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FACULTAD DE ARTES

CARRERA DE ARTES VISUALES

RETRATOS Y AUTORRETRATOS

(Algunos trazos autobiográficos) 

Mayra Alejandra García Torres

Trabajo de Grado para optar al Título de Maestra en Artes


Visuales con Énfasis en Expresión Plástica

Asesor: Profesor Daniel Tolmos Saponara

Bogotá, 14 de mayo de 2010


 
A mi familia

A mis profesores, compañeros y amigos.

A quien ha visto en mi una obra de arte


y me ha hecho posible.

A Ti.

 
TABLA DE CONTENIDO

INTRODUCCIÓN

1. MARCO GENERAL DEL TRABAJO

1.1. Justificación…………………………………………………………………
1.2. Objetivos…………………………………………………………………….
1.2.1. Objetivo General……………………………………………………………
1.2.2. Objetivos Específicos…………………………………………………......

2. ANTECEDENTES

3. MARCO TEÓRICO

3.1. Retrato…………………………………………………………………….
3.2. Autorretrato……………………………………………………………...
3.3. Color y Expresión………………………………………………………..

4. REFERENTES

4.1. Expresionismo Alemán…………………………………………………..

5. PROPUESTA VISUAL…………………………………………………………

6. CONCLUSIÒN………………………………………………………………….

7. BIBLIOGRAFÍA

 
RETRATOS Y AUTORRETRATOS

INTRODUCCIÓN

El presente trabajo de grado es parte de mí, me permitió conocerme, o mejor,


reconocerme, recuperar por medio del dibujo y la pintura aquellos recuerdos
lejanos, aquellas personas que hacía tiempo no veía y otras que aunque están
a mi lado desde siempre, han sufrido los rigores del tiempo.

Con este trabajo pude revivir los mejores momentos de mi niñez, recuerdos
llenos de color que intenté capturar en las pinturas que aún vengo realizando.
El ejercicio de observarme de manera detallada me ha dado el impulso para
aceptarme como soy. Mis dibujos y pinturas así lo demuestran y aunque veo
algunos resultados, considero que este trabajo es parte de un largo proceso, un
proyecto de vida en el que debo seguir buscando hasta lograr más y mejores
resultados.

El diálogo entre soporte, dibujo y pintura hace referencia a la multiplicidad de


capas que el tiempo ha ido construyendo en torno a mis recuerdos, estos en
resumen son el punto de partida de mis obras y es por esto último que decidí
dejar visible partes de cada uno de los estratos que componen estas nuevas
versiones de cada momento vivido y aún presente en mi.

 
1. MARCO GENERAL DEL TRABAJO

1.1. JUSTIFICACIÓN

A lo largo de mi carrera he tenido la oportunidad de enriquecerme con las


diversas formas de expresión artística, el dibujo, el grabado, la escultura y la
fotografía, entre otras muchas, me han brindado la posibilidad de explorar
nuevas y tradicionales maneras de materializar mis inquietudes personales. Sin
embargo, la pintura ha sido una constante en mi desarrollo ya que me hace
sentir libre y segura en la expresión.

El tema del autorretrato ha ido apareciendo de manera reiterativa en los


diversos trabajos que he realizado y sin saberlo me he ido acercando a un
mayor reconocimiento de mi aspecto físico, de mi ser. Cada vez que me pinto
siento que estoy haciendo un proceso de catarsis, de liberación. De igual
manera una antología de quienes a lo largo de mi vida me han acompañado,
ayudado y apoyado, de quienes han creído en mí. Cada vez que tomo el pincel
me siento emancipada, cada vez que me fusiono con el lápiz, el óleo o el
acrílico pienso en ellos, en mi entorno, en la historia en la cual me hallo
sumergida y de la cual soy parte. Cada vez que me sitúo ante el espejo, me
reinterpreto y sale un nuevo autorretrato, un nuevo capítulo de mi historia, de
una historia que no hubiera sido posible sin mí, sin ellos.

