Viernes Santo

SOLEMNE PROFESIÓN DEL CREDO

Notas previas:
 Prever en el centro del presbiterio una mesa con mantel blanco y una cruz con un manto blanco entrelazado.
 Prever los siguientes signos: plantas (expresan la obra creadora de Dios Padre), una Biblia grande (Jesucristo, palabra de
vida) una antorcha o recipiente con fuego (la acción del Espíritu Santo santificador) y signos sacramentales: una jarra con
agua, pan con espigas, uvas y un cirio.
 Estos signos serán entronizados después de hacer la proclamación de cada parte del Credo, y se colocarán en la mesa que se
ha dispuesto hasta organizar un altar.
 Seguidamente se hace la reflexión de la parte correspondiente del Credo.

Ambientación Musical Instrumental

Canto: NADIE TE AMA

Saludo y Monición

Buenas noches hermanas y hermanos:

En esta noche santa, nos reunimos para conmemorar el hecho Redentor de Nuestro Señor
Jesucristo; como comunidad creyente, haremos nuestra profesión de fe, en Dios Padre,
Dios Hijo y Dios Espíritu Santo, comunidad de amor que sale a nuestro encuentro, para
comunicarnos ese mismo amor haciéndonos partícipes de la comunión.
La Iglesia hoy continúa la misión conferida a los apóstoles; por eso, testifica y proclama el
mensaje para que todos podamos creer y esperar, vivir y amar como Jesús.
El Credo surgió en la Iglesia como compendio legítimo del mensaje transmitido por los
apóstoles y que a partir de la experiencia de fe vivida se nos ha transmitido a través de los
escritos del N.T. y de la Tradición de la Iglesia. El Credo o profesión de fe recoge lo
fundamental de nuestra doctrina, las verdades que profesamos. La primera confesión de fe la
hacemos en el Bautismo.
Los cristianos de todo el mundo confesamos con las mismas palabras nuestra pertenencia
a Dios Padre, a Dios Hijo y a Dios Espíritu Santo. La persona que pronuncia su “si” de
aceptación a Dios debe saber a que se decide; por esto, los creyentes estamos llamados a
conocer y alimentar nuestra fe con la Palabra de Dios y a celebrar esa misma fe en la
Sagrada Eucaristía.
El Credo está organizado en tres grandes partes:
- Creo en el Padre Creador
- Creo en el Hijo Redentor y
- Creo en el Espíritu Santo Santificador y estructurado en 12 artículos.

Recordemos que en la vida de la Iglesia surgen varios Credos o símbolos, pero dos ocupan un lugar
muy importante. El Credo de los Apóstoles (fórmula corta) fruto de la enseñanza de los Apóstoles y el
Credo Niceo-Constantinopolitano, fruto de los dos primeros Concilios (fórmula larga).

Vamos a proclamar hoy nuestra fe con convicción, seguros de que Dios comunión nos ama y realiza su
acción salvadora en cada uno de nosotros, en nuestras familias, en nuestros grupos eclesiales, en
nuestros sectores, en nuestra parroquia y en nuestra diócesis.
La fórmula que vamos a seguir es la Niceo-constantinopilitana, fórmula larga meditando cada una de
sus partes.

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PROFESIÓN DE FE REFLEXIONADA:

Canto: DIOS ESTÁ AQUÍ – ALABADO SEAS MI SEÑOR

(En pie, levantan sus manos en señal de alabanza y se

proclama la primera parte del Credo)

Sacerdote:
“CREO EN UN SOLO DIOS, PADRE TODOPODEROSO,
CREADOR DEL CIELO Y DE LA TIERRA, DE TODO LO VISIBLE Y LO INVISIBLE”.

(Se entronizan las plantas (2) que se tienen preparadas y se colocan una a cada lado de la
mesa que se ha dispuesto) Música instrumental de fondo.

Lector 1:
“Al principio creo Dios el cielo y la tierra. La tierra era una soledad caótica y las
tinieblas cubrían el abismo, mientras el espíritu de Dios aleteaba sobre las aguas”
Génesis:1,1-2.

