Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
La actividad financiera del Estado forma parte de las finanzas públicas, y se constituye por los
ingresos y gastos del Estado, además, realiza las funciones financieras.
Aspecto político: Se refiere a que en la obtención de los ingresos deberá participar el Poder
Legislativo, en donde se debatirán, se acordarán y se crearán las leyes respectivas.
Aspecto jurídico: Las actividades financieras del Estado deberán estar enmarcadas en las
normas jurídicas que regulen en Estado de Derecho.
Aspecto sociológico: Se refiere a que “el régimen de tributos y de los gastos públicos
ejercerá una determinada influencia, más o menos decisiva, sobre grupos sociales que
operan dentro del Estado (Sol Juárez, 2012:16-17).
Conforme a lo anterior, la actividad financiera del Estado se divide en los siguientes rubros:
1. Obtención: Se lleva a cabo a través de diversos medios que tiene a su alcance, tales como
la explotación de sus propios bienes y el manejo de sus empresas; el ejercicio de su poder
de imperio, con base en el cual establece las contribuciones que los particulares deberán
aportar para los gastos públicos, y por otros medios financieros, que en calidad de
empréstitos, vía crédito interno o externo, obtendrá de otros sujetos.
2. El manejo o gestión de los recursos obtenidos: Se efectúa mediante los diversos órganos
que integran la Administración Pública, los cuales están sujetos a disposiciones legales que
regulan su actuación.
3. Aplicación de los recursos: Constituye las erogaciones que en concepto de gasto público tiene
que efectuar en su gestión.
2. Presupuesto. P.4
Artículo 26
A. El Estado organizará un sistema de planeación democrática del desarrollo nacional que imprima
solidez, dinamismo, competitividad, permanencia y equidad al crecimiento de la economía para la
independencia y la democratización política, social y cultural de la nación. Los fines del proyecto
nacional contenidos en esta Constitución determinarán los objetivos de la planeación. La planeación
será democrática y deliberativa. Mediante los mecanismos de participación que establezca la ley,
recogerá las aspiraciones y demandas de la sociedad para incorporarlas al plan y los programas de
desarrollo. Habrá un plan nacional de desarrollo al que se sujetarán obligatoriamente los programas
de la Administración Pública Federal.
Los efectos del presupuesto, según Gabino Fraga, son los siguientes (2000:333):
Constituye la autorización indispensable para que el Poder Ejecutivo efectué la inversión de fondos
públicos.
Constituye la base para la rendición de cuentas que el Poder Ejecutivo debe rendir al Legislativo.
Descarga responsabilidad al Ejecutivo cuando actúa con la autorización que le otorga quien tiene
el poder de disponer de esos fondos.
Es la base y medida para determinar una responsabilidad cuando el Ejecutivo obra fuera de las
autorizaciones que contiene.
Principio de anualidad: En nuestra legislación, éste principio resulta del artículo 74, fracción IV
de la Constitución Federal que dispone que es facultad exclusiva de la Cámara de Diputados
examinar, discutir y aprobar anualmente el Presupuesto de Egresos de la Federación.
En nuestro país, el presupuesto está integrado por dos documentos: el Presupuesto de Egresos de
la Federación y la Ley de Ingresos de la Federación:
La Ley de Ingresos es la legislación en que deben incluirse los montos de endeudamiento aprobados
que requiera la Ciudad de México y entidades. Como tal, se trata de un acto formal y materialmente
legislativo que determina los ingresos que el gobierno federal está autorizado para recaudar en un
año determinado, al respecto la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) estableció que el
“Presupuesto de Egresos de la Federación es una norma jurídica en sentido formal y material” al
discernir lo siguiente:
Responsabilidad financiera.
Subsidiariedad.
Principio de igualdad.
Autonomía fiscal.
Para cumplir con los fines del Estado se requieren recursos económicos, los cuales se obtiene de las
contribuciones necesarias para cubrir el presupuesto, distribuidas a través del Sistema Nacional de
Coordinación Fiscal, para lo cual, el Estado se vale de la Política Fiscal, que son los instrumentos y
medidas que toma con el objeto de recaudar los ingresos necesarios, para realizar las funciones que
le ayuden a cumplir los objetivos de la política económica general, es decir, lograr el desarrollo
socioeconómico del país.
Los ingresos del Estado se insertan en un documento legal que recibe el nombre de Ley de Ingresos,
donde se incorporan todos los conceptos por los que el Estado tendrá derecho de percibir durante
el ejercicio fiscal, así como las características bajo las que se van a percibir los ingresos. Incluso, se
dan cifras en cada uno de los renglones contenidos en dicha ley, con el fin de que las cantidades que
piensan obtener estén correlacionadas con el Presupuesto de Egresos para el propio ejercicio. La
Ley de Ingreso de la Federación tiene su base legal en el artículo 73 constitucional, fracción VII.
I. Impuestos: Son las contribuciones establecidas en ley que deben pagar las personas físicas y
morales que se encuentran en la situación jurídica o de hecho prevista por la misma y que sean
distintas de las señaladas en las fracciones II, III y IV de este artículo.
II. Aportaciones de seguridad social: Son las contribuciones establecidas en ley a cargo de personas
que son sustituidas por el Estado en el cumplimiento de obligaciones fijadas por la ley en materia
de seguridad social o a las personas que se beneficien en forma especial por servicios de seguridad
social proporcionados por el mismo Estado.
