Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
Colombia
Corte Suprema de
CORTE SUPREMA DE JUSTICIA
SALA DE CASACIÓN LABORAL
I. ANTECEDENTES
Corte Suprema de
debidamente indexado, los salarios de los meses de agosto y septiembre
de 2000; las horas extras dominicales y festivos, correspondientes a los tres
últimos años; la cesantía y sus intereses; las vacaciones; primas legales; la
indemnización por despido; la sanción moratoria de los artículos 65 del
Código Sustantivo de Trabajo y 99 de la Ley 50 de 1990; los descuentos
que la demandada le efectuó sin su consentimiento y las dotaciones de
overol y calzado por todo el tiempo laborado.
Corte Suprema de
prestaciones sociales”. Propuso las excepciones de prescripción, inexistencia de
Corte Suprema de
acredita plenamente con la prueba antes referida, toda vez que de los contratos escritos
allegados al plenario se desprende la manifestación expresa de la voluntad de las partes de
vincularse mediante un contrato de trabajo”.
Corte Suprema de
de la automática reconducción estipulada en el numeral primero del artículo 46 del C. S. del
T., modificado por el artículo 3º de la Ley 50 de 1990, por un término igual al inicialmente
pactado, y que corresponde a los períodos comprendidos entre el 1º de enero y el 31 de
diciembre de 1991, el 1º de enero y el 31 de diciembre de 1992, el 1º de enero y el 31 de
diciembre de de 1993, el 1º de enero y el 31 de diciembre de 1994, el 1º de enero y el 31 de
diciembre de 1995, el 1º de enero y el 31 de diciembre de 1996, el 1º de enero y el 31 de
diciembre de 1997, el 1º de enero y el 31 de diciembre de 1998 y desde el 1º de enero hasta
el 31 de diciembre de 1999, data en la cual se verificó la última liquidación del contrato de
trabajo (fl. 48-48vta), pero que al no haberse verificado el respectivo desahucio también
operó la prórroga automática a partir del 1º de enero hasta el 31 de diciembre de 2000,
careciendo en consecuencia de eficacia por lo anteriormente expuesto, los contratos escritos
de trabajo a término fijo de una año <pactados> a partir del 1º de enero de 1991 (fls. 36-
36vta), 1º de enero de 1992 (fls. 37-37 vta) y 1º de enero de 1993 (fls 37 A- 37ª vta), pues se
reitera, dicho lapso de tiempo así como el subsiguiente está reglado por le contrato de
trabajo inicialmente referido y que se prorrogó por ministerio de la ley. Igualmente es
menester puntualizar, que si bien el contrato de trabajo suscrito entre las partes se prorrogó
hasta el 31 de diciembre de 2000, la prestación efectiva de servicios se verificó hasta el 31 de
diciembre de 1999, toda vez que así lo acredita la última liquidación allegada al plenario” .
Corte Suprema de
de 2003 (fl. 16 vta) y no se acreditó la existencia de reclamación alguna que interrumpiera el
término prescriptivo, transcurriendo por ello más de tres (3) años desde la exigibilidad de los
derechos hasta su efectiva reclamación judicial. Por tanto, se confirmará la sentencia de
primera instancia al absolver a la sociedad accionada de todos los pedimentos y declarar
probada la excepción de prescripción respecto de las acreencias laborales e indemnizaciones
solicitadas por la activa” .
V. RECURSO DE CASACIÓN
Corte Suprema de
4, 6, 174, 177, 187, 194, 200, 258 y 305 del Código de Procedimiento Civil; en concordancia
con los artículos 29, 53 y 230 de la Constitución Política de Colombia; artículos 49, 60, 61,
145 y 150 del Código Procesal del Trabajo y Seguridad Social”.
Corte Suprema de
Sostiene el recurrente que el Tribunal apreció
erróneamente la demanda, los periodos de afiliación al régimen de
pensiones, los contratos de trabajo, las copias al carbón de la liquidación
del contrato de trabajo, la contestación de la demanda y el interrogatorio
por él absuelto. Como probanza no contemplada relaciona el
interrogatorio absuelto por el representante legal de la demandada.
Corte Suprema de
En relación con extremo final de la relación laboral,
acota que “a prima –facie la Honorable Corte encontrará el anfibológico e incongruente
dislate del Tribunal. Es decir, que para el Ad-quem la relación laboral se prorrogó hasta el 31
de diciembre de 2000 lo cual es correcto, pero en errónea apreciación de la documental de
folio 48 consideró que la relación laboral había terminado el 31 de diciembre de 1999 dizque
porque esta documental acredita que la prestación efectiva de servicios sólo fue hasta esta
última fecha. Tan espeluznante incuria es justamente consecuencia de la errónea apreciación
por parte del Ad –quem del último formato de liquidación del contrato de trabajo visible a
folio 48 del cuaderno 2 o cuaderno del Tribunal. Obsérvese que lo que acredita esta
documental es: que la demandada en su afanoso comportamiento de mala fe en la ejecución
de la relación laboral, fijo(sic) en esta documental como presunta fecha de ingreso del actor
el 31 de diciembre de 1999 y no como fecha de terminación, como erróneamente lo apreció
el Tribunal. Que en esta documental se acreditó la clase de contrato, esto es, a término fijo
inferior a un año, sin que exista la prueba idónea o documental de la terminación del
contrato inicial verbal de trabajo o el desahucio de ninguno de los que fueron aportados al
proceso. Que con este documento se probó el hecho 2 de la demanda y que no se encuentra
ni en esta documental ni en ninguna otra prueba de que el actor no haya prestado servicios a
la demandada entre el 1º de enero y el 30 de septiembre de 2000. Precisados los yerros del
Tribunal respecto al extremo final, no hay duda que el contrato de trabajo estuvo vigente
hasta el 31 de diciembre de 2000 y que el servicio fue prestado efectivamente por el actor
hasta el 30 de septiembre de ese mismo año, quedando demostrado así no solamente el
hecho 2 de la demanda sino también el hecho 8 de la misma, respecto a salarios e igualmente
probados los demás hechos respecto a los derechos ciertos, así como los derechos inciertos
(indemnizaciones)”.
