver de quien se trataba, era aquel
sujeto que quería separarlo de su rubito. Tan rápido como había borrado la sonrisa, se escondió
detrás de Draco, su cuerpo temblaba, no quería que lo separaran, tenía miedo…

Draco se dio cuenta de la mirada que Harry le dirigía a Sirius, el rubio se dio vuelta para mirar
fijamente al azabache…- Harry el no te hará nada no te separara de mí, es solo que estaba
preocupado por ti

Harry miraba intensamente al rubio, aun detrás de Draco miro hacia donde se encontraba su
padrino, este tenía una mirada herida y preocupada, Harry corrió a donde se encontraba su
padrino para abrazarlo, Sirius lo abrazo fuertemente…

- lo siento Harry, es solo que… - dijo casi a punto de llorar

Harry apretó más su agarre con sus brazos que tenía en el cuello del mayor, este también
aumento el agarre en la cintura del menor…

Draco solo pensaba una y otra vez – solo es su padrino, solo es su padrino, solo es su padrino,
solo es su padrino… - una y otra vez – Harry… - dijo algo ya molesto

Harry se separo del abrazo y fue hacia el rubio- el es Albus Dumbledore el director

Harry miro al viejo feo y le sonrió – hola abuelo

Albus abrió algo más sus ojos celestes, por cómo le llamaba el chico, pero aun así no pudo evitar
sonreír cálidamente

- hola abuela Fawkes – le sonrió al fénix que había permanecido alegado y sin decir nadaEl fénix
lo miro intensamente, y Harry le devolvió la mirada, estuvieron así un tiempo, como si tuvieran
una conversación solamente con la mirada, el que rompió ese silencio fue Harry que se puso a
reír animadamente

El director se paró de su asiento y les dijo a los presentes – será mejor irse a dormir, mañana
tendremos un consejo para ver que vamos hacer con el año de clase…

Todos asintieron, las clases habían empezado hace un par de semana cuando aparecieron los
mortífagos y el mismo Lord Voldemort en el gran comedor esa misma mañana, era temprano por
lo que habían muy pocos alumnos en el, las puertas fueron cerradas por el director para que los
otros alumnos no pasaran peligro, Fawkes fue quien aviso a la Orden y a los aurores, como las
barreras de protección fueron rotas por los mortífagos, los del bando de la luz no les costó trabajo
aparecer en Hogwarts…

- muy bien vamos a buscar algunas habitación para que descansen – dijo risueño el director

Mientras que Harry abrazaba fuertemente el brazo del rubio, diciendo mudamente que ni por
nada del mundo se iba a separar de él.

Continuara…

Notas finales:
Espero k les haya gustado en mi opinión quedo mona X3 sobre todo la pelea de Sev y Harry
jojojo se me ocurrió porque yo molestaba a mi primita chiquita (de dos años ahora tiene tres y ya
no cae u.u’) porque ella decía tuyo cuando se refería a algo suyo X3 jojojojo que era divertido
molestarla XD! Bueno nos vemos en otro capi n.nMatta ne! n.n
Volver al índice
Dormir…Reunión…Conversaciones…Despertar… por Pazu
Notas del autor:
Hola n.n eh vuelto ufff casi muero x.x de un dia a la playa (odio la playa) y que casi me mata un
auto XD! Pude subir otro capi espero k les guste n.n la verdad lo iba hacer mas largo pero m
gusto como termina este capi así k no quise agregar mas n.n’Otra cosa, eh contestado todo los
review asi que si a alguien no tiene una respuesta de su comentario no es mi culpa sino de la pag
n.n’ yyyyyyy muxas gracias x sus comentarios ^^ m hacen muy feliz, ademas que nunca espere k
esta historia gustara tanto ^^ aaaaaaa también para los que siguen mi otro fic Segunda
oportunidad… siete años despues no eh podido actualizar y creo que me demorare mas de lo
planeado u.u’ es qu van a salir nuevos personajes y quiero definir bien su personalidad en el fic
n.n’ espero k m entiendan n.n Así k ahora les dejo leer n.n

Capítulo cuatro: Dormir…Reunión…Conversaciones…Despertar…

Mientras que Harry abrazaba fuertemente el brazo del rubio, diciendo mudamente que ni por
nada del mundo se iba a separar de él.

*******************

Albus miro cariñosamente como Harry a sujetaba fuertemente el brazo del joven Malfoy, sonrió
tiernamente al ver esa escena, esperando interiormente que tuviera un final feliz – muy bien será
mejor que busquemos habitaciones, algunos aurores y medimagos se quedaran en el colegio, así
que será mejor buscar un lugar para todos…

El director abrió la puerta de la habitación y comenzó a caminar por algunos pasillos que
solamente uno de los integrantes del grupo conocía. Los pasillos se hacían más silenciosos y
oscuros, habían ventanales que mostraba un atardecer tranquilo y sereno, ya el mal había sido
destruido y al parecer hasta la naturaleza lo sabía, se podía ver como el viento mecía lenta y
cálidamente las hojas de los arboles, hasta el sauce boxeador estaba calmado sus ramas solo se
movían por el viento, era como si fuera un árbol normal. Iban en un silencio tranquilo, no llegaba
hacer incomodo, todos o casi todos estaban pensando en lo que hace pocas horas había ocurro y
la información que habían recibido, aunque uno de ellos solo tenía pensamientos para un rubio
en particular.

Sin darse cuenta ni siquiera del tiempo que les tomo llegar, Dumbledore abrió una enrome puerta
que al ser empujada hacia adentro dio paso para poder apreciar donde deberían dormir. Ante ellos
se mostro una ante sala, habían algunos sillones de color negro alrededor de una mesa de roble y
unos estantes de caoba con libros antiguos que se encontraban pegados a la pared, habían tres
puertas, una a la derecha, la otra al centro y la ultima a la izquierda…

- la de la izquierda es para los adultos, la del centro es para las únicas jovencitas y la ultima para
los muchachos, mañana a las nueve se servirá el desayuno en el comedor a las once vendré y les
informare de lo que va a pasar de ahora en adelante, por favor necesitare que Severus, el señor
Malfoy, Sirius y Remus me acompañen a mi oficina – sin esperar respuesta el director se fue a su
despacho seguido por los adultos
En la habitación reinaba el silencio, dos grupos, unos Gryffindor y otros Slytherin, que hace
algunos momentos eran solamente enemigos, se encontraban compartiendo una habitación y
aunque no estuvieran hablando y conversando entre todos, no habían comenzado ninguna pelea.
Nadie se movía no decían, nada es como que todos esperaban que otro hablara primero…

Hasta que una castaña ya estaba harta de todo lo que había pasado, necesitaba descansar y los
demás también, así que con su típica vos de mama mandona hablo – muy bien por hoy ha sido
suficiente, será mejor que nos vayamos a dormir…

Draco iba a reclamar y decir como siempre algo mordaz a la come-libros, no por que tenia a
cargo a Potter iba a cambiar con los demás Gry ¿cierto?, pero no pudo ya que un gran bostezo
del azabache lo hiso olvidarse de lo demás, así que aun de la mano – anotación Harry aun no lo
quiere soltar – se dirigieron a la puerta que le habían dado.

Cuando abrió la puerta se encontró con una enrome habitación pintada en tonos claros, habían
seis camas, tres a cada lado, las sabanas eran de color azul oscuro y los doseles de un celeste
pálido, al final de la habitación se podía apreciar una puerta que claramente dedujeron que era el
baño, y en la pared de la derecha e izquierda había un enorme closet. Nott fue al lado derecho y
abrió el closet que había allí, se encontró con sus pertenencias y las de sus amigos, ron fue abrir
el mueble del otro lado encontrando con sus cosas y los de sus otros dos amigos.

Draco saco su pijama negro de seda, mientras que ron sacaba el suyo y el de su mejor amigo…

- toma Harry – le dijo el pelirrojo

Harry asintió y sonrió feliz

- vamos me acompañas al baño para cambiarnos de ropa? – le dijo Nev

Harry miro al rubio y este le asintió, así que siguió al castaño para ir al baño a cambiarse y
lavarse los dientes.

Cuando salió Draco ya se estaba acostado en la primera cama del lado derecho al lado de la
puerta, Harry fue corriendo y se le tiro enzima, Draco salto en su cama por el susto ya que ya
había cerrado sus ojos grises, estaba muy cansado como para no quedarse inmediatamente
dormido en esa cómoda cama.

- Harry no puedes dormir con Malfoy – dijo un molesto Ron

Harry hiso un puchero-

vamos Harry vete a dormir a tu cama, debes descansar ya mañana podemos ir a desayunar juntos

Pero Harry seguía arriba de la cama sin hacerle caso al rubio y con un adorable puchero
- vamos Harry – levantándose de su cama ya cansado, tomo la mano de Harry y lo llevo a la
cama que se encontraba al frente de la suya y corrió las sabanas, tomo al azabache de los
hombros y lo acostó en la cama y lo arropo – ahora duérmete – ya algo cansado y por qué no
decirlo ya se le había acabado la paciencia.

Cuando Draco dio la vuelta para volver a su cama sintió como una mano lo aferraba de la manga
de la camisa que llevaba para dormir, Draco se dio media vuelta y se agacho hacia Harry por el
tirón que había ejercido el moreno, Harry se levanto un poco de la cama y le dio un beso en la
mejilla, Harry tenía un adorable sonrojo y una tierna sonrisa, después de eso se dio media vuelta
para dormir, era ahora que se daba cuenta lo cansado que estaba…

Draco se quedo un momento en el mismo lugar con una mano tocándose la mejilla exactamente
en el lugar en que Harry le había besado, sonrió imperceptiblemente y se fue a su cama, sin ser
consciente de los otros ocupantes de la habitación…

- voy a matar a ese rubio aprovechado – dijo furioso

-cálmate Ron – a sujetándolo de los brazos para que no fuera acometer un homicidio – no hagas
un escándalo si?, debemos pensar en el bienestar de Harry

- por eso mismo, no voy a dejar que esa serpiente rastrera se aproveche de Harry

- Ron…- haciendo que se diera vuelta y lo mirara a los ojos – no hagas estupideces, confía un
poco más en Harry, si eligió a Draco como su compañero es por algo, dale el voto de la duda

Ron solo mascullo algunos insultos y se metió en la cama – buenas noches Nev

- buenas noches Ron – le dijo sonriente

- y nosotros que, no nos dirán buenas noches - dijo burlón Blaise

- piérdete Zabini – le escupió con asco

Blaise no dijo nada, solo se dio vuelta y se cubrió completamente con las mantas de la cama

- buenas noches – dijo serio Theo, mirando fijamente al castaño

- buenas noches - dijo algo sonrojado Nev

Mientras que Ron no dijo nada….

*************

Mientras tanto en el despacho del director, se encontraban cómodamente sentados, el señor


Malfoy, Remus Lupin, Sirius Black y Severus Snape, también se encontraba la profesora
McGonagall y el resto del profesorado, el ministro y los apoderados que conformaban el centro
de padres del colegio, quien comenzó con la improvisada reunión fue el director del
establecimiento

- los eh llamado para decidir que vamos hacer con el colegio, es lógico que por ahora no
podemos tener los alumnos ya que el castillo no está en todas sus facultades…

- quiere decir que quiere cerrar el colegio este año –dijo seriamente el señor Malfoy que era el
presidente del centro de apoderados

- no necesariamente, podemos esperar hasta que esté listo, los alumnos podrán salir más tarde de
vacaciones pero no perderían un año, cuando estaría listos los arreglos? – le pregunto el anciano
director a un joven auror

- en dos semanas el catillo estará como nuevo

- entonces estarían de acuerdo que el colegio se abriera en dos semanas mas

Todos los presentes asintieron…

***********

Ya todos se habían ido solo quedaba Albus Dumbledore junto con su fiel compañero…

- así que “abuela” – dijo divertido el director

Flawer se elevo y comenzó a cubrirlo una luz dorada dejando ver a un joven de no más de
veintidós años, pelo rojizo un mechón le cubría un lado de la cara y ojos café claro, traía unos
pantalones blancos sueltos y una camisa del mismo color, se sentó al frente del director,
mirándolo reprobatoriamente

- vamos Flawer sabes que solamente es un polluelo

- un polluelo que quisiera desplumar – dijo con algo más de diversión en sus ojos, para luego
mirar fijamente a Albus y sonreírle socarronamente – me encanta esta situación – dijo con una
enorme sonrisa

Albus lo miro curioso con esos ya cansados ojos celestes – cual?

- verte así, sin saber todo lo que pasa a tu alrededor – sonrió superiormente

El viejo director sonrió y entrelazo sus dedos apoyando sus codos en la vieja madera de su
escritorio – te divierte eh?

- más de lo que crees, ahora sabes lo que yo sentía cuando tu sabias todo y no me querías decir
nada y me moría de la intriga
- entonces no me dirás nada

- que crees? – le dijo ladeando la cabeza hacia un lado con cara de inocencia

- me lo temía – dijo solamente

El joven se levanto y rodeo el escritorio y se sentó en las piernas del director, este rodeo sus
brazos en la cintura del joven fénix, este puso su cabeza en el pecho del anciano…

- nunca serás mío, cierto? – dijo el fénix cerrando los ojos

- sabes que no puede ser, como vez yo ya estoy viejo y…

- no empieces con lo mismo, sabes que yo tengo mas años que tu aunque no los aparento y yo te
conozco desde siempre, no me importa cómo te ves ahora y si es solo lo físico con una poción se
puede arreglar…

- mi querido Flawer sabes que no es tan simple… - comenzando acariciar los suaves cabellos
rojizos del menor

- aun lo amas cierto?

El anciano no quiso responder y el joven fénix se levanto para ir hacia la ventana de la oficina

- después de tantos años, después de que te traiciono, después de todo… aun lo amas… - dijo
tristemente colocando su mano en el frio material trasparente

- Flawer… - dijo tristemente el director, no pudiendo negar nada de lo dicho

- será mejor ir a dormir, mañana será otro día… - con esas últimas palabras se transformo
nuevamente en un fénix, posándose en el hombro del director

Albus acariciaba a su compañero con verdadero cariño – que aria sin ti…? - El fénix le miro
directamente a los ojos y el director sonrió divertido – nunca cambiaras….

**************

Otro día comenzaba…

Draco se sentía demasiado bien en su cama como para querer despertar, le parecía que el día de
ayer fuera tan lejano, como si en realidad fuera un simple sueño, esa extraña sensación de estar
acompañado le agradaba, le gustaría despertar todos los días así, junto a ese cálido cuerpo junto
al suyo, sentir esas manos en su pecho y sus brazos enrollarse en esa cintura atrayendo mas ese
cálido cuerpo hacia él, poder colocar su mentón en eso rebeldes pero suaves cabellos, poder
besar eso cabellos y poder oler ese aroma a canela y sentir la suave respiración en su cuello…
Draco abrió sus ojos al percatarse de que eso no era un sueño, que todo lo que sentía era verdad,
fijo su vista hacia abajo y se topo con unos enormes ojos verdes que le miraban fascinados,
Draco grito de la impresión y se alejo del azabache sin todavía asimilar lo que estaba sucediendo,
sin calcular bien la distancia termino en el suelo enrollado con la sabana, miro hacia su cama…

Harry estaba estirado a lo ancho de la cama, sus manos sostenía su cara y sus codos sostenían el
peso apoyados en la cama, sus pies se movían hacia arriba y abajo, su rostro mostraba una
sonrisa tierna y divertida y sus ojos brillaban al ver al rubio en el suelo…

Continuara…

Notas finales:
Y que les pareció¿? :P m falto poner la conversación de Sirius, Remus, Severus, y Lucius u.u’
pero eso lo veremos en el prox capi que se viene muuuuuuuy bueno n.n’ espero k les siga
gustando el fic, gracias x sus comentarios n.n m dan muxos animos para seguir n.n
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Habitación de las chicas… por Pazu
Notas del autor:

Wiiiiiiiiiiiiiiiiiii ^^ x fin pude subir el capi ^^ lo se, lo se, m demore un porquito en subir el capi
(¬¬ un poquito eh...) je n.n'

como sea espero k este capi les guste, x k la verdad a mi ono -.-' bueno se hace lo que se puede...

aaa otra cosita tuve un problemilla con el word y cada vez que ponia el nombre del fenix del
director (que por cierto es Fawkes) m lo corfreguia automaticamente a Flawer, asi qeu perdonen
por el error y se podria haber producido un error ^^ (garcias draco_potter por avisareme de mi
error ^^)

y bueno ahora a leer ^^

Capítulo cinco: habitación de las chicas…

Harry estaba estirado a lo ancho de la cama, sus manos sostenía su cara y sus codos sostenían
el peso apoyados en la cama, sus pies se movían hacia arriba y abajo, su rostro mostraba una
sonrisa tierna y divertida y sus ojos brillaban al ver al rubio en el suelo…

**************

Draco lo miro confundido un momento para luego mirarlo enojado con las cejas fruncidas iba a
gritarle a Potter, pero lo que vio en el rostro del moreno le hiso detenerse en su acción.

Harry se había sentado en la cama mirando fijamente al rubio, sin decir nada, pero su rostro
mostraba una sonrisa que le hacía ver como un ángel, pero no un ángel cualquiera sino un ángel
travieso, se le podía ver la aureola partida y unos callitos rojos en su cabeza que se encontraba
ladeada hacia la izquierda como un perrito que nunca ha hecho nada, o mejor como una gatito
travieso, unas lindas orejitas de gatito sobre su cabeza y una linda colita moviéndola de un lado a
otro tranquilamente. (n/a: o.O¿? uff que andromorfo X3)

- Harry… que… - dijo nervioso el rubio, no sabía porque pero no le agradaba esa expresión, era
como si el moreno le dijera que iba hacer una travesura pero que no se la impidiera ni menos lo
retara.

Pero antes de que Draco pudiera detener cualquier acción del azabache, este brinco de la cama y
se le tiro encima del rubio…

- Draco – grito feliz el azabache

Harry había quedado completamente encima del rubio, en realidad el moreno no aplastaba al
rubio ya que no pesaba casi nada, Harry tenía la cabeza escondida en el hueco entre el cuello y el
hombro del rubio, sus manso estaban a los lados, por acto reflejo (n/a: si claro) poso sus manos
en cada lado de la cintura del menor, una pierna de Harry estaba entre medio de las piernas de
Draco, una imagen completamente comprometedora.

Pero eso no era lo que incomodaba al de mirada gris, sino era el sentir la cálida respiración del de
ojos verdes sobre su cuello, le mandaba corrientes eléctricas por todo su cuerpo. Un movimiento
del azabache hiso que el Slytherin se mordiera el labio para evitar un gemido, el moreno había
rozado con su rodilla la entrepierna del rubio (n/a: ¬¬ si esa parte, justo ahí!) este se mordió el
labio fuertemente para no gemir, abrió los ojos aunque nunca se había dado cuenta que los había
cerrado y vio esos enormes y brillantes ojos verdes le miraban curiosos, Harry se había levantado
un poco del cuerpo del rubio para que dar frente al rostro del rubio, Draco no supo porque
levanto su mano derecha para posarla en la mejilla del azabache, este se acerco mas a esa fría
pero extrañamente cálida mano, Draco movía su dedo pulgar en una pequeña y suave caricia y
Harry como un pequeño gatito se refregaba en la mano del rubio, este con su mano acerco el
rostro del azabache y este obedeció a la muda orden de que se le acercara, Draco levanto
lentamente su rostro del suelo teniendo fijamente sus ojos en los verdes del moreno y este
también tenía fija su vista en esos posos grises, nada existía a su alrededor, todo lo demás se
volvió un mero adorno, Draco podía escuchar el rápido palpitar del oji-verde y sonrió
cálidamente, estaban a pocos centímetros de juntar sus bocas…

- SUELTALO MALDITO ACOSADOR!!!!!!!!!!

Draco por el susto por aquel descomunal grito se golpeo la cabeza en el suelo al querer poner
distancia con el azabache, mientras que este se había sentado en el estomago del rubio y sonreí
inocentemente a su amigo pelirrojo

- hola Ron – dijo con cariño

- hola Harry – se suavizo el pelirrojo antes de mirar enardecido al rubio y decirle furioso – que
pensaban hacer sapiente venenosa – le siseo entre cerrando los ojos

Draco iba a contestar cuando alguien interrumpió

- vamos Ron cálmate, si? – le dijo calmadamente Nev, para luego mirar cariñosamente al
azabache – Harry porque no vamos al baño nos arreglamos y vamos a comer? Vamos Ron –
tomo del brazo del pelirrojo no quería que se formara una pelea, además que no sabría como
reaccionaria Harry, si defendería a Ron o a Draco.

Harry asintió divertido y se separo rápidamente del rubio tomando la mano de Nev dirigiéndose
al baño.

Draco se sentó en el suelo sobándose graciosamente su cabeza, mientras suspiraba audiblemente,


estaba seguro que si la comadreja no intervenía él ya estaría violando a Harry

- huy mi querido amigo – dijo dramáticamente Blaise mientras le ponía una de sus manos en el
hombro del rubio – creo que ser de niñera se te hará muuuy duro, en todos los sentidos – termino
burlón mirando a la entrepierna del rubio
- cállate Blaise – fulminándolo con la mirada.

****************

Mientras los chicos hacían de las suyas, en el dormitorio de las chicas, una castaña se despertaba
estirando su cuerpo como una tierna gatita

- veo que dormiste bien anoche – dijo la rubia que estaba acostada a su lado – debió ser por la
compañía – le dijo sugerentemente con una sonrisa picara en su hermoso rostro

Hermione se sonrojo violentamente ante aquellas palabras, completamente asombrada…

Flash Back

Hermione ya estaba cansada, después de ese día lleno de eventos emocionantes, primero se había
levantado cinco minutos tarde, mal augurio, luego no encontró el libro que buscaba en la
biblioteca, en la clase de transformaciones la profesora McGonagall había cancelado la prueba,
después llega Lord Voldemort al castillo con todos sus malditos Mortífagos, para después
rematar de que Harry es el heredero del fénix y no se separa del rubio engreído de Malfoy, ¿Qué
más tenía que pasar para empeorar el día? Y cuando por fin veía la oportunidad de poder
relajarse y poder pensar y analizar la situación, estos se montan un espectáculo, no eso ya era
suficiente para la más inteligente de Gryffindor así que sin poder aguantarse mas y sin querer
llegar a la violencia les dijo lo mas calmadamente posible – muy bien por hoy ha sido suficiente,
será mejor que nos vayamos a dormir… - viendo como el rubio le iba a reclamar, su venita en la
frente ya iba a explotar, pero gracias a Merlín el rubio se distrajo con el bostezó de su mejor
amigo, así Harry inconscientemente evito un trágico y violento descuartizamiento, suspirando
audiblemente cuando ya los chicos iban entrando a su cuarto, la castaña se dirigió a la habitación
que debía ocupar.

El cuarto era enorme, había dos camas de dos plazas con doseles de color rosa pálido, las
acamas estaban de frente una a la otra, una gran ventana se encontraba al final de la habitación
con unas cortinas lilas, al lado derecho estaba la puerta hacia el baño y había un armario a cada
lado de las camas con unas mesitas de noche al otro lado de las camas.

Hermione se saco su blusa y la tiro a la cama, aun algo molesta y distraída tratando de pensar en
lo que pasaría de ahora en adelante con su mejor amigo a cuidado del engreído rubito de
Slytherin, abrió el armario y vio sus ropas, saco su pijama y dos toallas, una para el cuerpo y la
otra para el cabello, tan acostumbrada estaba en dormir con mas compañeras en un mismo
dormitorio no le dio importancia a la chica de pelo rubio que tenía como compañera, así que solo
se metió rápidamente a la ducha, queriendo analizar mejor las cosas con una ducha caliente.

Cuando salió del baño con su pijama que era una polera sin manga y unos short de color gris y
secándose las puntas de su cabello con la toalla, se percato en ese momento que no estaba sola,
Pansy estaba sentada en la otra cama sacando algunas cosas, cuando las dos conectaron sus
miradas la rubia se encamino hacia el baño con su pijama
- veo que estabas demasiado necesitada por una ducha, te metiste tan solo llegar a la habitación –
le dijo con una sonrisa

- emmm… - sus mejillas se pusieron rojas algo avergonzada al olvidar a la chica Slytherin

- está bien, creo que con todo lo que paso es lógico – le dijo simplemente para marcharse al baño

Hermione la miro irse hacia el baño y se le quedo mirando un buen rato, hasta que se dio cuenta
que llevaba muchos minutos muertos ahí parada mirando embobada la puerta cerrada que daba al
baño, movió enérgicamente la cabeza de forma negativa, para luego con paso firme buscar entre
sus cosas un libro que podría servirle, estaba segura que uno de ellos hacían una referencia
acerca de los fénix, las razas y la interrelación que tienen con los magos y otras
criaturas. Después de unos minutos de búsqueda excautiva encontró un libro muy grueso, hojas
ya delgadas y de un tono café claro, la tapa era de color rojo sangre con un extraño símbolo, era
un circulo y dentro de este habían dos pegasos cada uno al frete del otro con runas antiguas
alrededor del circulo, dentro de este y en toda la tapa y contra portada del libro.

Con una enorme sonrisa se dirigió a su cama, se sentó acomodo las almohadas y cojines, prendió
la lámpara y abrió el libro, este no tenía índice ni ningún, por lo que debía volver a releer su
contenido para encontrar aquella información, algunas páginas pasaban rápidamente al recodar
de que se trataban y otras más lentas para buscar cada detalle que se le podría perder, estaba tan
sumida en su libro que no escucho el sonido de la perta del baño abrirse, ni de aquella hermosa
chica de cabellos rubios que tenía un camisa de seda de tirantes color lila (N/A: ¬¬’ es mi
imaginación o eh puesto muxas veces que Pansy es rubia¿?-.-), con su elegancia innata camino
lentamente pero segura hacia la cama que ocupaba la castaña, se sentó a lado de la castaña y
miro hacia el libro que esta estaba leyendo…

- creo que deberías descansar y después buscar información para ayudar a tu amigo – dijo
calmadamente para luego tomar su largo cabello y colocarlo en su hombro derecho y con un
elegante cepillo para el pelo de plata, comenzó a peinarlo suavemente

Hermione se sobre salto, no la había sentido hasta que le había hablado, le miro algo curiosa de
que se comportara así, tan… mmm… ¿amigable? – eh…

- ¿te molesta que este en tu cama? – le pregunto sin mirarla, aun ocupada peinándose su largo
cabello (n/a: que todos ya sabemos de qué color es ¬¬)

- emm… no – dijo algo con duda por el comportamiento de la Slytherin

- no te are nada Hermione, ¿te puedo llamar por el nombre?

- si…

- pues dime Pansy – dijo con una sonrisa – y sigo pensando que deberías leer mañana, ahora
deberías descansar, no te haría bien para tu piel – le dijo tomando el libro y dejarlo a un lado
- pero yo…

- shhhh – dijo posando un dedo en la boca de la castaña – es hora de dormir – con un


movimiento de varita apago las luces y arropo a ambas, acostándose bien cerca de la castaña

- pero… ¿Qué haces? Porque estas en mi cama? – dijo algo nerviosa por la cerca de la otra chica

Pansy sonrió y luego le dijo – es que hace mucho frio – y se acerco más aun a la castaña,
abrazándola por la cintura

Hermione iba a replicar que no hacia frio y que además las mazmorras eran mucho más helada,
pero vio a la rubia tan tranquila y con una tierna sonrisa en su rostro que no pudo decirle que se
fuer, así se acomodo y trato de alejarse un poco de la Slytherin para luego ponerse a dormir…

Fin Flash Back

Hermione estaba tan metida en sus recuerdos que Pansy no le quedo de otra que ser una buena
compañera y sacarla de ese transe y como no se le ocurrió nada mejor le dio un beso en la
mejilla…

Mione miro a Pansy sorprendida esta tenía una enorme sonrisa en los labios…

- ya que tu anoche ocupaste primero la ducha yo la ocupo ahora primero – para luego
desaparecer detrás de la puerta del baño

Hermione la vio desaparecer y se toco su mejilla en donde la habían besado y sonrió embobada,
para luego al darse cuenta lo que estaba pensando sacudió su cabeza y se levanto para ordenar y
buscar ropa que ponerse…

***********

Las dos chicas salieron de su habitación con la intención de ir a buscar a los chicos e ir al gran
comedor a desayunar, pero se toparon con ellos en el recibidor.

Hermione vio con preocupación el enojo que traía Ron que fulminaba con la mirada al rubio y
este no le ponía ni la más mínima atención, Harry estaba alegremente conversando con Nev pero
estaba abrazado al brazo derecho de Malfoy. Hermione se acerco al pelirrojo para que no
cometiera alguna locura, ya hablaría con el después…

Mientras que más atrás iban Blaise, Theo y Pansy, estos dos conversando acerca de lo que
pasaría de ahora en adelante con el nuevo ciclo escolar y Blaise algo retraído en sus propios
pensamientos…

Cuando llegaron al comedor se dieron cuenta que había solo dos mesas grandes, que eran
ocupados por aurores, medimagos, profesores, voluntarios y el director, así que buscaron
asientos para todos juntos…
Desayunaron amenamente, como si nada de lo que la noche anterior hubiera pasado, como si
solo fuera un fugaz sueño, todos comían en calma y conversaban tranquilamente hasta que el
director se levanto de su asiento y anuncio a los presentes…

- como sabrán hay partes del castillo que están demasiadas destrozadas como para ser ocupadas,
las reparaciones se tomaran en terminar a lo máximo dos semanas, por lo que se a decidido que
en esas emanas el colegio cerrara sus puertas, espero que aprovechen las pequeñas vacaciones –
dirigiendo su celeste mirada donde se encontraban Harry y sus amigos…

Los chicos estaban emocionados, podrían descansar y aprovechar de estar con sus familias, y
muchos comenzaron a hacer planes y viajes para disfrutar a concho las dos semanas libres…

- Harry no te preocupes iremos a la madriguera o a Grimmauld Place – dijo sonriente el pelirrojo

Harry se aferro fuertemente del brazo del rubio y cuando este iba a asegurarle a Harry que no se
iba a separar de él, su padre lo interrumpió…

- si ya terminaron vengan con nosotros – dijo el Malfoy mayor y detrás de ellos se podían ver a
un molesto Sirius Black, a un tranquilo Remus Lupin y aun (como siempre) cabreado y serio
Severus Snape, todos los chicos se levantaron para acompañar a los adultos….

Continuara…

Notas finales:

y les gusto¿? espero k si ^^

Matta ne!

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Discusiones y conversaciones de… ¿adultos? por Pazu
Notas del autor:

Por fiiiiiiiiiiiiiiin puedo actualizar es que ayer queria suir el capi y el compu no me dejo abrir el
archivo ¬¬' malditos computadores, siento la demora u.u' pero es que me salieron nuevos fic que
queria hacer XD! lo siento muchooooooo ^^

mmm... si alguien quiere m puede pedir un one-shot con alguna pareja extraña del mundo de
Harry Potter me gustaria que me dijeran ^^ es que quiereo escribir algunos one-shot con parejas
distintas ^^ y pues me gustaria saber los gustos de ustedes, pero hay dos escepciones un
Harry/Ron o Ron/draco no me gustan u.u' pero cualquier otras estaria bien jojojojo ^^

bueno ahora les dejo leer ^^

Capitulo seis: Discusiones y conversaciones de… ¿adultos?

- si ya terminaron vengan con nosotros – dijo el Malfoy mayor y detrás de ellos se podían ver a
un molesto Sirius Black, a un tranquilo Remus Lupin y aun (como siempre) cabreado y serio
Severus Snape, todos los chicos se levantaron para acompañar a los adultos….

********************

Todos se acomodaron en el salón que estaba antes de entrar a sus habitaciones, los cuatro
adultos estaban sentados al frente de los jóvenes, en este orden; Severus, Lucius, Remus y por
ultimo (n/a: pero no por eso menos importantes) Sirius. Los chicos se sentaron así, Neville, Ron,
Hermione, Draco con Harry en su regazo, Pansy, Theo y Blaise.

- y que era lo que querían decirnos – dijo tratando de sonar lo más calmada posible Hermione,
ya le estaba molestando el mutismo de los adultos, además que necesitaba terminar de leer ese
libro que Pansy no la había dejado continuar en la noche anterior.

- todos irán a la Mansión Malfoy para pasar las dos semanas de “vacaciones” – dijo con obvio
disgusto en su voz Lucius

Ron, Hermione, Draco, Pansy y Neville se quedaron con la boca abierta

Cuando desapareció su mutismo Ron grito al rubio menor (n/a: no estaba tan tarado como para
reclamarle algo al rubio mayor ¬¬)

Draco aun algo noqueado por la noticia se paro bruscamente al escuchar el grito del pelirrojo…

Y así comenzó la nueva batalla…


Ron gritaba sandeces y trataba de golpear al rubio, Neville estaba atrás del pelirrojo a
sujetándolo y extrañamente lo retenía…

Draco no se quedaba atrás y también le gritaba al pelirrojo, Theo por extraño que parezca
también a sujetaba al rubio por atrás…

Hermione estaba al lado derecho del pelirrojo diciéndole que se calmara…

Pansy también al lado derecho pero en este caso del rubio que también le decía que se
calmara…

Ron gritaba algo así como:

- NI CREAS QUE IREMOS A TU PESTILENTE MANSION, HARRY SE VA CON NOSOTROS, SUS


AMIGOS, NI SUEÑES EN QUE PODRAS ACERCARTELE MALDITO HURON PERVERTIDO!!!!!!!!!

Draco contestaba algo que sonaba a así más o menos:

- PUES NO LO CREO MALDITA COMADREJA POR QUE SI NO TE HAS DADO CUENTA IDIOTA!!!!
POTTER NO PUEDE ESTAR SIN MI, Y YO NO PIENSO A IR A TU POCILGA QUE LLAMAS
CASA!!!!!!!!!!

Después de esas palabras todo fue griteríos, los “adultos” Severus, Sirius y Lucius se les unieron,
gritando y maldiciendo – solo a palabras nada de hechizos - la sala se lleno de griteríos
histéricos…

Sirius alegando que no tenían por qué ir a ese “hogar de serpientes traicioneras” y que
perfectamente Draco podría pasar las vacaciones en Grimmauld Place…

Lucius decía que no permitiría jamás que su único hijo permaneciera en aquella pocilga y menos
con esa gentuza…

Severus claramente apoyaba a su amigo devolviéndole los insultos al pulgoso de Black, tampoco
iba a permitir que su ahijado estuviera cerca de ese remedo de inútiles…

Hermione trataba de ver lo positivo de ir a la mansión Malfoy ya que ahí claramente podrían
encontrar mas libros con respecto a la condición de Harry, aunque también aprovechando la
ocasión podrían ver otros temas…

Nev decía algunas frases cortas como: “Ron basta” “no hagas eso” “ehhh no…” o cosas por el
estilo y por supuesto tratando de estar concentrado en no dejar que Ron se le escapara,
mientras que tenía que aguantar las miradas para nadas discretas de Theodore Nott…
Ron gritaba y maldecía a todos los presente, diciendo que se habían vuelto locos y que él jamás
iba a pisar terreno enemigo y que no permitiría que su mejor amigo fuera arrastrado hacia esos
lugares “oscuros”…

Pansy solo le decía al rubio con aire soñador que era la oportunidad perfecta de que todos se
conocieran y pudieran convivir algo más civilizados, además que Draco debía tener en cuenta
que si quería conquistar a Potter debía llevarse bien con sus amigos, claramente nadie le ponía
mucha atención sino ya cierto rubio la había mandado a callar…

Theo solo miraba a Nev, realmente preocupado de que con su fina y frágil apariencia acabara
tirado al suelo por el bruto y neandertal pelirrojo…

Draco solo devolvía los insultos a la comadreja ya sin gritar pero con mas veneno en su voz,
jurando una y otra vez que ninguna comadreja pisaría su mansión y que además se llevaría a
Ha… a Potter con él, porque él no podía alejarse de su presencia remarcándoselo burlescamente
a la comadreja pecosa….