III. Contribuciones de mejoras: Son las establecidas en ley a cargo de las personas físicas y morales
que se beneficien de manera directa por obras públicas.
IV. Derechos: Son las contribuciones establecidas en ley por el uso o aprovechamiento de los bienes
del dominio público de la nación, así como por recibir servicios que presta el Estado en sus funciones
de derecho público, excepto cuando se presten por organismos descentralizados u órganos
desconcentrados cuando, en este último caso, se trate de contraprestaciones que no se encuentren
previstas en la Ley Federal de Derechos. También son derechos las contribuciones a cargo de los
organismos públicos descentralizados por prestar servicios exclusivos del Estado.
Existe además otro tipo de ingresos, denominados no tributarios. Los ingresos no tributarios derivan
de la explotación de los recursos con que cuenta el Estado o de los financiamientos que, por
diferentes vías, procuran completar el presupuesto. De ello resulta la existencia de ingresos
patrimoniales y de ingresos crediticios.
Los ingresos patrimoniales: Comprenden los que percibe el Estado como contraprestación por
servicios que presta y del uso, aprovechamiento o enajenación de sus bienes de dominio privado,
que el artículo 3º del Código Fiscal de la Federación define como productos.
Ingresos crediticios: Cantidades que con el carácter de préstamos son obtenidas por
financiamientos internos o externos, a través de préstamos o emisión de bonos, pero que presentan
la característica de tener que ser reembolsados en su oportunidad y que constituyen la deuda
pública.
Una vez aprobado el presupuesto, se debe aplicar el gasto público en los términos de la
planeación previamente establecida.
Para la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria el gasto público se integra por:
Artículo 4. El gasto público federal comprende las erogaciones por concepto de gasto corriente,
incluyendo los pagos de pasivo de la deuda pública; inversión física; inversión financiera; así como
responsabilidad patrimonial; que realizan los siguientes ejecutores de gasto:
I. El Poder Legislativo
II. El Poder Judicial
III. Los entes autónomos
IV. Los tribunales administrativos
V. La Procuraduría General de la República
VI. La Presidencia de la República
VII. Las dependencias
VIII. Las entidades
Los ejecutores del gasto antes mencionados están obligados a rendir cuentas por la administración
de los recursos públicos en los términos de la presente Ley y demás disposiciones aplicables.
XIV. Gasto comprometido: El momento contable del gasto que refleja la aprobación por autoridad
competente de un acto administrativo u otro instrumento jurídico que formaliza una relación
jurídica con terceros para la adquisición de bienes y servicios o ejecución de obras. En el caso de las
obras a ejecutarse o de bienes y servicios a recibirse durante varios ejercicios, el compromiso será
registrado por la parte que se ejecutará o recibirá, durante cada ejercicio.
XV. Gasto devengado: El momento contable del gasto que refleja el reconocimiento de una
obligación de pago a favor de terceros por la recepción de conformidad de bienes, servicios y obras
oportunamente contratados; así como de las obligaciones que derivan de tratados, leyes, decretos,
resoluciones y sentencias definitivas.
XVI. Gasto ejercido: El momento contable del gasto que refleja la emisión de una cuenta por liquidar,
certificada debidamente, aprobada por la autoridad competente.
XVII. Gasto pagado: El momento contable del gasto que refleja la cancelación total o parcial de las
obligaciones de pago, que se concreta mediante el desembolso de efectivo o cualquier otro medio
de pago.
la Carta Magna vigente, en sus artículos 40 y 41 establece que nuestro país se organiza como una
república representativa, democrática, laica, federal y que el pueblo ejerce su soberanía, por medio
de los Poderes de la Unión (Legislativo, Ejecutivo y Judicial).
Las funciones, facultades y atribuciones de cada uno de esos poderes son de suma importancia para
nuestra materia. El límite de su actuación está previsto justamente en el artículo 49 de la
Constitución Federal, donde se encomienda la creación de las leyes al Poder Legislativo, que se
deposita en un Congreso General, el cual se divide en dos Cámaras: una de Diputados y otra de
Senadores.
En el artículo 73, fracciones VII y XXIX de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos,
se encuentra el sustento legal sobre su facultad legislativa:
El Congreso tiene facultad:
[…]
VII. Para imponer las contribuciones necesarias a cubrir el Presupuesto.
[…]
XXIX. Para establecer contribuciones:
1o. Sobre el comercio exterior.
2o. Sobre el aprovechamiento y explotación de los recursos naturales comprendidos en los párrafos
4º y 5º del artículo 27.
3o. Sobre instituciones de crédito y sociedades de seguros.
4o. Sobre servicios públicos concesionados o explotados directamente por la federación.
5o. Especiales sobre:
a) Energía eléctrica
b) Producción y consumo de tabacos labrados
c) Gasolina y otros productos derivados del petróleo
d) Cerillos y fósforos
e) Aguamiel y productos de su fermentación
f) Explotación forestal
g) Producción y consumo de cerveza
Las entidades federativas participarán en el rendimiento de estas contribuciones especiales, en la
proporción que la ley secundaria federal determine. Las legislaturas locales fijarán el porcentaje
correspondiente a los municipios en sus ingresos por concepto del impuesto sobre energía eléctrica.