El autorretrato es una manera de situarme frente a mi entorno y


simultáneamente auto comprenderme inmersa en él, ya que quien me rodea
es lo que me contextualiza, lo que me alimenta, inspira, incita e impulsa a
proponer mi obra que no es más que una perspectiva que brota de mi interior y
que se descubre en mi rostro, un rostro que simplemente quiere narrar
plásticamente mi historia. Una historia como muchas, como tantas pero que en
este caso es la mía, la que me ha correspondido vivir.

Desconocer mi entorno sería descontextualizarme a mi misma por eso cada


vez que me reinterpreto y me plasmo, intento revelarme en mis gestos, en mis
facciones, en los trazos y en la intensidad de mis pinceladas. El retrato y el
autorretrato es para mí esa posibilidad con la cual quiero mostrar a un alguien
con nombre propio, a un entorno que es a la vez mi raíz, mi identidad.

 
1.2. OBJETIVOS

1.2.1. Objetivo general:

Crear una propuesta visual que aborde mi imagen personal, involucrando


recuerdos de mi niñez y algunas personas que han tenido un papel importante
en los momentos más significativos de mi vida.

1.2.2. Objetivos específicos:

• Realizar una serie de retratos y autorretratos en pintura.

• Hacer un análisis de mi apariencia personal para la realización de algunos


autorretratos.

• Generar una reflexión en torno a mi aspecto personal y a los momentos más


importantes de mi vida con el fin de generar un conjunto de obras a partir de la
auto-referencia.

 
2. ANTECEDENTES

Los antecedentes de mi propuesta se remontan a aquél primer día cuando, sin


saber siquiera las vocales, tomé un lápiz de mi hermano y empecé a rayar las
paredes de mi casa. Como vi que mis padres aprobaron mis primeros trazos yo
les sonreí mientras terminaba de adornar la sala.

Días después, como mi afición por la tinta se hacía más fuerte, cogí el labial de
mi mamá y me dirigí con una sonrisa hacia los cuadernos de mi hermana, las
agendas de mi mamá y los libros de la biblioteca, a todos les puse mi sello
personal. No recuerdo si me dieron algún “premio” por la hazaña, lo que sí
tengo presente fue que desde aquel día pusieron los lápices, colores y todo
aquello que pudiera pintar sobre el último casillero del closet. Aquél día sentí
que me quitaban el aire.

El impulso por expresarme era tan fuerte que no tuve más remedio que pintar
con la tierra del jardín, tierra negra y mojada. Quisiera entrar en detalles pero
solo me limitaré a contar que hice de mi vestido blanco un hermoso lienzo
impresionista y de mi piel un nuevo soporte para el color.

Pasaron los días y las noches y como todos veían que yo quería pintar hasta
con el chocolate, se dieron por vencido, así que un día me llevaron a una
tienda en la que había muchas cajas y frasquitos de colores, muchas maletas,
cuadernos en blanco y libros con perfume. Me dijeron que eligiera, que
escogiera lo que quisiera pues me lo comprarían. Para suerte de mis papás mis
manos eran pequeñas, y a pesar de ello, casi les dejo sin monedas para el
pasaje de regreso. Aquella tarde al llegar a casa puse todo mi arsenal sobre la
cama y al llegar la noche me disfracé de centinela pues mi nuevo tesoro así lo
requería. Al poco tiempo mis padres me llevaron a un lugar donde había
muchos niños y niñas que se parecían a mí. Aquellos primeros años de colegio
marcaron mi vida. Hay escenas de aquél tiempo que las conservo como si
fueran hoy.

Actualmente conservo en mi habitación la foto de mi primer año de escuela,


también mi diploma de preescolar, de básica media y de bachillerato. Fotos,
recuerdos y yo frente al espejo ya en mi último semestre de universidad. ¡Cómo
ha pasado el tiempo! A continuación haré mención a los trabajos que realicé en
la Carrera de Artes Visuales y que se relacionan significativamente con el
presente trabajo de grado.

