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3.

Magnitudes en protección radiológica

Una propiedad de un cuerpo o de un fenómeno de la naturaleza puede ser descripta mediante


magnitudes físicas convenientemente definidas. Si bien estas magnitudes suelen presentar un en-
foque simplificado e idealizado de dicha propiedad, tienen la ventaja de poder ser cuantificadas,
ya sea por mediciones o por cálculos, a la vez que son lo suficientemente generales e inequívocas
como para ser utilizadas en cualquier situación práctica. Por lo general, pueden ser multiplicadas,
divididas o sumadas entre sí, de modo que otras magnitudes pueden ser definidas y derivadas a
partir de un conjunto de magnitudes fundamentales.
Una unidad, por otra parte, es un valor de referencia establecido para una magnitud deter-
minada y a partir de la cual se comparan otras del mismo tipo. Del mismo modo como sucede
con las magnitudes, a partir de un conjunto de unidades fundamentales pueden ser definidas otras
unidades derivadas.
En protección radiológica, los fenómenos que nos interesan describir en términos de magnitu-
des y unidades están relacionados con las características de los campos de radiación de ionizante,
su interacción con la materia y la forma en la que se deposita la energía. Ésta producirá diferentes
efectos que, en última instancia, deseamos evitar o disminuir al definir magnitudes y unidades
apropiadas, que nos permitan establecer límites para proteger a las personas y al ambiente.
En ese sentido, la Comisión Internacional de Unidades y Medidas Radiológicas (ICRU), junto
con la Comisión Internacional de Protección Radiológica (ICRP), han definido un conjunto de
magnitudes físicas y unidades que son ampliamente utilizadas en protección radiológica y que, en
líneas generales, podemos clasificar en:
Magnitudes radiométricas: describen las características del campo de radiación ionizante.
Magnitudes de interacción: describen los procesos involucrados cuando el campo de radia-
ción ionizante interactúa con la materia.
Magnitudes dosimétricas: describen los procesos por los cuales la energía se transfiere entre
las partículas y se deposita en la materia, cuando el campo de radiación interactúa.
Magnitudes de protección: describen la transferencia de energía en el cuerpo humano, en
12 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

términos del tipo de radiación y la radiosensibilidad de los tejidos, permitiendo establecer


límites para mantener niveles de riesgo aceptables ante una exposición potencial o real.
Magnitudes operacionales: definidas para poder ser medidas con los detectores y dosímetros
que actualmente existen, a fin de poder cuantificar otras magnitudes no medibles de forma
directa.
Las magnitudes y las unidades utilizadas en protección radiológica fueron definidas en ICRU
(1993) Quantities and Units in Radiation Protection Dosimetry, en ICRU (2011) Report 85 -
Fundamental Quantities and Units for Ionizing Radiation y en ICRP (2007) Publication 103 -
Recommendations of the International Commision on Radiologial Protection.

3.1 Magnitudes radiométricas


El primer paso para comprender la interacción de la radiación con la materia y la forma en la
que se transfiere la energía es caracterizar el campo de radiación ionizante presente. Este campo
está constituido por partículas de diferentes tipos, tanto cargadas como no cargadas eléctricamente,
cada una de las cuales lleva consigo una energía determinada.
Las magnitudes más generales que pueden definirse están asociadas a la cantidad de partículas
y la energía que tienen, como así también su variación en el tiempo y en el espacio. Estrictamente,
el campo de radiación se define completamente al conocer la dirección de estas partículas, pero
veremos que podemos simplificar inicialmente las magnitudes al considerarlas escalares, indepen-
dizándonos de la componente vectorial. Para ello consideraremos un punto de interés P en el
espacio, que resulta el centro de una esfera de volumen dV . Como esta esfera presenta en cual-
quier dirección la misma sección transversal da, a priori no importa de qué dirección provengan
las partículas (Figura 3.1).
El número de partículas y su energía radiante, entonces, son las magnitudes radiométricas
básicas de las que se derivan las demás:

Definición 3.1.1 — Número de partículas, energía radiante. El número de partículas, N,


es la cantidad de partículas que son emitidas, transferidas o recibidas.
Unidad: 1

La energía radiante, R, es la energía de las partículas que son emitidas, transferidas o reci-
bidas, sin incluir su energía en reposo.
Unidad: J

Ahora bien, no necesariamente todas las partículas poseen la misma energía, sino que es más
probable que en la realidad exista una distribución, tanto de N como de R respecto de la energía E:

dN
NE = (3.1)
dE

dR
RE = (3.2)
dE
donde dN y dR son el número de partículas y su energía radiante, respectivamente, cuyas energías
están entre E y E + dE. De la definición de energía radiante, está claro que ambas distribuciones
3.1 Magnitudes radiométricas 13

Figura 3.1: Punto de interés y campo de radiación.

se relacionan de la siguiente forma:


dR dN
=E ⇒ RE = ENE (3.3)
dE dE
De modo que, si la energía es la misma para todas las partículas del campo, la energía radiante
será directamente R = NE.
La variación temporal de estas dos magnitudes se conoce como flujo:

Definición 3.1.2 — Flujo de partículas, flujo de energía. El flujo de partículas, Ṅ, o simple-
mente flujo, es el cociente de dN por dt, donde dN es el incremento del número de partículas
en un intervalo de tiempo dt.

dN
Ṅ = (3.4)
dt
Unidad: s−1

El flujo de energía, Ṙ, es el cociente de dR por dt, donde dR es el incremento de la energía


radiante en un intervalo de tiempo dt.

dR
Ṙ = (3.5)
dt
Unidad: W

Cuando las partículas inciden sobre la esfera de la Figura 3.1, la relación entre el número de
14 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

partículas, su energía radiante y la sección transversal da, se denomina fluencia:

Definición 3.1.3 — Fluencia de partículas, fluencia de energía. La fluencia de partículas,


Φ, o simplemente fluencia, es el cociente de dN por da, donde dN es el número de partículas
que inciden en una esfera de sección transversal da.

dN
Φ= (3.6)
da
Unidad: m−2

La fluencia de energía, Ψ, es el cociente de dR por da, donde dR es la energía radiante que


incide en una esfera de sección transversal da.
dR
Ψ= (3.7)
da
Unidad: Jm−2

Debido a que la relación de la Ecuación 3.3 entre las magnitudes fundamentales N y R se


mantiene, para el caso de la fluencia vale lo mismo:

Ψ = EΦ (3.8)

La variación temporal de la fluencia se denomina tasa de fluencia:

Definición 3.1.4 — Tasa de fluencia, tasa de fluencia de energía. La tasa de fluencia, Φ̇,
es el cociente de dΦ por dt, donde dΦ es el incremento de la fluencia en un intervalo de tiempo
dt.
 
dΦ d dN
Φ̇ = = (3.9)
dt dt da

Unidades: m−2 s−1

La tasa de fluencia de energía, Ψ̇, es el cociente de dΨ por dt, donde dΨ es el incremento


de la fluencia en un intervalo de tiempo dt.
 
dΨ d dR
Ψ̇ = = (3.10)
dt dt da

Unidades: W m−2

Ejemplo 3.1 — Fuente puntual isotrópica. Suponga una fuente S puntual e isotrópica como
se muestra en la figura. La actividad de la fuente es A y la emisividad para un determinado
tipo de partículas es ε . Considere que todas las partículas emitidas tienen la misma energía
E, calcule a una distancia r de la fuente: el flujo de partículas, el flujo de energía, la tasa de
fluencia de partículas, y la tasa de fluencia de energía.
3.1 Magnitudes radiométricas 15

Solución: En este caso, recordando la definición de actividad, se deduce que el flujo de


partículas es:

dN
Ṅ = = Aε (3.11)
dt

De la Ecuación 3.3, como la energía es la misma para todas las partículas, el flujo de energía
es:

dR
Ṙ = = EAε (3.12)
dt

Para el cálculo de la tasa de fluencia, consideraremos una esfera de radio r centrada en la


fuente. A su vez, podemos considerar que cualquier punto P perteneciente a esa esfera es el cen-
tro de otra esfera más pequeña cuya sección transversal es da también incluida en la superficie
de la esfera más grande. Gracias a la simetría del problema, es fácil demostrar que la fluencia
de partículas, entendida como el número de partículas por unidad de tiempo y superficie que
pasa por cualquier punto de la esfera es:

dN Aε
Φ̇ = = (3.13)
da 4π r2

En tanto que la tasa de fluencia de energía es:

EAε
Ψ̇ = E Φ̇ = (3.14)
4π r2

16 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

Ejemplo 3.2 Calcule la tasa de fluencia de energía que existe a una distancia de 3m de una
fuente isotrópica de 1Ci, si las partículas de interés que emite tienen una energía de 1,25MeV
y emisividad de 0,89.

Solución:
DATOS:
r = 3m
A = 1Ci
E = 1,25MeV
ε = 0,89

Utilizando la ecuación 3.10 se tiene que:

EAε −13
Ψ̇ = E Φ̇ = = 1,25 · 1,6022 × 10 J · 1
MeV 
Ci ·
3,7 × 1010 Bq
· 0,89 ·
1
4π r 2  
1MeV 
1
Ci 4π (3m)2

⇒ Ψ̇ = 5,8 × 10−5W m−2




! La emisividad ε está relacionada con la probabilidad de que se emita una determinada par-
tícula en un proceso de decaimiento radiactivo, pero es útil interpretar este valor como la
cantidad de partículas que se emiten por cada decaimiento en la fuente. En protección radio-
lógica, en ocasiones, nos interesan más los fotones de aniquilación que ocurren casi inmedia-
tamente luego de un decaimiento beta positivo, más que los propios positrones. Es el caso,
por ejemplo, del 18 F, donde se considera que la emisividad para fotones de 511keV es ε = 2.
Asimismo, en el caso del 60Co en lugar de considerar dos fotones de 1,33MeV y 1,17MeV ,
ambos con ε = 1, suele ser más práctico considerar un fotón promedio de 1,25MeV con
ε = 2.

N OMBRE S ÍMBOLO U NIDAD D EFINICIÓN


Número de partículas N 1 −
Energía radiante R J −
Flujo de partículas Ṅ s−1 dN/dt
Flujo de energía Ṙ W dR/dt
Fluencia de partíclas Φ m−2 dN/da
Fluencia de energía Ψ Jm−2 dR/da
Tasa de fluencia de partículas Φ̇ m−2 s−1 dΦ/dt
Tasa de fluencia de energía Ψ̇ W m−2 dΨ/dt

Tabla 3.1: Magnitudes radiométricas.

3.2 Magnitudes de interacción


Cuando la radiación interactúa con la materia, las partículas incidentes pueden ser absorbidas
o bien cambiar su dirección o energía (o ambas). A su vez, en cada interacción pueden originarse
3.2 Magnitudes de interacción 17

una o varias partículas que pueden, según su tipo y energía, continuar produciendo ionizaciones
en la materia. Las magnitudes definidas para describir estos procesos se denominan de interacción,
y están relacionadas con la naturaleza del fenómeno, la energía y tipo de las partículas incidentes
y del material sobre el que interactúan.
La magnitud fundamental de la que pueden derivarse las demás es la sección eficaz:

Definición 3.2.1 — Sección eficaz. La sección eficaz, σ , de un material blanco, para una
interacción particular producida por partículas no cargadas incidentes de un tipo y energía de-
terminados, es el cociente de N por Φ, donde N es el número medio de dichas interacciones
producidas cuando las mencionadas partículas inciden en el material blanco con una fluencia Φ.