Hoy en día se requiere que las autoridades fiscales no sólo tengan competencia para determinar,
cobrar y administrar los ingresos públicos, ya que además, conforme a la normatividad, es necesario
que permita a los titulares de las haciendas públicas lograr una mejor y más armónica relación con
los particulares.
Entre las facultades del presidente de la república se encuentra su intervención en las finanzas
públicas y la política fiscal como instrumentos para el desarrollo económico social, orientando al
Estado desde una economía mixta, conforme a un proceso democrático de planeación.
Federal:
- Secretaría de Hacienda y Crédito Público
- Servicio de Administración Tributaria
Estatal:
- Secretaría de Finanzas
- Tesorería
Ciudad de México:
- Secretaría de Finanzas
- Tesorería
Municipales:
- Tesorería municipal
Por otra parte, los organismos autónomos de la administración centralizada con competencia en
materia fiscal, fundamentalmente son los siguientes:
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) (artículo 5° de la Ley del Instituto Mexicano del
Seguro Social).
El Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) (artículo 2° de la
Ley del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores).
Registrarse e inscribir a sus trabajadores en el Instituto Mexicano del Seguro Social, comunicar sus
altas y bajas, las modificaciones de su salario y los demás datos, dentro de los plazos no mayores de
cinco días hábiles, conforme a las disposiciones de dicha ley y sus reglamentos.
Determinar las cuotas obrero-patronales a su cargo y enterar su importe al instituto.
Permitir las inspecciones y visitas domiciliarias que practique el instituto, las cuales se sujetaran a
lo establecido por la mencionada ley, el Código Fiscal de la Federación y los reglamentos respectivos.
Proceder a inscribirse e inscribir a sus trabajadores en el instituto y dar los avisos a que se
refiere el artículo 31 de la Ley del Infonavit.
Determinar el monto de las aportaciones del cinco por ciento sobre el salario de los
trabajadores a su servicio y efectuar el pago en las entidades receptores que actúen por cuenta
y orden del instituto, para su abono en la subcuenta de vivienda de las cuentas individuales de
los trabajadores previstas en los sistemas de ahorro para el retiro, en los términos de la Ley del
Infonavit y sus reglamentos.
Hacer los descuentos a sus trabajadores en sus salarios,
conforme a lo previsto en los artículos 97 y 110 de la Ley Federal del Trabajo, que se destinen al
pago de abonos para cubrir préstamos otorgados por el Instituto, así como enterar el importe
de dichos descuentos en las entidades receptoras que actúen por cuenta y orden del instituto,
en la forma y términos que establece esta ley y sus disposiciones reglamentarias. La integración
y cálculo de la base salarial para efectos de los descuentos será la contenida en la fracción II del
presente artículo.
Proporcionar al instituto los elementos necesarios para precisar la existencia, naturaleza y
cuantía de las obligaciones a su cargo, establecidas en esta ley y sus disposiciones
reglamentarias.
Permitir las inspecciones y visitas domiciliarias que practique el instituto, las que se sujetarán
a lo establecido por esta ley, el Código Fiscal de la Federación y sus disposiciones reglamentarias.
A efecto de evitar duplicidad de acciones, el instituto podrá convenir con el Instituto Mexicano
del Seguro Social la coordinación de estas acciones fiscales. Atender los requerimientos de pago
e información que les formule el instituto a través de cualquier medio, incluyendo los
electrónicos, que el instituto ponga a su alcance, de conformidad con las disposiciones legales
y reglamentarias correspondientes.
Asimismo, deberán cubrir las aportaciones, aun en el caso de que no sea posible determinar
el o los trabajadores a quienes se deban aplicar, en cuyo caso su monto se depositará en una
cuenta específica que se manejará en los mismos términos que los recursos individualizados del
Fondo Nacional de la Vivienda, hasta en tanto se esté en posibilidad de individualizar los pagos
a favor de sus titulares, en los términos de esta ley. Lo anterior, sin perjuicio de que aquellos
trabajadores que acreditaren sus derechos, se les abonen a sus cuentas individuales de los
sistemas de ahorro para el retiro, los importes que les correspondan.
Presentar al instituto copia con firma autógrafa del informe sobre la situación fiscal del
contribuyente con los anexos referentes a las contribuciones por concepto de aportaciones
patronales de conformidad con lo dispuesto en el Reglamento del Código Fiscal de la
Federación, cuando en los términos de dicho Código, estén obligados a dictaminar por contador
público autorizado sus estados financieros. Cualquier otro patrón podrá optar por dictaminar
por contador público autorizado el cumplimiento de sus obligaciones ante el instituto en los
términos de las disposiciones reglamentarias correspondientes.
Al tener el gasto público el objetivo de cumplir los cometidos del Estado y ser producto de las
contribuciones de los ciudadanos, implica que la sociedad debe estar vigilante de la aplicación del
mismo. Por ello, el control presupuestal tiene como finalidad verificar, por parte de los órganos
encargados del mismo, el exacto cumplimiento del ejercicio del gasto público.
Contabilidad Gubernamental.
Fiscalización.
