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DERECHO I (PENAL)

UNIDAD 6 – Regimen penal juvenil

Observación previa:
Para entender el règimen penal juvenil, su normativa, y sus diferencias con el règimen
penal de mayores, es necesario recordar/tener en cuenta los siguientes conceptos:

A) Los DDHH en la Constitución Nacional (Unidad 2, Punto 2, Introducciòn al


Derecho):
La reforma de 1994 incorporò, en su art. 75, inc. 22, 10 instrumentos
internacionales de Derechos Humanos, a los que después se sumaron otros 2,
aprobados por el Congreso tambièn con jerarquía constitucional.
Estos 12 instrumentos internacionales,que son parte de nuestra Constitución
Nacional, son:
1.-Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre
2.-Declaración Universal de Derechos Humanos
3.- Convención Americana sobre Derechos Humanos (llamada Pacto de San José de
Costa Rica)
4.-Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales
5.-Pacto Internacional de Derechos Civiles y su Protocolo Facultativo
6.-Convención sobre la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio
7.-Convención Internacional sobre la Eliminación de todas las formas de
discriminación Racial
8.-Convención sobre la Eliminación de Todas las formas de Discriminación contra la
Mujer
9.-Convención contra la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o
Degradantes
10.-Convención sobre los Derechos del Niño
11.-Convención Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas
12.-Convención Interamericana contra la Corrupción

B) La pirámide jurìdica (Unidad 1, Punto 12. Introducción al Derecho):


Las normas de un paìs tienen diferente jerarquía, y llamamos pirámide jurìdica a
su ordenamiento jeràrquico.
Segùn lo manda nuestra Constitución Nacional, la pirámide jurídica de nuestro
paìs tiene en su vèrtice superior a dicha Constitución y el “bloque de constitucionalidad
federal”, es decir, los pactos de DDHH incorporados a nuestra constitución en el art 75,
inc. 22. Por debajo vienen los restantes pactos internacionales suscriptos por Argentina.
Debajo de èstos las leyes nacionales, luego las provinciales (que a su vez son parte de
pirámides jurìdicas provinciales, cuyo vértice es la Constitución de cada Provincia) .
Si bien todo pacto internacional es superior a las leyes internas, estos 12 pactos
de DDHH son superiores a cualquier otro, porque son de jerarquía constitucional. Por
lo tanto, toda ley interna debe adecuarse a lo que ellos dicen y debe ser interpretada de
acuerdo a lo que ellos mandan.
C) Organismos de los sistemas universal y regional de protecciòn de DDHH
(Unidad 2, Punto 3, Introducciòn al Derecho):
Nuestro paìs participa de 2 sistemas internacionales de protecciòn de DDHH: el
“universal” (de paìses de la ONU) y el “regional” o “americano” (de paìses americanos
suscriptores del pacto de San Josè de Costa Rica).
El Pacto de San Josè de Costa Rica creò una Corte Interameicana de DDHH,
cuya jurisdicciòn fue aceptada por nuestro paìs al suscribir el Pacto. Esta CorteIDH
emite “Opiniones Consultivas” sobre los distintos artìculos del Pacto, que son la pauta
de còmo los paìses deben interpretar esos articulos.
Las Convenciones de DDHH del sistema universal (entre ellas la Convencion
sobre los Derecho del Niño) generan un Comitè, ante el cual los paìses deben ir cada
tantos años a rendir cuentas de su actuación en lo que està normado por esa
Convenciòn. Estos Comitès (entre ellos el Comiè de los Derechos del Niño) emiten
“Observaciones Generales” sobre los distintos artìculos de la Convenciòn, que tambièn
son la pauta de còmo los paìses deben interpretar esos articulos.
Ambos sistemas emiten tambièn “recomendaciones” sobre còmo los paìses
debieran llevar adelante sus pràcticas en esos temas. Si bien las recomendaciones no
son obligatorias, son de enorme peso polìtico, ya que son la palabra tècnica oficial de
esos organismos sobre las pràcticas.

