El trabajo colaborativo supone poner en común conocimientos,

materiales e ideas con la finalidad de compartirlos, normalmente de

forma desinteresada para construir un conocimiento común que se
pueda utilizar globalmente.
También se define como aquellos procesos intencionales de un
grupo para alcanzar objetivos específicos, más que herramientas de
dar soporte y facilitar este tipo de aportes. Este concepto surge a
partir de las posibilidades que ofrece Internet para participar en
proyectos masivos, lo que se ha convertido en un modo común de
trabajo libre.
CARACTERISTICAS
1 Antecedentes
Antes de que se inventara el término para este tipo de trabajo por Internet en
2006, ya existían iniciativas que lo llevaban en práctica, tales como programas
digitales de código abierto (GNU/Linux, Apache).

El funcionamiento de estos programas de código abierto partía de que cualquier

usuario con los conocimientos apropiados podía “adueñarse” de la
programación e intervenirla a su antojo, siempre y cuando compartiera
libremente el resultado y no devengara ningún capital al hacerlo.

2. Diferencias respecto al trabajo en equipo

El primero parte de la estructuración de un grupo de trabajo jerarquizado, con

jefes y coordinadores, asumiendo una responsabilidad compartida en torno a la
consecución de un objetivo.

El segundo, en cambio, parte de un conjunto de personas que no requiere sino

un liderazgo informal, sin coordinadores, pues cada uno se hace cargo de su
responsabilidad individual de cara al aporte que puede hacer a la nube de
conocimiento entre todos construida.

3. Sin autor, sólo colaboradores

Un aspecto importante de este tipo de producción de información es que si bien

cada individuo parte de sus conocimientos individuales para contribuir a la

Zoila Minerva Velazco Martínez

 ‘Wiki’, ninguno asume la autoría individual de nada: ningún texto se firma,
ningún nombre se vincula con lo escrito ni tiene propiedad sobre ello.

Además, la mayoría de este tipo de asociaciones comparte su contenido en base

a licencias de autoría colectiva y compartida (como Creative Commons).

4. Producción entre pares

Desprovistos de toda obligación formal hacia el proyecto (así como de toda

ganancia capital), los colaboradores suelen hacerlo impulsados por una
perspectiva o necesidad común satisfecha a partir de la generación conjunta de
saberes. En vez de privilegiar la competencia, se estimula la colaboración.

Y aunque dichas motivaciones suelen estribar en cierta idea de altruismo y de

vocación por el saber, en esto opera de manera similar al crowdfunding, donde
una masa inversora sustenta un proyecto individual para darle inicio.

5. La tecnología como medio

La experiencia de trabajo colaborativo se expande a comunidades repartidas a lo

largo del mundo gracias a la aparición de Internet como herramienta de
interconexión global y de intercambio de datos a gran escala, permitiendo la
libre asociación de individuos de distintos países, nacionalidades y culturas en
torno a un objetivo afín.

Esto significa que a menudo los colaboradores de un mismo proyecto jamás se

han visto en persona, ni comparten mayormente información que no sea
concerniente al proyecto de trabajo en común.

Si a eso sumamos la aparición posterior de individuos que no estuvieron

presentes en el inicio del proyecto, pero que suman y corrigen y actualizan la
información, nos daremos cuenta de la compleja estructura de interacción que
se teje a partir de un grupo humano separado por miles de kilómetros. Y eso
gracias a las facilidades tecnológicas recientes

Zoila Minerva Velazco Martínez

6. Comunidades de aprendizaje colaborativo

Una aplicación reciente de este tipo de procesos se ha dado en torno a las

nuevas propuestas educativas, que buscan aprovechar la oferta cultural de
vanguardia para potenciar el libre alcance del conocimiento.

Esto se daría a través de redes grupales de aprendizaje, cuyo eje estaría centrado
en el intercambio de experiencias, la producción conjunta de proyectos e
innovación en la forma de llevar a cabo investigaciones. Se supera así la noción
clásica de adquisición individual del conocimiento y se marcha hacia métodos
más masivos e integradores, cuyo sentido sea el aprendizaje entre pares.

7. Modelos de negocio masivo

No todos los proyectos de trabajo colaborativo son necesariamente sin fines de

lucro, no obstante. Es perfectamente posible que un colectivo se organice en
base a este modelo o alguno similar, para emprender conjuntamente un
proyecto que acarree dividendos

De hecho, existen empresas que incorporan este método a sus dinámicas de

trabajo, a partir de la microexplotación de miles de colaboradores,
llamados clickworkers, en torno a la consecución de un objetivo financiero.

Una de las primeras labores realizadas de esta manera fue un proyecto de

mapeo y clasificación de los cráteres del planeta Marte, a partir de información
recopilada por la NASA. La disolución del trabajo en pequeñas parcelas
individuales permitió llevarlo a cabo en tiempo récord, maximizando los
trabajadores y minimizando el tiempo de trabajo. Durante los primeros seis
meses del proyecto, se sumaron 85.000 usuarios voluntarios.

8. Experiencias exitosas de trabajo colaborativo

Hay numerosas experiencias de interés en este tipo de trabajo conjunto, aparte

de las que ya hemos mencionado. La Red Latinoamericana de Portales
(RELPE), por ejemplo, ha llevado a cabo con bastante éxito programas
educativos piloto cuyo pivote principal lo constituye este tipo de iniciativas de
circulación del conocimiento y aprendizaje participativo.

Zoila Minerva Velazco Martínez

 La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), por ejemplo, llevó a
cabo en 2015 el primer Editatón WikiUnam, un espacio de doce horas continuas
de corrección, actualización y generación de contenidos abiertos para la
Wikipedia, orientados a la educación media y superior.