Es evidente la analogía entre la relación del Derecho Tributario Material y la relación jurídica
penal. En efecto, en ambas materias se trata de ramas del Derecho Público. En ambas se rige
como principio fundamental de carácter institucional el principio de legalidad o de reserva, esto
es, el principio por el cual la ley puede dar origen a la relación jurídica.
En el Derecho Penal dicho principio se expresa con el aforismo latino: Nullum crimen et nulla
poena sine lege, y en el Derecho Tributario paralelamente con el aforismo: Nullum tributum sine
lege (1969:154).
Como elemento común entre la relación tributaria y la relación jurídica penal, nos encontramos
con el principio de legalidad.
El artículo constitucional 31 fracción IV señala que “Contribuir para los gastos públicos, así de
la federación, como de los estados, de la Ciudad de México y del municipio en que residan, de
la manera proporcional y equitativa que dispongan las leyes”.
Principales: Consiste en la percepción o cobro de las prestaciones tributarias, pues las autoridades
fiscales están obligadas a recibir el pago del impuesto.
Accesorias: Son las que tienen por objeto determinar el crédito fiscal, para hacer posible su
percepción, es necesario vigilar y controlar el cumplimiento de la obligación, para evitar posibles
evasiones o defraudaciones fiscales.
Dada la exclusividad de la federación en las materias impositivas señaladas, los estados tienen
limitada su competencia para establecer contribuciones puesto que no deben invadir el ámbito
federal. Lo anterior se corrobora con la lectura de los artículos constitucionales 117, fracciones IV a
VII, y 118, fracción I, que aunados a la baja capacidad económica, la falta de preparación de las
autoridad locales y la difícil geografía de varias entidades, genera una baja recaudación.
Por otra parte, los contribuyentes pueden tener las siguientes obligaciones:
Sustantivas: Consistentes en el pago de la contribución.
Formales: Pueden ser de tres clases:
- Obligaciones de hacer: Como inscribirse al Registro Federal de Causantes.
- Obligaciones de no hacer: No cometer infracciones o delitos fiscales.
- Obligaciones de tolerar: Como el ejercicio de facultades de comprobación.
De los sujetos pasivos con responsabilidad solidaria, se puede realizar la siguiente clasificación
y análisis, de acuerdo con Raúl Rodríguez (2007:150):
Sujetos pasivos por deuda propia con responsabilidad directa: Es el caso del deudor directo
del tributo o su causahabiente, es decir, herederos, legatarios o donatarios a título universal.
Sujetos pasivos por deuda de carácter mixto con responsabilidad directa: Es el caso de las
personas que conforme a la ley pueden disponer libremente no sólo de sus bienes sino también
de los bienes de terceros.
Sujetos pasivos en parte por deuda propia y en parte por deuda ajena, con responsabilidad
parcialmente directa y parcialmente solidaria: Es el caso de los copropietarios y coherederos.
Sujetos pasivos por deuda ajena con responsabilidad sustituta: Es el caso de los sustitutos
legales del deudor directo ya sea voluntario o por ministerio de ley.
Sujetos pasivos por deuda ajena con responsabilidad solidaria: Es el caso de determinados
funcionarios públicos a quienes la ley impone ciertas obligaciones con carácter formal del que
no fueron cumplidas.
A diferencia del Derecho Privado en el que se regulan relaciones entre particulares, las cuales
requieren capacidad de goce y de ejercicio para que su actuación sea válida, en el Derecho Fiscal es
suficiente que el sujeto pasivo cuente con capacidad de goce para ser contribuyente.
Para saber qué sujetos se encuentran subordinados a la competencia de una autoridad municipal,
local o federal, localizar al sujeto pasivo, ubicar e identificar los bienes a efectos de un posible
procedimiento económico coactivo de ejecución y, de esta manera, controlar el cumplimiento de
las obligaciones del sujeto pasivo, se han establecido criterios de vinculación:
Subjetivos: Atendiendo a la nacionalidad, la residencia y
el domicilio.
Objetivos: Como la fuente de riqueza y el establecimiento permanente.
Rodríguez Lobato, citando la definición de Emilio Margáin, señala que la obligación tributaria
“es el vínculo jurídico en virtud del cual el Estado, denominado sujeto activo, exige a un deudor,
denominado sujeto pasivo, el cumplimiento de una prestación pecuniaria excepcionalmente en
especie”.
La obligación fiscal es de Derecho Público, es decir, siempre se satisface y regula conforme a las
normas de esta rama del derecho.
La obligación fiscal tiene su origen en la norma jurídica fiscal o hipotética, y en el Derecho Privado,
su fuente puede ser la ley de un contrato, de un delito, etcétera.
En la obligación fiscal, el acreedor o sujeto activo siempre es el Estado; en la obligación del Derecho
Privado, el acreedor puede ser el Estado o un particular.
La obligación fiscal del sujeto pasivo en una entidad moral se adquiere independientemente a la
de sus integrantes, ya que ésta tiene personalidad jurídica y capacidad económica para adquirir
obligaciones fiscales.
Las obligaciones fiscales tienen como finalidad la recaudación tributaria que, de acuerdo con la
Ley de Ingresos de la Federación, debe ser para sufragar el gasto público.
