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Clash Royale para Android

Recientemente apareció en versión Android el clásico de Supercell que suma


adeptos en todas partes del mundo: Clash Royale.

Para quienes no lo conocen debemos comenzar diciendo que es un juego de


cartas. Pero no es un simple juego de cartas sino que pone a prueba nuestro
ingenio para conseguir con la poción del mazo que hemos recibido la mejor
estrategia para derrotar a nuestro enemigo.

Clash Royale se basa en el anterior juego de Supercell Clash of Clans, y las cartas
guardan relación con los personajes que salen en el antecesor. Clash of Clans
explotó hace años y los creadores quisieron aprovechar el momento, sin embargo,
al final Clash Royale superó rápidamente a su antecesor. Si bien parecía que
venía a explotar a la gallina de los huevos de oro y a sacar ventaja de la primera
versión, la segunda versión llegó para quedarse.

La razón está a la vista, ya que su modo de combate, su forma de juego atractiva


y su facilidad de juego han cautivado adeptos en todo el mundo. Encima de todo
esto, el juego además consume pocos datos.

Clash Royale para Android brinda la posibilidad de jugar contra tus amigos y esto
lo vuelve aún más atractivo. Muchos grupos de amigos se conectan a la vez para
medir sus capacidades en el campo de batalla.

Las cartas se ponen en uso con una estrategia que consiste en diseminar los
personajes a lo ancho del campo de batalla y elegir qué objetivo atacaremos en
primer lugar al mismo tiempo que defendemos nuestras posiciones de ataques
certeros por parte de nuestros enemigos.

El juego se gana cuando se consiguen coronas producto de haber derrocado el


puesto del rey enemigo. No es una tarea sencilla puesto que a medida que
avanzamos de nivel el acceso a dicha torre se ve más dificultoso. Se deben
desplegar distintas estrategias para alcanzar este objetivo.

Con las coronas ganamos cada partida, a su vez podemos conseguir copas. A su
vez, también iremos sumando cofres con monedas que nos brindarán distintas
posibilidades de uso. Por ejemplo, las monedas de oro van a ser fundamentales
para subir el nivel de las cartas.

Cada carta tiene hasta doce niveles. Y lucharemos en uno de cuatrocientos


escenarios posibles. A medida que transitemos por los distintos escenarios, la
estrategia a aplicar deberá ser más compleja y la velocidad de reflejos para atacar
sin dejar de defender la posición propia será fundamental.
Luego de unas partidas de entrenamiento podrás elegir un nombre y luego de
pasar una serie de escenarios podrás formar parte de un grupo, es decir, un clan.
Esto último es fundamental para ganar experiencia del mismo modo que subir el
nivel de las cartas que posibilitará ganar experiencia también.

Se trata de un juego cuidado y bien diseñado que no tiene su éxito en vano.


La profundidad del juego es notoria y no es fácil reconocerla a simple vista. Basta
con jugar un par de partidas para descubrir en Clash Royale para Android mucho
más que un juego de naipes.

La decisión sobre cómo y cuándo atacar está en nuestras manos a partir de


dichas cartas que representan distintos tipos de ataques: gigantes, flechas,
bombas, dragones, y todo lo que puedas imaginar de un universo medieval.

La jugabilidad es accesible puesto que solo hay que decidir qué carta jugar. Una
vez puesta sobre el terreno se desplaza automáticamente y ataca con todo su
potencial. Pero cuidado: ¡tu contrincante también ataca!

Las partidas se vuelven ágiles ya que duran pocos minutos y sin darte cuenta,
jugarás varias de ellas sin aburrirte. Tal vez sea por esto que se habla de él como
un juego adictivo, los usuarios pierden noción del paso del tiempo.

El gran inconveniente del juego es que al acumular varios cofres, nos quedamos
sin espacio para almacenar más. Por fuera de ello, el juego es dinámico y la gran
variedad de cartas lo vuelven interesante.

Se trata de un juego simple, está diseñado especialmente para dispositivos


móviles. Resulta muy cómodo de jugar y pasan los minutos sin percibir el paso del
tiempo. No todos los juegos de estrategia pueden darse el lujo de afirmar lo
mismo.

Puede descargarse desde la Play Store de forma gratuita. También puede


probarse el juego previo a su descarga. Tiene un peso de 78mb, y más de 100
millones de descargas. Las reseñas hablan por sí mismas con una puntuación de
4 estrellas y media.

Los requisitos mínimos son una Ram de 500; una resolución de pantalla de 800 x
480 pixeles; Sistema operativo Android 4.0 o superior y una buena conexión a
internet. Por supuesto que son mínimos, para optimizar el juego se recomiendan
características mayores: 1 Gb de Ram y una resolución de pantalla un poco mejor.

Incluso si el juego llegara a colgarse no desesperes. Esto se debe a que cada vez
juegan más usuarios en línea y algunas veces el juego entra en mantenimiento
para producir mejoras. La insignia: “Maintenance break” es la señal de que están
mejorando el juego, cosa que ocurre semana a semana. Por ejemplo, hacer más
fuertes algunas cartas.

Finalmente, sin tener un gran atractivo en materia de gráficos, el juego es una


obra súper atractiva e interesante. Los escenarios son atractivos y el tiempo pasa
volando cuando juegas porque quedas atrapado en la personalidad que tiene el
estilo visual del mismo. Es necesario disponer de tiempo para pensar y programar
la estrategia que vas a utilizar. Eso sí, si lo juegas en el bus deberías tener
cuidado de no pasarte de parada, puesto que el juego te atrapará sin límite.

Si lo tuyo son los juegos que te obligan a pensar y programar el paso siguiente, si
te gusta la estrategia y no quieres dejar todo en manos del azar, deberías probar
con este juego, aunque ¡seguro ya lo has probado! Si no lo hiciste esperamos que
esta información te sea de utilidad para comenzar tu aventura medieval.

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