Lector 2:
La Biblia comienza con una afirmación de fe: “Al principio creó Dios los cielos y la tierra”,
es decir, creó el universo entero.
El pueblo de Israel por el camino de una reflexión a través de su propia historia, reconoce
y proclama que Dios es el Creador del cielo y de la tierra.

Lector 1:
La Creación es un gesto del amor de Dios. El mundo y todos sus encantos naturales tienen
su origen en el amor de Dios. En el relato del Génesis descubrimos como la Palabra
poderosa de Dios ordena, pone paz y armonía, luz y bondad en la creación. Dios al crear es
enteramente libre.

Lector 2:
La Creación es exclusiva de Dios. El hace surgir los seres, los hace vivir. Nosotros al
descubrir por los signos de la creación que Dios es el autor del universo, proclamamos que
toda realidad depende de su bondad de Padre y que está ordenada para dar gloria a su
Creador, es decir, para irradiar la bondad y el amor de Dios.

Lector 1:

Bendigamos a Dios Padre por su amor y la obra de la creación cantando:

DEMOS GRACIAS AL SEÑOR

/Demos gracias al Señor demos gracias

Demos gracias al Señor/
Por la mañana las aves cantan
Las alabanzas al Padre Creador
Y por la tarde las obras cantan

2
Las alabanzas al Padre Creador.

Lector 2:

Preguntémonos:
¿Sabemos reconocer en la naturaleza el amor de Dios?
¿Cuidamos esa naturaleza, el medio ambiente que nos rodea para que el mundo
sea más justo y todos nos beneficiemos compartiendo los bienes que Dios nos ha
dado?
(Breve silencio)

Sacerdote:

Unámonos todos al cántico de Daniel y digamos juntos:

(El lector va proclamando una frase y la comunidad responde)

L: “Obras todas del Señor, bendigan al Señor,

R/ Glorifíquenlo por siempre con cánticos.
L: Angeles del Señor, bendigan al Señor.
R/ Glorifíquenlo por siempre con cánticos.
L: Cielos, bendigan al Señor
R/ Glorifíquenlo por siempre con cánticos.
L: Aguas del cielo, bendigan al Señor
R: Glorifíquenlo por siempre con cánticos.
L: …Que la tierra bendiga por siempre al Señor,
glorifíquelo por siempre con cánticos… Daniel 3,52-90

Canto: JESUCRISTO ME DEJÓ INQUIETO – JESUCRISTO YO

ESTOY AQUÍ - CRISTO NOS DA LA LIBERTAD.

(En pie, levantan la mano derecha y todos proclaman la

segunda parte de Credo)

Sacerdote:
“ CREO EN UN SOLO SEÑOR, JESUCRISTO, HIJO ÚNICO DE
DIOS, NACIDO DEL PADRE ANTES DE TODOS LOS SIGLOS:
DIOS DE DIOS, LUZ DE LUZ, DIOS VERDADERO DE DIOS
VERDADERO, ENGENDRADO, NO CREADO, DE LA MISMA
NATURALEZA DEL PADRE, POR QUIEN TODO FUE HECHO; QUE POR NOSOTROS,
LOS HOMBRE, Y POR NUESTRA SALVACIÓN BAJÓ DEL CIELO Y POR OBRA DEL
ESPÍRITU SANTO SE ENCARNÓ DE MARÍA, LA VIRGEN, Y SE HIZO HOMBRE; Y POR
NUESTRA CAUSA FUE CRUCIFICADO EN TIEMPOS DE PONCIO PILATO; PADECIÓ Y
FUE SEPULTADO Y RESUCITÓ AL TERCER DÍA SEGÚN LAS ESCRITURAS Y SUBIÓ
AL CIELO Y ESTÁ SENTADO A LA DERECHA DEL PADRE Y DE NUEVO VENDRÁ CON
GLORIA PARA JUZGAR A VIVOS Y MUERTOS Y SU REINO NO TENDRÁ FÍN…”

(Se entroniza la Biblia y se coloca en el centro de la mesa) Música Instrumental del fondo.

