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Trabajo escrito “Menores infractores”

Santiago Suárez
Juan Carlos Vanegas
Estefanía Pabón Henao
Carolin yuliana Uribe Zapata

Trabajo dirigido a:
Ana Orrego Jaramillo

Línea psicología educativa: Inclusión y discriminación


Institución universitaria Tecnológico de Antioquia
Psicología
Itagüí
2018
Menores infractores

"menores infractores" es un término controversial y ofensivo, con el cual se determina a


menores que tengan responsabilidades en actos delictivos y pueden enfrentarse a castigos
penales. Refiriéndose a una conducta que se considere delito, es digna de una
responsabilidad penal cuando es culpable y antijurídica.

Se determinan menores infractores cuando están en edades menores a 18 años, que


adopten comportamientos delictivos y tipificados legalmente como actos ilícitos por las leyes
penales, alude a personas que no han cumplido su mayoría de edad para establecer juicio
de sus derechos.

El problema de los menores infractores no es vigente, viene de mucho tiempo atrás, y


posee ideas diferentes mientras el mundo ha ido evolucionando; sin embargo, sigue siendo
un tema sin resolver. Es indudable que la minoría edad es la más vulnerables ante la
desintegración, el medio social hostil, la mala educación, influencia nociva de los medios de
información, la pobreza y la ignorancia. No cabe duda de que los menores infractores son
víctimas de los adultos y son el resultado de la propia sociedad moldeadora.

Los menores infractores es un hecho seguro, están en una época de su vida en la que así
como son vulnerables a lo negativo, también pueden ser sensibles a diferentes estímulos
educativos, deportes, culturales, que sepan que tiene otras opciones, así como proyectos
de trabajo; en fin, que sepan que tienen alternativas para un futuro de bienestar para ellos y
por ende, para nuestra sociedad.

Origen

El origen de los menores infractores se podría dividir en 3 proceso basados en las leyes: el
discernimiento, la reforma correccional y el auge del modelo garantista.

El discernimiento:

Se puede ver como en roma distinguían a los niños en 3 etapas, la primera que era el
infante, la segunda que es impúberes y la tercera que son los menores. Estas edades las
hicieron con la necesidad de saber que tanto desarrollo mental tenía el niño
(Discernimiento: el saber diferenciar las cosas, Por ejemplo, “lo bueno de lo malo”) y que
tanta imputabilidad (La capacidad de saber que tanto daño hago a los demás con mi
conducta) tenía el niño.

A lo largo del tiempo pusieron la edad de las etapas de los niños, El infante era hasta los 7
años, los impúberes (Infancia cerca) hasta los 10 ½ años (Niños) 9 ½ años (Niñas),
normalmente estos eran irresponsables de las cosas que hacían, a no ser que se
demostrara que era consciente de los que estaba haciendo. Otra eran los impúberes
(Pubertad cerca) que era desde los 14 años (Niños), 12 años (Niñas), estos no podían ser
sancionados con pena de muerte, los castigaban de una forma atenuada y a veces se les
eximia de la sanción; pero, si se les medía la capacidad de discernimiento que tenían, para
verificar si se les podía poner una pena. Y la última etapa era los menores que eran desde
los 12, 14 y hasta 18 años quienes eran mencionados con penas mitigadas.
En otras palabras, se trataba de establecer si el menor poseía suficiente discernimiento con
el fin de establecer la “condena” por la cual debía pasar el niño o su representante (padre o
tutor)

La reforma correccional:

A finales del XlX y principios del XX se comenzó a hablar acerca de una reforma
correccional, está básicamente trataba en apartar a los jóvenes infractores de los criminales
adultos; en ese momento fue en donde se habló y se creó los reformatorios para los
adolescentes que tenían cuestionados sus valores morales. Esta separación se hizo para
que los jóvenes tuvieran un lugar igual de custodia que los adu ltos, pero donde se
combinarán el amor, la firmeza y restricciones. Los reclusos debían ser protegidos de la
pereza, esto se logró mediante el ejercicio militar y vigilancia constante, es necesario decir
que el trabajo, la enseñanza y la religión constituyen la esencia de los reformatorios, por
último hay que mencionar que no era necesario tener un proceso penal para entrar a un
reformatorio porque el objetivo de este es reformar, no castigar.
La primera institución correccional data de 1703 erigido en Roma por el Papa Clemente Xl,
con fines de corrección y enmienda con el uso de la disciplina y formación profesional y
moral. Los reformatorios para niños debían introducir las condiciones de vida en el hogar
hasta donde fuera posible y estar edificados en el campo.

El modelo garantista:

En el siglo pasado, se pensaba que los niños que se encontraba en una situación de
abandono, podrían generar un daño social si no se realizaba una intervención con el fin de
corregirlo. Por los siguiente en 1928 (Ginebra), se estableció que no se debía hacer una
distinción entre un joven que cometió una infracción penal y aquellos que se encontraban en
una situación que exigen programas de protección o reeducación, por presentar problemas
de conducta. En consecuencia, se debía proteger a los jóvenes que se encontraban en
situaciones de vulnerabilidad a causa de una falta de educación o protección.