N
σ= (3.15)
Φ
Unidades: m2

Una unidad especial definida para la sección eficaz es el barn:

1b = 10−28 m2 = 100 f m2

A partir de este punto conviene realizar una distinción entre las partículas cargadas de las no
cargadas, ya que la naturaleza de las interacciones con la materia es diferente y, consecuentemente,
las magnitudes que se definieron para cada caso:

3.2.1 Partículas cargadas


En protección radiológica, las partículas cargadas que son de importancia son los electrones
rápidos (β o δ ), los positrones, los protones, las partículas α , los deuterones, entre otras. Cuando
interactúan con la materia, y dependiendo de su energía, estas partículas son capaces de producir
desde excitaciones e ionizaciones a nivel electrónico hasta reacciones con los propios núcleos. En
ocasiones, además, la interacción de estas partículas puede llevar a la emisión de otras partículas se-
cundarias como electrones Auger, rayos X característicos, radiación de frenado (bremsstrahlung),
fotones de aniquilación y radiación de Cherenkov.
Debido a la naturaleza del campo coulombiano, las partículas cargadas interactúan constante-
mente con los electrones y protones de la materia sobre la que inciden, de modo que van perdiendo
energía a medida que penetran en la materia. La magnitud que describe esta pérdida de energía es
el poder de frenamiento másico:

Definición 3.2.2 — Poder de frenamiento másico. El poder de frenamiento másico, S/ρ ,


comúnmente conocido por su nombre en inglés mass stopping power, de un material, para
partículas cargadas de un tipo y energía determinados, es el cociente de dE por ρ dl, donde dE
es la energía media perdida por las partículas cargadas cuando atraviesan una distancia dl en un
material de densidad ρ .

S dE
= (3.16)
ρ ρ dl

Unidades: Jm2 kg−1


18 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

El poder de frenamiento másico pueden ser expresado como la suma de diferentes procesos,
independientes entre sí:
     
S 1 dE 1 dE 1 dE
= + +
ρ ρ dl el ρ dl rad ρ dl nuc

donde el primer término, conocido comúnmente como stopping power másico colisional, es la
pérdida de energía debida a interacciones con los electrones atómicos que resulta en excitaciones
o ionizaciones; el segundo término, o stopping power másico radiativo, es la pérdida de energía
debido a la emisión de bremsstrahlung por interacción con los campos elétricos atómicos (tanto del
núcleo como de los electrones) y, finalmente, el tercer término, o stopping power másico nuclear
es la pérdida de energía debido a interacciones elásticas coulombianas que producen el retroceso
o recoil, generalmente despreciable, de los núcleos.
En protección radiológica muchas veces nos interesan sólo aquellas interacciones que produ-
cen excitaciones o ionizanciones a nivel electrónico, lo que está representado con el primer témino
de la sumatoria anterior. En ocasiones, incluso, suele ser práctico establecer un valor máximo de
la energía cinética de los electrones liberados por dichas interacciones (rayos δ ) que se tienen en
cuenta, lo que da origen a la denominada transferencia lineal de energía o poder de frenamiento
másico restringido:

Definición 3.2.3 — Transferencia lineal de energía - LET. La transferencia lineal de energía,


L∆ , también conocida por LET o poder de frenamiento electrónico restringido, de un material,
para partículas cargadas de un tipo y energía determinados, es el cociente de dE∆ por dl, donde
dE∆ es la energía media perdida por las partículas cargadas debido a interacciones electrónicas
mientras atraviesan una distancia dl en dicho material, sin considerar la suma media de las
energías cinéticas que superen ∆ de todos los electrones liberados por dichas partículas cargadas.

dE∆
L∆ = (3.17)
dl
Unidades: Jm−1

Si en la definición anterior la energía de corte ∆ es igual a la máxima energía que pueden


tener los electrones secundarios emitidos, entonces estamos hablando de la transferencia lineal
irrestricta de energía o L∞ .
Como veremos más adelante, hay dos parámetros importantes que se desprenden de las defin-
ciones anterioes y que son especialmente últiles al momento de estimar blindajes para partículas
cargadas. El primero de ellos es el radiation yield:

Definición 3.2.4 — Radiation yield. El radiation yield, Y (E), para un partícula cargada de un
tipo y energía determinados, es la fracción de la energía cinética inicial que es emitida como
radiación electromagnética cuando la partícula se frena hasta el reposo al interactuar con la
materia. Puede definirse como:
1 dE

ρ dl rad
Y (E) = S
(3.18)
ρ

El otro parámetro importante es el rango o alcance de las partículas cargadas:


3.2 Magnitudes de interacción 19

Definición 3.2.5 — Rango. El rango, R, para partículas cargadas de un tipo y energía determi-
nados es el valor esperado del recorrido p que dicha partícula realiza dentro de la materia antes
de detenerse. El rango proyectado, < t >, para partículas cargadas de un tipo y energía cinética
inicial determinados es el valor esperado de la penetración máxima t f de dicha partícula en la
materia en la dirección de incidencia (Figura 3.2).

Un parámetro calculado y tabulado es el rango CSDA, RCSDA , cuyo valor es aproximado a R


en la mayoría de las aplicaciones prácticas. Este rango es calculado asumiendo que el stopping
power no posee variaciones abruptas para todo el rango de energías (lo que se conoce continuous
slow down aproximation), y en ese caso puede definirse como:
Z E0  −1
S
RCSDA = dE
0 ρ

Figura 3.2: Una partícula cargada ingresa a un material con una energía E0 por el punto A hasta detenerse
en el punto B. Se observa la diferencia conceptual entre p (recorrido) y t f (penetración).

3.2.2 Partículas no cargadas


Las partículas no cargadas que nos interesan en protección radiológica son los fotones (gamma
y rayos X) y los neutrones. Conceptualmente, la naturaleza de la interacción con la materia es
diferente que en el caso de la partículas cargadas debido a que no poseen carga y, por lo tanto,
puede suceder que estas partículas no interactúen en su paso por la materia.
En el caso de los fotones, los fenómenos de interacción más comunes son el efecto fotoeléc-
trico, el efecto Compton, la formación de pares, la dispersión de Rayleigh y las reacciones foto-
nucleares. Para el caso de los neutrones, los más comunes son la dispersión (elástica e inelástica),
la captura neutrónica, las reacciones nucleares y la fisión nuclear. En ambos casos, y dependiendo
de la energía, cuando las partículas no cargadas interactúan con los electrones y núcleos de la
materia pueden desviarse o cambiar su energía (o ambos), ser absorbidas, e incluso provocar la
20 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

emisión de otras partículas secundarias, como electrones de ionización, eletrones Auger, rayos X
característicos, o incluso partículas más pesadas.
Estrictamente, existe una probabilidad de que las partículas no cargadas interactúen con la ma-
teria, de modo que, cuando lo hacen, son desviadas de la dirección de incidencia, lo que se conoce
como atenuación. Una de las magnitudes que refleja esta probabilidad y que, como veremos luego,
es útil al momento de estimar el blindaje necesario para este tipo de partículas, es el coeficiente
másico de atenuación lineal:
Definición 3.2.6 — Coeficiente másico de atenuación. El coeficiente másico de atenua-
ción, µ /ρ , de un material, para partículas no cargadas de un tipo y energías determinados, es el
cociente de dN/N por ρ dl, donde dN/N es la fracción media de partículas que experimentan
alguna interacción mientras atraviesan una distancia dl en un material de densidad ρ .

µ dN/N
= (3.19)
ρ ρ dl

Unidades: m2 kg−1

La probabilidad de que una partícula no cargada interactúe cuando inciden normalmente en un


espesor dl de materia es, entonces, µ dl. El recíproco de µ se conoce como camino libre medio.
Cuando las partículas no cargadas interactúan, una parte de su energía es transferida a la mate-
ria como energía cinética de partículas cargadas secundarias emitidas durante la interacción. Esta
fracción de la energía es importante puesto que son estas partículas secundarias las que, en defini-
tiva, pueden producir ionizaciones de forma directa desde el momento en el que son emitidas. Para
describir esta relación se ha definido el coeficiente másico de transferencia de energía:

Definición 3.2.7 — Coeficiente másico de transferencia de energía. El coeficiente má-


sico de transferencia de energía, µtr /ρ , de un material, para partículas no cargadas de un tipo
y energía determinados, es el cociente de dRtr /R por ρ dl, donde dRtr /R es la energía media
que es transferida a energía cinética de partículas cargadas por las interacciones de partículas
no cargadas que inciden con una energía radiante R, cuándo éstas atraviesan una distancia dl en
un material con densidad ρ .

µtr dRtr /R
= (3.20)
ρ ρ dl

Unidades: m2 kg−1

Ahora bien, no toda la energía cinética de las partículas cargadas secundarias quedará finalmen-
te en la materia, ya que, además de producir ionizaciones y emisión de otras partículas cargadas,
también pueden llevar a cabo interacciones que emitan radiación electromagnética que puede “es-
capar” (como radiación de frenado, radiación de aniquilación o radiación de fluoerescencia), lo
que usualmente se conoce como pérdidas radiativas. La fracción de la energía que se pierde de
esta forma se denomina g, y la fracción de la energía que es transferida a la materia pero sin tener
en consideración dichas pérdidas está descripta por el coeficiente másico de absorción de energía.
En la Figura 3.3 se esquematiza la relación entre los coeficientes que acabamos de definir.
3.2 Magnitudes de interacción 21

Figura 3.3: Relación conceptual entre el coeficiente másico de atenuación lineal (µ /ρ ), el coeficiente
másico de transferencia de energía (µtr /ρ ) y el coeficiente másico de absorción de energía (µen /ρ ).

Definición 3.2.8 — Coeficiente másico de absorción de energía. El coeficiente másico


de absorción de energía, µen /ρ , de un material, para partículas no cargadas de un tipo y energía
determinados, viene dado por:
µen µtr
= (1 − g) (3.21)
ρ ρ
donde g es la fracción de la energía que las partículas no cargadas le transfieren a partículas car-
gadas como energía cinética, las cuales, subsecuentemente, producen interacciones que derivan
en pérdidas radiativas.
Unidades: m2 kg−1

N OMBRE S ÍMBOLO U NIDAD D EFINICIÓN


Sección eficaz σ m2 N/Φ
Stopping power másico S/ρ Jm2 kg−1 dE/ρ dl
Stoping power lineal S Jm−1 dE/dl
Transferencia lineal de energía L∆ Jm−1 dE∆ /dl
Radiation yield Y (E) 1 (dE/dl)rad /S
Rango R m −
Coeficiente másico de atenuación µ /ρ m kg−1
2 dN/(N ρ dl)
Coeficiente lineal de atenuación µ m−1 dN/(Ndl)
Camino libre medio µ −1 m Ndl/dN
Coeficiente másico de transferencia de energía µtr m kg−1
2 dRtr /(Rρ dl)
Coeficiente másico de absorción de energía µen m2 kg−1 (1 − g)µtr /ρ

Tabla 3.2: Magnitudes de interacción.


22 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

3.3 Magnitudes dosimétricas


Hasta el momento hemos visto que cuando la radiación incidente interactúa con la materia,
la energía de sus partículas puede ser convertida y finalmente depositada en el entorno. En líneas
generales, esto dependerá del campo de radiación, descripto por las magnitudes radiométricas, y
de los mecanismos de interacción propios de cada tipo y energía de las partículas, descriptos por
las magnitudes de interacción. Los efectos que esta conversión y deposición de energía tienen en la
materia se describen mediante las magnitudes dosimétricas. Definidas para brindar una correlación
entre las mediciones físicas y los fenómenos de conversión y deposición de energía, en general son
productos de magnitudes radiométricas y de interacción.

3.3.1 Conversión de energía


A continuación definiremos dos de las magnitudes que describen cómo se transforma la ener-
gía de la radiación incidente cuando interactúa con la materia. La primera de ellas, definida sólo
para partículas no cargadas, está relacionada con la conversión de su energía en energía cinética de
partículas cargadas que son liberadas en las interacciones, lo que se denomina kerma:

Definición 3.3.1 — Kerma. El kerma, K, magnitud que recibe su nombre de Kinetic Energy
Released per unit MAss, es el cociente de dEtr por dm, donde dEtr es la suma media de la
energía cinética inicial de todas las partículas cargadas liberadas por partículas no cargadas
cuando inciden en una masa dm de un material.
dEtr
K= (3.22)
dm
Unidades: Jkg−1 = Gy

La dependencia temporal de esta magnitud se denomina tasa de kerma:

Definición 3.3.2 — Tasa de kerma. La tasa de kerma, K̇, es el cociente de dK por dt, donde
dK es el incremento del kerma en un intervalo de tiempo dt.

dK
K̇ = (3.23)
dt
Unidades: Jkg−1 s−1 = Gys−1

Recordando las definciones de la fluencia y del coeficiente másico de transferencia de energía,


vemos que el kerma también puede expresarse como:
Z Z
µtr µtr
K = ΦE E dE = ΨE dE (3.24)
ρ ρ
donde ΦE y ΨE son las distribuciones de las fluencias de partículas y de energía, respectivamente,
y µtr /ρ es el coeficiente de transferencia de energía para el material sobre el que inciden las
partículas no cargadas de energía E. Cuando se trata de partículas monoenergéticas de un solo
tipo, la ecuación anterior se reduce a una fórmula más simple:
µtr µtr
K = ΦE =Ψ (3.25)
ρ ρ
y si se trata de una tasa de kerma:
µtr µtr
K̇ = Φ̇E = Ψ̇ (3.26)
ρ ρ
3.3 Magnitudes dosimétricas 23

! Por su definición, el kerma es una magnitud puntual, es decir, definida para un punto en el
espacio, ocupado o no por un material. Sin embargo, para la misma fluencia de partículas el
kerma difiere entre dos materiales sólo por el coeficiente de transferencia de energía, por lo
que es común, por ejemplo, referirse al kerma en aire dentro de un fantoma de agua, si se
conoce el factor de conversión correspondiente.