A manera de introducción mencionaré que fue en mi segundo semestre de


universidad cuando en clase de introducción al color fui sumergida en éste
emocionante mundo. En esta asignatura poco a poco fui haciendo memoria de
mis trazos de niña e igualmente relectura de aquellos momentos vividos los
cuales fueron surgiendo en medio de matices, valores, intensidades, armonías
y contrastes de color. En este contexto comprendí que había llegado la
oportunidad de darle lícita rienda suelta a aquellos trazos y a materializar en

 
diferentes técnicas esos instantes de mi vida que hacen parte de mí al igual
que mis huesos.

A medida que fui avanzando en mi proceso académico diversas asignaturas


(Dibujo Básico I, Estudios Visuales I y II, Dibujo III de Figura Humana, Nuevos
Medios de la Plástica y Cuerpo y Pintura, entre otras) fueron complementando
y fortaleciendo mi interés por tomar el color y el pincel de manera autónoma.
Simultáneamente el tema del Retrato y Autorretrato surgía cada vez con mayor
frecuencia hasta el punto de absorberme de tal manera que, aunque, si bien
abordaba otros temas, siempre terminaba retratando a mis seres queridos o
autorretratándome en diversas situaciones del pasado.

Disfraces

Esta obra, desarrollada en lápiz sobre papel, la realicé en la asignatura


Estudios Visuales II. En esta propuesta hago memoria de algunas etapas de mi
niñez, especialmente aquellas relacionadas con los disfraces con los cuales era
vestida en las festividades de Halloween. Cómo olvidar aquellos días previos a
la celebración. Mi mamá confeccionando hasta altas horas de la noche mis
disfraces mientras yo dormía en sus piernas junto a la máquina de coser.

El conjunto de dibujos realizados en esta asignatura me permitió explorar los


rasgos más significativos de mi rostro, igualmente pude evidenciar los cambios
que mi cuerpo fue experimentando con la edad. En la propuesta fue muy
importante la escogencia de las fotografías que sirvieron de referente a la
misma.

 
Autorretratos

En estas obras realizadas en la asignatura Dibujo III decidí retratarme


nuevamente a partir de fotos, buscando plasmar los rasgos más característicos
de mi rostro. Utilice lápices de diversos colores y carboncillo. Cada retrato
pretende representar un estado de ánimo, de hecho las fotografías de
referencia las busqué con la intención de plasmar diversas emociones que
hablen de mi actitud reflexiva de aquel momento. Sentada frente al espejo de
mi alcoba parto de una referencia fotográfica y me recreo. Durante este período
mi vida transcurre por un lapso de relativa calma personal y familiar.

 
Recuerdos de Infancia

Esta obra la realicé en sexto semestre para la asignatura de Nuevos Medios de


la Plástica, en ella utilicé una técnica mixta sobre madera. En esta propuesta
recurro también a mi pasado para materializar en el presente aquellos
acontecimientos de mi infancia que lograron permanecer intactos a lo largo de
los años y que hoy, al recordarlos, logran revivir en mí, aquellos instantes de
fiesta, de integración religiosa, de amor de niña, de amistad, de colegio.
Igualmente mi primer sueldo cuando pintaba cositas en los brazos de mis
compañeros de escuela.

Esta es una de mis obras preferidas ya que hace referencia a momentos


cargados de sentido que lograron mantenerse en el tiempo. Para mi ésta es
una obra triunfal en la que lo grato se torna horizonte de esperanza, de ánimo,
aliento y perseverancia.

10 

 
11 

 
Antología de mi Niñez

Esta es otra de mis obras preferidas, la realicé también en la asignatura


Nuevos Medios de la Plástica. La técnica, acrílico sobre tabla MDF. Es una
obra melancólica y a la vez serena en la que pretendo narrar una difícil
situación personal en la cual me hallaba inmersa. Circunstancia que hoy, al
hacer relectura y gracias a los aportes de mis padres y hermanos, puedo
asumir con la serenidad de un blanco y un azul que logra imponerse sobre el
rojo oscuro del fondo. Con esta propuesta logré, en cierta medida, hacer un
proceso de catarsis, de liberación.