D) La jurisprudencia como fuente del Derecho (Unidad 1, punto 8.c. Introducción


al Derecho)
La jurisprudencia es el conjunto de sentencias dictadas por los jueces sobre casos
particulares.
La sentencia, por lo general, se limita a interpretar y aplicar la ley. Pero no
siempre hay acuerdo entre los distintos tribunales acerca de la mejor manera de
interpretarla, y mientras no vulnere los derechos de las partes, esto es parte de la debida
autonomìa de los jueces. Pero cuando el tema en cuestión es de mucha relevancia
social y jurìdica, se hace necesario precisar lo que la ley quiere decir.
En dichas circunstancias, es habitual que los tribunales de màxima jerarquía
(Corte Suprema de la Naciòn o Supremas Cortes de las Provincias) dicten en algún
caso particular una sentencia muy completa y explicativa, que analice en profundidad
lo que la ley dice, complemente sus lagunas y precise su alcance.
Si bien estas sentencias son vàlidas sòlo para al caso particular, por la jerarquía
del tribunal que las dicta se convierten en fuente de iluminación para los restantes
tribunales cuando deben dictar sentencia sobre situaciones similares.

E) Còdigo penal y còdigos procesales (Unidad 3, Derecho I – Penal) :


Hay un solo còdigo penal, que rige para todo el paìs y contiene lo que se llama
“normas de fondo”: cuàles son los delitos, cuàles son las penas aplicables y a quiènes
se pueden aplicar las penas (el “què”). Los delitos y las penas que les corresponden son
idènticos en todo el paìs, para todas las personas (mayores de edad y menores de edad).
Cada provincia, en cambio, tiene su propio còdigo procesal penal, que establece
el modo en que se realizarà el proceso penal y se aplicaràn las penas (èl “còmo”).
Hay leyes que complementan el Còdigo Penal, vàlidas tambièn para todo el paìs
(Unidad 4, apunte complementario -Derecho I – Penal) :

F) Delito consumado y delito tentado (Unidad 4, apunte CP parte general, Derecho


I – Penal):
Los delitos pueden ser “consumados” (cuando llega a concretarse el dolo del
autor, es decir lo que èste querìa realizar) o “en grado de tentativa” (cuando por causas
ajenas al autor el delito empieza a ejecutarse pero no termina de consumarse).
La tentativa tambièn està penada, pero tiene una pena inferior a la del delito
consumado (entre un tercio y la mitad de años).

G) Etapas del proceso penal (Unidad 5, Derecho I – Penal):


Son 3:
1.- la instrucción, llamada en Prov BsAs IPP:
Se investiga y colecta pruebas.
2.- el plenario (comùnmente llamado “juicio” o “debate”):
El tribunal escucha a las partes, peritos y testigos. Luego delibera y emite una
sentencia, condenatoria (si considera al imputado culpable) o absolutoria (si lo
considera inocente o si existe duda al respecto).
Si la sentencia es condenatoria, en ella se declara la responsabilidad del
imputado en el hecho investigado (su culpabilidad) y al mismo tiempo se
establece la pena que se le aplicarà. Este es el règimen comùn, que se aplica a los
mayores.
3.- la ejecución:
Se cumple la condena.

H) Libertad y coerciòn personal (Unidad 5, Derecho I – Penal):


El imputado puede transcurrir las 2 primeras etapas del proceso preso o en libertad.
Para determinarlo el tribunal debe evaluar el peligro de que fugue o de que entorpezca
el proceso (destruyendo pruebas, intimidando testigos, etc.).
En la evaluaciòn del peligro de fuga se considera la gravedad del delito, porque se
estima que una persona a quien posiblemente le espere una condena alta por el tipo de
delito, es probable que si se halla en libertad quiera fugar para evadir el juicio.
Por tal motivo los tribunales suelen mantener en prisiòn a los imputados cuando el
delito es grave.
Esta forma de coerciòn personal se llama “prisiòn preventiva” y no es una “pena
anticipada” (recordar que en estas etapas aùn no se estableciò si el imputado es
culpable o no); tiene por ùnico fin asegurar que el proceso pueda ser llevado adelante y
asì hacer justicia (recordar tambièn que en nuestro paìs no se realizan juicios “en
ausencia” respecto de personas fugadas).

