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GD5 “LOS INTEGRADOS”

Agustina Arreche: DNI

Alejandro Melendi: DNI 18427231

Bruno Vega: DNI

Virginia López: DNI 29644308

Título: “Ilusión Visual”

Bibligrafía:

 Alain Bergala, La Hipotesis del Cine.


Filmografía:

 Cama adentro
 El método del director Marcelo Piñeyro.

Alain Bergala lo primero que nos dice que el cine es arte, y es en ese preciso momento que nos
enfrentamos a ese tipo de arte, se produce en nosotros ese efecto “mágico” de emocionarnos de
comenzar a vivir esas experiencias como propias y generando diferentes sensaciones.

Ahora, ¿qué son esas imágenes que vemos en el cine o en nuestra pantalla de tv o móvil? Esas
imágenes que vemos son imágenes sucesivas donde una fotografía es sustituida rápidamente por
otra imagen, sin proyectar luz en la pantalla durante el cambio de cuadro fotográfico. Podemos
decir que una película es sólo una secuencia de distintas fotografías en reposo y por lo tanto, los
movimientos que vemos cuando se proyecta una película son imágenes “aparentes”

En esta interacción dinámica de experiencias perceptivas que las “vemos como propias” nos
sumergimos de lleno con las historias que cuentan esas fotografías.

Estos regímenes visuales como expresa Ines Dussel, contienen elementos políticos,
epistemológicos, estéticos, éticos. En el cual suponen una pedagogía que hay que enseñar a
conocer, a mirar reflexivamente, a distanciarse, a convertirse, a convertir en espectador critico; y
no ser un espectador atrapado. En ese mundo de imágenes y sensaciones. Convertirnos en un
sujeto visual que “mira” intencionadamente, interpelando al sujeto que nos muestra.

Al tener estas experiencias de “mirar” el cine y romper con esa idea de que cuando Vemos una
película es para pasar el rato y nada más. De ser protagonistas al dar nuevos sentidos y
reinterpretarlos nos dimos cuenta por ejemplo con la película Bolivia que en la sociedad implica un
nosotros, que se recorta a partir de mis diferencias con respecto a Otros excluidos de determinada
identidad social, y dar el debate con amigos y familiares ya que el tema de total actualidad.

Cama Adentro del director Jorge Gaggero es una película que recomendamos que a cada uno de
nosotros nos llega de muy cerca y también se pone en juego de una manera u otra los relatos de
las autobiografías laborales que fueron atravesadas por la crisis del 2001.
Esta película describe la relación entre Beba, señora de clase acomodada devenida a menos, y
Dora su fiel mucama “cama adentro”, que trabaja en el hogar de Beba desde hace 30 años. La
señora como dice Beba sin experiencia laboral y en la ruina debe comenzar un derrotero del cual
nunca se imaginó ni está preparada. El director ofrece, desde el comienzo el punto de vista de las
dos protagonistas donde se ven los profundos contrastes que las diferencian, los espacios que
ocupan los modos de hablar, de vestirse. Se retrata a dos clases sociales que paradójicamente se
muestra que la mucama tiene más ingresos que la Sra. Beba.

Se apela a elementos de la comedia romántica para dar con los vaivenes en la relación de ambas
mujeres, en donde la canción “Te extraño mi amor” insinúan esta separación de la patrona y la
empleada.

A lo largo de la película hay un reconocimiento del Otro siendo la intermediaria la “crisis” de este
acercamiento al otro y nos animamos un acercamiento de las “clases sociales” que
tradicionalmente han permanecido alejadas.

El Método es la segunda película recomendamos porque sintéticamente nos muestra la teoría


Darwiniana del capitalismo más salvaje y despiadado. Película del director Marcelo Piñeyro; nos
relata una historia de un grupo de 7 personas son aspirantes a un puesto ejecutivo y se presentan
a una prueba de selección de personal de una multinacional.

Es un relato que nos presenta un clima de constante tensión, competividad, miedo, desconfianza,
falta de escrúpulos, dentro de un espacio totalmente reducido se producirán las disputas, se
revelaran secretos y se destaparan pasados.

Es una película que expone diferentes aspectos psíquicos de las personas a los momentos de
buscar un trabaja o un puesto laboral. Y que constantemente nos está interpelando en estos
aspectos psicológicos.