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3. MARCO TEÓRICO

“Un buen retrato me parece siempre la dramatización de una biografía, o, mejor dicho,
el derecho natural inherente a todo hombre”

Baudelaire, Salón de 1859

Es interesante ver cómo a medida que avanzo en este trabajo siento que todo
va tomando forma, sentido y color; entonces empiezo a comprender por qué
mis padres me compraban libros, por qué mis profesores de básica me
insistían que hiciera planas, que leyera, que luchara por mi pasión y por qué en
la universidad me exigían tanto, me hacían trasnochar con los trabajos, y en
muchas ocasiones hasta llorar con sus informes de lectura, con sus reseñas, y
ni hablar de sus puestas al banquillo en las entregas con jurado a bordo.

Entrando en materia, personalmente considero que un marco teórico es algo


así como el espacio personal, en el cual, al entrar, puedo identificar mis gustos,
mi manera de ser, mis juguetes, mis artistas de cabecera, mi estilo, mis
referentes y preferencias…en una palabra, es el lugar que en cierta medida me
define y me hace sentir yo misma. En mi cuarto acostumbro a tener lo básico
pues me gusta el espacio, un vacío en el que pueda correr, saltar y hasta
montar bicicleta. En mi cuarto hay muy pocas cosas pero me preocupo de que
cada una de ellas tenga su lugar.

A mi modo de ver creo que puedo establecer una cierta analogía entre mi
cuarto y el presente trabajo, pues aunque son muchos los autores que ya han
trabajado sobre los tres conceptos de reflexión que apoyan mi propuesta (el
retrato, el autorretrato y el color como forma de expresión), cada uno de estos
tendrá un espacio limitado en el texto, procurando una cercana relación con mi
propuesta. Intentaré ordenar cada tema en este espacio, o trabajo, intentando
no perderme en la confusión.

3.1. Retrato

Para seguir con la semejanza entre mi cuarto y este trabajo empiezo diciendo
que en mi habitación hay muchos retratos, cada uno de ellos posee a un
alguien con nombre propio, incuba en sí a una presencia que ha puesto sellos
en mi, y conserva una serie de experiencias que, si bien ya han pasado, no se
han ido del todo, ya que cada vez que mi mirada se dirige hacia alguna de
estas, como ya lo he dicho antes, vuelvo a sentir parte de lo experimentado en
aquél entonces. Si vamos a la definición “Un retrato (del latín retractus) es una
pintura o efigie principalmente de una persona. También se entiende por retrato
13 

 
la descripción de la figura o carácter, o sea, de las cualidades físicas o morales
de una persona”. 1 Sin embargo, estas cualidades en mi caso van más allá de
lo físico y lo moral, se manifiestan en una explosión de color relacionada con
las emociones de cada rostro y de cada momento, en resumen se materializan
en un ejercicio de expresión.

Muchos de los retratos que hay en mi cuarto son bustos sobre fondos blancos
o azules aparentemente sin contexto, sin ambiente. Esto se podría llegar a
afirmar a simple vista, pero no es así, pues al conocer la historia de cada uno
de ellos, puedo asegurar que una tela blanca o azul se torna en un verdadero
texto, casi que en una historia narrada en códigos que sólo logra descifrar
quien ha podido ser partícipe de la obra y quien se arriesga a sumergirse en
ella.

Cada retrato tiene su contexto vital, su historia y es esto lo que personalmente


quiero resaltar sobremanera en mi trabajo; ello estará reflejado en mis trazos,
en mi apropiación del color, en la violencia, suavidad, sutileza e intensidad de
mis pinceladas, en la expresión de un pincel que cierto día alguien me enseñó
a coger y que ahora estoy empezando a tomar con mis manos.

Es aquí donde logro comprender el aporte de Bacón a mi trabajo quien


manifiesta lo siguiente, “…la mano del pintor se posa como un gesto brutal
sobre un cuerpo, sobre un rostro, con la esperanza de encontrar, en él o detrás
de él, algo que se ha escondido allí…” 2

En mi propuesta lo que busco es traer de vuelta, poner de manifiesto el


recuerdo de lo que fue, de lo que es, con el ambiente que le rodea, los
sentimientos que produce, y la manera como me sitúo al interpretar cada
momento. Es un trabajo de autorreferencia, de evocación, que hace alusión a
uno mismo, directamente a mi persona y a otros individuos que son
importantes en mi vida.
 

