UIROPRÁCTICO ADVIERTE A TODO

EL MUNDO DE LOS PELIGROS DE

DORMIR DEL LADO DERECHO
Más del 40% de la población mundial, no realiza las horas de sueño diarias necesarias para el
buen rendimiento del organismo. Esto lleva en la mayoría de los casos, al desencadenamiento
de varios padecimientos y trastornos de salud, como lo pueden llegar a ser por ejemplo la
fatiga crónica, el estrés, los problemas de presión, el aumento de peso, la depresión y algunas
otras complicaciones más. Aún cuando una persona duerma las horas diarias establecidas,
existen ciertos factores que podrían perjudicar el nivel del sueño, y también ocasionar daños
en la salud. Uno de estos factores, es la posición de nuestro cuerpo al momento de dormir.
Conoce por qué no deberías nunca dormir del lado derecho.

Por qué no deberías nunca dormir del lado derecho

Hoy en día, son muchas las empresas multinacionales dedicadas a la fabricación de “buenos”
colchones, los cuales parecen asegurar el buen sueño del humano. Así mismo, existen
también varias técnicas para poder dormir mejor, las cuales consisten en simples ejercicios y
tratamientos de relajación, antes de ir a la cama.

Si bien es cierto que las técnicas de relajación en muchas ocasiones si suelen resultar
efectivas al momento de ayudarnos a dormir mejor durante las noches, en cuanto a los
colchones la efectividad no suele ser la misma. Además de ser sumamente costosos, son muy
poco los colchones que realmente contribuyen a la buena calidad del sueño nocturno.

Ahora bien. Existe una manera única de garantizar un sueño de calidad, la cual además te
ayudará a prevenir varios padecimientos de salud. Se trata tan solo, de dormir del lado
izquierdo del cuerpo.

Si bien es verdad el hecho de que dormir 7 u 8 horas diarias es necesario para ayudar a
nuestro organismo a recuperarse de las actividades cotidianas, también es cierto que si a la
hora de dormir adoptamos una postura incómoda o poco saludable, nuestro cuerpo lo
padecerá, y la calidad del sueño no será la misma.

Según varios expertos de la salud, dormir del lado derecho no nos hace nada bien.

El Dr. John Douillard, especialista en sueño, asegura que dormir del lado derecho deteriora
nuestra salud y nos brinda un aspecto mucho más avejentado.

Veamos a continuación, cuales son todas las razones por las cuales no deberías nunca dormir
del lado derecho.

Salud del corazón

Según el Dr. John Douillard, dormir del lado derecho contribuiría a nuestra salud cardíaca, si
tenemos en cuenta que esta posición favorece la circulación de la sangre hacia el corazón. La
gravedad facilita el trabajo, y de esta manera el corazón no tiene que esforzarse demasiado,
ya que el drenaje linfático hacia dicho órgano estará en posición directa.

Alivio de la acidez estomacal

Son varios los expertos los cuales aseguran que dormir del lado izquierdo traería grandes
ventajas para todas aquellas personas que padecen de acidez estomacal y otros tipos de
padecimientos digestivos. Esta posición al dormir, contribuiría a la buena digestión.
Detiene el ronquido
Existen muchos remedios caseros para dejar de roncar durante las noches. Sin embargo,
puede que cambiar tu posición al dormir también te sea de suma utilidad a la hora de hacerle
frente a este problema. Son varios los expertos de la salud, que recomiendan a sus pacientes
con problemas de ronquidos nocturnos, el simple hecho de dejar de dormir boca arriba o del
lado derecho, para pasar a hacerlo del lado izquierdo.

Ayuda al sistema linfático

El lado izquierdo del cuerpo, es considerado también como el lado linfático, debido a que al
dormir en esta posición, el drenaje linfático circula de manera favorable, optimizando así el
trabajo cardiovascular.

Estos son todos los beneficios que le traerá a tu salud el simple hecho de dormir del lado
izquierdo.

Si tus problemas para dormir realmente están afectando tu calidad de vida, al no permitirte
rendir lo suficiente durante la jornada, a continuación te dejamos también una lista de sencillas
técnicas a las cuales podrás recurrir para conciliar mejor el sueño.

Técnicas para poder conciliar el sueño

Son muchas las personas alrededor del mundo, que padecen de intensos periodos de
insomnio u otros tipos de trastornos del sueño los cuales no les permiten descansar lo
necesario y suficiente durante las horas nocturnas.

Este tipo de problemas del sueño, pueden ser originados a causa de una gran variedad de
factores, como lo pueden ser por ejemplo los malos hábitos alimenticios o el excesivo estrés
laboral. Lo realmente bueno, es que existen algunas sencillas técnicas para conciliar el sueño,
a las cuales podrás acudir cada vez que presentes inconvenientes a la hora de dormir.

Asegúrate de conseguir una zona de descanso adecuada: Al ir a dormir por las noches,
asegúrate de que tu dormitorio se encuentre en el estado más óptimo posible, en cuanto a
ambiente de relajación y comodidad. Intenta mantener este espacio siempre ordenado,
además de asegurarte de que tu colchón y almohadas te proporcionen la comodidad
adecuada.
Evita las distracciones: Asegúrate que tu dormitorio sea un lugar exclusivamente para
dormir. Evita cualquier tipo de distracciones en dicho sitio, como lo pueden ser por ejemplo los
equipos de música o TV.
Evita consumir comida pesada antes de ir a la cama: La comida demasiado cargada puede
llegar a generarte grandes complicaciones digestiva durante las noches, algo que intervendría
de manera directa en la calidad de tu sueño. Así mismo, es también importante el hecho de
que no ingieras demasiados líquidos en horas nocturnas antes de irte a dormir, para evitar así
tener que levantarte a orinar durante la madrugada.
Ejercicios de relajación: A la hora de ir a la cama, puedes optar por realizar algunas
meditaciones guiadas para conciliar el sueño, o bien ciertos ejercicios de respiración que de
seguro te harán caer rendido en tu colchón.
Ejercicio físico: Si te es posible, intenta realizar al menos 30 minutos de ejercicio físico a
diario, para mantener a tu organismo saludable. Las personas activas físicamente, consiguen
descansar mejor durante las noches.
Así mismo, también te recomendamos que cuides en detalle tus hábitos alimenticios,
intentando eliminar por sobre todo, la cafeína, el azúcar y la harina procesada de tus platos
cotidianos.