Remus los miraba desde donde permanecía sentado recordando cuando todo comenzó la
noche anterior…

Flash Back

Después de haber ido al despacho de Dumbledore, los cuatro adultos se habían marchado
directamente a sus aposentos, el cuarto que compartirían era igual al que tenían los chicos pero
en este solo habían cuatro enormes camas y dos baños…

Lucius hiso un gesto de desprecio después de todo estaba acostumbrado a orto tipo de lujos,
mucho mejores que andar compartiendo dormitorio con otras personas, ni siquiera cuando
estudio en Hogwarts había compartido cuarto, aunque en ese momento no le hubiera
molestado compartir específicamente su cama con cierto castaño…

Severus miro todo con una cara de completo asco, no le apetecía para nada volver a compartir
habitación con otros seres humanos, menos con esos dos estúpidos e idiotas ex-Gryffindor,
sobre todo con el maldito pulgoso, pero sabía que nada podía hacer y no se podría comportar
como el malcriado niñato que era lo que hacía exactamente esa bola de pelo con pulgas…

Remus miro el cuarto era muy grande y acogedor, era muy lindo con sus suaves y claros colores
y esas enormes camas que perfectamente podían caber dos personas sin llegarse a tocar en
toda la noche, suspiro abatido al ver las miradas de las dos serpientes, si ellas estaban molestas
por compartir habitación, no quería ni imaginarse como explotaría su mejor amigo…

- NO PUEDE SER QUE COMPARTAMOS HABITACION CON ESTAS MALDITAS SERPIENTES!!! – grito
como un energúmeno
- créeme el agrado es mutuo – dijo secamente Severus mientras se iba al baño con un pijama
para irse a dormir

- maldito cuervo grasiento – mascullo Sirius mientras se sacaba la túnica y la tiraba a la cama y
se dirigía al armario por un pijama y luego al baño

- al parecer no hay más opción que compartir habitación – dijo secamente Lucius mirando aun
el lugar de forma despectiva

- si prefieres Malfoy podrías ir a dormir en el sillón de afuera – le dijo Remus tranquilamente


mientras iba al armario por un pijama

- mmmm si me acompañaras sería mucho mejor – dijo con una lasciva sonrisa

Remus le fulmino con la mirada y se fue hacia el baño que había entrado Sirius

Lucius sonrió con superioridad – muy pronto serás mío lobito, muy pronto… - en su mirada se
veía seguridad y lujuria descontrolada

Severus salió del baño justo cuando Lucius iba a golpear la puerta así que le dio la pasada, traía
puesto un pijama de dos piezas de seda negra con tres botones de la camisa abiertos, su pelo
estaba sin aquella poción grasienta que eran causados por los vapores de las pociones que
realizaba, coloco una toalla sobre su cabeza y se seco un poco sus largos cabellos negros, dejo la
toalla en su cuello dejando que su pelo cayera libre por su rostro y espalda, sintió con la puerta
de uno de los baños eran abierta fuertemente y miro con enojo al que salía por ella…

- ya Moony solo era una broma – dijo burlescamente Padfoot que salía con un pijama gris que
dejaba apreciar su sexy figura, este miro al único que se encontraba en la habitación le iba
insultar y gritar hasta que lo miro bien, Snape le miro fijamente por unos minutos hasta poner
su atención en su cosas, no pudo evitar mirar descaradamente el cuerpo del cuervo grasiento,
aunque debía decir que en esos momentos era todo menos grasientos, el pijama negro le hacía
marcar más su perfecta figura, Sirius inconscientemente se lamio sus labios, pero cuando se dio
cuenta de su acción movió su cabeza rápidamente de un lado a otro, justificando su
pensamiento hacia Snape por culpa de la falta de un buen revolcón…

Sus pensamientos pervertidos se vieron abajo cuando vio que Snape ya estaba acostado en su
cama que a él no le molestaría compartir, pero a los segundos salieron Remus quien llevaba un
poleron y pantalón algo anchos y más grandes que su cuerpo requería que lo hacía ver algo
adorable y Lucius llevaba un pijama de color verde botella que marcaba muy bien su cuerpo,
ambos salieron del baño, Malfoy ya estaba acostado y Remus estaba alistando las ultimas cosas
antes de meterse en su cama, así que sin pensarlo mucho se fue a acostar a la cama de Remus,
con la mirada furiosa de ciertos Slytherin’s que hicieron vista gorda al asunto…

- ¿Paddy qué haces? – dijo Remus corriéndose de la cama para darle espacio a su amigo
- mmm… es que recordé cuando dormíamos juntos en la misma cama… - dijo
despreocupadamente

A Lucius casi le da un ataque…

- cuando nos quedábamos horas planeando nuestras bromas – dijo con algo de nostalgia

El castaño sonrió ante aquellos alegres y lejanos momentos en que eran jóvenes y
despreocupados, donde eran solo alumnos y no tenían que preocuparse de Lord Oscuros, ni
guerras, ni muertes, ni perdidas tan grandes como lo eran la muerte de James y Lily…

- si eran tiempos muy buenos… - dijo con una sonrisa triste

- en vez de estar hablando de estupideces deberían estar pensando en lo que harán con los
mocosos estas dos semanas – dijo fríamente Severus desde su cama

Sirius lo fulmino con la mirada peo no pudo decir nada ya que Remus hablo primero…

- no son estupideces Snape – dijo calmadamente Remus aunque algo enojado ya que se podía
apreciar en su mirada dorada – pero tienes razón tenemos que pensar en lo que vamos hacer
con los chicos en estas dos semanas

- pues fácil, cada uno se va con sus familias, Harry se viene conmigo – dijo seriamente

Lucius se rio sarcásticamente – olvidas perro sarnoso que tu ahijado esta unido a mi hijo, por lo
que no pueden estar separados – dijo con burla

- pues me vale, Harry se viene conmigo, no lo dejare solo con una zarza de serpientes malditas

- ni creas que dejare ir a mi hijo con ustedes – dijo con superioridad

- además Potter es el culpable de esto, Draco no tiene que pagar por las estupideces de ese
mocoso – acoto Snape

- no le llames así Quejicus – siseo enojado el castaño, asombrando a los presentes por su tono
de voz después de todo el era el más tranquilo de todos los presentes en esa habitación…

- me da igual, Harry se va conmigo – dijo serio y con terquedad Sirius

- Draco se va a la mansión Black, así que vete haciéndote a la idea de que tu apreciado ahijadito
se va a pasar las dos semas con nosotros

- no lo permitiré!!!!!!! Harry jamás…!!!!!


- Ya basta!!!!!! – grito Remus haciendo que todos se callaran ya que Severus también se iba a
meter en la conversación – todos nos iremos a la mansión Malfoy – dijo secamente el lobito

- pero… Moony – dijo lastimero Sirius

- pero nada – corto – e irán T-O-D-O-S, los amigos de Harry y los de Draco, mas nosotros –
apunto a él mismo y a Sirius – y no se habla más – dijo mirando fijamente al rubio retándolo a
contradecirlo

- está bien – dijo tranquilamente el aristocrático rubio, asombrado a los demás…

Severus le miro algunos minutos tratando de analizar que provecho quería sacar Lucius, ya que
el jamás aria algo como eso sin tener un as bajo la manga…

- bien – dijo Remus algo asombrado al ver que el engreído rubio no reclamaba, le miro algo
desconfiado para luego apagar la luz que se encontraba cerca de su cama para poder dormir,
algo que imitaron los demás…

Fin Flash Back

Y ahora Remus volvía a verlos paliándose aunque en una forma más eufórica que en al noche
pasada, respiro hondamente y suspiro con cansancio antes de pararse y mirarles
tranquilamente…

- SE CALLAN TODOS – grito ya descontrolado

Todos se callaron al escuchar tremendo grito del tan tranquilo y calmado Remus Lupin…

- todos iremos a la mansión Malfoy, ya hable con sus padres… – miro a los más jóvenes que
asintieron obedientemente – no quiero más peleas… – miro fijamente a Sirius quien miro hacia
otro lado haciéndose el desentendido – todo lo hacemos por el bien de Harry… - les miro y vio
que no estaba allí - ¿Harry?

Y unas risas provenientes desde una de las esquina algo alejadas de ellos les hizo mirar hacia
esa dirección, encontrándose con la imagen de Harry sentando a lo indio igual que Blaise,
ambos con cartas en las manos y fichas de colores a sus lados, se notaba que el Gryffindor iba
ganando ya que tenia mas fichas en su lado, mientras Harry se reía divertido sin poner atención
a los demás, Blaise miraba frustrado sus cartas maldiciéndose por haber creído que Gryffindor
no sabría nada de cartas…

Remus suspiro, viendo así de calmados ambos chicos esperaba que los demás se llevaran bien,
pero viendo de reojo como Draco y Ron fulminaba a Zabini con la mirada creía que sería algo
verdaderamente difícil, se masajeo la frente tratando de apaciguar su dolor de cabeza que le
estaba ya comenzando…
Continuara…

Notas finales:

espero k les hay gustado ^^ desde el prox capi se pone mas interesante, y tantantan.... lo dejo
para el prox capi jijiijiji espero k me dejen algun cmoentario ^^

Matta ne!

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Acercamientos en la mansión Malfoy (Parte 1) por Pazu
Notas del autor:

WWWWWWWWWWWIIIIIIIIIIIIIIIIIII jojojo ^^ tengo 100 comentarios !!!!!!!!!!! siiiiiiiii soy


feliz jojojo ^^ muchas gracuas x sus lindos comentarios, aqui les traigo la primera parte del fic,
es que soy dada a capi cortos este creo qeu es el mas largo XD! asi qeu lo dividi en dos espero k
les guste ^^

cuidense muchito

a leer ^^

Capitulo siete: Acercamientos en la mansión Malfoy (Parte 1)

Parejas: Pansy/Hermione; Lucius/Remus; Sirius/Severus

Remus suspiro, viendo así de calmados ambos chicos esperaba que los demás se llevaran bien,
pero viendo de reojo como Draco y Ron fulminaba a Zabini con la mirada creía que sería algo
verdaderamente difícil, se masajeo la frente tratando de apaciguar su dolor de cabeza que le
estaba ya comenzando…

************

Después de un día completamente ajetreado donde unos refunfuñaban, otros miraban con odio
y otros eran completamente indiferentes, pudieron llegar en lo que cabe decir sanos y salvos a
la Mansión Malfoy.

No se puede negar que la mayoría habían quedado con la boca abierta al ver la esplendida
imagen que sus ojos pudieron apreciar. Esa mansión era más que enorme era gigante en todo lo
amplio de la palabra, quizás algo más pequeña que Hogwarts, pero para ser considerada una
“mansión” para tres magos era algo… ¿extravagante?

Draco le sonrió con superioridad a Ron, este iba a recriminarle al rubio petulante, pero la
mirada que le lanzo Hermione le hiso detenerse en el acto, y solo mascullo un insulto por lo
bajo, haciendo rodar los ojos a la castaña y provocarle un aliviado suspiro a Neville.

********

Ya llevaban tres días en la mansión, no había pasado nada relevante, solo algunas peleas
rutinarias entre Draco y Ron y Severus y Sirius, mientras que por otro lado Pansy trataba de que
Hermione no estuviera todo el día en la biblioteca, y Lucius perseguía a Remus por toda la
mansión acosándolo y el castaño escondiéndose como podía, por otro lado Theo seguía
cuidadosamente a Nev que se iba a los invernaderos de la mansión y por ultimo Harry que cada
vez que Draco lo dejaba botado por pelearse con Ron, se iba a jugar con Blaise. Algo que ponía
más que celoso al rubiales y por no decir a un pelirrojo…

*********

Sucesos del Cuarto día:

Pansy se dirigía a la biblioteca ya había desistido de que Hermione no saldría hasta por lo menos
las cinco de la tarde de aquel lugar. Abrió la puerta suavemente sin ya sorprenderse de ver a la
castaña rodeada de varios libros a su alrededor, la Slytherin se fue a un reconfortante sofá que
se encontraba cerca del escritorio que ocupaba la Gryffindor, en sus manos tenia una de las
tantas revistas muggles que le había conseguido Hermione. En unos días más cuando ya los
ánimos entre los magos estuvieran algo mas relajantes y no tan efusivos por la muerte de Lord
Voldemort, irían al Londres muggle y mágico a comprar ropa para Harry ya que esta le quedaba
muy grande, por lo que ella quería informarse de la moda muggle, algo que tenía que reconocer
que le estaba gustando muchísimo, la ropa era variada y muy linda, así que aprovecharía de
comprarse algo para ella y para sus amigos Slytherin, seria toda una proeza conseguirlo, pero
seria más que interesante verlos con ropas que no fueran las típicas túnicas.

Se acomodo mejor pasando una de las hojas marcadas en algunos lugares con círculos rojos,
eso era lo que más le había gustado y que quería conseguir, iba a seguir en su lectura cuando se
acordó de algo…

- Hermione… - susurro la rubia, hace ya algunos días en que se trataban con sus respectivos
nombres - sabes, ¿has visto a Harry? Es que vi a Draco solo en el estudio y no estaba cerca de
Ron ¿le habrá pasado algo?

Hermione despego sus ojos del libro para mirar a la rubia – pues… quizás este con Remus

- si tienes razón – mirando hacia el lago

La castaña miro a la rubia un minuto mientras dudaba en algo hasta que suspiro y le dijo con
una sonrisa - ¿Por qué no vamos al algo? Es un día precioso para pasar la tarde allí

Pansy se sorprendió por la invitación pero asintió rápidamente antes que la castaña declinara su
invitación.

Ambas salieron de la biblioteca de la mansión Malfoy para ir junto al lago y pasar una agradable
tarde…

********************

Remus se encontraba en su habitación luego que un “descuidado” elfo le había tirado algún
extraño ingrediente y ahora tenía una fea mancha café en su blusa blanca, suspiro maldiciendo
su suerte. No la había podido sacar con su varita es por eso que se había ido al baño que se
encontraba en su habitación para limpiarla con agua, pero aun así no salía y esa era una de las
ultimas que le quedaban decentemente buenas. Como profesor había ganado dinero pero no el
suficiente para poder mantenerse decentemente, sin contar que como hombre lobo era muy
difícil ganar dinero, no había querido aceptar el dinero tanto de Sirius y mucho menos el de
Harry (que el chico cuando estaba aun completamente consciente de sus actos le había dicho
que sacara cuánto dinero necesitara de sus bóvedas) pero él no lo iba hacer, no podía depender
de otros, aunque ya tenía una idea de lo que aria Sirius cuando salieran a comprar la ropa de
Harry…

Suspiro nuevamente pero esta vez por la “serpiente alvina” como le decía Padfoot, se había
dado cuenta de sus “intenciones” de acercamiento mas “intimo” y sabía perfectamente que
tuvo toda la culpa en que el elfo le manchara… gruño…

No quería nuevamente al rubicito mayor tras de él, después de todo en Hogwarts también lo
había “acosado” aunque sus amigos no se habían dado cuneta y el tampoco les hubiera dicho,
en realidad nunca se los comento, la verdad en esos años cuando aún era joven y aunque
siempre dudaba por su condición tenia la ligera esperanzad de que el sexy e inalcanzable Lucius
Malfoy se fijara realmente en él y no solo como una presa mas. Nunca llegaron a nada ya que l
poco tiempo después había sido publica su casamiento con Narcisa, Malfoy nunca más lo acoso
ni le dio una mísera mirada, desde ese momento jamás creyó nuevamente que alguien se fijaría
en el de verdad…

Y ahora venia y nuevamente le acosaba es que ¿Qué se creía ese…?

Sus pensamientos fueron bruscamente cortados al sentir como alguien le abrazaba fuertemente
y colocaba sus labios en su oreja para susurrarle en el odio, lo empujo rápidamente mirando
furiosos al creído de Malfoy…

- ¿Qué crees que haces Malfoy? – le dijo verdaderamente enojado

- mmm… yo creo que sabes perfectamente lo que hago – le miro lascivamente

- ríndete Malfoy conmigo no sirve tus “encantos” – dijo eso mientras iba al closet por alguna
camisa nueva

Lucius Malfoy solo se recargo en el marco de la puerta, sus ojos grises no se despegaban del
apetecible cuerpo del ex – profesor de DECAO.

- serás mío lobito, serás mío… - lamiéndose sus labios – sabes Remus… - pronuncio el nombre
provocativamente, haciendo que el nombrado brincara, provocando su dicha interior – eh visto
a mi hijo solo hace un momento ¿no has visto a Potter?
Remus le miro un momento antes de colocarse por fin una camisa negra – quizás este con
Zabini se la pasa mucho con él – le dijo tranquilamente

Lucius miraba a Remus sin pestañar, aquella camisa hacia lucir increíble al “lobito”, estaba
contemplando la posibilidad de regalarle ropa de buena calidad y que se ajustara a su delicado
cuerpo, pero por otro lado – quitando el hecho de que posiblemente por no decir que no
aceptaría ropa proveniente de el – sería mejor comprarle algo mas holgado, así muchos no se le
acercarían…

Mientras Lucius seguía en su nube en donde Remus ya le pertenecía y se ponía celoso hasta por
Dumbledore. Remus iba saliendo de la habitación, al ver que el rubito no se movía le hablo…

- que!? Piensas quedarte todo el día allí

Lucius solo le miro sin decirle nada, levantando una ceja al estilo Malfoy…

Remus volvió a suspirar – voy a ver a Sirius, quizás aun no se han matado – dijo cansinamente
mientras caminaba hacia las mazmorras donde Severus tenia sus laboratorios

Malfoy sonrió socarronamente – no creo que el pulgoso de Black pueda con Severus – dijo con
burla

- pues déjame recordar que en el colegio sí que le iba mal a Snape

- no cuenta Black tenia ayuda tuya y de Potter

Le sonrió burlonamente – pues veamos cómo están – dijo antes de dar media vuelta y siguiendo
su camino

Lucius le siguió en silencio…

Mientras bajaban las escaleras escucharon una explosión, ambos se miraron un segundo antes
de salir corriendo para ver lo que habían hecho esos dos, o mejor dicho que es lo que Sirius
había provocado…

Remus abrió la puerta rápidamente, pero nunca hubiera estado preparado para ver aquella
escena y Lucius menos…

Momentos antes de que Remus y Lucius abrieran la puerta…

Sirius no tenía nada mejor que hacer, entonces ¿Por qué no molestar a Snivellus?
Es por eso que en estos momentos se encontraba camino hacia las mazmorras en donde se
encontraba el pocionista, como siempre rodeado de sus amadas pociones. Hiso una mueca en
su rostro, no podía llegar a entender el gusto por las pociones.

Iba por un pasillo y en vio entre abierta la puerta del estudio de Lucius, iba a ir a molestar a la
serpiente alvina mayor pero se dio cuenta que no era Malfoy padre sino Draco, le miro un
momento dudando de ir a molestarlo, se dio cuenta para su asombro que no estaba con su
ahijado. Se dio media vuelta quizás Harry se había ido con Zabini porque Ron y Draco se
volvieron a pelear, aunque no sabía si era mejor que se juntara con el rubito o con esa otra
serpiente, suspiro

¿Por qué todo tenía que ser tan complicado?

Por fin había llegado hasta las mazmorras, abrió la puerta lentamente y tratando de que no
hiciera tanto ruido, quería asustar al murciélago grasiento. Pero al abrir la puerta se quedo
quieto allí, su mirada azul seguía los delicados movimientos que realizaba el azabache, sus
largos y finos dedos se movían con maestría entre los ingredientes, su mirada negra como la
noche se concentraban cien por ciento en la mezcla que se concentraba en el caldero.

Se preguntaba como seria sentir aquellas delicadas manos sobre su piel recorriéndola con
aquella devoción que tenia con los ingredientes, esa mirada negra como la noche llena de
deseo, sentir sus finos labios...

- oye pulgoso ¿te quedaras todo el día ahí paradote como un energúmeno? – dijo con fríamente
mientras seguía con su poción.

Sirius se sobresalto pero no dijo nada, aun estaba algo atontado por sus pensamientos, se
preguntaba interiormente si no estaba mal de la cabeza. Se encamino con algo de desgana hacia
donde Snivellus se encontraba trabajando. Se coloco al lado del profesor de pociones, mirando
fijamente el caldero en donde hervía una mezcla viscosa de color morado oscuro.

- ¿Qué haces aquí pulgoso? ¿Acaso ya en enterraste otro de tus huesos? – dijo con burla pero
sin detenerse en ningún momento en su complicada elaboración

- muy gracioso Snivellus, pero no... Quería ver si al fin y al cabo una de tus amadas pociones te
terminaba violando... – le dijo con gracia mientras se recargaba en al mesa

- no estoy para tus estúpidas bromas Black – dijo con burla en su voz – así que sal por donde
llegaste...

- estamos algo frustrados ¿no? Snivellus, que… hace cuanto no te follan – le dijo con tono de
burla mientras se acercaba a la oreja del azabache y le mordía la oreja
Snape se sorprendió ante aquella “caricia” y se sobresalta, soltó el cuchillo que en esos
momentos había tenido en su mano derecha y por el descuido provoca que unos ojos de
guarisapo se cayeran dentro del caldero.

Sirius sintió un ruido proveniente del caldero, el nunca había sido buena en pociones, odiaba las
pociones, pero no era tonto y sabía que aquel sonido y esa extraña reacción en donde la masa
morada burbujeaba con fervor era un mensaje claro:

ALÉGATE… VA EXPLOTAR!!!!!!!!!!!!!

En un acto reflejo Sirius tomo de los hombros a aun en shock Severus antes de que aquella cosa
explotara…

Severus tocio con dificultad ya que un peso sobre él no lo dejaba respirar con normalidad,
movió un poco su rostro y se quedo blanco al ver quien estaba sobre de él. Sirius se removió un
poco y apoyando sus manos en el piso se levanto un poco del suelo su mirada se cruzo con una
negra que le miraba mudo de la impresión.

Jamás habían estado tan cerca uno del otro, sus alientos se entremezclaban, sus miradas se
fundían en una y su piel inexplicablemente ardía por el contacto de la otra.

Severus entreabrió sus labios inconscientemente, mientras que Sirius se lamio sensualmente
sus labios. El animago se acerco lentamente a aquella boca que le llamaba a gritos mudos que
se posicionaran sobre ellos, mientras que Severus levantaba un poco su cabeza para poder
acortar la distancia más rápido.

La puerta fue abierta rápidamente…

Sirius como en trance igual que Severus voltearon lentamente hacia la puerta, viendo a un
sorprendido Remus y un anonadado Lucius.

Remus lentamente como inconsciente de sus actos dio un paso hacia atrás igual que Lucius, aun
con la manilla de la puerta en su mano, el lobito dio otro paso hacia atrás mientras que su brazo
jalaba la puerta para cerrarla y terminar cerrándola.

Tras la puerta Remus y Lucius seguían mirando la puerta de madera oscura, como si aun
pudieran ver los ocupantes de la habitación. Remus salto en su sitio al sentir como una mano lo
había pellizcado en el trasero, giro su cabeza enfadado mirando al culpable.

- ¿Qué pretendías Malfoy? – le siseo sobándose su retaguardia

Le sonrió con superioridad – comprobando si no estaba en un sueño


- bastardo… - le dijo antes de subir las escalera, pensando en cómo abordaba a su amigo para
saber que se suponía que “tenia” con Snivellus

Lucius solo sonrió socarronamente siguiendo a su lobito, divirtiéndose internamente al imaginar


cuando se encontrara con su amigo y le “dijera” lo que pasaba entre él y el pulgoso de Black.

Por el pasillo que dirigían a la mazmorra se pudo escuchar un “sutil” grito…

- CÓRRETE MALDITO PERRO PERVERTIDO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! AHORA SI TE MATO MALDITO


BLACK!!!!!!!!!

Continuara…

Notas finales:

jojojo espero k les haya gustado, en el prox capi vienen las parejas de: Theo/Nev; Ron/Blaise y
Draco/Harry ^^ bueno nos leemos en el siguiente capi espero sus comentarios ^^

Matta ne!

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Acercamientos en la mansión Malfoy (Parte 2) por Pazu
Notas del autor:

Holas -.-' estoy tratando de subir el capi, por que tengo problemas paar subirlo TT-TT pero sera...
emmm les aviso que hay errores de ortografia x que no lo revise, asi como palabras mal escritas
lo siento, prometo editar luego el capi ^^

espero les guste, no quiero ninguna maldicion en ssu comentarios, lo digo desde ya ¬¬

ahora a leer ^^

Capitulo ocho: Acercamientos en la mansión Malfoy (Parte 2)

Parejas: Theo/Nev; Ron/Blaise; Draco/Harry

Por el pasillo que dirigían a la mazmorra se pudo escuchar un “sutil” grito…

- CÓRRETE MALDITO PERRO PERVERTIDO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! AHORA SI TE MATO MALDITO


BLACK!!!!!!!!!

*********************

En otro lado de la mansión más específicamente en el invernadero de esta, que más bien
parecía una jungla, se encontraba nuestro adorable Nev recogiendo y admirando aquellas
exóticas y bellísimas plantas. Casi se había desmallado al ver el inmenso invernadero que poseía
Draco Malfoy en su mansión, las plantas eran de las más difíciles de conseguir. Desde que
habían llegado él se pasaba casi todo el día encerrado en el invernadero y lo mejor de todo es
que Lucius Malfoy le había dicho que podía sacar cualquier planta que quisiera siempre y
cuando le dijera a los elfos encargados del invernadero para poder reponerla luego. No podía
negar que casi le da un colapso nervioso al escuchar aquellas palabras, después de todo él no
era nada de ellos, ni siquiera amigo de Draco, pero le pareció ver que todo era por su ex –
profesor de DECAO y es que aunque todos creyeran que él era muy despistado e inocente él se
había dado cuenta de las intenciones del señor Malfoy de conquistar al adorable Remus Lupin…

En esos momentos se encontraba acariciando una “delicia de primavera” que era una planta de
tallo pequeño pero gordo que tenía seis largas hojas rojas, y su aroma era muy potente, esta
planta salía en invierno dándole un toque de primavera en el ambiente invernal e allí su nombre
que comúnmente se utilizaba en aquella preciosa flor que servía para curar dolores musculares
utilizando sus hojas mas otras plantas en conjunto.

Suspiro algo triste, mientras sus manos delicadamente sostenía una de las grandes hojas rojas y
con un pequeño cepillo la pasaba suavemente sobre la hoja, la planta mientras tanto se movía
suavemente encantada con el amable y cálido trato que recibía del joven. Aun cuando se
encontraba en su lugar preferido de la mansión se sentía algo solo, todos estaban en sus
mundos, problemas y cosas, mientras que el se sentía un verdadero estorbo, lo único bueno
que hacía era mantener el invernadero, porque aunque el lugar contar con la limpieza y
mantenimiento por elfos, eso no era lo mismo a que uno mismo lo hiciera, las plantas crecían
mucho más fuertes y saludables si se les consentía personalmente y con verdadero cariño, las
plantas eran como los animales, ellas aparte de necesitar agua y sol también necesitaban ser
mimadas.

Miro hacia el cielo, en donde un hermoso cielo azul claro inundaba el infinito, mientras que
algunos rayos dorados atravesaban las ventanas y entraban en el invernadero. Se preguntaba si
su vida seguiría tan solitaria como hasta ahora, porque aunque tenía amigos, ellos habían
pasado muchas cosas, sus problemas eran de vida y muerte y no necesitaban más
preocupaciones como las que a él le afectaban, su abuela estaba débil y sabia tan bien como
ella que le quedaba poco tiempo de vida, la iba a extrañar mucho porque ella fue su única
familia, ocupando el rol de madre y padre. Sus padres por otro lado aun vivían en su mundo de
fantasía en donde el dolor, las preocupaciones no existían, aun no podía dejar de llorar cada vez
que los visitaba, no lloraba en frente de ellos porque ellos no necesitaban ver su dolor. Y lo peor
de todo era sentirse solo una estampa en la vida de sus amigos, nunca les había podido ayudar
como se debía, no era inteligente como Hermione y tampoco un fiel compañero como Ron. De
verdad que se entristecía en no poder hacer que sus seres queridos estuvieran bien, poderlos
apoyar y lo peor de todo, es sentir que aquello por “él”… porque ¿Cómo es posible que alguien
tan perfecto como Theodore Nott se podría figar en alguien como él?

Mientras nuestro castaño seguía en sus melancólicos pensamientos, alguien le observaba


detenidamente…

Theo miraba embelesado la figura de Neville, y es que este al mirar hacia el cielo, los rayos del
sol se habían posado en su figura haciéndolo ver como un ángel, una visión divina, algo
realmente inalcanzable. Su mirada no se despejaba de la frágil figura del Gryffindor, que lo tenía
loquito desde hace mucho tiempo, y aunque sabia hace mucho sus sentimientos hacia Neville,
nunca quiso conquistarlo o declarase, no era el momento, el era un Slytherin y todos eran
clasificado como un posible mortífago y sabia que si se declaraba solo traería confusión al
castaño, por eso sus sentimientos fueron callados, además no quería perderle y sabía
perfectamente que si alguno de sus compañeros se enteraban que estaba saliendo con un
Gryffindor todo se iría a la mierda… Pero ahora era distinto, no había Señor Tenebroso que se
metía en sus planes, no había mortífagos, su padre estaría ya en Askaban así que ahora solo
debía actuar, sabía que no le era indiferente al castaño, solo debía mover bien sus fichas y lo
tendría con él, por algo era un Slytherin y utilizaría toda su astucia para conseguir el corazón de
aquel Gryffindor.

Muy bien este era su momento, después de todo Neville aprecia algo abstraído, él sabía cuanta
soledad ocultaba esas miradas que tenia y esas sonrisas tristes y no quería verlas nuevamente,
quería que de verdad mostrara miradas llenas de vida y sonrisas de verdadera alegría. Con paso
ligero salió de su escondite que era detrás de una enorme planta que parecía árbol pero no lo
era, su tallo era verde claro y poseía varias ramas celestes con hojas rojas, no quería saber lo
que era…

- hola Neville – dijo con voz neutra, después de todo seguía siendo el frio Theodore Nott.

Neville salto un poco desde su sitio, el estaba sentado en el suelo junto a la planta, además que
estaba tan metido en sus pensamientos que no se había dado cuenta de la presencia del
Slytherin.

- hola – dijo sonrojándose y desviando su mirada hacia el pétalo que cepillaba

- ¿no has visto a Potter? – dijo sin mayor importancia, a él no le interesaba donde se encontraba
pero debía empezar una conversación

- no ¿porque? – pregunta extrañado y algo preocupado por su amigo

- vi a Draco en el despacho y Potter no estaba con él – dijo calmadamente mirando la flor que
cuidaba Neville, como desearía que esas manos le tocaran así a el

- ya veo, quizás este con Blaise los he visto muchas veces juntos – dijo con una sonrisa al
recordar cómo se ponían a jugar esos dos mientras que Ron y Malfoy discutían

- ¿Blaise? – dijo sorprendido

- si… - dijo algo nervioso sin entender porque se sorprendía, él también los había visto juntos

- ¿desde cuándo le llamas Blaise? – le cuestiono algo ¿celoso?

Neville se sonrojo – hace algunos días, cuando me encontraba con Harry, pues dijo que
deberíamos tratarnos con nuestros nombres y eso…

- ya veo, dime Theo – dijo secamente

Neville se sorprendió ante las palabras del Slytherin, sonrió dulcemente – claro, también puedes
llamarme por mi nombre – dijo para aclara que no tenía que tratarlo pro el apellido.

Se quedaron mirando unos minutos, Neville se sonrojo ante la atenta mirada de Theo, se
maldijo internamente al ser tan tímido y sonrojarse por todo, mientras que Theo estaba más
que encantado al ver como el chico se sonrojaba.

Pero el mágico momento se perdió cuando Theo se quejo de dolor y se llevo su mano hacia su
pierna apretándola firmemente teniendo que llegar a sentarse en el suelo ya que no podía
mantenerse en pie.
Neville se levanto rápidamente y se arrodillo ante el Slytherin para ver qué es lo que tenia. Con
movimientos firmes y decididos, dejando al lado su forma insegura de actuar, aparto las manos
de Theo y levanto un poco el pantalón para ver qué era lo que tenia, se sorprendió al ver que
tenía dos puntos rojos un poco mas abajo de la rodilla, miro a sus lados y a su derecha vio como
una rama roja se arrastraba por la tierra, era un “lazo de sangre” o también “la planta vampiro”
ya que estas se alimentaban de sangre, en las puntas de sus ramas tenían como una especie de
boca en donde salían dos colmillos con los cuales succionaban la sangre, si estaban sedientas
podían llegar a matar a un humano, pero si solo sacaba un poco podía causar debilidad
muscular y alucinaciones.

Neville reviso y vio que no había peligro, pero era mejor que Theo se quedara acostado
mientras que el efecto de la planta pasara. Se paró un momento y se coloco atrás de Theo,
levanto la cabeza de este y las coloco suavemente sobre sus piernas. Debía estar débil por lo
que quizás se pondría a dormir y no se acordaría de eso, así que Neville aprovecho y comenzó a
acariciar los cabellos de Theo.

Theo se dejo hacer, la mordida no había sido para anda grave y ya se sentía como siempre, pero
no iba a desaprovechar la oportunidad de que el castaño le acariciara, cerro sus ojos para
enfocarse en aquella inocente caricia, sonrió débilmente pero con astucia, se preguntaba si
habría alguna planta que podría ayudarle con Neville, quizás…

********************

Blaise había visto hace unos momentos a las chicas caminando hacia el patio trasero de la
mansión, se pregunto qué le había dicho o hecho Pansy para que Granger saliera de la
biblioteca, suspiro cansad, hoy en día habían cambiado demasiadas cosas algunas para bien
pero otras… Siguió su camino que era… ninguno la verdad, hace mucho que no sabía qué hacer
con su vida, todo se estaba desmoronando.

Vio a lo lejos al pelirrojo Gryffindor buscando desesperado a alguien, supuso que era a Harry,
una opresión en el pecho le hiso hacer una mueca de dolor, no le gustaba admitirlo, pero esa
batalla estaba perdida, se notaba el amor del pelirrojo que tenia al azabache y con eso el no
podía ganarle. Había tratado de acercársele de buena forma, pero el Gryffindor siempre lo
rechazaba violentamente, tenía que asumir que su amor jamás seria correspondido.

Termino de bajar las escaleras cuando se encontró con un elfo domestico que le miraba
nerviosamente…

- joven Zabini, su madre está en la chimenea de la biblioteca quiere hablar con usted – termino
inclinándose exageradamente para luego desaparecer rápidamente.

- mierda – mascullo por lo bajo


Sus pasos se apresuraron para llegar a la biblioteca, creía que se había desecho de su ‘madre’
por lo menos hasta que terminara las vacaciones y con suerte hasta que terminara su último
año de Hogwarts y de paso olvidarla por siempre después de salir del colegio y así poder hacer
su vida como quisiera, sin las artimañas y el dolor que le causaba saber que su madre no le
amaba, no le quería, que no le importaba nada de él.

Ron miro asombrado el caminar rápido de Zabini, se pregunto qué es lo que estaría tramando,
ya que no encontraba por ningún lado a Harry fue hacia donde se encontraba la biblioteca y
donde hace algunos segundos atrás había entrado Zabini, se apoyo en la puerta entre abierta al
escuchar las ‘voces’ que provenían de la habitación… y se quedo mudo del impacto…

- que deseas ‘madre’ – diciendo la última palabra como un verdadero desprecio

Desde la chimenea se veía a una mujer de facciones finas, de largos cabellos negros algo
ondulados y ojos oscuros - oh! No me hables así mi querido hijo – dijo en tono de burla pero
con voz refinada y baja

- discúlpame ‘querida’ madre – dijo tan falso como su progenitora – no tengo tiempo, dime
rápido que es lo que quieres – no quería que sus amigos se enterasen de que su madre había
hablado con él

- no deberías ser tan maleducado, no te eduque para que fueras un cualquiera – le dijo enojada

Zabini bufo molesto, si ni siquiera le había educado lo hicieron los elfos domésticos y una nana,
¿de qué se quejaba ‘esta’ ahora? – Solo habla – dijo entornando sus ojos

- pues bien… - haciendo una mueca de desprecio por el comportamiento de su ‘mal’ hijo – te
casas en dos meses más, dos semanas antes de tu cumpleaños – le dijo con voz monótona,
como si fuera lo más normal del mundo aquella declaración

- QUE! – Grito impactado - ¿de qué estás hablando!? – le dijo con voz más baja

- lo que escuchaste hijo, el señor Byrne está encantado de ser tu esposo…

- de que estás hablando, ese viejo tiene más de cuarenta – dijo totalmente asqueado, el había
conocido a ese señor en una de las tantas fiestas de su madre y era un total repulsión acordarse
de ese viejo degenerado

- eso es de lo de menos, el es muy rico, además que me deberías de agradecer ahora que el
señor tenebroso cayo tenemos que volver a recuperar nuestro apellido y posición social – dijo
como si eso fuera lo más importante del mundo

- estás loca… - susurro con dolor al ver que su madre quería hacerle – estas completamente
loca! Yo jamás aceptare! – dijo con voz firme
- pues no me importa lo que tú! Quieras, aun eres menor de edad, acuérdate bien que entraste
adelantado a Hogwarts si que aras lo que yo! diga – dijo retadora

- pues estas muy equivocada si crees que con eso me vas a chantajear – dijo aun con firmeza

Su madre rio macabramente ante la reacción de su ‘querido’ hijito – pues si no lo haces iré al
ministerio y diré que eres un mortífago – dijo mirándolo calculadoramente

- no, tú no puedes hacer eso – dijo quebrándose su voz y aferrándose su brazo marcado
fuertemente – no, no, no puedes, tú me obligaste!!! – le grito mientras que lagrimas caían por
sus ojos

- ja, ja, ja no me hagas reír mocoso, ¿a quién creen que van a creer? ¿A un hijo malcriado y
desobediente o a una ‘adnegada’ madre – dijo lo ultimo con sarcasmo

- no, no, no, no… - repetía mientras que sus piernas ya no pudieron soportar su peso y cayó al
piso de rodillas

- acostúmbrate a la idea ‘hijo’ porque ya está todo decidido y no podrás hacer nada por evitarlo,
antes de ir al colegio te pasare a buscar para que el señor Byrne te vea – dijo con diversión – ah!
y algo que has hecho muy bien es que has cuidado muy bien tu virginidad, eso aumenta el
monto por desposarte – dijo con burla mientras que desaparecía con una macabra risa de
fondo.

Blaise comenzó a llorar sin tapujos, abrazándose a sí mismo sin poder creer lo que su madre le
había dicho, lo que en el futuro se le avecinaba, todos sus planes, todo se iba a un carajo y ya
jamás podría luchar por la persona que amaba, todo era una mierda…

Ron estaba más que impactado, jamás creería que una madre podría tratar a si a su hijo,
tampoco podía llegar a creer lo que esa vieja loca le iba hacer a su único hijo, era una
malnacida, ¿Cómo le podía hacer algo así a un chico tan lindo? negó un momento con su
cabeza, no podía estar pensando en esas estupideces, pero en realidad se sentía muy mal por
Blaise y él que creía que era un estúpido Slytherin, sin sentimientos, un hijito de mamá que
tenía todo lo que quería y lo peor de todo era saber que le habían obligado tomar la marca,
cuando él juraba que todos los Slytherin querían ser unos lame culos del que-no-debe-ser-
nombrado. No podía dejar las cosas así, no podía dejar que aquel chico acabara con una vida
llena de sufrimiento, siendo obligado a casarse con un viejo todo por dinero…

Sin pensarlo bien se adentro en la habitación y se arrodillo frente al Slytherin, este aun lloraba
copiosamente entre gemidos ahogados y frases inentendibles. Ron abrazo a Blaise, atrayéndolo
a su pecho. Blaise se sorprendió ante aquellos cálidos y tan ansiado brazos sobre su cuerpo,
pero no era el momento de sentirse feliz, estaba angustiado no quería acabar como un puto con
anillo.
- no quiero, no quiero… - susurraba débilmente y con voz temblorosa

- tranquilo, tranquilo… todo estará bien… - le susurro con cariño y pena

Ron sintió para su asombro como Blaise se le aferraba del cuello, ocultando su rostro en el
espacio entre su cuelo y el hombro, lo abrazo más fuerte, acariciando con una de sus manos la
espalda del Slytherin. Blaise solo lloraba aun más fuerte, no quería seguir en aquella realidad en
donde todo se veía oscuro y con un terrible final. Mientras tanto Ron analizaba rápidamente
como poder sacar a Blaise de ese embrollo, pro que claramente no dejaría que el chico que
tenía entre sus brazos y que se sentía tan bien teniéndolo así, terminara condenado a convivir
con ese viejo, sus ojos celestes se llenaron de ira al pensar en que aquel degenerado podría
tener en sus brazos, así como él tenía a Blaise, no señor, no permitiría que nadie tocara a “su”
Blaise, debería hablar con Hermione lo más pronto posible, pero por ahora seguiría consolando
a aquel chico que no se merecía nada de lo que le estaba pasando…

Sin que los dos chicos abrazos en el suelo se dieran cuneta, Hermione y Pansy se miraban con
preocupación por lo que habían escuchado…

**********************

Lo que paso en la mañana, mientras todos dormían. Habitación de Draco y Harry:

Draco estaba plácidamente durmiendo, sintiendo algo realmente cálido sobre su cuerpo, era
temprano lo sabía antes de abrir sus ojos grises, su mano izquierda que era la que tenia
disponible, la movió para posarse suavemente en la espalda del moreno, comenzando a
acariciarlo sobre la camisa que usaba como pijama. Sus ojos se abrieron para ver a su pequeño
fénix, de sus finos labios se formo una dulce sonrisa, su mano se separo de la espalda del
moreno para posarse en los cabellos rebeldes del chico y acomodarle uno de esos cabellos tras
la oreja para poder apreciar mejor el dulce rostro del azabache.

