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SUMARIO
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Las leyes penales como todas las leyes de Bolivia, obligan en todo el territorio a
su observancia en virtud de su solemne promulgación. La promulgación y la
publicación son los actos formales que siguen a la sanción de las leyes.
Las leyes penales tienen vigencia hasta que otra ley la abroga o deroga. Pero
puede suceder que algunas leyes de orden penal pierdan su fuerza sin haber
sido derogadas por otras, tal ocurre cuando vence el plazo que se le señaló,
estas son llamadas leyes temporales. La validez temporal de la ley puede cesar
también por haber desaparecidoel objeto o circunstancias que le dieron
nacimiento.
La ley penal rige desde el día en que ha sido publicada hasta que es derogada o
abrogada por otra ley. Sin embargo admite principio excepciones en la doctrina y
en la legislación penal, dando lugar en ciertos casos a la retroactividad y la
ultraactividad de la ley penal. El hecho de que unas leyes penales se extingan y
otras nazcan da lugar a la sucesión de leyes penales, dentro de la cual pueden
presentarse cuatro situaciones posibles:
2.- La ley nueva deja de considerar como delito una acción que antes era
delictuosa según la ley anterior.
3.- Manteniendo el carácter delictuoso del hecho, la ley nueva es más severa.
4.- La ley nueva, finalmente, modifica la ley anterior, haciéndola más severa.
Este principio sufre sin embargo una excepción en el caso de que la ley posterior
a la comisión del delito sea más benigna que la que se hallaba en vigor en el
momento de ejecución. Se alega como fundamento el principio de justicia pues
el Estado al dictar una nueva ley más suave reconoce que la anterior más
severa no responde ya a los preceptos de la justicia. En realidad como dice
Jimáenez de Asúa la aplicación del criterio más favorables se seduce en última
instancia del principio "Nullum crimen, nullum poena sine lege" y se apuntala con
el criterio de humanidad.
La ley penal más benigna debe tener siempre efecto retroactivo aún cuando
sobre el hecho hubiese sentencia firme pues cuando el poder social estima que
determinado hecho no debe ser penado o que debe ser castigado con pena
menor seguir penándolo o seguir castigándolo con pena más grave, constituye
un acto de indudable injusticia. Sin embargo algunos sostienen que una ley no
puede modificar los efectos de la cosa juzgada o sea la autoridad con la que
está investida toda sentencia ejecutoriada pero esta opinión no es fundada pues
nadie trata de poner en duda la justicia de la sentencia pronunciada.
Pero ¿cuál es la ley más benigna? cuando se trata de penas de igual naturaleza
y solo hay diferencia en cuanto a su duración es evidente que la ley más
benigna sería la que impusiera pena menor o mas corta. Pero puede ocurrir que
una ley sea más benigna en alguna o algunas de sus disposiciones y menos
favorable en otras y aquí ya la cuestión se comoplica en estos casos la
resolución de la cual sea la pena más favorable es sumamente dificil y ciertos
autores dan para este fin una serie de reglas y hasta se llega a sostener que en
el caso de que no sea posible comparar la severidad de ambas leyes, debe
sencillamente aplicarse el criterio general de la retroactividad de la ley penal.
Entonces lo más racional será dejar a la elección del reo el determinar por qué
ley desea ser juzgado y sentenciado pues nadie mejor que él puede conocer las
disposiciones que le son beneficiosas.
Frente a estas cuestiones hay varias doctrinas que fundan o aplican el alcance
de la ley penal enn cuanto al territorio que pueden agruparse en cuatro sistemas
fundamentales:
Según el primero, la ley penal se aplica a todos los delitos cometidos dentro de
los limites del territorio del Estado que la sanciona prescindiendo de la calidad
nacional o extranjero de domiciliado o transeunte del autor del hecho o sea que
en virtud de la soberania las leyes penales tienen plena vigencia con relación a
los delitos cometidos dentro del territorio cualquiera que sea que el que los
cometió. Según el segundo principio que tiene una tradición antigua la
competencia de un Estado para el ejercicio de su poder punitivo está
determinada en razón de la protección de los intereses vulnerados por el delito.
Ejemplo clásico de la aplicación de este principio es el delito de falsificación de
la moneda nacional, cometido en el extranjero pero que afecta
fundamentalmente el interes del Estado cuya moneda se falsificó. Se dice que
siendo la finalidad del derecho penal la defensa o protección de los intereses
nacionales es justo que en estos casos deba aplicarse la ley penal aún a hechos
cometidos en el extranjero.
El espacio aéreo que se extiende sobre el territorio de la Nación forma parte del
territorio (comprende también la de las aguas territoriales) del Estado. Cuando
se producen situaciones de conflicto en aeronaves motivadas por la delincuencia
se han llegado a estalecer las siguientes concluciones:
3.- No se ofrece la extradición de los propios nacionales los Estados suelen ser
muy celosos de su soberanía jurisdiccional particularmente frente a sus
connacionales.
5.- Los delitos que dan lugar a extradición deben señalarse precisamente en el
tratado y han de tener tal categoria lo mismo en el Estado que la pide como en el
que otorga o niega.
El sistema mixto, como su nombre lo indica combina con los dos precedentes en
forma tal que tanto la rama jurisdiccional como la administrativa interviene en el
desarrollo del proceso de extradición.