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DOI: 10.22199/S07181043.1998.0016.

00011

Estudios Atacameños Nº 16 - 1998

Peine: Saber andino, manejo de recursos y


transformaciones

MARIE KAROLINA NÚÑEZ S.*

RESUMEN process of substantial changes is seen in this oa-


sis. It is understood in this way a ethnic situation
Los pueblos andinos, tienden a pensar el espacio based on cultural framed works in tautness, caused
y manejar el máximo de recursos disponibles, a not precisely from the inside, but from the explicit
través de una estrategia ecológica subjetiva, con- impact of the agents of the external changes, where
ducente a presentar respuestas que, en este caso, the framed works are extended in a fragile scenery
los habitantes del oasis de Peine reflejan en dis- of simultaneous phenomena of continuity and
tintos ámbitos del ciclo de la vida cotidiana. A tra- change.
vés de las nociones propias de su sabiduría, con
adaptaciones científicas en torno a la organización
y administración, consistente en el paisaje como Introducción
recurso, se advierte en este oasis un proceso verti-
ginoso de cambios sustanciales. Se entiende así Los oasis ubicados al sur del Salar de Atacama se
una situación étnica sustentada por entramados han considerado como aislados y de menor acce-
culturales en tensión, provocados no precisamen- so a los cambios por su distanciamiento de los
te desde dentro, sino que, del impacto explícito de centros de mayor transformación, como Calama
los agentes de cambio externos, hacia donde se y San Pedro de Atacama (Mostny 1954). Sin em-
extienden los entramados en un escenario frágil bargo, aunque el conocimiento andino o vernacular
de fenómenos simultáneos de continuidad y cam- tiende a conservarse aquí, la introducción de cam-
bios. bios es cada vez más rápida, creándose escenarios
dinámicos que requieren de nuevos análisis (Folla
ABSTRACT 1989; Hidalgo, B. 1992; Núñez, P. 1993).

The Andean people trend to think the space and La comprensión del espacio, en su vasta acepción,
manage most of the available resources through a es lo que permite a mujeres y hombres andinos
subjective ecological strategy, guiding to show manejar un conjunto de conocimientos fundados
answers that, in this case, the inhabitants of the en la praxis y habilidades para dominar un Saber,
oasis of Peine reflex in different situations of the registrándose, además, bajo el soporte de la me-
cycle of the ordinary life. Through the own notions moria y su transmisión oral. De esta manera, los
of their wisdom, with scientific adaptations around conocimientos que se van adquiriendo y practi-
the organisation and administration, which consist cando en la vida cotidiana hacen que el contenido
in the landscape as a resource, a vertiginous de la memoria se refuerce a partir de conceptos
subjetivos (Vallée, 1970).

* Universidad Academia de Humanismo Cristiano; San- En la localidad de Peine, ubicada hacia el sector
tiago de Chile. E-mail: fractal@netline.cl sur oriental del Salar de Atacama, se observan