Harry dormía con casi todo su cuerpo sobre el rubio, su pierna derecha sobre las piernas del
Slytherin, mientras que su brazo izquierdo estaba sobre el pecho del rubio junto con la mitad de
su pecho, su rostro descansaba entre el hueco del hombro y el cuello del rubio, sus mejillas
estaban sonrojadas, su boca entre abierta respirando acompasadamente, mientras que se le
formaba un adorable ceño entre sus cejas al sentir como el rubio colocaba un mechón de su
cabello tras su oreja.

Draco saco su mano lentamente cuando vio que el moreno se movió quedando de espalda, con
una de su en el pecho del rubio y l otras en la almohada. Draco vio aquella imagen que se le era
regalada, viendo como su fénix dormía plácidamente, su camisa se había abierto quedando solo
dos botones en medio de su estomago cerrados, mostrando el pecho, llevaba unos cortos short
que le dejaban ver aquellas delicadas piernas, se lamio los labios sin poder evitarlo, mientras
sus ojos despedían deseo ante aquella imagen. Sin pensarlo mucho Draco se coloco arriba del
moreno, colocando cada una de sus manos a los lados del azabache igual que sus piernas. Se
acerco lentamente a aquellos labios entre abiertos que le llamaban a gritos para ser besados,
los roso con los suyos, para luego sacar su lengua para lamerle los labios degustado su sabor,
viendo que no despertaba, profundizando el beso, mientras que una de sus manos se metía
debajo de la camisa del azabache, acariciando su piel suavemente hasta llegar a uno de sus
pezones para jugar con ellos con sus dedos. Su boca dejo aquellos labios para comenzar a
repartir besos por el cuello y pecho del moreno, mientras que Harry gemía inconsciente al
percibir su cuerpo aquellos roses. Draco corrió la camisa para que sus labios apresaran el ya
erecto pezón, por otro lado una de sus rodillas hacia espacio entre las piernas de Harry.

- Draco… - gimió Harry abriendo sus aun adormilados ojos

El mencionado levanto su rostro para ver a un sonrojado oji-verde, su cerebro hace mucho
había abandonado su lado racional y solo dejaba lugar a su lado más primitivo y lo único que le
gritaba era que hiciera suyo al ser que tenía bajo su cuerpo. Se acerco a esos rojizos labios para
besarlos con lujuria, Harry le respondía con inexperiencia que volvía loco al rubio, una de sus
manos desabrocho los últimos botones para apartar por completo la camisa del pecho del
moreno, acariciando uno de sus pezones nuevamente para luego ir bajando hasta llegar hasta la
entre pierna del moreno, este al sentir aquel roce se arqueo para acercarse ms aquella mano
que le tocaba al mismo tiempo que un gemido escapaba de su boca, Draco sonrió y comenzó a
besar detrás de la oreja de “su” fénix.

Harry sin saber muy por donde iba todo esto, no podía dejar de pensar en que se sentía
demasiado bien en tener a su rubio besándolo y acariciándolo.

Draco se movió acercando su erección a la del menor, sintiendo con satisfacción como gemía y
arqueaba la espalda aferrándose de su espalda.

Harry sin saber qué hacer, pero con deseos de tocar la blanca piel de su rubio, metió sus manos
sobre la camisa que llevaba Draco, llegando hasta sus firmes pectorales…

No supo cómo o porque de sopetón le vino la cordura, se separo rápidamente del cuerpo del
moreno, este dejo sus manos caer sobre el colchón, en sus ojos había miedo por haber hecho
algo que molestara a su rubio.

Draco vio en los ojos verdes que tanto le gustaba había temor, adjudicándolo a lo que le estaba
haciendo, se levanto rápidamente de la cama. Abrochándose rápidamente su camisa y
dirigiéndose con rápidos pasos hacia la puerta, abriéndola con rapidez y cerrándola casi dando
un portazo por lo apurado que estaba del salir de aquella habitación.

Harry miraba aun asombrado y dolido de como había salido el rubio, en el trascurso en que el
rubio había caminado hacia la salida, Harry se había sentado en la cama, ahora con una
inmensa tristeza de no saber qué era lo que había hecho mal, acerco sus piernas a su pecho
ocultando sus rostro entre ellas y sus brazos, dejando que las lagrimas cayeran por su mejilla,
sintiéndose terrible por hacer enojar a su rubito
…----…..----…..----…..----

Era un hermoso campo, en donde el verde era el color predomínate, por sus extensas planicies,
y varios árboles, junto a un rio de aguas cristalinas, un chico de cabellos negros y desordenados,
con sus ojos verdes llenos de lagrimas observaban a través de un espejo lo que había pasado en
la habitación de aquella mansión, dejo el espejo en el suelo con furia, si hubiera sido un espejo
normal ya se había roto en mil pedazos. Sus mejillas estaban sonrojadas y bañadas en lágrimas
cristalinas…

- eres un maldito pervertido! – dijo con enfado hacia donde había tirado el espejo, dejando que
mas lagrimas cayeran

Una bella mujer de cabellera negra y lisa que le llegaban hasta la cintura de hermosos ojos
verdes iguales a los del chico, se arrodillo y abrazo tiernamente al muchacho- ¿por qué estas
enojado? ¿Por qué es un pervertido? O… ¿Por qué no siguió con…? – dejando la pregunta
inconclusa

El pequeño no dijo nada, solo se sonrojo aun más mientras que ocultaba su rostro en el pecho
de aquella mujer…

- ¿no crees que ya deberías volver? – le dijo con voz maternal, mientras que le acariciaba la
cabeza al chico

El niño de mirada verde no dijo nada solo se dejo acariciar, maldiciendo una y otra vez
internamente a aquel rubio por no haber…

Continuara…

Notas finales:

bueno espero k les haya gustado ^^ cualquier duda en sus comentarios x favor ^^

ACLARACION: la escena de Draco y Harry se desarrolla en el capi anterior, es por eso


que nadie lo ve en la tarde con Draco ¿se entiende?

bueno cualquier cosas en sus comentarios ^^

Matta ne!

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Preparativos para ir de compras… por Pazu
Notas del autor:

Bueno aqui les dejo este nuevo capi ^^ m arranque de casa asi que tengo que apurarme ademas
que ya empezo el partido de futbol wiiiiiiiiiiiiiiiiii jojojo ^^ espero k Chile gane mujuju ^^

a leer

Capitulo nueve: preparativos para ir de compras…

El niño de mirada verde no dijo nada solo se dejo acariciar, maldiciendo una y otra vez
internamente a aquel rubio por no haber…

*****************

Draco había pasado todo el día en el despacho, mirando sin mirar aquel paisaje que le permitía
ver la ventana del lugar, estaba sentado en un cómodo sillón negro, su codo estaba apoyado en el
respaldo y su mano apoyada en su mejilla.

No podía creer lo idiota que fue allí en su habitación, suspiro frustrado por enésima vez…

¿Cómo podía hacerle eso a Harry? Por Merlín, era como un niño (mente) y el todo un pervertido
acosándolo, estuvo a punto de violarlo, porque si no se detiene estaba seguro que acabaría…

Mejor dejaba de pensar en eso, ahora tenía que saber cómo volver a tener la confianza del
Gryffindor y que las cosas volverían hacer tan normales como hace poco estaba.

No podía quitarse en la cabeza la mirada dolida del azabache, una mueca se formo en su rostro y
sus ojos grises reflejaban la tristeza. No sabía que pensar, por una parte sabia que sentía algo
muy fuerte por Harry y que si ahora quisiera lo podría tener a sus pies, pero también sabía que
cuando Harry volviera hacer el mismo, todo cambiaria, de todas formas él deseaba que su
Gryffindor volviera hacer el mismo, no podía negar que le fascinaba tener a Potter como un
manso gatito, dependiente casi por completo a él, pero por otro lado extrañaba de alguna forma
el antiguo Potter, ese que siempre le enfrentaba, que siempre estaba ahí para discutir con él, que
le miraba siempre directamente, aquel chico que lo había cautivado desde la primera vez que lo
había visto…

Suspiro abatido, sabiendo que debía buscar a Harry y aclarar las cosas, y esperar que este no le
rechazara o tuviera miedo. Por otro lado sabia que por ahora no podía llegar a anda con el
Gryffindor, tendría que posponer su conversación cuando Harry volviera hacer el mismo, aunque
la espera le carcomiera lentamente y le desesperara por dentro, nunca había tenido mucha
paciencia, aunque quisiera demostrar lo contrario, siempre había tenido lo que quería en un
instante…

La puerta del estudio fue abierta lentamente, pero eso no pudo evitar que el único ocupante de la
habitación no se diera cuenta. Harry se quedo “abrazado” a la puerta entre abierta mirando algo
dudoso a su rubio, mientras que Draco se había quedado estático en el asiento, esperando a que
el Gryffindor hablara, como buena serpiente esperaría a ver si no tendría que dar el primer
paso…

Harry con la mirada en el piso entro en el cuarto cerrando suavemente la puerta, arrastrando sus
pies se acerco al rubio, sin mirarlo en ningún momento, a Draco no le gusto aquello, se esperaba
cualquier cosa menso que el Gryffindor se comportara así de cohibido.

Harry se coloco al frente de su rubio, levanto su mirada fijando su inocente mirada verde a los
aparentes “fríos” ojos grises.

A Draco le pareció ver a un cachorrito perdido, e iba a mandar a la mierda toda esa clase de
educación Malfoy y le iba a pedir perdón hasta de rodillas si era necesario, pero no dijo nada, ya
que fue sorprendido por un apretado abrazo que le prodigaba el azabache.

Harry estaba de rodillas al sillón donde se encontraba Draco, ocultando su rostro el estomago del
rubio, abrazando fuertemente al rubio, como creyendo ciegamente que se escaparía o
desaparecería.

Draco sonrió débilmente ante el gesto y con cuidado se separo de Harry, este le miro dolido,
creyendo que se alejaría como en la mañana en su habitación, pero para sorpresa el Gryffindor,
su rubio lo tomo de su cintura delicadamente, haciendo extrañamente sonrojar al azabache,
Draco sonrió ampliamente al ver así al moreno, y con delicadeza hiso que Harry se sentara en sus
piernas, lo abrazo y lo acerco a su pecho. Harry se sorprendió pero no dijo nada, coloco su
cabeza suavemente en aquel fuerte pecho escuchando el sonido de su corazón, cerrando
lentamente sus parpados ocultando sus hermosos ojos verdes, con una sonrisa cálida y tierna en
sus labios. Draco le acariciaba el pelo suavemente, hasta que le susurro en la oreja…

- lo siento…

Harry se estremeció, ya que el aliento del rubio había pasado por su oreja y cuello, dándole un
electrizante toque.
- perdóname – prosiguió el Slytherin con una suave voz tratando de controlar su nerviosismo, lo
que iba a decir era importante, aunque quizás el azabache cuando volviera a su estado ‘normal’
ya no se acordaría de nada o quizás si… - te… te quiero… - suspiro – y no quiero hacerte daño,
de verdad lo si-siento – termino dándole un suave beso en los desordenados cabellos

Harry abrió sus ojos, aun pensando en lo que su rubito le había dicho, hasta que en un murmullo
casi inaudible le dijo – y… y cuando vuelva a la normalidad ¿me seguirás queriendo? – dijo con
un tono esperanzado

Draco aparto a Harry de su pecho para mirarlo a los ojos, y cuando le iba a contestar la puerta
fue abierta…

El rubio y el azabache se encontraron con un Ronald Weasley de la mano de Blaise Zabini…

El silencio se hiso en la habitación…

Hasta que una mirada celeste y otra gris se encontraron y ambos acercándose comenzaron una
nueva discusión…

Blaise y Harry se miraron y negaron con un movimiento de la cabeza mientras una sonrisas
cansadas y una mirada que decía ‘estos nunca cambiara’ se sentaron en el suelo para empezar a
jugar a las cartas, a ver si esta vez Blaise podría ganarle al azabache o este volvería a ganarle sus
provisiones de chocolate.

*****************

Draco abrió sus ojos lentamente ante aquellos rayos de luz que le caían justamente directo a sus
ojos, como si la maldita cortina se hubiera puesto de acuerdo con el maldito sol para despertarlo
de aquella horrible forma. Pero sabiendo que no podría volver a dormir, abrió completamente sus
grises ojos. Pero todo aquel enojo mañanero despareció al ver lo que tenía a su lado, dormido tan
desordenado como era su indomable cabello.

Harry tenia apoyada su cabeza en el estomago de Draco, su mano descansaba en su pecho, su


cuerpo estaba doblado de forma vertical a la posición de la cama, mientras que Draco estaba
acostado de forma horizontal y con su mano en la delicada espalda del azabache, mientras que la
sabana se enredaba en ambos cuerpos.

Vio la hora en el reloj que se encontraba en la pared, eran ya las nueve y media ya debería estar
levantándose. Hiso una mueca por lo que ese día significaba, hoy irían de compras para su chico,
pero también para ellos, ay que por lo que había dicho-sugerido-ordenado ellos comprarían ropa
muggle, ya que según ella dijo la ropa muggle era más… ni siquiera se acordaba del término que
había utilizado, pero como conocía a su amiga, estarían todo el día recorriendo tiendas y mas
tiendas, suspiro tan solo al imaginárselo.

- Harry… - susurro, moviendo suavemente su mano que estaba en la espalda del azabache para
que se despertara

Por respuesta recibió un ¿gruñido? pero el azabache seguía durmiendo…

Suspirando y con verdaderas ‘pena’ se levanto de un salto, haciendo que el Gryffindor, se


sobresaltara abriera enormemente sus ojos, mostrando confusión y susto, mientras se sentaba
rápidamente en la cama, dejando a la vista su pecho, ya que al parecer en la noche se habían
desabotonado la camisa que llevaba de pijama.

Draco desvió la mirada y se fue al baño – será mejor que no te vuelvas a dormir, hoy vamos a ir a
comprar – dijo antes de desaparecer por la puerta del baño, a sabiendas que el azabache se estaba
cubriendo nuevamente con las sabanas

Harry farfullo algo ininteligible, para no hacer caso a Draco y meterse nuevamente a la cama
calentita y cerrar sus ojos rápidamente, quedándose dormido casi al instante…

**************

Draco llego al comedor para tomar el desayuno, como siempre inmaculadamente presentable,
detrás de él iba un ‘zombi’ Harry, vestido y bañado, pero aun así con cara de sueño.

Algunos de los presentes sonrieron al ver el estado del azabache, mientas que otros se
preguntaban cómo era que el Gryffindor hacia para levantarse en el castillo, pero ellos no sabían
que Harry tenía un despertador personalizado, y ese era su increíblemente impaciente amiga
castaña.

Comieron amenamente entre algunos comentarios y bromas mañaneras. Cuando todos estuvieron
listo, fueron al recibidor, allí Malfoy padre les entrego por parejas los trasladores que utilizarían
para ir al callejón Diagon.

Severus y Sirius se fueron primeros, seguidos después por Theo y Neville, Blaise y Ron, Draco y
Harry y por ultimo Lucius y Remus, el rubio aprovechando la oportunidad para tomar al castaño
de la cintura y estrecharlo más hacia él, algo que el castaño no alzando a rebatir, ya que el rubio
ya había accionado el traslador.
Continuara…
Notas finales:

bueno es corto pero el prox capi es mas largo y saldra un personaje nuevo que sera muy
importante para la historia ^^ nos leemos espero sus comentarios ^^

Matta ne!

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Gringotts y una carta… por Pazu
Notas del autor:

Holas tenia el capi nlisto de hace algunos dias pero no pude actualizar ya que fue feriado el lunes
y llovio algunos dias XD! y no sali de mi casita jojojo...

aaaaaaaaaaaa en el capi anterior les dije que iba a aparecer un personaje original pues no aparece
en este capi, aprece en el siguiente -.-" es que una cosa qllevo a la otra y termine escribiendo un
capi que no iba a salir pero que al final = lo escribi XD!

ya ahora a leer ^^

Capitulo diez: Gringotts y una carta…

Severus y Sirius se fueron primeros, seguidos después por Theo y Neville, Blaise y Ron, Draco y
Harry y por ultimo Lucius y Remus, el rubio aprovechando la oportunidad para tomar al castaño
de la cintura y estrecharlo más hacia él, algo que el castaño no alzando a rebatir, ya que el rubio
ya había accionado el traslador.

**********

Llegaron a unas cuadras del callejón Diagon, caminaron tranquilamente por las calles de la
ciudad muggle. Entraron al caldero chorreante, en donde Tom y algunas personas que se
encontraban en el lugar les miraron algo asombrados, nerviosos y curiosos, al ver a dos ex–
mortífagos–espías–de–la–Orden, junto con un ex–convicto–loco–prófugo–de–Askaban–
inocente, un ex–profesor–de–DECAO–licántropo, a tres alumnos–de–Slytherin–(que hubieran
sido)–futuros–mortífagos, dos leales–Gryffindor y el ultimo y no menos importante el–niño–
que–vivió–y–venció–por–segunda–vez (n/a: XD! lo siento, no pude evitar escribirlo).

De entre las mesas del fondo dos hermosas chicas fueron a su encuentro, Pansy y Hermione
habían ido antes al callejón para revisar cuales tiendas ir directamente, además que la castaña
quería comprar unos libros y sabiendo lo que se demoraba en una librería, se fue antes con
Pansy para estar tranquilas en sus compras.

Cuando todos se reunieron, salieron de la caverna de Tom, con paso ligero y con conversaciones
banales entre los adultos y los chicos hablaban acerca de las compras que habían hecho las
chicas.

La gente se paraba para mirarlos, no era solo por que iba el joven que los había salvado del
Señor Tenebroso, el Innombrable, sino más bien por la diversidad del grupo.

Lucius iba como siempre con su porte elegante y su sonrisa de superioridad, a su lado iba un
“despistado” Remus, mirando las tiendas, sin ponerle atención al rubio engreído que iba a su
lado.
Sirius iba pavoneándose como siempre, sonriendo descaradamente hacia las jóvenes
muchachas y muchachos, mientras estos se sonrojaban y le sonreían tímidamente. Severus
quien iba su lado, entorno sus ojos al ver los gestos lascivos del pulgoso, para luego seguir con
su pose intimidante. Haciendo un gran contraste con el perruno engreído.

Hermione y Pansy iban riendo y hablándose muy cerca, demasiado cerca para ser considerado
moralmente bien teniendo en cuenta que eran solamente “amigas”.

Nev iba caminando algo más lento de lo normal ya que estaba demasiado entusiasmado con un
libro que había sacado de la biblioteca de la mansión Malfoy. Se trataba de unas plantas
altamente venenosas, de apariencia hermosa, era como una flor de pétalos blancos y suaves
manchas rosadas que crecían en los riscos de Escocia. Era por eso que Theo iba como maniático
compulsivo alejando cualquier obstáculo que podría impedir el tranquilo y “seguro” caminar del
castaño, aunque el Gryffindor no se percataba de ese “pequeño” detalle. Una pequeña
cucaracha mágica, iba cruzando la calle, esta iba a toparse con la trayectoria de Neville, Theo en
un rápido movimiento de varita mando a volar a la cucaracha, dejando el camino despejado
para “su” castaño. Sus amigos tenían razón en decirle que tenía muy buenos reflejos y vista, es
por eso que fue capaz de ver que un viejo mago robusto, iba a colisionar con su pequeño
Gryffindor, así que rápidamente paso su brazo por la estrecha cintura de Neville atrayéndolo a
su cuerpo y su otra mano paro al sujeto que casi atropella a Nev. Neville se sonrojo al contacto y
mas al ver que el Slytherin había impedido que probablemente cayera al piso por chocar con
aquel sujeto, le sonrió agradecido, le dio un suave Gracias y un beso en la mejilla, antes de
seguir caminando antes de perder de vista al grupo. Theo se quedo alucinado en medio de la
calle con una sonrisa boba en el rostro, muy impropio en el…

Mientras tanto Ron y Draco iban “sacando” chispas de sus ojos, al ver a la parejita que iba a
unos pasos delante de ellos…

Más adelante iban Harry y Blaise que caminan muy juntos y con sendas sonrisa y de vez en
cuando se ponían a reír fuertemente.

Harry sintiendo las malas vibras, se dio media vuelta para sonreírle “inocentemente” al rubio,
para luego seguir la charla con el Slytherin a su lado.

Draco se pregunto si Harry de verdad en ese momento era un recién nacido Fénix o un malvado
demonio disfrazado de ángel…

----…..----…..----…..----

En el verde prado que era su mente, se encontraba un hermoso chico de negros cabellos
desordenados, recostado junto a un árbol, apoyando su espalda en el tronco del árbol, miraba
con una sonrisa traviesa la imagen que se proyectaba en el espejo ovalado con un marco tallado
en plata.
- eso te pasa por arrogante, Ja! como si fueras lo más importante… - dijo burlonamente

- aun estas molesto por lo que paso en su habitación – afirmo más que pregunto, sonriendo al
chico con sínica burla

El joven miro hacia arriba para toparse con la joven mujer de cabellos tan negros como los
suyos - ¿de qué hablas? – dijo de forma desinteresada pero con un suave sonrojo

- jajajaja… - rio con ganas – el amor… el amor… el amor… - canturrio

- QUE!? – grito incorporándose rápidamente mirando a la mujer con “furia” en sus ojos y un
violento sonrojo…

- jajaja…

----…..----…..----…..----

- chicos vamos a Gringotts – dijo cálidamente Remus

Todos asintieron y se encaminaron hacia el banco de los magos…

****************

Cuando llegaron al banco de los magos, se encontraron con Bill que se encontraba conversando
con algunos magos en el recibidor de Gringotts. Al ver el grupo donde se encontraba su
hermano menor fue a saludarlos con una radiante sonrisa hacia los Gryffindor y un cortés
saludo de cabeza para los Slytherin. Cuando miro a Harry le sonrió conciliadoramente…

- te esperaba antes, pero veo que has estado ocupado – dijo mirando a las serpientes

Harry le sonrió inocentemente mirándolo con su cabeza ladeada tratando de recordar quién era
aquel joven tan pelirrojo como su amigo Ron.

Draco se coloco al lado de Harry mirando furiosamente al pelirrojo mayor de los Weasley, no le
agradaba para nada aquellas palabras del Weasley…

- supongo que no me recuerdas – dijo calmadamente

- Bill acaso tu sabes de la condición de Harry – dijo Remus algo sorprendido ya que muy pocos
sabían de la condición del niño-que-vivió-y-venció

- el me dijo lo que le podría pasar – dijo seriamente – me dejo una carta y un libro para cuando
el viniera a Gringotts
- ¿y donde esta? – dijo entusiasmado Padfoot

- perro chismoso… - mascullo por lo bajo el profesor de pociones

Sirius le sonrió con perversidad antes de decir – quien habla múrciela… - pero no pudo seguir ya
que alguien le interrumpió

- calla Sirius… - dijo seriamente Remus mirándolo a los ojos provocando que se callara
inmediatamente

Severus sonrió con superioridad e iba hablar cuando alguien se le adelanto…

- y tu también Severus – dijo tranquilamente Lucius mirando hacia al frente, provocando que
Severus también se callara

Algunos de los chicos no pudieron evitar ponerse a reír y los Slytherin menos Blaise también se
rieron pero mucho más discreto que los Gryffindor y Blaise.

Bill miro aquel tan heterogéneo grupo que se reían tan familiarmente, sonrió discretamente
después de todo al parecer Dumbledore había conseguido que las casa con mas rivalidad por
generaciones se empezara a unir, cosa que no había conseguido con su generación.

- bien, vayan a mi oficina – llamo a un empleado les dijo algunas palabras y asintió – bien voy a
buscar lo que me dejaste, Tim les acompañara – dijo para luego salió presuroso por unos de los
pasillos

- bien síganme – dijo con una sonrisa

Todo el grupo se movió por los pasillos que le indicaba el chico que había llamado Bill hasta que
llegaron a su oficina, no era pequeña para Lucius y cómoda para Remus. Se sentaron en los
sillones que había en el salón acomodado en círculo en frente de una mesita, mas al fondo
había un escritorio con dos grandes sillas, una delante y otra atrás del mueble.

Tim había salido después de darles unas tasitas de té con algunas galletas. Bill llego a los pocos
minutos después, en sus manso traía un antiguo libro, empastado a mano de color rojo sangre
con letras doradas. S

e sentó junto a Remus y al otro lado tenía un furioso rubio con una mirada gris asesina…

- este es un libro que Fasten Potter escribió a sus descendientes, hablaba acerca de los fénix, la
unión y mas temas que en realidad no se dé que hablaban, no he leído el libro – dijo con una
calmada sonrisa – Harry me dijo que se lo diera a Hermione para que lo estudiara mejor – dijo
lo ultimo mirando a la castaña
Hermione sonrió con cariño, no podía evitar reír… - gracias Bill – le dijo cuando le paso el libro

- y esto – dijo mostrando un sobre común y corriente – es una carta que dejo Harry para aquel
que el fénix tomaría como compañero – dijo mirando hacia todos los presentes, preguntándose
quien seria, y viendo que estaban junto a los Slytherin no pudo evitar deducir que uno de ellos
debía ser…

Draco se levanto soberbiamente y tomo la carta que un asombrado y dudativo Bill le extendió.
Todos los presentes querían saber que era lo que había escrito Harry, pero antes de que
“alguien” – un alterado y sobre protector y copuchento padrino – le gritara al rubio que leyera
la carta en voz alta, Remus hablo…

- bien dejemos a Draco solo para que lea la carta…

Todos estaban algo renuentes a abandonar la habitación, pero ver aquella mirada del lobito los
izo desistir de alguna replicar.

Harry se coloco al lado de su rubio, aferrándose del brazo del Slytherin, Remus suspiro y cerró la
puerta tras él, dejando solo al fénix y su compañero…

Draco se sentó en uno de los sillones individuales, mientras que Harry se sentaba en sus
piernas, recostó su cabeza en el firme pecho del rubio y dejo que este le acariciara sus rebeldes
cabellos. Draco tenía la carta abierta y comenzó a leer lentamente, no queriéndose perder
ninguna palabra, coma o punto escrito en aquel papel…

Hola:

Bueno creo que mi condición del heredero del fénix ya se sabe o por lo menos lo más
importante, deje esta carta a ti, mi compañero por qué no estoy seguro si será uno de mis
amigos, por lo que me entere de lo que mis padres me dejaron, mi compañero podía ser hasta
alguien completamente desconocido para mi, aunque es muy improbable…

La verdad es que es mi instinto fénix el que elige un compañero, este instinto ve en el interior de
las personas y pude ver su alma, ven si son magos de la luz o de la oscuridad, su más oscuros
recuerdos, sus alegrías y tristezas y sus ambiciones, elige el candidato más idóneo para tener a
su completa disposición de mis poderes y mi propia vida.

Es decir tú tienes a tu voluntad mis poderes, solamente con una orden tuya haré lo que quieras,
absolutamente lo que quieras. Aunque debería esperar a tener mi propia conciencia a mi
voluntad nuevamente para decirte estas cosas, no sé cuánto me demore en controlar los
poderes que han despertado en mi, tampoco se si seré capas de ver lo que sucede afuera de mi
mente…
Confió en el instinto de fénix al escogerte a ti como mi compañero, espero que no abuses de mi
confianza, después de todo puedes hacer lo que quieras ahora…

Mi mejor amiga Hermione Granger tiene un libro de mi familia que Bill le entrego, aunque si
etas leyendo esta carta supongo que ya lo sabrás, pídeselo cuando ella termine de estudiarlo,
supongo que querrás saber más del asunto del fénix…

No sé que mas explicarte, solo espero que te lleves bien con mis amigos, y que podamos
llevarnos bien cuando “vuelva a la normalidad”… no sé si es necesario decirte, pero por si
acaso… no eres mi pareja elegida, solo mi compañero, si tienes novio/a no hay problema…

Bueno eso es todo, espero que pronto pueda ser yo otra vez…

Cuídate, manda saludos de mi parte a mis amigos, mi padrino y a Remus Lupin, diles que no se
preocupen por mí, que estaré bien y que tarde o temprano me tendrán de regreso…

Nos vemos…

Cuando termino de leer la carta, muchos pensamientos, sentimientos, demasiadas cosas se


agolparon en su mente, apretó mas el abrazo que tenia sobre la cintura del menor, colocando la
otra mano que aun mantenía la carta ahora arrugada por lo fuertemente apretada que tenia,
coloco su mentón en la cabeza azabache de su fénix. En su mirada gris había determinación, que
en un Slytherin como él podía ser muy peligrosa…

- así que solamente soy tu compañero, pues veremos y eso dura para siempre… - pensó para si
mismo. Mientras que algo pasaba por su cabeza – con que debes obedecer TODAS mis órdenes –
sonrió lascivamente, pensando muy “gráficamente” que pedirle al azabache que estaba
tranquilamente entre sus brazos. Algunas imágenes no muy santas vinieron a su mente, pero
todo se quedo ahí ya que alguien había abierto la puerta…

- Draco párate, nos vamos – dijo fríamente Severus antes de volver a salir de la oficina

Draco a un con su sonrisita se levanto del sillón junto con el Gryffindor, el azabache totalmente
inconsciente de los “inocentes” pensamientos de su rubio…

Continuara…

Notas finales:

gracias x leer, nos leemos en el prox capi ^^ gracias x sus lindos comentarios ^^

Matta ne!

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Salida de compras y… por Pazu
Notas del autor:

Holas espero que les guste este capi ^^ muchas gracias x sus comentarios espero k este les guste,
el comienzo no me gusto pero el final mujujuju espero k les guste ^^

a leer ^^

Capitulo once: salida de compras y…

Draco aun con su sonrisita se levanto del sillón junto con el Gryffindor, el azabache totalmente
inconsciente de los “inocentes” pensamientos de su rubio…

*********************

Pasaron por varias tiendas del callejón Diagon, algunas eran de muy pobre calidad según los
Malfoy, otras eran muy ostentosas para Remus, en otras a nadie le gustaba lo que había. Después
de más de dos horas y media compraron toda la ropa que necesitaban. Desde túnicas de gala
hasta las de diario y algún que otro accesorio.

Remus había reclamado a Sirius diciéndole que jamás aceparía su dinero, pero tuvo que ceder al
ver la mirada de cachorro apaleado que había puesto Sirius y Harry. Lucius no dijo nada, ya que
estaba seguro de que “su” lobito lo hubiera lanzado alguna maldición antes siquiera de dejarlo
terminar su frase para comprarle algo.

Harry por otro lado se dejo dócilmente manejar por las únicas chicas del grupo, probando una y
otra vez diferentes modelos de túnicas y colores, comprando más de lo que necesitaría para toda
una vida.

Los otros chicos también se compraron algunas prendas y para el asombro de muchas hasta el
serio y frio profesor de pociones se había comprado un par de túnicas nuevas, aunque su color no
varió en nada…

Después de las largas compras en el mundo mágico, fueron a comer a uno de los elegantes
restaurant que había en el callejón Diagon, obviamente llevados por los dos Malfoy, ya que no
soportarían comer en un lugar de poca clase para ellos.

***************
Luego de comer, se habían cambiado a algunas ropas muggles que Pansy y Hermione habían
conseguido.

Fue muy divertido ver las caras “muy” disimuladas de Draco y Lucius Malfoy encantados al ver
por fin el “odiado” mundo muggle. Por otro lado los chicos que jamás habían ido al mundo
muggle, se comportaban como niños de siete años delante de una gigantesca juguetería.

Muchos de los londinenses que caminaban por las avenidas se quedaban mirando sin disimulo
alguno hacia aquel extraño grupo de jóvenes y adultos. Suponiendo que eran turistas al ver lo
curiosos que se mostraban al ver las tiendas y monumentos, pero no era eso lo que llamaba la
atención de los transeúntes, sino ver lo hermosos y guapos que eran, no solo los chicos/cas sino
también los adultos. Sirius como siempre hiso gala de sus encantos, coqueteando descaradamente
con mujeres tanto jóvenes y ya de más edad y con uno que otro chico que se le quedaba mirando
para nada disimulado.

*************

Después de pasar por varias tiendas, por fin se decidieron por una en donde se apreciaba una
buena calidad en las telas y una variedad de estilos que daban en el gusto a todos.

Sirius como había recibido una indemnización y además su herencia como el único hijo varón
vivo de la familia Black tenía toda la posesión de su familia, cosa que no era poca, había
decidido regalarle a Remus, Ron y Nev unas tarjetas muggle con una gran cantidad de dinero
para que compraran lo que quisieran en ropa. Al principio los tres aludidos se habían negado
rotundamente a aceptar aquello, pero Sirius con su “poder” de convencimiento les había dicho
que eran sus regalos por cumpleaños, navidades, santos, día del niño y otros días festivos
inventados por él, que no había podido celebrar con ellos y que no les había podido regalar, así
sin poder ir en contra de aquella mirada desvalida del ex-convicto aceptaron renuentemente, pero
aun así con una sonrisa agradecida por el gesto del “perrito”.

Así que cada uno en compañía de alguien impuesta o elegida libremente, se fueron por largos
pasillos en busca de algo que le gustara.

Los chicos entre risa y bromas se probaban sombreros o accesorios que se les veía ridículos en
ellos para pasar el rato y reírse de ellos mismos.

Remus se fue rápidamente junto con Sirius antes de que Lucius decidiera pegársele como
sanguijuela humanoide, Sirius por otro lado estaba encantado de estar con su amigo y buscar
juntos algo que les acomode con su personalidad.
Lucius maldiciendo su suerte se fue con un indiferente Severus que iba a la sección de ropa
oscura, Lucius en un movimiento imperceptible para cualquier mortal rodo sus ojos ante los
gustos lúgubres de su amigo.

Ron, Nev, Harry y Hermione se fueron por un lado mientras que Blaise, Theo, Draco y Pansy por
otro, dirigido cada grupo por las chicas. Sacando camisas, pantalones, poleras, polerones, jersey
y mas etc. ante la mirada incrédula de los chicos y divertidas de Blaise y Harry.

*******************

Después de que a muchos les pareció una eternidad habían terminado de comprar todo lo que
necesitaban y de sobra. Sin que se diera cuenta algún muggle, redujeron las bolsas para llevarlas
en los bolsillos. Pero antes cada uno se había quedado con una teñida nueva, fue así como había
empezado un improvisado “desfile”...

Las primeras en salir fueron las chicas, Hermione llevaba unos ajustados jeans azul oscuro a la
cadera, llevaba una blusa verde claro ajustada sin mangas, debajo de ella se dejaban ver una
pollera de mangas largas negra, se había recogido el cabello y llevaba unos aretes de mariposa y
una cadena plateada que le hacia juego. Pansy por otro lado llevaba una minifalda de jeans con
calzas moradas, también llevaba una blusa morada pero de manga larga, y con una gargantilla
negra en la garganta y el pelo suelto.

Luego salió Sirius luciéndose como siempre, con unos jeans azul oscuro y ajustados, junto con
una camisa azul, con tres botones desabrochados y una cadena en el cuello con un dije de un
león. Su pelo lo llevaba suelto, dándole un toque juvenil, rebelde y delicioso…

Remus salió algo sonrojado por las miradas que le lanzaba cierto rubio, llevaba unos pantalones
de vestir café claro con una camisa blanca ajustada que mostraba su perfecto cuerpo, su cabello
estaba más corto y dejaba ver sus hermosos ojos dorados…

Severus apareció con una cara que claramente era de hastió, por tener que hacer esas estupideces,
los otros se quedaron mirándolo fijamente sin poder creer que el profesor de pociones se podía
ver tan bien con ropa muggle, Sirius no le despegaba la mirada… Snape llevaba unos
ajustadísimos jeans negros, con una ajustada polera negra y arriba de esta una chaqueta también
negra, era lógico que no iba a usar otro color, pero le sentaban muy bien, se había recogido el
cabello en una coleta media alta y algunos mechones le caían por su rostro…

Lucius apareció con su elegante andar, llevando unos pantalones negros, y una camisa gris
oscuro resaltando así sus ojos, tenía desabrochado un par de botones y también se había tomado
su cabello en una coleta alta, dejando apreciar su apetecible cuello, que Remus quería lamer,
sonrojándose al pensar en eso…
Después salió Theo quien llevaba unos jeans grises y zapatillas negras, una polera sin maga con
gorro de color verde y una polera manga larga de bajo negra, no se veía tan serio como siempre
se mostraba. Aunque algo Slytherin su ropa en opinión de la mayoría de los Gryffindor.

Blaise salió después, con unos jeans rotos en las rodillas y con botas negras, llevaba una polera
roquera con varias palabas morada con negro y una calavera en la espalda y una chaqueta sin
mangas negra. Como siempre se veía desordenado pero sexy.

El último de los Slytherin en salir fue Draco que llevaba unos pantalones negros y una camisa
blanca arriba de esta llevaba una especie de chaqueta larga que le llegaba hasta los tobillos negra
pero sin mangas, realmente el negro les favorecía a los rubios.

Después fue el turno de los Gryffindor, el primero fue Neville, que llevaba unos jeans azules, un
poleron negro de cuello alto ajustado y una camisa abierta café claro.

Ron por otro lado llevaba unos jeans celestes gastados en las rodillas y con una cadena colgando,
con una polera manga larga blanca y sobre esta una sudadera de color rojo, con un león en la
espalda. Bien Gryffindor como siempre, pero no se podía negar que el rojo le quedaba bien.

Por último salió Harry quien era en realidad a quien debían hacer un cambio completo de
guardarropas. Hermione y Pansy habían pensado mucho en que ropa escogerle al azabache, así
que compraron de diferentes estilos, ahora que estaba más “inocente” le vistieron algo mas
¿angelical? Eh intuyendo de que cuando Harry volviera a ser completamente él, no le gustaría
mucho le compraron para combinar un estilo más rebelde. Así que en esos momentos Hermione
le había elegido unas zapatillas grises, con unos pantalones blancos algo ajustados, con una
polera de manga larga bien ajustada verde resaltando sus ojos y una camisa sin mangas de color
blanco… algo que dejo embobado a cierto rubio que aun tenía un conflicto interno por cierta
obediencia que le tenía cierto fénix…

*****************

Después de aquel seudo desfile salieron animadamente de la tienda, conversando entre grupos lo
que le había parecido el mundo muggle y que deberían visitarlo a menudo ya que les faltaba
mucho por conocer.