Típicamente el kerma suele ser desglosado en dos componentes, según si la energía cinética
de las partículas cargadas liberadas se transfiere subsecuentemente en:
Ionizaciones o excitaciones de los electrones atómicos del material, disipando su energía
por interacciones coulombianas en o cerca de su recorrido. En este caso se denomina ker-
ma colisional, definido como el valor esperado de la energía neta transferida a partículas
cargadas por unidad de masa, excluyendo las pérdidas radiativas y la energía pasada de un
partícula cargada a otra.
Emisiones de radiación electromagnética o pérdidas radiativas (radiación de frenado, de ani-
quilación o de fluorescencia). Esta componente se denomina kerma radiativo.

De modo que el kerma total puede ser escrito como:

K = Kcol + Krad

Volviendo un instante a la definición del coeficiente másico de absorción de energía y compa-


rando con la Ecuación 3.25:
µtr µen
Kcol = (1 − g)K = (1 − g)ΦE = ΦE
ρ ρ
De donde se deduce que, cuando las pérdidas radiativas son despreciables,
µen µen
K ≃ Kcol = ΦE =Ψ (3.27)
ρ ρ

! En protección radiológica, por lo general, estas magnitudes se calculan en materiales con


bajo Z, como aire, agua, tejido orgánico, polímeros, entre otros, por lo que las pérdidas
radiativas, generalmente más significativas cuando hay bremsstrahlung, se desprecian.

Supongamos ahora que queremos calcular el K en un material A, cuando se encuentra en un


campo de fotones monoenergéticos con energía E y fluencia Φ. Si se desprecian las pérdidas
radiativas, de acuerdo a la Ecuación 3.27, el kerma en un punto de A será:
 
µen
KA ≃ (Kcol )A = ΦE
ρ E,A

Si se reemplaza el material A por otro material B, como el campo de radiación sigue siendo el
mismo, el kerma valdrá:
 
µen
KB ≃ (Kcol )B = ΦE
ρ E,B

Por lo que la relación entre los valores de kerma (o de tasas de kerma) es:

KA K˙A (µen /ρ )E,A


= =
KB K˙B (µen /ρ )E,B
24 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

O lo que es lo mismo:

(µen /ρ )E,A
KA = KB (3.28)
(µen /ρ )E,B

Ejemplo 3.3 — Formulación conceptual del kerma. Un fotón con energía hν1 interactúa
con un eletrón atómico dentro de un pequeño volumen de masa m. Producto del efecto Com-
pton, se emiten un fotón con energía hν2 y un electrón con energía cinética inicial T1 . El fotón
interactúa con otro electrón atómico, produciendo otro efecto Compton, emitiendo un fotón
con energía hν3 y un electrón con energía cinética inicial T3 . El electrón de energía T1 , a su
vez, se desvía por un campo eléctrico nuclear, quedando con energía cinético T2 y emitiendo
por bremsstrahlung un fotón con energía hν4 . ¿Cuál sería la expresión de K, Kcol y Krad en este
caso?

Solución: Teniendo en cuentas las definiciones y suponiendo que las interacciones mencio-
nadas son las únicas que ocurren en ese pequeño volumen de masa:

K = hν1 − hν3 = T1 + T3

Kcol = hν1 − hν3 − hν4 = T1 + T3 − hν4 = T2 + T3


Krad = hν4


La segunda magnitud referida a la conversión de la energía, importante principalmente por


razones históricas, es la cantidad de cargas generadas en una masa de aire seco, conocida como
exposición:
3.3 Magnitudes dosimétricas 25

Definición 3.3.3 — Exposición. La exposición, X, es el cociente de dq por dm, donde dq es


el valor absoluto de la carga total media de los iones de un signo producidos cuando todos los
electrones y positrones liberados o creados por fotones incidentes en una masa dm de aire seco
son completamente detenidos en aire seco.

dq
X= (3.29)
dm
Unidades: Ckg−1

Una unidad frecuentemente utilizada para exposición es el roentgen, R, equivalente a:

1R = 2,58 × 10−4C/kg

La dependencia temporal de la exposición se conoce como tasa de exposición:

Definición 3.3.4 — Tasa de exposición. La tasa de exposición, Ẋ, es el cociente de dX por


dt, donde dX es el incremento de la exposición en un intervalo de tiempo dt.

dX
Ẋ = (3.30)
dt
Unidades: Ckg−1 s−1

En la definición de exposición no se tienen en cuenta las cargas generadas en ionizaciones


provocadas por la radiación emitida en procesos radiativos, por ejemplo, las ionizaciones que pro-
ducen fotones del bremsstrahlung de partículas cargadas. De modo que, si conocemos el Kcol , que
es la fracción de la energía de partículas no cargadas (fotones) incidentes que es transferida a ener-
gía cinética inicial de partículas cargadas (electrones) del material, pero excluyendo las pérdidas
radiativas, y la dividimos por la energía necesaria para producir un par de cargas (una ionización),
estaríamos calculando, entonces, la exposición. Esta energía necesaria, conocida como energía
media de creación de pares iónicos, W /e, es aproximadamente igual a 33,97J/C en aire seco. Por
lo tanto:
   
(Kcol )air 1 µen 1 µen
X= = ΦE = Ψ (3.31)
W /e 33,97J/C ρ E,air 33,97J/C ρ E,air

! La exposición es una magnitud puntual, definida únicamente para ionizaciones producida


por fotones en aire seco. Cuando se trata con otros campos de radiación en otros materiales,
es necesario conocer los factores de conversión adecuados para poder utilizar esta magnitud.

Ejemplo 3.4 — Tasa de exposición. Calcule la tasa de exposición, en Rh−1 , en un punto P en


aire seco que rodea a una fuente puntual e isotrópica de 1,5Ci de 137 Cs (E = 662keV , ε = 0,85)
a una distancia de d = 2m. Utilice el valor de µen /ρ = 0,0295cm2 /g.
26 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

Solución:
DATOS:
A = 1,5Ci = 5,55 × 1010 Bq
E = 662keV = 1,061 × 10−13 J
ε = 0,85
d = 2m = 200cm
µen /ρ = 0,0295cm2 /g

SUPOSICIONES:
Sólo se considerarán los fotones de la energía y emisividad mencionadas.
Se supone despreciable el bremsstrahlung (pérdidas radiativas despreciables).

La tasa de exposición puede calcularse a partir de la Ecuación 3.30, teniendo en cuenta que,
para este caso, la tasa de fluencia de energía puede calcularse con la Ecuación 3.14.
   
1 µen 1 EAε µen
Ẋ = Ψ̇ =
33,97J/C ρ 33,97J/C 4π d 2 ρ

1 cm
0,0295 2 /g 1000g
· 
⇒ Ẋ = · 5,55 × 1010 Bq · 1,061 × 10−13 J · 0,85 ·
33,97J/C 4π (2002
cm) 1kg

⇒ Ẋ = 8,65 × 10−9Ckg−1 s−1 = 3,35 × 10−5 Rs−1 = 0,12Rh−1


3.3 Magnitudes dosimétricas 27

3.3.2 Deposición de energía


Hasta el momento vimos el kerma y la exposición, dos magnitudes que describen los fenóme-
nos de transferencia de energía entre las partículas cuando el campo de radiación interactúa con la
materia. Otro conjunto de magnitudes, en cambio, fue definido con el objetivo de tratar de cuanti-
ficar la deposición total de energía en la materia, llevando finalmente a la definición de dosis. La
energía depositada es la magnitud en base a la cual se definieron las demás:

Definición 3.3.5 — Energía depositada. La energía depositada, εi , es la energía depositada


en una sola interacción i,

εi = εin − εout + Q (3.32)

donde εin es la energía de la radiación ionizante incidente (sin incluir la energía en reposo de
las partículas), εout es la suma de las energías de todas las partículas cargadas y no cargadas, en
ambos casos ionizantes, que quedan luego de la interacción (sin incluir nuevamente su energía
en resposo), Q es el cambio de las energías en reposo de todas las partículas que se involucran
en dicha interacción (incluyendo los núcleos). Cuando Q > 0 hay una disminución de la energía
en reposo, cuando Q < 0, hay un incremento de la energía en reposo.
Unidades: J

Para un conjunto de interacciones que pueden darse en un volumen determinado de materia,


se ha definido la energía impartida:

Definición 3.3.6 — Energía impartida. La energía impartida, ε , a un volumen determinado


de materia, es la suma de todas las energía depositadas en dicho volumen.

ε = ∑ εi (3.33)
i=1

Unidades: J

La energía impartida media, ε̄ , en un volumen determinado de materia, es la energía media


radiante, Rin , de todas las partículas cargadas y no cargadas ionizantes que ingresan al volumen,
menos la energía media radiante, Rout , de todas las partículas cargadas y no cargadas ionizantes
que salen del volumen, más la suma media, ∑ Q, de todos los cambios en la energía en reposo de
todas las partículas que intervienen (incluyendo los núcleos):

ε̄ = Rin − Rout + ∑ Q (3.34)

A partir de estas magnitudes, finalmente, se ha definido la dosis absorbida:

Definición 3.3.7 — Dosis absorbida. La dosis absorbida, D, es el cociente de d ε̄ por dm,


donde d ε̄ es la energía media impartida por la radiación ionizante a una masa dm de materia.

d ε̄
D= (3.35)
dm
Unidades: Jkg−1 = Gy

Y su dependencia temporal, o tasa de dosis absorbida:


28 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

Definición 3.3.8 — Tasa de dosis absorbida. La tasa de dosis absorbida, Ḋ, es el cociente
de dD por dt, donde dD es el incremento de la dosis absorbida en un intervalo de tiempo dt.

dD
Ḋ = (3.36)
dt
Unidades: Jkg−1 s−1 = Gys−1

Otra unidad utilizada para la dosis absorbida es el rad (radiation absorbed dose), definido
como 1rad = 100erg/g. Por lo que
1Gy = 100rads
Supongamos ahora que tenemos un volumen V de un material de densidad y composición
atómica homogénea, que se encuentra dentro de un campo uniforme de partículas ionizantes no
cargadas (o indirectamente ionizantes). Es posible concluir, a priori, que el número de partículas
cargadas secundarias emitidas en cada interacción en cada elemento de volumen y para cada inter-
valo de energía, será el mismo en todo V . Si además no existe un campo eléctrico o magnético no
uniformes que puedan provocar un movimiento inhomogéneo de estas partículas, entonces tam-
bién la distribución angular sería uniforme en todo V (las partículas cargadas no necesariamente
son emitidas isotrópicamente, pero al menos esta anisotropía es uniforme en todo el volumen).
Ahora bien, si tomamos un volumen más pequeño v, contenido en V , de modo que se encuentre
distanciado de sus límites al menos una distancia igual a la máxima penetración de las partículas
cargadas en ese medio, entonces es posible demostrar que, en el límite no estocástico, todas las
partículas que salen de v son reemplazadas por partículas de la misma energía que son emitidas en
otros lugares de V y que ingresan a v. Esta condición, muy importante en dosimetría, se denomina
equilibrio de partículas cargadas, o CPE.
Bajo estas condiciones, si recordamos las definiciones de kerma y de energía impartida, la
energía depositada en un volumen por las partículas cargadas secundarias no se considera al haber
CPE, de modo que, finalmente podemos concluir:
CPE
D = K
Y si además las pérdidas radiativas son despreciables:
CPE µen µen
D = K ≃ Kcol = ΦE =Ψ (3.37)
ρ ρ

Ejemplo 3.5 — Estimación de la dosis absorbida. Calcule la dosis absorbida en el punto P


del Ejemplo 3.4 si el tiempo de exposición es de 8 minutos. ¿Cuál será su valor si en lugar de
aire seco el punto P se halla en el cuerpo humano (µen /ρ = 0,0327cm2 /g)?