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manejos de recursos-bienes, que los peineños or- la a estos cuatro espacios que se conectan con di-
ganizan en el plano del ciclo productivo anual y versos recursos y ambientes (Núñez, L. 1995).
ritual, es decir, una relación vital entre tiempo,
espacio, recurso y pensamiento. Lo interesante es En la propia localidad de Peine, las tierras pro-
que esta comunidad ha presentado respuestas y ductivas se ubican en el sector norte del pueblo,
soluciones en la administración de sus bienes. En en una franja que se desplaza de este a oeste, in-
este sentido, se expondrán algunos ejemplos re- distintamente; por lo tanto se observa una organi-
presentativos con el objeto de dar cuenta de algu- zación del espacio natural de acuerdo a ciertas
nos conocimientos locales respecto del manejo de orientaciones. En este sector se ubican los terre-
los recursos, de sus respuestas para afrontar even- nos, llamados por los peineños como chacras o
tos de stress por crisis de escasez y, finalmente, melgas, asociados a una alta y extensiva producti-
señalar los escenarios en que se sitúan los saberes vidad de maíz y alfalfa. Acerca del maíz, los más
en relación a los agentes de cambio. utilizados son el Cape y Morocho. El primero, es
un maíz blando que se destina principalmente para
La información que contiene el presente artículo, el tostado y el Morocho, llamado amarillo, es más
está basada preferentemente en las notas de cam- duro en relación al anterior y se emplea también
po de la investigadora; en consecuencia, se para el tostado y para espesar la sopa actuando
jerarquiza la información de carácter etnográfica como sémola o harina, cuando se muele.
más que la bibliográfica.
En sectores más reducidos, como la huerta, se
1. Conocimientos propios siembran zapallo, lechuga, tomate, repollo, zana-
horia, cebolla y las “verduritas” que son el cilantro
Sobre los conocimientos en uso, se identifica un y el perejil. Para el éxito de las cosechas, ha sido
máximo provecho de la zona en general y, de las fundamental el uso del abono. La taxonomía del
abono corresponde al de animal y de hoja (tam-
tierras productivas con recursos, para el caso es-
bién llamado “de leña”). Los más usados y “me-
pecífico de la localidad de Peine. Este máximo
jores para la siembra” es el guano de cordero, bu-
provecho de la zona se refiere al conocimiento del
rro y tierra de hoja; este último se encuentra en
espacio que rodea a Peine, fundamentalmente so-
gran cantidad y calidad en la vega de Tilomonte.
bre el manejo de una geografía contrastada, como
Ejemplos para la relación entre recursos y tipos
también de los medios que aporta la gradiente
de abonos, se citan los siguientes: para el maíz, se
altitudinal, desde los lagos de altura hasta la playa
utilizan los de cordero, conejo y salitre. Para las
del salar. “plantas chicas”, como el cilantro, perejil y toma-
te principalmente, se prefiere utilizar el abono de
Se localiza, desde una perspectiva de oeste a este, hoja y, si éste no hubiere, se usaría el de cordero,
un primer sector que corresponde al borde orien- pero no fresco, sino aquél que está en “el cerro”
tal del Salar de Atacama, allí se ubican vegas como ya varios años. Para el zapallo, se usa el de gallina
las de Tilocalar y Tilopozo. Posteriormente, los o conejo. También se encuentran otros abonos
oasis piemontanos, al cual pertenecen Peine y alternativos como el de chancho. Por lo tanto, en
Tilomonte, caracterizados por sus arboledas Peine habría una cultura del abono, como también
(algarrobales y chañares) asociadas a una extensa se ha observado en Socaire y en Camar. Tradicio-
productividad agraria y pecuaria. Siguiendo la nalmente se han usado los de tipo animal y los de
gradiente, se localizan las quebradas intermedias hoja, experimentándolos en relación a las carac-
con acceso al recurso-forraje, principalmente para terísticas de los recursos que se desean cultivar;
las labores pastoriles. Y por último, el sector sin duda alguna, han sido bastante exitosos. Res-
precordillerano y alta puna, con un aumento de pecto de los fertilizantes exógenos que han llega-
vegetación natural, presencia de lagunas en altura do a Peine, habla un testimonio respecto de esto y
y mayor humedad, permitiendo un hábitat adecua- de la preparación de la tierra en relación a los abo-
do para las tareas estacionales de pastoreo, espe- nos: “Con abono de animal, así se preparaba an-
cialmente las realizadas en las alturas de Pular. tes, pero ya más después, cuando empezó INDAP,
De este modo, la geografía de esta zona, se vincu- empezó aquí a llegar otros abonos, pero eso era

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para el maíz, pero eso no le echábamos nosotros. en la relación peso a peso. Otro antecedente de
Para el maíz, nosotros le echábamos el salitre. (...) trueque con Socaire era el cambio que hacía un
El de corderito y el de burro; esos son los que más pastor peineño, hasta hace tres años atrás, de lana
se usan para sembrar” (Núñez, 1998 Ms.). por alfalfa.