Estaban decidiendo ya volver por que se hacía algo tarde, cuando Hermione diviso una tienda de
helados, sin poder evitar les pidió que la acompañaran por uno y que los probaran, aunque no
tenían tanto sabores, habían algunos sabores que en el mundo mágico que no había, además que
en el mundo muggle se podía bañar en chocolate liquido que “mágicamente” se endurecía…
Harry tenía su helado que había pedido de chocolate obviamente como también cierto lobito,
mientras tanto Sirius quiso uno de tiramisu que una vez cuando habían ido con Lily y James por
helados en el mundo muggle había probado y tenía muchas ganas de probarlo de nuevo ya que
en el mundo mágico no existía aquel sabor. Draco con Severus compraron uno de menta,
mientras que Blaise, Pansy y Nev compraron uno de sabor limón, Hermione pidió uno de
lúcuma, Theodore y Lucius pidieron uno de pistacho y Ron pidió uno de frambuesa.

Estaban tan entretenidos que no se dieron cuenta cuando Harry poso su verde mirada en una
tienda al otro lado de la vereda. Era uno de peluches y había uno de un dragón gris. Sin que nadie
se diera cuenta, el Gryffindor cruzo la calle y se coloco delante de la vitrina, estaba
completamente entretenido viendo todos los peluches que exhibían, cuando el peligro avanzo
hacia el.

Empezó a sentir una opresión muy fuerte en su pecho, provocando que su respiración comenzara
hacer dificultosa, sus ojos se entrecerraron con algunas lágrimas que no querían ser derramadas.
Nervioso miro hacia sus lados buscando a Draco, pero con horror se dio cuenta que el tiempo
había sido detenido, toda las personas se encontraban congeladas, como si estuvieran en pausa.

Harry se quedo quieto incapaz de moverse, de entre las personas inmóviles una sombra negra se
movía con agilidad esquivando los fáciles obstáculos detenidos. Era alguien que ocultaba
completamente su rostro gracias a una enorme capucha que llevaba pegada a la larga y oscura
capa, se detuvo delante de él.

Harry quiso huir de aquella presencia era escalofriante, pero todo movimiento se vio impedido
por una fría mano que se coloco en su cintura atrayéndolo hacia aquel desconocido cuerpo…

- tanto tiempo… - susurro fríamente, dejando ver su pálido y perfecto rostro sin bajarse la
capucha

Era un hombre maduro, su rostro era pálido, varonil y perfecto, se le veía las cejas blancas y
algunos mechones de cabellos también blancos, sus ojos estaban cerrados…

Harry quiso apartarse pero aquel agarre era firme y demandante, aquella voz se le hacía conocida
pero al mismo tiempo sabía que jamás la había escuchado.

- ¿no me dirás nada? – le dijo con una sonrisa burlona

- su-suélteme… - fue lo único que salió de sus labios


- no, no, no… - le dijo con tono de burla mientras reía suavemente completamente divertido por
el actuar del joven – lo siento mi pequeño, pero por ahora no te puedo llevar conmigo – le dijo
con falso pesar – pero volveré por ti y por ella… - dijo con diversión abriendo por fin sus ojos

Harry quedo pasmado por las palabras de aquel hombre, pero lo que le hiso temblar de miedo
fueron aquellos ojos blancos, completamente vacios…

- vendré por ti, mi pequeño… - le susurro en el odio, para luego darle un casto beso en los labios
y desaparecer

La gente volvió a su estado normal sin darse cuenta de que se habían quedado congelados en el
tiempo.

Harry se quedo ahí parado mirando aquel punto vacio en donde había desaparecido aquel
tenebroso hombre, sus ojos sin que se diera cuenta dejaron liberar las lagrimas que ni siquiera su
dueño sabia que necesitaba desahogar.

**************************

Los adultos del grupo de magos se dieron cuenta de inmediato que algo había pasado con la
normalidad en los campos del tiempo, miraron desesperados que Harry no se encontraba con
ellos.

Draco le llamaba a gritos sin importarle su estatus de sangre pura… de Malfoy… solamente
pensaba en su Harry, entre la multitud que se apreciaba en la vereda de al frente, le vio, parado
inmóvil mirando un punto indefinible. Corrió como nuca esquivando autos y personas que
entorpecían alcanzar su objetivo, llego al lado del azabache a tiempo record, sin importarle si los
demás le habían seguido.

Draco le toco un hombro a Harry para que se diera cuenta, el rubio quería gritarle al chico por
haberse ido a si sin más, sin avisar a nadie, pero cuando Harry se dio vuelta, Draco vio aquella
mirada de miedo y sus lágrimas cayendo descontroladamente por sus pálidas mejillas.

Harry se refugió en los brazos de su rubio, llorando sin importar que alguien le viera, temblando
como un niño sin poder evitarlo, ese hombre, ese hombre… podía llegar a lastimarlo más de lo
que podía llegar a imaginar…
Continuara…
Notas finales:

espero les haya gustado, me doy cuenta que con cada capi nuevos secretos e intrigas se van
tejiendo espero k pronto se desenrede todo XD! bueno hasta el prox capi o en otro de mis fic ^^

nos leemos, cuidense ^^

Matta ne!

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Adiós Marca Tenebrosa… (1° parte) por Pazu
Notas del autor:

Holas aqui les traigo un nuewvo capi y les propongo algo ^^ si me mandan sus comentarios
pronto ^^ les subo el prox capi el jueves jujuju ^^

a leer...

Capitulo doce: Adiós Marca Tenebrosa… (1° parte)

Harry se refugió en los brazos de su rubio, llorando sin importar que alguien le viera,
temblando como un niño sin poder evitarlo, ese hombre, ese hombre… podía llegar a lastimarlo
más de lo que podía llegar a imaginar…

***************

----…..----…..----…..----

Harry estaba arrodillado en el blando pasto de aquel campo, mientras que aquella bella mujer le
abrazaba protectoramente. El azabache tenía sus ojos cerrados fuertemente dejando derramar sus
lágrimas, mientras que la mujer le abrazaba y le susurraba palabras cálidas para tranquilizarlo
aunque en sus ojos había miedo, preocupación, dolor…

- Alash tengo miedo… - dijo en un susurro, sin importarle que eso sonara infantil, aquel hombre
era escalofriante

- no tienes porque… - dijo tratando de que su voz sonara tranquila y segura – el no te tocara…
jamás lo hará… - le dijo con seguridad

- él…

- shhh… mi pequeño, yo te cuidare… - le calmo – yo te protegeré mi pequeño, siempre estaré


contigo, siempre… - le dijo con dulzura

- Alash…

----…..----…..----…..----
Habían llegado hace unos pocos minutos del mundo muggle, estaban todos reunidos en la sala de
estar, para tomar un poco de café y galletas.

Todos estaban sumidos en un profundo silencio, pensando sin querer exteriorizar sus dudas, sus
temores, sus preocupaciones… Pero faltaban dos personas, una quien había sufrido de una crisis
sin que nadie entendiera quien era el culpable, solo que debía ser muy poderoso para alterar el
fluido del tiempo y el otro era su compañero…

******************

Harry no había querido soltarse de Draco, por lo que este se fue a la habitación que compartían
quedándose junto a él…

Harry tenia escondida su cara en el pecho del rubio, en sus mejillas se podía apreciar las lagrimas
secas que hace poco había dejado derramar, sus manos se aferraban fuertemente de la camisa que
llevaba Draco y todo su cuerpo se acoplaba al otro en busca inconscientemente de su calidez.
Aunque Harry estaba durmiendo, su sueño era inquieto, que lo alteraba… volviéndose a
despertar, aferrándose más al cuerpo que tanta tranquilidad y protección le daba…

Mientras tanto Draco le acariciaba el cabello suavemente y le susurraba palabras tranquilizantes


cuando se volvía a despertar. Frunció sus cejas molesto y al mismo tiempo preocupado, por no
saber qué o quién era el causante de que Harry quedara en ese estado, necesitaba saber pero por
otro lado no quería obligar a su fénix que le contara a la fuerza, no si eso le causaba más dolor…

*******************

Había pasado un par de días desde el accidente de Harry, este al otro día había actuado muy
temeroso y siempre pegado a Draco tomando su mano a cada momento. Ahora se había relajado
algo mas, pero no digo nada de lo que había pasado, no hubo poder humano que le pudiera sacar
información, y Draco no quiso ordenarle al Gryffindor que hablara, sabía que si no quería decirlo
ahora era por algo…

En ese momento se encontraban extrañamente todos reunidos tomando café y comiendo algunas
galletas y pasteles que habían preparado los elfos. Es por eso que se sorprendieron cuando un
elfo les había ido a avisar que tenían una inesperada visita, era la señora Zabini.

Blaise no pudo evitar exclamar aterrado ante la presencia de su madre, Ron se había levantado
del sillón en donde estaba para apoyar al Slytherin, tomándole su mano y diciéndole que nada le
pasaría…
Malfoy miro fijamente a Snape, los adultos ya sabían lo que estaba pasando, ya que Pansy y
Hermione le habían dicho acerca de lo que habían escuchado en la biblioteca. No es que fueran
chismosas, y sabían que era algo personal de Blaise, pero Hermione vio conveniente de que los
adultos supieran, sobre todo el señor Malfoy, ya que con su influencia podrían ayudar más al
Slytherin.

- ofrécele alguna bebida y acompáñala a mi estudio – dijo fríamente el señor Malfoy – y hazle
saber que voy enseguida con su hijo – dijo constante

El elfo hiso una reverencia – si amo, como usted mande… - y con un plop desapareció.

- Blaise… - le dijo suavemente el patriarca – sé lo que está pasando…

Blaise se sorprendió y miro al pelirrojo y se dio cuenta al instante que él no le había dicho nada
al padre de su mejor amigo…

- fuimos nosotras… – dijo Hermione y Pansy asintió

Draco, Harry, Neville y Theo miraban desconcertados, sin saber de lo que hablaban pero
consientes de que era algo muy grave, para tener al siempre carismático y bromista Slytherin tan
nervioso, preocupado y afligido.

- sabíamos que no teníamos derecho a contárselo… - dijo Pansy algo arrepentida

- pero ellos podían ayudarte más que nosotros – dijo Hermione mirando a los cuatro adultos – y
fue sin querer que escuchamos… - dijo Hermione algo sonrojada por haber escuchado una
conversación detrás de una puerta

- gracias… - dijo Blaise sabiendo que lo habían hecho con su mejor intención de ayudar

- bien acompañarme, tenemos que hablar con tu madre… - dijo el patriarca Malfoy

****************

Lucius y Blaise entraron al despacho del primero, cerrando la puerta, pero sin ningún hechizo
silenciador, después de todo conocía perfectamente a Black y no dudaría que estuviera espiando,
arrastrando en el proceso a su lobito, además que Severus probablemente también estaría
escuchando para “protegerlo” de aquella “peligrosa” mujer. Y conociendo a su hijo no dudaba
que también terminaría pegando su oreja a la puerta preocupado por su amigo y con ellos a los
demás. Bueno así se arroba el tenerles que contar lo que habían hablado…

- Helga – dijo “alegremente” el Malfoy – y a que debemos tu honor en tenerte en mi mansión –


dijo “cordialmente” - ¿supongo que no te llevaras a Blaise? Se la está pasando muy bien con mi
hijo

- oh Lucius tan encantador como siempre – le dijo seductoramente la bella mujer, acercándosele
con sensualidad para besarle la mejilla, separándose con una sonrisa, miro a su hijo – Blaise… -
dijo secamente

- madre… - dijo sin ninguna emoción, completamente neutro

Los tres se sentaron en los sillones que había en la habitación, con tres tazas de café y un plato
con galletas, el menor dejo la tasa en la mesita, mientras que su madre y Lucius tomaban un
sorbo del delicioso líquido oscuro…

- bueno, vengo a llevarme a mi hijo a presentarle quien será su futuro marido – dijo trivialmente

Malfoy oculto una mueca de odio, jamás había perdonado el que su padre le arreglara un
matrimonio de conveniencia con Narcisa y odiaba aquella mujer por ver su felicidad y
comodidad antes que la de su hijo…

- ya veo… - dijo tranquilamente – pero sabes que los matrimonios arreglados son completamente
ilegales… - le dijo mirándola fijamente

- por supuesto que sí – dijo sin alterarse – pero Blaise está de acuerdo ¿cierto? – le dijo mirando
a su hijo retándolo a que la contradijera

Blaise miro al señor Malfoy, el sabia que tenia la marca tenebrosa tatuada en su brazo y que su
madre lo chantajeaba con eso, pero sabía que debía negarse para ganar tiempo…

- claro que no… - dijo mirándola fijamente sin poder evitar que su mirada se cargara de odio y
resentimiento hacia su progenitora…
Continuara…
Notas finales:
muy bn ahorita sus comentarios de lo fenial que salio el capi (que modestia XD!) por fisss ^^
prometo subir el capi el jueves ^^

Matta ne!

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Adiós Marca Tenebrosa… (2° parte) por Pazu
Notas del autor:

Holas en tiempo record actualizo hoy por que no se si pueda actualizar maña ^^ ya conteste
todos los comentarios ^^espero les guste el capi ^^

a leer ^^

Capitulo trece: Adiós Marca Tenebrosa… (2° parte)

- claro que no… - dijo mirándola fijamente sin poder evitar que su mirada se cargara de odio y
resentimiento hacia su progenitora…

************

- ¿¡qué estás diciendo!? – dijo completamente enojada parándose rápidamente del sillón

- como as escuchado Helga, tu hijo no desea casarse, así que te pediría que por favor te
retiraras… - dijo tranquilamente, sin inmutarse del enojo de la mujer, tomando un poco de su
café

- no puedo creer que me digas algo así Lucius, Blaise es mi hijo y ara lo que yo diga… - dijo
alterada la mujer

- no creo que te convenga hacer una escena Helga – le dijo fríamente, mirándola con sus fríos y
atemorizantes ojos grises – no te conviene enemistarte con un Malfoy, así que retírate de mi
mansión, Blaise se queda conmigo… - dijo con un claro tono de que no quería ninguna replica

La mujer le miro con odio, para luego fulminar con su mirada a su hijo – esta me las pagas… -
dijo con una sonrisa macabra, saliendo rápidamente de la habitación

****************

Mientras tanto, los que habían estado escuchando por la puerta, como había predicho el patriarca
de los Malfoy, se habían ido hacia la biblioteca para que la madre de Blaise no los viera. Se
sentaron en silencio tratando de procesar lo que habían escuchado, algunos sin creer como una
madre podría tratar así a su hijo y otros tratando de pensar en cómo solucionar el problema de
raíz, porque sabían que Helga Zabini no descansaría hasta ver casado a su hijo con aquel
desconocido mago.
La puerta de la biblioteca se abrió dejando ver a un “indiferente” Malfoy que tenía su mano
posada en el hombro del chico y un Blaise algo más tranquilo, aunque algo nervioso por la
sonrisa que le dedico su madre antes de salir del despacho del señor Malfoy…

Ron se levanto y fue directo al chico, le miro fijamente para luego abrazarlo firmemente, sin
importarle lo que los demás pensaran…

- todo estará bien… - le susurro al oído

- gracias… - le dijo Blaise ocultando su rostro entre el cuello y el hombro del pelirrojo

Lucius suspiro y se sentó un momento en el sillón, al lado de Remus quien le miraba preocupado
por la condición de Blaise… preguntándose si ya el rubio tenía una idea para ayudar al chico
Zabini…

- y… ¿tienes alguna idea de cómo ayudarlo? – le dijo bajito aunque todos habían podido
escuchar al castaño

Blaise estaba sentado al lado de Ron quien lo abrazaba protectoramente, se veían muy bien
juntos…

- no, aun no se me ocurre nada… - dijo con pesar el rubio inconsciente de haber bajado su frio
comportamiento habitual, después de todo Blaise era como otro hijo para él, igual que Theo y
Pansy, ya que sus infancias la habían pasado más en su mansión que en sus casas – necesitamos
un milagro… - dijo con sarcasmo – si aquella maldita marca no existiera, Helga no tendría nada
con que seguir chantajeando a Blaise…

Harry se levanto de la piernas del rubio – voy al baño... – dijo bajito y salió de la biblioteca

- ¿le habrá pasado algo? – dijo algo preocupado Neville

- si… después de todo el puede llegar a sentir los sentimientos de los demás… - dijo con pesar la
castaña

*************
Mientras tanto Harry, se recargaba su espalda en la muralla aun lado de la puerta de la biblioteca,
se dejo caer por ella, sentándose en el suelo, su mirada verde ahora más opaca, dejándola fija en
un punto indeterminado…

----…..----…..----…..----

- Alash… - dijo Harry, que estaba recostado en el árbol mirando a la mujer que estaba sentado a
su lado – yo…

- quieres ayudarlo… - le afirmo más que pregunto

- si… - dijo bajito

Alash le miro con orgullo – puedes, pero tendrás que volver…

- lo sé… - dijo bien bajito, sabiendo que aunque no quisiera, volvería con tal de ayudar a Zabini
que se había vuelto ya un ser querido para él.

Alash suspiro resignada con una sonrisa cálida – hay otra salida… - le dijo misteriosamente

Harry le miro interesado…

- te daré algo de mi magia y así podrás ir ayudarlo y volver… - le dijo seria – si volvieras ahora y
le ayudaras tu poder se descontrolaría, ve y ayúdalo, pero no podrás quedarte mucho tiempo…

Harry asintió feliz, con un brillito especial en sus ojos - ¿y cómo lo hago?

- ven… - le susurro

Cada uno estaba al frente del otro, Alash tomo las manos de su pequeño y le dijo – cierra los ojos
y concéntrate en tu cuerpo…

----…..----…..----…..----

Harry abrió sus ojos suavemente, los volvió a cerrar al no estar acostumbrado a aquella tenue luz,
trato de pararse, pero callo rápidamente, suspiro cansado, al parecer el haber estado tanto tiempo
encerrado en su mente pasaba factura. Comenzó a abrir y cerrar sus manos, luego moviendo
suavemente sus pies de un lado a otro, flexionando sus piernas y brazos, hasta que con algo de
dificultad se pudo parar, pero afirmándose con la muralla.

Sirius abrió la puerta de la biblioteca ya que se extrañaba de la demora de su ahijado y no


queriendo que el rubito de Draco fuera a por él, ya que después Harry no se le despagaba, salió
de la biblioteca, cuál fue su asombro al verlo recostado en la pared, con su respiración agitada…

- Harry… ¿te encuentras bien? – le dijo preocupado, acercándose rápidamente a su ahijado y


abrazándolo para que se apoyara en el

Harry le miro y le sonrió abiertamente – Padfoot te extrañe mucho, me alegro que estés bien… -
le dijo con sus ojos emocionados

Sirius abrió su boca sin poder creerlo, sus ojos azules se aguaron al descubrir que aquel que le
hablaba era SU ahijado – Harry… - dijo emocionado

Harry le sonrió, pero esta murió rápidamente – debo apurarme ayúdame… - le dijo para que le
ayudara a entrar a la biblioteca…

*****************

Blaise recostaba su cabeza en el pecho del pelirrojo, quien lo tenía abrazado de la cintura y le
acariciaba distraídamente sus cabellos, ambos estaban sentados juntos en un sillón. Theo, Nev,
Pansy y Herm compartían otro sillón, mientras que Malfoy y Remus otro, Severus se encontraba
leyendo un libro en un sillón individual y Draco estaba parado en frente de la ventana mirando el
tranquilo día…

La puerta de la biblioteca se abre abruptamente, sobresaltando a todos los presentes, aunque


algunos no lo demostraran. En la entrada se veía un ansioso, preocupado, emocionado, alegre…
Black que llevaba casi arrastras a un Harry cansado, con la respiración agitada y su cuerpo algo
tembloroso…

Draco se iba a acercar rápidamente hacia el Gryffindor, pero algo en su mirada le hiso detenerse
en seco, conocía muy bien esa mirada, aquel Harry que tenía enfrente no era más que el
verdadero Harry, era el… y su cuerpo se paralizo por completo…

Harry no quiso mirar a nadie, su mirada solo estaba puesta en aquel Slytherin que le había
querido alegrar las tardes, que había llegado a encariñarse y que había llegado a sentir lástima
por como su madre lo había tratado, así como tampoco encontraba justo que sufriera tanto por
aquella mujer. Se separo de su padrino y con algo de dificultad fue hacia el, cuando llego a su
lado se arrodillo ante él y le miro fijamente…

- Zabini… - pero se detuvo – no… - dijo suavemente – Blaise… - le dijo con una sonrisa cálida

Todos los ahí presentes, menso Sirius y Draco se sorprendieron al escuchar al Gryffindor,
entendiendo que el que estaba arrodillado ante Blaise, era Harry Potter y no su instinto de
fénix…

- Potter… - susurro sorprendió Blaise

- no… solo Harry… - le dijo cálidamente – ahora... confía en mi… - le susurro, antes de tomar su
brazo izquierdo y subir la manga de la camisa que llevaba

Blaise se sorprendió, pero miro los serenos y seguros ojos del Gryffindor y se tranquilizo, volteo
su rostro hacia el pelirrojo y le sonrió con confianza en su mejor amigo, y Blaise le devolvió la
sonrisa, apretando fuertemente con su mano derecha la mano de Ron.

- profesor Snape… - dijo firmemente sin mirarlo, su mirada solo dirigida al tatuaje de la
serpiente y la calavera - ¿podría ayudarme?

Severus no dijo nada, solamente se levanto dejando completamente olvidado su libro,


dirigiéndose rápidamente hacia el azabache…

- ¿podría estirar y sostener firmemente el brazo de Blaise? – le pidió tranquilamente

Snape asintió y se arrodillo al lado de Harry, haciendo lo que le pedía…

- señor Malfoy ¿podría sostener su cuerpo? – dijo suavemente

Lucius fue directamente hacia donde se encontraban…

Blaise estaba algo de lado en el sillón, por lo que colocándose a su lado izquierdo, coloco una
rodilla en el sillón y pasando sus brazos por la espalda del amigo de su hijo, lo afirmo por las
axilas, doblando sus brazos hacia arriba haciendo una especie de llave, para que no se soltara…
- Blaise… -le dijo serio, mirándolo fijamente – esto te va a doler…

Blaise asintió, cerrando los ojos fuertemente, preparándose mentalmente para lo que venía…

- si quieren pueden irse… - les dijo firmemente a todos los que estaban en la estancia…

Draco le miro retadoramente – me quedo… - dijo serio sin apartar su mirada gris de la verde del
Gryffindor

Harry asintió con una imperceptible sonrisa, sabiendo que el rubio Slytherin jamás dejaría a sus
amigos…

Los demás no se movieron de donde estaban, dando mudamente su decisión…

Harry suspiro, antes de poner sus dos manos sobre el tatuaje pero sin tocar la piel del brazo de
Blaise, cerró sus ojos concentrando su magia.

En la habitación se comenzó a llenar de un tibio aire que revoloteaba por toda la habitación, poco
a poco la magia de Harry mas la de otro ser eran completamente visibles, dos magias distintas
pero al mismo tiempo similares, una negra y la otra gris, entrelazándose despacio entre ellas,
enrollándose en el cuerpo de Harry, hasta que finalmente llegaron a sus manos, en donde se
concentraron en las palmas de sus manos. En ese preciso momento Harry comenzó a hablar en
parsel y el infierno se desato…

Blaise grito con desesperación sin poder evitarlo, haciendo que todos sintieran unos escalofríos
al escuchar tan desgarrador grito.

Blaise sintió morirse, era como si de verdad tuviera dentro de su piel una serpiente, que se movía
furiosa dentro de su cuerpo, de su brazo. Dolía mucho más que aquel Crucio que había recibido
en la batalla final, donde Voldemort murió… era un dolor escalofriante, espantoso. Sus ojos
estaban completamente abnegados de lágrimas y no podía parar de gritar…

Gritos… Gritos, llantos… Gritos, llantos, suplicas… Gritos, llantos, suplicas, dolor….

Ron le aferraba fuertemente la mano sin poder evitar sentirse un completo inútil, sin siquiera
darse cuenta lágrimas de impotencia caían de sus ojos celestes, tratando de decirle a Blaise
palabras de alivio que sabia no eran escuchadas…
Gritos… Gritos, llantos… Gritos, llantos, suplicas… Gritos, llantos, suplicas, dolor….

Lucius y Severus trataban de controlar los fuertes espasmos de dolor que sufría Blaise, sus
rostros mostraban la fría mascara que tan bien sabían utilizar, que solos los años de prácticas del
engaño daban un resultado escalofriante, pero por dentro estaban completamente destrozados, y
la culpa era un sentimiento muy palpable, sentían que no habían hecho su deber correctamente,
que pudieron haber hecho algo más por el chico… pero por ahora lo único que podían hacer era
tratar de que no se moviera tanto…

Gritos… Gritos, llantos… Gritos, llantos, suplicas… Gritos, llantos, suplicas, dolor….

Remus tomo la mano de Sirius, ambos miraban la escena sin poder decir o hacer algo,
impactados por ver el sufrimiento de aquel chico tan alegre y carismático, que les hacia olvidar
que pertenecía a la casa de las serpientes. Aquellas que tanto llegaron a odiar en su juventud, sin
quizás darse cuenta del sufrimiento que pudieron llegar a sufrir…

Gritos… Gritos, llantos… Gritos, llantos, suplicas… Gritos, llantos, suplicas, dolor….

Pansy y Hermione se abrazaban fuertemente, cerrando sus ojos para no ver aquella cara de dolor
que tenia Blaise. Pansy no pudo evitar dejar salir sus lágrimas al igual que Hermione, porque
aunque hace poco que habían podido llegar a conocerlo mas a afondo, ya le tenía estima aquel
bromista Slytherin. Y por otro lado Pansy no podía evitar sentir una punzada de angustia,
impotencia y dolor por la suerte de su amigo, sabiendo que esa podría haber sido su suerte…

Gritos… Gritos, llantos… Gritos, llantos, suplicas… Gritos, llantos, suplicas, dolor….

Neville lloraba sin ocultarlo, no podia llegar a entender por qué aquel chico debía sufrir así. Theo
sin pensarlo se colocó tras el castaño y lo abrazo por la cintura, ocultando su rostro entre el
cuello y hombro del Gryffindor…

- no te preocupes, el es fuerte… - le dijo bajito

Neville se sorprendió pero no se separo, sabiendo que el Slytherin necesitaba desahogarse, que
aunque se mostraba ser el más indiferente de todos los Slytherin, quería a sus amigos y sufría al
ver a su amigo en esa situación. Sintió como el cuerpo de Theo se estremecía al escuchar un
nuevo grito de dolor, Nev solo le acaricio el cabello sin decirle nada…

Gritos… Gritos, llantos… Gritos, llantos, suplicas… Gritos, llantos, suplicas, dolor….
Draco miraba con impotencia como su amigo sufría, sus ojos grises mostraban el odio y el dolor,
su mirada fría como el hielo, pero con lágrimas traicioneras que demostraban todo su dolor. No
podía llegar a entender por qué tenían que pagar por las culpas de sus padres, de ser tratados
como asesinos sin serlos, solo por pertenecer a una determinada casa… su vista fue hacia el
suelo con impotencia, con dolor, con rabia, sin saber a quién culpar, a quien gritarle y culparle
por el sufrimiento de su amigo…

Gritos… Gritos, llantos… Gritos, llantos, suplicas… Gritos, llantos, suplicas, dolor….

Silencio…
Continuara…
Notas finales:

jojjo.. lo se hice sufrir al pobre de Blaise u.u pero me encanto cuando Theo se apoyo en Nev fue
tan tierno ^//^

nos leemos ^^

Matta ne!

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Despertares… por Pazu
Notas del autor:

Holaaaaaaaaaaaaa a todo mundooooooooooooooo ^^ les traigo un nuevo capi jojojo ^^ pero


ademas les cuento que tngo Betaaaaaaaaaaaaaaaaaaa wiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii ^^ asi que espero que
este capi lo encuentren sin tantos errores ^^ mujujuu... mi beta es Cherry Moon jojojo... asi que
agradescamos su gran esfuerso por corregir mis tantos errores XD! y esperemos que no se me
espante con mis locuras que le are revisar XD!

bueno espero les guste el capi ^^

a leer ^^

Capitulo catorce: Despertares…

Draco miraba con impotencia como su amigo sufría, sus ojos grises mostraban el odio y el
dolor, su mirada fría como el hielo, pero con lágrimas traicioneras que demostraban todo su
dolor. No podía llegar a entender por qué tenían que pagar por las culpas de sus padres, de ser
tratados como asesinos sin serlos, sólo por pertenecer a una determinada casa… Su vista se
dirigió hacia el suelo, sus ojos reflejaban la impotencia, dolor y rabia que sentía. Ya no sabía a
quién culpar, gritar, sólo quería que su amigo dejara de sufrir.

****************

Silencio.

Fue todo lo que quedó en la habitación. Blaise, después de lo hecho por Harry quedó
completamente agotado; tanto de gritar como por el dolor que había sufrido por lo que cayó
desmayado en los brazos de Lucius. Harry corrió la misma suerte, ya que había gastado mucha
magia no sólo por eso, sino también por salir de su mente para luego volver nuevamente, pero él
fue sostenido en los brazos de Severus que evitó que diera contra el suelo.

Draco limpió sus lagrimas con su brazo fuertemente, antes de acercarse al cuerpo inconsciente
del azabache, miró de reojo el cuerpo inconsciente de su amigo que ahora se encontraba en los
brazos de Weasley, luego su atención volvió a su fénix, al cuál tomó con delicadeza
sorprendiéndose de sentirlo muy liviano, no pesaba casi nada…

–Lo llevaré a la habitación. – Dijo a nadie en especial, saliendo de la biblioteca firmemente


Se levantó y luego tomó en brazos al inconsciente Blaise, como hace algunos momentos lo había
hecho Draco con Harry…

–Será mejor que lo lleves a su habitación. – Dijo Lucius con calma.

Ron asintió y fue hacia la puerta, que la abrió Pansy.

–Nosotras también vamos… –Anunció Hermione refiriéndose a ella y a Pansy.

Y se dirigieron a l a habitación de Blaise.

–Iré a buscar algunas pociones para el dolo. – Ofreció Severus saliendo rápidamente del lugar.

–Y yo… creo que hmmm…le acompañaré. – Dijo Sirius antes de salir rápidamente para alcanzar
al Slytherin que caminaba muy rápido.

Neville miro de reojo a Theo que miraba “distraídamente” por la ventana, el castaño suspiró.

–Iré por algo de beber, le pediré a los elfos que tenga comida liviana para Blaise… esto…
¿Theo? – Llamó algo nervioso.

Nott sólo lo miro fijamente.–¿Me acompañas?—Theo asintió y ambos se fueron hacia la cocina.

Lucius estaba correctamente sentado en el gran sillón que habían estado utilizando, su brazo
estaba estirado en el respaldo del sillón y su mirada estaba fija en la ventana, perdido en uno de
sus tantos recuerdos.

– ¿Te encuentras bien, Lucius? – Preguntó algo preocupado Remus ante el silencio del rubio.

Éste le miró a través del reflejo de la ventana y una sonrisa nostálgica se dibujó en su perfecta
tez, pero siguió con la vista hacía los lejanos árboles que había en su patio…

–Eh… ¿Lucius? – Volvió a interrogar, aunque un tono de preocupación se dejaba entrever,


sentándose a su lado y mirándolo fijamente
– ¿Estás preocupado por mi? –Le susurró acercándose a él, una de sus manos tomándole el
mentón.

– ¿Qué prete…? – Pero su pregunta quedó a medias cuando unos ansiosos labios se aventuraron
en su boca.

Y el lobito se dejó hacer por aquella experimentada lengua, volviéndolo loco. Lucius se colocó
mejor sobre el castaño, y éste se reclinó un poco más en el sillón para sentir más el cuerpo de
aquel maldito sexy rubio, pero tan rápido como el beso comenzó terminó… El patriarca Malfoy
se separó lentamente de aquellos labios y le miró seductoramente, curvando sus labios con
aquella condenada sonrisa suya.

–Serás mío lobito… – Le anunció en la oreja para después pasar su lengua seductoramente, antes
de salir de aquella habitación.

Remus quedó acostado en el sillón, con la respiración algo agitada, un leve sonrojo en las
mejillas y mirando hacia la puerta algo confundido… Luego con una sonrisa divertida susurro
para el mismo.

– ¡Ya lo veremos, Lucius! …Ya lo veremos.

***************

Mientras tanto un cansado Sirius, de tanto correr por toda la mansión para llegar a las
mazmorras, se recostó en la pared. Tras un suspiro, se aventuró a entrar.

Todo estaba a oscuras lo que dificultó ver al posionista, que se encontraba frente a una
estantería llenas de frascos con pociones, su mirada oscura fija en algún punto de la muralla,
realmente perdido en su mente.

Se acercó lentamente, con pasos sigilosos, esos que con sólo años de práctica se consiguen y no
sería un merodeador por nada; sus escapadas por los pasillos de Howgarts eran históricas…

Se sorprendió al ver que Snape no se había dado cuenta de su presencia, por lo regular el
Slytherin siempre le descubría, después de todo las bromas que le solía jugar en sus tiempos de
estudiantes estaban en su memoria, era difícil tomarlo desprevenido… O al menos que estuviera
ocupado en una de sus preciadas pociones, pero este no era el caso e inexplicablemente se
preocupó por el huraño y frio Severus Snape.
–¿Snape? – Le llamó despacio.

Pero el profesor de pociones no contestó. Severus estaba sumergido en sus recuerdos, en aquellos
malditos recuerdos que quisiera tan vehemente olvidar. En donde tenía que aparentar que
disfrutaba del dolor ajeno, o participar en esas desquiciantes torturas que tenía que hacer como
un buen mortífago…

–¡Snape! – Elevó un poco la voz, zarandeándolo del hombro con una mano…

Severus parpadeó un poco desconcertado, se soltó de la mano que seguía en su hombro, en un


movimiento brusco, para dedicarle su mejor mirada made in Prince al pulgoso de Black.

–¿Qué quieres? – Preguntó entre dientes, maldiciéndose por tener la guardia baja, mientras
comenzaba a sacar algunos frascos que iba a necesitar para Blaise.

–A mí no me engañas, Snape. – Le dijo serio, antes de darle vuelta colocando sus manos en los
hombros del profesor y cuando tuvo enfrente de él, le abrazó fuertemente.

Snape trató de forcejear, pero Sirius siempre había sido más fuerte que él, además debía
reconocer que deseaba ese silencioso pero significativo abrazo, cerró los ojos y se dejo llevar.

El ex prófugo sonrío al ver que Snape dejaba de forcejear, y le rodeaba con sus brazos.

****************

Theo había dejado a Nev junto a Pansy y Hermione fuera del dormitorio, en la sala que estaba
dentro de la habitación, pero que era separada por una puerta corrediza, Weasley había ido por un
vaso con agua y él se había quedado junto a su amigo. Se sentó al lado de él en la cama,
acariciando sus cabellos, sonrió imperceptiblemente, ¡Cómo le volvía loco a veces ese idiota de
Blaise! Le quería, era como el hermano que nunca había tenido, al igual que Draco y Pansy, y le
dolía verlo así, sin poder hacer algo por el. Se acercó a su amigo y le beó superficialmente los
labios, como siempre hacían en momentos íntimos de amigos.

Justo en ese momento la puerta se abrió y un sorprendido pelirrojo se quedo en la mitad de la


entrada, miró la escena, su vista iba de Nott a Blaise y cerró la puerta sin querer pensar en lo que
había visto.
Nev, Hermione y Pansy se sorprendieron al ver pasar rápidamente al pelirrojo Gryffindor, pero se
sorprendieron más al ver al serio y tranquilo Theodore Nott, corriendo tras Ron. Los tres se
miraron completamente desconcertados ante lo que había pasado…

Theo alcanzo rápidamente a Weasley en el pasillo, tomándole bruscamente del brazo y le miró
fríamente.

– ¡Escúchame, Weasley! Blaise es uno de mis mejores amigos y quiero que te quede esto muy
claro. – Su expresión seria hizo que Ron bajara un poco la guardia–. Le haces algo, lo haces
sufrir y te juro que Snape pasaría a ser un santo al compararlo con lo que te are si haces sufrir a
mi hermano. –. Amenazó claramente, antes de darse vuelta y caminar hacia la habitación donde
hace sólo algunos minutos habían salido corriendo.

Ron se quedó un momento ahí en medio del pasillo procesando lo que había escuchado, dándose
cuenta de lo idiota que se había comportado, tras un suspiro caminó de regreso a la habitación
de su Blaise. Aunque ahora ya estaba un poco más tranquilo al saber que Theo era tan sólo como
un hermano para Blaise, al igual que él con Harry.

Y ya que recordaba a su amigo se preguntó vagamente ¿cómo estaría con Malfoy? Suspiró
resignado, sabía que debía dejarlos a solas, aunque dolía admitirlo, Malfoy se preocupaba de su
amigo y le cuidaba bien, esperaba que no se complicaran las cosas entre ellos y que el hurón no
metiera la pata, aunque sabía que apoyaría a su amigo siempre.

*************

Draco estaba con su cabeza recostada en la cama en donde dormía tranquilamente su fénix,
sentado en una silla, su mano acariciaba la del moreno, sus ojos grises perdidos en algún lugar de
la habitación.

No podía negar que estaba muriéndose de los nervios, no sabía que decirle al “Harry” que
probablemente despertaría. Se preguntaba si el Gryffindor recordaría TODO lo había pasado
entre ellos.

Por un lado quería al Gryffindor de vuelta, pero por otro lado no… No quería que Harry se
alejara de él, que no pudieran estar así, abrazados cómodamente, que durmieran juntos o que ya
no dependiera tanto de el. Tenía miedo de perder todos esos privilegios; darse cuenta que al fin y
al cabo, no era más que Malfoy y no Draco.
Sintió como el cuerpo que estaba acostado relajadamente se removía suavemente, Draco se
separo rápidamente, sentándose en la silla. Mirando ansioso como el moreno comenzaba a abrir
los ojos lentamente…

Harry abrió sus esmeraldas, todo lentamente, permitiéndose enfocar la mirada y en el proceso
buscando a cierto rubio. Y cuando le encontró sonrió tiernamente.

–Draco… – Susurró con una enorme sonrisa y algo sonrojado.