J) Culpabilidad (Unidad 3 , Derecho I – Penal): :


Hay quienes cometen conductas contrarias a la ley (tìpicas y antijurìdicas). Aùn
teniendo probado que esa persona cometiò esa conducta, hay un escalòn màs que debe
sortearse para poder imponerle pena: que la persona que cometiò esa conducta sea
penalmente “culpable”.
Por “culpable”, en este caso, no entendemos que efectivamente es esa persona y no otra
quien realizò esa conducta. Por “culpable” entendemos que estaba en condiciones de
realizar una conducta conforme la ley, que era libre de realizarla, y pese a ello no lo
hizo.
Para ser culpable, una persona debe conocer las criminalidad de su acto y ser capaz de
dirigir sus acciones.
En un Estado de Derecho, la culpabilidad es lo que habilita a imponer pena, y èsta debe
ser proporcional a su culpabilidad (Unidad 1 , Derecho I – Penal.)

K) La pena (Unidad 3 , Derecho I – Penal):


La pena es una restricción de derechos de carácter coactivo (por la fuerza, contra la
voluntad de aquel a quien se aplica) impuesta por el Estado al autor de un delito. La
pena siempre priva al autor de un bien.
Nuestro Còdigo penal reconoce sòlo 3 tipos de pena:
-pena de privación de la libertad. Es obligatoria para toda condena de 3 años o màs.
Para las condenas de menos de ese tèrmino, en caso de primer delito, es optativa para
el tribunal (normalmente se concede la pena en suspenso). El Còdigo penal diferencia
entre prisiòn (càrcel) y reclusiòn (càrcel màs trabajos forzados), pero hoy en dìa no hay
diferencia en la forma en que ambas se cumplen, dado que no existen màs los trabajos
forzados.
-pena de multa (se obliga al condenado al pago de dinero)
-pena de inhabilitación (se impide al condenado ejercer un cargo o una profesiòn o una
actividad determinada).

L) Fin de la pena desde la filosofìa del Derecho (Unidad 3 , Derecho I – Penal)


Tradicionalmente el Derecho dice que la pena tiene un doble fin: un fin dirigido a la
sociedad y otro fin dirigido al condenado; en ambos casos el fin es prevenir nuevos
delitos.
El fin dirigido al condenado se llama “fin de prevenciòn especial”: supone que quien
ha sufrido una pena valorarà màs la vida en la legalidad y no querrà volver a delinquir.
El fin dirigido a la sociedad se denomina “fin de prevenciòn general”: supone que el
resto de la sociedad que mira la pena aplicada al condenado se sentirà desalentada de
delinquir y sentirà que estaba en lo cierto cuando hizo el esfuerzo de vivir en la
legalidad.
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EL REGIMEN PENAL JUVENIL:

El presente apunte està organizado del siguiente modo:


En el punto I se mencionan las normas que componen el règimen penal juvenil
En el punto II se desarrolla què dicen esas normas y se explica còmo funciona el
proceso penal juvenil.
En el punto III se desarrolla el fin de la intervención penal respecto de menores de edad
y se explican las diferencias esenciales con el règimen de mayores.

I.- Còmo està hoy compuesta la normativa del règimen penal juvenil:

Las siguientes normas son las que tanto el juez como cualquier otro operador debe
considerar al momento de adoptar una decisión o realizar una intervención en una
cuestión penal que involucre a una persona menor de edad. Por eso, es fundamental
que el trabajador social que interviene en àmbitos en los que pueda encontrarse con
chicos en situación penal las conozca.

1.- Los pactos de DDHH incorporados a nuestra constitución en el art. 75, inc 22,
a cuya luz deben leerse las leyes aplicables a los menores de edad e interpretarse las
situaciones por la que èstos atraviesan.
- Convenciòn sobre los Dchos del Niño
- Pacto de San Josè de Costa Rica .
- Pacto Internacional de Dchos Civiles y Polìticos.
- Pacto Internac. de Dchos Ec. Soc. y Culturales,
- Declaraciòn Americana de los Derechos y Deberes del Hombre
- Declaraciòn Universal de Derechos Humanos
- Si la imputada es mujer: CEDAW (Conv. sobre la eliminación de todas las
formas de discriminación contra la mujer)
- Convenciòn contra la tortura y otros tratos crueles inhumanos o
degradantes
Debemos recordar que nuestra Constitución Nacional y los Pactos de DDHH a ella
incorporados rigen para TODAS las personas, y que esto, obviamente, incluye a las
personas menores de edad.

