Ser libre es entender que somos perfectos y la clave está en nosotros
mismos. La vida te enseña muchas cosas y entre ellas esta que para saber quién eres realmente, primero debes conocer tu interior, tu instinto, y escuchar al corazón y entender que el camino a nuestros sueños no es más que una competencia contra nosotros mismos, a mejorarnos cada día más. La libertad (propia voluntad) es un concepto abstracto y no tiene ningún sentido práctico, lo ideal es buscar algo más significativo lo cual es la liberación (acción de poner en libertad). Muchas veces el miedo a lo desconocido y la presión que ejerce la sociedad son limitantes y obstáculos grandes en el camino hacia nuestros sueños, pero decir la verdad de lo que se siente es la consecuencia de una mente liberada de prejuicios sociales y liberada de imposiciones normalistas. Al seguir nuestros propios instintos emprendemos el camino hacia la verdadera sabiduría, ya que, por medio de la experiencia, de la aventura, del adentramiento a lo desconocido se crean conocimientos. El instinto es parte fundamental en el camino a entender que somos natamente perfectos. La razón es la facultad para pensar, razonar e inferir. El uso de la razón al momento de tomar una decisión del corazón debe tener un equilibrio, una armonía perfecta entre lógica y sentimientos. Para comprender que la perfección y la liberación yacen en nosotros mismos debemos amar y entender lo que hacemos día a día. Se nace completo, y una persona solo puede tener un complemento, por lo tanto está mal expresar “me completas”. Ser libre es consecuencia de entender que estamos completos. La idea de sentir que se necesita de algo o alguien para sentirse completo es una limitación y un obstáculo para llegar a la liberación, lo cual en otras palabras es; la felicidad (estado de ánimo de la persona que se siente plenamente satisfecha por gozar de lo que sea o por disfrutar de algo bueno). Es muy clara la percepción de Juan Salvador Gaviota, al representar la unión perfecta entre el espíritu y el cuerpo, él integra todas sus energías para mostrar el arte de volar y seguidamente descubrir lo que es ser libre. Y que librarse de algo es sentir capaz de hacer cualquier cosa que quiera, que permitir que nuestro instinto guie nuestras acciones es una manera de obtener conocimiento y experiencias. Que no es posible encontrar la paz interior, es decir, la liberación, si no se actúa con el corazón. Y que las personas que se niegan al cambio y a nuevas experiencias solo están asustadas de lo desconocido, es decir, de lo que no entienden.