Corte Suprema de
menos como pago de los derechos ciertos causados en el año 1999 (…) la documental de folio
48 acredita una liquidación de cesantías sin respaldo probatorio de su pago, que el si el
Tribunal hubiera valorado correctamente habría encontrado que allí no existe liquidación
alguna de prima de servicios y vacaciones y que estando probado el extremo final del
contrato de trabajo hasta el 31 de diciembre de 2000, esto último aceptado por el Tribunal,
no hay duda de que la demandada debe ser condenada a estos derechos ciertos causados
entre el 13 de agosto de 1999 y el 31 de diciembre de 2000, ha (sic) sabiendas de que la
demanda se presentó el 12 de agosto de 2003” .
VII. LA RÉPLICA
República de 11 Expediente 37067
Colombia
Corte Suprema de
El opositor alega que el Tribunal “no incurrió en errores de
hecho apreciando erróneamente las pruebas indicadas por la parte recurrente, ya que (…) les
dio el valor probatorio de acuerdo a los postulados legales”.
Corte Suprema de
Bajo las anteriores aristas, se procede a analizar las
diferentes pruebas denunciadas, cuyo examen objetivo arroja el siguiente
resultado:
Corte Suprema de
habida consideración que como lo ha reiterado la Corte
de tiempo atrás <…el hecho de la afiliación al seguro
social, no demuestra por sí sólo el contrato de trabajo,
pues para la estructuración de este, se requiere la
coexistencia de los elementos del contrato de trabajo>
(Sentencia del 18 de marzo de 1994, radicado 6261)”.
Corte Suprema de
Tampoco cabe decir que el actor demostró que laboró
hasta el 30 de septiembre de 2000 con fundamento en lo contestado al
absolver el interrogatorio a que lo sometió la demandada, ya que para que la
declaración de parte adquiera relevancia probatoria debe contener
confesión, es decir, cuando el deponente admite hechos que lo perjudiquen
o favorezcan al contrario. Así lo exige el artículo 195 del Código de
Procedimiento Civil, aplicable al proceso laboral por permitirlo el 145 del
Código Procesal del Trabajo y de la Seguridad Social, al indicar los requisitos
de la confesión. Y es que el recurrente, basándose en sus propias
aseveraciones, pretende establecer que prestó sus servicios hasta la fecha
mencionada, cuando resulta inadmisible que el interrogatorio vertido por
la parte en el proceso constituya prueba en su favor y, más aún, que dichas
afirmaciones sirvan para fundar un error de hecho en el recurso
extraordinario, precisamente por las razones que se acaban de esgrimir y
que emanan del propio texto de la norma instrumental.
Corte Suprema de
puntualizar respecto al formato de contrato de trabajo del folio 34 del cuaderno 1 o
cuaderno principal, el Tribunal también apreció erróneamente el formato de liquidación de
folio 38. Obsérvese que esta liquidación ni siquiera está firmada por el demandante y menos
está respaldada, ni con carta donde el actor apareciese que realizó un <RETIRO
VOLUNTARIO> y menos con comprobante alguno de que el demandante efectivamente
hubiese recibido los $57.141.00 que allí arrojan como liquidación. En consecuencia las
documentales de folios 34 y 38 cuaderno 1 o cuaderno principal no acreditan ni una nueva
relación laboral entre las partes de este proceso, ni el finiquito de la misma y menos el pago
de los derechos laborales causados en ese lapso de tiempo”.
Corte Suprema de
En otro orden de consideraciones, en sentir de esta
Corporación el Tribunal en ningún momento desconoció que el contrato
de trabajo se prorrogó hasta el 30 de diciembre de 2000, en la medida en
que operó la tácita reconducción, es decir, la prórroga automática, lo que
sucede es que la sala sentenciadora estimó que a pesar de lo anterior el
vínculo término el 31 de diciembre de 1999, toda vez que así lo acredita la
liquidación de contrato de trabajo visible a folio 48. Y aunque no cabe
duda que en la liquidación aparece un error en cuanto al periodo
liquidado, básicamente en lo que respecta a la fechas de ingreso y retiro,
pues se encuentran invertidas, el sentenciador colegiado no equivocó la
apreciación de esta prueba porque precisamente lo que ella dice es lo que
dedujo con el propósito de mostrar la terminación del contrato de trabajo.
Corte Suprema de
Corte Suprema de
LUIS GABRIEL MIRANDA BUELVAS