Puede afirmarse que la obligación tributaria, atendiendo a su fuente, pertenece a la categoría de las
obligaciones ex lege, es decir, surge por determinación de la ley una vez que se realiza el supuesto
previsto por ella, por tanto, en el campo de la obligación tributaria la voluntad del sujeto deudor y
obligado carece de toda relevancia constitutiva de la obligación (Jiménez,1998:241).
2. Hecho imponible y hecho generador. P.6
Por otro lado, es preciso distinguir tres características principales del hecho imponible, a saber:
Previsión en la ley: Conforme al artículo 31 constitucional, fracción IV, donde se señala la facultad
del legislador de crear supuestos de surgimiento de obligaciones tributarias.
Circunstancias en las cuales el hecho generador constituye un hecho jurídico: La ley como fuente
de nacimiento de la obligación tributaria, contiene una serie de supuestos en los que puede incurrir
el contribuyente.
Determinación del nacimiento de la obligación en la ley.
Asimismo, es de considerarse que el hecho imponible puede ser tratado desde diversos puntos de
vista, los cuales se exponen a continuación:
Objetivo: El hecho de que ha sido tenido en cuenta por legislador para el establecimiento del
tributo.
Subjetivo: El hecho imponible no podría quedar totalmente caracterizado sin la atribución del
mismo a un sujeto determinado, es decir, necesariamente tiene que vincularse a alguien, por tanto,
ese alguien y los criterios de vinculación constituyen justo el elemento subjetivo.
Espacial: Todos los hechos imponibles tienen verificación dentro de una circunscripción territorial
determinada, lo que no resulta irrelevante para el derecho tributario.
Temporal: Resulta obvio que el hecho imponible tiene verificación dentro de un espacio temporal
determinado resultando, por lo tanto, el tiempo en la definición del hecho imponible es un elemento
de importancia (Jiménez, 1998:254).
Cuando el sujeto pasivo reconoce sus obligaciones fiscales de acuerdo con la norma jurídica, y lo
manifiesta ante el sujeto activo, se origina el nacimiento de la obligación misma. De acuerdo con
Rodríguez, en el nacimiento de las obligaciones tributarias se pueden identificar las siguientes
características:
Distinguir el momento en que se origina la deuda impositiva de aquellos otros en que surgen
deberes tributarios de tipo formal como la presentación de declaraciones.
Determinar la ley aplicable, que puede no ser la misma en el momento de realización del hecho
imponible y en el de producirse el acta administrativa de liquidación.
Practicar la evaluación de las rentas o de los bienes gravados, con referencia al momento en que
el crédito fiscal surja.
Determinar el domicilio fiscal del contribuyente o de sus representantes.
Determinar la época de pago y de exigibilidad de la obligación fiscal, fijar el momento inicial para
el cómputo de plazos.
Fijar las sanciones aplicables, en función de la ley vigente al momento del nacimiento de la
obligación tributaria (2001:120).
2.2. El sujeto pagador, coobligado, responsable por sustitución y por solidaridad. P.9
En el caso de la obligación fiscal sustantiva, puede suceder que exista un contribuyente que realiza
el hecho generador y que realice el pago directamente, pero también puede existir un sujeto a quien
le fue trasladada la contribución por el fenómeno de la traslación, por lo que será este último quien
realizará el entero correspondiente, de lo que se advierte que existe un contribuyente de derecho
y uno de hecho.
Por su parte, el responsable por sustitución es la persona que por disposición de ley está obligada al
pago de un crédito fiscal, porque tuvo conocimiento de ella y no exigió al responsable el pago
respectivo, como es el caso de jueces y notarios.
“Pago o cumplimiento es la entrega de la cosa o cantidad debida, o la prestación del servicio que se
hubiere prometido”. Ahora bien, la naturaleza jurídica del pago puede resumirse de la siguiente
manera:
Es un acto debido: Constituye un imperativo legal, una vez que ha surgido la obligación.
Es un acto jurídico: Implica un acto volitivo e intencional de extinguir la obligación.
No es un negocio jurídico: “Los efectos del pago jamás constituyen un derivado o consecuencia de
la voluntad del sujeto deudor u obligado” (Jiménez, 2002:249).
Por otra parte, la doctrina indica que el pago debe reunir las siguientes condiciones (Jiménez,
2002:250):
Identidad: La prestación en que consiste el pago se compone exactamente de lo adecuado.
Integridad: La deuda no se entenderá extinguida sino hasta que se hace entrega de la totalidad de
la suma adeudada.
Indivisibilidad: En la medida de que por norma general el pago debe efectuarse en una sola
exhibición, sin que obste para los supuestos de la autorización discrecional para el pago en
parcialidades.
Por otra parte, estudiosos de nuestra materia distinguen varias clases de pago. Algunas de ellas son
las siguientes:
Pago liso y llano: Se lleva a cabo sin objeción alguna. El pago puede ser:
De lo debido.
De lo indebido.
Pago en garantía.
Pago bajo protesta.
Pago provisional.
Pago definitivo.
Pago de anticipos.
Pago extemporáneo.
1.2. Compensación. P. 5
Esta figura jurídica se encuentra definida por el artículo 2185 del Código Civil Federal, en los
siguientes términos: “Tiene lugar la compensación cuando dos personas reúnen la calidad
de deudores y acreedores recíprocamente y por su propio derecho”.
