Sie sind auf Seite 1von 3

DILEMAS ÉTICOS Y EMPRESARIALES

Pablo Riba Gargollo, Armando Reygadas

Dilema 1
MATERIAL DE DESECHO SUPUESTAMENTE
PELIGROSO

Hace un tiempo, tomé unas muestras de unos


contenedores en la propiedad de un cliente para la
consultoría en ingeniería ambiental donde
trabajaba. Las pruebas mostraban que podrían ser
materiales peligrosos, pero faltaba el análisis.

Pedí instrucciones sobre los pasos a seguir. Mi jefe


me indicó que reportara al cliente las muestras y no
realizara el análisis; propuso sugerir retirar el
desecho por la posibilidad de ser alto riesgo y no
avisar a las autoridades.

¿La empresa es responsable al no revelar detalles


del contenido?

LOS ASESORES SUGIEREN

1. Estrictamente, la responsabilidad de una


empresa es realizar la tarea a la que se compromete y hacerlo con apego a la ley, incluidas las
disposiciones ambientales y de salud pública vigentes. Pero con la sensibilidad social actual en
estos temas, ecología, cambio climático, trabajo de menores, etcétera, el proyecto responsable
de una empresa debería parecerse al lema: Ayuda a otros para ayudarte a ti misma.

Así también, todo científico o investigador debería tener un compromiso con la búsqueda de la
verdad que le lleve a «agotar» la línea de investigación por el mero valor de la verdad. Sobre
todo cuando el análisis de las muestras no conlleva un gasto excesivo y el no hacerlo parece
conducir a una ignorancia voluntaria o de complicidad.

En mi opinión, el jefe de esa empresa de consultoría cumplió, aunque tibiamente, su cometido


al avisar lo que realmente se sabía sobre las muestras; pero sin duda debería haber
persuadido a su cliente de la necesidad de realizar el análisis y después proceder en
consecuencia.

La empresa en la que usted trabajaba, y que por misión constitutiva debería ayudar a otras a
cumplir su responsabilidad corporativa, no cumplió bien con la propia responsabilidad social
corporativa.

ARMANDO REYGADAS ABOGADO Y CONSULTOR DE EMPRESAS

2. La responsabilidad ética en cuestiones que se refieren al medio ambiente va tomando carta


de naturalidad en muchos sectores y es, sin duda, un valor positivo de nuestra sociedad.
Valorar lo éticamente correcto en esta materia no resulta fácil. La sentencia «protege el
ambiente» no puede ser la premisa fundamental para resolver las cuestiones. Ante todo está el
hombre y su realización personal. El punto es fundamental para evitar anteponer los «derechos
de animales, plantas y minerales» sobre los de la persona. Puede resultar práctico comparar
los perjuicios humanos que resultarían de perjudicar el medio ambiente, con los perjuicios
humanos que resultarían de restringir la actividad que daña el medio ambiente.
En el caso propuesto, la entrega del reporte y la sugerencia de un análisis completo de ese
material, así como su retiro si se comprueba que es de alto riesgo, es suficiente para actuar
con responsabilidad ética. Sólo estaría obligado a revelar los detalles si se pusiera en grave
riesgo a la población.

PABLO RIVA GARGOLLO ABOGADO Y EXPERTO EN ÉTICA DE LA EMPRESA

Dilema 2
PERMISO PARA ROMPER UNA REGLA AMBIENTAL

Trabajo para una entidad de protección al medio ambiente. Hace unas semanas me solicitaron
elaborar un permiso urgente para la construcción de una planta eléctrica en una fábrica. Un
aspecto del proyecto no cumple con las normas vigentes de protección ambiental. Expedir tal
permiso implicaría la suspensión de mi licencia, por lo que me negué a hacerlo. Un compañero
afirma que la situación no rompe las reglas. Una semana después me enteré de que se
autorizó la construcción. ¿Debo hacer algo al respecto?

LOS ASESORES SUGIEREN

1. Sorprende la desigualdad de criterio entre personas tan cercanas y con la misma misión. En
este caso también estamos ante una situación de «agotar la verdad», llegar al fondo de la
cuestión. La pregunta es: ¿rompe o no rompe ese proyecto las normas ambientales? Y en caso
de que las rompa, ¿podría modificarse el diseño o solucionarse el conflicto entre la norma y el
proyecto de generación de energía? ¿Cabe aquí alguna aplicación más benévola de las
normas vigentes?

Si el proyecto fue aprobado tan rápidamente es posible que el conflicto se haya resuelto con las
oportunas modificaciones. Si no fuera así, y nos encontráramos ante un ilícito, debería usted
evaluar su presencia en ese lugar: las posibilidades reales de vivir una verdadera
responsabilidad social y sus recursos o medios efectivos para hacerlo.

También podría evaluarse la viabilidad de éxito de una denuncia del ilícito: una participación a
los medios, comunicar el tema a alguna ONG con compromiso social, etcétera, o el recurso a
otro organismo de los que monitorean el funcionamiento de las entidades que supuestamente
deberían proteger el medio ambiente. Este tipo de acciones, a veces heroicas, sin duda
terminan por crear una conciencia social.

ARMANDO REYGADAS ABOGADO Y CONSULTOR DE EMPRESAS

2. Las normas de protección ambiental son, en principio, los mínimos requeridos en una
determinada sociedad para salvaguardar el desarrollo de la persona. Es inevitable que una
actividad industrial perjudique el ambiente de alguna manera. Pero, en ocasiones, restringir la
actividad que daña el medio ambiente es más perjudicial por las fuentes de trabajo que se
dejan de generar o se suprimen.

En el caso, no se señala la manera en que se consiguió la autorización. Es de suponer que


alguna persona se prestó al cohecho. Debe tenerse en cuenta que no todo lo jurídico es moral,
ni toda acción moralmente correcta está asentada en la legislación. Si la construcción de esa
planta eléctrica en la fábrica en cuestión era fundamental para mejorar las condiciones de
trabajo o para generar más empleos, probablemente estemos en un caso en el que aparece
claramente que es más ético actuar en beneficio de los hombres que cumplir con normas
humanas imperfectas. Evidentemente habría que analizar los riesgos que puede llevar no
cumplir con todas las especificaciones.

PABLO RIVA GARGOLLO ABOGADO Y EXPERTO EN ÉTICA DE LA EMPRESA

Das könnte Ihnen auch gefallen