LA ELECTRICIDAD
PUEDE SER
UN ENEMIGO MORTAL
LA CHARLA !)E HOY quiero
dedicarla al uso seguro de I-a elec­
tricidad, un tema bastante común
pero que nunca e.stá de más re­
cordarlo. La electricidad, co rno
ustedes bien saben, lo mismo que
cualquier otra forrna de energía
puede ser tanto destr uctiva · con10
constructiva·. Puede ser directa­
rnente destructiva para nosotros al
producirnos un choque O' quema­
duras, Indirectamente destructiva
al desencadenar explosiones e in­
cendios. Poco queda por desc:;ubrir
en lo que respecta a los pdigros
que er1cierra la electricidad y ya
conocemos muy bierl las Condicio­
nes que pueden provocar mue1-tes
y lesiones, s.in embargo es bueno
siempre recalcar su poder destT\lC­
tivo ya que la usa rnos y depende­
mos de ella grandemente. En la
actualidad es una de las fuentes de
energía más iinportantes y por tan­
to la necesita1:nos para un sin fin
de cosas, tales como _ p ara iluroiúar,
<1alentar, enfriar nuestros hogares
y lugares de trabajo y para hacer
funcionar rnuchos de los equipos
que usamos tanto en nuestras casas
como en la industria,
A pesar de todo lo bueno que.
hace, la electricidad es peligrosa
y se puede convertir en un enenligo
mortal sobre todo. si hace contacto
dírecto con nosotros mismos, lo que
nos pnede ocasionar hasta la muer­
te. Precisa1nente 111uchos de los in­
cendios que causan nu1nerosas pér­
didas hurnanas y a la J?ropiedad
son producidos por .cables eléctri­
cos dañados y aparatos defectuosos.
En todos les países mueren niiles
de person¡¡.s anualrnen.te debido a
choques eléctricos.
I)esafortunadamente, rnuchos de
nosotros no . creemgs que hay peli­
gro de choque elécfrico en los cir­
cuitos tanto en nuestras casas corno
en el l'rabajo, cuando en realidad
las e stadJstjca·s indican que lbs
choques eléciricos verdaderamente
ocurn}n y se producen en igual
proporción e¡¡. las casas como en el
trab¡¡.jo, Sabernos que la corriente
eléctrica fluye a través de un cable
l1 otro tipo de conductl:ir y <'¡\le
siempre busca salida por un cami­
no que ofrezca la inenor resistencia.
S{ nuestro cuerpo proyee ese ca­
mino entonces recibiremos un
choque eléctrico y es esto lo que d e -
hemos evitar, no tocando ningún
<:able desgastado o defectuoso de
alguna forma si estií conectado a
la electricidad o si está éaliente,
porque si lo hacemos nos converti­
n10s en parte del. circuito. En otras
palabras, la cqrriente que b1JSCa la
salida Fnás fácil la encuentra a · tra­
vés de nosotros ráisrnos, Las con­
di:ciones que deternlinan cuánta
electricidad pasará a través de
nuestro cuerpo son diferentes per.ó
la hu1nedad y el contacto con el
-agua hacen que pasé mucha más
electricidad.
Debemos tornar ciertas medidas
preventivas con e l fin de evitat
j los choques eléctricos. Primeramen­
te, nun_ca debemO$ in.tentar hacer
reparaciones eléctricas e,i ninguna
clase de equipo o maquiúaria ya
que ese es el trabajo de los electri­
dstas que para eso se han entrena-
. do y ya tienen experiencia. 1'am­
bién debernos estar seguros de que
nuestras manos y _pies es•án secos
antes de usar o co11ectar ·cualquier
aparato eléétrico, Debernos exami­
i1ar el cordón eléctrico de una e x ­
tensión antes de usada para ver si
tiene .algún desgaste o defecto; si
lo hay no se debe usar. E.s necesa­
rio ta,;rÍbién examin.ar- el extremo
dei cordón eléctrico que se conecta
a! enchufe y al usar el mismo de,
hemos asegurarnos de que tiene la
protección adecuada y de. q,,u� no
<1ue<le _tirado por .el suelo de ma­
nera descuidada y pueda provocar
una caída u otro. tipo de lesíón,
Y por último; si al usar cualquier
aparato eléctrico nos damos cuenta
que está en mal estado, que fún­
ciona rnal o que alguna pieza o
parte del misrnq está défectuosa,
debemos apagarlo, desconectarlo e
infonnar el problema de inmediato
a la J)ersqna pertinente que tenga
el cono-cirni.ento y experiencia deb.i­
dos para arreglarlo.
Los enoques eléctricos se eueden
cVitat, especialmente si to rn�mos
un poco de nuestro tiempo para
aprender cuáles s on los neligros
involucra<los y si seguimos todas
las medidas prácticas necesarias
para controlarlos.