“Mi biografía laboral comienza cuando una de mis hermanas comienza a trabajar, por lo
tanto necesitaba una niñera para mi sobrino/ahijado. Con gusto acepté ser su niñera, ya
que me encantaba pasar tiempo con mi primer sobrino. Ésto comenzó en el año 2007
cuando también cursaba la secundaria. En el 2010 comencé a estudiar el Profesorado en
Educación Inicial, el cual terminé en 2013. En ese año realicé mis dos primeras
suplencias en un Jardín Parroquial de Pueblo Santa María (partido de Cnel. Suárez). Ese
mismo año, mi hermana deja de trabajar y yo empiezo a pensar en poder trabajar de "lo
mío", cosa que costó y a veces en el día de hoy sigue costando, ya que en Coronel
Suárez hay una gran cantidad de maestras jardineras. Como no logré tomar ninguna
suplencia comencé a buscar trabajo...me gustaba tener mi plata!! Así fue como
rápidamente conseguí trabajo como cajera en una reconocida carnicería de la ciudad.
Aprendí mucho y descubrí que me gustaba mucho la atención al público. En el 2015
buscando estar mejor laboralmente, comencé a trabajar en un zapatería de una fábrica
local. Primero, en atención al público y luego, como cajera.
En el 2016, luego de un pasar por un momento personal muy duro, mis patrones me
ofrecen trabajar en la administración de la fábrica de zapatillas. Sin dudar, acepté...horario
de corrido, trabajo de lunes a viernes y lo mejor de todo..además de la docencia, lo que
más me gusta es estar entre los papeles!!
Es el día de hoy que sigo trabajando en la administración (en este momento me encuentro
de licencia, porque hace tan sólo dos meses fui mamá), aunque sigo apostando en la
educación y confiando en que llegará el momento en que pueda dedicarme a la
docencia.” Antonella Rohwen
Hola a todxs!!! Mi relación con el mundo del trabajo comienza, ahí nomás, cuando termino
la escuela secundaria. En el año 1997 me mudo a Mar del Plata para cursar mis estudios
universitarios, años difíciles si los hubo. Al mudarme necesita imperiosamente conseguir
empleo porque era la única manera que yo podría solventar los gastos que me permitieran
estudiar. En mi familia el trabajo no abundaba, los recursos económicos tampoco, postales
de época en un hogar de clase media. Luego de enviar curriculum a todas las agencias de
empleos, recorrer comercios, sin referencias posibles y con tan solo 18 años recién
cumplidos, agotada de buscar comienzo a trabajar como niñera de una nena, el sueldo no
alcanzaba pero algo era, aunque no lo suficiente para permanecer en la ciudad y
estudiando, por lo tanto volví a mi ciudad natal.
En Pehuajó comencé a estudiar el profesorado de Matemáticas mientras que por las tardes
atendía una pinturería que poseía artística. Ahí aprendí de tonalidades y algo de pinturas,
diluir, proporciones, etc.; y también aprendí la diferencia entre empleo formal y en negro,
mi sueldo era menor, no poseía obra social, ni aportaba para la futura jubilación porque mis
empleadores preferían no registrar mi trabajo y ante tan poco empleo en un contexto de
crisis tampoco yo exigía que lo hicieran. Trabaje en ese lugar aproximadamente 2 años y
medio; poquito tiempo antes de diciembre del 2001 me despiden, era la crónica de un final
anunciado, ya nadie compraba pintura.
En el 2003 me mudo a Olavarría y comienzo a trabajar en un local de Movistar, era un
emprendimiento familiar, ahí pude ser testigo de cómo avanzó la tecnología celular y la
reactivación de un país, eran los años de Néstor Kirchner como presidente. Ese trabajo lo
realizo durante algunos años hasta que resuelvo priorizar el estudio y terminar mi carrera.
Al recibirme comprobé que los primeros años no conseguiría la suficiente cantidad de horas,
por lo tanto, decidí trabajar nuevamente en administración, esta vez, en una empresa de
transporte. Este empleo fue el que más me ha costado en mi vida, en él aprendí que muchas
veces el trabajo duele y pesa tanto que se siente en el cuerpo.
Mi primer trabajo en educación fue un segundo año, en una escuela a la que asisten
sectores vulnerables de población, esas a las que no quiere ir nadie. Recuerdo que me
tomo las horas un amigo, un día de lluvia terrible, según él era el único que iba a ir a tomar
esas horas en ese colegio con el día de “siesta”, yo mientras tanto, en el transporte ansiosa
esperando el mensaje de “son tuyas”. Luego, al igual que muchos profesores/as, ir