2.- Las leyes internas:


- Nacionales:
- 26.061 (de protecciòn integral de los derechos de niñas, niños y
adolescentes)
- 22.278 (de règimen penal de la minoridad)
-Provinciales (se mencionan sòlo las de Prov. de BsAs) :
-13.298 (de promoción y protecciòn integral de los derechos de los niños)
-13.634 (de règimen penal juvenil)

Las leyes 26.061 y 13.298 (comùnmente llamadas “leyes de protecciòn integral”) no


hablan de los derechos de las personas menores de edad involucradas a situaciones
penales, sino de los derechos que corresponden a TODAS las personas menores de
edad, lo que obviamente incluye a quienes que estàn en situación de conflicto con la
ley penal. Por eso sus normas tambièn deben ser cumplidas respecto quienes se hallan
en situación penal.
3.- Los instrumentos jurìdicos no vinculantes o “Soft law” (recomendaciones de los
organismos internacionales, que sin ser obligatorias tienen enorme peso polìtico):
-Reglas mínimas de las Naciones Unidas para la administración de la justicia de
menores. Res. 40/33 de 1985 –Reglas de Beijing
-Directrices de las Naciones Unidas para la prevención de la delincuencia juvenil
- Res. 45/112 de 1990- Directrices de Riad
-Reglas de las Naciones Unidas para la protección de los menores privados de
libertad . Res 45/113 de 1991

-Corte Interamericana de DD HH : Opinión Consultiva 17 “Condiciòn


Jurìdica y DD HH del Niño”, Cap IX”
-Comitè de los Derechos del Niño (ONU): Observaciòn General 10 “Los
Derechos del Niño en la Justicia de Menores”.

4.- La Corte Suprema de Justicia de la Naciòn, estableciò en el fallo “Maldonado”


què normas son obligatorias para los jueces al momento de actuar en cuestiones
penales respecto de personas menores de edad.
Lo hizo porque vio que la ley 22.278 tiene gran cantidad de “agujeros” o “lagunas”,
que le dan enorme poder al juez para decidir, con riesgo para los derechos de los
jóvenes, lo que contradice lo establecido en los Pactos de DDHH, y porque los
tribunales en general se resistìan a a aplicar los pactos de DDHH en aquellos puntos en
los que èstos se contradicen con dicha ley.
Por eso, en el fallo “Maldonado” se estableciò que la ley 22.278 tiene que ser
interpretada de acuerdo con:
.las normas de la Convenciòn sobre los Derechos del Niño y de los otros pactos
de derechos humanos incorporados a la Constituciòn
.màs las Reglas de Naciones Unidas sobre justicia penal juvenil. Estas reglas son
recomendaciones desde una òptica de derechos humanos; no son obligatorias, pero la
Corte dice que ellas tienen que usarse para interpretar còmo debe actuarse (Reglas de
Beijing y de Riad) .
.màs las observaciones/opiniones de la Corte Interamericana de DD.HH y del
Comitè de DD.HH. del niño de Nac. Unidas, al que le da el carácter de “òrgano de
interpretación de la Convenciòn sobre Derechos del Niño”.

II.- Què dicen esas normas:

A) Què dicen los pactos de DDHH:


Todos obligan a dar a los menores de edad, en cualquier situación (penal o no penal)
protecciòn, asistencia y cuidado especiales.
Lo que se haga a su respecto, en cualquier situación, tiene que tener por fin su
protecciòn especial.
Què dice la Convenciòn sobre los Derechos del Niño (de aplicación obligatoria
hasta los 18 años)
Desarrolla específicamente què es esa “protecciòn especial”, en todas las àreas de
derechos y establece que en cualquier medida que se adopte respecto de una persona
menor de edad el fin que debe tenerse en cuenta es su “interès superior”.
Hay 2 artìculos bàsicos vinculados a lo penal:
-art 37:
La privaciòn de la libertad es una medida de “ùltimo recurso”. Se puede aplicar
sòlo si las medidas menos gravosas han fallado o si se puede fundar en el caso concreto
por què èstas no son aplicables. Es excepcional y debe aplicarse por el menor tiempo
posible y sòlo ante delitos graves.
-art 40:
40.1. Expresa el fin que tiene el paso del menor de edad por el sistema
penal:
-fomentar su sentido de la dignidad y el valor de las personas (el propio y
el de los terceros)
-fortalecer su respeto por los DDHH y por las libertades de terceros
-fomentar su reintegraciòn social
-fomentar el desempeño de una función constructiva en la sociedad
Todos los actores del sistema penal juvenil estàn obligados a este fin: la policía,
los fiscales, los jueces, las celadores de institutos, etc, todos.
40.2. garantìas procesales (todas las de los adultos, màs las propias por ser
menores de edad)
40.3. obliga a los paìses a promover medidas y procedimientos específicos
para concretar esos fines:
- medidas prejudiciales
- medidas judiciales alternativas a privación de la libertad