Leyes para los menores infractores

Ley 1098 de 2006, Artículo 142. Exclusión de la responsabilidad penal para


adolescentes. Sin perjuicio de la responsabilidad civil de los padres o representantes
legales, así como la responsabilidad penal consagrada en el numeral 2º del artículo 25 del
Código Penal, las personas menores de catorce (14) años, no serán juzgadas ni declaradas
responsables penalmente, privadas de libertad, bajo denuncia o sindicación de haber
cometido una conducta punible.

La persona menor de catorce (14) años deberá ser entregada inmediatamente por la policía
de infancia y adolescencia ante la autoridad competente para la verificación de la garantía
de sus derechos de acuerdo con lo establecido en esta ley. La policía procederá a su
identificación y a la recolección de los datos de la conducta punible.
Artículo 143. Niños y niñas menores de catorce (14) años. Cuando una persona menor
de catorce (14) años incurra en la comisión de un delito sólo se le aplicarán medidas de
verificación de la garantía de derechos, de su restablecimiento y deberán vincularse a
procesos de educación y de protección dentro del Sistema Nacional de Bienestar Familiar,
los cuales observarán todas las garantías propias del debido proceso y el derecho de
defensa.

Si un niño o niña o un adolescente menor de catorce (14) años es sorprendido en flagrancia


por una autoridad de policía, esta lo pondrá inmediatamente o a más tardar en el término de
la distancia a disposición de las autoridades competentes de protección y restablecimiento
de derechos. Si es un particular quien lo sorprende, deberá ponerlo de inmediato a
disposición de la autoridad policial para que esta proceda en la misma forma.

Artículo 177. Sanciones.

Son sanciones aplicables a los adolescentes a quienes se les haya declarado su


responsabilidad penal:
1. La amonestación
2. La imposición de reglas de conducta
3. La prestación de servicios a la comunidad
4. La libertad asistida
5. La internación en medio semicerrado
6. La privación de libertad en centro de atención especializado.

¿Porque son vulnerables los menores infractores?

Al estar protegidos por la ley, tanto niños como jóvenes (menores de 14 años y de 18 años),
son el principal blanco de las demás personas con el fin de utilizarlo para sus actividades
ilegales ya que, a estos, según la ley, son eximidos de cualquier delito producido por estos
menores si son encontrados como actores intelectuales. normalmente es el uso de pandillas
de niños menores de 14 años los que son elegidos para estas labores debido a que la
mayoría no son conscientes de los actos que están realizado y la carga que trae a la
sociedad, siendo el blanco principal en las comunas de bajos o medios recursos. también se
debe recalcar que esta población no es totalmente vulnerable; porque, muchos son
conscientes de los actos que están cometiendo. También puede decirse que existe una
vulnerabilidad psicosocial para estos jóvenes que será explicada a continuación.

Una mirada desde la vulnerabilidad en el punto psicosocial de los jóvenes.


La perspectiva del riesgo psicosocial posibilita analizar tanto las características del entorno
inmediato o distante como las características personales que aumentan la probabilidad de
que los jóvenes manifiesten dificultades en su desarrollo. También permite estudiar el modo
en que diversas variables, (entre ellas la influencia de los pares, las características de la
familia, la comunidad y la cultura) interactúan con vulnerabilidades individuales (por
ejemplo, las características cognitivas, temperamentales), sensibilizando a las personas
ante ciertos riesgos. Debido a ello, este enfoque enfatiza la necesidad de analizar la forma
en que diversos factores de riesgo interactúan en la generación de fenómenos como la
delincuencia protagonizada por jóvenes.
Esta vulnerabilidad psicosocial genera unos factores de riesgo en donde se pueden afectar
negativamente el desarrollo de las personas. En términos más específicos, cuando se
habla de factores de riesgo se referencia a la presencia de situaciones contextuales o
personales que incrementan la probabilidad de desarrollar problemas emocionales,
conductuales o de salud. Estos problemas promueven desajustes adaptativos que
dificultarían el logro del desarrollo esperado para el joven en cuanto a su transición de niño
a adulto responsable y capaz de contribuir y participar activamente en la sociedad.

Existen varios tipos de factores de riesgo, como por ejemplo Factores familiares (baja
cohesión familiar), Factores ligados al grupo de pares (pertenencia a grupos de pares
involucrados en actividades riesgosas), Factores escolares (bajo apoyo del profesor,
alienación escolar, violencia escolar), Factores sociales o comunitarios (estigmatización y
exclusión de actividades comunitarias) y Factores socioeconómicos y culturales (vivir en
condición de pobreza). Estas situaciones pueden llevar a la creación de comportamientos
de riesgo por dichos factores, como por ejemplo el uso y abuso de alcohol y drogas,
relaciones sexuales no protegidas o precoces y bajo rendimiento, fracaso y deserción
escolar.

En general, la prevalencia de comportamientos de riesgo tiende a ser más frecuente en los


jóvenes que en la población general. Ello debido a que, durante la adolescencia, más que
en cualquier otra etapa de la vida, exploran distintas actividades que ellos toman como
“normales.”

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