Sie sind auf Seite 1von 8

LA EVOLUCIÓN DE LAS MATEMÁTICAS

Cuando por casualidad nos preguntan, ¿qué son las matemáticas?, cuál es el primer pensamiento que surge,
es tal vez: toda la evolución de la mente humana que refleja su voluntad activa, dándole visión estética y
perfección, generada como base de la lógica y la intuición. Para poder responder adecuadamente, debemos
tener en cuenta que las matemáticas son tan antiguas como el propio conocimiento humano, por lo tanto, en
sus inicios cumplía una función más aplicativa que teórica. En realidad, las matemáticas se fueron
formalizando poco a poco gracias a los trabajos de Cauchy, pero antes de ello, tenía un enfoque empírico y
eso lo podemos corroborar a través de la historia.

Retrocedamos en el tiempo y visitemos por ejemplo la antigua Grecia, los pensadores de estas civilizaciones
atribuyeron el origen de la Geometría a los egipcios, debido a los métodos que utilizaron los pobladores de
las orillas del Nilo para medir sus tierras y deslindarlas de nuevo tras las periódicas inundaciones; sin
embargo, si vamos aún más lejos, podemos darnos cuenta de que las construcciones y artesanías prehistóricas
acusaban ya el conocimiento de las formas geométricas elementales. Y en este mismo contexto, podemos
apreciar también los primeros conocimientos en Aritmética, ya que el mismo instinto de propiedad, llevó al
hombre a contar sus rebaños representándolos por piedrecillas o por trazos en los troncos de los árboles. Y
de esta manera, al contar, medir y construir, aparecen las primeras operaciones matemáticas de la humanidad,
asimismo, partiendo desde el primer tosco diseño de un campo en el papiro hasta la moderna descripción
tensorial de la curvatura en el universo, surge la idea de entender el mundo a través de símbolos y
representaciones matemáticas. Por ello, podemos afirmar que la matemática, en general, es ciencia de
representaciones, esquemas, y es tan antigua como el hombre mismo.

Son las acciones de representar y esquematizar, lo que llevó a la abstracción, de esta forma se pudo prescindir
de cualidades accesorias para quedarse solo con la cualidad fundamental en cada representación; por ejemplo,
en Aritmética, la simple cualidad de ser; en Geometría, la posición, la forma y la extensión; en Mecánica, el
peso, la masa, etcétera. De esta forma, reduciendo el mundo físico a tales abstracciones, el hombre simplificó
la inmensa complejidad de los fenómenos naturales y gracias a la sencillez de las representaciones
idealizadas, se logró hacerlas dóciles al razonamiento puro. Razonamiento que le permitió: primero, inducir
leyes simples que fueran como el substratum de todos los fenómenos esencialmente homogéneos; y segundo,
deducir luego de dichas leyes consecuencias que, traducidas de nuevo al mundo real, le habilitaron para
predecir el resultado de fenómenos desconocidos, de experiencias complejas aún no realizadas.
De la predicción al proyecto, de la ciencia a la técnica, ya no quedó más que un paso así. Las leyes de la
Mecánica, inducidas de simples observaciones sobre la caída de los graves, permitieron al hombre descubrir
planetas ignorados por el telescopio, y también proyectar y crear los mecanismos que nos transportan y nos
alivian el trabajo. De las sencillas experiencias obtenidas sobre probetas en un laboratorio de resistencia de
materiales, se induce leyes que permiten calcular las complicadas estructuras sobre las que vivimos y
circulamos. A partir de las sencillas experiencias de Faraday sobre inducción en circuitos se ascendió
análogamente a las leyes generales del electromagnetismo, que no sólo permitieron explicar complejos
fenómenos de óptica, sino también proyectar generadores y motores eléctricos, líneas de transmisión,
emisoras y receptores de radio...Estos ejemplos, pocos entre los muchos que pudieran citarse, ponen de
manifiesto el dónde juego inductivo-deductivo que caracteriza la Ciencia, y el papel esencial que la
matemática ha desempeñado en este noble juego, gracias a su función esquematizadora. Sirvienta y reina de
las ciencias la ha llamado alguien, y, en efecto, en cuanto les sirve de sostén, las domina a un tiempo.