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Lector 1
“La Palabra era la luz verdadera, que, con su venida al mundo, ilumina a todo
hombre. Estaba en el mundo, pero el mundo, aunque fue hecho por ella, no la
reconoció. Vino a los suyos, pero los suyos no la reconocieron. A cuantos la
recibieron, a todos aquellos que creen en su nombre, les dio capacidad para ser
hijos de Dios.”. Juan 1, 9-14.

Lector 2
La Palabra se hizo carne y habitó entre nosotros; hizo suya toda la condición humana, es
decir, se hizo semejante a nosotros en todo, menos en el pecado; que asumió una carne
pecadora sometida a la muerte y a todas las circunstancias alegres y dolorosas de la vida
humana.

Lector 1:
Jesús es verdadero Dios y verdadero hombre “Concebido por obra y gracia del Espíritu
Santo”, nació de Santa María Virgen. Misterio de la Encarnación.
La Anunciación a María inaugura “la plenitud de los tiempos”, es decir, el cumplimiento de
las promesas.

Todos: Dios te salve María, llena de gracia…

Lector 2: El Verbo se encarnó para:

� Que nosotros conociéramos así el amor de Dios (1 Jn 4,9)
� Para ser nuestro modelo de santidad (Mt 11,29; Jn 14,6)
� Para hacernos partícipes de la naturaleza divina (2 Pe 1,4;

Lector 1:
Jesucristo tomó nuestra condición humana para redimirnos y darnos nueva vida. Nos
señala un camino distinto cuando nos anuncia el Reino de Dios y nos invita a adquirir las
disposiciones necesarias para entrar en ese Reino creando en nosotros actitudes nuevas de
caridad, de humildad, de justicia y de perdón, supone, por tanto, un nuevo modo de ser y
de actuar capaces de amar, servir y acoger a las personas, negarse a sí mismo y tomar la
cruz.

Lector 2:
Los cristianos sabemos que el mundo debe ser transformado y redimido en Cristo y, por lo
tanto, desde la fe, debemos trabajar por eliminar todo aquello que daña, degrada o
destruye la creación, la vida del hombre. Seguir a Jesucristo, seguir su camino es aceptar
su estilo de vida, es asumir su Palabra; porque sólo Él tiene palabras de vida eterna”.

Preguntémonos:
¿Estamos dispuestos realmente a seguir a Jesús, a hacer vida sus enseñanzas y a
comprometernos por el Reino de Dios?

(Breve silencio)

Sacerdote: Invita a orar juntos:

“Señor, hazme un instrumento de tu paz,

Haz que donde haya odio, siembre yo amor,

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Donde haya injuria, perdón;
Donde haya duda, fe;
Donde haya desaliento, esperanza;
Donde haya sombras, luz;
Donde haya tristeza, alegría.
Oh divino Maestro,
Concédeme que no busque ser consolado,
Sino consolar;
Que no busque ser comprendido,
Sino comprender:
Que no busque ser amado, sino amar;
Porque dando, de Ti recibimos;
Perdonando, Tu nos perdonas;
Y muriendo en Ti, naceremos para la vida eterna”.

Canto: EL ESPIRITU DE DIOS ESTA EN ESTE LUGAR

(Todos en pie, y entre- abrazados proclaman la tercera parte del Credo)

Sacerdote:
“CREO EN EL ESPÍRITU SANTO SEÑOR Y DADO DE VIDA, QUE
PROCEDE DEL PADRE Y DEL HIJO, QUE CON EL PADRE Y EL HIJO
RECIBE UNA MISMA ADORACIÓN Y GLORIA, Y QUE HABLÓ POR
LOS PROFETAS; CREO EN LA IGLESIA, QUE ES UNA, SANTA,
CATÓLICA Y APOSTÓLICA, CONFIESO QUE HAY UN SOLO
BAUTISMO PARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS, ESPERO LA RESURRECCIÓN DE
LOS MUERTOS Y LA VIDA DE UN MUNDO FUTURO”. AMÉN.