B) Què dicen los instrumentos jurìdicos no vinculantes (Soft Law)


Ellos (Reglas de Beijing, Directrices de RIAD, Res 45/113 de Nac Unidas, Opinión
consultiva 17 de la CorteIDH, Obervaciòn Gral 10 del Comitè de Derechos del Niño)
bajan al detalle pràctico y concreto los derechos consinados en los Pactos de DDHH.
Y, en lìneas generales:
-consideran a los niños como miembros de pleno derecho de la sociedad
-reconocen que las personas menores de edad se hallan aùn en proceso de formación
-promueven un enfoque proactivo de la prevención
-establecen el deber del Estado de salvaguardar sus derechos en los procesos penales y
de proveerles un trato especial, como tambièn de establecer polìticas sociales que
favorezcan ese fin
-consideran que proceso penal debe tener un fin socioeducativo
-entienden que los menores de edad deben contar con procesos y actores diferentes de
los de los adultos, especializados en la temàtica penal juvenil.
-entienden que en ese fin socieducativo debe colaborar toda la sociedad
-privilegian la libertad y plantean a su privación como medida de ùltimo recurso, para
casos graves con violencia contra las personas
-exigen la formación especial de los actores del proceso penal, y respecto de los jueces,
su formación en psicología evolutiva y pedagogía

C) Què dicen las Leyes:

-Què dice la ley 26.061 (nacional) de “protecciòn integral de los derechos de niñas,
niños y adolescentes”:
Esta ley no hace referencia a las cuestiones penales, pero recoge los derechos civiles y
polìticos y econòmicos, sociales y culturales de los Pactos y especifica su aplicación a
personas menores de edad en nuestro paìs (a “todas” las personas menores de edad,
significa tambièn, por supuesto, a quienes estàn sujetos a intervención penal).

-Què dice la ley 22.278 (nacional) de “règimen penal de la minoridad”:


Establece normas de fondo, complementarias del còdigo penal y normas procesales.
Como sucede siempre, las de fondo rigen para todas las causas que tramitan en todo el
paìs y las procesales sòlo para las causas que tramitan en el poder judicial nacional.

Las normas de fondo de la 22.278 son las siguientes:

a) divisiòn de las personas menores de edad en 2 categorìas:


Los chicos de menos de 16 años son no punibles (en Provincia de Buenos Aires se los
llama “inimputables”): no se les puede aplicar pena ni van a juicio.
Son punibles entre los 16 y los 18 años: ellos van a juicio y se les puede imponer pena.
Cumplidos los 18 años, ingresan al règimen penal comùn o “de mayores”.
Esto conforma en lo penal, entonces, 3 franjas de personas:
-menos de 16 años: no punibles
-16 a 18 años: punibles, enjuiciados segùn règimen especial (juvenil o de menores)
-màs de 18 años: punibles, enjuiciados segùn règimen penal comùn (de adultos)
Lo que determina la inclusión en cada una de estas categoría es la edad al momento del
hecho, con independencia de la edad que se tenga al momento de la detenciòn o del
juicio.