Otros conocimientos tradicionales, se advierten en En los años que anteceden a la década del setenta,
el manejo del riego, de bienes empleados en la era común para los pobladores de Peine extraer la
vida diaria y de recursos usados como tecnología sal del Salar de Atacama y llevarla a Socaire en
aplicada. El sistema de riego para las tierras culti- tres a cuatro cargas por vía animal, que corres-
vadas es de aproximadamente cada quince días y pondían alrededor de ocho bloques o barras de sal;
la administración de los turnos de agua le corres- por lo tanto y de este modo, el intercambio que
ponde al juez de aguas, miembro que pertenece al hacían era sal por papas, por carne, por trigo y por
Comité de Agricultores. Para que el sistema de habas. La equivalencia del cambio, de producto
riego sea exitoso, es necesario que todos los años por producto, generalmente era peso a peso, pero
los pobladores limpien sus estanques y canales a veces obedecía “según el tamaño” del bloque.
para que sus venas distribuyan las aguas en todos La sal, aparte del consumo humano en comidas y
los sectores de Peine. Otros recursos muy bien particularmente en la preparación del charki de
aprovechados son: el cuero, curtido de cuero de llamo, de cabro y de cuye, era y es excelente para
cordero, utilizado para la vida cotidiana y en arte- el consumo animal, para “que no afloje la flacura”
sanía; la piedra, para la construcción de casas, y para “que se componga la carne”.
corrales, instrumentos para moler (kona) y todo
aquello para la “fabricación en duro”. La cantera, Actualmente, los peineños trocan con Socaire los
se encuentra en los altos de Peine. En madera, se siguientes productos: maíz por papa, por trigo y
encuentran las más características de la zona, como por habas; continúa la equivalencia peso a peso.
el chañar (Geoffroea decorticans), usada como Ya no existe el trueque de sal por productos
tecnología aplicada en almadarada (armazón) socaireños. Con Toconao, permanece el trueque
para las casas y la de algarrobo (Prosopis de maíz por fruta, tales como membrillos, manza-
chilensis), para la fabricación de telares, peines, nas, brevas, granadas, uvas, peras y también con
lisos, entre otros. naranjas, entre otros. Al parecer, el intercambio
de leña por frutas ya habría dejado de ser una cons-
En general, todos estos conocimientos vinculados tante.
con recursos se ligan al valor que estos tienen en
relación a otros que se ubican en la gradiente De los diversos conocimientos ya señalados, la
altitudinal. Desde esta perspectiva, los intercam- mayoría continúa practicándose en los poblados
bios de productos comestibles son necesarios para que se distribuyen en el sector oriental del Salar
complementar la dieta alimenticia; no obstante que de Atacama; sin embargo, de todos los saberes, el
productos símiles se cultiven en varios sectores, la manejo del ganado sigue siendo uno de los más
cantidad y calidad son las variantes que hacen emer- importantes para estos pueblos. La ganadería en
ger el trueque. De esta manera los pueblos de esta Peine, mayoritariamente, es de crianza de corde-
área, que habitualmente trocan entre sí sus produc- ros, clasificándose en varias razas, tales como
tos, son Peine, Socaire y Toconao. “huasito”, “tizana”, “marino” y “mestizos”. Los
de tipo “San Pedro” no serían tan adecuados para
De acuerdo al relato de peineños, se dice que, la cordillera, ya que, de acuerdo al relato de los
aproximadamente hace cuarenta años atrás, el pastores de Peine, “son criados de otra forma, no
cambio que hacían con los pobladores de Toconao andan y les pesca la puna; son animales pesados”.
era de maíz y leña por frutas. La leña es la que Sin embargo, de igual modo se están criando cor-
llaman cachiyuyo y el cambio era una carga de deros y ovejas en Tilomonte de tipo “San Pedro”,
leña por un cajón de fruta o carga por carga, ya aunque en menor grado en comparación con las
sea por breva, alvarillo, damascos, manzanas y otras razas. En este mismo contexto, el consumo
peras. Con Socaire, el cambio era de maíz por de pastos y aguas, son de suma importancia para
papa, por trigo y por habas; haciendo el trueque la reproducción del sistema. Los mejores pastos o

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“junquillos” para el engorde y óptimo desarrollo ambos conversan largamente sobre el buen nego-
de los animales se les denomina localmente como cio que han hecho y dejan pactados otros más (so-
“Iloca”, “papolpasto” y “yerbasal”. Sin embargo bre animales, maíz, entre otros). Esta aparente y
y, por los problemas que ha traído el clima por sus tal vez entidad de la desconfianza de ambas par-
permanentes heladas, el agua se ha puesto más fría tes (estrategia), no sólo propicia el éxito del nego-
afectando directamente a los animales. En conse- cio y de otros futuros, sino que básicamente pro-
cuencia, se prefieren las aguas tibias y pastos de picia el acceso a un nuevo lazo social. Respecto
Tulan y Tilopozo. Por estos problemas, tales como de esto último, se percibe que mientras más cono-
el clima y otros que veremos más adelante, los cidos tenga una persona, ya sea en su localidad,
pastores tienden a quedarse más tiempo en la es- región o macro región, más prestigio social
tancia de Tilomonte, aprovechando en este caso detenta. ¿Hasta qué punto los intercambios (ya
los pastos de Purcelti, Kuman y Tilocalar. sean de cualquier tipo) o el acceso a cualquier re-
curso, traen consigo una lectura de prestigio, al
En relación a los intercambios que hace el pastor acceder a un bien social y posteriormente econó-
de producto por producto, como lanas, cueros, maí- mico? ¿Por qué el pastor no compró, esta vez, ga-
ces, choclos, entre otros, son realizados con sus nado en Socaire, siendo que allí tiene amistades y
contactos seguros? Puede advertirse que, en el caso
vecinos y con conocidos o amigos de otros pobla-
graficado entre el pastor de Peine y el poblador de
dos, ubicados desde San Pedro de Atacama hasta
Sequitor, circula entre líneas, del discurso de la
Peine. Este tipo de intercambios se caracteriza por
compra-venta, la idea que cada una de las partes
ser un trato distendido y seguro, que a su vez im-
no tendría una necesidad explícita para comprar o
plica correspondencia y mantención de los lazos
vender (siendo que realmente es necesario); algo
sociales.
así como que cada parte tendría en su imaginario
un paradigma de abundancia. ¿Sería esto un atis-
Respecto de las ventas que hace el pastor, son bá- bo de prácticas antiguas? o, tal vez, ¿en el pasado,
sicamente de ovinos, lanas, cueros, maíces, la estrategia era realmente obtener múltiples re-
choclos, entre otros, y se comercializan a nivel lo- cursos (símiles o distintos), aunque su localidad o
cal y regional. Dentro de las compras de mayor áreas circundantes cercanas, en cierta medida, se
importancia, están las de animales, precisamente los brindaran? Si esto fuera probable y contrastable
de ovinos (machos reproductores y ovejas). Evi- con el imaginario atacameño del siglo XXI, se po-
dentemente que, ambas transacciones, pueden ser dría comprender que el manejar, articular y
realizadas tanto con conocidos como con desco- experienciar el mundo de afuera a través de los
nocidos o nuevos contactos. viajes, por ende, manifestar reiteradamente ser
conocido en su localidad y por sobre todo en tie-
Cuando el trato de compra y venta es realizado rras lejanas y, a la vez, mencionar sus lazos
entre desconocidos, se sugiere sutilmente que la parentales, por ejemplo; sería una estrategia de
base del éxito del negocio es la desconfianza. De acceso al prestigio social a partir de la interacción
hecho se trata de comprar bien y vender mejor. social que se suscita en otras tierras y que eviden-
Para este caso, se describirá un ejemplo sobre el temente trae consigo conveniencias o ventajas
negocio realizado entre el pastor de Peine y un materiales: ¿prestigio a partir de una movilidad
poblador del ayllu de Sequitor, celebrado en este socioeconómica? La interdigitación étnica
mismo ayllu. El pastor, es el comprador, y obser- (Martínez, 1998) y las variantes del parentesco en
va calmadamente en el corral a los animales que zonas locales, cercanas y lejanas, podrían ser se-
están en venta (edad, color, sexo y peso), señalan- ñales inequívocas del saber andino y del comple-
do constantemente ser un entendido en esta mate- jo entramado que trae consigo el manejo de múl-
ria; asimismo el vendedor indica los méritos de tiples recursos (Núñez, M. Ms.b).
sus animales y, a pesar que le es de gran impor-
tancia vender, simula no estar muy interesado. Lue- 2. Los peineños frente a los eventos de stress,
go, se escoge el animal y se pesa. Entre tanto, el de escasez
vendedor sigue convenciendo de las cualidades de
sus animales y el pastor simula ciertas dudas, a Para los eventos de crisis por escasez, en el cual
pesar de estar muy conforme. Ya cerrado el trato, se han visto expuestos los peineños, es posible