El aludido le miró con una sonrisa resignada, al parecer aun no era tiempo para enfrentar sus
miedos, lo cual le frustraba y aliviaba por igual.

*******************

Severus le dio la última poción antes de poder despertarlo, no era bueno que pasara tanto tiempo
dormido. Ya llevaba así aproximadamente doce horas y necesitaba despertar ya o si no sería
peligroso para su salud tanto física como mental.

Estaban todos reunidos en la cómoda y espaciosa habitación, ya todos sabían que Harry aún no
era “Harry”, así que resignados pero aliviados de que el Gryffindor estuviera bien, ahora estaban
totalmente enfocados en la salud del Slytherin.

Ron era el que más cerca estaba de Blaise, los demás estaban estratégicamente colocados. Pansy
al otro lado de la cama tomada de la mano de Hermione. Neville estaba al lado de un frio Theo
que estaba recargado en la pared, con la mirada fija en su amigo. Severus estaba cerca de Ron
con algunas pociones a mano porsiacaso. Lucius estaba al lado de la puerta junto a Remus,
ambos estaban muy juntos inconscientemente, ya que el rubio estaba más preocupado por la
salud del chico, que por su acercamiento a su lobito. Draco abrazaba por atrás a Harry y este
tenía sus manos entrelazadas con su rubio. Sirius estaba cerca de Severus pendiente de sus
movimientos y su mirada se dividía entre su ahijado y el chico Zabini.

Blaise se comenzó a remover en la cama suavemente, antes de abrir sus ojos pesadamente, los
talló con su brazoantes de tratar de sentarse y darse cuenta de que estaban todos en la habitación.

Estaba algo desorientado, así que agradeció mudamente que alguien le ayudara a sentarse en la
cama, miró a su lado concretamente a quién le había ayudado y sonrió bobamente al ver a un
pelirrojo muy cerca de su cara, este le miraba ansioso y feliz.

– ¿Cómo te sientes? – Preguntó su amiga rubia.


Blaise le miró algo aturdido. –. Algo mareado y confuso, ¿Qué paso?

–¿No recuerdas nada? – Ahora fue el turno de Draco para hablar.

Blaise le miró y vió a Harry que le dirigía una mirada entre apenada y ansiosa, y fue justo en ese
momento que sus miradas chocaron que los recuerdos de lo pasado llegaron a él; Harry entrando
con su padrino apoyándose en él para caminar, cuando se arrodilló ante él, la mirada decidida, su
suave mano apoyándose en el brazo que tenía la marca que le condenaba. Pero sobre todo
recordó el dolor casi agónico y después la oscuridad sobrevino.

Con algo de nerviosismo y ansiedad se miró el brazo izquierdo, descubriendo fascinado que
estaba completamente limpio. ¡No había ningún rastro de la marca tenebrosa! No pudo evitarlo,
las lagrimas de felicidad se dejaron ver por sus mejillas, mientras una enrome sonrisa adornaba
su cara, miro fijamente al responsable de aquel milagro.

– ¡Gracias, Harry! – Sollozó emocionado.

Harry le miro con lágrimas deslizándose por sus mejillas sonrojadas, tirándose sobre el Slytherin
en cama, abrazándolo fuertemente.

Blaise le devolvió el abrazo con una sonrisa, cerrando sus ojos fuertemente.
Continuara…
Notas finales:
y les gusto??? espero k si ^^ gracias Cherry Moon por corregirme el capi ^^ y buenos nos
leemos en el prox capi ^^
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La llegada de Narcisa Malfoy por Pazu
Notas del autor:

Holas aqui de vuelta con otro capi ^^ que espero que les guste y mas ya que lo beteo Cere_chan
^^ jojojojojo y a quedado mucho mejor ^^ Graciaaaaaaaas Cere eres genial ^^ jeejejeje ^^

bueno a leer ^^

Capitulo quince: La llegada de Narcisa Malfoy

Harry le miró con lágrimas deslizándose por sus mejillas sonrojadas para después arrojarse
sobre el Slytherin en cama, abrazándolo fuertemente.

Blaise le devolvió el abrazo con una sonrisa, cerrando sus ojos fuertemente.

*********************

Las cosas estaban relativamente en calma, en la mansión Malfoy, después de que Blaise se
recuperara completamente del agotamiento mágico al ser removida la marca tenebrosa.

Sólo hubo una sorpresa.

Hermione y Pansy ya eran oficialmente novias, todos en la mansión se enteraron, no de la mejor


forma según pensaban los involucrados en el incidente.

Flash Back…

Hermione y Pansy se encontraban, como se les hacia costumbre, en la biblioteca hacía algunos
días se habían declarado lo que sentían y por fin, estaban de novias, aunque nadie más lo sabía.
No habían podido decírselos a sus amigos por los sucesos acontecidos; el altercado de Harry en
el mundo muggle y luego el problema de Blaise, así que habían pensado decirles a todos en la
cena.

Pansy quitó el grueso libro que estaba leyendo afanosamente Hermione, era el libro que Harry le
había dejado a su castaña amiga para que lo estudiara. En él había muchas cosas interesantes
acerca de los fénix, pero hasta lo que había leído la Gryffindor nada muy relevante para el caso
de su amigo.
La Slytherin no gustaba de ser ignorada, sobre todo su novia, así que se hizo a la tarea de atraer
su atención y que mejor que besándola apasionadamente… Hermione quiso objetar, quejarse y
reclamarle a su novia, pero aquel beso era demasiado demandante y lujurioso como para
rechazarlo.

Pansy coloco sus manos en la cintura de la castaña, ésta rodeó con sus brazos el cuello de su
novia. Hermione termino parada caminando a tropezones con Pansy besándole el cuello, hasta
que cayeron en el sillón que había en la biblioteca, Pansy sobre Hermione.

La Gryffindor fijo su mirada en la chica Slytherin, con suavidad tomo entre sus dedos el suave y
liso cabello de su novia.

—Te viene mas así que como rubia— le dijo con una sonrisa.

Pansy le sonrió con superioridad— ¡Ja! Yo siempre me veo divina—replicó con burla.

Hermione rió divertida mientras sentía como su chica le lamía el cuello. —Eso es cierto, pero así
con el pelo negro te ves más intelectual. —Pudo decir antes de gemir al sentí como una mano se
posaba en uno de sus pechos — Pansy nos pueden ver… —Suspiro placenteramente.

Pansy sólo sonrió con coquetería, para luego regresar a sus labios y dejarla, literalmente sin aire,
mientras con sus manos iba desabrochándole la blusa que llevaba la castaña. Estaban en su
mundo, plenamente excitadas y deseosas explorar con sus caricias lo que hubiera a su paso,
cuando su burbuja fue rota al escuchar como la puerta se abría… Pansy se semi levantó,
Hermione trató de cerrar su blusa, pero ambas miraban anonadadas el espectáculo que tenían
delante.

**************

Lucius había acorralado a Remus en uno de los desérticos pasillos de su mansión y sin poder
evitarlo tomo de un brazo al castaño y le aplastó a la pared, Remus dejó escapar un gemido de
dolor, miró con molesta al rubio que estaba a escasos centímetros de su cuerpo.

— ¿Qué te pasa, Malfoy? — le espeto con rencor.

Lucius se limitó a mirarle fijamente, su mirada gris era un mar de sentimientos que el castaño no
pudo evitar contemplar. Aquellos ojos acostumbrados a ocultar sus emociones, le dejaban ver su
interior, su alma… No sólo había deseo, había mucho, mucho más.
— Lucius… — Susurró.

El rubio se acercó y le beso, un beso simple, un roce mezquino.

Remus no pudo aguantar más las ganas de tener a ese rubio junto a él, así que atrajo al Slytherin
a su cuerpo, pasando sus brazos por el cuello de Lucius, quién posó sus manos en la cintura del
castaño, besando apasionadamente a su lobito.

El rubio había perdido la razón, dejándose llevar por lo que tanto había deseado, lo que tantos
años había soñado. Mientras que Remus Lupin había perdido su control, dejándose embriagar
por aquella adictiva mirada gris, por aquellos anhelados besos y caricias.

Entre tropezones, caricias y besos, Lucius toco algo diferente a la lisa y fría pared, era una
puerta, sin pensar siquiera hacia que habitación lo conduciría, la abrió de golpe.

No se detuvieron siquiera por lo que entraron a la habitación dificultosamente, el calor iba en


aumento besos y caricias que se prodigaban, pero un ahogado jadeo lo hizo separarse, o mejor
dicho a Remus reaccionar y empujar todo lo lejos que pudiera de su cuerpo a Lucius.

***************

Ron y Harry veían entusiasmados una revista de Quidditch, sentados sobre una larga manta azul,
en el patio de la mansión, debajo de un gran árbol que les daba sombra. Draco y Blaise se
encontraban debatiendo acerca de un artículo que había sido publicado en una revista de
pociones en la misma manta, a pocos centímetros de ellos, se encontraba Neville con un
masetero que contenía una pequeñísima planta blanca con una sola hoja de ese mismo color,
Theo estaba a su lado “leyendo” un libro con sus ojos fijos en Neville.

Estaban tranquilamente y relajados como hace algún tiempo llevaban haciendo, disfrutando de
un momento de tranquilidad.

Harry levantó la mirada de la revista y dejó de hablar con Ron, su mirada verde fija en la
mansión específicamente en una ventana en particular, una sonrisa juguetona se formo en sus
labios, llamando la atención de Ron, que al ver que su amigo no le respondía había seguido con
su mirada lo que el azabache veía; sin embargo, no encontró nada interesante que ver.

— ¿Harry, te encuentras bien? –preguntó algo preocupado, pero se extrañó más al ver esa sonrisa
juguetona de su mejor amigo.
Draco paró su conversación con Blaise al escuchar al pelirrojo y miró a su fénix, preguntándose
qué era lo que llamaba su atención. Ante la expectación de todos, el azabache se levantó y fue
hacia la mansión casi corriendo. Todos se miraron en silencio y le siguieron.

******************

Hermione miro asombrada a los dos adultos que tenía enfrente de ella ambos tan desarreglados
como deberían estar ella y su novia. Pansy les sonreía con diversión al ver cómo se encontraba el
siempre perfecto señor Malfoy. Remus no pudo evitar que sus mejillas se sonrojaran al ser
descubierto, aunque ellos habían tenido algo de culpa al entrar a la biblioteca sin saber que
estaba “ocupado”. Malfoy solo les miraba fijamente, aparentemente sin inmutarse por
ser atrapado, pero por dentro no podía negar que estaba algo avergonzado por
su espectáculo frente a las jovencitas, pero ahora que las veía, ellas al parecer estaban utilizando
muy bien la biblioteca.

Lucius iba a hablar cuando de la puerta entraron; Potter, su hijo, Blaise, Theo, Longbottom y
Weasley, al parecer corrieron un buen trecho ya que venían algo agitados.

Todos estaban algo confusos ya que los chicos ni siquiera sabían a que habían ido a la biblioteca,
solo habían seguido al fénix, que había corrido sin motivo aparente hacia el interior de la
mansión. Draco miro hacia el sillón donde aun estaba su amiga sobre Granger.

—Supongo que querrán decirnos algo, ¿cierto?– dijo con sarcasmo el rubio.

Ahora todos miraban hacia el sillón, Ron abrió la boca sin poder imaginarse que su castaña
amiga anduviera con Parkinson, Theo sólo les miro fijamente dándole una leve sonrisa a su
amiga, Neville solo sonrió abiertamente y Blaise se acerco a Ron cerrándole la boca al colocar su
mano bajo el mentón.

Hermione se sonrojó y apartó a su novia, colocándose bien la blusa lo mas disimulada posible,
Pansy sonrió socarronamente.

—Como puedes ver, Draco, heme aquí con mi novia — declaró con claro tono dramático.

— ¿Novia? — susurro Ron mirando a Hermione.

— Sí, nos hicimos novias desde hace algunas semanas —le dijo seriamente a su pelirrojo amigo.
— ¡Felicidades! —declaró Nev.

Todos comenzaron a felicitar a la pareja, pero cierto azabache miraba fijamente a cierto castaño
con dorada mirada que estaba sonrojado ante aquella mirada traviesa y divertida que le dirigía
Harry, se parecía tanto a la de James cuando sabía algo que otros no se habían dado cuenta.
Lucius alzó una ceja al ver que el azabache le miraba, este sólo le sonrió y fue a felicitar a
Hermione y Pansy…

A los pocos minutos entraron Sirius y Severus algo agitados, suponiendo que era porque habían
venido corriendo y no por otra cosa. Venían con el pelo algo desordenado, las ropas mal
acomodadas, toda indicación de que habían corrido para llegar a la biblioteca ¿cierto?

Harry desde el sillón abrazó a Pansy miro hacia su padrino, dirigiéndole la misma mirada que le
había dado a Remus y Lucius, pero siendo Sirius desvió la mirada hacia otro lugar, claramente
nervioso, recordando a su mejor amigo James cuando le decía solo con la mirada que lo había
“descubierto” en una de las suyas, mientras que Severus se hizo el indiferente.

Fin Flash Back

Ahora se encontraban platicando en el salón de estar, comiendo unas galletas y algunos tomando
café, otros té y algunos un jugo.

Remus y Lucius estaban muy cerca uno del otro conversando animadamente, entre algunas
risitas y sonrojos por parte del lobito…

Severus trataba de ignorar los descarados coqueteos que el perro sarnoso le estaba dando a su
persona y quitándoselo de encima, preguntándose si Black no tenía alguna noción del espacio
personal.

Harry estaba recostado en el suelo boca abajo, viendo un libro de animales mágicos que le había
pasado Theo hace algún rato en compañía de Neville que también se encontraba en el suelo a su
lado, en la misma posición que él. Ron se había quedado dormido con la cabeza en las piernas de
Blaise que le acariciaba suavemente sus cabellos rojizos. Hermione, Pansy, Theo y Draco
hablaban de todo un poco.

Súbitamente Harry levantó su cabeza, mirando hacia la chimenea, Draco se dio cuenta y también
miro hacia ella, asombrado ya que no estaba enterado de que tendrían visita, las llamas
comenzaron a avivarse.
Lucius también se extrañó ya que no esperaba a nadie, se levantó del sillón para estar más cerca
de la chimenea. Harry y Neville imitaron al rubio sólo que ellos se sentaron en el suelo, curiosos
de saber quién los visitaba. Ron se despertó porque Blaise había dejado de acariciarle y se sentó
algo adormilado tallándose los ojos. Draco se sentó muy bien en el sillón, dejando de hablar con
los demás, el resto también se callaron y completamente ansiosos por ver quién era el visitante
inesperado.

Y de entre las llamas apareció una figura, una femenina para ser más exacto, esta se sacudió su
hermosa túnica ajustada de color marfil, tenía su largo cabello amarrado en un simple moño,
dejando caer su cabellos rubio en la espalda y cara, su mirada azul fue directamente hacia un
lado encontrándose con su “esposo”, sin darse cuenta de los demás presentes.

— ¡Lucius cariño! — gritó entusiasmada, abrazando al sorprendido rubio, besando


superficialmente sus labios.

Todos los presentes se asombraron por la impulsividad de aquella dama de la sociedad


aristócrata. Ella, que siempre mantenía una expresión de superioridad y desdeñosa ante todo el
mundo mágico. Pero quien no estaba sorprendido era Draco que sabía que su madre en realidad
era muy cariñosa y expresiva, que con la familia era una muy buena mujer.

Remus sintió como su corazón se caía en pedazos, sin poder creer que había olvidado por
completo a la mujer del rubio y también con rabia se mordió el labio inferior, al ver lo idiota que
había sido al caer en los sucios juegos de esa maldita serpiente rastrera.

Lucius se separo con delicadeza de su esposa, dedicándole una suave sonrisa llena de cariño y
amor, misma sonrisa que le regalaba su rubia mujer.

—Madre… – susurró Draco que se había levantado del sillón y acercado a la pareja quedando a
unos pocos pasos de su madre.

— ¡Dragón! – exclamó con emoción, dejando que sus bellos ojos se nublaran por lagrimas que
querían desbordarse –. Estás bien… — dijo con evidente alivio abrazando fuertemente a su
pequeño hijo, aunque de pequeño no tuviera nada.

— Mamá — susurró con cariño, feliz de volverla a ver y tenerla allí con el…
Continuara…
Notas finales:
NOoooooooo me maten jajaj con lo de Narcisa ^^ jojojojo bueno espero sus opiniones ^^

Nos leemos, cuidense ^^

Matta ne!

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Narcisa Malfoy o es… ¿Black? por Pazu
Notas del autor:
Holas bueno lamento la demora y tienen que agradecer a Cere-chan (mi betita ^^) por betearme
el fic muuy rapido y muuy bien XDDDD se lo mande hoy serca del medio dia y ahora que m
conecte por dar la hora miro mi correo y sorpresa!!! ya me lo habia corregido ^^ espero que les
guste ^^ ella me digo que no habia podido evitar corregirlo enseguida XD! asi que espero que a
ustedes tambn les guste ^^a leer ^^
Capitulo dieciséis: Narcisa Malfoy o es… ¿Black?
—Mamá… —susurró con cariño, feliz de volverla a ver y tenerla allí con él.

**********************

Harry se paró y fue hacia donde estaban Narcisa y Draco abrazándose. El azabache agarró un
pedazo de la tela del pantalón que llevaba su rubio, tirándolo para que le pusiera atención. Draco
se alejó de los brazos de su madre y miró desconcertado a su fénix

— ¿Mamá?— preguntó ladeando su cabecita.

Draco sonrió levemente y le atrajo hacia su cuerpo pasando uno de sus brazos por los hombros
del menor— Sí, ella es mi mamá.

Harry miró hacia la señora rubia, le sonrió encantadoramente…

Narcisa levantó una ceja como acostumbraba su marido, extrañada de ver al salvador del mundo
mágico en su mansión, y por si fuera poco darse cuenta que no la reconocía por algún extraño
motivo, sin contar claro la familiaridad con que se trataban su hijo y Potter. Por primera vez
desde que había llegado fijo su vista hacia la sala en donde se encontraba, sorprendiéndose al ver
a la cantidad de ¿visitas?, que tenían.

Vio con sorpresa que no sólo eran los amigos de su hijo, sino también algunos más de
Gryffindor; miro un momento hacia Severus, que cualquiera que no lo conociera pensaría que le
miraba con su frialdad e indiferencia, pero ella era una de las pocas personas, que podían ver más
allá de aquella máscara, porque en aquellos ojos negros se escondía la alegría por verla de nuevo.

—Severus, me alegra verte también —habló suavemente.


El Slytherin se levantó de su asiento y fue hacia la esposa de su amigo, la saludo con un beso en
la mano y le sonrió tenuemente, sin que nadie pudiera verlo, excepto ciertos ojos azules que
brillaban de celos.

—A mí también me da gusto de volverte a ver, Narcisa.

—Sirius que alegría verte, ha pasado mucho tiempo de la última vez que nos vimos primo– le
regaló una sonrisa encantadora.

—Cierto, Cissa, y no porque yo no quisiera– replicó con una sonrisa chulesca.

Narcisa sólo le miro fijamente y luego le sonrió como si nada. – Buenos días jóvenes, Lupin–
saludó a los presentes–. Me gustaría compartir mas con ustedes, pero ahora necesito estar con mi
marido, hace mucho que no nos vemos—habló lentamente mientras miraba a cierto castaño que
la fulminaba con la mirada, Narcisa solo le sonrió amablemente –. Vamos querido– se acercó
para tomar el brazo de su esposo–. Nos vemos en la cena – fue lo último que dijo antes de salir
por la puerta con Lucius a su lado.

Un silencio algo tenso se formo en la sala, mejor dicho, cierta aura negra y lúgubre se formó en
donde se encontraba sentado el siempre, calmado y tierno ex-profesor de DECAO. Todos se
sorprendieron al sentir aquella opresión en su pecho, causado por el ánimo de Remus Lupin, pero
este ni se inmutó, se levantó suavemente de su asiento y con pasos decididos salió de la sala,
hacia su habitación; inconscientemente todos soltaron el aire retenidos en sus pulmones,
aliviados con poder respirar normalmente.

—¿Qué le abra sucedido a Remus? Él no suele ser así— susurró Sirius, como si el hablar alto
traería de regreso a su amigo y le maldijera por hablar de él. Aunque sus temores no eran
infundados dado que una vez paso, cuando su amigo estaba muy cabreado, como en hace un rato
y a James se le salió un comentario cuando Remus ya había salido de la habitación, pero con los
desarrollados sentidos de su amigo licántropo, lo había escuchado y lo había maldecido cuando
había vuelto al cuarto que compartían, para nuevamente salir de la habitación y no aparecer hasta
mucho mas tarde después.

Está de más decir, que Sirius y sobre todo James habían aprendido la lección y cuando Remus
estaba extremadamente molesto no le decían nada y lo dejaban en paz, compadeciéndose, de
aquel que se le acercara y sufriría la furia del castaño.

Severus le miró fijamente, mirando calculadoramente aquel atractivo rostro, Sirius se le quedó
mirando también curioso por aquella calculadora mirada y por qué no decirlo, también nervioso,
aquellos ojos negros eran demasiados hipnotizantes. Severus se preguntaba si las neuronas de
aquel pulgoso, se habían muerto por tantos años en Azkaban, porque no podía hallar otra
explicación, de por qué aquel idiota, preguntara por la razón de aquella “rabia” que había
demostrado el licántropo; suponía y creía no estar equivocado, al asegurar que hasta el idiota de
Weasley, se había dado cuenta de la “cercanía” de Lupin y Lucius.

—Algunas veces me preguntaba, si tu idiotez puede seguir creciendo y me lo acabas de


comprobar – dijo simplemente el profesor de pociones, antes de salir de la habitación.

Sirius miró el lugar que hace poco había estado Severus, como procesando lo que había dicho, se
levantó de golpe del sillón y se dirigió hacia donde se había ido el pocionista, mascullando
algunas palabras sueltas como; “maldito Slytherin” “ese Snivellus me las va a pagar” “que se ha
creído” y muchos etcétera mas.

Los chicos suspiraron y siguieron en lo suyo, Draco sonrió imperceptiblemente, luego podría
hablar con su madre, sabía que en estos momentos, probablemente su padre ya le estaría
contando lo que había pasado.

El rubio sintió como algo tiraba de su manga, bajo su mirada para poder ver aquellos ojos verdes
que le miraban fijamente, Harry llevo una de sus manos a uno de ellos y lo talló tratando de
espantar un poco el sueño.

—Tengo sueño… — susurro bajito el azabache.

—Vamos a la habitación – le dijo con una sonrisa lujuriosa, al imaginarse ciertas actividades que
podían realizar en aquella habitación, solamente ellos dos y con una enorme cama.

Harry asintió inocentemente, sin entender aquella sonrisa que había puesto el rubio, le tomó de la
mano para irse a la habitación que compartían.

—Hurón aprovechado – dijo el pelirrojo al ver salir a su mejor amigo de la mano con el rubio
Slytherin.

Blaise miró al pelirrojo, para luego suspirar teatralmente– Me encantaría que fueras una
comadreja aprovechada.

Ron se sonrojo violentamente, mientras los demás se reían sin poder evitarlo.

**************
Lucius se encontraba junto a Narcisa, estaban en el despacho privado del rubio, sentados uno
frente al otro, en cómodos sillones negros. Lucius tenía entre sus dedos, un vaso con whisky y
Narcisa una taza de café.

—Así que el joven Potter eligió a nuestro pequeño para ser su compañero– habló más para ella
que para su esposo, una leve sonrisa se formo en sus delgados labios

—Sí, y mientras Potter no se recupere, Draco lo tiene que cuidar.

—Mmm… —murmuró antes de llevar la taza de porcelana a sus labios para saborear el líquido
oscuro.

Narcisa miraba en silencio el semblante de su esposo, había cambiado mucho, desde la primera
vez que lo viera, cuando ella aun era una joven muchacha ilusionada con casarse y tener de
esposo a aquel guapo joven; se había enamorado perdidamente de aquel frio y perfecto rubio y
quizás aquel sentimiento jamás podría borrar de su corazón.

— ¿Y ya firmaste los papeles? – su voz salió calmada, aunque sus manos apretaron mas a
aquella pieza de porcelana, única señal de que en realidad si le importaba aquella respuesta.

—Sí, los firmé ayer, te los pasaré en seguida para que los veas – dijo tranquilamente mientras se
levantaba de su asiento e iba hacia su escritorio a sacar aquellos papeles.

Narcisa le miro fijamente, dejando la taza en el platillo que se encontraba en la mesa de centro.
Sus ojos celestes no se despegaban de aquel atractivo cuerpo, en sus labios se formo una triste y
resignada sonrisa, que borró rápidamente cuando su rubio esposo se dio media vuelta para
dirigirse de vuelta al sillón con los papeles en la mano.

*************

Hermione y Pansy se habían quedado solas en la sala, ya que Ron, Blaise, Theo y Neville se
habían ido a buscar a Draco y Harry, para ir a jugar un rato un partido de Quidditch.

Aprovechando que estaban solas, Hermione se dedicó a leer un poco más aquel libro que había
dejado Harry; salían cosas muy interesantes acerca de los fénix, como sus orígenes, sus poderes,
las clases de fénix y muchas otras cosas; pero nada muy relevante con el asunto que aquejaba a
su amigo. Pansy se encontraba recostada en el sillón, su cabeza sobre las piernas de su castaña
novia, mientras leía una revista de moda muggle.
Hermione seguía en su lectura hasta que se encontró con una párrafo muy interesante, que la hiso
brincar y llamar la atención de su, ahora, pelinegra novia. Pansy se sentó sobre el sillón, mirando
sobre el hombro de su novia, la pagina que leía nerviosamente la castaña.

— ¿Qué encontraste, Herm? – dijo completamente curiosa la pelinegra (y después dicen que son
los Gryffindor los curiosos)

— ¡Mira ve lo que dice aquí…! – le apuntó a un párrafo con emoción.

“¿Cómo eligen los fénix su compañero? Hay tres formas o condiciones para aceptar a un
compañero - tanto muggle como mago.

Pansy lo leyó en voz alta, mirando aquella hoja impresionada, no sabía nada de eso, entonces eso
quería decir que aquel libro les podría decir por qué Harry había elegido a Draco; al final el libro
si iba a servir de algo…

—Veo que están entretenidas leyendo – dijo una voz desde la puerta.

Pansy y Hermione se sobresaltaron, por la voz que había salido de improviso, miraron hacia la
puerta y vieron a Narcisa Malfoy, que se acercaba hacia ellas, con pasos lentos y seguros; con
asombro vieron que se sentó al lado de Hermione, como si fuera algo totalmente normal. Sin
preguntar Narcisa fijo sus ojos celestes hacia la hoja en donde hace solo unos minutos atrás
ambas chicas habían leído.

—Al parecer esto se ve muy interesante—habló suavemente la aristócrata rubia.

Pansy y Hermione se miraron un momento, pero no vieron el problema de que la señora Malfoy
leyera el libro.

Entre más leían mas se sorprendían, las tres mujeres terminaron de leer y quedaron en un
profundo y reflexivo silencio.

—Creo que esto tiene que leerlo Draco– dijo segura Pansy, mirando a Hermione.

Esta le miró un momento, aun pensando en lo que había leído y viendo los pros y los contras de
decirle algo al rubio Slytherin.
—Creo Pansy que sería mejor que por ahora, Draco no se enterara – hablo suavemente Narcisa,
mirando a la chica fijamente.

— ¿Por qué? El tiene derecho a saberlo – refutó Pansy, al escuchar a la madre de su mejor amigo
diciendo aquello, después de todo pensó en que ella estaría de acuerdo en que debían decirle.

—Sí, pero como están las cosas por ahora es mejor guardar silencio.

—Creo que la señora Malfoy tiene razón – dijo Hermione mirando a su novia –, por ahora es
mejor que esto se quede entre las tres

Pansy no estaba segura en quedarse callada, pero por aquella mirada que le daba su la castaña
suspiró sabiendo que había perdido.

—Quiero dejar en claro que no estoy de acuerdo, pero lo haré.

Hermione le sonrió cálidamente, apretándole la mano, Narcisa solo asintió y se levanto para salir
de la sala.

—Espero verlas a la hora para la cena – fue lo último que dijo antes de salir completamente de la
sala dejando a dos chicas aun pensando en lo que habían descubierto.

Narcisa caminaba tranquilamente por los pasillos de su mansión, pensando en lo que había
descubierto, sonrió levemente por aquello. Tenía que ponerse en marcha, debía mandar cuando
antes una carta a Francia, antes que las cosas se complicaran y tanto Lucius como Draco, se
molestaran con ella.

Suspiro cansada, al parecer tendría muchas cosas que hacer, en muy poco tiempo…

***************

Por fin la hora de la cena había llegado, para un hambriento tarro-sin-fondo-Weasley, quien
estaba a punto de saltar sobre la comida, pero aun faltaba su mejor amigo junto con el rubio-
engreído-de-Malfoy. Pero en ese momento llegaron ambos chicos, un rubio levemente sonrojado
y un azabache con una enorme sonrisa.

— ¿Por qué la demora hijo? – le habló Narcisa, mientras discretamente le daba una orden a un
elfo domestico para que sirviera el primer plato de comida.
—Tuvimos un pequeño percance–dijo sin interés, aún con un leve sonrojo en sus pálidas
mejillas.

—Ya veo – dijo simplemente.

Todos comieron en un silencio, algo incomodo, sobre todo por cierto castaño que no disimulaba
para nada su mirada dorada fulminado a cierto rubio que le miraba con sus ojos grises algo
burlones. Narcisa viendo aquel tenso ambiente, en donde nadie se atrevía a hablar para no hacer
“explotar” alguna bomba entre esos dos, se arriesgo a entablar una conversación.

—Joven Longbottom me han dicho mis elfos que ha hecho un fabuloso trabajo con las plantas
que hay en el invernadero – comentó.

Neville se sonrojó. –Gracias señora Malfoy– susurro, sino fuera porque todo estaba en silencio
nadie le hubiera escuchado.

—Oh no hay de qué, pero no me digas señora Malfoy, que después de todo desde ahora vuelvo
nuevamente hacer Black – le dijo dedicándole una leve sonrisa.

Remus dejo caer el tenedor que en esos momentos llevaba a su boca, con un ruido que hizo eco
en el silencioso comedor. El castaño miraba anonadado, de Lucius a Narcisa, una y otra vez.

Mientras que Harry por debajo de la mesa, le tomaba la mano que tenia apretada fuertemente a
su pantalón Draco, este le miro levemente, el azabache le sonrió tímidamente y apoyó su cabeza
en el hombro del rubio; Draco sonrió levemente y aflojó el agarre que tenía a su pantalón, para
aferrar la mano de su pequeño fénix, dejando caer su cabeza en la cabeza del Gryffindor, sin
importarle que aquello no debía de hacerse en una comida.
Continuara…
Notas finales:

Muaajajaja...

wuaaaaaaaaaa no puedo creer que ya llevo mas de 200 comentarios estoy O.O''' aun procesando
la informacion XD!

cuidense

Matta ne!
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¿Despedidas? por Pazu
Notas del autor:
Holas ^^ ¿como an estado? siento la demora por este capi... es que lo tenia listo hace
muchooooo... pero no lo habia podido subir, ya uqe mi U estuvo en paro de funcionarios y los
computadores y la biblioteca estaban cerrados por mas de una semana y me queria morir... u.u'
asi qeu no habia podido acceder a internet, y menos contactarme con mi beta ^^ que tambien
tuvo problemas con su compu u.u' pero despues de todos los problemas aqui esta el capi ^^
gracia a mi queria beta Cere_chan (Cherry Moon) bueno a leer ^^
Capitulo diecisiete: ¿Despedidas?

Mientras que Harry por debajo de la mesa, le tomaba la mano que tenía apretada fuertemente a
su pantalón, este le miró levemente, el azabache le sonrió levemente y apoyó su cabeza en el
hombro del rubio; Draco sonrió levemente y aflojó el agarre que tenía a su pantalón, para
aferrar la mano de su pequeño fénix, dejando caer su cabeza en la cabeza del Gryffindor, sin
importarle muy poco lo que las etiquetas sociales dijeran en este momento.

*****************

Los días habían pasado en relativa calma en la mansión Malfoy. Hacía tanto tiempo que no se
veía y escuchaba tan llena de vida; algunos retratos de los antepasados de los Malfoy no podían
concebir que la antigua mansión familiar de su clan fuera ensuciada por aquellos traidores a la
sangre, sangres mestizas y sangre sucia. Todos ellos recorriendo los antes, puros y refinados
pasillos, que se sentaran en aquellos invaluables sillones y que durmieran en aquellas
maravillosas habitaciones que poseía la mansión, para los ilustres invitados, pero que no fueron
pensadas para que esa clase de magos, las utilizaran. Por otro lado había algunos cuadros que
estaban más que felices por la reciente actividad en la mansión Malfoy llenándola de vida, que
volviera a su esplendor, pero no por elegantes fiestas para la alta sociedad o por invitados
importantes dentro de la sociedad mágica; sino bien por el ambiente hogareño que se “respiraba”
en la mansión, por las risas alegres que se escuchaban en el jardín, por los besos robados en los
oscuros pasillos, las sonrisas y platicas tranquilas que se desarrollaban en la mesa a la hora de
desayunar, almorzar y cenar, por las tranquilas tardes en la biblioteca.

Draco se había dado cuenta que no podía hacer nada por, el ya quebrado, matrimonio de sus
padres, algo que sabía desde siempre, de niño se había dado cuenta que la forma de actuar de sus
padres, cuando estaban en compañía familiar, solamente los tres, no era la de una pareja que se
amaban, pero jamás preguntó, no quería ser el causante de que sus padres se separaran, porque él
amaba a ambos por igual; aunque su padre era mucho más frío, siempre tenia miradas cálidas
cuando estaban en familia, palmaditas en la espalda, cuando le revolvía el pelo, aunque después
le decía que debía ir a peinarse o cuando algunas veces en la noche, cuando su padre creía que él
dormía, iba a su habitación le cubría y le besaba la frente, su padre podía ser distante, de
enseñanza dura y perfecta, pero sabía que le amaba. Por otro lado su madre, tampoco era la
madre del año, ella salía mucho; con sus amigas a viajes de placer, no cocinaba, no le ayudaba a
vestirse cuando pequeño y no le cantaba; pero aun así siempre estaba pendiente de él, porque
Draco sabía que su madre estaría con él, al segundo que la llamara, que dejaría todo botado por
él, que lo acunaría y abrazaría si necesitara consuelo, que se pondría delante de su padre para
defenderlo, que lloraría junto a él, porque no podría verlo triste. Sus padres eran diferentes al
promedio, no se comportaban de la forma que muchos definirían como los padres ideales,
muchas veces él creyó que sus padres no lo querían; por dejarlo solo, por ser duros con él, por las
peleas que tuvieron, pero aun así… siempre le demostraban que él era lo más importante para
ellos y estaba agradecido a la vida por darle unos padres como ellos, con tantos defectos, tan
Slytherin pero también con muchas otras virtudes.

Sabía que su madre adoraba a su padre, no sabía si era amor, quizás sí, quizás no; solo ella lo
sabía, porque como buena Black y antes Malfoy, guardaba muy bien sus sentimientos; pero había
veces en que podía jurar que en la mirada celeste de su madre, había un deje de tristeza y amor al
mirar a su padre y este no le miraba. Por otro lado sabía que su padre amaba a otra persona, más
especifico a su ex-profesor de DECAO; se veía venir aquel romance, no podía ser tan hipócrita y
decir que no se había dado cuenta, después de todo cuando iba en tercero, se había percatado
del peculiar interés de su padre, su atención siempre dirigida a la información que pudiera
proporcionarle acerca de su “nuevo” profesor; al final de ese año creyó que ese interés se debía a
que era un hombre lobo, pero aun así tenía algunas dudas. Ahora lo veía todo claro, su padre no
se lo había dicho aun, pero estaba seguro que antes de entrar a clases, su padre le confirmaría que
Remus Lupin, sería su nuevo esposo. A él no le molestaba, no podía ser hipócrita y reprochar a
su padre por enamorarse de un mestizo y licántropo, porque él también se había enamorado de
cierto mestizo... mas puntos para el cuándo se lo dijera; pero si le podía reprochar el hecho de
que le enseñara a odiar y sentirse superior a los demás sólo por el hecho de que fueran mestizos y
sangre sucia. Pero no tenía por que seguir amonestando a su padre con respecto
aquella educaciónde odiar a los magos por su sangre, aunque también entendía, que esa era la
educación que siempre se había inculcado en la familia Malfoy.

El rubio sonrió suavemente, cuando sus ojos enfocaron a la persona que tenia recostada su
cabeza en sus piernas; estaban en el jardín. Draco recargando su espalda en el árbol y su pequeño
fénix acurrucado a su lado, su cabello desordenado desparramado sobre sus piernas, sus ojos
cerrados y su respiración acompasada, suave, tranquila… se veía tan frágil, tan pequeño, que le
daban ganas de despertarlo, sólo para ver su hipnotizante mirada verde, enfocada en él. Eran en
esos momentos, en que deseaba tener más poder, para ser él quien protegiera a ese pequeño
fénix… Sabía que en sus labios ya se había formado una sonrisa boba en su pálido rostro, se
había vuelto todo un ñoño, al tener tanto tiempo cerca al Gryffindor, algo que no le molestaba,
cuando no había nadie que le mirara, aun tenía que mantener aquella imagen de frio príncipe de
Slytherin y no un romántico Hufflepuff enamorado con corazoncitos flotando a su alrededor.
Suspiró encantado, mientras sentía como Harry se acercaba más a su cuerpo, aunque sólo tenía la
cabeza y uno de sus brazos en sus piernas, se acercaba más a su pecho, sus rodillas estaban
dobladas.; le acarició el cabello suavemente, mientras sus ojos grises no se despegaban de aquel
apacible rostro, que tenía un leve sonrojo.

----…..----…..----…..----
En un apacible campo, un joven estaba sentado sobre el pasto, a la orilla de un rio, donde se
abrazaba a sus rodillas fuertemente, ocultando su cabeza entre ellas, pero sólo sus ojos verdes,
casi cubiertos completamente por su rebeldes cabellos negros, podían apreciar la imagen que el
espejo que flotaba a la altura de su cabeza, le mostraba; en ella se podía apreciar a sí mismo – o
mejor dicho a su cuerpo – junto a un rubio que conocía muy bien. Sus mejillas se sonrojaron al
ver aquella intensa mirada gris sobre su rostro; sonrojo que también vio a través del espejo.