Aplicando el concepto civil de compensación a nuestra materia, se puede decir que es una
forma de extinguir las obligaciones fiscales cuando el fisco y el contribuyente tienen la
calidad de acreedores y deudores recíprocos, respecto de una cantidad específica o líquida
y exigible. Al respecto, la norma especial que opera en Derecho Fiscal se encuentra prevista
en el artículo 23 del CFF
Del artículo 22, se advierte que –a diferencia del concepto civil– en el ámbito fiscal el
legislador fue más allá, pues, además de referirse a la manera en que se presenta esta figura,
indica los requisitos para su procedencia. Considerando que la compensación implicaría la
aplicación de recursos públicos que forman parte del erario, se encuentra justificación del
cúmulo de requisitos previstos por el legislador en el artículo 23 del CFF, para que opere
esta forma de extinción de la obligación fiscal.
Es la extinción de la obligación tributaria, por el transcurso del tiempo y puede operar tanto a favor
de los contribuyentes y en contra del Estado como viceversa. Existen dos tipos de prescripción
(Ponce y Ponce, 2003:237-238):
1. Adquisitiva: Constituye un medio legal para adquirir determinados bienes; por ejemplo, de
acuerdo con el Derecho Civil, una persona que posea un bien inmueble a título de dueño, de buena
fe, en forma pública, pacífica y continua durante un lapso de cinco años, cuando menos, adquiere
el pleno derecho de propiedad sobre el mismo.
2. Liberatoria: Consiste en la extinción de una obligación y del correlativo de hacerla efectiva; por
ejemplo, en Derecho Mercantil, la obligación de pagar el adeudo contenido en un letra de cambio
se extingue por prescripción en un plazo de tres años, a partir de la fecha de vencimiento respectivo
en caso de que, durante dicho plazo, no se haya realizado ninguna acción encaminada al cobro de
la letra de cambio.
Esta forma de extinción de la obligación tributaria se encuentra prevista en el artículo 146 del CFF,
que establece:
El término de la prescripción se inicia a partir de la fecha en que el pago pudo ser legalmente
exigido y se podrá oponer como excepción en los recursos administrativos o a través del juicio
contencioso administrativo. El término para que se consuma la prescripción se interrumpe con cada
gestión de cobro que el acreedor notifique o haga saber al deudor o por el reconocimiento expreso
o tácito de éste respecto de la existencia del crédito. Se considera gestión de cobro cualquier
actuación de la autoridad dentro del procedimiento administrativo de ejecución, siempre que se
haga del conocimiento del deudor.
Cuando se suspenda el procedimiento administrativo de ejecución en los términos del artículo 144
de este Código, también se suspenderá el plazo de la prescripción.
Asimismo, se suspenderá el plazo a que se refiere este artículo cuando el contribuyente hubiera
desocupado su domicilio fiscal sin haber presentado el aviso de cambio correspondiente o cuando
hubiere señalado de manera incorrecta su domicilio fiscal.
El plazo para que se configure la prescripción, en ningún caso, incluyendo cuando éste se haya
interrumpido, podrá exceder de diez años contados a partir de que el crédito fiscal pudo ser
legalmente exigido. En dicho plazo no se computarán los periodos en los que se encontraba
suspendido por las causas previstas en este artículo.
La declaratoria de prescripción de los créditos fiscales podrá realizarse de oficio por la autoridad
recaudadora o a petición del contribuyente.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público podrá cancelar créditos fiscales en las cuentas públicas,
por incosteabilidad en el cobro o por insolvencia del deudor o de los responsables solidarios. Se
consideran créditos de cobro incosteable, aquéllos cuyo importe sea inferior o igual al equivalente
en moneda nacional a 200 unidades de inversión, aquéllos cuyo importe sea inferior o igual al
equivalente en moneda nacional a 20,000 unidades de inversión y cuyo costo de recuperación
rebase el 75% del importe del crédito, así como aquéllos cuyo costo de recuperación sea igual o
mayor a su importe. Se consideran insolventes los deudores o los responsables solidarios cuando
no tengan bienes embargables para cubrir el crédito o éstos ya se hubieran realizado, cuando no se
puedan localizar o cuando hubieran fallecido sin dejar bienes que puedan ser objeto del
procedimiento administrativo de ejecución. Cuando el deudor tenga dos o más créditos a su cargo,
todos ellos se sumarán para determinar si se cumplen los requisitos señalados. Los importes a que
se refiere el segundo párrafo de este artículo se determinarán de conformidad con las disposiciones
aplicables. La cancelación de los créditos a que se refiere este artículo no libera de su pago.
La dación en pago: Consiste en que una obligación queda extinguida cuando el acreedor recibe
como pago una cosa diferente a la que se le debía, pero en igualdad de valor y porcentaje a la
obligación original. Ocurre cuando:
Una vez embargados bienes suficientes mediante el procedimiento administrativo de ejecución, por
el no pago oportuno de a la amoneda de remate, la Hacienda Pública decide adquirir en propiedad
esa clase de bienes en adjudicación, como pago de finiquito de la obligación reclamada (Leal,
2003:160).
La revocación: Es la extinción de los actos administrativos mediante una resolución que dicta una
autoridad administrativa competente para dejarlos sin efecto, cuando en forma injustificada o ilegal
se está requiriendo el pago de un tributo.
