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El film resulta atractivo por su edición y producción. Pero resulta más interesante aún cómo
muestra el tiempo en los diversos escenarios. Justo para al final decir: “sé cuando uno está
muerto y uno vive”. El presente resulta ser el único lugar donde se muere y se vive. Al inicio,
se muestra como hay un reconocimiento entre uno y otro, se crea una relación, y esta resulta
ser efímera ya que sólo muestra los sucesos más importantes en que las contradicciones son
lo que más se observa. Al presentar, de manera simultanea cuatro televisores, se ve reflejado
lo que se llegó a plantear en clase sobre los diversos puntos de observación de una sola
realidad. El resultado son muchas realidades.
La muerte se espera, pero no se sabrá cómo llegará; y cuando llegué su hora, lo que habremos
construido del yo será nada. Dejará de existir, pero será retomado por la memoria; el recuerdo
que trae las viejas experiencias, todo aquello que se aprendió, que se inventó, que se vivió.
Es el recuerdo el que permite que la realidad del presente sea; aunque el futuro no está
predicho, llega a ser presente, por lo tanto, llega a ser también pasado. El presente se
construye por el pasado. Y el presente construye el futuro desde vivir esperando.
El observador, resulta, (o así lo pienso), el que permite que dicha realidad del presente exista
para después poder ser algo del pasado y así poder servir a la comprensión de la realidad y
explicarlo en un pensamiento histórico. El científico social se muestra como el astronauta:
hizo una familia, se fue al espacio y viajó y viajó, cuando regresó su hijo era un anciano, pero
ello no le fue impedimento para continuar. El historiador: mira a través del tiempo los sucesos
y cantidad de sociedades que interactúan entre sí, observan el presente del pasado y en un
momento casi específico, pero se advierte que esta observación no es clara, pues es otro el
que lo observa primero y ello trae un problema con la interpretación de la realidad. De todo
esto se cuestiona el mismo tiempo. Pues creo que al cuestionarse el tiempo nacen ideas sobre
la construcción de la realidad.