Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
Siempre nos hemos encontrado, en noticias o en nuestro entorno social, sucesos que
nos han conmovido dada su gravedad en la sociedad en que vivimos. Lo más común
es que en noticieros y otros medios de comunicación, se encuentren hechos y
situaciones que nos conmueven, indignan y llevan a la reflexión, al análisis y hasta al
autocuidado, entre estos el “asesinato”, un hecho/acción que viola “un derecho
fundamental” del ser humano: el derecho a la vida.
La obra de teatro asesinas presento un lado oscuro de la vida, donde varias mujeres
nos comparten sus fantasías y frustraciones. De diferentes edades y clases sociales
con un objetivo que las convoca “la venganza”.
Sus relatos te conmueven y te hacen pensar mucho. Una pareja de esposos, donde
un marido con una actitud pesimista, celoso, molesto y violento, mata a su esposa
ahorcándola en su propia cama. Una mujer que mato a su esposo sin ninguna
sospecha para ser feliz con su amante, termina en la cárcel. Una mujer controlada por
su madre que no podía llevar una vida normal, donde cada acción era motivo de
pecado, llena por venganza mata a su propia madre y feliz por estar libre de ella. Una
hija que mato a sus padres con una pistola, a causa de los abusos sexuales que su
propio padre le hacía y su madre no hacía nada al respecto por miedo. Una mujer con
un hombre con el doble de edad, que sufría de violaciones, encierros y abortos. Un
hombre sufriendo por matar a su mujer en la cárcel, murió ahorcado por el espíritu de
su esposa.
Las causas de los asesinatos fueron detonados por algún evento o suceso clave, como
los abusos sexuales, el odio, la ira, una ruptura amorosa, un despido o cualquier otra
pérdida. Además, las asesinas pueden sentirse humilladas, heridas y buscan algún
tipo de compensación o venganza.
Las mujeres expusieron sus ansias e ilusiones, sus fábulas, cuestionándose las
relaciones familiares o los motivos. Dando lugar a aquella ira reprimida que muchas
mujeres guardan dentro de sí por razones que sólo su corazón comprende.
De acuerdo con lo anterior queda claro que al momento de asesinar a una persona se
viola el derecho a la vida, pero más que considerar la vida como “un derecho
fundamental” del ser humano consagrado en nuestra Constitución, en el sistema
universal de protección de los derechos humanos y en el Pacto Internacional de
Derechos Civiles. Debemos considerar que las dinámicas que mueven nuestro entorno
social han creado otros escenarios a los cuales nos debemos enfrentar día a día,
escenarios de control territorial ilegal, pobreza, carencia de servicios de salud y
educación. Lamentablemente las instituciones para atender esta situación se enfocan
más en contar y caracterizar sus muertos que en generar estrategias eficaces de
prevención. La prevención no está en la agenda de seguridad de la mayoría de los
gobernantes que han pasado por nuestra ciudad o por lo menos no se le da la debida
importancia.