Hemos visto que los conceptos matemáticos lo fueron en su origen sólo a modo de tránsito, es decir, per
accidens, para ser proyectados inmediatamente de nuevo al campo de la realidad. Pero estos entes de razón,
una vez creados, adquieren carta de ciudadanía en nuestra mente, se enseñorean de ella, convirtiéndose en
conceptos matemáticos puros, en conceptos matemáticos per re. Y la mente matemática, libre ya de las trabas
con el mundo físico real, del que recibió los impulsos iniciales estimulantes, teje y combina, abstractos y
generaliza, se ensancha, prolifera y progresa, lo mismo en sus ramas y frutos que en sus raíces o fundamentos.
Este desarrollo, efectuado ya a espaldas de toda aplicación en el mundo físico, este tesoro matemático puro,
tan desinteresadamente acumulado, constituye una reserva conceptual, de la que inesperadamente surgen
posteriores aplicaciones al mundo real que nadie era capaz de prever, La ciencia presenta ejemplos de tal
naturaleza en tal cantidad, que con razón puede decirse que la matemática pura de hoy volverá a ser
matemática aplicada de mañana. Por ejemplo, concepción tan abstracta como el Algebra de Boole (álgebra
que este matemático inglés ideó hace más de un siglo para esquematizar ciertas leyes del razonamiento
lógico) se ha mostrado ser, recientemente, el instrumento matemático apto para esquematizar las conexiones
en los circuitos electrónicos de las máquinas de cálculo. No olvidemos, pues, que la Matemática es una sola,
que su origen arranca de la ciencia natural, y que su carácter de pura o aplicada no radica más que en la
intencionalidad dcl que la crea o estudia, pero no en su íntima esencia, debemos recordarlo.

Actualmente todo en nuestra vida está sumiso a las matemáticas, pero aún existen creencias que esta ciencia
es un juego poco menos que inútil al que se dedican cerebros de soñadores, lo cual causa cierto rechazo hacia
esta, y que por efecto crea un gran conflicto y desinterés por querer conocerla. La persona que tiene un leve
conocimiento de la matemática tiende a ver el mundo de forma distinta, y para darle mayor énfasis a esta
idea, se hará mención nuevamente que la física se apoyó de esta ciencia para explicar fenómenos
inexplicables, aunque fue de forma intuitiva al principio, generó grandes maravillas al pasar el tiempo,
engendrando así grandes leyendas que quedaron marcadas en el transcurso de la historia. Todo esto por el
simple hecho que las matemáticas sumergen a todo aquel que la estudia y practica en un mundo fascinante y
diferente, además que ayuda a entender la problemática que hubo en cada tiempo y cómo, con personas que
producían grandes ideas se fueron solucionando, dejando su legado para la posterioridad.

En conclusión, actualmente la matemática es entender esas estructuras y pensamientos que tuvieron estos
grandes íconos de la historia, que no la tuvieron fácil para lograr lo que lograron como Niels Abel, el más
grande matemático noruego, que murió en la más espantosa pobreza un día antes de que le llegara su
nombramiento como profesor de la Universidad de Berlín; como Evariste Galois, quien fracasó en su intento
por ingresar a la Escuela Politécnica de Paris, pero con sus teorías adelantó ciento cuarenta años a las
matemáticas de su tiempo; o Henri Poincaré, que fue calificado como “débil mental” en la adolescencia y a
los cuarenta años llegó a ser el más grande matemático del mundo. Es por todo lo mencionado la importancia
del aprendizaje de esta ciencia ,y me permito terminar con la frase de Dedekind: "Los matemáticos somos
de raza divina pues poseemos el poder de crear".
BIOGRAFÍA DE PUIG ADAM PEDRO

Nació en Barcelona el 12 de mayo de 1900. Falleció en


Madrid el 12 de enero de 1960.

Realizó su bachillerato en el Instituto de Segunda Enseñanza


de Barcelona. Posteriormente se matriculó en la Escuela de
Ingenieros de la capital catalana y estudió matemáticas en la
Facultad de Ciencias de la misma ciudad (ambos centros
estaban en el mismo edificio). En esta etapa tuvo una
influencia destacada en su formación el profesor Antonio
Torroja Miret, uno de los tres hijos del eminente geómetra
Eduardo Torroja y Caballé, que impartía la asignatura de
Geometría proyectiva. Al terminar la licenciatura hizo el
doctorado en Madrid, momento en el que conoció a Rey
Pastor, convirtiéndose en su discípulo y después en su colaborador (con él escribió diversos textos dedicados
a la enseñanza de las matemáticas). En el año 1921 presentaba su tesis doctoral con el tituló “Resolución de
algunos problemas elementales en Mecánica relativista restringida”, que se publicó en la Revista de la Real
Academia de Ciencias Exactas (nº 20, año 1922, págs. 161-216). Recordemos que el profesor de la
Universidad de Barcelona, Esteban Terradas, había organizado entre 1920 y 1923 la visita a esta institución
de diversos físicos y matemáticos eminentes, entre los que se encontraban Tullio Levi-Civitá, Hermann
Weyl, Arnold Sommerfeld y Albert Einstein.