Debemos utilizar y apro:vechar
los beneficios d<i la eJectricidad y
al misrno tiernpo evitar a toda cos­
ta que ésta nos titilice a nosotros
como parte ele su circuito. •
charla 1

Cuidado
con los
inferru fores
\lna de las
GENERA.IJ!'YtEi..'TE
prin1eras cesas que se:riota a l entrar
en una fábrica, taller o compañía de
elect�icidad es el letrer9 "PELI­
GRO". Si contáratnos los lugares en
el cual está colocado este letrero, no
cab.e duda de que descttbridamos
gue más de media docena est�n i;e­
laeionados eon la oper ación y co n -
trol de la corriente eléctr .ica. li'1ucho�
de estos letreros que han sido colo­
cados ga�a ·nuestra prote�ción están
relacionados con una J;esión grave o
aun una 1:nuerte.
Hay una atracción particular ha­
cia los interruptor es eléctri:cos, y
cuanto más alta es la tensión más
grande es la atracción. Es pasible
que la atracción esté relacionada
con nuestro cariño instintivo hacia
la fuerza y nuestro deseo inconscien­
te de lograr que "sucedan cosas". O
es probable tan1bién que no s_ea
nada más que nuestra curiosid_ad i n ­
saciable l a que nos atrae a los inte­
rruptores. Es posible también que lo
que nos impulsa a tocar un interrup­
tor prohibido es e l d.eseo de "ahorrar
tie1npo".
El n1over un inter.ruptor ·puede
poner en funcionamiento a una má­
quina, causar un incendio desastro­
so o aun encender una carga de d i ­
na1nita, iluminar una habitación o
taller y aun matar a un ho1nbre. Un
interruptor eléctrico operado ade­
cuadarnente puede ser muy útil en
un determinado momento y en otro
causar un daño incalculable.
(Aquí el supervisor puede hablar
de algún taso ocurrido en la com­
pañeía y. de la que p osibl.emente·
tengan conocimiento la 1nay oría
de los usis,tentes ).
Todos conoce1nos la historia del
trabajador que tr.abajaba en una má­
quina que funcionaba con� motor .
El disyuntor de la línea pr incipal
que pro ;.efa la energía a esta máqui­
na, salto debido a una sobrecarga.
El operario de la n1áquina fµe a la
sala de controles '/ volvió a colocar
el disyuntor. Inrnediatarnente volv,ió
a saltar, ya que la línea estaba to­
davía sobreca·rgada y üna chispa
que saltó el disyuntor ( d·e1 tipo ·an­
tiguo) le causó una quemad ur a en
el ojo izqui.erdo, que dio J:?Or resulta.
do una i11cap,icklad de alrededor de
diez días.
�stas cosus suceden tan a menudo
que la 1nayorhr de h1s con1pañ"Íl1 s es­
tahlec...n reglas y -se dan instruccio-
nes para evitarlas. Pero en el caso
que acabo de relatarles, el trabaja­
dor olvidó las reglas y las adverten­
cias y pensó que podía correr, el-ries­
go. Lo qu·e no pensó es que casi
pudo haber perdido un.ojo.
Este operario no tenía por r¡ué to­
car el conn1 utador. Solamente hu­
biese necesitado unos pocos minu­
tos para llamar al supervisor o bien
a un electricista. Un minuto de reca­
pacitación podría haberle salvado
muchos días de dolor.
.Se ha dicho que la electricidad es
parte de la vida moderna, pero de­
rnasiada electricidad es la base de la
n1uerte.
.Ló que voy a relatarles 11hora ilus­
tra que el descuido no indica coraje.
El hombre que exhibe su valentía
tocando o golpeando los intei:ruptó�
res eléctricos de los que tienen poco
o ningún conoci"miento indica su fal­
ta de sentido común. El ele.ctricista
entrenado no <;Orre ningún peligro,
ya que sabe donde se enc11entra la
corriente, q.ué es lo que debe hacer
y córno debe hacerlo en el momento
en que lo quiere realizar. Cualquier
otra pers.ona que se entretne.ta aun
con tensiones moderadamente baja-s
está p�niendo su cabeza_ en la "gui­
llotina . Los hon1bres mas valien.tes
son generaln1ente los rn"ás cuidado­
sos. Estos trabajadóres son los que
saben que los letreros que se colo­
can cerca o arriba de _los interrupto­
res deben de ser observaüos siemp re.
El prestar atención a todós los l e ­
treros colocados cerc� de los. ill te­
rrup.tor.es eléct ricos puede evitar
consecuencias inuy serias. Debernos
1·ecordar que la "electricidad, gene­
ntl111eíJte, 110 da n1ás de una opor.­
tunidad". •
charla 3

ROPA DE TRABAJO
¿HA N PENSADO alguna vez
que por término medio llevamos la
ropa de trabajo puesta durante más
tiempo que la ropa de calle? $in e m ­
bargo, algunos trabajadores cuax¡do
se ponen su rópa de trabajo, lo h a ­
cen eon cierto desprecio, como s i se
estuvieran vistiendo andrajos, y
cuentan las horas que les queda
para deshacerse de ellas y ponerse
la ropa de calle,
A la ropa de caJie, en general, la
tratamos con cuidado, como si fue­
ra parte de nuestro-cuerpo. Espera­
mos que nuestras esposas limpien
bien el cueH0 de las camisas. Y el
traje tiene que estar bien planchado
o de lo contrario no lo usan;lOS..