(Se entroniza la antorcha o el recipiente con fuego y se coloca en el piso, al frente de la

mesa) Música Instrumental

Lector 1: “... recibiréis la fuerza del Espíritu Santo, que vendrá sobre nosotros, y
seréis mis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria y hasta los confines
de la tierra". (Hechos 1, 8)

Lector 2
La tercera parte del Credo, revela la tercera persona de Dios comunión, el Espíritu Santo,
Dios como el Padre y el Hijo, “que como el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y
gloria”, en aquel que lo recibe produce vida, vida divina.

Lector 2: Esta profesión de fe formulada por la Iglesia, nos remite a las fuentes bíblicas,
donde la verdad sobre el Espíritu Santo se presenta en el contexto de la revelación de Dios
Uno y Trino, está basada en la Sagrada Escritura.

Lector 1: el Espíritu Santo es la omnipotencia del amor con que Dios crea, guía la historia
y realiza, en Jesucristo, su plan de salvación en el mundo.

Lector 2: La venida del Espíritu Santo sucede después de la Ascensión al cielo. La pasión y
muerte redentora de Cristo producen entonces su pleno fruto. Jesucristo, Hijo del hombre,
en el culmen de su misión mesiánica, “recibe” del Padre el Espíritu Santo en la plenitud en

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que este Espíritu debe ser “dado” a los Apóstoles y la Iglesia, para todos los tiempos, Jesús
dijo: “Yo cuando sea levantado de la tierra, atraeré a todos hacia mí” (Jn 12,32).

Lector 1:
A partir del Bautismo, El Espíritu Divino habita en el cristiano como en su templo. En
definitiva: La vida según el Espíritu, cuyo fruto es la santificación (Cfr. Rm 6,22; Gal 5,22),
suscita y exige de todos y de cada uno de los bautizados el seguimiento y la imitación de
Jesucristo, en el escuchar y meditar la Palabra de Dios, en la participación consciente y
activa en la vida litúrgica y sacramental de la Iglesia.

Lector 2:
La Iglesia es el pueblo que Dios elige y llama entre los pueblos, con el que establece una
Alianza, pueblo de su propiedad:
� Abierto a todos los hombres y mujeres, sin importar la raza, la nación, o clase social a la
que pertenezcan.
� Al que se nace por la Fe y el bautismo
� Que se reúne para escuchar la Palabra de Dios y darle gracias por sus obras de
salvación
� Enviado al mundo para dar testimonio del Evangelio con obras y palabras.

Lector 1:
La Iglesia, como comunidad de fe, de esperanza, al reflexionar sobre sí misma, descubre
cuatro notas que la definen y que forman parte de la profesión de fe: Creo en la Iglesia,
que es Una (en la fe de Jesucristo), Santa (porque es fundada por Jesucristo),
católica (porque es universal) y Apostólica (porque está fundada en fe de los
apóstoles).

Lector 2:
El cristiano que une su propia muerte a la de Jesús, ve la muerte como un ir hacia Él y un
participar de la vida eterna. La vida de los que en ti creemos Señor, no termina, se
transforma; y al deshacerse nuestra morada terrenal, adquirimos una mansión eterna en el
cielo.

Preguntémonos: ¿Somos dóciles a la acción del Espíritu Santo? ¿su acción

revitaliza nuestra vida y la vida de la Iglesia?

Breve silencio.

Sacerdote: Oremos:

Ven Espíritu Santo

Ven, Espíritu Santo,

Llena los corazones de tus fieles
y enciende en ellos
el fuego de tu amor.
Envía, Señor, tu Espíritu.
Que renueve la faz de la Tierra.

Oh Dios,
que llenaste los corazones de tus

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fieles con la luz del Espíritu
Santo; concédenos que,
guiados por el mismo Espíritu,
sintamos con rectitud y
gocemos siempre de tu consuelo.
Por Jesucristo Nuestro Señor.
Amén.

CANTO: VICTORIA TU REINAS

Se invita para que todos en pie, levanten su mano derecha y la izquierda la

coloquen en el pecho.

