¨AÑO DE LA LUCHA CONTRA LA PRINCIPIO DE LA PRIMACIA DE LA derecho civil el contrato no está ligado a

CORRUPCION E INPINUDAD¨ REALIDAD su cumplimiento mientras que en el de

trabajo no queda completo si no es a
DERECHO Y CIENCA POLITICAS En principio de la primacía de la realidad
través de su ejecución.
significa que en caso de discordancia
entre lo que ocurre en la práctica y lo que 2.- SIGNIFICADO:
surge de documentos o acuerdos, debe
 Diversas causas de ajuste entre la
darse preferencia a lo primero, es decir, a
realidad y el documento:
lo que sucede en el terreno de los hechos.
El significado que le atribuimos a este
1.- DEMONIMACION:
principio es el de la primacía de los
Cueva señala: Quien sostiene que el hechos sobre las formas, las formalidades
PRINCIPIO DE LA PRIMACIA DE
contrato de trabajo es un contrato – o las apariencias.
LA REALIDAD realidad
Esto significa que en materia laboral
CATEDRA: Derecho Individual del Trabajo Al estudiar la naturaleza jurídica del importa lo que ocurre en la práctica más
contrato de trabajo dedica una buena que lo que las partes hayan pactado en
CATEDRATICO: Dr. J. Rojas F.
parte de su posición a describir la teoría forma más o menos solemne o expresa o
INTEGRANTES: de la relación de trabajo que arranca de lo que luzca en documentos formularios,
Molitor. instrumentos de control
Existe, consiguientemente, una  Aceptación general de esta idea:
diferencia esencial entre el contrato de
Esta idea, aunque expresadas de muy
trabajo y los contratos de derecho civil.
distintas maneras, han sido recogidas por
En estos, la producción de los efectos
la doctrina universal. Incluso en muchos
jurídicos y la aplicación del derecho solo
casos se presupone el principio
dependerá del acuerdo de voluntades, en
CICLO: VI aplicándolo sin creer necesario
tanto que en el trabajos necesario el
explicitarlo.
2019
cumplimiento mismo de la obligación
contraída; de donde se deduce que en el
Perez Botija : expreso también con
claridad la misma idea ¨La aposición de la
existencia del contrato entre quien da
trabajo o utiliza servicios y el que lo
presta fundase en la idea del
consentimiento tácito. De la conducta de
dos personas puede deducirse la
existencia de un contrato de trabajo, aun
cuando los propios interesados tuvieran
interés de negarlo´.
Se basa para ello en el art. 3 de la ley de
contrato de Trabajo: ¨El contrato se
supone siempre existente entre aquel
que da trabajo o utiliza un servicio y el
que lo presta, aunque no exista
estipulación escrita o verbal,
entendiéndose por condiciones del
contrato de las determinadas en las leyes
y reglamentos de trabajo y, en defecto de
tales normas, por los usos y costumbres
de cada localidad, en la especie y
categoría de los servicios y obras de que
se trate¨.
3.- FUNDAMENTACION:
 Exigencia de la buena Fe:
Aun cuando hasta ahora nadie se haya
detenido a explicar la fundamentación de
este principio, creemos que ella puede
basarse en distintas motivaciones.
-La primera resulta el principio de buena fe:
La realidad refleja la verdad. La
documentación puede reflejar la dicción
dirigida a disimular o esconder la verdad con
el objeto de aludir el cumplimiento de
obligaciones legales o de obtener un
provecho ilícito.
 Dignidad de la actividad humana:
La segunda deriva del propio contenido
del contrato que supone actividad
humana prolongada en el tiempo.
 Desigualdad de las partes:
Es ampliamente conocida la situación de
desigualdad económica y cultural que
normalmente separa a las partes en el
contrato de trabajo.
 Objeciones:
De Ferrari: ha formulado dos objeciones
a este principio
En primer término, que no siempre es
favorable al trabajador, porque puede
ocurrir que los hechos no se ajusten a lo
actuado y el trabajador pretenda que se
cumpla lo convenido
En segundo término, que lo que interesa no
es el complico entre las formalidades y los
hechos, sino el conflicto entre los hechos y
el derecho.
4.- ALCANCE PRÁCTICO:
 Diversidad de aplicación :
Los casos de aplicación del principio son
prácticamente infinito, como son limitadas
las hipótesis de divergencia entre las
apariencias (documentos, contratos,
finalidades, denominaciones, etc.) y la
realidad.
 Caso jurisprudencial: Interesan las
funciones y no la denominación.
Un primer ejemplo, con más de ochenta años
de antigüedad, hace referencia al hecho que
la retribución debe fijarse en funciones de las
tareas que se desempeñan, y no de las
denominaciones que se le atribuyen al
empleado.