El aviso de baja, clausura o cierre de un negocio: En éste la persona (moral o física) ha dejado de
realizar el acto previsto en el presupuesto de hecho y con ello también se interrumpen sus
obligaciones declarativas.
La confusión de derechos: Surge cuando simultáneamente se reúnen en una sola persona las
calidades de deudor y acreedor.
Cuando una persona muere y no deja herederos ni existe persona alguna que tenga derecho a los
bienes, el Estado hereda los bienes; sin embargo, si dicha persona tenía adeudos de un impuesto,
se entiende que por confusión de derechos quedan extintos por configurarse en la misma persona
(fisco) las calidades de acreedor u deudor (Leal, 2003:160).
La novación fiscal: Es un acto consensual entre el fisco y el contribuyente, para lograr el entero de
una prestación impositiva que reviste el carácter de rezago, prácticamente se refiere a los adeudos
causados en ejercicios anteriores y que se pacta la forma y manera de hacer su pago en ejercicios
posteriores. Ésta aplica a las prórrogas o el diferimiento del pago en cuestión a plazos y en
parcialidades.
El convenio o concordato: Refiere a las facilidades otorgadas al sujeto pasivo para realizar el pago
por su elevada cuantía o por su falta de determinación exacta del monto que se adeude, por lo que
“se celebra un convenio en respeto a los principios de proporcionalidad y equidad, lo cual en la
práctica tiene relación con las prórrogas y los pagos en parcialidades” (Leal, 2003:161).
Prestación de servicios: Ante la carencia de recursos por parte del sujeto pasivo, éste ofrece sus
servicios tales como asistencia técnica o profesional con el objeto de cubrir el adeudo fiscal (pago
por prestación de servicios).
S7. Contribuciones y su clasificación.
Como vínculo jurídico, se entenderá que los impuestos tienen su aspecto impositivo ya que
fueron legislados en un marco de legalidad, es decir, para que la autoridad fiscal pueda
recaudar sus recursos es necesario que exista la Ley Fiscal como norma jurídica, de lo
contrario, estaría cometiendo un abuso de autoridad al recaudar algún impuesto (Sol,
2012:57).
Por otra parte, los impuestos pueden tener fines tanto fiscales como extra fiscales:
Impuestos fiscales: Su principal objetivo radica en cubrir los gastos públicos.
Impuestos extra fiscales: Son destinados para proteger la economía nacional.
Las contribuciones son las aportaciones en dinero o en especie que con carácter general y
obligatorio deben hacer al Estado los particulares, bajo un régimen jurídico de Derecho
Público, para cubrir el gasto social, o lo que se conoce como necesidades colectivas
(2004:221).
Son ingresos ordinarios que recibe el Estado en sus tres niveles de gobierno, de conformidad con
los presupuestos anuales y atendiendo al principio de legalidad en los actos de autoridad.
Tienen como destino el gasto público, es decir, se utilizan para cubrir la prestación de los servicios
públicos. En este sentido, destaca lo establecido en el artículo 1° del Código Fiscal de la Federación.
Principio de uniformidad: Este principio establece que a todo sujeto pasivo que colme una
determinada hipótesis normativa debe corresponderle una misma obligación fiscal.
Principio de justicia impositiva: Hace referencia a que las cargas tributarias deberán ser
soportadas entre todos los gobernados.
Principio de seguridad jurídica: En tanto las contribuciones sólo pueden establecerse por mandato
de ley, el sujeto pasivo tendrá una expectativa de los derechos y obligaciones a su cargo.
Principio de legalidad: Las autoridades fiscales están impedidas para realizar actos que carezcan
de fundamento de conformidad con una ley previamente establecida.
Principio de proporcionalidad: Consiste en la capacidad económica de los sujetos pasivos de la
relación, quienes están obligados a contribuir tomando como referencia los ingresos que perciben.
Principio de equidad tributaria: La obligación generada para los sujetos pasivos debe ser la misma
tratándose de un mismo tributo, sin que puedan existir tratos diferenciados.
Toda norma en la que se establezcan contribuciones presenta una estructura que contiene los
elementos esenciales de la obligación tributaria. Éstos se encuentran en todas las
contribuciones legalmente establecidas y son necesarios para determinar la legalidad en los
actos de aplicación de la norma realizados por la autoridad respectiva.
Sujeto activo: Acreedor de la obligación fiscal, quien tiene la facultad y la obligación de exigir
el cumplimiento del pago a cargo del causante de la contribución.
Sujeto pasivo: Es la persona física o jurídico-colectiva, tanto mexicana como extranjera, que
es causante de alguna contribución.
Objeto: Refiere a la materia, actividad o acto que permite el surgimiento de la obligación fiscal.
Base: Refiere a la cuantía de la que se determina una contribución. Para tal efecto, se debe
contar con una unidad de medida, como el precio, para el caso del impuesto al valor agregado.
Cuota: También denominada tasa, es el parámetro o medida que aplicada a la base, da como
resultado el monto de la obligación a pagar.
Tarifa: Relación existente entre la base y la tasa que dan como producto el monto de la
contribución a pagar.