CREDO
SIm LA
Ahora más que nunca y contra la opinión de tantos,
SOL RE SI7
entre voces de ultratumba, y sus acordes camuflados,
MIm SIm
poemas y lisuras, siempre oscuro, nunca claro,
SOL MIm FA# FA#7
los expertos de la duda y los que dudan por encargo.

SIm LA
Ahora más que nunca y aunque te parezca extraño,
SOL RE SI7
entre genios que aseguran que ahora ya nada es pecado,
MIm SIm
los óleos contra natura y el abuso de lo abstracto
SOL MIm FA# FA#7
y en el ecran se estimula a que todos seamos villanos.

SI SI7 MIm
Ahora más que nunca y para decepción de varios,
LA RE
entre niños que pululan y fetos asesinados,
FA# SOL
entre algunos que disfrutan de las leyes del mercado,
MIm FA# FA#7
mientras mi pueblo deambula sin comida y sin trabajo.

SI SI7 MIm

7
Ahora más que nunca y con los dientes apretados,
LA RE
entre horóscopos y brujas y un racismo solapado,
FA# SOL
entre Anás, Caifás y Judas, entre Herodes y Pilatos
MIm FA# FA#7
y esa deuda que estrangula a todos mis pueblos hermanos.

SOL SIm
Ahora más que nunca, quiero que quede claro,
SOL FA#7
respetando posturas, ¡¡¡permítannos gritarlo!!!

SIm SOL
Creo en Dios Padre todopoderoso,
RE LA
creador del cielo y de la tierra,
SIm
creo en Jesucristo,
SOL RE LA
su único hijo, nuestro Señor,
MIm SIm
que fue concebido por obra y gracia
FA#SI Mi(7) La(7)
del Espíritu Santo
MIm SIm
y nació de Santa María Virgen,
SOL FA# FA#7
padeció bajo el poder de Poncio Pilato,

SIm SOL
fue crucificado, muerto y sepultado
RE LA
y descendió a los infiernos
SIm SOL
y al tercer día resucitó,
RE LA
resucitó de entre los muertos
MIm SIm

8
y subió a los cielos y está sentado
FA#SI Mi(7) La(7)
a la derecha de Dios Padre
MIm SIm
y desde allí ha de venir
SOL FA# FA#7
a juzgar a los vivos y a los muertos...(¡palmas!)

MIm SIm MIm SIm

SOL FA# SOL FA# SIm SOL FA# SIm
SOL FA# SIm

SIm SOL
Creo en el Espíritu, Espíritu Santo,
RE LA
y en la santa Iglesia Católica,
SIm
en la comunión de los santos,
SOL
el perdón de los pecados,
RE LA
la resurrección de los muertos
MIm FA# SIm
y la vida eterna, Amén,
MIm FA# SIm
y la vida eterna, Amén,
SOL FA#
ahora más que nunca,
SOL FA# SIm SOL
ahora más que nunca: ¡¡Amén¡¡
SIm SOL SIm SOL SIm SOL
¡¡Amén¡¡ ¡¡Amén¡¡ ¡¡Amén¡¡
FA# SIm FA# SIm
¡¡Amén¡¡ ¡¡Amén¡¡

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 CREDO
NICEO-CONSTANTINOPOLITANO

Creo en un solo Dios, Padre Todopoderoso

Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible.
Creo en un solo Señor Jesucristo, Hijo único de Dios,
nacido del Padre antes de todos los siglos; Dios de Dios,
Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero,
engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre,
por quien todo fue hecho; que por nosotros los hombres, y
por nuestra salvación bajó del cielo y por obra del Espíritu Santo se encarnó
de María, la Virgen, y se hizo hombre,
y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue
sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo y está
sentado a la derecha del Padre y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a
vivos y muertos, y su reino no tendrá fin.
Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida que procede del Padre y del
Hijo y que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que
habló por los profetas.
Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica.
Confieso que hay un solo bautismo para el perdón de los pecados.
Espero la resurrección de los muertos y la vida de un mundo futuro. AMÉN.

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