La ciudadanía global es una corriente social que impulsa un nuevo modelo de
ciudadanía comprometida activamente en la consecución de un mundo más equitativo y sostenible. Desde esta perspectiva la educación para la ciudadanía global apuesta por el respeto y la valoración de la diversidad, la defensa del medio ambiente, el consumo responsable y el respeto a los derechos humanos individuales y sociales. La temática trabajada en cada edición de Conectando mundos es el hilo conductor con el que se pretende formar en una ciudadanía global, entendiendo que los ciudadanos y las ciudadanas globales se caracterizan por: 1. Ser conscientes de la gran amplitud y de los desafíos del mundo actual, 2. Reconocerse a sí mismos y a los demás como sujetos con dignidad, con obligaciones que cumplir y derechos que pueden exigirse, y con poder para conseguir cambios, 3. Responsabilizarse por sus actuaciones, se indignan ante las injusticias y frente a cualquier vulneración de los Derechos Humanos, 4. Respetar y valorar la equidad de género, la diversidad y las múltiples pertenencias identitarias de las personas y de los pueblos como fuente de enriquecimiento humano, 5. Se interesan por conocer, analizar críticamente y difundir el funcionamiento del mundo en lo económico, político, social, cultural, tecnológico y ambiental, 6. Participar y comprometerse con la comunidad en los diversos ámbitos, desde los locales a los más globales, con el fin de responder a los desafíos y lograr un mundo más equitativo y sostenible, 7. Contribuir a crear una ciudadanía activa, que combate la desigualdad a través de la búsqueda de la redistribución del poder, de las oportunidades y de los recursos. Hablar de ciudadanía nos referimos directamente a población o conjunto de personas que tienen algo en común, pero en mi opinión esta palabra contiene mucho más que un conjunto de personas, esta palabra contiene el llevar acabo o ejercer un papel dentro de la ciudad, la ciudad es un espacio donde se desenvuelven las personas y se constituyen sociedades, estas sociedades valga la redundancia están a su vez compuestas por los ciudadanos. Entrando en énfasis y el ser ciudadano para poder relacionarlo con el mundo creo que sería lo mejor poner un ejemplo de un ciudadano global como lo es Malala Yousafzai una mujer que no ha parado de desafiar al mundo ¿pero si lo ha desafiado entonces que la convierte en ciudadana global? Precisamente su desafío a mejorar el pensamiento que existe en el mundo y que día a día no solo nos hace dudar de nuestras acciones además del ser nosotros mismos, estos desafíos que toma Malala no tratan de mantener al mundo igual sino de generar cambios que nos ayuden a tener una mejor ciudadanía ¿cómo? Pues demostrándonos que el miedo al cambio hay que enfrentarlo. El hecho de que el ejemplo sea una mujer galardonada como lo es Malala no quiere decir que una persona normal pueda lograr ser un ciudadano del mundo, esto es lo que en esencia a cierto punto de vista te hace uno: ser tú mismo, respetando a los demás, pero generando, aunque sean pequeños cambios para mostrarle al mundo lo bueno que puede llegar a ser el lugar en el que vivimos. Llegando mucho más al punto un ciudadano global o cosmopolitismo es una persona que logra hacer parte de la sociedad inclusiva , teniendo en cuenta el respeto y tolerancia que es fundamental para formar relaciones en el mundo sin importar de quien se trate . En mi opinión como con respecto a esta reseña, este modelo de sociedad si se tomara mucho más en serio, el mundo y nosotros como personas que habitamos en el seriamos mucho más tolerantes y respetuosos con el que nos rodea no juzgaríamos a nadie, nuestro comportamiento sería inefable y más como ciudadanos que somos. Carlos tovar.