En 1926 ganó la cátedra de matemáticas del Instituto San Isidro, donde desarrolló una larga actividad
docente. Actividad que completa con las clases de geometría descriptiva, geometría superior y metodología
matemática en la Facultad de Ciencias de Madrid; de análisis matemático y cálculo infinitesimal en el
Instituto Católico de Artes e Industrias (ICAI), y de cálculo en la Escuela Superior Aeronáutica. Fue
asimismo profesor de la Escuela de Ingenieros Industriales (en 1934 había terminado la carrera de ingeniero
industrial): primero como auxiliar en 1932 y, más tarde, como catedrático de cálculo en 1946.

En 1952 ingresó en la Real Academia de Ciencias con un discurso de recepción titulado “Matemáticas y
cibernética”. Contó además con diversas distinciones, entre ellas la de la Gran Cruz de Alfonso X el Sabio.

El mismo año que ganó la cátedra del Instituto de San isidro, la Junta de Ampliación de Estudios concedió a
Puig Adam la consideración de pensionado (Real orden de 28 de abril de 1926) debido a que el International
Education Board (Fundación Rockefeller) le había concedido una beca para estudiar en Múnich durante un
año. Según afirma Thomas F. Glick, Puig Adam recibió la única beca concedida a un matemático español
por la institución americana antes de la Segunda Guerra Mundial (Glick, 1990). El propósito del viaje no era
tanto conocer las novedades pedagógicas como ampliar los conocimientos relativos a los temas de su tesis.
Los trabajos estarían supervisados por el profesor de la universidad de Múnich Constantin Carathédory,
especialista en teoría de funciones, si bien familiarizado con la teoría especial de la relatividad, y director
de los Mathematische Annalen. Pero sus planes no pudieron llevarse a cabo. Como aparece reflejado en la
documentación, en el curso de su viaje a la ciudad alemana, cuando se encontraba en Lyon, cayó enfermo.
Los médicos le aconsejaron que se tomara un descanso de varios meses, preferiblemente en el campo, lo que
le obligó a renunciar a la beca (véase Expediente JAE/ 118-601)

En los centros donde impartió sus enseñanzas y, en particular, en el Instituto de San Isidro sí mostró, no
obstante, un elevado interés por la didáctica y por la realización de aportaciones novedosas en este
campo. Como indican Joaquín Hernández (Hernández, 2000) y Mª Eugenia Jiménez y Mercedes Pastor
(Jiménez y Pastor, 2014), Puig Adam ocupó un lugar destacado en el desarrollo de la enseñanza de las
matemáticas en España. Una de sus obras de referencia en este campo fue Didáctica matemática
eurística [sic], publicada por el Instituto de Formación del Profesorado de Enseñanza Laboral en el año 1956.
Contexto Histórico
En el periodo de España de 1936 se incorporaron al profesorado numerosos expedientes de depuración:

Unos 6.000 fueron expulsados de la enseñanza, otros tantos trasladados forzosamente de localidad, unos
3.000 fueron sancionados de empleo y sueldo y más de 1.000 fueron inhabilitados para el ejercicio de cargos
públicos. Haberse significado perteneciendo a un comité local o profesional marcaba el camino para ser
depurado. Los tribunales de depuración se constituyeron para castigar las conductas consideradas
inadecuadas e incompatibles con la España Nacional y con el objetivo de ajustar el perfil ideológico del
profesorado a la nueva escuela que se quería implantar23. Los maestros más comprometidos con las reformas
republicanas fueron especialmente perseguidos, sus métodos fueron tachados de extranjerizantes y nocivos
para la sana formación de los niños y niñas. Las cuestiones morales, como estar divorciado, haber contraído
matrimonio civil o no ir a misa, suponían quedar automáticamente fuera del ejercicio del magisterio. En una
primera fase, a inicios de la guerra, los mismos militares se encargaban de pedir informes a los alcaldes sobre
la conducta de los maestros. A partir de noviembre de 1936 se constituyeron comisiones provinciales y todo
el profesorado sin excepción debió someterse a un expediente para, caso de emitirse un juicio favorable,
seguir ejerciendo. Se debían adjuntar al mismo los informes del alcalde, el cura, la guardia civil y otras
personas de probada moralidad católica que avalaran la petición de reingreso como maestro. La falta de
profesorado hizo que se cubrieran muchas vacantes con los llamados “alféreces provisionales “del ejército,
algo parecido a los actuales interinos.