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exponer algunas respuestas que ellos han plantea- La traída del agua de Miscanti hacia Peine,
do. La más clásica y común en estos poblados es específicamente desde una bocatoma que hicie-
el almacenamiento y conservación del maíz, fruto ron a unos dos kilómetros hacia el este de la lagu-
del chañar y vainas de algarrobo. Para el maíz, na del mismo nombre, significó una reiteración
cuando éste se cosecha aproximadamente a fines en esta época de un conocimiento hidráulico que
de marzo, “se pela”, es decir, se saca “la chala” caracterizó a los pueblos primigenios. Se trató de
(las hojas) y se extiende en el granero para que se un largo trabajo ejecutado a pala y rastrillo por los
seque, guardándose posteriormente en sacos. En mismos pobladores de la comunidad. Esta labor
el caso del chañar y algarrobo, se espera que ma- trajo consigo paralelamente la construcción de un
duren, cayendo al suelo espontáneamente. Estos camino aledaño para el transporte e instalación de
frutos se recolectan y, una vez secos, se guardan las cañerías de agua. Este nuevo camino parte des-
en sacos. Del chañar, se hacen budines, jaleas y de un desvío de la ruta del camino internacional,
otros subproductos; por otra parte, el algarrobo se con dirección al noroeste, pasando por quebrada
chanca produciendo harina y se prepara, además, Corquepe hasta llegar a los altos de Peine y al
la aloja, que es una bebida fermentada, utilizada poblado en sí. Esto es, un ejemplo significativo
preferentemente en ceremonias. del esfuerzo de trabajo comunal, que finaliza en
julio de 1996. Después de traer el agua, vía cañe-
rías hasta Peine, comienza la construcción del es-
Almacenar, es asegurar estos tres recursos signi-
tanque de almacenamiento en 1997, ubicado en
ficativos, para amortiguar la escasez que provoca
los altos del poblado. Ya, en estos momentos, la
la época de invierno. Estos productos se aprove-
mayoría de la gente tiene en sus casas el agua de
chan para el consumo humano, de animales y para
Miscanti.
ser trocados en la misma comunidad, como tam-
bién en localidades vecinas, habitualmente con
Por otra parte, existen experimentaciones que se
Socaire. han realizado en Peine y alrededores, que funcio-
nan como ejemplos claves para comprender y de-
Otra respuesta, en términos del saber tradicio- mostrar que aún los intentos de “domesticación
nal, que han abordado excepcionalmente los del paisaje” son posibles. Sobre este tema, se men-
peineños, trata sobre el problema del agua. En cionarán dos ejemplos. En el ámbito de la agri-
este caso, el agua salobre no permitía una buena cultura, en especial de frutales, esta localidad no
cocción de los alimentos y se le atribuían incon- ha sido caracterizada por sus logros en este rubro.
veniencias en potabilidad. Para ello, la solución Sin embargo, la siembra del membrillo, desde hace
fue traer el agua desde Miscanti1 hacia el pue- algún tiempo y por lo salobre del agua de vertien-
blo. Según el relato de los pobladores, la idea del te, ha tenido buenos resultados.
“viaje del agua” surgió hace aproximadamente
siete años atrás y la iniciativa se concretó cuan- En segundo lugar, se debe señalar el notable y
do el pueblo presenta un proyecto donde adquie- exitoso esfuerzo de siembra y buen término de
ren fondos de varias instituciones estatales, mi- cosecha en Tilopozo. Esta experimentación, con
neras como la Sociedad Chilena del Litio y Es- óptimos resultados empíricos, fue lograda por un
condida (este aporte tiene que ver con maquina- pastor de Peine (M. Chaile, comunicación perso-
ria y cañerías) y el dinero recaudado por los mis- nal), ya que alguna vez planeó manejar e integrar
mos pobladores, a partir del carnaval que se rea- este sector más bien como centro operativo (al
liza en la época de verano. De esta manera, en igual que Tilomonte), es decir, como parte del pa-
abril de 1995, se hace el trazado de la ruta al ale- trón de asentamiento disperso, que caracteriza a
ro de un prestigioso poblador. las actividades pastoriles. Los productos que se
cosecharon en esa oportunidad fueron, cebolla,
zapallo, verduritas, entre otros, similares a los que
se obtienen en Peine; este intento prueba que aún
hay agropastores que aspiran domesticar nuevos
1 La base del cerro Miscanti, está aproximadamente a paisajes anexos. Lo interesante, para este caso, es
unos 4.200 m.snm. que Tilopozo corresponde a la cota que fluctúa