sumando un poquito de horas cada año y sostenerlas hasta titularizar.
El año pasado participe de un equipo técnico de asistencia a las escuelas en el abordaje
de la ESI, trabajo que me encantó y del cual aprendí un montón, incluso cuanto nos falta
en educación para cumplir con la Ley. En la actualidad trabajo en escuelas secundarias en
el ciclo superior y en el profesorado de matemática.
Mi trayectoria laboral, relatada hasta aquí, me ha permitido valorar el privilegio de poder
trabajar y realizar todos los días lo que se ama, también, me permitió reconocerme como
trabajadora de la educación con todo lo que eso significa desde el sentir colectivo y
sindical. Jorgelina Piccinini
Mi biografía laboral comienza antes de poder "entrar al sistema educativo", cuando trabajé
en una distribuidora de ropa que pertenece a mi familia, aunque lo hice sin ganas y por
necesidad, y eso se notó en que pasados esos dos interminables años no aprendí casi
nada. Cuando los y las demás empleados/as y familiares conseguían en poco tiempo
conocer los artículos de las prendas, armar pedidos, facturar, atender clientes/as, yo solo
me limitaba a hacer el trabajo físico, ese que no le gusta a nadie yo lo hacía contenta
porque no requería implicarme fuertemente en el negocio. Acarreaba cajas pesadas todo
el día. En el fondo era una manera de decirle a mi familia que mi paso por ahí era
temporal, que ni bien pudiera me iba a trabajar "de lo mío", y no seguía con esa tradición
como la mayoría de mis hermanos y mis primos.
Y así fue, cuando pude me fui y comencé a trabajar como profe de Literatura, con unas
pocas horas en distintas escuelas, la mayoría fuera del casco urbano o aquellas
estigmatizadas en las que nadie quería trabajar.
También trabajé cinco años en un programa socio educativo provincial, llamado "Patios
Abiertos",que funcionaba en uno de los barrios más vulnerados de mi cuidad, Olavarría,
primero como tallerista y después como coordinadora. Los sábados por la mañana los
niños y niñas del barrio se acercaban para hacer talleres de arte, literatura y educación
física, además de merendar y almorzar. En otros barrios, trabajé dando clases de apoyo
escolar solidario y como coordinadora de una sede de Plan Fines, de manera no
remunerada en los dos casos.
El año pasado me desempeñé como docente de uno de los módulos del "Postítulo en
Educación en Contextos de Encierro" que abrió en la cuidad de Bolívar, destinado a
aquellos/as docentes que trabajan en escuelas que funcionan dentro de unidades
penales. Ésta fue una experiencia laboral totalmente nueva para mí, ya que nunca había
trabajado en educación de adultos/as.
Actualmente poseo horas titulares en el turno mañana en una de las primeras escuelas en
las que trabajé, de educación Técnica, como profesora de Prácticas del Lenguaje, y
también estoy a cargo del Departamento de Comunicación de dicha institución. A la tarde,
trabajo en un Centro de Educación Complementaria (CEC), en el que estoy a cargo de un
grupo de niños y niñas de 10 a 12 años. Andrea Arizaga.
En cada una de las biografías vemos rápidamente que están atravesadas por la crisis, la
necesidad al igual que en ambas películas. Los puntos comunes entre las biografías y las
películas están en los aspectos psicológicos de la búsqueda de un trabajo de resignar
pretensiones, de sobreponerse a las adversidades, la flexibilidad laboral del
neocapitalismo y la mayor coincidencia a nuestro entender y de largo debate en la
búsqueda de la realización personal y es en este punto es la utpoia que nos pone a
caminar a transitar el camino de la ardua tarea de encontrar un trabajo digno, es esa
“Ilusión” que motoriza nuestra vida.
La pregunta que surgieron a lo largo de la cursada en constante fueron si lo podemos
decir humildemente fueron desde el orden filosófico.
 ¿Qué estoy dispuesto hacer o hasta donde “soy capaz de vender” mi alma con tal
de conseguir trabajo? Bruno Vega.
 ¿Cuál es mi precio con tal de conseguir lo que quiero? Alejandro Melendi.
 ¿Cómo nos cuesta reconocernos en el declive económico en el caso de Beba en
la película Cama Adentro?, ¿La riqueza nos garantiza la felicidad? Virginia López.
 ¿Cuánto dinero necesito para ser feliz? ¿Cuánto tiempo de mi vida estoy
dispuesta a dar en pos de ganar más dinero? Agustina Arreche.

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