3.2. Autorretrato

“El autorretrato es uno de los ejercicios de análisis más profundos que puede
hacer un artista. Implica escrutarse el rostro y conocerse hasta tal punto que la
expresión que tenga en ese momento se traduzca en el dibujo o la pintura que
aborda” 3

Cómo olvidar aquel día que me arriesgué a hacer un retrato de mí misma, para
ser franca no recuerdo dónde está, ni qué lo hice pues una vez lo terminé, lo

                                                            
1
www.rae.es 
2
BACON Francis. Retratos y Autorretratos. Madrid: Ed. Debate. 1996. Pg. 9. 
3
http://es.wikipedia.org/wiki/ Autorretrato

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miré, lo volví a mirar, lo arrugué entre mis manos, lo estrellé contra la pared y
de ahí fue a parar a la papelera.

Al día siguiente, cuando amaneció, me dirigí a la cesta de basura, tomé aquél


acordeón y me dirigí a la mesa de planchado. Después de dejarlo como el
pétalo de una orquídea lo acaricié, le eché perfume, rompí mi alcancía, y con
las monedas de tres años de ahorro, le mandé a hacer un marco con
incrustaciones de plata y marfil.

Hoy al hacer memoria caigo en la cuenta que aquél autorretrato seguramente


fue parte del botín de aquél mayo del 98 cuando, aprovechando la soledad de
aquel martes, unos pillos entraron a mi casa y se llevaron todos los muebles y
objetos de valor sin que nadie se diera cuenta. Desde aquella fecha me he
dado a la tarea de autorretratarme para reproducir la obra perdida. Nunca pude
lograrlo ya que cada autorretrato es diferente, especial, único e irrepetible,
testigo de un momento distinto cada vez. En palabras de Bourgueois, “es como
si en algunos de aquellos encontrara un espacio de recreación de mi pasado
con el propósito de liberarme, de exorcizarme”. 4

Efectivamente, cada uno de mis autorretratos es autorreferente, es decir,


personalmente me refieren a, me dirigen a, me revelan algo de mí de lo cual ni
yo misma era consciente, pero que, al interpretarme y al reinterpretarme
continuamente me permiten la apropiación de experiencias que yo misma
hago memorables, liberadoras. Cada vez que pinto un autorretrato recreo mi
pasado, me reconcilio con él, le doy sentido al ayer y le doy luz verde a mi
presente.

3.3. Color y Expresión

Al llegar a este tercer aspecto (Retrato, Autorretrato y ahora Color como


Expresión) empiezo a comprender por qué el día en que hice mi primera
comunión mi mamá me vistió de blanco, me sentía como una nube. Algo muy
curioso sucedió después de terminada la celebración. Una vez todos salimos
del templo pude ver cómo se aproximaba una camioneta de color negro, a esta
le seguían muchos carros con ramos de flores en sus techos y con cintas de
color violeta en sus capós y en sus espejos.

El salón de recepción estaba adornado con sillas blancas. La torta era blanca al
igual que las bombas y los manteles. Todo parecía un nevado. Me sentía muy
segura y tranquila. Justo antes de empezar a partir la torta me asomé a la
ventana y aunque hacía calor pude percibir una brisa fría y pesada. Ante esto
                                                            
4
REVISTA LÁPIZ. Bourgueois, Louise. Entrevista con la Escultora. Sobre el Cuerpo, las
Emociones, el Miedo, la Libertad y el Arte. En: LÁPIZ, Revista Internacional de Arte. Año XIV.
No 117. España. 2008.
 

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salí a la puerta y vi que la caravana transitaba silenciosa y lentamente frente a
mí. Todos los pasajeros que allí se movilizaban iban vestidos de negro, muchos
de ellos con gafas oscuras y sus miradas perdidas. Hasta unos niños también
mostraban en sus rostros algo totalmente contrario a lo que en el salón de
recepciones estábamos viviendo.