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entre los 2.300 a 2.380 m. snm, ubicándose en el salar porque había una veta, como decían
borde oriental del Salar de Atacama, con altas os- ellos; los viejitos ante una veta de sal la
cilaciones térmicas, bajos niveles de precipitación, cortaban en barras de aproximadamente
falta de arboledas típicas como el algarrobo y cha- veinte kilos, más o menos. (...) Había un
ñar, afloramiento de aguas salobres y costras y sendero ahí, en esos tiempos, un caminito,
forraje natural con vertientes, no utilizados. Es entonces los animales se iban por esa par-
conocida esta tierra como inhóspita para los pro- te. Había una parte bien jodía, había un
cesos productivos; haciendo más meritorio el in- río, así que ahí había que pasar, justo los
tento de valorarla (Núñez, L. 1995). burros tenían que pasar por ahí, a la hora
que se desvían, se hundían; era como un
3. Saberes y agentes de cambio río y corría el agua. (...) Para ir a buscar la
sal, había que ir en los tiempos de invierno,
Existe una serie de saberes propios que con el en tiempos en que ya no está la agricultura.
transcurso del tiempo y sobre todo por agentes ex- Por ejemplo, si usted o nosotros íbamos a
ternos de cambio, que han intervenido no sólo en sacar sal por ahí en noviembre, decían los
esta comunidad, han ido desapareciendo en su viejitos que venía la helada, que se helaban
práctica, replegándose al plano del recuerdo. las chacras” (Núñez, M. 1998 Ms.).
Saberes que ya se han dejado de practicar, se pue-
den citar los siguientes ejemplos. La sal se canteaba con hacha, formando tres blo-
ques que se cargaban a la mula; la distribución era
Las salidas realizadas por los peineños al Salar de de dos al costado de la mula y un tercero en el
Atacama, en búsqueda y colección de huevos de lomo, que se llamaba soborno. Para buscar la sal,
parina (phoenicoparrus sp.), formaban parte de se organizaban en pequeños grupos, entre fami-
los trabajos comunales, organizados por la autori- liares y/o vecinos. Normalmente, se demoraban
dad local, ya que el beneficio de esta excursión medio día en el trayecto y oficio de la extracción
era para todos los pobladores, particularmente por de este mineral y “regresábamos a Peine con el
el valor nutritivo de este recurso (Mostny 1954). cargamento de sal, para moler la sal, para hacer
Años atrás, los pobladores partían hacia el salar el charqui y para otras cosas”.
en el mes de diciembre, época de nidificación de
las parinas; a su vez, era de suma importancia re- A parte del consumo local de sal y cuando las fron-
colectar sus plumas, en especial las rojas, las cua- teras eran blandas, un testimonio señala que:
les eran usadas en ceremonias como el Talatur.
Por efectos legales encabezados por CONAF, es- “Durante el trayecto llevaban sal de acá
tas áreas cayeron bajo protección y en consecuen- (Peine), porque venían de allá, de la Ar-
cia de acceso controlado. Según el relato de los gentina, traían corderos, traían mulas, las
pobladores, la última vez que se agruparon para ir vendían y llegaban hasta San Pedro de Ata-
al salar en búsqueda de este recurso, fue en la dé- cama. (...) Los argentinos igual llevaban
cada del setenta. sal, porque se demoraban casi quince a
veinte días en llegar al destino. Así de le-
En el mismo salar, también una vez al año, en épo- jos, días caminaban, caminaban anima-
ca de invierno se colectaba la sal. Los pobladores les...” (Núñez M. 1998 Ms.).
la sacaban del manto, es decir, que extraían la cos-
tra que es llamada “sal de espuma”, “blanca” o A comienzos de la década del setenta, la ruta de la
amarga (sal no consumible). Debajo de la costra, sal se dejó de practicar, además hay que conside-
se encontraba la “sal cristalina”, que “es una rar que a partir de esta misma década los peineños
granuladita, así como maíz”; ésta corresponde a comienzan a instalar el comercio en este poblado,
la sal comestible. Habla el testimonio: aproximadamente en el año 1974. De este modo,
la sal comprada en el comercio hace abaratar
“Durante el tiempo que yo me he dado los costos. Sin embargo, aún se pueden hallar
cuenta, es que la gente de aquí consumía en rincones de corrales de Peine, los viejos blo-
sal del salar, entonces no se compraba la ques de sal para el consumo animal, provenien-
sal. Entonces se iba de acá a sacar sal del tes del salar.