Solución:
DATOS:
A = 1,5Ci = 5,55 × 1010 Bq
E = 662keV = 1,061 × 10−13 J
ε = 0,85
d = 2m = 200cm
t = 8min = 480s
3.3 Magnitudes dosimétricas 29

Figura 3.4: Esquema simplificado de una condición de equilibro de partículas cargadas. Tres fotones interactúan con
el material y se emiten tres electrones de la misma energía y dirección. El primero se emite fuera de v, pero ingresa al
volumen y deposita su energía en él. El segundo se emite también fuera de v, pero atraviesa el volumen directamente.
El tercero, se emite en v pero sale del volumen y deposita su energía en otro lugar.

(µen /ρ )air = 0,0295cm2 /g


(µen /ρ )te jido = 0,0327cm2 /g

SUPOSICIONES:
Sólo se considerarán los fotones de la energía y emisividad mencionadas.
Se desprecia el decaimiento radiactivo de la fuente.
Se supone que hay CPE.
Se supone despreciable el bremsstrahlung (pérdidas radiativas despreciables).

Al considerar que la actividad de la fuente se mantiene constante, entonces el valor de la


tasa de fluencia de energía se mantiene constante en el tiempo, por lo que la dosis absorbida
puede hallarse con la Ecuación 3.37 asumiendo que Ψ = Ψ̇t

       
µen µen µen EAε t µen
D=Ψ = Ψ̇t = Φ̇Et =
ρ air ρ air ρ air 4π d 2 ρ air

1,061 × 10−13 J · 5,55 × 1010


 · 0,85 · 480s
Bq 1000g
⇒D= cm
· 0,0295 2
/g ·
4π (200 
cm)2 kg

⇒ D = 1,41 × 10−4 Gy = 0,141mGy


30 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

Si en lugar de aire seco el punto P se encuentra dentro del cuerpo humano, el valor de la
dosis absorbida puede calcularse utilizando la Ecuación 3.28 ya que, con los supuestos hechos,
vale también para D. Entonces:

(µen /ρ )te jido 0,0327cm2 /g


Dte jido = Dair = 0,14mGy · ≃ 1,1 · 0,141mGy = 0,155mGy
(µen /ρ )air 0,0295cm2 /g


El factor de conversión de 1,1 que aparece en el Ejemplo 3.5 para convertir cualquier magnitud
dosimétrica (si se cumplen los supuestos correctos) entre tejido y aire, es ampliamente utilizado
puesto que es aproximadamente el mismo para cualquier energía de fotones en el intervalo de
energías de interés práctico. Por lo que es común aproximar los cálculos de dosis en un punto
perteneciente a un tejido por:
Dte jido ≃ 1,1 · Dair (3.38)

Ejemplo 3.6 — Estimación de la tasa de dosis absorbida. Calcule la tasa de dosis en un


punto dentro de un tejido, si la tasa de exposición en dicho punto es de 0,75mR/h.

Solución:
DATOS:
Ẋ = 0,75mR/h

SUPOSICIONES:
Se supone que hay CPE.
Se supone despreciable el bremsstrahlung (pérdidas radiativas despreciables).

Como la tasa de exposición está definida en aire seco, primero calcularemos la tasa de dosis
absorbida en ese medio. Debido a las suposiciones que hemos hecho, podemos combinar las
Ecuaciones 3.31 y 3.37 para concluir que:
 
W 2,58 × 10−4C
/kg
(Ḋ)air = Ẋ = 33,97J/C· · 0,75 × 10−3 R/h
e 1R

(Ḋ)air = 8,76 × 10−3 Gy/R · 0,75 × 10−3 R/h = 6,57 × 10−3 Gy/h

Utilizando la aproximación de la Ecuación 3.38:

(Ḋ)te jido = 1,1(Ḋ)air = 1,1 · 6,57 × 10−6 Gy/h = 7,23 × 10−6 Gy/h = 7,23µ Gy/h

Es conveniente recordar el factor de conversión de 8,76×10−3 Gy/R que aparece en el Ejemplo


3.6, para convertir entre exposición y dosis absorbida en aire seco, de modo que se puede concluir
finalmente (si se dan los supuestos correctos):
Gy
Dte jido = 1,1 · Dair = 1,1 · 8,76 × 10−3 ·X (3.39)
R
3.4 Magnitudes de protección 31

N OMBRE S ÍMBOLO U NIDAD D EFINICIÓN


Kerma K Gy dEtr /dm
Tasa de kerma K̇ Gys−1 dK/dt
Exposición X Ckg−1 dQ/dm
Tasa de exposición Ẋ Ckg−1 s−1 dX/dt
Energía depositada εi J εin − εout + Q
Energía impartida ε J ∑ εi
Energía impartida media ε̄ J Rin − Rout + ∑ Q
Dosis absorbida D Gy d ε̄ /dm
Tasa de dosis absorbida Ḋ Gys−1 dD/dt

Tabla 3.3: Magnitudes dosimétricas

3.4 Magnitudes de protección


Hasta el momento las magnitudes dosimétricas que hemos definido presentan limitaciones
cuando queremos aplicarlas a la protección de las personas. Esto se debe, en primer lugar, a que
son magnitudes puntuales mientras que queremos proteger tejidos y órganos del cuerpo humano,
con masa y volúmenes definidos. Además, en relación con esto, en la realidad la dosis en cada
punto de ese tejido u órgano se ve afectada por las interacciones del campo con lo demás puntos
de esa masa o volumen. En otras palabras, la dosis total en cualquier punto de un tejido u órgano
depende de su ubicación dentro del mismo y de la orientación relativa al campo de radiación, lo
que se conoce como geometría de irradiación. En segundo lugar, la cantidad de energía impartida
a la materia no nos indica de forma directa el efecto sobre el tejido u órgano. En la realidad, se
observa que el nivel de detrimento del tejido debido al campo de radiación depende, por un lado,
del tipo de partículas ionizantes y, por otro lado, del tipo de tejido irradiado.
Debido a este incremento del nivel de complejidad, es necesario alejarse un poco de la ri-
gurosidad físico-matemática del análisis, para dar lugar a aproximaciones basadas en resultados
empíricos. El primer paso será definir los valores medios que se usarán para simplificar la distri-
bución espacial de la dosis en un tejido:

Definición 3.4.1 — Dosis absorbida media en un tejido. La dosis absorbida media en un


tejido, DT , se define como
Z
1
DT = Ddm
mT mT

donde mT es la masa del tejido u órgano T y D es la dosis absorbida en un elemento de masa


dm.
Unidades= Jkg−1 = Gy

Hasta el momento hemos visto que la dosis absorbida describe, básicamente, el fenómeno
físico de absorción de energía, pero no puede ser transferida directamente a los efectos biológicos
que pueden producirse ante la exposición a un campo de radiación ionizante.
32 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

En la realidad se observa que, en primer lugar, para la misma energía pero diferente tipo de
radiación, los efectos biológicos esperables no son iguales. En otras palabras, por ejemplo, el
detrimento provocado por fotones de 500keV no es el mismo que el provocado por electrones de
500keV y, a su vez, tampoco es el mismo que el provocado por partículas α de 500keV . En este
último caso, de hecho, como cabría esperar por la cantidad de cargas y la masa de la partícula, la
cantidad de ionizaciones que provocan por unidad de camino recorrida es más grande que en el
caso de partículas más livianas. Consecuentemente, como se verá más adelante, los mecanismos
de reparación celular pueden no ser suficientes ante esta densidad lineal de ionizaciones.
Una de las formas de cuantificar esta diferencia entre los efectos provocados por diferentes tipo
de radiación, es comparar las dosis absorbida necesaria de cada una para producir el mismo efecto
biológico. Uno podría tratar de referenciar los diferentes efectos biológicos esperados a un tipo
de radiación de referencia, del cual se tenga más información práctica. Por ejemplo, la eficiencia
biológica relativa, RBE, es la relación que existe entre la dosis absorbida de un tipo de radiación
de interés y la dosis absorbida debida a rayos X, para producir el mismo efecto biológico:

RBE = Dγ /D

De modo que, en principio, se podría relacionar las dosis absorbidas debido a difererntes tipos
de radiación como una dosis equivalente a la debida a una irradiación de rayos X que produzca el
mismo efecto. Sin embargo, la RBE depende del tipo de radiación, de su energía, de su distribución
temporal, entre otros factores, por lo que no es un factor de conversión muy práctico. Además, en
protección radiológica, no siempre se conoce el efecto biológico al cual referenciar la dosis absor-
bida. En lugar de usar esa relación directamente se ha optado por un factor más general llamado
factor de calidad de la radiación, Q, formulado para ponderar la dosis absorbida de diferentes tipos
de radiación a niveles de exposición que pueden ser encontrados rutinariamente en la práctica. El
factor Q se ha definido funcionalmente a partir de la L∞ en agua:


 1 L ≤ 10
Q(L) = 0,32L − 2,2 10 < L ≤ 100
 300/√L

L ≥ 100

donde L está expresado en keV /µ m.


Entonces, se podría considerar una dosis equivalente definida como:

H = QfD (3.40)

En la ecuación anterior, f es un factor de corrección que tiene en cuenta algunas consideracio-


nes especiales referidas a cómo se suministra la dosis absorbida. Por ejemplo, para la misma dosis
absorbida total, los efectos biológicos pueden variar según la tasa de dosis o la intermintencia de
la exposición. El producto q = Q f se lo conoce como factor de ponderación para la radiación.
Está claro que estos factores de ponderación, o wR como se los conoce actualmente, depen-
derán del campo de radiación que se elija como referencia. Si bien el ICRP no ha establecido
ninguno con este propósito, se ha seleccionado un conjunto de valores determinados a partir de
un amplio espectro de datos experimentales de RBE, obtenidos a partir de diversos campos de
radiación, desde rayos X de más de 200kV hasta los rayos gamma de 60 Co o 137 Cs. Los valores se
presentan en la Tabla 3.4, según el tipo de partículas.
Volviendo a la idea original, estamos tratando de cuantificar el detrimento esperable de una
dosis absorbida debida a la exposición a un campo de radiación ionizante, comparándola con
3.4 Magnitudes de protección 33

T IPO DE RADIACIÓN FACTOR DE PONDERACIÓN wR


Fotones 1
Electrones y muones 1
Protones y piones cargados 2
Partículas α , fragmentos de fisión, iones pesados 20
Neutrones Curva continua de la Figura 3.5

Tabla 3.4: Factores de ponderación para la radiación. De ICRP (2007).

