LA APTITUD LABORAL Y LA CAPACIDAD

PARA ASCENDER A GRANDES ALTITUDES

Gomero Cuadra Raúl*, Ruiz Gutiérrez Fermín*, Palomino Baldeón Juan*, Vargas Zegarra
Renato**, Pérez Villasante Luis***.

* Jefe de Salud Ocupacional Mina Lagunas Norte (Minera Barrick Misquichilca)

** Médico Ocupacional de Emergencias Médicas en el Proyecto Minero Las Bambas
*** Jefe de Salud Ocupacional de Mina Toquepala (Minera Southern Perú)
****Jefe de Salud Ocupacional Mina Pierina (Minera Barrick Misquichilca)
***Gerente de Salud Ocupacional Región Sudamérica Minera Barrick Misquichilca

RESUMEN
Debido al desarrollo de la minería peruana, cada vez más trabajadores tienen
el reto de adaptarse en las alturas de nuestra geografía, que es donde se
encuentran generalmente los yacimientos mineros. Esta situación significa un
riesgo que debe ser evaluado por el Médico Ocupacional en el examen médico
pre-ocupacional, adicionalmente a las demás exigencias propias del trabajo.
Esto es, pues, un desafío debido a que aún es escasa la evidencia científica
respecto de los efectos en la salud de por la exposición crónica o intermitente a
grandes altitudes. Sin embargo, se aprecia en los proveedores de servicios
médicos ocupacionales de nuestro país, la calificación de resultados como
“apto para trabajar en altura”, lo cual es un error conceptual.
Existe, en efecto, una confusión al aplicar los criterios clínicos para evaluar las
condiciones para ascender a grandes altitudes, ya que se refiere
principalmente a periodos cortos relacionados a alguna actividad deportiva y no
para exposición más o menos permanente en grandes alturas, como es el caso
de las personas que realizan actividades laborales.

PALABRAS CLAVE: grandes alturas, pre-ocupacional, medicina ocupacional.

13ª SEMANA DE LA SALUD OCUPACIONAL – Medellín, Colombia – Noviembre de 2007

http://www.saludocupacional.com.co/13semanadelasalud/
Se permite la reproducción para fines académicos, no comerciales.
Uno de los retos en la práctica de la Medicina Ocupacional es evaluar las
condiciones físicas y mentales de los postulantes a un empleo, a través del
examen médico pre-ocupacional o de pre-empleo, valorando los efectos que
pueden causar en su salud, las condiciones del ambiente laboral al que postula
(1). Para ello, el médico ocupacional debe conocer los peligros y riesgos de
diferentes tareas, mapas de riesgos, accidentabilidad y siniestralidad por
accidentes de trabajo o enfermedades ocupacionales, así como conocer las
patologías comunes que puedan reagudizarse tras la exposición a agentes de
los ambientes de trabajo.

En el Perú se viene observando en las últimas décadas, una mayor actividad

industrial, principalmente minera, la cual se desarrolla generalmente en
condiciones geográficas difíciles debido a la propia geografía del país. Esto
implica la contratación de trabajadores, no sólo residentes de las cordilleras,
sino de personal proveniente de la costa y selva. Además, la actividad industrial
viene acompañada, en todos sus casos, de otras actividades como:
construcción, servicios de alimentación, transporte, seguridad, comercial, etc.
Entonces, el médico ocupacional, o las personas responsables de la evaluación
médica pre-ocupacional, deben considerar a la altitud, la temperatura, el
aislamiento, radiación solar, aire seco y la hipoxia ambiental (2, 3, 4) como
riesgos adicionales para la salud de los postulantes a empleo, en cualquiera de
las actividades referidas.

En este documento presentamos la visión médico ocupacional de la aptitud

para trabajar y su relación con el ascender a grandes alturas.

Se denomina grandes alturas a las localizaciones geográficas por encima de 2

500 msnm, subdividiéndose de la siguiente manera:
 Alta 2 500 m – 3 499 m 8 200 ft – 11 499 ft

Muy Alta 3 500 m – 5 500 m 11 500 ft – 18 000 ft

Extrema Sobre 5 500 m Sobre 18 000 ft

Fuente: R. Gomero. La capacidad y la aptitud para trabajar en la altura. III Congreso de

Medicina de Montaña, San Juan, Argentina.