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Conocimientos que se están perdiendo con el tiem- En 1954, se informa para Peine las siguientes plan-
po, con la llegada de la medicina moderna y pos- tas medicinales y usos: Bailahuén, que actúa con-
tas rurales, es el saber y manejo del uso de las tra el dolor de riñones, preparándose en infusión;
plantas medicinales. Los abuelos son los que con- contra el aire (dolores provocados por corrientes
tinúan con la vieja tradición de curarse vía yerbas de aire) y resfríos. Bailahuén, podría ser el con-
o plantas. De una recolección de éstas, realizada cepto que, por el curso del tiempo, se ha transfor-
en los alrededores de Peine, los abuelos recono- mado a Hueilavin. Copa Copa, actuaría contra
cieron la mayoría de sus nombres y usos, además el aire y dolores de estómago. Chuquicán, contra
de los lugares donde se ubicarían, no así los jóve- la tos, resfrío y romadizo. Maransel, contra los
nes que tuvieron problemas en el momento de la males del pulmón. Pingo pingo, contra la gono-
clasificación. Algunos nombres y usos fueron los rrea, mal de orines; preparándose en cocción. Ade-
siguientes, de acuerdo a la ubicación en la más, actúa contra la tos, en infusión (Mostny et
gradiente altitudinal. Flora en el piso prepuneño o al. 1954).
desértico: Kumi (Kume, Opuntia camachoi), ex-
celente para saciar la sed. Tikara (Ambrosia Otra práctica, que se podría denominar en transi-
artemisioides), procede contra el mal de orines; ción, en vías de disolución, se refiere a las propias
se prepara en infusión. Basal (Cistanthe labores pastoralistas, asociadas directamente a la
celosioides). Kamin (Cistanthe salsoloides). movilidad trashumántica en la zona. Es el caso de
Papolpasto (Papur pasto, Crytantha linearis). los dos últimos pastores de Peine, cuyo promedio
Flora en el piso puneño o tolar: Añawa (Adesmia de edad fluctúa entre los setenta años, sin repro-
spinosissima); su uso es para la prevención de in- ducción del sistema vía herencia económica-cul-
fecciones y óptima para el lavado de pies. Cha-
tural, por no tener descendencia. ¿Por qué pensar
cha (Parastrephia quadrangularis), para
que el pastoralismo está siendo partícipe de un
sahumerio en los convidos de la limpia de canales
proceso de disolución? Desde 1932 a 1937, es
y floreo de animales; denominada por lo tanto,
decir, desde los diez a quince años de edad, el pas-
como planta ritual. Kore (Acantholippia punensis),
tor de Peine comienza sus primeros aprendizajes
su uso es para el dolor de estómago y se prepara
sobre la crianza de animales (para ese tiempo, de
en infusión con té. Pingo pingo (Ephedra breana),
llamas, corderos y ovejas). Hacia 1940, es decir, a
actúa contra los problemas hepáticos, mal de orines
y males en general; se prepara en infusión con mate la edad de dieciocho años, dice que encontró una
o té. Konti (Lupinus oreophilus). Perlina (Perlilla, estabilidad respecto de la crianza. Ya en 1958 de-
Junellia seriphioides). Quebrolla (Chuquiraga clara “ser pastor” y haber contraído a su compa-
atacamensis). Flora en el piso altoandino o ñera en convivencia y empezar una vida juntos
pajonal: Kopa kopa (Artemisia copa), excelente como pastores. Ya en la década del sesenta al se-
para el dolor de estómago; se prepara en infusión. tenta, era un ir y venir de Argentina, para surtirse,
Chuquican (Chuchikan, Mulinum crassifolium), matutear (contrabando) y visitar. Al parecer, “el
actúa contra la tos, para los síntomas de puna y se viaje”, esa experiencia de movilidad, tanto por
bebe en infusión con mate. Y otros como arriería o por intereses personales, constituye no
Canchalagua, para la descompostura de sangre, sólo para el pastor hitos importantes, sino para la
comezón; se prepara en mate. Hueilavin, actúa mayoría de los hombres del sur del Salar. En este
contra el resfrío y previene los enfriamientos; se contexto, se percibe que la arriería no ha sido una
prepara en infusión con té. Flor de puna, actividad opuesta al pastoreo, ya que según los
Marancel y Quibuchi.2 pobladores, estos viajes implicaban ausencias de
días, un mes y a veces varios meses, pero “a la
vuelta” se continuaba normalmente con las acti-
vidades locales. Entre 1965 y 1970 dice tener la
2 La nomenclatura científica de la flora en correspon- máxima cantidad de ganado, aproximadamente
dencia a los pisos ecológicos, se extrajo de la Guía unas trescientas a cuatrocientas cabezas; aquí se
de etnobotánica atacameña, distribuida en el Taller encuentra la mayor agrupación del ganado para
Internacional “Ciencia indígena en los Andes de
pastoreo. A fines de la década anterior, observa
Sudamérica”; preparada por la Dra. Carolina
Villagrán. que comenzó a notar la sequía. Desde la década