–No sé porque tienes tanto miedo –susurró una voz a su lado, y su dueña se sentó junto al joven
de cabellos tan negros como los de ella–, se nota que le gustas, que te quiere…–Continuó con su
mismo tono de voz, delicado, conciliador, mientras pasaba uno de sus delgados y pálidos brazos
por lo hombros del menor.

Harry se dejo abrazar, por aquellos cálidos y maternales brazos, dejando descansar su cuerpo en
el pecho de aquella mujer; se sentía tan bien en compañía de aquella mujer, que ella era otra de
las razones por las que no quería “volver”, porque sabía que ya no podría estar con ella
nuevamente, ni siquiera en sus sueños y no quería dejarla. Porque aunque sabría que aun
habitaba en su interior, no sería lo mismo… porque no podría volver a escuchar su suave y
tranquila voz, reír junto a ella, sentir aquellos reconfortantes abrazos, y que sin saber la razón le
hacían estar seguro. Eran como los abrazos que dan las madres a sus hijos… no… aun no quería
separarse de ella.

–No tienes que detenerte por mí, pequeño…–le susurró tiernamente, mientras apretaba su abrazo
y le acariciaba el cabello.

A ella también le dolía tener que separarse de su pequeño, pero ella no podía ser un impedimento
para que Harry fuese feliz, además tenía que seguir con su vida. Ella quizás ya no podría
hablarle, abrazarse o verle, pero aun así, ella siempre estaría con él, hasta el último minuto que le
fuera permitido.

–Te voy a extrañar Alash. Te quiero –dijo inaudiblemente, cerrando fuertemente sus ojos.

–Y yo a ti pequeño –No sabes cuánto agregó para si misma

----…..----…..----…..----

Estaban todos reunidos en el recibidor, ya que Narcisa debía volver a Francia, según lo que había
dicho, tenía que terminar algunas negociaciones y tratos que tenía con algunas amigas allá. Ella
había estado en Francia cuando la guerra se desató, a pedido-orden de Lucius, que prácticamente
la tiro por la chimenea para que estuviera a salvo de los mortífagos; ella había querido estar en
Hogwarts, para ayudar a su hijo, pero Lucius no se lo permitó, ya tenía suficiente preocupación
con Draco en el castillo, como para poner otra preocupación más en su cabeza.

Pero Narcisa no se quedó haciendo nada en la mansión de Francia, sentada sobre un sillón con la
mirada fija en la chimenea; sino que tuvo que estar recibiendo a varios alumnos de Slytherin, que
no querían seguir los pasos de sus padres y que viendo la única forma de salir de aquel nefasto
futuro como mortífagos, habían pedido ayuda a sus compañeros. Draco junto a sus amigos se
organizaron, y les dieron trasladores a sus compañeros, para que en el momento en que empezara
la batalla, fueran a la mansión en Francia, donde su madre junto a otras madres que no querían
aquel futuro a sus hijos los esperarían. Algunos se quedaron en el castillo para pelear en contra
de Voldemort, pero muchos se fueron por el traslador y los Slytherin los entendían, porque sabían
que aunque no querían un futuro marcado de sangre, dolor y tortura, no podían pelear contra sus
propios padres, porque aunque muchos fueran unos asesinos, seguían siendo sus padres.

Por lo tanto Narcisa se encargo de ayudar a los chicos y sus madres, había tenido que reunirse
con el representante del mundo mágico londinense, que estaba en el ministerio francés, para
poder organizar la vuelta de los chicos a Inglaterra, asegurándose que ninguno fuera enjuiciado,
ya que no habían participado en la guerra. Y todos esos trámites habían acabado hace un día
antes, de que ella llegara a la mansión Malfoy.

Y ese día, Cissa volvía a Francia, todos fueron a despedirse de ella…

–Draco…–le habló a su hijo, mientras posaba sus finas manso sobre los ante brazos del rubio –
cuídate, come bien, duerme, pórtate bien, no te metas en muchos problemas… - le dijo con una
sonrisa.

Draco solo asentía, mientras rodabas sus ojos, llamando internamente a la paciencia, aunque una
sonrisa cálida se formo en su rostro –Sí, madre. No te preocupes… – le dijo antes de abrazarla
fuertemente.

Narcisa le abrazó y le susurró al oído – No tengas miedo dragón y discúlpame, te aseguro que
pronto tendrás el camino libre… – y terminó con un beso en la mejilla.

Draco miró a su madre sin entender de lo que hablaba, suspiró frustrado, sabía que su madre a
veces le gustaba hablar con acertijos.

La rubia dama, fue hacia el azabache que le miraba con una ingenua mirada verde, Narcisa
abrazó al pequeño Gryffindor y este le devolvió el abrazo sin dudar. Muchos en el salón se
sorprendieron por el actuar tan familiar que había entre ellos.
–Cuídalo… hazlo feliz –pidió sin que nadie fuera capaz de escucharla, sólo él.

Cuando se separaron Harry miro a la madre de su rubio y asintió con una sonrisa…

–Fue un agrado compartir con usted señorita Granger, su inteligencia y sabiduría es admirable –
halagó a la castaña.

Hermione le sonrió levemente, sin poder evitar sonrojarse un poco, ante el cumplido de la
aristocrática dama; sus ojos castaños miraban fijamente a aquellos celestes que le de volvía la
mirada; Hermione solo asintió levemente.

– Pansy, espero que me llegue pronto tu carta, me muero por ver aquellas tiendas en Paris –
sonrió suavemente.

–No se preocupe, Narcisa, que mañana mismo tendrá una lechuza junto a su ventana – le hablo
cordialmente pero con confianza.

–Señor Weasley fue muy divertido jugar con usted al ajedrez mágico y sobre todo el de dejarme
ganar – le sonrió cálidamente.

Ron sonrió y rió avergonzado con un leve rubor en sus mejillas…

–Joven Longbottom, muchas gracias por dejar tan hermoso el invernadero, debo decirle que tiene
un don muy especial con las plantas – le hablo cariñosamente.

Neville se sonrojo mucho más que Ron y asintió apenado con una leve sonrisa…

–Y ustedes jovencitos… - les hablo a Blaise y Theo – espero que no desaprovechen sus
oportunidades – les mando a ambos una mirada que decía claramente que ella lo sabia.

Blaise le miro y sonrió coqueto – Por supuesto que no, permítale decirle que jugare todas mis
cartas – le hablo sensualmente, mientras le tomaba la mano y se la besaba, inclinándose
teatralmente.

–Espero que le vaya bien Señora Black – dijo simplemente Theo, aunque había calidez en su
mirada.
Narcisa suspiró y le revolvió el cabello, antes de colocarle bien el jersey azul que llevaba,
besándole suavemente la mejilla. Se dio media vuelta y se topo con unos ojos negros que le
miraban con cariño, aunque casi nadie se percato.

–Severus te voy a extrañar – le dijo la mujer mientras lo abrazaba fuertemente, para disgusto de
cierta personita.

El oscuro profesor de pociones le devolvió el abrazo – Yo también, cuídate – le susurró muy


cerca de su oído, besándole suevamente la mejilla.

Ambos se separaron lentamente, aunque Severus aun tenía tomada la mano de Narcisa, ambos
sentía como una mirada los taladraban…

–Primito, me dio un gusto enorme volver a verte – le dijo efusivamente con una radiante sonrisa,
mientras lo abrazaba.

–Y tú no sabes cuánto GUSTO me dio a mí pensó sarcásticamente – A mi también – dijo


simplemente tratando de que su voz saliera por lo menos cortés.

–No vuelvas a arruinarlo – le susurró con reproche.

Sirius le miro con culpa en sus ojos azules, algo avergonzado, pero Narcisa le sonrió de vuelta
guiñándole un ojo.

-Nos vemos querido – le hablo alegremente a su ex-esposo, abrazándolo largamente, para ahora
disgusto de cierto lobito – te amo – quiso decir, pero solo le dio un beso en la mejilla y le susurró
–, sé feliz Luc, se muy feliz – se separó de él con una sonrisa en sus labios, pero en sus ojos
había un halo de tristeza.

–Tú también se feliz Cissa, cuídate mucho – le habló con sincero cariño.

Narcisa se dio media vuelta y sin que Remus se lo esperara, la rubia lo abrazo fuertemente…

-Cuídalo, hazlo feliz –advirtió – ni pienses en hacerlo sufrir, que sino tendrás que vértelas
conmigo – le dedicó una suave sonrisa.

Remus le sonrió de vuelta cálidamente, sintiendo pena por aquella hermosa mujer que
renunciaba a su eterno amor, porque fuera feliz con otro – Gracias- dijo, porque él sabía que si
Narcisa hubiera querido, no le hubiera dado los papeles de divorcio a Lucius, en el mundo
mágico, era la mujer quien daba el divorcio al hombre, aunque el marido podía apelar al
ministerio.

Narcisa se despidió de todos con un adiós, le dio un último beso a su pequeño bebé y se dirigió a
la chimenea, nombrando la mansión de Francia, desapareciendo entre las llamas…
Continuara…
Notas finales:

espero que les haya gustado el capi ^^ espero no demorarme en el prox capi, que tiene escrito
dos lineas u.u' bueno... sera... cuidense ^^

Matta nee!

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Volviendo a Hogwarts… por Pazu
Notas del autor:

Holas aqui les traigo un nuevo capi que espero les guste el comienzo es *¬* y el final es T.T
espero que les guste muajajajaja...

gracias Cere-chan por betear el fic, quedo muy bueno ^^

a leer ^^

Capitulo dieciocho: Volviendo a Hogwarts…

Narcisa se despidió de todos con un adiós, le dio un último beso a su pequeño bebe y se dirigió a
la chimenea, nombrando la mansión de Francia, desapareciendo entre las llamas…

**************

Lucius sonrió con lujuria al ver a su amante arquearse de placer, cuando su pierna tocó
ligeramente su excitado sexo. Besó golosamente uno de los pezones de su lobito, mientras este le
arañaba suavemente su espalda; Lucius comenzó a dejar un camino de besos, lamidas y
mordiscos, sobre aquella piel ligeramente morena, que estaba surcada por algunas cicatrices, que
a él le encantaban. Remus abrió más sus piernas, dando más espacio a su amante, invitándolo
mudamente, a que siguiera su camino más abajo…

Lucius besó superficialmente la cabeza del erecto pene, mientras este jadeaba audiblemente, el
rubio sonrió, le encetaba jugar con su castaño. Sacó su lengua lamiendo desde la punta hasta la
base, varias veces, antes de meterse en su boca solamente la punta, lamiendo la cabeza, haciendo
círculos con su lengua, sacándolo de su boca, para luego volver a lamerlo todo.

Remus quería más, mucho más, pero sus ruegos no eran acatados y estaba demasiado caliente y
necesitado como para esperar a que su pareja le complaciera; así que sacando fuerzas de su
condición como licántropo, empujo al rubio para que quedara de espalda sobre el colchón de la
cama y él se subiera sobre el Slytherin. Lucius jadeó sorprendido, pero para nada molesto le
encantaba cuando a su tímido castaño le salía su lado salvaje.

—!Oh, demonios!— jadeó Lucius al sentir como una estrecha cavidad envolvía su pene.

Remus se había metido completamente el erecto miembro del rubio, sin dilatar su entrada con
anterioridad, estaba tan caliente que no dudó en meterse todo ese grande y duro miembro. El
castaño suspiró algo adolorido, mientras se inclinaba y besaba con ferocidad al rubio aristócrata.
-Oh… Remus eres demasiado estrecho…— trató de hablar lo mejor que pudo— muévete
amor… muévete…—le dijo casi suplicando (un Malfoy no suplica) tratando de mover sus
caderas, pero con el peso del castaño no podía.

Remus sonrió perversamente mientras se levanta levemente— ¿Eso quieres?—le susurró,


mientras se separaba completamente del cuerpo del rubio, mientras sus manos apretaban cada
uno de sus pezones—. Pues tendrás que esperar—susurró con malicia ya que recordaba
perfectamente como el rubio no le hizo caso cuando le rogaba porque lo tomara—ruega cariño…
—le instó sensualmente, mientras levanta sólo un poco su cadera, para volver a bajar.

—Hmmm—gimió Lucius al sentir aquel suave vaivén— !Por favor, Rem...!—susurró en un


jadeo.

Remus sonrió de lado y comenzó a marcar el ritmo de las embestidas, primero lentamente, para
luego hacerlas más rápido, subiendo y bajando; arriba y abajo, comenzando a masturbarse ante
los hambrientos ojos grises; el rubio quitó la mano del castaño, para ser quien lo masturbara.
Remus mordió fuertemente el hombro pálido de su pareja, al sentir que muy pronto llegaría al
orgasmo, los movimientos cadencioso, ayudados por Lucius, quien movía sus caderas, hicieron
que el orgasmo llegara instantes después. Ambos se vinieron al mismo tiempo gritando el
nombre del otro.

*******

— Siriuuuus… —jadeó con esfuerzo.

El nombrado contestaría si no estuviera tan entretenido, metiendo su lengua lo mas que podida,
dentro de aquella húmeda y caliente cavidad. Severus estaba a cuatro patas, mientras Sirius
estaba muy ocupado con su trasero. Una mano fue hacia los testículos del pocionista, jugando
con ellos sin de lamer aquel agujero, mientras Severus mordía fuertemente la almohada, para
tratar de mitigar los gemidos que querían escapar de su boca.

Sirius sonrió mientras se separaba del trasero de su amante, escuchando claramente, el sonido de
queja amortiguada por la almohada, lamió uno de sus dedos, fijando sus azules ojos en aquellos
negros que tanto le atraían, metió aquel dedo, donde antes se había divertido su lengua, mientras
su otra mano seguía jugando con los testículos de su amante.

—Sé que te gusta rudo Sev—Una sonrisa pícara se dibujó en sus labios y utilizó su mejor tono
sensual para continuar—Dímelo, ¿quieres que te lo meta completamente? ¿fuerte? ¿duro?—
acompañaba sus palabras con una ejemplificación de su dedo mientras lamia una de las nalgas de
Severus, sintiendo como estas se apretaban en su dedo.

Severus no contestó, sólo jadeaba entrecortadamente, con un leve sonrojo en sus mejillas por las
palabras del “pulgoso”.

Sirius sonrió con picardía, mientras sacaba su dedo y sin previo aviso metió todo su erecto
miembro en aquella estrecha cavidad.

—Aaahhh… ¡maldición!—jadeó Severus, al sentir aquel enorme pene en su interior.

Sirius sacó lentamente el aire por los dientes al sentirse tan apretado, quedándose quieto un
momento antes de moverse con movimientos rápidos y certeros a la próstata del profesor de
pociones.

Severus jadeaba y maldecía por igual, sentía demasiado placer, movía sus caderas encontrándose
con los embaste de su amante, mientras este lo masturbaba. Severus mordió fuertemente la
almohada al saber que pronto se vendría y con un grito ahogado negando el nombre de quien le
daba todo ese placer se vino en la mano de su amante. Sirius sintió como aquella cavidad se
contraía por el orgasmo, jadeó por el placer que sentía, embistiendo un par de veces más antes de
eyacular dentro de su amante, y no negando como Severus el placer de gritar el nombre del
hombre que le proporcionaba placer, lo gritó.

**********************

Era un nuevo día y todos sabían que ese día en especifico muchos volverían a Hogwarts, así
como todo lo que esto implicaba en su educación quizás más de lo algunos podían llegar a
estimar, valorar, creer, pretender, imaginar, conjeturar, presumir, predecir, deducir, suponer,
figurarse, sospechar…

Los habitantes de aquella mansión, comenzaron a salir de sus dormitorios, para ir hacia el
comedor y tomar su desayuno antes de partir hacia el colegio, ya que el tren partía a las diez de
la mañana y ya eran las ocho y media y como siempre, nunca faltaba algún improvisto que
retrasaría fortuitamente su salida hacia la estación.

Fue una casualidad de la vida…que solamente los menores ya estaban todos sentados, Harry
recibiendo comida por parte de Draco, que le daba un pedazo de torta de chocolate, Blaise
coqueteando casidescaradamente a cierto pelirrojo, que se sobresaltaba cada cinco segundo,
Theo limpiaba distraídamente una manchita que tenía en una de sus mejillas Neville, este
estaba algo sonrojado sin despegar su vista de su plato de uno de sus pasteles favoritos de
frutilla, Pansy y Hermione estaban en su mundo, con sus manos entrelazadas sobre la mesa.

Esa fue la escena que se encontraron los cuatro adultos que llegaban tarde para tomar el
desayuno. Fue una escena algo impactante, parecía que en vez de estar en una mesa familiar,
estuvieran en algún restaurant rodeado de parejas, haciéndose sus mimos empalagosos. Lucius
prefirió acallar sus quejas por el comportamiento tan Hufflepuff, Severus también prefirió
guardar sus comentarios, por el comportamiento para nada Slytherin de sus alumnos, Sirius se
mordió la lengua, al ver como el rubio menor, estaba comportándose con su pequeño ahijado,
prometiéndose que si veía algún movimiento lascivo por parte del mocoso ese, lo maldeciría
hasta matarlo o hasta que Remus lo detuviera, Lupin también iba a decir lo encantador que se
encontraban todos, demostrando su cariño por el otro, pero prefirió omitir su comentario, porque
estaba seguro que avergonzaría a casi todos los chicos y recibiría algunas miradas molestas por
parte de los adultos.

Tanto Remus y Severus trataron de sentarse lo mejor posible, sin levantar sospechas de su
actividad nocturna, sentándose lo más lentamente posible y con cuidado, tratando de que ningún
gesto de dolor fuera expresado por su rostro. No es que fueran unos vírgenes, pero su actividad
no fue muy suavecita que se diga. Cierto rubio y azabache, miraban a sus respectivos amantes,
con sendas sonrisas lujuriosas y en sus ojos había puro deseo, algo que sacó sonrojo en los otros
dos y miradas fulminantes.

— ¿Qué les paso?—preguntó preocupado el fénix— ¿Se cayeron y se pegaron en sus traseros?—
dedujo inocentemente Harry.

Hubo varias reacciones, entre sonrojos, miradas fulminantes, devolución de jugos y otros que
boqueaban sin saber que decir.

—Sí pequeño, no fue nada—dijo simplemente Remus con una leve sonrisa.

Harry asintió volviendo su atención a su comida, sin prestarle atención al tenso y algo incomodo
silencio que se formo en la mesa después de su comentario.

***************

Estaban listos para ir a la estación, aunque había un ligero problema, no querían que nadie
supiera que Harry era un fénix y que no se podía valer por sí solo y que mas encima su
“protegido” era Draco Malfoy, aun no sabían quien era aquel sujeto que había atacado a Harry,
no querían que tuviera información acerca del punto débil del fénix; Draco. Es por eso que
habían decidió que los Gryffindor, irían junto a Sirius al andén y los Slytherin con Lucius, ya que
Remus y Severus debían ir antes al castillo para esperar a los alumnos. No podían estar juntos, se
vería muy sospecho y empezarían a preguntar, ya cuando Harry volviera a ser el mismo, las
cosas podían cambiar, pero todo aquello, que se veía lo más lógico, no lo era para cierto fénix…

— !No, no, no, no!—decía desesperado el fénix, mientras se abrazaba asfixiantemente al rubio,
escondiendo su cabeza en el pecho de Draco.

Este trataba de ser lo más dulce posible para que Harry entendiera que debían ir separados, pero
el pequeño fénix no comprendía por que no podía estar junto a su rubito, solo entendía que
querían separarle de su Draco.

Ya era tarde solo faltaban quince minutos por que el tren salieran y nadie sabía qué hacer, no
podían lanzarle un desmaius, porque Harry fácilmente podía evitarlo.

A Draco le entristecía lo que iba a hacer, pero era su última carta, suspirando cansadamente,
tomo cada uno de los brazos de su fénix, con algo de presión separándolo de su cuerpo; le dolió
al saber lo que iba hacer, cuando vio aquellos ojos tan verdes brillosos por las lagrimas
contenidas que no se había permitido desahogar; el rubio hizo una leve mueca, pero al final se
animo a hablar.

—Harry—le dijo seriamente—Te ordeno que vayas con ellos—le dijo secamente, mirándolo
fijamente con sus ojos grises completamente fríos.

Todos en la habitación miraron aquella escena, con pesar y molestia, pero que sabían que Draco
Malfoy podía hacer lo que quisiera con Harry, sobre todo en ese momento en donde sólo el
instinto del fénix, era el que tenia control del cuerpo de Harry.

El azabache miró completamente dolido por las palabras y expresión del rubio, pero sabía que no
podía hacer nada, ya que había recibido una clara orden. Con pasos lentos y torpes, camino hacia
donde estaba Hermione, Ron, Neville y un enojado Sirius, su cabeza gacha, sus cabellos
desordenados tapaban sus ojos, por donde algunas lagrimas caían lentamente. Sirius abrazo
protectoramente a su ahijado, fulminando con su mirada al chico Malfoy, antes de hablar.

—Me apareceré con Harry en el andén— dijo simplemente el animago—ustedes, vayan por
chimenea los veo allá— les hablo a los chicos y sin decir más desapareció junto con Harry.

Draco suspiró abatido, mientras sentía como una mano se posaba en su hombro apretándolo
suavemente, ladeo su rostro para ver el siempre serio de Theo.
Los otros Gryffindor se fueron por la chimenea, a los pocos minutos se iban los Slytherin en un
tenso silencio; Lucius solo miro a su hijo sin decir nada, esperando que todos los jóvenes pasaran
por la chimenea para luego el seguirlos; mas tarde podría hablar con Draco.

Continuara…

Notas finales:

jejeje espero qeu les haya gustado ya me imagino los comentarios que me van a llegar y no
trataen mal a mi Dragon para el tampoco fue facil tratar asi a Harry y en los prox capis no seran
muy lendos para el gryffindor...

mmm... estoy algo depre por qeu estaba comenzando un nuevo fic, que me estaba gustando
mucho y se me borro u.u' quizas me demore mas en actualizar u.u'

nos leemos, cuidense ^^

Matta nee!

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Tren a Hogwarts… por Pazu
Notas del autor:

HOlaaaaaaaaaaaaaaa a todos, esperon que pasen UN BUEN AÑO NUEVO!!!!!! jo... XD!

esta sera mi ultima actualizacion del año, increible que ya pasara otro año, gracias x seguir
leyendo mis locuras y espero que el prox año tambn sigan leyendo y comentando mis foc ^^

oh... este capi no esta beteado, es que no e tenido tiempo para mandarselo a mi beta u.u' pero
espero que no tenga tantos muchos errores XD!

a leer...

Capitulo diecinueve: Tren a Hogwarts…

Los otros Gryffindor se fueron por la chimenea, a los pocos minutos se iban los Slytherin en un
tenso silencio; Lucius solo miro a su hijo sin decir nada, esperando que todos los jóvenes
pasaran por la chimenea para luego el seguirlos; más tarde podría hablar con Draco.

********************

Llegaron a la estación, Lucius vio a un par de distancia a su hijo junto a sus amigos, se les acerco
y coloco su mano sobre el hombro de su hijo, este simplemente le miro de reojo. Diviso a lo
lejos, a Potter con sus amigos y a Black, miro al primo de su ex-esposa y le dio un ligero
cabeceo, para ponerse en marcha.

– Hijo – le hablo a su primogénito, dejando que los demás se subieran al tren – trata de no
forzarte mucho, las cosas pronto se solucionaran – le aconsejo sutilmente, sabiendo que su
heredo, siempre quería tener todo controlado, algo imposible por muy Malfoy que fuera.

Draco simplemente asintió, antes de entrar al vagón y perderse entre los alumnos, mientras
Malfoy padre se quedaba aun parado, mirando el tren que por siete años lo llevo a aquel castillo,
donde paso cosas que nunca imagino que le ocurrirían. Se dio media vuelta, con su porte
elegante y altivo, debía volver a la mansión, para solucionar los últimos detalles.

*************

Cuando Sirius y Harry habían llegado a la estación, el animago había abrazado a su ahijado, sin
soltarlo siquiera cuando ya sus amigos habían llegado. Pero el tiempo se acababa por lo que con
un último abrazo y un beso en la frente, dejo que su ahijado se fuera de la mano con Hermione,
se despidió de los demás con una semi sonrisa. Suspiro cuando ya no los vio más; en ese
momento no quería pensar mucho en lo que había pasado, esperaba que todo se solucionara
pronto vio a Lucius que le dio un cabeceo, él se lo devolvió mirándole de reojo. No podía
quedarse más tiempo en el andén, debía arreglar algunas cositas que no había tenido tiempo de
hacer antes, para poder tener todo listo y partir donde Lucius.

*************

Los Gryffindor encontraron muy pronto un vagón donde sentarse, Harry seguía en su mutismo,
para frustración de Ron, molestia por parte de Hermione y pena por Neville. La castaña y el
pelirrojo, no querían dejar a su amigo, pero tenían que ir a sus obligaciones como prefectos;
sintieron como el tren comenzó a andar, empezando su recorrido hacia Hogwarts.

– Harry – le llamo suavemente Hermione, sentándose a su lado – Harry – le volvió a llamar, esta
vez, colocando su mano en el rostro de su amigo, para que dejara de mirar por la ventana y le
mirara a ella – Ron y yo vamos a ir a la reunión de prefectos, Malfoy también va a estar ahí, lo
traeré aquí ¿de acuerdo? – termino con una sonrisa cálida en sus labios, al ver como la alegría se
veía reflejado en aquellos verdes ojos.

Harry asintió fervientemente, como un cachorrito, Hermione no pudo evitar acariciarle la cabeza,
antes de salir junto a Ron.

– No te preocupes Harry – le dijo Neville, mientras se sentaba al lado del azabache – ya verás
que pronto tendrás a tu rubito a tu lado – le hablo con una sonrisa divertida.

Harry asintió nuevamente, con mucho ánimo, mientras se abrazaba a su castaño amigo,
refregando su cabeza en el pecho de su amigo, quien reía por la forma de actuar de Harry.

– Hola fénix – dijo una suave y tranquila voz proveniente de la puerta del compartimiento.

Harry y Neville miraron hacia la puerta asombrados por aquél saludo…

*****************

Draco junto a Pansy, emprendieron la marcha hacia el vagón donde se encontrarían con todos los
prefectos, habían encontrado un vagón solo para ellos, Theo se había quedado junto a Blaise,
conversando tranquilamente. Habían quedado de acuerdo, en que después de la reunión de los
prefectos, Draco iría al compartimiento que ocupaban los Gryffindor y Pansy iría a por ellos,
para no levantar tantas sospechas. Se podía decir que estaban tomando demasiadas precauciones,
quizás un poco exageradas, pero nunca estaba de mas el prevenir; no tenían ninguna pista de
quien era el enemigo y tenían que ir con mucho más cuidado que cuando estaba Voldemort al
asecho.

Así que como buenos Slytherin, tenían que tener la mejor cautela posible…

Pansy y Draco caminaban tranquilamente por el pasillo del tren, estaban a la hora, así que no
había por qué apurarse, además podían verificar los compartimientos, esperando ver a alguno de
los Gryffindor. Su plática era simplemente algo trivial, más que nada, era Pansy quien llevaba la
conversación, para poder distraer a su rubio amigo de aquél fénix, que lo había trastocado tanto.

Estaban llegando al vagón de los prefectos, cuando una suave y tranquila voz los detuvo, al
pronunciar el nombre del rubio.

– Buenas tardes Draco – saludo educadamente.

Draco y Pansy se dieron media vuelta, descubriendo de quien era dueña aquella voz; era una
chica de quince años, de Slytherin, poseía el cabello rubio y liso que le llegaba hasta la espalda,
lo llevaba delicadamente peinado hacia tras, con dos mechas adelante, enmarcando su hermoso y
delicado rostro; tenía una altura adecuada para su edad, así como su físico, vestía una elegante y
fina túnica de color celeste muy suave, con un delicado y sobrio prendedor de una mariposa
plateada; sus ojos eran de un verde muy claro, su piel era blanca, pero no tan pálida como la de
Draco, sino mas sonrojada. La chica le sonreía suavemente hacia el rubio príncipe de Slytherin.

La educación siempre estaba antes para Draco, mas si debía tratar con mujeres – buenos días… –
no sabía su nombre y esperaba que la chica se presentara, no le había gustado que le tratara con
tanta confianza, como pronunciando su nombre, como si se conocieran de toda la vida, en
realidad jamás la había visto.

– Astoria, Astoria Greengrass – dijo suavemente con su delicada voz, aun con su ligera sonrisa.

– Buenas tardes señorita Greengrass – le saludo nuevamente con una leve sonrisa, antes de tomar
la mano de la chica y besarla levemente, el rubio escucho un bufo proveniente de su izquierda,
pero no dijo nada.

La chica rubia se ruborizo levemente – me gustaría hablar con usted… – comenzó a decir la tal
Astoria.
– Seria un placer, pero en este momento tengo que ir a mis obligaciones como prefecto – le hiso
saber tranquilamente.

– oh, perdón no sabía, disculpe – se justifico aun con su sonrisa en sus delgados labios.

– No hay problema, en otra ocasión será… – comento galantemente Draco.

– sí, sí, si… como sea – espeto molesta Pansy al ser ignorada y que su rubio amigo anduviera
coqueteando con esa chica – nos tenemos que ir niña, así que adiós – le hablo seriamente, antes
de tomar el brazo de su amigo e irse rápidamente del lugar, Draco simplemente le sonrió a la
chica rubia y se fue con su amiga.

Astoria sonrió suavemente, en sus verdes ojos se veía un brillo de satisfacción, sabiendo que
Draco Malfoy, ya no podría escaparse nunca más de ella y que de ahora en adelante, seria ella
quien siempre estaría a su lado y tomados de la mano. Con elegancia se dio media vuelta,
provocando que su largo cabello se moviera sobre su espalda, empezó a caminar lentamente pero
segura de sí misma; comenzando a pensar e imaginar cómo sería todo de ahora en adelante.

************

– ¿Qué fue eso Draco? – le pregunto molesta Pansy, fulminado a su amigo con su mirada.

– por qué dices eso Pansy – dijo despreocupadamente.

– ¡le estabas coqueteando! – le grito anonadada por el descaro de su amigo.

– Claro que no – la fulmino con su mirada gris – solo fui amable – dijo simplemente.

– Amable, si claro – dijo sarcásticamente – me vale un cuerno ¡le estabas coqueteando! – le


refuto molesta, pero por un lado aliviada de que no hubiera estado el pequeño fénix con ellos.

Draco ya se estaba molestando realmente con su amiga – escúchame Pansy, solo estaba siendo a-
ma-ble – le espeto molesto, deletreando la última palabra.

– pero tú nunca eres amable con ¡nadie! – Chillo molesta – ni siquiera con nosotros – le ataco.
Draco hiso un mohín molesto, antes de sonrojarse levemente, Pansy se alarmo ante aquel gesto,
no podía ser que Draco le gustara esa… esa niñata ¿cierto?

– Bueno… – comenzó a hablar algo dudoso – es que se pareceamimadre – dijo de carrerilla,


mientras seguía caminando, dejando a una confusa Pansy de tras de él.

– ¿Qué? – Pregunto, agarrándole del brazo – no entendí nada de lo que dijiste.

Draco bufo molesto – que se parece a mi madre ¿contenta? – le espeto enojado, mientras se
cruzaba de brazos sobre su pecho.

Pansy se le quedo un minuto con su boca abierta, antes de ponerse a reír como histérica, Draco
siguió su camino sin importarle su amiga.

– oh vamos Draco no te enojes – dijo Pansy cuando lo alcanzo, ya estaban frente a la puerta del
compartimiento de los prefectos – es solo que… – Pansy tuvo que cerrar su boca para no ponerse
a reír nuevamente, su rubio amigo simplemente la ignoro, entrando al estancia seguida de la
azabache.

***************

Cuando termino la reunión, esperaron a que todos salieran, para quedarse los cuatro, Hermione,
Ron, Draco y Pansy.

– Herm ¿Cómo esta Harry? – le pregunto verdaderamente preocupada la azabache, abrazando a


su novia, sabiendo que su amigo rubio no se atrevería a preguntar.

– Bien, esta más calmado – le hablo seriamente con un leve sonrojo en sus mejillas, por el abrazo
de su novia, aun no se acostumbraba del todo – le dije que irías a verlo – le dijo seriamente al
rubio Slytherin, en su mirada estaba claro que no quería ninguna queja o escusa.

– Y es lo que iba a hacer – le dijo seriamente, retándola con la mirada.

– vayan ustedes primero, Draco ira tras ustedes, yo voy a buscar a los demás – le dijo Pansy
antes de salir, Hermione le dijo en que vagón estaban, la azabache le dio un beso superficial
antes de salir.
– Vamos – le dijo Hermione a Ron, quien extrañamente se había mantenido al margen de aquella
conversación.

**********

Cuando Hermione y Ron llegaron a su vagón, se encontraron con nada más y nada menos, que
Neville, Hermione y…

– ¿Luna? – fue mas como si le preguntara a como si dijera su nombre, la Ravenclaw le miro con
aquellos ojos celestes tan perturbadores.

– Hola Hermione, Ron – les hablo con su suave y soñadora voz.

– Hola – saludaron los dos, más por inercia que por otra cosa, sentándose ambos junto a Neville,
ya que Luna y Harry estaban sentados en el suelo, ambos bien juntos y frente a ellos tenían un
libro abierto.

– ¿Qué hacen? – pregunto Hermione al ver el libro abierto, era de color blanco y sus letras eran
de color azul oscuro, libro que jamás había visto la castaña y verdaderamente estaba intrigada.

– Le estaba contando al fénix… – mirando a la chica, de lo más normal del mundo, como si fuera
común que cualquier persona se trasformara en fénix.

– ¿cómo sabes? – le corto Ron, mirando hacia Neville con reproche.

– a mi no me mires – apelo a su favor el castaño – ella cuando llego le llamo fénix – les comento
a los dos.

– ¿Cómo supiste Luna? – le pregunto intrigada Hermione.

– Los fénix son criaturas muy fuertes – comento simplemente la rubia, mientras acariciaba los
cabellos desordenados del azabache, este se dejaba acariciar – además las salamandras negras
han estado comportándose mas alteradas, ellas adoran el fuego – siguió con sus divagaciones.

Los tres Gryffindor se miraron simplemente, sabiendo de lo extraña que era la chica Ravenclaw,
no podían esperar más de ella.
– ¿y de que va el libro? – le pregunto nuevamente la castaña.

– le muestro acerca de los fénix blancos – le dijo soñadoramente, mientras daba vuelta una de las
hojas, y un hermoso fénix blanco se mostraba en toda la plana.

Harry sonrió emocionado y acaricio el dibujo como si fuera algo real, Luna también tenía puesta
su atención en aquel hermoso dibujo del fénix blanco, que volaba sobre el cielo.

– Es un cuento infantil – le explico Ron.

Hermione le miro asombrada, al ver que el pelirrojo sabía algo que ella no, aunque era
comprensible, ya que la castaña era hija de muggles y aunque ella estudiaba como loca, para sabe
todo lo posible de ese mundo, nunca llegaría a saber todo, además que nunca se había interesado
en cosas infantiles, mitos y leyendas que se basaban en simple superstición de ancianos magos y
brujas que explicaban todo, con fabulas como muchos muggles lo hacían también.

La puerta se abrió y un rubio entro por ella, dejando hasta ahí la conversación acerca del libro de
Luna; Harry se lanzo a los brazos del rubio, sonriendo de oreja a oreja, el rubio sonrió
tenuemente, aliviado de que Harry no estuviera sentido, por lo que le había hecho antes.

Draco se sentó al frente de los tres Gryffindor y Harry no perdió tiempo en sentarse sobre las
piernas de su rubito; algo que hiso fruncir el ceño al pelirrojo, mirando a matar al rubio engreído
de Slytherin, mientras que ese le devolvía una sonrisa de superioridad.

– Hacen bonita pareja – hablo Luna tranquilamente, como si fuera de lo más normal, que los dos
chicos, enemigos jurados frente a todo el colegio, anduvieran tan juntitos.

Draco le miro sin saber quién era aquella chica, estaba seguro que la había visto antes, pero no
recordaba de donde.

– Creo que iré a ver si los duendecillos me devolvieron ya mi mochila – dijo simplemente, antes
de salir del vagón con su libro apretado firmemente a su pecho.

Draco miro a los tres restantes del compartimiento, estos solo levantaron sus hombros
despreocupadamente.

– era Luna Lovegood – dijo simplemente Ron, como si eso explicara el gran misterio de la
existencia humana.
El rubio simplemente asintió, al saber quién era esa extraña chica, era la Lunática de Ravenclaw.
El compartimiento se volvió a abrir, dando paso a los restantes Slytherin, sentándose en parejas,
comenzaron una tranquila charla, dejando de lado las divagaciones de Lovegood.

Draco no hablo mucho en el trayecto, miraba distraídamente por la ventana, mientras acariciaba
descuidadamente los cabellos negros de su fénix, que se había quedado dormido sobre su regazo.
El rubio príncipe de Slytherin, sabía perfectamente que sería muy difícil, poder verse seguido
con el Gryffindor, no solo por estar en diferentes casas y también diferentes asignaturas y
horarios; sino mas bien, porque los demás no debían sospechar, aunque claramente por el
comportamiento que ahora tenía el azabache, muchos comenzarían los rumores y tratarían de
saber lo que le pasaba al salvador del mundo mágico, eso era algo que no se podría evitar, no con
tantos chismosos en el colegio; pero si se tenía que evitar lo más posible, el que descubran que
Draco, era el compañero que había tomado Harry como fénix; era un punto muy vulnerable que
el enemigo, quien sea que fuera, podría utilizarlo a su favor. Lo único que podían esperar, era a
que Harry volviera a ser como antes, para así poder pasar más disimulado, aun cuando aquello
pudiera afectar la relación, que habían comenzado a formar.

Draco suspiro abatido, sin que los demás se percataran de aquella acción, por que el rubio sabia
que cuando el tren llegara a su destino, tendría que separarse de su fénix y estaba seguro que
sería muy difícil poder verse a solas con el; además debía mentalizarse, ya que cuando llegaran,
debía darle nuevamente otra orden a su fénix, cosa que no le hacia mucha gracia…
Continuara…
Notas finales:

bueno, m despido tengo que irme, tengo mucho que hacer en casa u.u' waaaaaaaa de tan solo
pensarlo @.@''''''

nos leemos, cuidense, hasta el prox año XD! (mañana???? XD!)

Matta nee!

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Hogwarts… por Pazu
Notas del autor:

Hola gente ^^ espero que esten bien y k este capi les guste aunque... bueno sera mejor que lo lean
y despues m comenten que les parecio... Gracias Cere-chan por betearme el capi ^^

bueno a leer !!!!