Las grandes alturas se caracterizan por desafíos deportivos que han generado
variedad de investigaciones. Del mismo modo, existen numerosas
publicaciones sobre los habitantes en localidades de altura y de los cambios
fisiológicos que demandan la adaptación en estos hábitats. Sin embargo,
cuando estudiamos el entorno de las grandes alturas como ambiente de trabajo
de las personas, encontramos poca información en la literatura médica (5).

En el reciente III Congreso de Medicina de Montaña realizado en San Juan,

Argentina, en diciembre del 2006, los expertos ratificaron la diferencia en la
fisiología de las personas que ascienden a grandes alturas por actividad
deportiva de aquellas que lo hacen por actividad laboral, ya sea en forma
intermitente o permanente y que provienen de bajas alturas. Esto significa que
se abre un nuevo aspecto en la Medicina Ocupacional, cual es la de estudiar
las consecuencias en la salud de los trabajadores cuando trabajan en grandes
alturas. Señalemos al respecto que aún permanece en controversia la
evidencia científica respecto de los cambios fisiológicos que se producen en las
personas. (6). Actualmente, se cuenta con la prueba de Tolerancia a Altura
diseñada por Richalet, que se aplica para la exposición aguda a grandes
alturas. Sin embargo, no es aplicable para exposiciones intermitentes.

La determinación de aptitud para trabajar se refiere a que el postulante posee

la capacidad funcional de realizar tareas sin poner en riesgo su salud (9).
Cuando adicionamos a esta evaluación el peligro a gran altura, el médico
ocupacional aún no tiene las herramientas diagnósticas ni guías basadas en
evidencia científica para determinar cuáles pueden ser las complicaciones
hacia su salud. Por lo tanto, no es adecuado determinar si también esta apto
para “trabajar en grandes alturas”. En esta situación, los servicios de salud
proveedores de exámenes ocupacionales, están acuñando el término “apto
para trabajar en altura”. Cuando se revisa los criterios (10) de evaluación, se
aprecia que se toman referencias clínicas para ascender a grandes alturas
relacionadas al ascenso deportivo que, como ya mencionamos, no son los
mismos para la exposición intermitente a grandes alturas. Entonces se está
originando un error conceptual que puede poner en riesgo la salud de las
personas.

En conclusión, proponemos diferenciar los términos de aptitud para trabajar de

la capacidad para ascender a grandes alturas, dado que el contexto laboral
difiere del clínico y aún falta mayor evidencia médica. Los servicios de salud
proveedores de exámenes ocupacionales deberían tener claro que el seguir los
criterios clínicos para ascenso a grandes alturas es para periodos cortos
relacionados a actividad deportiva o visitas y no para permanencia intermitente.

Referencias bibliográficas

1. Gomero R, Ruiz F, Palomino J, Pérez L. Controversias relacionadas al

examen médico-preocupacional. No publicado.
2. Comité Regional DE Prevención de Riesgos en la minería.
Administración de Riesgos Ocupacionales en la Minería. Antofagasta.
Mayo 1996.
3. Lumbreras L, León-Velarde F. El Medio Ambiente En Los Andes (El Reto
Fisiológico de vivir en los Andes). Institut françaisd'études andines
(IFEA) - UPCH Fondo Editorial. 2003: 29 - 39.
4. Richalet JP, Vargas M, Jiménez D, Antezana A, Hudson C, Cortés G,
Osorio, León A. Chilean Miners Commuting from Sea Level to 4500 m: A
Prospective Study, 2002; 3 (2): 159 -166.
5. Jiménez D. La exposición crónica intermitente a gran altura. Minería
Chilena, 1997; 194:107-123.
6. Ilic JP. Medicina de Altura, Santiago, Chile: Mutual de Seguridad CChC,
1989; 130.
7. Reglamento de Seguridad e Higiene Minera DS 046-2001 MEM.
8. Reglamento de Seguridad y Salud en el Trabajo DS 009-2005-TR
9. McCuney R. Occupational Medical Services. A practical approach to
occupational and environmental medicine. Third Edition. Lippincott
Williams & Wilkins, 2003: 3-5.
10. Fernández L, Gil G, Hernández R, Ruiz-Cabello M. Contraindicaciones
para el ascenso a altas cotas. Patología de la Altitud. Principios de
Urgencias, Emergencias y Cuidados Críticos.
www.uninet.edu/tratado/c090507.html