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Universidad Autónoma de Ciudad Juárez

Instituto de Ciencias Sociales y Administración


Departamento de Ciencias Sociales

Democracia y participación
ciudadana

Luis David Rincón Loya


148571

Competencias para el ejercicio de la


ciudadanía con enfoque de género
Reporte de lectura
Agosto de 2018
Resumen.

En el presente documento se plasma el reporte de lectura resultante del análisis del texto
“Democracia y participación ciudadana” (Orozco, 2001), reflexionando los temas tratados
de forma crítica con el propósito de comprenderlos de la mejor manera y emitir una
opinión propia al respecto de estos.

Reporte de lectura.

A pesar de que no puede cuantificarse de forma exacta el grado de democracia en un


sistema, es posible estimar qué tan democrático es en base a ciertos indicadores. Uno
de los indicadores más significativos que evidencian la democracia en un sistema, es la
participación de sus ciudadanos. Ya que, como Orozco lo indica, “sin participación
ciudadana, la democracia pierde su razón de ser, representatividad y legitimidad” (2001),
estableciendo así la directa conexión entre democracia y participación ciudadana, así
como la forma en que depende una de la otra.

Sobre la democratización de la sociedad, es interesante la forma en que se


establece la necesidad de esta, a pesar del contexto de globalización en el que se vive
actualmente, lo cual es abordado por el autor en el texto que fue publicado hace ya varios
años pero cuyas ideas continúan vigentes, ya que la percepción de es imperativo
establecer de forma adecuada un orden democrático es un tema que tiene gran
relevancia aún en la actualidad y que en muchos países continúa en vías de desarrollo,
aunque algunos han alcanzado ya la madurez, lo cual no indica de ninguna manera que
estos países estén exentos de problemas antidemocráticos como la desigualdad tanto
económica como social.

En lo que se refiere a la práctica de la democracia en cada individuo, es debido


resaltar que democracia y participación ciudadana no siempre son sinónimo de política,
la cual es uno de los principales componentes, pero sin limitarse a incluir otros aspectos
de la vida en sociedad, ya que, como Orozco lo indica, “no todos los individuos tenemos
inclinaciones de participar en política” (2001), aclarando también que la participación
ciudadana no se limita al hecho de ejercer el sufragio, ya que este es solamente uno de

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los numerosos derechos y obligaciones concedidos a los integrantes de una sociedad
democrática.

Existen múltiples formas de participación ciudadana que van desde ejercer los
derechos más básicos hasta la participación por un cargo público, y parte fundamental
de esta participación consiste en conocer los derechos y obligaciones para así contribuir
a la democracia mediante el ejercicio correcto de estos.

Un aspecto relevante del texto es la relevancia que se da a la facilitación de


condiciones que permitan el desarrollo de la participación ciudadana en Centroamérica,
lo cual permite relacionar los temas tratados con gobiernos en específico, como el de
Venezuela, que, si bien pretende ser una democracia, cuenta con aspectos
antidemocráticos que incluso han llegado a caer a lo largo de su historia en el
autoritarismo. En cambio, en América del Norte existen gobiernos democráticos más
desarrollados, como el estadounidense y el canadiense, lo cual establece un punto de
comparación con el gobierno democrático en México, el cual ha alcanzado cierto grado
de madurez, pero ha presentado problemas graves como la abstención al voto, producto
de especulaciones de problemas que podrían ser aún más graves, como casos de
corrupción en el sistema electoral. Tales problemáticas han dañado el nivel de
participación ciudadana en México, y se encuentra en proceso de recuperación.

Desde mi punto de vista, es de gran importancia que el individuo que vive en


sociedad democrática sea consciente de la enorme responsabilidad que conlleva ser
integrante de tal sociedad que busca vivir en democracia, no limitándose, pero sí con
una razón más fuerte cae esta responsabilidad sobre las personas que se desenvuelven
en un sistema democrático cuya madurez aún no ha sido alcanzada. Considero que una
democracia más fuerte es construida cuando el pueblo tiene un mayor poder, pero este
empoderamiento no depende solo de ciertas personas, como los gobernantes, sino de
cada individuo, ya que para ejercer algo tan importante primero debemos estar
informados para realizarlo de forma óptima.

Referencias documentales.

Orozco, Manuel. “Democracia y participación ciudadana”. Magazine. 2001.

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