Gastamos mucho dinero en vestir­
nos á la moda, pero en cambio, a la
ropa de trabajo no le da1nos la me­
nor importancia, aunque es más in1-
portante que la ropa de calle,
-.
. usar e:orrectamente. Por ejemplo, he
. .o
porque nuestra integridad física,
nuestra salud y nuestra comodidad
dependen de ella.
Yo conozco a n,abajadores que
_
tienen los armarios de sus hogares
repletos de ropa, pero vienen a
trabaj_ar diariamente con la misma
ropa grasienta, descosida y rota q_ue
traían hace un mes, y con el mismo
calzado.
Con esto no quiero decir que
debem .os venir a trabajar vestidos
inmaculadamente, como si fuéramos
banqueros o como para ir a una
boda. Lo que q:uiero recalcar en
esta charla es que un trabajador
que se preocupa por su ropa de
trabajo, que la cuida don esrnero,
que. la limpia regularmente, que se
preocupa por cQser los dobladillos
que se le sueltl\n, denota respeto
hacia sus compañeros de trabajo y
hacia la empresa y. tiene menos po-
sibilidades de sufrir una lesión que
otro trabajador descuidado, cuya
ropa denota dejadez, suciedad y
abandono.
La ropa de trabajo debe ser sen­
cilla y se debe ajustar al trabajo
que s. e debe realizar. (Aqµí él su­
pervisor puede- dar algunos é¡e~
pl.os de ropa que usan algu.nos de
los trabájadore� que asisten a lá
cfuirla. Por ejemplo, puede men­
cionar que· los trabajadores de. ma11-
teni1niento necesitan "coveralls'' con
bolsillos e.Specialmente diseñados).
Y no basta con usar la ropa apro­
piada y limpia, -sino que se la debe
observado que a . veces, ¡¡lgunos de
ustedes trabajan en las máquinas
eón camisas de mangas largas. Esta
es una de las pocas ocasiones, cuan­
do se trabaja en una máquina, en
que se deben remangar las mangas,
para que no se. ei:iganchen en las
partes en m0vimiento o puntos de
pellizco. En otras ocasiones las
mangas se deben de llevar sin r e ­
mangar-, para no arañarse los ante­
brazos y ensuciarse la piel.
Cuando no· se remanguen las
mangas, se las debe abotonar en las
n1uñecas, no se las debe llevar n1e­
dio remangadas por debajo de los
codos ni sueltas·. Si las mangas no
se abotonan en las muñecas, se· pue­
den enganchar en partes salientes
y se pueden sufrir lesiones.
Los dobladillos de los pantalones
nunca se deben llevar arrastrando
por el suelo, como. a veces 4e obser­
vado, sino que no deben bajar más
de los tobillos; de ·esta forma.evita­
rán pisar en el dobladillo y caerse
de bruces. No es una buena idea
doblar los dobladillos hacia arriba,
ya que se forman pequeños bolsi­
llos, donde se acumula la suciedad'
y existe el peligro de que se des-
doblen. Si ustedes creen que sus
p �ntalones son demasiado largas,
d1ganles a sus .esposas que s·e los
corten o suban unos cuantos c e n -
,
tlmetros.
Cualquier prenda de ttabajo que
usen, que esté limpia. La ropa de
trabajo limpia juega un papel muy
ünportante en_ la preven _ ci6n de en�
fermedades de la piel, ya que evita
que gér.menes malignos . produzcan
de1matitis.
Los médicos industriales dicen
que la ropa de trabajo se debe
cambiar por lo menos una vez a la .
semana, y más a rnenudo si se tra­
baja con productos irritantes de la
piel o se suda mucho. Naturalmen­
te. los calcetines y ropa interior Sil
deben cambiar con mucha más f r e ­
cuencia, de ser posible todos los
dias.
Los zapatos también son parte
de la ropa de trabajo. Algunos u a ­
bajadores piensan que los zapatas
son de. hierro. Los zapatos de pro­
tección necesitan el mismo c)lidado
que los zapatos de ca).le. Se los d.ebe
limpiar, dar betún y dejarlos secar
cuando estén empapados en Wsdor o
impregnados con aceite o grasa.
Antes de terminar-, quiero resumir
esta pequefía charla en tres puntos
principales, que deben tenerlos
siempre presentes:
• Usen ropas que se ajusten a las
necesidades del trabajo espee'tfico
que realicen;
• Mantengan la ropa de trabajp
limpia y en buenas condiciones; y,
• Usenla siempre durante las horas
de trabajo. •
charla 8