9. Virtudes del trabajo colaborativo

Las potencias de este método son varias, y estriban más que nada en el máximo
aprovechamiento del tiempo, sobre todo de cara a grandes volúmenes de trabajo
o de conocimiento.

La división por partes del todo permite enfrentarlo de manera descentralizada,

lo cual libera de la necesidad de una cúpula controladora o de una repartición
del trabajo que demande primero una formación intensiva del personal. En este
tipo de asociaciones cada quien provee a partir de su área de experticia y su
disponibilidad personalísima.

10. Retos del trabajo colaborativo

Por otro lado, la heterogeneidad implícita en el método (uno de sus mayores

fundamentos y valores) exige un proceso de revisión y rescritura también
descentrado, poco homogéneo, que podría ir en detrimento de las áreas menos
populares o favorecidas entre los colaboradores.

De manera similar, la edición continua le confiere al material un estado de

transitoriedad permanente, lo cual promueve a la desconfianza de quienes
esperen un modelo informativo clásico y de autoridad. La legitimación, como
suele ocurrir en la comunidad 2.0, se debe dar a partir de otro tipo de
estrategias funcionales.

Fuente: https://www.caracteristicas.co/trabajo-colaborativo/#ixzz5evKKXh1d

Zoila Minerva Velazco Martínez

Las relaciones interpersonales son asociaciones entre dos o más personas
Estas asociaciones pueden basarse en emociones y sentimientos, como
el amor y el gusto artístico, el interés por los negocios y por las actividades
sociales, las interacciones y formas colaborativas en el hogar, entre otros. Las
relaciones interpersonales tienen lugar en una gran variedad de contextos,
como la familia, los grupos de amigos, el matrimonio, los entornos laborales,
los clubes sociales y deportivos, las comunidades religiosas y todo tipo de
contextos donde existan dos o más personas en comunicación
.
Una relación Interpersonal es una fuerte, profunda o cercana asociación o
conocidos, entre dos o más personas.
La atracción, amor, solidaridad e interacciones de negocios los trae juntos y
eventualmente resulta una relación interpersonal solida 2 Las personas en una
relación interpersonal pueden interactuar abiertamente, en cubierto, cara a cara
o hasta anónimamente. Estas ocurren entre personas que llenan
implícitamente o explicita mente las necesidades físicas o emocionales.
Pueden ocurrir con amigos, familias, trabajadores, extraños, amigos virtuales,
doctores o clientes 3
Las relaciones interpersonales pueden ser reguladas por ley, por costumbre o
por acuerdo mutuo, y son una base o un entramado fundamental de los grupos
sociales y de la sociedad en su conjunto. Estas relaciones juegan un papel
fundamental en el desarrollo integral de las personas. A través de ellas,
el individuo obtiene importantes refuerzos sociales del entorno más inmediato,
lo que favorece su adaptación e integración al mismo.

CARACTERISTICAS

1.Actuar a la altura: Va mucho más allá del cómo nos sentimos con respecto a
las personas (algunos días la gente nos agrada más que otros); tiene que ver
con ser íntegros y honrar la presencia de los demás dándoles su lugar. Estar a
la altura significa portarnos de manera respetuosa, atenta, y correcta en cada
interacción – independientemente del estado de ánimo que tengamos.

2.Actitud de servicio y contribución: Cómo dijo Zig Ziglar “Tú puedes tener todo
lo que desees en la vida, siempre y cuando ayudes lo suficiente a los demás a
obtener lo que desean en la vida”. Aportar valor a la vida de los demás siempre
sumará a tus niveles de satisfacción.

3. Una comunicación honesta: La apertura y la sinceridad te conectan de

una manera profunda y genuina con los que te rodean. Expresar lo que
sientes, decir lo que piensas y escuchar sin juzgar al otro, siempre
fortalecerá los lazos en una relación, ya sea para construirla al principio o
para fortalecerla con el paso de los años.
4. El ser amable: Si las personas encuentran en ti una sonrisa, positividad y
palabras amigables, puedes estar seguro de que la gente siempre
gravitará a tu alrededor. A nadie le gustan los gruñones y generalmente
“lo que das, se te regresa” así que pon más atención en como haces sentir
a las personas que te rodean.

Zoila Minerva Velazco Martínez

 5. La paciencia: Todos somos humanos y todos vamos a fallar alguna vez.
Cultivar la paciencia, la empatía y la aceptación te ayudará a mantener la
conexión con los demás y a tolerar las “malas rachas” que se dan en las
relaciones.
6. La lealtad: Es la disposición y compromiso de dar lo mejor de ti en tus
relaciones y también es el coraje de pedir lo que necesitas para que la
relación funcione bien. Trabajar los conflictos de manera leal y directa es
difícil, sobre todo cuando se está enojado o molesto; por eso la mayoría
opta en abandonar las relaciones cuando tienen una dificultad.
7. Tener un propósito común: Este es un elemento vital para las relaciones
de crecimiento. Procura encontrar gente con sueños y aspiraciones, que
comparta tus intereses y tu etapa de vida, con la que puedas crecer y
construir, y será una de las experiencias más enriquecedoras de tu vida.
8. Saber divertirse: Hasta en las relaciones de negocios se necesita el factor
de diversión que nos ayuda a bajar la guardia, nos hace gozar la presencia
del otro, nos da la libertad de ser nosotros mismos y logra que todo fluya
de manera natural. Tanto las conversaciones interesantes, como las risas
compartidas y los momentos de autenticidad nos ayudan a crear
memorias que duran para siempre.

Zoila Minerva Velazco Martínez