Capitulo veinte: Hogwarts…

Draco suspiró abatido, sin que los demás se percataran de aquella acción, porque el rubio sabía
que cuando el tren llegara a su destino, tendría que separarse de su fénix y estaba seguro que
sería muy difícil poder verse a solas con él; además debía mentalizarse, ya que cuando llegaran,
debía darle nuevamente otra orden a su fénix, cosa que no le hacía mucha gracia…

************

Estaban a punto de llegar al castillo, mas pronto de lo que Draco hubiera deseado, miró a los
demás, viendo que ya iban saliendo del vagón, Harry se había despertado hacía algunos minutos
atrás, así que ahora se encontraba de pie frente a él, esperando que fueran juntos hacia la salida.

–Granger– llamó seriamente el rubio– necesito hablar contigo y con Harry – espetó
indiferentemente, aun cuando por dentro era muy diferente.

Hermione mas o menos imaginaba que era lo que Malfoy quería hablar con ella– Vayan, los veo
después – le habló a Ron y Neville.

Ambos asintieron y los demás Slytherin salieron en silencio.

– ¿Qué es lo que me querías decir Malfoy? – habló la castaña Gryffindor al ver que el rubio
Slytherin no se atrevía a hablar.

Harry estaba sentado aun lado de Draco, tomándole la mano, ladeando su rostro como un
cachorrito perdido; los ojos grises del Slytherin, se desviaron hasta quedar fijos en aquellos café
de la chica Gryffindor.

– Necesito que te hagas cargo de Ha… de Potter – fue lo que dijo seriamente el príncipe de
Slytherin.
Hermione le miro evaluándolo completamente, no estaba a gusto con aquel proceder del
Slytherin, pero también sabía que debían prevenir a que alguien se entere de lo que le pasaba a su
amigo; todo seria mucho más fácil si Harry tuviera control de sus cinco sentidos.

– ¿Por qué no se lo pediste a Ron? – Le preguntó la castaña, aun cuando sabía el motivo de que
el rubio le hablara a ella y no a su pelirrojo amigo – después de todo, él pasará más tiempo con
Harry – declaró razonablemente.

Draco hizo una ligera mueca de desagrado, cuando la Gryffindor nombró al pelirrojo –Creo que
Weasley es demasiado… – comenzó a decir, pero al ver que el tiempo se les agotaba, tuvo que
apurar el asunto – mira luego podemos hablar si quieres – dijo sin interés realmente en tener una
platica con la chica – ahora, quiero que te hagas cargo de Potter, eres su amiga y creo que estaría
mas seguro contigo – fue lo que dijo, sin darle mucho interés.

Hermione asintió, apretando sus labios, para no decir nada grosero contra el Slytherin, después
de todo ella era la más responsable entre sus amigos, podría con su amigo fénix o eso esperaba.

– Está bien – acepto sin más.

– Harry – llamo al azabache, mientras le miraba a sus ojos – te ordeno a que sigas toda orden que
te de Hermione Granger, la obedecerás como si fuera yo y…

********

Pansy miraba insistentemente hacia la locomotora roja, en donde los estudiantes mas rezagados
bajaban apresuradamente de sus vagones; no podía creer que su Hermione aun no salía, sabía que
se había quedado conversando con su amigo rubio y Harry, pero no era como para que se
quedaran toda la noche platicando, como si el tren los esperara eternamente para que bajaran.

Neville tiritaba de frio, ya que había dejado su abrigo en el baúl y la noche estaba realmente
helada, sintió como algo pesado y caliente se posaba sobre sus hombros, se dio vuelta y se
encontró con la intensa mirada oscura del Slytherin que tanto le atraía, no pudo evitar sonrojarse
levemente, mientras le sonreía suavemente al castaño frente suyo.

– Gracias… – fue simplemente lo que dijo, colocándose mejor el abrigo que le había pasado –
pero… ¿no te dará frio si te quedas sin abrigo? - le preguntó aunque era más una afirmación.
Theo simplemente levantó sus hombros desinteresadamente, sabiendo que con un simple hechizo
de calor sobre su ropa, no le daría tanto frío por el clima. Pero en eso sintió, como alguien lo
abrazaba, se tensó levemente, antes de darse cuenta quien era y se relajó visiblemente.

– Así no te resfrías – fue la excusa de Neville, mientras miraba distraídamente hacia cualquier
lugar.

El frío y siempre inexpresivo de Theodore Nott, sonrió levemente, una sonrisa casi inexistente,
pero que realmente se había formado en sus finos labios; no le contestó al Gryffindor,
simplemente dejo que le abrazara y él pasó uno de sus brazos por el hombro de Neville.

– ¡Waaaa! Qué atrevido salió Longbottom y yo que creía que era todo un tímido y tembloroso
gatito – dijo una voz divertida cerca de cierto pelirrojo.

– ¡Zabini! – gritó el pelirrojo al verse abordado por el Slytherin – Eso a ti no te importa – le


mencionó, refiriéndose a lo de Neville.

Blaise sonrió depredadoramente acercándose un poco más al pelirrojo – ¿En serio? – preguntó
con desinterés – mmm… me pregunto si todos los gatitos resultan ser así – miró una disimulada
mirada a Ron.

– Pues eso tienes que averiguarlo…– le susurró antes de salir prácticamente corriendo hacia la
azabache de Slytherin.

Blaise se quedó completamente pasmado por las palabras del Gryffindor, sonrió ladinamente
mirando fijamente la figura del pelirrojo, mientras se lamia con descaro los labios,
preguntándose qué otras sorpresitas podría descubrir en ese pelirrojo…

Mientras Ron se iba caminando rápidamente, con un sonrojo descomunal en su rostro,


maldiciéndose internamente por lo que había dicho, sin creerse sus palabras – Definitivamente
no me junto más con los gemelos. – espetó molesto en su mente, antes de llegar cerca de
Parkinson y aparentar normalidad para saber si había visto a Hermione o Harry, no le interesaba
saber por Malfoy – Ojalá y se quede en el tren– se dijo mentalmente con diversión.

– ¡Hermione! – le llamó Ron al ver a su amiga junto a su mejor amigo y ese.

La castaña le miró y fue hacia ellos, con pasos lentos y tomada de la mano de su amigo
azabache, mientras este tenía su mirada verde perdida entre el paisaje, con un mutismo
escalofriante.
– Pansy – llamo Draco a su amiga – vamos – fue la orden que le dio, mientras se iba con sus
demás amigos, para poder tomar un carruaje antes de que lo dejaran abandonados.

La chica Slytherin miro a su novia, preguntando con su mirada, qué había sido todo eso, pero
Hermione solamente le sonrió tristemente, antes de negar con la cabeza.

– Después… – le susurró, antes de darle un ligero beso en sus labios – ¡Vamos, Ron! – llamó a su
pelirrojo amigo, mientras llevaba aun de la mano a su otro amigo.

Ron miro a Harry sonriéndole pero este simplemente estaba perdido en su mundo, hizo una
mueca enfadad hacia el hurón engreído, pero este estaba platicando con sus amigos, así que no
ponía atención a la comadreja.

– Luego hablamos – le comento a Ron, para que no hiciera algo impulsivo característico en él.

******************

El Gran Comedor, era todo un bullicio de jóvenes encantados y alegres por volver al castillo,
aunque supieran que al otro día tendrían que volver a la rutina y exigencia de un colegio como
Hogwarts, pero eso no les bajaba el ánimo, porque estaban felices y aliviados, de que le guerra
hubiera terminado, así como la libertad y tranquilidad de saber que ningún mago oscuro los
podría matar o torturar porque simplemente le apetecía.

Hermione hablaba tranquilamente con algunas de sus compañeras, acerca de las clases, lo difícil
que sería por ser su último año, que deberían estudiar mucho más si querían sacar un buen
puntaje en su prueba final.

Ron por otro lado hablaba, aunque más bien parecían gritos, con un entusiasmado Dean y
Seamus, los tres conversaban de que más, sino de Quidditch; poniendo toda su seguridad en que
ese año ganarían la copa de Quidditch y también debían lograr la copa de las casas.

Por otro lado Harry tenía su vista clavada en la mesa, sin decir nada y con un aura de
melancolía, que hacía que los demás no le atrevieran a hablarle ya que parecía muy concentrado
en lo que pensaba, como para molestarlo.

Neville hablaba animadamente con Collin y Denis, acerca de las fotos que habían sacado los
hermanos en su viaje y su gran colección que tenían del castillo y sus alumnos. Neville le había
pedido fotos decierto alumno del castillo.
Mientras tanto en la mesa de Slytherin, se hablaba más calmadamente, y al parecer nadie quería
hablar con cierto rubito, que andaba de malas pulgas.

Theo estaba serio como siempre, mirando disimuladamente a cierto castaño de la mesa de
Gryffindor.

Pansy y Blaise hablan de algo que a nadie le interesaba ni de mucha importancia, pero para ellos
era lo más importante del mundo.

– ¡Bienvenido mis queridos alumnos! – Habló la clara voz del director, mientras que miraba a
todos sus bulliciosos alumnos, que habían dejado de platicar o por lo menos habían bajado la voz
–Es un agrado tenerlos todos aquí nuevamente – les dedicó una sonrisa tranquila –, los
momentos difíciles han pasado y ahora es momento de ser optimistas y alegres – siguió como
siempre carismático.

El discurso de Dumbledore siguió su curso, agradeciendo a los que ayudaron en la batalla final,
dando un sentido pésame a los que habían muerto, también típico en él, dijo un par de chistes,
que como siempre McGonagall tuvo que frenarlo y así un más que largo etcétera.

- Como tuvimos que reiniciar el año escolar, tuvimos que cambiar algunos del personal – ya que
algunos habían tenido que abandonar su puesto, por perdidas o algún motivo personal, que no era
beneficioso que los alumnos se enteraran – por favor, pasen…

La atención de todos o casi todos de los alumnos, estaban en la puerta que estaba aun lado de la
mesa de los profesores. La puerta se abrió dando paso a tres magos, que dejó a medio colegio
con la boca abierta y con los ojos desorbitados.

– Tenemos el agrado de tener a Remus Lupin nuevamente como profesor de DECAO – dijo
amablemente el director, recibiendo un aplauso general de todo el alumnado, incluso algunos
Slytherin disimuladamente aplaudían por el mejor profesor de DECAO que habían tenido aunque
otros no eran tan disimulado, entiéndase por Blaise Zabini. Remus simplemente les sonreía
amablemente – Bien… – dijo el director para seguir con su presentación – también tenemos a un
conocido mago, que ha dejado de lado sus importantes ocupaciones para poder enseñar en
Hogwarts, saluden a su nuevo profesor de Encantamiento Lucius Malfoy – el rubio hizo una
ligera inclinación hacia el director y luego hacia los alumnos, quienes aplaudieron fueron los de
la mesa de Slytherin y la Hufflepuff quienes eran corteses con todos; Draco no podía creerse que
su padre haría de profesor, su asombro era palpable y ni siquiera trato de ocultarlo – Y por
último… y no menos importante – agregó con un carraspeo proveniente del nuevo profesor que
hizo reír a muchos de los alumnos – el nuevo profesor de Astronomía Sirius Black… - y el
aplauso de los Gryffindor no se hicieron esperar, aunque muchos estaban asombrados al ver al
ex-convicto y que ahora se veía todo un adonis – Bueno alumnos, es hora de que comience el
banquete – sonrió cariñosamente a todos sus estudiantes, pero se detuvo un momento en un
azabache de Gryffindor, que aún seguía mirando hacia la mesa, su sonrisa decayó un segundo
antes de volver a ser la de siempre.

Muy pronto el Gran Comedor, se volvió a llenar de gritos y conversaciones animadamente de los
chicos, degustando los alimentos que los elfos habían preparado.

Ron como siempre, no terminaba de tragar la comida en su boca cuando más se le unía, mientras
que los demás le veían divertido, además de las típicas discutas entre Hermione y el pelirrojo,
por su falta de educación en la mesa.

– Harry ¿no tienes hambre? – pregunta Neville al ver que el azabache no se había llevado bocado
en toda la cena.

Harry no le contestó siguió en su mutismo enfermizo, que hizo que sus amigos se preocuparan
por la salud del azabache.

– Harry come… – le pidió amablemente a su amigo.

Ante las palabras de la castaña, Harry comenzó a comer con desgana, pero sin decir nada, algo
que sorprendió en demasiado a los amigos del Gryffindor, tanto Neville como Ron, miraron a la
castaña, con claro signo de duda.

– Luego – fue todo lo que dijo Hermione, mirando de lado a su amigo, con una triste sonrisa,
luego miro disimuladamente al príncipe de Slytherin, viendo como su mirada gris no dejaba de
ver a Harry; suspiró abatida, antes de seguir comiendo y platicar con los demás.

Sería un duro año…


Continuara…
Notas finales:

y... jo... no me maldigan muajajaa... wuau no puedo creer que ya voy en el capi nº 20 nunca
pense que llegaria a tanto y todavia faltan muchas cositas, espero poder actualizar pronto y creo
(no estoy segura) que en el prox capi Harry vuelve a ser el otra vez ^^

nos leemos, cuidense y otra vez gracias Cherry_Moon por beter mis fic ^^

Matta nee!
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La prometida de Malfoy… por Pazu
Notas del autor:

Hola a todos u.u' estoy con depre buuu... por que para san valentin estaba escribiendo un one-
shot pero no pude terminarlo u.u' mi mama esta de cumple el 14 entonces el sabado algunos
parientes fueron a la casa a celebrarlo y el domingo sali con mis papas para celebrar el cumple de
mi mama u.u' asi que no tuve nadita de tiempo u.u' ademas que mi mama me anda molestando
para que k le haga un fanfic original que estaba escribiendo u.u' es k le gusto la trama y queria
que lo cambiara pa que fuera hetero y no gay ¬¬ y yo le dije que no maujajajajaa xD bueno,
bueno... da = les dejo un nuevo capi espero les guste ^^

A leer!!!!!!!!!!!

Capitulo veintiuno: La prometida de Malfoy…

– Luego – fue todo lo que dijo Hermione, mirando de lado a su amigo, con una triste sonrisa,
luego miro disimuladamente al príncipe de Slytherin, viendo como su mirada gris no dejaba de
ver a Harry; suspiro abatida, antes de seguir comiendo y platicar con los demás.

Sería un duro año…

*************

Llegaron a los dormitorios, luego de un alegre festín, Hermione llevaba de la mano a Harry y
este seguía en su mundo; por otro lado Ron y Neville trataban de que Seamus y Dean, no se
dieran cuenta del estado de su amigo. Luego de interminables minutos para la curiosidad de Ron
y Neville, los cuatro se quedaron solos en la sala común de Gryffindor, el azabache miraba
distraído las llamas de la chimenea.

Hermione les comentó lo que les había dicho el rubio de Slytherin, con respecto a que le ordenó
al fénix, que siguiera todas las instrucciones que le diera ella. Ron se enojó y maldijo al hurón
desgraciado ese, mientras que Neville miraba con algo de pena al moreno de ojos verdes, ya que
se veía muy deprimido.

– Además… – siguió disiento la castaña, aun cuando el pelirrojo seguía maldiciendo a Malfoy.

– ¿¡Hay más!? – dijo incrédulo Ron, mientras proseguía nuevamente a maldecir al rubio
engreído de Slytherin.
– ¡Ron! – le amonestó severamente la castaña, el mencionado tuvo la decencia de parecer
avergonzado – como iba diciendo… – susurro lentamente mirando a su amigo pelirrojo, este se
hiso el desentendido – le dijo a Harry, que no le podía hablar, llamar, saludar, mirar, sonreír… es
decir ninguna demostración amistosa hacia su persona, cuando estaban con mas personas,
solamente cuando Draco se lo permitiera – acabó con una mueca disconforme, al recordar lo que
le había pedido el rubio Slytherin a su amigo.

– ¿No crees que se a pasado un poco? – comento nervioso Neville, al mismo tiempo que
apenado, ya que sabía que Harry estaba muy apegado a Draco.

– ¡Un poco! – gritó Ron, pero se callo inmediatamente, al ver la mirada enojada de Hermione.

La castaña suspiro abatida – No podemos hacer nada, Draco es el compañero de Harry y aunque
yo pienso que es algo dramático lo que esta haciendo para mantener a Harry a salvo de esta
nueva amenaza, no podemos interferir… sólo estar con Harry, hasta que él vuelva a tomar
control nuevamente de su cuerpo – dijo por ultimo la Gryffindor, poniéndose de pie – mejor
vamos a dormir, mañana será un nuevo día… – les comentó mientras se ponía de pie – Harry…
ve con Ron a los dormitorios para que duermas – le “ordeno” al fénix.

Harry asintió distraído, siguiendo al pelirrojo; se despidieron de la castaña y los otros tres chicos
fueron al dormitorio que compartían. Hermione los vio marchar, mientras suspiraba, pensando en
que las cosas no podían empeorar mas, que equivocada estaba.

**********

Draco se levantó con malas pulgas, no había parado de pensar en aquella desolada mirada verde,
cada vez que estaba a punto de caer al sueño, le llegaban una y otra vez aquella melancólica
mirada verde.

Pansy, Blaise y Theo se percataron inmediatamente de que su amigo rubito, no estaba en sus
mejores mañanas; aunque la gran mayoría de los Slytherin que estaban en la sala común, y
vieron bajar al rubio Malfoy, con aquella “oscura” aura, les dejaba en claro que era un suicidio el
tratar de hablar con él, ya conocían como era el temperamento del aristocrático rubio. Fue por
eso que los alumnos que estaban cerca de la chimenea, salieron despavoridos, cuando el rubio se
sentó frente a ella, sus amigos lo acompañaron, sabiendo que tenían bastante tiempo antes de que
la hora del desayuno terminara.

– Draco, ¿qué pasa? – preguntó Blaise, viendo que ni Theo y Pansy preguntarían.

El rubio masculló algo por lo bajo, molesto.


Los tres se miraron, para ver si habían entendido lo que su amigo había querido decir, pero los
tres estaban igual, aquello había sido ininteligible.

– Vamos Draco, no estamos para tus palabrotas incoherentes – le recriminó la chica azabache.

El rubio suspiro abatido – Nada… no pasa nada – fue lo único que dijo.

Los tres chicos le miraron con incredulidad, preguntándose si su amigo, no necesitaba ir a la


enfermería; pero cuando Pansy iba a reclamar la actitud que tenia, alguien se le adelanto…

– Buenos días, Draco – se escuchó una suave voz.

El rubio levantó su mirada, ya que aquella persona, más específicamente la voz de una mujer, no
era la su amiga y sabía que nadie de sus compañeros, se atreverían a hablarle cuando andaba de
malas, sus ojos grises se encontraron con unos celestes.

– Buenos días Greengrass – recordando a la chica que se había topado en el tren.

La chica sonrió dulcemente – No necesitas tratarme tan formalmente, Draco – habló con su
suave y tranquila voz.

Draco le miro algo molesto – No te conozco, Greengrass – remarcó su apellido –. No entiendo


por qué debería hablarte como si fueras alguien cercano a mi – no quería ser grosero, pero no
andaba con ánimos de ser educado, ni siquiera con esa niña, que se parecía tanto a su madre.

La chica rubia, sonrió y rió suavemente – ¿Tu madre aun no te lo ha dicho? – Le


pregunto asombrada – no creo que la señora Narcisa se moleste si te digo que estamos
comprometidos – le soltó la bomba de un sopetón, aun con su sonrisa imborrable en su hermoso
rostro.

Draco había quedando completamente en shock, al igual que sus amigos, no sabían que decir,
que pensar, de lo que aquella desconocida mocosa les había dicho.

– Astoria… – llamó una chica de cabello oscuro a la rubia.

La muchacha se acerco a su prometido y le beso superficialmente en sus labios – Nos vemos


querido… – hablo lo suficientemente fuerte como para que todos le escucharan, se dio media
vuelta con parsimonia, encontrándose con su amiga y saliendo ambas hablando tranquilamente
fuera de la sala común de Slytherin.

– No… – fue lo único que salió de los labios del rubio, antes de ponerse de pie y salir de la sala
común rápidamente.

La habitación, quedo sumergida en un molesto silencio, ya que todos los presentes habían
escuchado claramente lo que había dicho la chica Greengrass.

– ¿La señora Narcisa hiso eso? – pregunto completamente asombrado.

– Mmm… – fue todo lo que dijo Theo a la pregunta de Blaise.

Pansy sólo se cruzo de brazos y frunció el ceño, sabiendo que había gato encerrado, debía hablar
con su novia y contactarse con Narcisa cuanto antes…

**************

– ¡Cálmate, Draco! – gritó fuera de sus cabales Lucius Malfoy.

Draco pareció reaccionar al ver que su padre le gritaba, cosa inusual - Por no decir imposible - en
su padre, se dejo caer abatido sobre un sillón, que había en la sala de la habitación de su
progenitor.

– ¿Quieres un poco de chocolate? – le preguntó amablemente Remus, ofreciéndole un tazón con


aquel delicioso liquido café.

El rubio menor asintió y acepto el tazón mudamente, mientras sus ojos se perdían en la pared
frente suyo. Cuando había procesado la información, lo que le había dicho esa mocosa, había ido
inmediatamente a la única persona que podría decirle si todo eso era verdad, pero cuando llego al
cuarto de su padre, donde inexplicablemente, estaba el profesor Lupin, su padre le dijo que él no
tenia ni idea de lo que decía, que él jamás había negociado un contrato matrimonial con ninguna
familia; es mas Lucius estaba en desacuerdo, él había sufrido mucho años, por aquel matrimonio
convenido, que su padre había efectuado con la familia Black, no quería eso para su hijo y sabía,
porque ya había conversado de eso con Narcisa, que ella estaba completamente de acuerdo con
él.
– Escúchame hijo – le llamó Lucius y al ver que Draco le miraba siguió hablando – todo debe
tener una explicación, será mejor hablar con Narcisa – el rubio mayor miró la hora – es mejor
que te vayas, el desayuno terminó y tienes clases – le ordenó su padre.

Draco suspiró y se paró, sabiendo que no iba a sacar nada con alegar, su padre tenia razón, era
mejor comunicarse con su madre para saber que es lo que estaba pasando.

**********

Habían pasado dos meses, desde que la mocosa de Greengrass, le dijera que era su prometida,
cuando había llegado a su clase ese día, todos en Hogwarts ya sabían el nuevo chisme, acerca de
su supuesto matrimonio con Astoria Greengrass. Había tenido miedo, de cómo iría a reaccionar
Harry por lo que el rumor y algo de veracidad que tenia, acerca de él y la chica rubia, pero fue
mucho mas doloroso lo que pasó cuando lo vio a solas con sus amigos.

Flash Back.

Después de clases, Pansy le había mandado una nota a Hermione, para que nos juntáramos en la
sala de los menesteres. Al estar todos juntos, Harry le miraba insistentemente desde su lugar, al
lado de Hermione sin atreverse a acercarse al rubio, pero en su mirada verde, se veía claramente
el anhelo de acercarse a Draco.

– Harry… – llamó el rubio.

El azabache al escuchar que Draco lo llamaba, se le acercó prácticamente corriendo, abrazándolo


fuertemente con una infantil sonrisa en los labios, enterrando su cara en el pecho del Slytherin.

La verdad es que Draco estaba muy sorprendido por lo que pasó, aun cuando no lo mostró, fue
Hermione quien hablo para aclarar las cosas.

– Harry es un fénix en toda regla, lo único que le ha entristecido y afectado en su forma de ser,
es que no ha tenido a su compañero junto a él – habló seriamente la castaña, mientras se sentaba
en uno de los sillones que la sala había hecho aparecer – después de todo, en estos momentos
Harry es como una mascota que lo único que desea es estar con su amo todo el tiempo – termino
de explicar, mirando seriamente al rubio.

Para Draco fue lo peor que pudo haber escuchado…


Fin Flash Back.

Draco llego hasta la sala de los menesteres, sabiendo que debería estar su fénix esperándolo
desde hace algún rato; entró en la sala, mirando detalladamente el lugar, era una sala cómoda con
varios sillones y cojines, unas mesas con estantes a un lado llenos de antiguos libros.

Harry se encontraba leyendo un libro, sus ojos verdes brillaron alegremente, cuando sintió la
presencia de su compañero, sonrió completamente feliz, antes de ponerse en pie y tirarse a los
brazos del rubio.

El Slytherin le devolvió el abrazo y le acaricio los desordenados cabellos negros, Harry refregó
su cara en el pecho del más alto, dejándose acariciar gustoso.

– ¿Qué lees? – le preguntó, mientras seguía al azabache, que le había tomado de la mano y lo
llevaba hacia el sillón donde antes estaba sentado.

El rubio se sentó en el sillón y sobre sus piernas el azabache, Harry abrió el libro y Draco colocó
su mentón en el hombro del más pequeño, pudiendo así ver de qué se trataba el libro. Era un
libro de cuentos infantiles, miro las imágenes que se movía de un dragón blanco, que lanzaba
llamas sobre un campo de flores.

Mientras Harry seguía ensimismado en su lectura, pasando las hojas cada vez que se cansaba de
ver las imágenes, Draco por otro lado, no podía dejar de pensar en aquellas palabras que Granger
le había dicho; esas palabras, que le habían hecho entender, que los sentimientos de Harry eran
solamente una necesidad de estar al lado suyo, por ser su compañero; pasó sus brazos por la
cintura del azabache, abrazándolo fuertemente, atrayéndolo hacia su pecho, Harry sólo se
acomodó mejor, siguiendo con su libro.

El rubio suspiró, mientras recargaba su frente sobre el hombro del Gryffindor, sin aguantarlo
mas, Draco le arrebato el libro al azabache; Harry le miro asombrado y curioso, al ver que el
rubio tiraba el libro a un rincón de la salsa, el fénix iba a reclamar, pero sólo jadeó asombrado,
cuando sintió que el sillón cambiaba para quedar completamente bajo algo blando y sobre él
estaba Draco.

Draco no pudo evitarlo, se colocó mejor sobre el cuerpo del azabache, estaba con sus rodillas y
antebrazos sobre el colchón, para no aplastar a Harry, sus ojos grises se perdieron en aquellos
verdes, que le miraban curiosos e inocentemente; Harry tenía sus brazos abiertos al igual que sus
piernas y sus cabellos estaban desordenados sobre la cama.
El rubio no se resistió y beso aquellos apetecibles labios, el azabache sólo se dejó llevar por los
deseos de su compañero. Draco no quería pensar en que se estaba aprovechando de su fénix, pero
él podía hacer lo que quisiese con Harry, porque era su fénix, era suyo y él azabache tenía que
obedecerlo. Sus labios fueron recorriendo el cuello del fénix, mientras sus manos se escabulleron
bajo la tela de la camisa del más pequeño, acariciando su pecho y la otra mano la cadera.

Draco siempre había tenido lo que quería, de una u otra forma, ya sea rogando a su padre,
refunfuñando con su madre, haciéndole puchero a su padrino o extorsionando a los demás; pero
siempre había obtenido lo que quería… pero esto era diferente, él no quería una mascota que
haría todo lo que él quisiera, el rubio lo quería a él… quería a Harry Potter, no a un fénix que no
tenía voluntad y sentimientos propios…

Dejo de acariciar aquel cuerpo que tanto le embriagaba, se dejo caer sobre el más pequeño,
escondiendo su rostro entre el cuello y el hombro del azabache, le abrazó fuertemente, mientras
silenciosas lágrimas de impotencia se deslizaban por su pálida piel. Mientras el fénix al sentir la
tristeza de su compañero, simplemente se acurrucó a él, acariciando sus sedosos cabellos rubios.

----…..----…..----…..----

– Es hora de volver, pequeño – dijo suavemente con ternura.

El azabache solo asintió, mientras algunas lágrimas caían por sus mejillas sonrojadas…

----…..----…..----…..----
Continuara…
Notas finales:

jajjajaja no quiero nada de maldiciones muajajaja XD en el prox capi se sabran algunas cositas
muajajaa ^^

nos leemos

Matta nee!

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Ellos, los Slytherin (Esos dos meses) 1º parte. por Pazu
Notas del autor:

Siento la demora, pero e pasado por momentos muy dificiles, asi como toda mi familia... espero
les agrade el capi, aunque no sea mucho... espero tener pronto el prox capi n.n

a leer!

Capitulo veintidós: Ellos, los Slytherin (Esos dos meses) 1º parte.

----…..----…..----…..----

– Es hora de volver pequeño – dijo suavemente con ternura.

El azabache solo asintió, mientras algunas lágrimas caían por sus mejillas sonrojadas…

----…..----…..----…..----

**********

Theodore Nott, era un chico frio e indiferente con el mundo, no le interesaba interactuar con sus
compañero, incluso con sus amigos era algo distante, pero eso no decía que de verdad no los
apreciaba, eso jamás, era solo… que jamás tuvo quien le enseñara como ser sociable, como
compartir con los demás, como ser un niño. Su madre murió cuando el apenas tenia cuatro años;
ahora con los años, no recordaba ni su voz, ni su mirada, solo recordaba su rostro, por las fotos
que su padre conservaba. Fue criado por niñeras, elfos domésticos y profesores; su padre nunca
tuvo tiempo para él, no lo culpaba, aun cuando su padre estaba muy poco tiempo en casa y
cuando lo estaba no le decía más de dos palabras, sabía que Ethan le quería a su modo, pero lo
hacia.

Como no tuvo otra referencia, creció con la imagen seria y reservada de su padre, personalidad
que él copio inconscientemente.

Desde los siete, fue la edad en que conoció a Draco, Blaise y Pansy, tres chicos de su edad, que
eran tan diferentes unos de otros, pero que aun así, se llevaban bien; fue difícil que ellos
entendieran su forma de ser, aun cuando Draco solía ser el mas serio, también aunque no le
gustaba reconocerlo, era un mimado crio, que siempre quería lo que deseaba, también era quien
solía hacer las mas peligrosas travesuras, seguidos casi siempre por Blaise, quien siempre fue el
mas alegre y despreocupado y Pansy quien era una chica algo chillona, caprichosa y mimada; él
por otro lado, siempre estuvo leyendo o haciendo cualquier cosa “aburrida”, aun así, siempre se
preocupaba de estar cerca para que no se lastimaran.

Era pequeño, pero en la soledad de su mansión, lo había hecho madurar mas de lo que a su
temprana edad era recomendado y la falta de cariño, hiso que adoptara a esos tres bulliciosos
como sus hermanitos, en ese entonces inconscientemente.

Pero su amistad se fortaleció aun mas cuando, en una fiesta que la familia Malfoy había
organizado por el cumpleaños de su primogénito. Los niños estaban en la sala decorada y
amoblada exclusivamente para ellos. Había muchos niños más o menos de la edad que tenia el
cumpleañero; como era costumbre Theodore Nott, se había apartado hacia un rincón, leyendo
otro de sus interminables libros, según lo que decía Pansy; pero sus ojos oscuros miraban de vez
en cuando a Draco, Blaise y Pansy, cuidando que no hicieran nada excesivamente peligroso.

Fueron unos niños de edad mayor a la de ellos, que interrumpieron la alegre celebración, eran
tres chicos que molestaban a gritos al callado y reservado de Nott; ya que esos niñatos querían
llamar la atención del cumpleañero y que mejor forma que molestar al ratito… mala decisión. En
un dos por tres, Draco, Blaise y Pansy se habían colocado frente a él y le defendieron con dientes
y “garras” casi literalmente; el sombrero seleccionador había tenido mucha razón, al referirse
hacia la casa de Slytherin, allí siempre encontrarías a tus verdaderos y fieles amigos. Theo se
había sorprendido gratamente, al ver como esos tres le defendían; desde ese día su amistad se
hiso mas fuerte, Theo no cambio su forma de ser, él era así, así iba a ser siempre su personalidad,
pero asimismo sus amigos lo aceptaban y querían tal como era y se lo demostraron claramente a
esa temprana edad.

Sus amigos le conocían, sabia cuando estaba enojado, por que sus manos temblaban ligeramente;
cuando estaba triste o melancólico, por que sus ojos muchas veces se desviaban de su lectura o
cuando estaba simplemente aburrido, por que cerraba su libro y se dedicaba a mirar por la
ventana… si, sus amigos sabían como era él, por que era así de frio o callado y también Theo
sabia, que para el resto, para aquellos que apenas le conocían, era difícil tratar con el, por que
siempre parecía tan frio e indiferente, pero eso pasaba, por que no se fijaban en los detalles.

Los pasos seguros del joven Slytherin, se escuchaban claramente por los desérticos pasillos de
Hogwarts, su postura estaba recta y entre sus manos llevaba un libro que sus ojos oscuros no se
despegaban de el. Iba a la hora, así que se daba esos placeres, de ir leyendo tranquilamente,
sabiendo que no chocaría con ningún alumno.

Pronto sus pasos, lo guiaron fuera del castillo, en dirección a los invernaderos, cerró su libro, ya
que ahora si podía tener algún accidente, si no miraba el camino. Se detuvo justo en la puerta
abierta, que daba paso a uno de los invernaderos, que había en colegio. Sus oscuros ojos, se
deleitaron al ver quien se encontraba junto a una hermosa planta, muy parecida a una enredadera,
pero esta era de un color plata, con flores violetas. No pudo evitar formar una sonrisa, quien lo
viera, pensaría que lo hubieran poseído, pero no era así, no tenía por que no sonreír como un
Hufflepuff idiota, si sus ojos se topaban con tamaña imagen. Theo se acero silenciosamente,
hasta quedar a muy poca distancia de aquel chico que tanto amaba.

El castaño seguía inmerso en su mundo, completamente ensimismado en sus queridas plantas,


sin darse cuenta que alguien estaba detrás de él. Sus manos amorosamente, atendían aquella
exótica y tranquila enredadera, que tanto le había constado conseguir, además de poder tener la
aprobación de la profesora. Se sobresalto, dando un saltito cómico, forcejeo estéricamente para
que aquellos desconocidos brazos lo soltasen.

– ¿¡Que…!? – trato de gritar, pero al darse media vuelta, aun en esos brazos que lo rodeaban
posesivamente; su rostro asustado, se relajo completamente al ver quien era su atacante, no pudo
evitar sonrojarse, al sentir aquella penetrante mirada – Theo… – jadeo algo sorprendido y
aliviado.

La mirada de Theo quería decir algo, era intensa y posesiva (sanamente), posó su frente en el
hombro de Neville, para ocultar sus ojos, de aquella mirada castaña, que tanto amaba.

– ¿Qué pasa Theo? – pregunto suavemente el Gryffindor, mientras pasaba uno de sus brazos por
la espalda de su chico y la otra acariciaba distraídamente el cabello del Slytherin.

Neville había tenido sus dudas acerca de los sentimientos que el Slytherin había demostrado en
el, en un comienzo no podía entenderle, era tan silencioso e inexpresivo, pero… con el paso del
tiempo, supo diferenciar sus gestos, además que ahora si le miraba directamente a sus ojos, esos
ojos oscuros que gritaban mudos, lo que su dueño sentía por el, podía llegar a comprender sus
pensamientos y sentimientos. Pansy le había advertido, que tenia que ser paciente si quería
comenzar una relación sentimental con Theodore Nott, que él era frio y tenia dificultades con
demostrar sus sentimientos abiertamente, que le era difícil decir con palabras lo que sentía o
pensaba, que era por como lo habían criado y Nev entendió, si, por que comprendía la soledad en
que fue criado aquel Slytherin y eso era quizás, lo que mas le atraía. Seria difícil, no tenia dudas,
que su relación tendría altos y bajos, como en cualquier relación, pero tenían que estar juntos,
por que él de verdad le amaba y aunque él era un chico inseguro y tímido, podía estar seguro de
los sentimientos de Theo, aun cuando algunas veces le embargaba sus dudas, por que tampoco
para él seria difícil poder ser mas abierto y confiado de si mismo, pero estaba inequívoco que lo
conseguiría, como también estaba completamente seguro que Theo podría superar su barrera
indiferente, solo había que esperar y ser paciente.

– Tengo celos… – susurro casi inaudiblemente el Slytherin.


Neville abrió sus ojos completamente asombrado, separándose un poco de su chico, pero aun
abrazados, sus ojos castaños buscaron los ojos oscuros de su novio, cuando ambos se miraron
fijamente, Neville le hablo confuso.

– ¿de que hablas? – le pregunto verdaderamente confuso, que el recordaba no había estado
comportándose diferente con ninguno de sus amigos, como para que Theo tuviera celos.

Los oscuros ojos del Slytherin, se desviaron lentamente hacia un lado del invernadero,
esquivando la mirada confusa de su Gryffindor.

Neville de verdad que se estaba asustando por la salud de su novio, eso que veía en las mejillas
de Theo era un… ¿¡se estaba sonrojando!? Theodore Nott ¿¡se estaba sonrojando!? Neville había
abierto su boca completamente formando una perfecta O.

– tus plantas… – dijo mirando a una, que era una simple ramita, que mas bien parecía seca y a
punto de morir, en una pequeña y vieja maceta.

Neville miro hacia la dirección en que Theo tenia la mirada fija, pensando en que algo les había
pasado, pero allí solo vio sus plantas sin ningún problema, luego volvió su mirada confusa hacia
su novio, pero este seguía mirando las plantas, como si fueran lo mas interesante del mundo. No
entendía que es lo que Theo quería decirle, primero le dice que estaba celoso y luego habla de las
plantas… un momento… ¿podría ser que Theo este celoso de sus plantas? Na… eso es… Neville
miro nuevamente a su novio y este seguía fijo mirando hacia sus plantas con algo de… ¿odio?

– ¿Theo…? – le llamo aun no muy seguro de lo que iba a decir.

Theo miro hacia su novio, sin decirle nada y con sus ojos oscuros fijos en los del Gryffindor…

– ¿estas celoso de mis plantas…? – aventuro el Gryffindor.

El rubor en las mejillas de Theo volvió, ahora con más intensidad, pero su estoica indiferencia
seguía en pie.

Neville no pudo evitar sonreír y luego ponerse a reír suavemente, se abrazo fuertemente al
Slytherin, apoyando su mejilla en el pecho de Theo, sin dejar de reír levemente, no pudiendo
creer lo que había descubierto; Theo podía ser todo lo frio e indiferente que el mundo podía
llegar a palpar, pero había veces en que se comportaba como un niño de seis años y Neville lo
encontraba de lo mas adorable, ese era el Theo que al fin y al cabo se había enamorado.
– tonto… – le regaño con cariño.

