Instalaciones

Alumno: Elías Caceres

Fecha: 19/03/2018

Cómo funciona una red de abastecimiento de agua potable en una ciudad.

Una red de abastecimiento de agua potable es aquella que facilita que el agua avance
desde el punto de captación hasta el punto de consumo en condiciones aptas
para su consumo. Por aptas no solo se entiende en cuanto a condiciones sanitarias de
calidad, sino también de cantidad. La fuente de agua que da origen al sistema puede
ser de:

 Agua de manantiales naturales.

 Agua de mar, que se desaliniza antes de entrar en la red de abastecimiento.
 Agua superficial, como la procedente de lagos, ríos, embalses o arroyos.
 Agua subterránea, captada con extracciones.
 Otros, como agua de lluvia almacenada en aljibes.

El proceso de saneamiento y desinfección es el que media entre el agua en su punto de

origen y el domicilio para su consumo humano, ya como agua potable. La red de
abastecimiento de agua más completa es la que emplea aguas superficiales, con cuatro
partes; captación y almacenamiento de agua bruta, tratamiento del agua,
almacenamiento del agua tratada y distribución por medio de conducciones.

Red de conducciones de
distribución
Consta de estaciones de
bombeo; tuberías
principales, secundarias y
terciarias; tanques de
almacenamiento
intermediarios, válvulas;
dispositivos para medición
y derivaciones
domiciliares.
Cómo funciona una red doméstica de Agua potable.

La mayor parte del sistema de fontanería está oculto dentro de las paredes o el falso
techo de nuestras viviendas, pero en realidad el sistema es muy sencillo y su
mantenimiento muy fácil de hacer.

El típico sistema de
fontanería de una casa
normal incluye tres
partes: un sistema de
suministro de agua, un
juego de aparatos en
instalaciones fijas y un
sistema de desagüe. El
agua entra a través de una
línea de distribución
principal que suele ser
responsabilidad de la
administración municipal. El agua es suministrada por una empresa privada o compañía
pública y pasa a través de un contador que es el que registra la cantidad que
consumimos.

La red de suministro suele tener una presión suficiente como para garantizar un caudal
adecuado en toda una zona o región. Una vez que el agua ha pasado a través del
contador, llega a nuestra vivienda, donde se coloca una llave de corte general que aísla
nuestra casa del resto de la instalación, el número de llaves de corte generales
dependerá del tipo de vivienda y del diseño de la instalación. El suministro llega al
calentador de agua, que puede ser eléctrico, de gas, de gasóleo, etcétera, y se
distribuye en una red de tuberías de agua caliente y de agua fría, y en determinados
casos una red de tuberías de retorno para garantizar el suministro de agua caliente.

Esta red de tuberías conecta con todos los aparatos e instalaciones fijas: fregaderos,
bañeras, duchas, lavadoras, etcétera. En cada cuarto húmedo se coloca una llave de
corte para poder aislar la instalación por zonas. A su vez, cada aparato de instalación
tiene su propia llave de corte que facilita el mantenimiento, la reparación o la sustitución.

La red de desagüe. El agua de desecho entra en el sistema de desagüe, primeramente,

pasa por un sifón, un tubo en U o en S invertida que mantiene el agua e impide que los
gases y olores entren en la casa, cada aparato suele tener su sifón individual, y en los
casos de duchas o bañeras se utiliza un sifón que se coloca en el pavimento del cuarto
húmedo. En algunos aparatos, este sifón es registrable, de tal forma que puedes
limpiarlo o recuperar algún anillo o pequeño objeto que hayas perdido mientras lavabas.
Lo más importante en el sistema de desagüe de nuestras viviendas es garantizar la
ventilación, el sistema de ventilación primaria consiste en unos respiraderos colocados
en las cubiertas de nuestros edificios y que garantizan que no se produzcan succiones
en el sistema, y que limitarían el correcto flujo del agua de drenaje. (en determinados
casos se pueden utilizar sistemas en bajo cubierta)

La red de desagüe se
conecta con el sistema de
alcantarillado municipal
mediante colectores
enterrados a nivel de
cimentación de nuestra
casa y que suelen tener un
sistema de arquetas de
registro para su
mantenimiento y
reparación. Cuando no
existe una red de
saneamiento municipal, se utiliza un sistema de fosas sépticas para el tratamiento de
las aguas residuales.