Es ahora cuando comprendo el poder del color, “Los colores expresan estados
anímicos y emociones de muy concreta significación psíquica, también ejercen
acción fisiológica”.5 Mis retratos y autorretratos también están llenos de
significado, de particularidades, de “no es lo mismo”. A simple vista y en
algunos de estos pareciera que no existe novedad entre los colores de un
cuadro y otro, en ello hay razón, pero sucede que no es lo mismo el blanco
inocente de aquella primera comunión, al blanco que con el paso del tiempo
logré relacionar con aquel que se fue. Cada color habla de un momento, de una
situación y de un contexto particular, único e irrepetible.

En cuanto a las situaciones que pretendo representar, cada una de estas


presenta una atmósfera propia la cual trato de atrapar por medio de las
combinaciones que realizo en cada obra. En algunas predominan los
contrastes, mientras que en otras las armonías son más acentuadas. Procuro
utilizar el color como una herramienta que me permita transmitir aquellas
emociones que experimenté, aquellas que muchas veces se me escapan por
lejanas, sin embargo, gracias al color me es posible expresar mis alegrías y
tristezas, mi vida.

                                                            
5
http://es.wikipedia.org/wiki/Color

16 

 
4. REFERENTES

En el desarrollo de mi propuesta plástica se ha ido insinuando la corriente


artística y los artistas con los cuales encuentro bastante cercanía, todos ellos
me acompañan desde hace un buen tiempo y han estado conmigo a lo largo de
casi toda la carrera. De cada uno de ellos, vinculados al Expresionismo
Alemán, me he servido y he podido disfrutarlos.

Los artistas en los cuales encuentro un aporte significativo para mi propuesta


son Edward Munch, Kees Van Dongen y Andre Derain. En cada uno de ellos
encuentro una valiosa contribución que pasaré a comentar a continuación.

De Munch rescato su manera desnuda de revelar el gesto, de igual manera la


forma primaria y a la vez contextualizada de poner el color, al igual que su
aporte relacionado con el aspecto personal que involucra en sus obras. “El
Grito” ha sido una de las obras que ha tocado sobremanera fibras muy íntimas
en mi. Recuerdo que el primer encuentro con “El Grito” sucedió en un lugar que
aún tengo presente, ciertamente el contacto fue con una réplica, sin embargo,
pude sumergirme en ella y logré identificarme plenamente con aquel momento
de angustia y desesperación por el cual yo también estaba pasando.

Sobre el siguiente artista debo mencionar un aporte significativo y es que


gracias al diálogo que establecí con la propuesta del holandés Kees Van
Donguen pude entender que no existe tan sólo una manera de realizar un
retrato. Con él me sentí liberada pues aprendí que un retrato no es
simplemente la copia de un rostro o de un momento, sino mostrar un
acontecimiento, una situación, una historia en el horizonte de quien intenta

17 

 
interpretarla, comprenderla y plasmarla. Las obras de este artista,
especialmente sus retratos, me hacen sentir tranquila y serena.

En Andre Derain encuentro una gran fuerza en relación al gesto y al color,


igualmente destaco el movimiento impredecible y casi instintivo de sus trazos,
aquellos que reflejan la emoción que se produce en determinadas situaciones.

4.1 Expresionismo Alemán

Aunque reconozco que son diversas las corrientes que han influido en mi
propuesta, con la que más me identifico es con este movimiento artístico
(expresionismo alemán). En él hallo la posibilidad de dialogar con varias
tendencias y sumado a ello encuentro que se da especial importancia a un arte
más personal e intuitivo en donde predomina la visión interior del artista; de

18 

 
igual manera la expresión del sentimiento y la subjetividad encuentran aquí su
mejor terreno. 6

Es en esto último donde encuentro el mayor aporte para mi trabajo ya que lo


que en él pretendo, en gran medida, es dar prelación a mi interioridad, a mi
manera de situarme, de interpretar algo que es parte de mi historia; de una
historia que al plasmarla de una manera autobiográfica me ayuda a
comprenderla, a comprenderme y por lo tanto a liberarme.

 
  

                                                            
6
http://es.wikipedia.org/wiki/Expresionismo

19 

 
5. PROPUESTA VISUAL

En el presente trabajo de grado realizaré una serie de pinturas en las cuales


pretendo la interacción entre el color del soporte, el trabajo en dibujo y los
trazos que van dejando las pinceladas de color.