Figura 3.5: Factores de ponderación wR para neutrones según su energía. De ICRP (2007).

la dosis absorbida debido a un campo de radiación de referencia que produzca el mismo efecto.
Como se observa en la Tabla 3.4, los campos de radiación que podrían utilizarse como referencia
son los fotones y los electrones, de cualquier energía, ya que en ambos casos wR = 1. La partículas
α , por su parte, tienen un wR = 20 lo que implicaría que se necesita una dosis absorbida de fotones
o electrones veinte veces superior para tener el mismo efecto biológico. Supongamos que en un
tejido la dosis absorbida de partículas α es de 0,1Gy, lo que equivaldría entonces a una dosis
absorbida de 2Gy de fotones o electrones. Sin embargo, al intentar utilizar esta referencia aparece
el problema conceptual de que la dosis absorbida, entendida como energía impartida en la masa, es
de 0,1Gy o 0,1J/kg y no de 2Gy o 2J/kg. La dosis equivalente, entonces, no nos estaría indicando
cuánta energía realmente se impartió, sino la que sería necesaria impartir del campo de radiación
de referencia para tener el mismo detrimento. Para evitar confusiones fue necesario introducir una
nueva unidad: el Sievert, Sv, también equivalente a 1J/kg, llevando finalmente a la definición de
dosis equivalente en un tejido:
34 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

Definición 3.4.2 — Dosis equivalente en un tejido. La dosis equivalente en un tejido, HT ,


se define como

HT = ∑ wR DT,R (3.41)
R

donde DT,R es la dosis absorbida media en el tejido T debido a la radiación ionizante R, y wR


es el correspondiente factor de ponderación para el tipo de radiación.
Unidades= Jkg−1 = Sv

Otra unidad utilizada para la dosis equivalente es el rem (de Roentgen equivalent man), origi-
nalmente definida como la dosis absorbida debido a una radiación de interés que produce el mismo
efecto biológico (relevante) que la exposición a 1R de rayos X de alto voltaje. Actualmente, se ha
redefinido de modo que:

1rem = 0,01Sv

! Si bien en la práctica no se considera, estrictamente el wR tiene unidades de [Sv/Gy]. Aunque


tanto el Gy como el Sv equivalen a J/kg conceptualmente, como hemos visto, no son lo
mismo.

Ejemplo 3.7 — Dosis equivalente en tejido. Suponga que la dosis equivalente debida a neu-
trones de 1MeV en un hígado (∼ 1, 5kg) es de 500µ Sv. Calcule la dosis absorbida media y la
energía total impartida al órgano. Cuál es el valor de estas magnitudes si el campo de radiación
fuera de fotones de 511keV ?

Solución:
DATOS:
m = 1,5kg
H = 500µ Sv

SUPOSICIONES:
Se supone que el órgano es irradiado uniformemente.

De la Figura 3.5, para esa energía el wR es de aproximadamente 20 por lo que según la


Ecuación 3.41:

HT = wR DT,R ⇒ 500 × 10−6 Sv = 20 · DT,R ⇒ DT,R = 2,5 × 10−5 Gy

La energía total impartida al tejido, de acuerdo a la definición de la dosis absorbida, puede


estimarse como:

εT = mDT,R = 0,15kg · 2,5 × 10−5 Gy = 3,75 × 10−6 J

Si realizamos los mismos cálculos para fotones de 511keV , como el wR = 1 para todas las
3.4 Magnitudes de protección 35

energías:

⇒ DT,R = HT /wR = 5 × 10−4 Gy

⇒ εT = mDT,R = 0,15kg · 5 × 10−4 Gy = 7,5 × 10−5 J




Del ejemplo anterior podemos sacar algunas conclusiones interesantes. Primero, para tener el
mismo efecto biológico, vemos que es necesario impartir menos energía en el caso de neutrones
que de fotones. Lo mismo sucedería si comparamos partículas α con electrones, por ejemplo,
puesto que la diferencia está, en definitiva, en sus wR . Esto se debe a que el efecto biológico
depende, no solamente de la energía total impartida, si no también de la forma en la que ésta se
imparte.
Además, como veremos más adelante, se necesitan cantidades físicamente triviales de energía
para producir efectos biológicos en el cuerpo humano. Por ejemplo, una dosis absorbida de 4Gy
en todo el cuerpo (que corresponde a 4J/kg) puede llevar a la muerte de un individuo, aunque esa
energía impartida sólo represente un aumento de la temperatura corporal de apenas 0,001◦C.
Ahora bien, recordemos que la idea detrás de la definición de magnitudes de protección es
justamente proteger a las personas de los efectos nocivos de las radiaciones ionizantes. Para lo cual
estas magnitudes brindan un marco a partir del cual se puedan establecer límites de dosis (también
restricciones o valores de referencia) que nos permitan decir cuándo una determinada exposición
puede ser considerada segura. Si bien desde luego esto es en términos relativos, los límites (que
incluso pueden ser sujetos a procesos de optimización ulteriores), a fin de cuentas, permiten evitar
la aparición de ciertos efectos conocidos como determinísticos (o reacciones tisulares) y reducir
la probabilidad de aparición de efectos conocidos como estocásticos (un cáncer, por ejemplo).
Si bien los procesos biológicos los analizaremos más adelante con más detalle, en líneas gene-
rales, los efectos dependerán del daño que las ionizaciones inducidas por la radiación produzcan,
directa o indirectamente, a nivel celular. Por un lado, tal como lo hemos visto, esto depende de la
cantidad de energía impartida y la forma en la que se imparte, tanto temporal como espacialmen-
te. Sin embargo, en la práctica, se ve que no todos los tejidos y órganos responden de la misma
manera. Dejando de lado la variabilidad propia a nivel de individuo, se observa que los tejidos y
órganos que componen al cuerpo humano presentan diferente radiosensibilidad, y esto tiene que
ver con varios aspectos. Por ejemplo, las células que poseen una mayor tasa de división celular
(mitosis), alto metabolismo y poca diferenciación, como las células del compartimento prolifera-
tivo de la médula ósea (o stem cells progenitoras) son muy sensibles a la radiación. De existir
alguna mutación radioinducida, por ejemplo, que estas células no puedan reparar con los mecanis-
mos de reparación celular, estas características hacen que aumente la probabilidad de que dicha
mutación se propague en las generaciones siguientes de células derivadas de la célula madre y,
consecuentemente, aumente la probabilidad de un cáncer radioinducido.
Si bien la dosis equivalente H es un buen estimador del riesgo, especialmente en lo que refiere
a efectos determinísticos para algunos órganos o tejidos puntuales, como la piel o el cristalino del
ojo, no es adecuada para los demás órganos o para tener un valor numérico que cuantifique el
riesgo total, en términos de un aumento de la probabilidad de los efectos estocásticos, como un
cáncer radioinducido o un efecto hereditario. Por esta razón fue necesario pensar en una pondera-
ción adicional, que tenga en cuenta la radiosensibilidad de un tejido o un órgano respecto al cuerpo
36 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

entero. De esta manera, por ejemplo, respecto al riesgo de desarrollar un cáncer radioinducido, no
es lo mismo una dosis equivalente de 0,1Sv en la médula ósea, en el esófago, en la tiroides o en
las gónadas.
Así fue introducido el concepto de dosis efectiva, que implica ponderar los tejidos y órganos
individuales de interés por los detrimentos relativos, asumiendo que la suma ponderada de las do-
sis equivalentes debería ser proporcional al detrimento total estimado a partir de una exposición,
cualquiera sea la distribución de la dosis equivalente en el cuerpo. En este contexto, se entiende por
detrimento de la radiación al daño que provoca, en términos de la letalidad de las enfermedades
inducidas y la pérdida de esperanza de vida, además de cualquier efecto adverso en la calidad de
vida devenido del tratamiento, como dolor o sufrimiento. Para calcular el detrimento de la radia-
ción fue necesario estimar los coeficientes nominales de riesgo, derivados, a su vez, del promedio
de las estimaciones de riesgo durante toda la vida en poblaciones representativas, por género y
edad al momento de exponerse.
La modelización del riesgo fue realizada, principalmente, con los datos del estudio japonés de
los supervivientes de bombas atómicas (LSS, Japanese Life Span Study), a quienes se les ha hecho
un seguimiento para tumores sólidos desde 1958 hasta 1998. No obstante, los resultados también
fueron comparados con otros datos epidemiológicos de la radiación obtenidos en casos de expo-
sición de cohortes más reducidas (como pacientes expuestos a radiaciones con fines diagnósticos
o terapéuticos, trabajadores expuestos en el curso de su trabajo, o personas que han sufrido expo-
siciones ambientales, tales como lluvia radiactiva o radiación natural). Si bien los cálculos fueron
realizados para poblaciones asiáticas y euro-americanas, se trató de elegir un modelo que sea ade-
cuado para la estimación de riesgo en otras poblaciones. En general, debido a que es complicado
detectar pequeños riesgos en estudios epidemiológicos, las estimaciones están determinadas, en
gran parte, por los datos de personas expuestas a dosis agudas de 200mSv o mayores.
Se han utilizado modelos de exceso de riesgo relativo (ERR) y de exceso de riesgo absoluto
(EAR), que proveen descripciones comparables del riesgo asociado dentro de una determinada
población expuesta. Ambos modelos fueron desarrollados para esófago, estómago, colon, hígado,
pulmón, mama, ovario, testículos, vejiga, tiroides y médula ósea. Como los datos para otros tejidos
y órganos no son suficientes para juzgar individualmente la magnitud de sus riesgos asociados,
todos se incluyen en una categoría denominada resto.
En líneas generales, los parámetros que se han considerado fueron:
Coeficientes nominales de riesgo (R): casos por cada 10.000 personas, por Sv.
Fraccion de letalidad (q): derivados de los datos de supervivencia al cáncer.
Riesgo nominal ajustado por letalidad y calidad de vida (Rn ): ajustado por la morbilidad
y sufrimiento asociados al cáncer. Definido como Rn = Rq + R(1 − q)[(1 − qmin )q + qmin ],
donde qmin es el mínimo peso para cánceres no fatales.
Pérdida relativa de años de vida (L): determinados a partir de la media de las edades en el
momento de la exposición y las edades subsecuentemente alcanzadas durante el resto de la
vida, dividiendo por el promedio de años de vida perdidos por todos los cánceres.
Detrimento (D): determinado a partir del riesgo nominal ajustado por letalidad, calidad de
vida y pérdida de esperanza de vida, D = Rn L.
Como los detrimentos relativos que se muestran en la Tabla 3.9 son imprecisos debido a las in-
certidumbres asociadas a su cálculo, se decidió agrupar lo tejidos en cuatro categorías que reflejan
en general los detrimentos relativos, asignándoles un valor conservativo de ponderación, o factor
de ponderación de tejido, wT :
3.4 Magnitudes de protección 37

T EJIDO R q Rn L D D ETRIMENTO RELATIVO


Esófago 15 0,930 15,1 0,87 13,1 0,023
Estómago 79 0,830 77,0 0,88 67,7 0,118
Colon 65 0,480 49,4 0,97 47,9 0,083
Hígado 30 0,950 30,2 0,88 26,6 0,046
Pulmón 114 0,890 112,9 0,80 90,3 0,157
Hueso 7 0,450 5,1 1,00 5,1 0,009
Piel 1000 0,002 4,0 1,00 4,0 0,007
Mama 112 0,290 61,9 1,29 79,8 0,139
Ovario 11 0,570 8,8 1,12 9,9 0,017
Vejiga 43 0,290 23,5 0,71 16,7 0,029
Tiroides 33 0,070 9,8 1,29 12,7 0,022
Médula ósea 42 0,670 37,7 1,63 61,5 0,107
Resto 144 0,490 110,2 1,03 113,5 0,198
Gónadas (heredable) 20 0,800 19,3 1,32 25,4 0,044
TOTAL 1715 565,0 574,0 1,000

Tabla 3.5: Riesgos nominales y detrimento promediado por género, para toda la población. De ICRP (2007).

T EJIDO wT ∑ wT
Médula ósea, colon, pulmón, estómago, mama, resto de tejidos1 0,12 0,72
Gónadas 0,08 0,08
Vejiga, esófago, hígado, tiroides 0,04 0,16
Superfice de hueso, cerebro, glándulas salivares, piel 0,01 0,04
TOTAL 1,00
1 Resto de los tejidos: adrenales, región extratorácica, vesícula biliar, corazón, riñones, nódulos

linfáticos, músculo, mucosa oral, páncreas, próstata, intestino delgado, bazo, timo, útero. De
ICRP (2007).