b) cuando un chico, punible o no punible, està en una situación de conflicto con la ley
penal, el juez debe “disponer tutelarmente” de èl, es decir, restringir sus derechos y los
de sus padres para adoptar las medidas que le parezca mejor “para su beneficio”.
La ley no dice què medidas, ni por cuànto tiempo, ni con què criterio (el juez puede
decidir incluso la privación de la libertad, sin lìmite temporal, nada màs que por
“problemas de conducta”), lo que le da al juez un poder sin lìmite en sus decisiones.
Tampoco diferencia a los punibles de los no punibles.
Ante esta situación, para ajustar la ley a los pactos de DDHH y asì salvaguardar los
derechos de los chicos, sucedieron 2 cosas: la Corte Suprema de Justicia de la Naciòn
dictò el fallo “Maldonado” y la Provincia de Buenos Aires dictò la ley 13. 634,
procesal del règimen penal juvenil. Ambos seràn desarrollados màs adelante.

c) Respecto del chico punible, la sentencia se desdobla:


se declara la responsabilidad en el hecho (es decir que se dice si se lo considera
culpable o inocente) tal como sucede con los mayores, pero si se lo declara responsable
(culpable) no se aplica la pena directamente.
Después de declarada la responsabilidad penal, el tribunal puede dar al joven un
“tratamiento tutelar” y recièn luego determinar la pena a aplicar. La ley no aclara en
que consiste ese “tratamiento” (segùn esta ley, podrìa incluso ser, simplemente, estar
preso), lo que da un poder sin lìmites al tribunal sobre los derechos del joven.
Sobre esto tambièn, para ajustar la ley a los pactos de DDHH y asì salvaguardar los
derechos de los chicos, tanto el fallo Maldonado como la ley 13.634 de Prov. de BsAs
dan pautas especìficas concretas, que desarrollaremos màs adelante.
Respecto de la pena, el juez/tribunal tiene 3 alternativas, que valen para todos los
delitos, sea cual sea su gravedad:
-imponer la pena completa (como a un adulto),
-imponer la pena reducida, como si en vez de un delito consumado hubiese
cometido una tentativa de delito,
-no imponer pena.
Segùn la ley, la decisión del tribunal dependerà de la “necesidad de imponer pena” que
evalùe, teniendo en cuenta las modalidades del hecho y el resultado del “tratamiento
tutelar”. Aquì tampoco la ley aclara còmo se harà esa evaluaciòn, lo que tambièn da un
enorme poder discrecional al tribunal.

Respecto del no punible, èste puede quedar sujeto “tutelarmente” al tribunal (es decir,
con sus derechso suspendidos a disposición del juez), el que puede imponerle medidas,
entre ellas la privación de la libertad, pero no como pena, sino como una medida
“asistencial” (para su mejor cuidado, formación, etc).

-Què dice sobre estas cuestiones de fondo el fallo “Maldonado” de la Corte


Suprema de Justicia de la Naciòn:
-que la ley 22.278 debe interpretada a la luz de los instrumentos de DDHH (las
que mencionamos antes, como obligatorias para el juez), por lo que los tribunales no
pueden adoptar decisiones que contradigan a lo establecido en esos instrumentos.
-que los menores de edad tienen las mismas garantìas que los adultos màs las
propias por su edad
-que el ùnico fin de la intervención penal es la reinserciòn responsable del joven
en la sociedad
-que la culpabilidad de los menores de edad es menor que la de los adultos, por
la inmadurez de su edad, por lo que, cuando se lo condena, la pena debe ser menor a la
que en igual situación se aplicarìa a un adulto (se aplica la que corresponderìa si
hubiesen cometido el delito en grado de tentativa).

-Què dice la Ley 13.298 (Prov. de BsAs) de “promoción y protecciòn integral de los
derechos de los niños”.
Recoge para todos los niños de la Prov. los derechos enumerados en la
Convenciòn sobre los Derechos del Niño y en los Pactos de DDHH (los que rigen
tambièn, obviamente, para las personas menores de edad imputadas de delito).
Establece, por una parte el sistema de protecciòn de derechos: los organismos
(del Poder Ejecutivo) que trabajaràn con el niño, su familia y la comunidad para que
aquel pueda ver sus derechos reconocidos. Este està bàscamente conformado por:
-Servicios Zonales de Protecciòn de Derechos: dependen de la Prov.BsAs.
-Servicios Locales de Protecciòn de Derechos: dependen de los Municipios
-Centros de Referencia: trabajan exclusivamente las medidas ordenadas por los
jueces respecto de menores de edad imputados en causas penales.
La ley establece, por otra parte el fuero civil (entiende en alimentos, guardas,
problemas de tenencia, etc) y el fuero penal del niño. La organización y modalidad de
acciòn de este ùltimo fue posteriormente reglada por la ley 13.634.