Exención: Señala el supuesto por el que el sujeto pasivo se encuentra liberado de la obligación
fiscal.
Forma de pago: Manera a través de la cual se da por realizado el pago, sea en dinero o en
especie.
Periodo de pago: Lapso de tiempo para extinguir la obligación de pago.
Contribuciones locales: Por otra parte, las entidades federativas tienen su propio marco
normativo anual para el establecimiento de las contribuciones que tienen derecho a recibir
en el ejercicio fiscal anual.
Contribuciones municipales: Son legisladas por congreso local para cada uno de los
municipios de la entidad federativa. En el artículo constitucional 115, fracción IV, se
establece que: “Los municipios administrarán libremente su hacienda, la cual se formará de
los rendimientos de los bienes que les pertenezcan, así como de las contribuciones y otros
ingresos que las legislaturas establezcan a su favor”.
la prestación en dinero o en especie que establece el Estado conforme a la ley, con carácter
obligatorio, a cargo de personas físicas y morales para cubrir el gasto público y sin que haya
contraprestación o beneficio especial, directo o inmediato” (Rodríguez, 1986:61).
- Personales: Tiene como referencia las condiciones personales de los sujetos pasivos de la relación
fiscal.
- Reales: Recaen sobre la cosa objeto del gravamen, sin tomar en consideración las circunstancias
del sujeto pasivo o si es titular de la propiedad del objeto gravado, tal como sucede con el impuesto
predial.
Impuestos indirectos: Este tipo de impuestos gravan los gastos de producción y consumo, de tal
manera que son trasladables hasta el consumidor final, tal como sucede con el impuesto al valor
agregado.
Son contribuciones fijadas unilateralmente por el Estado con carácter general, obligatorio e
impersonal a toda persona física o jurídico-colectiva que reciba servicios públicos de previsión social
para trabajadores, familiares y derechohabientes.
El artículo 2, fracción III del Código Fiscal de la Federación señala que las contribuciones de
mejoras son las establecidas en la ley a cargo de las personas físicas y morales que se beneficien
de manera directa por obras públicas. Se establecen a efecto de recuperar para el Estado los
beneficios diferenciales que por la construcción de obra pública permiten el aumento del valor
del bien raíz. En atención al nivel de gobierno, las contribuciones son:
Federales: Como estudiaste en sesiones anteriores, su fundamento legal se detalla en la Ley
de Ingresos de la Federación para el ejercicio fiscal del año en curso. De entre los ingresos de la
federación destacan dos impuestos: el ISR y el IVA los cuales son relevantes para el ingreso
nacional anual.
Locales: Las entidades federativas tienen su propio marco normativo anual para el
establecimiento de las contribuciones que tienen derecho a recibir en el ejercicio fiscal anual.
Municipales: Son legislados por el congreso local para cada uno de los municipios de la entidad
federativa.
El artículo 2, fracción IV, del Código Fiscal de la Federación define a los derechos como las
contribuciones establecidas en la ley por el uso o aprovechamiento de los bienes de dominio público
de la nación, así como por recibir servicios que presta el Estado en sus funciones de Derecho Público.
Entre las características más importantes de los derechos, se encuentran las siguientes:
Están establecidos por mandato legal de forma unilateral.
La generación de los derechos deriva del uso o aprovechamiento de los bienes de dominio público
o por el pago de los servicios públicos que presta el Estado.
El sujeto pasivo obtiene una contraprestación por el pago de derechos.
Al momento en que se genera la obligación de pagar las contribuciones en comento, surgen varios
efectos. Podemos estudiarlos en dos grandes grupos: los que no se pagan y los que se pagan, los
cuales tienen repercusiones económicas.
Dentro de los efectos de los impuestos que no se pagan se encuentran los siguientes:
- La evasión: Se genera por el incumplimiento en el pago del tributo, incurriendo en delitos, como
la defraudación fiscal o el contrabando.
- La elusión: También implica el incumplimiento en el pago del impuesto, ya sea utilizando al efecto
figuras jurídicas permitidas por la ley, o bien, aprovechando las lagunas de ésta.
Los efectos de los tributos que se pagan, que se refiere a la traslación del impuesto (efecto
al que también se le conoce como repercusión). Consiste en trasmitir la carga de dicho
impuesto a un tercero, a pesar de que ésta le correspondía originalmente al sujeto pasivo o
contribuyente señalado en la ley, a manera de que sea esa otra persona quien resienta en
su patrimonio los efectos económicos que derivan de la transmisión del pago del citado
impuesto. Este efecto se lleva a cabo en tres momentos diferentes, a saber:
1. Percusión: Momento en que la conducta prevista en la norma impositiva se materializa por parte
del sujeto pasivo.
2. Traslación: Transmisión del tributo que el contribuyente realiza hacia un tercero, quien a su vez
puede transferirlo a otra persona.
Este momento a su vez, puede ser hacia adelante (protraslación), que se refiere a cuando el
contribuyente, además del monto por los bienes o servicios que enajena, cobra al consumidor de
éstos el impuesto que originalmente le correspondía a él.
Por otra parte, la traslación también puede presentarse hacia atrás (retrotraslación), que se genera
cuando el consumidor de bienes o servicios, obliga a su proveedor a que le pague el impuesto que
causará en cuanto realice la mercancía adquirida.