Tabla 3.6: Factores de ponderación para los tejidos

Utilizando estos factores de ponderación es posible definir finalmente la dosis efectiva:

Definición 3.4.3 — Dosis efectiva. La dosis efectiva, E, se define como

E = ∑ wT HT (3.42)
T

donde HT es la dosis equivalente en un tejido u órgano T , y wT es el correspondiente factor de


ponderación según la radiosensibilidad del tejido.
Unidades= Jkg−1 = Sv

La dosis efectiva es la magnitud central en protección radiológica y es ampliamente aplica-


da en las legislaciones y regulaciones de muchos países en el mundo. Esta magnitud provee una
estimación razonablemente buena del riesgo asociado a la exposición a radiaciones ionizantes, per-
mitiendo comparar el riesgo debido a exposiciones de diferentes tipos de radiación en diferentes
38 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

órganos o tejidos. Como veremos luego, también permite comparar dosis debido a irradiaciones
que se deban a fuentes externas del cuerpo con las irradiaciones debido a fuentes que hayan sido
incorporadas al organismo, lo que se conoce como contaminación interna. La dosis efectiva es con-
siderada una aproximación práctica para la gestión y limitación de los riesgos de las radiaciones,
tanto en exposiciones ocupaciones como en exposiciones del público en general.
Si reemplazamos la Ecuación 3.41 en la Ecuación 3.42 tenemos una expresión más general
para la dosis efectiva:

E = ∑ wT ∑ wR DT,R (3.43)
T R

! Al igual que como sucedía con el wR , en la práctica el wT no tiene unidades. Estrictamente


tiene unidades de [Sv/Sv], aunque en el fondo no son lo mismo. En el numerador son los
J/kg que es necesario impartir en todo el cuerpo y en el denominador son los J/kg que es
necesario impartir en el órgano o tejido de interés, para tener el mismo nivel de riesgo de
desarrollar un efecto biológico (como cáncer radioinducido o un efecto hereditario).

Ejemplo 3.8 — Dosis efectiva. Calcule la dosis efectiva total de una persona que recibió las
siguientes dosis absorbidas en tejido:
1. 10µ Gy debido a partículas α de 1MeV en el estómago.
2. 5mGy debido a electrones de 100keV en piel.
3. 150µ Gy debido a fotones de 511keV en tiroides.
4. 3mGy debido a fotones de rayos X de 200kV en todo el cuerpo.

Solución:
Utilizando los factores de ponderación para las radiaciones (Tabla 3.4) y para los tejidos
(Tabla 3.6), y las definiciones de dosis equivalente y efectiva:

Dosis absorbida wR Dosis equivalente wT Dosis efectiva


D[Gy] H[Sv] E[Sv]
1 10 × 10−6 20 2 × 10−4 0,12 2,4 × 10−5
2 5 × 10−3 1 5 × 10−3 0,01 5 × 10−5
3 150 × 10−6 1 150 × 10−6 0,04 6 × 10−6
4 3 × 10−3 1 3 × 10−3 1 3 × 10−3
Entonces, la dosis efectiva total será de:

ET = 2,4 × 105 Sv + 5 × 10−5 Sv + 6 × 10−6 Sv + 3 × 10−3 Sv = 3,08 × 10−3 Sv = 3,08mSv

! Tal como se vio en el Ejemplo 3.8, cuando una exposición es de cuerpo entero, al involucrar
a todos los órganos a la vez y de acuerdo a la definición de dosis efectiva, el wT = 1
3.5 Magnitudes operacionales 39

N OMBRE S ÍMBOLO U NIDAD D EFINICIÓN


R
Dosis absorbida media en un tejido DT Gy 1/mT mT Ddm
Dosis equivalente en un tejido HT Sv ∑R wR DT,R
Tasa de dosis equivalente Ḣ Svs−1 dH/dt
Dosis efectiva E Sv ∑T wT HT
Tasa de dosis efectiva Ė Svs−1 dE/dt

Tabla 3.7: Magnitudes de protección.

3.5 Magnitudes operacionales


Como hemos visto, las magnitudes de protección nos brindan las herramientas a partir de la
cuales podemos establecer valores límites que nos permitan, finalmente, mantener un nivel de
riesgo relativamente aceptable al reducir, por un lado, la probabilidad de ocurrencia de efectos
estocásticos y, por otro lado, evitar la aparición de efectos determinísticos. Sin embargo, debido a
que están definidas dentro de un tejido u órgano, surge la complejidad práctica de poder medirlas.
Desde luego esto no es posible porque no podemos introducir un detector dentro del cuerpo, y
aun cuando fuera posible, igualmente sería una estimación a menos que podamos medir en todo el
volumen del órgano. Esto último, de hecho, no es un detalle menor, porque cada punto del tejido u
órgano será afectado por los demás puntos de todo el cuerpo, y no es lo mismo, consecuentemente,
si la geometría de irradiación es diferente. En otras palabras, por ejemplo, la dosis equivalente en
el corazón se ve afectada (“blindada”) por la presencia de los demás órganos de la caja torácica y
además será diferente dependiendo de si la exposición se produce de frente o por la espalda.
Una de las opciones para resolver esta cuestión podría ser estimar la dosis que provoca un cam-
po de radiación que podamos caracterizar de alguna forma (por ejemplo, a través de la medición
de la fluencia de partículas o el cálculo del kerma en aire) en un maniquí o fantoma antropomórfi-
co, mediante detectores razonablemente ubicados en su interior. Esto da origen a un conjunto de
factores de conversión entre magnitudes de protección y magnitudes de campo o dosimétricas, que
suelen usarse en la práctica como una mejor primera aproximación. Algunos factores de conver-
sión se presentan en las Tablas 3.7 y 3.8, recopilados de ICRP (2010) Publication 116 - Conversion
Coefficients for Radiological Protection Quantities for External Radiation Exposures.
Para poder usar estos factores de conversión necesitamos conocer el valor de la magnitud de la
cual partimos (fluencia, Kerma, por ejemplo) en el punto de interés, y la geometría de irradiación.
Típicamente estas geometrías son (Figura 3.6):
Anteroposterior (AP): la radiación incide desde el frente del cuerpo, en dirección ortogonal
al eje longitudinal.
Posteroanterior (PA): la radiación incide por la espalda, en dirección ortogonal al eje longi-
tudinal.
Lateral izquierdo (LLAT): la radiación incide desde la izquierda, en dirección ortogonal al
eje longitudinal.
Lateral derecho (RLAT): la radiación incide desde la derecha, en dirección ortogonal al eje
longitudinal.
Rotacional (ROT): la radiación proviene desde todas las direcciones ortogonales al eje lon-
gitudinal.
Isotrópico (ISO): la radiación desde todas las direcciones posibles, el campo de radiación
40 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

es tal que la fluencia de partículas por ángulo sólido es independiende de la dirección y ubi-
cación en el espacio.

Si bien son geometrías idealizadas, suelen aproximarse a condiciones prácticas generales. Por
ejemplo, las geometrías AP, PA, LLAT y RLAT suelen aproximar a la condición de una fuente
puntual ubicada lejos de un persona, en tanto que la geometría ROT aproxima mejor a la condición
de una persona que se mueve azarosamente en un campo de radiación. La geometría ISO, por su
parte, aproxima mejor a la condición de una persona inmersa en una nube radiactiva o dentro de
un lugar con un importante scattering de partículas.

Figura 3.6: Representación esquemática de las geomentrías idealizadas: AP, anteroposterior; PA, posteroan-
terior; LLAT, lateral izquierdo; RLAT, lateral derecho; ROT, rotacional; ISO, isotrópico. De ICRP (2010).

Estos factores de conversión presentan varias limitaciones a la hora de aplicarlos en la práctica.


Por un lado, no siempre es fácil conocer la dependencia espacial de las magnitudes que podemos
medir en un campo, por lo que sólo en circunstancias especiales esta aproximación es adecuada.
Además, los cálculos se complican cuando, tal como sucede en la realidad, la persona se mueve
dentro de ese campo y las condiciones de exposición no se aproximan bien con alguna de las
geometrías de irradiación idealizadas. Por ejemplo, un trabajador que se mueve dentro de una cen-
tral nuclear se encuentra constantemente con valores muy diferentes de fluencia de partículas, que
varían tanto en el tiempo como en el espacio. Por si fuera poco, salvo en situaciones idealizadas,
en la realidad tampoco se encontrará con una fluencia de partículas monoenergéticas y de un solo
tipo.
Para resolver esta complejidad práctica (u operativa) se definieron una serie de magnitudes
operacionales que pudieran ser correlacionadas con mediciones efectuadas con detectores y do-
símetros de aplición práctica. Estas magnitudes fueron definidas con el propósito de estimar, por
lo general con un enfoque conservativo, las magnitudes de protección de exposiciones reales o
potenciales, en la mayoría de las condiciones prácticas y en el contexto de irradiación externa.
Aquí es conveniente hacer una distinción según el objetivo final de nuestra medición de do-
sis por irradiación externa. Cuando nos interesa estimar la dosis (efectiva o equivalente) que una
persona recibió debido a una exposición, nos referiremos a monitoreo personal; mientras que si
nos interesa estimar la dosis que una persona recibiría debido a una exposición potencial, estamos
hablando de monitoreo de área. En el contexto de la vigilancia ocupacional, es decir, las estima-
ciones de dosis en el ámbito laboral donde los trabajadores son ocupacionalmente expuestos, el
3.5 Magnitudes operacionales 41

monitoreo personal se realiza mediante dosímetros ubicados en diferentes partes del cuerpo, mien-
tras que el monitoreo de área se realiza mediante detectores debidamente calibrados y adecuados
para el tipo de partículas, rango de energía y de tasas de dosis esperables en ese lugar.
A fines prácticos, además, se suele clasificar la irradiación externa en dos grupos, en términos
de si contribuye más a la dosis efectiva o la dosis equivalente en piel:
Penetrante: contribuye más a la dosis efectiva total que a la dosis equivalente en piel, por
ejemplo neutrones, fotones de energías superiores a 12keV , partículas beta de más de 2MeV .
Poco penetrante: contribuye más a la dosis equivalente en piel que a la dosis efectiva total,
por ejemplo partículas alfa, partículas beta de menos de 2MeV , fotones de menos de 12keV .

3.5.1 Monitoreo de área


Para todos los tipos de radiación externa, las magnitudes operacionales definidas para el moni-
toreo de área se basan en la dosis equivalente dentro de un fantoma especial: la esfera ICRU. Este
fantoma teóricamente consiste en una esfera de 30cm de diámetro, con una densidad de 1g/cm3 y
una composición relativa de 76,2 % de oxígeno, 11,1 % de carbono, 10,1 % de hidrógeno y 2,6 %
de nitrógeno.
Para hacer una correcta estimación de la dosis en cualquier punto de esa esfera es necesario
considerar la contribución de la dispersión y la atenuación de los demás puntos. Por eso, en las
definiciones, aparece el concepto de campo expandido, es decir, aquel cuya distribución angular y
energética de la fluencia de partículas es la misma para todo el volumen de interés. Esto garantiza
que todos los puntos de la esfera están expuesta a un campo homogéno de radiación ionizante.
Cuando, además, todas las componentes del campo tienen la misma dirección, estamos hablando
de un campo alineado, idealización que se aplica para independizar la dosis de la distribución
angular de la fluencia del campo real (Figura 3.7).

Figura 3.7: Representación esquemática del campo real, expandido y alineado. El circulo punteado repre-
senta el volumen de interés.

A partir de estos conceptos se han definido dos magnitudes operacionales para el monitoreo
de área: la equivalente de dosis ambiental y la equivalente de dosis direccional.
42 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

Definición 3.5.1 — Equivalente de dosis ambiental. La equivalente de dosis ambiental,


H ∗ (d), en un punto dentro de un campo de radiación ionizante, es la dosis equivalente que
sería producida por el correspondiente campo expandido y alineado, en la esfera ICRU a una
profundidad d, sobre el radio opuesto de la esfera.

Unidades: Sv

Por convención, la distancia d se expresa en mm. De modo que H ∗ (10) es la dosis equivalente
a 10mm dentro de la esfera ICRU, sobre el radio opuesto a un campo expandido y alineado, que
corresponda al campo real. Esta magnitud, H ∗ (10), se utiliza como estimador de la dosis efectiva.

! Es conveniente denominar a esta (y las demás magnitudes operacionales) como equivalente


de dosis y no como dosis equivalente, en coherencia con su nombre original en inglés, dose
equivalent y equivalent dose, respectivamente. Esto es útil para evitar confusiones puesto
que, si bien están definidas en términos de una dosis equivalente, muchas veces estiman una
dosis efectiva.