El 1 de febrero de 1938 es nombrado ministro de Educación Nacional Pedro Sainz Rodríguez, monárquico
y católico tradicional, que centró su breve mandato en el desmantelamiento del sistema educativo
republicano.24 Las nuevas bases del sistema escoContraluz. Asociación Cultural Cerdá y Rico. Cabra del
Santo Cristo lar, que llegarán casi intactas hasta finales de los años sesenta, girarían en torno a los

Siguientes preceptos:

1. Educación religiosa en todos los centros y marcado contenido moral de todo el saber. El amor a la Patria
debía impregnar cualquier hecho educativo.

2. Prohibición de la coeducación. El sacrificio y la disciplina se considerarán el motor del éxito.

3. Valor fundamental de la familia como eje vertebrador de la vida española. La mujer, garante del bienestar
familiar al servicio del marido y los hijos.
La Ley de Reforma de la Segunda Enseñanza, de 1938, rompe con la tradición liberal que veía al bachillerato
como una prolongación de la enseñanza primaria. Las nuevas clases dirigentes deberían surgir de una
enseñanza secundaria restringida a determinados sectores de población, de quienes se esperaba que
asumieran el encargo de transmitir los nuevos valores. En el BOE del 20 de septiembre de 1938 se publicaba:

«Iníciase con la reforma de la parte más importante de la Enseñanza Media (...), porque una

modificación profunda de este grado de enseñanza es el instrumento más eficaz para, rápidamente,

influir en la transformación de una sociedad y en la formación intelectual y moral de sus futuras

clases directoras»

La cultura clásica pasa a formar parte fundamental del currículum y se considera obligatorio el estudio de
lenguas de países con trayectoria afín: alemán e italiano.25 El nuevo bachillerato, que se mantendrá hasta
1953, comprenderá un examen de ingreso a los diez años, siete cursos y un examen de Estado organizado
por la Universidad. En agosto de 1939 Ibáñez Marín será nombrado ministro de Educación –cargó que
ocupará hasta 1951–. Durante su mandato se crea el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, que a
la postre serviría de plataforma de lanzamiento de los técnicos afines al Opus Dei, encargados de modernizar
el país en los sesenta. En julio de 1940 se establece un nuevo Plan de Estudios de Magisterio. El profesorado
será encuadrado en el Servicio Español de Magisterio (SEM), que hará las veces de corporación profesional
bajo control de la Falange. Los sueldos se congelan y se viven tiempos de penuria generalizada. Son los años
del “pasas más hambre que un maestro de escuela”. Los cargos directivos se ocupan por méritos de guerra y
los desplazamientos de maestros desde las provincias del centro de España hacia Cataluña y el País Vasco
se convierten en práctica habitual. El objetivo era reeducar a la población de estas zonas.

En 1957 el bachillerato superior se divide en las ramas de Ciencias y Letras. Debido a los pocos recursos
destinados a la enseñanza, aparecen las llamadas secciones delegadas, los colegios libres adoptados y las
secciones filiales, como remedio de urgencia para paliar la escasez de centros públicos. A partir de febrero
de 1957, con la incorporación de los llamados tecnócratas al Gobierno–de filiación opus deísta
mayoritariamente–, se deja de considerar la enseñanza como un gasto estatal contraproducente y se la
asciende a la categoría de inversión. El binomio sistema educativo-sistema productivo se implanta como
pareja indisoluble y acarrea consigo una relativa explosión escolar. Durante el mandato del ministro Lora
Tamayo (1962-68), el Ministerio de Educación y Ciencia (hasta entonces llamado de Educación Nacional)
llegará por primera vez a alcanzar el 12% de los Presupuestos Generales del Estado37 .En aquel mismo año
de 1957, las Hermanas Apostólicas de Cristo Crucificado deciden fundar en Cabra del Santo Cristo. Aparece
en la historia local el Colegio Cristo Crucificado, popularmente conocido como Las Monjas, cerrado el 31
de agosto de 2000. He solicitado colaboración a la Hermana Alicia, directora del mismo durante años y hoy
Madre General de esta congregación, para poder documentar este trabajo. En su respuesta lamentaba no
poder disponer del tiempo necesario para centrarse en mi petición.

Das könnte Ihnen auch gefallen