Neville se aparto un poco de su novio, levanto sus manos hasta tocar sus mejillas, se tuvo que
poner en puntitas para alcanzar aquellos labios que tanto ansiada, besándolo lentamente,
queriendo hacer eterno aquel momento. Theo pasó sus brazos por la cintura del Gryffindor,
atrayéndolo hacia su cuerpo, respondiendo el beso demandantemente. Neville simplemente
sonrió dentro del beso.

– Creo que te prefiero mil veces a ti, antes que mis plantas… – le susurro antes de volverlo a
besar.

Theo sonrió ante aquellas palabras de su novio, completamente conforme con lo que le había
dicho.

***********

Blaise Zabini, era un chico alegre y muy sociable, siempre estaba de aquí para allá, hablando
con todos, siendo amigos de cualquiera. Se veía siempre despreocupado y con una sonrisa eterna,
que nadie era capaz de borrarla, quizás modificarla, pero nunca borrarla, con sus amigos era
igual, incluso mas alegre e hiperactivo que cuando estaba con gente desconocida. Eso no decía
que no fuera serio, centrado y que podía ser maduro cuando, sobre todo sus amigos lo
necesitaban. Fue criado como muchos hijos sangre puras, por niñeras, elfo domésticos y
profesores, ellos eran sus amigos y familia, por muy extraño que se viera; su madre era una
mujer de mundo, que le gustaba estar en todos lados al mismo tiempo, de divertirse a cada hora,
ser libre… por eso nunca estaba en casa, además que ella nunca había querido tener un hijo,
Blaise sabia que ella en verdad le tenia cierto rencor, por no decir que le odiaba, por que por su
culpa, ella se tuvo que casar con el viejo Zabini y olvidarse de su verdadero amor; por eso su
madre, iba de novio en novio, casamiento en casamiento, rodeándose de dinero y lujuria,
olvidando que tenia un hijo que cuidar y educar, solo recordándole para poder sacar algo de
provecho, como era el matrimonio arreglado que le tenia con ese viejo de Byrne, que le dejaría
con una buena cantidad de oro, que podría gastar a su antojo, sabiendo que con su edad, muy
pronto no tendría ningún prospecto de esposo adinerado, de quien aprovecharse.

Blaise no había tenido ningún lazo familiar con nadie, desde que tenia uso de razón, hombres
distintos no paraban de entrar en su hogar; él de pequeño siempre quiso agradar a su madre,
queriendo la atención de su progenitora, esforzándose días enteros, para poder hacerla sentir
orgullosa de él; pero su mundo de cristal, se rompió el día en que se dio cuenta, que en la vida de
su madre antes que nada era el oro, luego los hombres y por ultimo los interminables viajes que
realizaba fuera del país, él no existía en las prioridades de su madre, estaba seguro que ni
siquiera estaba en la mente de su madre, que ella muy fácilmente podría olvidarse de él en
alguno de sus viajes.
El nunca conoció a su padre biológico, ya que a los dos meses de su nacimiento,
murió misteriosamente, por lo que lo único que tenia de el, era su apellido, su herencia y una
antigua fotografía, que había podido conseguir gracias a uno de sus elfos domésticos. Fue un día,
cuando un buen hombre - su tercer marido - que inexplicablemente había caído en las garras de
su madre, le conoció, el amor paternal, el amor de familia. También fue en esa época en que se
dio cuenta que no podía seguir en su mundo de ensueño, en donde su madre dejaría todo por
estar con él. Aquel hombre al principio le miraba con lastima y dolor, al ver como su madre lo
trataba con la mayor cantidad de sarcasmo e indiferencia que podía reunir, aquel hombre quiso
darle atención a él y le reclamaba constantemente a su madre por no darle verdadero afecto de
madre, ese hombre había llegado a hacer, la única referencia paterna que tuvo; cuando ya
llevaban un tiempo viviendo juntos, Blaise le llamaba papá con gran cariño y aquel hombre le
decía hijo, y lo trataba como si fuera su padre biológico, siempre le veía sonriendo y alegre,
siempre tratando de hacerle reír y jugar con el, no poniéndole mucha atención a su madre, por lo
que… unos días después de una fuerte discusión, en donde Helga le reclamo a su actual esposo,
su poca atención que le daba y el exagerado - para ella - tiempo, que le prodigaba a su hijo, era
incorrecto y que debía cambiar radicalmente, sobre todo por que ella quería ir de viaje con él,
dejando a Blaise con los elfos, pero él se rehusó, diciendo que si no iba Blaise no iría. Después
de esa discusión, su madre siempre le miraba rencorosamente, el mientras tanto, disfrutaba el
estar con su papá, todo el tiempo que podía, pero las discusiones siguieron y a los pocos días,
Blaise había ido a verle, como cada mañana; habían varias personas vestidos de negro, todas con
caras de pena y cuando el pregunto por su papá, como cariñosamente el le decía, su madre le dijo
sin vergüenza, sin dolor, sin nada… simplemente le dijo que había muerto y fue en ese momento
en que se dio cuenta la clase de madre que tenia, de aquellos ojos tan fríos y carentes de cariño;
desde ese día comenzó a sonreír y ser un parlanchín, en memoria del único hombre que pudo
llegar a convertirse en un padre para el.

Las sonrisas de Blaise era una mascara mas, sus sonrisas podían ser tan falsas, que sus
verdaderos amigos, siempre la descubrirían, sus ojos mostraban mas de lo que sus eternas
sonrisas querían llegar a demostrar, sin lugar a dudas; aunque a él le gustaba ser distraído, como
casi siempre actuaba Pansy, él podía ver claramente a su alrededor, sabia como apoyar a sus
amigos, cuando debía reír y burlarse de ellos y cuando debía ser serio y sincero, demostrando la
confianza que existía en ellos.

Blaise vio en Draco, Pansy y Theo su tabla de salvación, primero había conocido a Pansy y se
llevaron bien desde el comienzo, Pansy era como su hermanita, que protegería como fuera, así
como Draco se volvió su hermano, un hermano gruñón y sarcástico, pero que a Blaise le
fascinaba sacar de sus casillas, luego vino Theo, al principio Blaise le tenia algo de recelo por lo
frio y callado que era, pero luego se dio cuenta, que él también había sufrido con la soledad de
vivir en una inmensa mansión, rodeados por elfos y empleados, sin contar con el amor de sus
padres.

Blaise miraba embelesado al pelirrojo que descansaba junto a él, no podía creer que había
conseguido lo que tanto había añorado, aquel deseo que le daba las fuerzas para continuar
sonriendo y fingiendo que siempre estaba feliz y seguro de si mismo, cuando por dentro se sentía
desolado y a punto de derrumbarse. Estaban recostados sobre un sillón, que había hecho aparecer
en la sala de los menesteres, que se había transformado en una cálida y acogedora salita, no era
muy grande, solo tenia una gran ventana, donde la cortina estaba algo corrida, por lo que la luz
del atardecer se adentraba cálidamente en la habitación, frente a donde estaban recostados, había
una chimenea empotrada en la pared de piedra, donde las llamas daban calor al lugar y los
mantenían calentitos. Eran pareja, oficialmente comprometidos, aunque al principio había sido
una mentira hacia su madre, que Ron le había dicho, ahora era la realidad, todo fue por la
curiosidad innata que tiene todo buen Gryffindor.

Ya que Ron lo había estado espiado, por casi una semana y media, ya que Blaise aprecia mas
distraído y sus sonrisas mas decaídas. Tanto Draco, Pansy y Theo habían estado muy distraídos
en sus propios problemas, como para ver que uno de sus amigos, también tenia graves
problemas, que con cada día, apagaban mas y mas su energética personalidad.

Ron preocupado por el Slytherin, había estado espiándolo, cada vez que podía, un día por
casualidad, había visto al Slytherin, casi correr por los pasillos del colegio, su rostro estaba serio
y apretaba fuertemente una carta, le dio una mala sensación, así que con todo el sigilo que podía
poseer, le siguió a una distancia prudente, que no le descubriera, pero que al mismo tiempo no lo
perdiera de vista.

Estaba casi seguro que iba hacia las mazmorras, lo creía por que iban en un camino inclinado,
oscuro y silencioso. Lo comprobó y descubrió hacia donde iba, cuando vio que habría una puerta
y al poco tiempo después, salía el profesor Snape, suponía que debía ser el despacho de su
profesor, se escondió en una aula desocupada, para que su profesor de pociones no lo
descubriera, aunque estaba seguro, que el hombre se había detenido un momento ante la puerta
de su escondite, pero suspiro aliviado cuando sintió las pisadas de su profesor, dirigirse lejos de
donde se encontraba, cuando no escucho mas sus pasos, salió del aula y miro hacia los lados, sin
nadie a la vista, se dirigió hacia la puerta, que un momento atrás había entrado Blaise y salido
Snape.

Ahí pudo escuchar la voz cruel y sínica de la madre de Blaise, diciéndole que aun tendría que
casarse con ese anciano depravado, que sino se quedaría sin fortuna, por ser menor de edad y que
si no iba por las buenas, acusaría a Lucius Malfoy de secuestro y otras estupideces, que Ron no
pudo aguantar seguir escuchando, así que abrió bruscamente la puerta, dejando perplejo a las dos
personas que se encontraban de pie una frente a la otra.

Para él, ver a su Ron, con una mirada furiosa y retadora, fue toda una sorpresa y no pudo evitar
sentir mucha preocupación, por lo que podía estar pensando aquel pelirrojo, pero quedo en
shock, cuando Ron le dijo a su madre, que estaban comprometidos, y que como Ron era sangre
pura, aunque no tuviera dinero, por su estado de sangre tenia mas poder para pedir la mano de
Blaise, que aquel anciano alcahuete. Después de eso fue todo un escándalo, protagonizado por
Helga viuda de Zabini, que acabo con la llegada de Snape, que saco amablemente a la
escandalosa mujer.

De eso habían pasado un par de semana, después de aquel evento, tuvieron la oportunidad de
aclarar sus sentimientos, Blaise se había sentido muy mal, pensando que Ron simplemente lo
estaba ayudando por simple amistad y no por otra cosa; pero Ron entre balbuceos y sonrojos se
le declaro, casi huyendo del lugar, después de confesar sus sentimientos hacia el, pero Blaise no
se lo permitió, lo tomo de un brazo y lo beso, beso que fue inmediatamente correspondido. Ahora
dos meses después, eran novios y todo Hogwarts lo sabia.

– ¿en que piensas?

Aquella pregunta lo sobresalto, ya que no se había dado cuenta de que su pelirrojo se había
despertado y le miraba fijamente.

– En nada interesante – le contesto con una sardónica sonrisa, antes de besarlo suavemente.

Ron entrecerró sus ojos, sabiendo que su pareja mentía, podría ser todo lo despiadado que sus
compañeros decían, pero cuando se trataba de personas cercanas a el, las cosas cambiaban, sobre
todo si era Blaise el implicado.

– supongo que debo creerte.

Blaise sonrió, como hace mucho no lo hacia, era una sonrisa real – solo, bueno… – se sonrojo un
poco, desviando la mirada hacia un lado.

Ron levanto una ceja, ante aquellos gestos que hacia su novio, sabia que Blaise era muy abierto y
escandaloso, pero para algunas cosas era algo tímido e inseguro, sobre todo con respecto a sus
sentimientos.

– he… ¡rayos! No soy bueno en esto – dijo, antes de asaltar la boca de su estupefacta pareja – te
amo – susurro sobre sus labios.

Ron sonrió dentro del beso, dejándose llevar por su pareja, sabiendo cuan duro era expresar
aquellos sentimientos, por que a el también le costaba lo suyo decirlos, pero en demostrarlo, todo
era muy diferente.

Continuara…

Notas finales:
espero que ahora si se suba u.u

nos leemos,

Matta nee!!

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Ellos, los Slytherin (Esos dos meses) 2º parte por Pazu
Notas del autor:

Holas ^^ espero que les guste este capi y siento la demora :)

ahora a leer!!!!!!!!!!!

Capitulo veintitrés: Ellos, los Slytherin (Esos dos meses) 2º parte.

Ron sonrió dentro del beso, dejándose llevar por su pareja, sabiendo cuan duro era expresar
aquellos sentimientos, por que a el también le costaba lo suyo, en decirlos, pero en demostrarlo,
todo era muy diferente.

***********

Pansy Parkinson, era una chica elegante, sínica, chismosa y boba, o eso era lo que dejaba ver
ante los demás, por que ella era muy inteligente, ya que era una muy buena representante de
Slytherin y como tal debía ser muy astuta y con eso la inteligencia era algo fundamental. Aunque
no podía negar que le gustaban los chismes y siempre le encantaba estar enterada de lo que
pasaba en todo Hogwarts, pero no es que ella anduviera por todos los pasillos, diseminando toda
aquella información que podía conseguir, simplemente le gustaba saber de las vida de los demás,
no era algo de vida o muerte, pero era como un pasatiempo. Fuera de su círculo de amigos, era
una chica tonta que le gustaba andar con chicos lindos, y preocupada siempre de la última moda;
no negaba que le gustaba la ropa, pero eso era por la crianza de su madre. Aunque su madre no
trabaja como su padre, era una mujer ocupada, que no tenia tiempo como para cuidar a su
pequeña hija, y eso era por que siempre tenia que estar con sus amigas y comentarcon ellas de
los eventos de otras personas, así como comentar de la ropa de X persona, por eso también tenia
que estar presente en todas las fiestas realizadas por alguien de la alta sociedad.

Su madre fue la que se encargo de su educación, le enseño como comportarse en una cena
elegante, como hablar, caminar, mirar y cuando callar. Que niñas debía entablar amistad y ser
“confidentes” para que pudiera sacar algún provecho en el futuro; además le dio
muchos recomendaciones respecto al hombre ideal, que obviamente tenia que tener mucho
dinero y ser sangre pura, si era bien parecido mucho mejor para ella, pero entre mas dinero y mas
poder mucho mejor.

Pansy creció dentro de ese mundo, desde pequeña se dio cuenta que todo era una falsedad, sobre
todo, cuando descubrió que sus padres no se amaban, que se habían casado simplemente por
conveniencia. Le dolía ver como cada noche discutían, como su padre se iba para no volver en
días y su madre le decía que el se iba con cualquier puta que se le cruzaba en el camino, mientras
ella tenia que seguir manteniendo el buen nombre de la familia. Es por eso que desde pequeña,
siempre deseo encontrar a su príncipe azul, que viniera por ella, que se casaran y tuvieran una
familia, pero en donde si existía el amor, no como era la relación de sus padres, que ni siquiera la
amistad existía entre ellos.

Cuando ella conoció a Draco, sintió que se había cumplido uno de sus anhelados sueños, había
creído emocionada que había encontrado a su príncipe azul. Aunque en un principio, Draco había
sido caballeroso como todos los sangre puros, tuvo la oportunidad de conocer también su lado
sincero y amable. Draco fue su primer amor, y nunca se avergonzaba en decirlo; tuvieron que
pasar muchos años, para darse cuenta que Draco jamás la vería de aquella forma que ella quería,
es decir como su futura esposa; sino como una hermana pequeña. Le dolió, sufrió mucho con
ello, Theo y Blaise fueron los que la ayudaron a pasar por aquella época, en donde paso por
varias etapas, de la negación, al enojo, odio, resignación y superación. Draco le dio su espacio,
jamás la trato mal, aun cuando ella en su despecho e infantil enamoramiento, le hiso
pasar incomodas situaciones.

Fue en su quinto años, que dejo aquel enamoramiento de Draco, aquella etapa de su vida lo
recordaba con cariño. Además que eso no consiguió que su amistad se desintegrara, sino que se
fortaleció aun más sus lazos. Le costo algo, pero fue capaz de disculparse con Draco y también
con Theo y Blaise, que habían tenido que soportar sus berrinches y llantos, además que esos dos,
habían tenido que dividirse, para estar con Draco y Pansy, y así no dejar a uno de lado por el
otro.

Caminaba elegantemente por los pasillos del colegio, con su falda corta y su blusa bien pegada al
cuerpo, dejando a muchos alumnos y alumnas, alucinados por su figura, que no se dejaba ocultar,
aunque tampoco andaba vestida como una cualquiera, eso no estaba dentro de sus estándares
como sangre pura. Sonrió coqueta y algo boba, a un chico de Ravenclaw que siempre le sacaba
información, con un poco de flirteo, que no iba mas hacha de palabras. Pansy nunca quiso
aparentar lo que en realidad era, como sus amigos, dejo su mascara puesta ante los demás, era
algo molesto a veces, tener que parecer tan boba, pero siempre acaba sacando provecho de su
condición de tonta.

Es quizás por eso, que tanto le molestaba la forma de ser de Hermione, antes, cuando no la
conocía bien, le molestaba de sobre manera el que actuara como sabelotodo ante todo el mundo,
siempre queriendo demostrar que ella sabia todo lo que preguntaban, afanándose de todo su
genio. Cuando poco a poco, comenzó a saber mas cosas de ellas, le empezó a llamar la atención,
se veía que no le gustaba las injusticias y que se tratara mal a las criaturas mágicas que habitaban
en el mundo mágico, incluso había querido ayudar a los elfos; aunque sabia que era una idea
absurda, en el sentido de que ni siquiera los elfos querían ser liberados; también sabia que
Hermione lo hacia por ser hija de muggles, ya que ella no había visto los elfos desde su infancia,
y no se había acostumbrado como todos los otros hijos de muggles que llegaban al mundo
mágico, aunque tenia que darle el merito de que Hermione tenia mucho valor para enfrentarse a
ellos y por no sentir vergüenza por las burlas y miradas divertidas que casi todos los alumnos de
Hogwarts le dedicaban.
Así paso, de ser Granger la sabelotodo, genio come libros, a convertirse en su pequeña obsesión,
veía como la castaña siempre se empeñaba con leer y leer, llenarse de conocimiento; aunque veía
que le faltaba algo de diversión, de espontaneidad, ya que la Gryffindor siempre parecía querer
planear su vida, sin darse cuenta que eso, simplemente no servía, ya que la vida era tan
indomable e inesperada, que nunca sabemos lo que nos espera al otro día. Hermione era una
chica lista, y aunque le gustaba presumir de ello, siempre ayudaba a sus amigos, le importaba lo
que pasaba a su alrededor, no era como los Ravenclaw que la mayoría se interesaban en ellos
mismos o en su limitado circulo; en cambio Hermione podía ser muy valiente y astuta como una
muy buena representante de Slytherin; Pansy sentía que la segunda opción del sombrero
seleccionador para Hermione hubiera sido Slytherin y no Ravenclaw.

Pansy llego a la biblioteca, suspirando audiblemente, pero con una sonrisa en sus labios, sabia
que a su novia, la debía compartir con sus amados libros, pero ahora, había conseguido equilibrar
aquella obsesión con leer que tenía su novia y pasar tiempo con ella. No es que quisiera que la
castaña dejara de leer y aprender por ella, por que eso venia en el paquete cuando quiso
comenzar a salir con la Gryffindor, sino que quería que Hermione se diera cuenta, que siempre
hay momento para todo y que los momentos de ociosidad no eran tiempos perdidos.

Pansy se encamino con galantería hacia la mesa que estaba ocupada por Hermione y una gran
cantidad de libros que se encontraba a su alrededor. Hermione estaba tan ensimismada en lo que
hacia, que no se había dado cuenta de que era observada ávidamente por una Slytherin, que no se
cansaba de admirarla silenciosamente.

Pansy había dejado gravada en su memoria, una frase que su madre siempre le había repetido
hasta el cansancio, aunque había desestimado las excepciones y las reglas impuestas por idiotas
que creían, que la vida de las personas era para aparentar cosas, que todo el mundo sabia que no
eran así, por que nadad ni nadie era perfecto. Por eso siempre recodaba aquellas palabras, que su
madre tan fríamente le había dicho; “Si quieres algo, tómalo…” y eso había hecho, pero sin
importarles las consecuencias, lo que los demás irían a pensar, no pensó en nadie, simplemente
en lo que ella quería, era egoísta, lo sabía pero si uno no pensaba en uno mismo, ¿Quién lo
hacia? Su madre no lo aria, ni su padre… solo estaba ella misma, para obtener lo que
verdaderamente quería y en ese momento, quería a esa sabelotodo.

Con una sonrisa traviesa, tomo la pluma que la castaña estaba usando, para anotar los apuntes de
esos viejos libros llenos de conocimiento. Hermione iba a protestar, a quien había sido
el graciosito que le había quitado su pluma, pero sus protestas quedaron encerradas en su boca,
cuando esta fue apresada por otra.

– ya va siendo hora que guardes ese libro, ya van a ser la hora de que cierren la biblioteca – le
susurro sedosamente a su novia.
Hermione se sonrojo ligeramente y frunció el ceño, falsamente molesta, al ser interrumpida por
su novia – un momento mas…

– vale… – dijo simplemente, con una traviesa sonrisa, sabiendo que Hermione no solo le pedía
que le acompañara un rato mas, por su lectura, sino que si se demoraban un poco mas en salir de
la biblioteca, no alcanzarían a llegar a sus respectivos dormitorios, por lo que tendrían que ir muy
seguramente a la sala de los menesteres a pasar la noche.

Pansy saco “Corazón de Bruja”, para pasar el rato, mientras esperaba pro que Hermione, anotara
las paginas de los libros que había estado leyendo.

Su relación no había tenido mayores problemas, aunque podían tener muchas diferencias, sabían
como arreglarlas y solucionar sus problemas, rara vez habían discutido y tenido desacuerdos
graves; el problema que existía en su relación eran sus padres. Pansy le había contado a sus
padres lo de Hermione, su padre había creído que era uno de sus nuevos caprichos y no le dio la
mayor importancia, mientras que su madre le había dicho, cuan decepcionada estaba de ella, por
juntarse con sangre sucias, además de decirle el mal gusto que tenia. Hermione por otro lado,
también había tenido dificultades con sus padres, ellos aun estaban en proceso de entender y
aceptar que su única hija era lesbiana y aun silenciosamente, esperaban que solamente fuera una
etapa de experimentación y no su definitiva inclinación sexual. Pero Pansy y Hermione estaban
contentas con su relación y no la estropearían por culpa de sus progenitores, aunque Hermione
tenia la esperanza de que sus padres la entendieran y aceptaran, así como a su pareja; mientras
Pansy, ya había perdido la esperanza hacia tiempo.

***********

Draco Malfoy, era el típico chico mimado y engreído, que cualquiera pudiera esperar, al ver de
la familia en que venia; criado como todo un sangre pura, orgulloso de su apellido y altivo por su
posición social y monetaria, debía comportarse a la altura de su origen magistral, a la usanza
antigua, odiando y menospreciando a los hijos de muggles y sobre todo a los muggles. Draco fue
criado por una abnegada madre y esposa (aunque siempre estaba en fiestas o en la casa de alguna
amiga), Narcisa siempre velaba por su pequeño y único hijo, sabiendo que nunca mas podría
tener otro con su amado esposo, ya que su débil cuerpo, no soportaría otro embarazo, como
también ella sabia era la mejor escusa, para que Lucius no quisiera otro heredero.

Narcisa fue prácticamente la sombra de Draco, siempre velando que nada le faltara,
cumpliéndole hasta el mas absurdo de sus pedidos, pero aun así, con su asfixiante protección
hacia su pequeño; Draco siempre había idolatrado a su padre, queriendo ser el orgullo de aquel
hombre, que siempre veía sumido en su trabajo, pero que aun cuando se encontraba cansado,
había un tiempo para hablar con su único hijo.
Draco supo a muy temprana edad, que sus padres eran los mejores, quizás ante el mundo y sobre
todo en fiesta de la alta sociedad, sus padres podían ser unos témpanos de hielo, algo que el
también debía imitar, para que nadie pudiera ver las “debilidades” de su familia; pero el veía
como sus mejores amigos, como Pansy, Blaise y después Theo, que sus padres actuaban fríos e
indiferentes con sus hijos a cada hora del día, frente a quien sea; en cambio en el interior de su
hogar, no era así; su madre vivía solo para el y su padre siempre que podía pasaba su tiempo
libre charlando, educándolo e incuso jugando con él, aunque hubo veces en su infancia, en que
pensó en que sus padres no lo querían, por que a veces lo dejaban solo o lo retaban y le hablaban
duramente, pero al comparar con otras familias, se sintió verdaderamente amado.

Al ver la vida de sus amigos, se sintió el rey del mundo, como si el fuera un niño especial y
único, que por ello debía tener lo mejor, los mejores padres, los mejores amigos, las mejores
túnicas, los mejores juguetes, etc. pero así no era la realidad, el simplemente había sido un niño,
que había vivido toda su infancia en una burbuja hermética, que lo protegía de la crueldad y
realidad del mundo, incluso sus amigos, habían querido mantenerlo allí, en la creencia de que el
mundo giraba en su entorno, aquella burbuja se rompió cuando lo conoció a el…

A sus once años de edad y con la pronta ida hacia Hogwarts, los nervios y el ansia de poder
demostrar a su padre de que el si, era un buen Malfoy, le hiso perder el juicio y el temple, sobre
todo al ver que aquel chico que había conocido en Hogsmade y que tanto le había llamado la
atención, estaba junto a Weasley. Las cosas se retorcieron en su cabecita, cuando vio que aquel
mismo chico, lo rechazó, ¡lo rechazo! ¡A el! A Draco Malfoy, a quien todos querían como amigo,
a quien lo tenía todo… “absolutamente” todo.

Fue infantil, inmaduro y caprichoso, como aun quizás a su edad actual, aun lo era, pero no podía
cambiar nada, lo hecho, hecho esta… él había querido llamar su atención, que se diera cuenta del
garrafal error que había cometido, al haber escogido al idiota y pobretón de Weasley y lo
estúpido que había sido, al considerar a una sangre sucia, como una amiga. Pero las cosas no
salían como el las planeaba, Harry Potter nunca se arrepintió de la elección que había hecho,
nunca llego a el pidiéndole, no rogándole, por que fuera su amigo… nunca le miro con
admiración o respeto. Y lo mas idiota de todo, es que el sin darse cuenta, se había enamorado de
ese estúpido Gryffindor con complejo de héroe…

A mediada que iba creciendo, su visión del mundo mágico y muggle iba poco a poco cambiando,
aun cuando delante de su padre y quizás también así mismo, no quería reconocerlo, por que el
siempre había deseado ser el máximo orgullo de su padre, pero no podía negar que muchas
creencias de su familia, no eran mas que tontos prejuicios. También se dio cuenta, de la
verdadera relación de sus padres, veía con dolor como su madre se desvivía por su padre, pero
este no le correspondía aquel sentimiento, que Narcisa se esmeraba en trasmitir a su esposo. Pero
al igual que su padre, el también era frio con su madre, aun cuando la amaba con todo su ser.

Aun cuando había madurado mucho con los años, eso jamás se demostró ante las personas fuera
de su círculo de seres queridos. Para el resto del mundo seguía siendo el hijito de papá,
malcriado, engreído y frio Draco Malfoy, que siempre molestaba a los Gryffindor, especialmente
a Potter, la única forma que había, para que el “niño que vivió” le prestara la debida atención
hacia su persona, aunque para Draco, cada vez era mas difícil no tomar a Potter, estamparlo
contra la pared y besarlo.

Draco seguía caminando hacia su dormitorio, ya era algo tarde y mañana “todos” irían a
Hogsmeade, para distraerse y pasarla bien; aunque el tuviera que pasarla acompañado de su
“prometida”; pensando en esa, recordó cuando se enfrento a su madre…

Flash Back

Había pasado un par de semanas del comienzo de clases y Draco estaba de los nervios, por el
asunto de su supuestas prometida y para empeorar las cosas, su madre no había contestado
ninguna de sus cartas, ni siquiera las que su padre le había enviado.

Por eso caminaba, lo mas rápido posible hacia el despacho de su padre, ya que le había mandado
una misiva, diciéndole que era muy importante que no se tardara; algunas veces su padre podía
ser exagerado con sus exigencias en la hora, pero no era eso lo que le hacia ir lo mas rápido hacia
el despacho, sino el estar casi seguro, de que su madre había mandando alguna carta, explicando
que todo lo que esa estúpida de Greengrass había dicho, era falso, que no existía ningún
compromiso de matrimonio.

Draco golpeo lo mas suave posible, la puerta del despacho de su padre, después del claro
adelante, el rubio entro rápidamente, la puerta se cerro sola, junto con un hechizo de privacidad,
que estaba aplicada de antemano por el dueño de la habitación.

Se asombro al ver a su madre junto a su padre, al señor Lupin, su padrino y su “tío” Sirius, todos
estaban sentados, al parecer esperándolo.

– madre… – susurro aunque no se le acerco.

Narcisa sin importarle la frialdad con que le saludaba su único hijo, se le acerco y lo abrazo
fuertemente, besándolo en la frente.

– oh mi pequeño dragón ¿Cómo has estado? ¿Te ha ido bien en las pruebas? ¿Has tenido algún
problema? Por que si es así, debes decirlo, ahora estas rodeado de…

– ¡mamá! – le llamo la atención, ya completamente mareado con las preguntas de su madre.


– ¡Draco! Que te e dicho acerca de levantar la voz a los mayores, menos a tu madre, jovencito,
creo que…

– Deja de decir bobadas, y dime que toda esa bobería de Greengrass y que es mí supuesta
prometida es una chalada de esa niñita.

Narcisa le miro con reprobación, la verdad es que Draco era muy parecido a su padre, no solo
por su físico, sino también por su personalidad, pero también su dragón había sacado mucha de
la personalidad de su abuelo Abraxas, cosa que verdaderamente le molestaba, sobre todo aquella
miradita que le exigía que hablara ahora mismo y ella odiaba que le ordenaran, menos su hijo,
que debía darle mas respeto; pero sabiendo que Draco debía estar alterado por saber la respuesta,
le siguió el juego a su hijo, aunque se anotaría mentalmente el hecho, de darle alguna reprimenda
después. Narcisa se separo de su hijo, pero aun permaneciendo frente a el.

– no puedo decirte eso Draco, ella tiene razón, es tu prometida.

Estaba literalmente en shock, sus ojos grises miraban fijamente a su madre, sin poder o mejor
dicho sin querer entender, lo que había pronunciado su madre, no… aquello no podía ser
realidad, simplemente todo era un error, una estúpida broma ¿Cómo su propia madre le había
hecho algo así? ¿Cómo…?

– ¿¡Que estas diciendo!? ¡Estas loca madre! ¿¡Que hiciste!? ¡Quien te dio el derecho de tomar
ese tipo de decisiones por mi! ¡Me has arruinado la vida! – Recordando a cierto chico de ojos
verdes – ¡te odio! ¿Y tú te haces llamar mi madre…?

– Vasta Draco… – dijo Lucius al ver lo afectada que se veía Narcisa, por las palabras de su hijo.

– no me digas que me calle padre, no cuando esta mujer arruino mi vida, ¿Qué conseguiste con
esto? ¿Quedar bien con tus amigas? ¿Dinero, viajes, diversión…?

Pero Draco no pudo seguir, ya que recibió una fuerte bofetada, por parte de su madre, quien
derramaba lágrimas silenciosas; Draco solo atino a acariciar su maltrecha mejilla, que había
quedado ligeramente magullada. Lucius se había parado de su asiento, quizás por un acto reflejo
para proteger a su hijo, aunque sabia que se lo tenia merecido, podía llegar a entender el enojo,
frustración y dolor, que podía estar sintiendo, pero se contuvo y se quedo en su lugar; apretó
fuertemente, la cálida mano que se había aferrado a la suya.

– ¿sabes lo que gane con ese compromiso? – Susurro suavemente, sin limpiarse las lágrimas,
mirando directamente los ojos grises de su hijo, que le miraban desafiantemente – ¿sabes? Gane
el que mi único hijo, no fuera marcado, gane tiempo para que mi único hijo no fuera un
mortífago, gane que ese remedo de Lord Oscuro, no pusiera sus asquerosas manos sobre ti, eso
es lo que gane Dragón y lo volvería hacer una y otra vez, si con eso aseguro tu seguridad…

Todos vieron como Narcisa lentamente se sentó en un sillón, aquella mujer, parecía mucho más
vieja de lo que era, como si por fin todo lo que había tenido que sufrir esos años, hubieran caído
de golpe en su cuerpo y se demostrara en su rostro, demacrado, cansado, triste.

– ¿de que hablas Narcisa? El Lord nunca nos informo de que quisiera a Draco en sus filas, no por
lo menos, hasta que saliera de Hogwarts, que seria obviamente marcado – hablo estoicamente el
profesor de pociones.

– lo se Severus, pero eso fue lo que les dijo a ustedes, conmigo si hablo su interés por mi dragón
y no iba a permitir que ese ser ensuciara a mi Draco, así que cuando Draco cursaba el sexto
curso, organice una comida con los padres de Daphne y Astoria Greengrass, les dije que mi único
hijo necesitaba a una dama de la alta sociedad y que estuviera en su misma condición económica
y de pura sangre, para que fuera su esposa, ellos estaban entusiasmados con la idea, pero les dije
que la mejor opción era Astoria, ya que así Draco tendría unos años para estudiar y poder hacerse
cargo del imperio de la familia, y cuando Astoria saliera de Hogwarts podrían casarse
inmediatamente, ellos aceptaron inmediatamente...

– no veo la conexión, a Voldemort no le importaría el que Draco se casara, para marcarlo…

Narcisa sonrió suavemente – tienes razón primo, pero yo si veía mas allá, le dije al Lord, que era
mejor tener mas aliados, sobre todo a sangre puras con dinero y renombre, respetados en las
esferas políticas y sociales, los Greengrass en Francia son muy respetados, por lo que si Draco se
casaba con una de las hijas de esta respetada familia, Draco podía conseguir mas aliados por
parte de Francia, incluso miembros del ministerio Francés, el Señor Tenebroso lo pensó, y me
dio su bendición, para que Draco se casara con Astoria y que para eso, era mejor que no tuviera
la marca, así era mas fácil ganar la confianza de los aristócratas Franceses…

Lucius estaba realmente sorprendido por toda aquella artimaña, que había creado su ex-esposa,
no podía creer lo cerca que estuvo de que su dragón fuera marcado y todo lo que había tenido
que hacer Narcisa, para resguardar la integridad de su pequeño.

– gracias…

– no tienes que darla Lucius, eso y mucho mas aria, por mi dragón mal agradecido – dijo
sencillamente, mientras miraba calculadoramente a su hijo.
– lo siento… no debí… – susurro cohibido y avergonzado, al ver lo mal que había actuado y
pensado de su madre – te quiero mamá – le dijo, antes de abrazarla fuertemente, sabiendo lo duro
que había sido su vida, si hubiera sido marcado, quizás ni siquiera estaría allí, sino a muchos
metros de profundidad, con solo un pedazo de piedra como indicativo de que el alguna vez
existió.

– no importa pequeño, yo se, lo idiota, contestador, excitable, exagerado…

– Mamá – se quejo casi infantilmente.

– ¿¡que!? Si es verdad, pero aun así… con todo el parecido de Lucius, te quiero igual –
besándole la frente.

– ¡Narcisa!

– ¡Mamá!

Padre e hijo, hablaron al mismo tiempo y refunfuñaron los dos, lo que causo la risa de parte de
todos, aligerando el ambiente del lugar.

– y… que vamos hacer con el compromiso de Draco, debe haber alguna forma, para que ese
compromiso se anule – comento Remus, sabiendo que aun existía el problema del futuro
casamiento.

– mi querido Remus, no te preocupes por eso, yo ya tengo la solución a ello, no iba a meter a mi
hijo en un matrimonio concertado, sin tener la seguridad, de que pudiera ser anulado, y que mi
hijito fuera libre, para conquistar a cierto chico de ojos…

– ¡mamá! – chillo escandalizado el adolecente, tapando la boca de su madre con sus manos, para
que no dije nada mas.

– Draco – amonesto su padre, aunque internamente estaba divertido, por la actitud de su hijo –
no creo que sea necesario, con tu disimulada actuación de estos días, todos sabemos con quien
preferirías estar comprometido, así que compórtate.

Sirius miro a todos los que estaban en el salón, quienes miraban divertidos hacia su sobrino,
quien estaba rojo de vergüenza, así que sin poderse contenerse le pregunto a quien tenia a su
lado…
– ¿Quién es…?

Severus suspiro frustrado, y le miro con enojo – en serio pulgoso, creo que tanto tiempo pasando
como perro, te hace tener un cerebro como ellos.

Sirius le miro molesto, mientras se cruzaba de brazos y miraba a su amigo, con aquellos ojos de
perro abandonado, fuera de la casa, con una torrencial lluvia sobre el.

– creo que es mejor que te quedes con la duda, y pienso que Severus tiene razón Sirius, es mejor
que pases menos como perro… – se burlo su amigo.

Ahora si el animago le miro feo a su amigo, mientras se refunfuñaba y murmuraba por lo bajo,
contra la serpiente alvina y su afán de volver al lado oscuro, al bueno de Remus.

Draco estaba mas que agradecido, de que Black, no supiera (aun) que le gustaba su ahijado, por
que el día en que lo hiciera, su vida estaría en constante peligro.

– entonces mamá, que tenemos que hacer para librarme de la mocosa esa…

Narcisa sonrió perversamente, ante las palabras, mirando fijamente a cierto castaño, que se puso
nervioso ante aquella miradita, que le indicaba claramente, que habría problemas y que él estaría
en el meollo del asunto, aun cuando no quisiera…

– bueno, de eso depende de Remus, el es el único que puede ayudar a zafarte de ese compromiso
matrimonial…

Todos miraron hacia Remus, sin entender de lo que estaba hablando Narcisa, ¿de que iría el plan
de Narcisa? Lucius esperaba que no fuera nada, demasiado retorcido, por que no quería exponer
a su lobito, pero sabia bien, que si era por el bienestar de su hijo, estaría dispuesto a rogar, por
que Remus los ayudara, aunque Lucius Malfoy, sabia muy bien que Remus lo ayudaría sin
necesidad del ruego, que estaría dispuesto a ayudar a su hijo en lo que pudiera…

Fin Flash Back

Draco se tiro en la cama, mirando hacia el techo, suspirando tranquilamente, sabiendo que debía
tener mas paciencia, ya que aunque el quisiera romper ahora mismo el compromiso con la menor
de las Greengrass, no se podía, ya que el plan de su madre no era inmediato, además que no
podían poner en sobre aviso a los Greengrass, ya que podrían arruinar sus planes y buscar la
forma de que aquel compromiso no se rompiera por nada del mundo. Se dio media vuelta,
fijando su vista en una ventana, pensando en que mañana seria muy agotador, ya que tendría que
dividirse, entre estar con su prometida y con su fénix; antes de cerrar sus ojos, deseo poder tener
dos cuerpos y así poder hacer las dos cosas al mismo tiempo, pero algunas cosas eran imposibles,
aun en el mundo mágico.

Continuara…

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