Definición 3.5.2 — Equivalente de dosis direccional. La equivalente de dosis direccional,


H ′ (d, Ω), en un punto dentro de un campo de radiación ionizante, es la dosis equivalente que
sería producida por el correspondiente campo expandido, en la esfera ICRU a una profundidad
d, sobre el radio de la esfera en una dirección específica Ω.

Unidades: Sv

Al igual que sucedía antes, para simplificar la notación, d se expresa en mm. Para el caso
particular de una campo unidireccional, la dirección Ω suele expresarse en términos del ángulo α
que forma la dirección del campo y el radio sobre el que se ubica el punto de interés en la esfera
ICRU. La H ′ (0,07, Ω) se utiliza como estimador de la dosis equivalente en piel o extremidades,
3.5 Magnitudes operacionales 43

mientras que la H ′ (3, Ω) se utiliza como estimador de la dosis equivalente en cristalino.


Los detectores que se utilizan para el monitoreo de área se calibran en términos de estas magni-
tudes operacionales. Llevados al lugar de trabajo o bien instalados en él, estos detectores proveen
de una estimación razonablemente buena de la dosis efectiva o la dosis equivalente que un trabaja-
dor podría recibir estando en ese lugar.

3.5.2 Monitoreo personal


Como mencionamos, el monitoreo personal busca estimar la dosis por irradiación externa que
un trabajador recibió debido a una exposición real. Para ello se utilizan dosímetros que, ubicados
en diferentes lugares del cuerpo, proveen de una estimación razonablemente buena de la dosis
efectiva o la dosis equivalente. Estos dosímetros se calibran utilizando fantomas específicos (Figu-
ra 3.8) según el lugar del cuerpo en el que se utilizarán, según IAEA (2000) Safety Reports Series
16 - Calibration of Radiation Protection Monitoring Instruments:
Bloque de 30cm × 30cm × 15cm, que representa el torso humano (para los dosímetros de
todo el cuerpo).
Cilindro de 7,3cm de diámetro y 30cm de largo, que representa un brazo humano (para los
dosímetros de pulsera).
Cilindro de 1,9cm de diámetro y 30cm de largo, que representa una falange (para los dosí-
metros de anillo).

Figura 3.8: Fantomas para calibración de dosímetros personales. Se ejemplifica la ubicación posible de
cuatro dosímetros en cada uno. De IAEA (2000).

Estos dosímetros se calibran en función de la equivalente de dosis personal, definida co-


mo:
Definición 3.5.3 — Equivalente de dosis personal. La equivalente de dosis personal, H p(d),
es la dosis equivalente en tejido blando, a un profundidad apropiada d por debajo de un deter-
minado punto del cuerpo.
Unidades: Sv

Al igual que sucedía con el monitoreo de área, esta magnitud es un buen estimador de la dosis
efectiva, cuando d = 10mm, y de la dosis equivalente en piel (o extremidades) y cristalino, cuando
44 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

d = 0,07mm y d = 3mm, respectivamente.

3.5.3 Calibración
Como hemos visto, tanto para el monitoreo de área como el monitoreo personal, se utilizan
detectores o dosímetros que deben estar calibrados en términos de las magnitudes operacionales
que acabamos de definir. Al igual que para las magnitudes de protección, las magnitudes opera-
cionales pueden relacionarse con magnitudes radiométricas o dosimétricas (como la fluencia Φ
o el kerma en aire Kair ) a través de factores de conversión. Entonces, si se utiliza un campo de
radiación de referencia (caracterizado en términos de estas magnitudes físicas) es posible calibrar
un detector o un dosímetro debidamente ubicado en el espacio o sobre un fantoma adecuado, uti-
lizando estos factores de conversión. Dichos factores se resumen en el ICRU (1998) Report 57 -
Conversion Coefficients for use in Radiological Protection Against External Radiation, de donde
se han extraído las Tablas 3.10, 3.11 y 3.12.

Ejemplo 3.9 — Equivalente de dosis. Suponga que se dispone de un campo de radiación de


fotones monoenergéticos de 1MeV , tal que en un punto específico se tiene un valor de kerma
en aire de 1mGy. Suponga, además, que dispone de los fantomas necesarios para recrear las
condiciones ideales de calibración. A qué valores deberían calibrarse:
a) Un detector de área.
b) Un dosímetro personal de todo el cuerpo.
c) Un dosímetro personal de anillo.

Solución:
DATOS:
E = 1MeV
Kair = 1mGy

SUPOSICIONES:
La calibración del detector se realiza para H ∗ (10)
La calibración de los dosímetros corresponde a una incidencia de 0◦

a) Según la Tabla 3.10, la relación entre H ∗ (10) y Kair es de 1,17Sv/Gy para esa energía.
Por lo tanto, el detector de área debería indicar:
H ∗ (10)
= 1,17 ⇒ H ∗ (10) = 1,17 · Kair = 1,17Sv/Gy · 1mGy = 1,17mSv
Kair

b) Según la Tabla 3.11, la relación entre H p(10) y Kair es de 1,167Sv/Gy para esa energía
y ángulo de incidencia respecto del fantoma. Por lo tanto, el dosímetro debería registrar:

H p(10)
= 1,167 ⇒ H ∗ (10) = 1,167 · Kair = 1,167Sv/Gy · 1mGy = 1,167mSv
Kair

c) Según la Tabla 3.12, la relación entre H p(0,07) y Kair es de 1,173Sv/Gy para esa energía
3.5 Magnitudes operacionales 45

y ángulo de incidencia respecto del fantoma. Por lo tanto, el dosímetro debería registrar:

H p(10)
= 1,173 ⇒ H ∗ (10) = 1,173 · Kair = 1,173Sv/Gy · 1mGy = 1,173mSv
Kair


3.5.4 Estimación de dosis


Hemos mencionado que las magnitudes operacionales brindan una estimación razonable, gene-
ralmente conservativa, de las magnitudes de protección, al punto tal de ser ampliamente utilizadas
en la práctica como estimadores directos de dosis (Tabla 3.13)
¿Pero cuán razonable es esta estimación? Por un lado, las magnitudes de protección se definen
en un punto dentro del cuerpo humano, mientras que las magnitudes operacionales están defini-
das en un punto dentro de un fantoma que intenta simular al tejido humano. Por otro lado, los
factores de conversión utilizados para calibrar los detectores y dosímetros en términos de las mag-
nitudes operacionales fueron desarrollados mediante modelos validados por experimentos, pero
bajo el supuesto de que el kerma aproxima correctamente a la dosis absorbida. Antes vimos que
esta aproximación, justamente, era válida en condiciones de equilibrio de partículas cargadas, con
pérdidas radiativas despreciables y donde, además, la energía cinética de las partículas no cargadas
era grande comparada con la energía de ligadura de las partículas cargadas liberadas.
En ICRP (2010), se presentan los resultados de la comparación entre las magnitudes de pro-
tección estimadas según los coeficientes de conversión de ICRP (2007) con las magnitudes opera-
cionales estimadas según ICRU (1998). Por ejemplo, se ha comparado la dosis efectiva estimada
y la equivalente de dosis ambiental para fotones, electrones y neutrones (Figuras 3.9, 3.10 y 3.11).
Como se observa, en general la estimación de la magnitud operacional es conservativa para
un amplio rango de energías, lo que se evidencia en la relación, casi siempre menor que uno,
entre la magnitud de protección y la magnitud operacional. En el caso de los fotones, vemos que
H ∗ (10) es un buen estimador de E para casi todo el rango de energías práctico. Es necesario tener
en cuenta, no obstante, que para energías bajas (< 100keV ) puede resultar en una sobrestimación
significativa, mientras que para energías mayores a 4 − 5MeV puede resultar en una subestimación.
En el caso de los electrones, sucede algo diferente. Mientras que H ∗ (10) es un buen estimador para
el rango de energías prácticos, suele subestimar las dosis para energías menores a 2MeV y mayores
a 100MeV . En tanto que para neutrones, la estimación es buena excepto para energías superiores
a 1MeV , donde puede haber intervalos en donde subestime el valor de E.

Ejemplo 3.10 — Estimación de dosis. Estime la dosis efectiva que recibiría un trabajador
que se encuentra a 5m de una fuente de 1Ci de 137Cs (E = 662keV , ε = 0,85, T1/2 = 30,2a) si
permanece en ese punto durante 10 minutos. Realice las estimación utilizando:
a) La aproximación del kerma en aire (µen /ρ = 0,0293cm2 /g)
b) El factor de conversión de E/Φ de la Tabla 3.8.
c) La estimación que da H ∗ (10).
d) La estimación que da H p(10)

Solución:
DATOS:
d = 5m = 500cm
46 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

A = 1Ci = 3,7 × 1010 Bq


E = 662keV = 1,061 × 10−13 J
ε = 0,85
T1/2 = 30,2a
t = 10m = 600s

SUPOSICIONES:
Se desprecia el decaimiento de la fuente.
Durante el tiempo de exposición, el trabajador se encuentra en el mismo lugar, de frente
a la fuente. No hay variaciones en la tasa de dosis ni cambios en la geometría AP de
irradiación.

Lo primero que haremos será calcular la fluencia de partículas en esos 10 minutos. Para
eso, recordando la Ecuación 3.13, del Ejemplo 3.1:
Aε Aε
Φ̇ = ⇒Φ= t
4π r 2 4π r2
3,7 × 1010
 · 0,85
Bq
⇒Φ= · 600s
4π (500cm)2
⇒ Φ = 6006507,55cm−2
a) Para utilizar la aproximación de kerma en aire, podemos combinar las Ecuaciones 3.27,
3.37, 3.38, 3.41 y 3.42, de modo que:
 
µen
E = wT HT = wT wR DT,R = 1,1 · wT wR Dair = 1,1 · wT wR Kair = 1,1 · wT wR ΦE
ρ air

 1000g
cm
⇒ E = 1,1 · 1 · 1 · 6006507,55 −2
cm
· 1,061 × 10−13 J · 0,0293 2
/g ·
1kg

⇒ E = 2,054 × 10−5 Sv
b) Según la Tabla 3.8, el factor de conversión entre E y Φ para esa energía y geometría de
irradiación es de 3,17pSvcm2 . Entonces:
E 
cm
= 3,17pSv 2
cm
· 6006507,55 −2
⇒ E = 1,904 × 10−5 Sv
Φ
c) Interpolando en la Tabla 3.9, el factor de conversión entre H ∗ (10) y Φ para esa energía
es de 3,73pSvcm2 . Entonces:

H ∗ (10) 
cm
= 3,73pSv 2
cm
· 6006507,55 −2
⇒ E = 2,240 × 10−5 Sv
Φ
d) Interpolando en la Tabla 3.10, el factor de conversión entre H p(10) y Kair para α = 0◦
es de 1,21Sv/Gy, por lo que:
 
H p(10) µen
= 1,21Sv/Gy ⇒ H p(10) = 1,21Sv/Gy · Kair = 1,21Sv/Gy · ΦE
Kair ρ air
3.6 Referencias 47

⇒ E = 2,26 × 10−5 Sv


3.6 Referencias
ICRU - (1993) - Report 51. Quantities and Units in Radiation Protection Dosimetry
ICRU - (1998) - Report 57. Conversion Coefficients for use in Radiological Protection
Against External Radiation.
ICRU - (2011) - Report 85. Fundamental Quantities and Units for Ionizing Radiation
ICRP - (1996) - Publication 74. Conversion Coefficients for use in Radiological Protection
against External Radiation
ICRP - (2007) - Publication 103. Recommendations of the International Commision on
Radiologial Protection
ICRP - (2010) - Publication 116. Conversion Coefficients for Radiological Protection Quan-
tities for External Radiation Exposures
IAEA - (2000) - Safety Reports Series 16. Calibration of Radiation Protection Monitoring
Instruments
Attix F. H. - (2004) - Introduction to radiologicla physics and radiation dosimetry
Turner J. E. - (2007) - Atoms, radiation, and radiation protection
Martin J. E. - (2013) - Physics for radiation protection
48 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