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del setenta hasta 1991, los pastores de Peine han pobladores otras visiones para el remodelamiento
continuado con sus actividades, pero disminuyen- cultural e innovaciones de la vida cotidiana en ge-
do la masa ganadera. Desde 1992 hasta 1999 ya neral.
no se movilizan con sus animales hacia las cotas
altas, específicamente a Pular (pastoreo estacio- La llegada de la escuela a Peine y en particular en
nal), ya que el sistema de trabajo que emprenden la década del treinta, de profesores de la filosofía
los enclaves mineros atrae desde aquí a sus traba- chilenizadora, clásica para la época, es otro ejem-
jadores, marginando al pastor de parte de sus acti- plo tácito de un agente de cambio externo. En este
vidades productivas. En 1992, en efecto, es sentido, lo notable de esta generación de profeso-
enrolado a un megaproyecto minero, introducido res eran sus técnicas aplicadas a los contenidos
esta vez al mismo Salar. Desde esta fecha en ade- que entregaban sus cátedras, como la extirpación
lante, el pastor vive tensionado entre el pastoreo de Saberes y la de “civilizar a los indígenas” (sic).
estacional y su permanencia en la nueva actividad Las prácticas de fiestas y rituales, realizadas por
minera. No obstante, continúa en la minería por sus alumnos, eran sancionadas posteriormente
necesidad del salario. El turno de trabajo que le dentro del aula, con agresiones de carácter
corresponde al pastor (nochero), es de diez días sicológicas y físicas. Así se “educó” a una gene-
trabajados por tres de descanso. Esto impide la ración completa por más de treinta años. Habla
frecuencia de sus viajes (ya sea por pastoreo, in- un testimonio:
tercambios o comerciales) y obstaculiza las acti-
vidades productivas de siembra y cosecha y, en "Si nosotros perdimos tanta riqueza sobre
general, todas las actividades de la vida cotidiana. de tradiciones y todo eso, fue por el asun-
Esto tiene una implicancia directa para las causas to del profesor que había acá. Un profesor
de fenómenos fuertemente contradictorios, ya que que vino y no le gustaba nada las tradicio-
el modo de operar de la minería ha insertado otros nes y ninguna cosa. Nos castigaba a noso-
parámetros de tiempo, que se podría llamar tiem- tros si estábamos en una fiesta o en una
po productivo, antagónico en relación con las ac- minga por ahí, en la limpia de canales, en
tividades propias del ciclo anual. En 1995, los todo nos castigaba el profesor. Así que no-
pastores tienen cien cabezas de ganado, agrupa- sotros, por el temor que nos castigue el
dos en la vega de Tilomonte, desarrollando sólo profesor, nosotros nos manteníamos en
una movilidad local. Además, para esta misma casa, así que hacían los viejitos solos no
fecha hasta la actualidad, ha manifestado que hay más. Y entonces, nosotros fondeados aquí;
personas foráneas interesadas en comprar sus te- entonces, ¿qué íbamos a recuperar?, nada,
rrenos en la vega ya mencionada, con la finalidad ¿qué íbamos a aprender?, nada tampoco.
de ser usados, según la opinión del pastor, para Ese ha sido el error más grande que tuvo
turismo, reflejándose cambios operados desde San el profesor éste, lamentablemente. (...) Vino
Pedro de Atacama (Núñez, M. 2000 Ms.). muy joven acá, de diez y siete años ese pro-
fesor. Aquí se casó, tuvo terrenos, todo eso.
Ésta es una realidad que esboza un escenario bas- Entonces, él fue modernizando el nombre
tante complejo, ya que se enfrenta el saber y prác- de los terrenos, inclusive los que tenía él
tica local de una actividad específica con los agen- los cambió de nombre, les puso otros nom-
tes de cambio, que traen a su vez una serie de dis- bres modernos, nada que ver con los nom-
positivos de arranque que, al actuar (como lo hace bres de los que estaban antiguamente y
la minera), indefectiblemente producen nuevos cosas..., que los nombres de los terrenos,
movimientos y nuevas respuestas. La llegada de de los campos, de todo eso, son cosas de
la minería a fines de la década del sesenta como que tenemos que tenerlo acá, porque son
proyecto, tomó énfasis estructuralmente en los netamente de la zona, netamente atacame-
ochenta y en la actualidad, asociada a una pervi- ña, netamente de los pueblos. Entonces, ese
vencia mínima de treinta años más en la zona. Esta profesor se dedicó a eso.”
es una de las causas que ha suscitado, como res-
puesta de los peineños, la desarticulación progre-
siva de la actividad pastoril; entregando a estos