La Prov. de BsAs ha hecho un esfuerzo enorme en generar nuevas estructuras y


adecuar las existentes a los stàndares de DDHH respecto de menores de edad. Es cierto
que aùn falta mucho, especialmente en la operatividad de esas estructuras, pero la
concreción de los derechos humanos es una lucha larga, que avanza dificultosamente
en el interjuego que se establece entre la presiòn social y el cambio de cultura, las leyes
en las que se reconocen los cambios sociales y las decisiones polìticas que los
materializan.
En este proceso lento y difícil todos debemos comprometernos, porque no hay
ley ni decisión polìtica que por sì, sin el compromiso de la sociedad, o cuanto menos de
parte de ella, puedan operar los cambios.

-Què dice la ley 13.634 (Prov. de BsAs) de “règimen penal juvenil”,


Se trata de una ley procesal, que establece el modo de llevar adelante el proceso
y las medidas que el juez puede tomar, de conformidad a lo que dicta la Convenciòn
sobre los Derechos del Niño. Establece tambièn los òrganos judiciales que actuaràn
respecto de personas menores de edad.

a.- Respecto del proceso penal

-establece los principios rectores para interpretar y aplicar las normas: la


protección integral de los derechos del niño, su formación plena, la reintegración en su
familia y en la comunidad, la mínima intervención, la subsidiariedad, la solución de los
conflictos y la participación de la víctima; también que el niño asuma una actitud
constructiva y responsable ante la sociedad, adquiriendo respeto por los derechos
humanos y las libertades fundamentales de todas las personas.

-establece los derechos y garantìas de que gozan los menores de edad (los de los
mayores, màs otros, propios)

-establece las medidas que se podràn adoptar durante el proceso:


-prohibición de salir del país, de la localidad en la cual residiere o del
ámbito territorial que el Juez determine;
-prohibición de asistir a determinadas reuniones, recintos o espectáculos
públicos, o de visitar determinados lugares;
-prohibición de aproximarse al ofendido, a su familia o a otras personas;
-prohibición de comunicarse con determinadas personas, siempre que no
se afecte el derecho de defensa;
-obligación de concurrir periódicamente al Tribunal o ante la autoridad
que el Juez determine;
-arresto domiciliario;
-prisión preventiva (sòlo se puede aplicar por 180 dìas, prorrogables por
otros 180 si la investigación es compleja, y sòlo si hay indicios de que el joven
cometiò el delito imputado, si hay motivo para creer que podrà fugar o
entorpecer la investigación y si no resulta posible aplicar otra medida menos
grave).

-respecto de las medidas a imponer para realizar la evaluaciòn sobre la imposición


de pena, establece cuàles son esas medidas:
-orientación y apoyo socio-familiar,
-obligación de reparar el daño,
-prestación de servicios a la comunidad,
-derivación a los Servicios Locales de Protección de Derechos
-imposición de reglas de conducta: asistencia a los centros educativos, de
formación profesional, o de trabajo social; ocupación del tiempo libre en
programas previamente determinados; abstención de consumir drogas;
todas aquellas que, dentro del marco de las garantías, contribuyan a la
modificación de su conducta.
Señala, asimismo el fin de las medidas: fomentar el sentido de responsabilidad
del joven y orientarlo en un proyecto de vida digno, con acciones educativas que
se complementen con la intervención de la familia, la comunidad y el Municipio
respectivo, con el apoyo de los especialistas que el Juez determine.

d.- Respecto de los inimputables:


Cuando se constata la edad, aunque se presuma la intervención del joven, se
cierra la causa penal (sobreseimiento).
Pese a ello, el juez podrà determinar la aplicación de medidas de restituciòn de
derechos y, si el delito imputado es muy grave, se lo puede privar de la libertad.

c.- Respecto de la Organización del fuero penal juvenil:


-Càmaras de Apelación
-Tribunales de Responsabilidad Penal Juvenil (de “juicio”, integrados por 3 jueces,
para delitos muy graves)
-Juzgados de Responsabilidad Penal Juvenil (de “juicio”, integrados por 1 juez, para
los restantes delitos)
-Juzgados de Garantìas del Joven (actùan en la etapa de instrucción)
-Ministerio Pùblico del Joven (fiscales y defensores)
-Cuerpo tècnico auxiliar (mèdicos, psicòlogos y trabajadores sociales. funciones: art
78).
III.- Conclusiòn: el fin de la intervención penal respecto de personas menores de
edad
Es puramente socioeducativo. Volviendo a lo establecido por la Convenciòn
sobre los Derechos del Niño: es ayudar a que el joven pueda desarrollar su sentido del
valor y dignidad de las personas y, desde allì, una funciòn constructiva en la sociedad.
Esto significa trabajar para que lleguen a ser responsables por sus actos, y
hacerlo en el marco de la protecciòn de sus derechos, de un modo que les sirva para
una valorarse y valorar a los otros como sujetos de derecho y asì poder hacer una
inserciòn social positiva. Ese “trabajar” no abarca sòlo a los equipos tècnicos sino a
TODOS los actores del proceso. Las leyes de Prov de BsAs van màs allà y establecen
la “corresponsabilidad” de la sociedad toda (los medios de comunicación, la sociedad
civil, c/1 de nosotros…) en el logro de ese fin.
En razòn de este fin, propio y exclusivo del règimen penal juvenil, es que la
normativa penal y procesal juvenil tiene diferencias importantes respecto de la
aplicable a los adultos:
-Respecto del fin del proceso:
en las decisiones debe siempre considerarse lo que mejor lleva al joven al fin de su
reinserciòn social responsable
-Respecto de la adopción de decisiones en el proceso:
ademàs de los aspectos procesales, se consideran los aspectos psicosociales para
adoptar decisiones.
-Respecto de la privación de la libertad:
es un recurso excepcional y no està determinada sòlo por la gravedad del delito.
-Respecto de la pena:
-a igual delito que el adulto, debe ser menor, porque la culpabilidad juvenil es
menor que la del adulto, dado la etapa de formación en la que se encuentra.
-en tèrminos de filosofìa jurìdica, cuando el Estado aplica pena a un menor de
edad, renuncia al fin de prevenciòn general (destinada a la sociedad que mira) y
subsiste sòlo el fin de prevenciòn especial (dirigida a èl y a su reconciliación con la
legalidad como herramienta para su mejor inserción social).
-puede, incluso, llegarse a no imponer pena aùn con delitos graves, si se advierte
que el fin socioeducativo està cumplido al momento en que el tribunal debe decidir
sobre la imposición de pena.
Nuestro paìs tiene una deuda respecto de la pena:
Hay menores de edad respecto de quienes, al momento de declararlos
penalmente responsables, el tribunal impone medidas por un tèrmino. Transcurrido ese
plazo, cuando debe decidirse sobre la aplicación de la pena, se advierte que el fin
socioeducativo de las medidas no se ha llegado a cumplir.
A estos menores de edad se les impone pena (reducida al grado de tentativa), la
que consiste generalmente en la privación de la libertad, dado que a las personas
menores de edad sòlo puede imponèrseles las penas establecidas en el Còdigo penal.
Segùn nos obliga la Constitución Nacional, tambièn con esos chicos hay que
seguir trabajando el fin socioeducativo durante el cumplimiento de la pena (recordar
que la etapa de ejecución es parte del proceso penal). Debieran, por lo tanto, existir
otras penas aplicables a ellos, alternativas a la càrcel, que favorezcan màs aquel fin.
En tal sentido, la ley 13.634 de Prov. de BsAs prevè algunas formas alternativas
de privación de la libertad: libertad asistida y semilibertad. Pero ellas son sòlo
aplicables a penas muy bajas, que no exigen privación de la libertad, o con el
cumplimiento de la condena muy avanzado (la libertad asistida: 6 meses antes de
cumplir 2/3 de la pena, y la semilibertad, con la mitad de la pena cumplida).

El que un menor de edad que delinque tenga la oportunidad de gestarse un


proyecto de vida digno en nuestra sociedad, hoy es responsabilidad de todos.
No es una cuestión de ideología ni de caridad. En el Estado de Derecho en el
que, por suerte, hoy vivimos, es un mandato al que nos obliga a c/1 nuestra
Constitución Nacional

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