E NERGÍA [MeV] AP PA LLAT RLAT ROT ISO


0,01 0,009 0,0024 0,0025 0,0024 0,0044 0,0038
0,015 0,0485 0,0048 0,013 0,0122 0,0207 0,0175
0,02 0,13 0,0151 0,0379 0,0332 0,0571 0,047
0,03 0,423 0,127 0,149 0,121 0,214 0,171
0,04 0,801 0,369 0,319 0,261 0,455 0,361
0,05 1,13 0,633 0,487 0,406 0,688 0,548
0,06 1,33 0,827 0,604 0,513 0,85 0,68
0,07 1,42 0,935 0,668 0,574 0,939 0,751
0,08 1,44 0,974 0,693 0,599 0,963 0,773
0,1 1,39 0,97 0,694 0,605 0,953 0,769
0,15 1,25 0,901 0,658 0,581 0,88 0,715
0,2 1,17 0,865 0,644 0,574 0,842 0,687
0,3 1,09 0,836 0,643 0,58 0,812 0,675
0,4 1,06 0,831 0,653 0,595 0,806 0,678
0,5 1,04 0,833 0,665 0,611 0,807 0,684
0,511 1,03 0,833 0,667 0,613 0,807 0,685
0,6 1,02 0,837 0,678 0,626 0,81 0,692
0,662 1,02 0,839 0,685 0,635 0,813 0,697
0,8 1,01 0,846 0,699 0,652 0,821 0,708
1 1 0,855 0,72 0,676 0,83 0,725
1,117 0,999 0,861 0,73 0,688 0,836 0,734
1,33 0,996 0,87 0,748 0,709 0,846 0,748
1,5 0,996 0,878 0,761 0,724 0,853 0,759
2 0,99 0,894 0,788 0,754 0,867 0,781
3 0,977 0,914 0,823 0,792 0,886 0,81
4 0,96 0,923 0,839 0,812 0,893 0,824
5 0,943 0,927 0,846 0,822 0,893 0,831
6 0,924 0,927 0,848 0,825 0,889 0,832
6,129 0,921 0,926 0,848 0,825 0,888 0,832
8 0,886 0,922 0,842 0,824 0,874 0,825
10 0,848 0,913 0,831 0,816 0,856 0,814
15 0,756 0,88 0,794 0,786 0,804 0,778
20 0,679 0,843 0,759 0,758 0,759 0,744

Tabla 3.8: Fotones: dosis efectiva vs kerma en aire (E/Kair ), en Sv/Gy, para diferentes energías y geome-
trías de irradiación. De ICRP (2010).
3.6 Referencias 49

E NERGÍA [MeV] AP PA LLAT RLAT ROT ISO


0,01 0,0685 0,0184 0,0189 0,0182 0,0337 0,0288
0,015 0,156 0,0155 0,0416 0,039 0,0664 0,056
0,02 0,225 0,026 0,0655 0,0573 0,0986 0,0812
0,03 0,313 0,094 0,11 0,0891 0,158 0,127
0,04 0,351 0,161 0,14 0,114 0,199 0,158
0,05 0,37 0,208 0,16 0,133 0,226 0,18
0,06 0,39 0,242 0,177 0,15 0,248 0,199
0,07 0,413 0,271 0,194 0,167 0,273 0,218
0,08 0,444 0,301 0,214 0,185 0,297 0,239
0,1 0,519 0,361 0,259 0,225 0,355 0,287
0,15 0,748 0,541 0,395 0,348 0,528 0,429
0,2 1 0,741 0,552 0,492 0,721 0,589
0,3 1,51 1,16 0,888 0,802 1,12 0,932
0,4 2 1,57 1,24 1,13 1,52 1,28
0,5 2,47 1,98 1,58 1,45 1,92 1,63
0,511 2,52 2,03 1,62 1,49 1,96 1,67
0,6 2,91 2,38 1,93 1,78 2,3 1,97
0,662 3,17 2,62 2,14 1,98 2,54 2,17
0,8 3,73 3,13 2,59 2,41 3,04 2,62
1 4,49 3,83 3,23 3,03 3,72 3,25
1,117 4,9 4,22 3,58 3,37 4,1 3,6
1,33 5,59 4,89 4,2 3,98 4,75 4,2
1,5 6,12 5,39 4,68 4,45 5,24 4,66
2 7,48 6,75 5,96 5,7 6,55 5,9
3 9,75 9,12 8,21 7,9 8,84 8,08
4 11,7 11,2 10,2 9,86 10,8 10
5 13,4 13,1 12 11,7 12,7 11,8
6 15 15 13,7 13,4 14,4 13,5
6,129 15,1 15,2 13,9 13,6 14,6 13,7
8 17,8 18,6 17 16,6 17,6 16,6
10 20,5 22 20,1 19,7 20,6 19,6
15 26,1 30,3 27,4 27,1 27,7 26,8
20 30,8 38,2 34,4 34,4 34,4 33,8
30 37,9 51,4 47,4 48,1 46,1 46,1
40 43,1 62 59,2 60,9 56 56,9
50 47,1 70,4 69,5 72,2 64,4 66,2
60 50,1 76,9 78,3 82 71,2 74,1
80 54,5 86,6 92,4 97,9 82 87,2
100 57,8 93,2 103 110 89,7 97,5
150 63,3 104 121 130 102 116
200 67,3 111 133 143 111 130
300 72,3 119 148 161 121 147

Tabla 3.9: Fotones: dosis efectiva vs fluencia (E/Φ), en pSv/cm2 , para diferentes energías y geometrías de
irradiación. De ICRP (2010).
50 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

E NERGÍA H ∗ (10)/Kair H ′ (0,07, 0◦ )/Kair Kair /Φ H ∗ (10)/Φ H ′ (0,07, 0◦ )/Φ


[MeV ] [Sv/Gy] [Sv/Gy] [pGycm2 ] [pSvcm2 ] [pSvcm2 ]
0,01 0,008 0,95 7,6 0,061 7,2
0,015 0,26 0,99 3,21 0,83 3,19
0,02 0,61 1,05 1,73 1,05 1,81
0,03 1,1 1,22 0,739 0,81 0,9
0,04 1,47 1,41 0,438 0,64 0,62
0,05 1,67 1,53 0,328 0,55 0,5
0,06 1,74 1,59 0,292 0,51 0,47
0,08 1,72 1,61 0,308 0,53 0,49
0,1 1,65 1,55 0,372 0,61 0,58
0,15 1,49 1,42 0,6 0,89 0,85
0,2 1,4 1,36 0,856 1,2 1,15
0,3 1,31 1,31 1,38 1,8 1,8
0,4 1,26 1,26 1,89 2,38 2,38
0,5 1,23 1,23 2,38 2,93 2,93
0,6 1,21 1,21 2,84 3,44 3,44
0,8 1,19 1,19 3,69 4,38 4,38
1 1,17 1,17 4,47 5,2 5,2
1,5 1,15 1,15 6,12 6,9 6,9
2 1,14 1,14 7,51 8,6 8,6
3 1,13 1,13 9,89 11,1 11,1
4 1,12 1,12 12 13,4 13,4
5 1,11 1,11 13,9 15,5 15,5
6 1,11 1,11 15,8 17,6 17,6
8 1,11 1,11 19,5 21,6 21,6
10 1,1 1,1 23,2 25,6 15,6

Tabla 3.10: Factores de conversión para equivalente de dosis ambiental y equivalente de dosis direccional,
para fluencia y kerma en aire de fotones monoenergéticos. De ICRU (1998).
3.6 Referencias 51

E NERGÍA H p(10, 0◦ )/Kair H p(10, α )/H p(10, 0◦ )


[MeV ] [Sv/Gy] 0◦ 15◦ 30◦ 45◦ 60◦ 75◦
0,01 0,009 1 0,889 0,556 0,222 0 0
0,0125 0,098 1 0,929 0,704 0,388 0,102 0
0,015 0,264 1 0,966 0,822 0,576 0,261 0,03
0,0175 0,445 1 0,971 0,879 0,701 0,416 0,092
0,02 0,611 1 0,982 0,913 0,763 0,52 0,167
0,025 0,883 1 0,98 0,937 0,832 0,65 0,319
0,03 1,112 1 0,984 0,95 0,868 0,716 0,411
0,04 1,49 1 0,986 0,959 0,894 0,76 0,494
0,05 1,766 1 0,988 0,963 0,891 0,779 0,526
0,06 1,892 1 0,988 0,969 0,911 0,793 0,561
0,08 1,903 1 0,997 0,97 0,919 0,809 0,594
0,1 1,811 1 0,992 0,972 0,927 0,834 0,612
0,125 1,696 1 0,998 0,98 0,938 0,857 0,647
0,15 1,607 1 0,997 0,984 0,947 0,871 0,677
0,2 1,492 1 0,997 0,991 0,959 0,9 0,724
0,3 1,369 1 1 0,996 0,984 0,931 0,771
0,4 1,3 1 1,004 1,001 0,993 0,955 0,814
0,5 1,256 1 1,005 1,002 1,001 0,968 0,846
0,6 1,226 1 1,005 1,004 1,003 0,975 0,868
0,8 1,19 1 1,001 1,003 1,007 0,987 0,892
1 1,167 1 1 0,996 1,009 0,99 0,91
1,5 1,139 1 1,002 1,003 1,006 0,997 0,934
3 1,117 1 1,005 1,01 0,998 0,998 0,958
6 1,109 1 1,003 1,003 0,992 0,997 0,995
10 1,111 1 0,998 0,995 0,989 0,992 0,966

Tabla 3.11: Factores de conversión para equivalente de dosis personal 10 y kerma en aire, para diferentes
ángulos de incidencia sobre un fantoma tipo bloque ICRU. De ICRU (1998).
52 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

E NERGÍA H p(0,07, 0◦ )/Kair H p(0,07, α )/H p(0,07, 0◦ )


[MeV ] [Sv/Gy] 0◦ 15◦ 30◦ 45◦ 60◦ 75◦
0,005 0,75 1 0,991 0,956 0,895 0,769 0,457
0,01 0,947 1 0,996 0,994 0,987 0,964 0,904
0,015 0,981 1 1 1,001 0,994 0,992 0,954
0,02 1,045 1 0,996 0,996 0,987 0,982 0,948
0,03 1,23 1 0,99 0,989 0,972 0,946 0,897
0,04 1,444 1 0,994 0,99 0,965 0,923 0,857
0,05 1,632 1 0,994 0,979 0,954 0,907 0,828
0,06 1,716 1 0,995 0,984 0,961 0,913 0,837
0,08 1,732 1 0,994 0,991 0,966 0,927 0,855
0,1 1,669 1 0,993 0,99 0,973 0,946 0,887
0,15 1,518 1 1,001 1,005 0,995 0,977 0,95
0,2 1,432 1 1,001 1,001 1,003 0,997 0,981
0,3 1,336 1 1,002 1,007 1,01 1,019 1,013
0,4 1,28 1 1,002 1,009 1,016 1,032 1,035
0,5 1,244 1 1,002 1,008 1,02 1,04 1,054
0,6 1,22 1 1,003 1,009 1,019 1,043 1,057
0,8 1,189 1 1,001 1,008 1,019 1,043 1,062
1 1,173 1 1,002 1,005 1,016 1,038 1,06

Tabla 3.12: Factores de conversión para equivalente de dosis personal 0.07 y kerma en aire, para diferentes
ángulos de incidencia. De ICRU (1998).

O BJETIVO T IPO DE RADIACIÓN M ONITOREO DE ÁREA M ONITOREO INDIVIDUAL


Estimar E Penetrante H ∗ (10) H p(10)
Estimar Hpiel Poco penetrante H ′ (0,07, α ) H p(0,07)
Estimar Hcristalino Poco penetrante H ′ (3, α ) H p(3)

Tabla 3.13: Estimadores de magnitudes de protección


3.6 Referencias 53

Figura 3.9: Relación entre E y H ∗ (10) para fotones, según su energía y la geometría de irradiación. De
ICRP (2010).
54 Capítulo 3. Magnitudes en protección radiológica

Figura 3.10: Relación entre E y H ∗ (10) para electrones, según su energía y la geometría de irradiación. De
ICRP (2010).
3.6 Referencias 55

Figura 3.11: Relación entre E y H ∗ (10) para neutrones, según su energía y la geometría de irradiación. De
ICRP (2010).

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