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Otro poblador testifica: cional. Sin embargo, y a pesar de ver algunas for-
mas de expresiones que aparentemente no enca-
“Nos castigaba al otro día, en la escuela. jan en una sociedad de adscripción étnica, hay un
Cuando ya nos veía que estábamos fondo común que es la memoria colectiva, que
intruseando, andando por ahí. Y él salía asienta y refuerza identidad; que a pesar de los ol-
en las noches a buscarnos, salía a buscar- vidos, también recuerda..., crea y recrea, readapta
nos, a mirarnos; y a los días estábamos o transforma; en fin, éstas son algunas respuestas
listos en la lista. Al frente no más y ahí nos que ha encontrado Peine para ser peineños ahora.
castigaba. (...) Nos mandaba a buscar a
cada uno dos piedras grandes y piedrecitas En síntesis, este artículo ha intentado, a través de
chicas. (...) Y las rodillas ahí aguantando varios casos, dar a conocer una realidad
arriba de las piedrecitas. Pero las piedras transicional que funciona no solamente para el caso
incrustadas en la carne, ahí en la rodilla, de Peine, sino que también para los poblados de
incrustada. Cuando se le iba bajando (los los alrededores y en general para todos aquellos
brazos del niño que sostenía las piedras que poseen estas características. Es decir, que, den-
con las manos) le mandaba el palo, tenía tro del contexto de continuidad, se está en presen-
que enderezar uno y volvía el otro a caer- cia de una sociedad que articula conocimientos
se, igual, y volvía a pegar, y al cansancio propios, con una vasta comprensión de múltiples
uno ya no daba más. Claro, era malo el saberes (pluricultura), con manifestaciones empí-
profesor de esos años. De ahí se fue per- ricas andinas; sin embargo, y en el escenario de
diendo (las tradiciones), esa fue la reali- los cambios (Gundermann 1998), sus prácticas se
dad de las cosas de aquí. El maestro, nos han visto enfrentadas a transformaciones y desar-
prohibía lo que era natural de aquí de Pei- ticulaciones notables, producto de agentes exter-
ne, si no hubiéramos tenido todas las cos- nos. Ya se han mencionado algunos impactos oca-
tumbres al día” (Núñez, M. 1998 Ms.). sionados para Peine, como también las respuestas
que en general se han presentado. Por lo mismo,
Los alumnos de ayer, los adultos de hoy, tocan las culturas al ser dinámicas y reconstructivas no
muy sentidamente este tema y le responsabilizan desaparecen, ni se aniquilan, ya que siempre exis-
algunos olvidos, especialmente sobre tradiciones, te una memoria, un rastro, una ruta, un monumen-
otrora cotidianas. Es indudable que no fue bien to, movimientos y voces que la refuercen, en un
visto para este profesor el valor ritual asociado a permanente estado de haciéndose entre lo interior
las actividades tradicionales, llámense floreo, con- y exterior.
vido, talatur, carnaval (con representación del
pujiai), etc. Por lo tanto, no es extraño observar Agradecimientos La autora agradece a la inves-
que los hijos de esta generación educada por estos tigadora Victoria Castro por la invitación al pre-
profesores sean incitados a logros personales, a la sente evento y sobre todo por exponer estas mate-
educación formal completa (hasta la universidad rias aún en proceso de elaboración. Debido a que
si es posible), para que sean “alguien en la vida”, hace años que comparto con los vecinos de Peine
“independientes” y de “progreso”, es decir, que estas preocupaciones, a ellos mis principales agra-
de alguna manera son dispuestos al discurso na- decimientos.

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