Como lo manifesté anteriormente mis motivaciones parten de recuerdos,


algunos de estos inmortalizados en una serie de fotografías de diversas etapas
de mi vida y de acontecimientos que han dejado huella en mí.

“Mis Primos y yo”

De izquierda a derecha: Fraylan Torres, Mayra García, Reinaldo Torres, Jenny Torres (sentada). Navidad de 1982

“Las Tías”

Esta fue una foto tomada en enero de 2009. Después de muchos años las hermanas de mi mamá lograron reunirse.

20 

 
Fue un momento muy emotivo pues hacía más de diez años que todas no se encontraban nuevamente juntas. De
Izquierda a derecha Teresa Torres, María Isabel Torres, Carmen Torres, Mayra García (la sobrinita), Ivonne López
Torres y Noris Torres (sentada).Todas ellas a lo largo de mi vida han significado para mi apoyo, comprensión y
respaldo.

A nivel formal el trabajo inicia con la escogencia de un soporte duro,


generalmente tabla MDF y en algunas ocasiones las pastas de lasaña, los
soportes duros reciben adecuadamente las pinceladas fuertes y sueltas que
estoy acostumbrada a realizar. Una vez el soporte está bien lijado se le aplica
una capa de vinilo a manera de base de preparación. En este caso el color de
base escogido para todos los trabajos es un amarillo neutro. Cuando el soporte
está terminado procedo a dibujar con lápiz, tratando de representar, con
diversidad de valores, los personajes que previamente he seleccionado de las
diversas fotografías.

“La Nonna” (Dibujo)

Mi Abuela Rosa Padilla

Diciembre de 1934

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Los Compadres (Dibujo)

Eloy Alberto García (Mi Papá) con su mejor amigo de toda la vida (Marco Reyes) en una tarde de domingo por las
calles de Bogotá. 1977

Antes de aplicar la pintura realizo un ejercicio reflexivo relacionado con la


armonía de colores que cada situación me suscita, es así como en cada obra
predomina algún color en especial. En mi caso cada obra es algo así como un
capítulo de una autobiografía narrada en trazos y pinceladas. En el desarrollo
del proceso trato de dejar respirar las diversas capas de la obra con el fin de
establecer planos, a manera de estratos, que permitan al espectador entrar y
salir de cada una de las propuestas. Cada pintura ha recibido de mi
innumerables capas de color, las cuales dejo secar entre una y otra hasta que
intuyo que debo parar.

Confieso en este punto, cuando el trabajo está muy avanzado, que al principio
tuve dificultades para recuperar ese gesto suelto y libre que en semestres
anteriores poseía. Sin embargo, y gracias a la constancia en el trabajo, he
notado que el pincel ha ido ganando mucho en movimiento y cada vez me
siento más segura y precisa en la aplicación del color. En un principio tapaba la
totalidad del soporte y del dibujo con el color, sin embargo, poco a poco he ido
aprendiendo a dejar respirar las capas del trabajo pictórico y a respetar las
formas que previamente he determinado por medio del lápiz.

22 

 
En algunas obras apliqué papeles de color a manera de collage, lo anterior fue
un recurso que utilicé con el fin de enriquecer la limitada lista de colores que en
casos específicos obtenía. Gracias a los papeles recortados logré, en la
mayoría de los casos, ampliar la gama de colores y pude percibir que es más
cómodo encontrar en los papeles los colores que requería, sin invertir una gran
cantidad de tiempo en la preparación de los mismos.

Norys y Jeimy

Una de mis tías preferidas (en el día de sus quince) y mi mejor amiga (cerca a los muelles de Cartagena)

23 

 
Julián con Muñeca y Un Autorretrato

“Aquella Rumba”

24 

 
 

“Sarita”

25 

 
 

 
Mayra a. P.C. y Mayra d. P.C.

En mi Primera Comunión; esta fue una fecha que partió mi vida en dos (a.P.C –antes de mi primera comunión- y
d.P.C –después de Primera Comunión-). Noviembre de 1993.

26 

 
 
“Eloy”

Eloy García (Papá); Fue la foto que puso en su hoja de vida con la cual consiguió el trabajo que le ofrecería la pensión.

“Mis Primos y yo”


 

27 

 
 

6. CONCLUSIÓN

Cierto día, en alguna de mis clases, uno de mis profesores decía que el trabajo
de grado era algo así como la credencial con la cual me mostraría ante el
mundo, de igual manera agregaba que un trabajo de grado es una síntesis, un
ejercicio de diálogo entre lo aprendido y entre los aportes propios que el
proceso académico había ofrecido. Y por último, que una propuesta final de
pregrado eran los diez últimos metros antes de llegar a la meta cuyo premio era
el valioso pergamino. Esta es solo una etapa de la carrera y también es un
inicio. Al reflexionar sobre las palabras de mi profesor comienzo a comprender
que, si bien, el pergamino es mi tiquete de viaje, los conocimientos adquiridos a
lo largo de la carrera serán mi equipaje, mi efectivo.

Hoy al redactar estas páginas me siento tranquila, a gusto, serena, ya que


puedo afirmar que para mí este trabajo ha sido más que un pre-requisito. Sí, y
lo digo sonriendo porque fue aquí donde encontré, además del ambiente
propicio de integración académica, el mejor espacio para reencontrarme, para
agradecer, para hacer memoria y para darle nombre y apellido a mi proyecto de
vida que, si bien, nunca ha sido claro, a medida que avanzaba en mi propuesta
se tornaba esperanzador y con muchos y prometedores horizontes.

Este trabajo de grado me ha dejado un gran aporte que no puedo dejar de


mencionar: La Sanación. Inicialmente todo era oscuro, sin forma, un poco de
cosas regadas, y lo más terrible, muchos miedos y fantasmas instigándome
como mosquitos día y noche. A veces creía que me había equivocado de
propuesta, no sé en qué momento me involucré tanto que llegué a pensar que
no sería capaz.

Aunque la propuesta supone un ejercicio de autonomía, recuerdo que por


mucho tiempo seguí las orientaciones de mi asesor: que más lápiz, que no
tapara el dibujo, que más color, que menos intensidad, que más diálogo
cromático… sin embargo, al final me torné rebelde e hice cosas que ni yo
misma creía ser capaz. En ocasiones hice cuadros “botando humo” o “en la
luna” o en total melancolía. Aquellas fueron las obras más honestas que logré
pintar.

Reconozco que a nivel bibliográfico este trabajo goza de muy pocas fuentes, no
obstante, considero que las elegidas me dieron los fundamentos necesarios
para correr este riesgo. El Aporte de Baudelaire en relación al Retrato y
Autorretrato como Autobiografía, la propuesta de Bourgu

28 

 
eois en relación a la auto-referencialidad como proceso emancipador y la
contribución de otras fuentes en relación al color como expresión en sí mismo
fueron para mí de vital importancia.

Como bien se han podido dar cuenta, la principal referencia bibliográfica he


sido yo misma, mi vida, mi historia, mi gente y las circunstancias, que me han
creado, recreado y hecho posible. Ahora puedo decir sin temor a equivocarme
que cada uno de esos cuadros soy yo misma, un yo que me hace ser yo,
gracias a ti, pues sin ti esto no hubiera sido posible.

Este trabajo es una autobiografía plasmada en letras y pinceladas. Esta es una


propuesta que pretende trascender los objetivos propuestos pues ante un
sentirse libre todo lo demás es solo un acercamiento.

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7. BIBLIOGRAFÍA

ARCHIMBAUD, Michel. Los Rostros de Francis Bacon. En: Dominical


Vanguardia Liberal No. 1338 (Feb. 2, 1997).

Bacon: Retratos y Autorretratos. Presentación de Milan Kundera y France


Borel; traducción María Teresa Gallego. Madrid: Debate.1996.

BLUME. El Gran Libro del Color. Barcelona: Blume. 1982.

CANO, Felipe. Color y Percepción del Blanco Espárrago al Negro Aceituna.


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