TEORIA DE LOS GEOSINCLINALES Y DE LA TECTONICA DE PLACAS
TEORIA DE LOS GEOSINCLINALES:
Una forma muy común para ilustrar de qué manera los contraccionistas explicaban el mecanismo de formación de las cordilleras y las montañas es utilizando la analogía de la manzana. Cuando se produce la deshidratación de una manzana, el proceso de perdida de agua genera que la cascara se arrugue. Así la cascara tendría un comportamiento análogo al de la corteza de la tierra. Esta simple idea daba pie a la teoría del geosinclinal. James Hall, un paleontólogo que trabajaba para el Servicio Geológico del Estado de Nueva York, tuvo la idea de que, si la estructura que había observado en los Apalaches era generalizable, las cadenas de montañas eran precedidas por el depósito de una enorme cantidad de sedimentos. Sugirió que los sedimentos producidos por la erosión de los continentes se depositan en cuencas oceánicas paralelas a los márgenes continentales. Esas grandes cuñas sedimentarias eran luego sometidas a procesos de soterramiento donde sufren procesos de litificación y al seguir ganando profundidad en el interior de la corteza sufren metamorfismo, magmatismo y levantamiento dando lugar a cadenas montañosas. Dana complemento la idea postulando que los sedimentos depositados en las márgenes oceánicas paralelas a los bordes de grandes cadenas montañosas constituyen cuencas sedimentarias marinas que sufren procesos de hundimiento a medida que reciben más aporte de sedimentos producto de la erosión de las cadenas montañosas vecinas. Este proceso provocaría una respuesta vertical hacia arriba para compensar la pérdida de material perdido rocoso erosionado. A las cuencas sedimentarias se le denomino geosinclinal y a las cordilleras circundantes geoanticlinales. La teoría del geosinclinal postula que los materiales sedimentarios se hunden por su propio peso, se funden y generan magmas que ascienden dando lugar a rocas volcánicas. Así esta teoría explicaba las grandes deformaciones de rocas sedimentarias que se veían a lo largo de la cadena del Himalaya o de los Andes. El ciclo geotectónico comprendía tres fases: fase geosinclinal (acumulación de sedimentos), fase tectogenética (deformación y plutonismo) y fase orogénica (elevación de la cadena, vulcanismo y colapso gravitacional). Aunque hubo muy distintas variantes, el concepto de ciclo geotectónico tuvo dos bases fundamentales: 1) El geosinclinal sufre grandes movimientos verticales (que a nivel sedimentario se expresan como subsidencía) 2) La deformación compresiva del geosinclinal es el acontecimiento clave de su evolución; esta compresión se produce simultánea y universalmente en todos los geosinclínales del planeta (las tablas de fases de plegamiento son un residuo de esta idea). Las dificultades principales de esta teoría eran: a) Muchas montañas no son simétricas (por ejemplo los Andes) como postula la teoría. b) La parecida biofacies jurásica y cretácica de África, América de Sur, Australia, la India y Antártica la teoría de geosinclinales explicó con conexiones (“puentes”) continentales. Geográficamente (y geológicamente) es muy difícil explicar al fondo marino una elevación que conecta La India - África - América del sur, sin conectar Asia y América de Norte. c) El fondo marino es geológicamente completamente diferente en comparación de un continente. Será muy difícil explicar cómo los geosinclinales se cambian de una cuenca marina a una parte de la corteza continental. Se habla de la invariabilidad de corteza continental y corteza oceánica. ¿HAY QUE OLVIDAR EL CONCEPTO DE GEOSINCLINAL? Rotundamente, no. Sólo hay que limitarse a ponerlo en el lugar que le corresponde, que es la historia de las teorías orogénicas.
TEORIA DE LA TECTONICA DE PLACAS
En 1968 se unieron los conceptos de deriva continental y expansión del fondo oceánico en una teoría mucho más completa. La litosfera, la capa más externa de la tierra y que posee un comportamiento esencialmente rígido, está dividido en grandes placas y cuyos límites están delimitados por cinturones sísmicos lineales. Las placas litosfericas flotan y se deslizan sobre un material menos rígido, más caliente, llamado astenosfera. E l movimiento de una placa con respecto de otra se produce como respuesta a fenómenos esencialmente de perturbación térmica que ocurre en el interior de la Tierra. Las placas pueden estar constituidas por corteza continental y corteza oceánica apoyadas sobre un manto común. En otros casos esta placa puede estar íntegramente constituido por corteza oceánica sobre el manto litosferico, como por ejemplo la placa de Nazca que subduce la placa Sudamericana a esta interacción se debe el origen de la cordillera de los Andes y la gran inestabilidad de corteza en esa región genera terremotos, actividad volcánica y grandes movimientos de Tierra.
PRINCIPALES PLACAS DE LA TIERRA
La litosfera está rota en numerosos fragmentos, llamados placas, que se mueven unas con respecto a las otras y cambian continuamente de tamaño y forma.Se reconocen siete placas principales. Son la placa Norteamericana, la Sudamericana, la del Pacífico, la Africana, la Euroasiática, la Australiana y la Antártica. La mayor es la placa del Pacífico, que abarca una porción significativa de la cuenca del océano Pacífico.La mayoría de las grandes placas incluye un continente entero además de una gran área de suelo oceánico (por ejemplo, la placa Sudamericana).Esto constituye una importante diferencia con la hipótesis de la deriva continental de Wegener, quien propuso que los continentes se movían a través del suelo oceánico, no con él. Obsérvese también que ninguna de las placas está definida completamente por los márgenes de un continente.Las placas de tamaño mediano son la Caribeña, la de Nazca, la Filipina, la Arábiga, la de Cocos, la de Scotia y la de Juan de Fuca. Además, se han identificado más de una docena de placas más pequeñas. Uno de los principales fundamentos de la teoría de la tectónica de placas es que las placas se mueven como unidades coherentes en relación con todas las demás placas. A medida que se mueven las placas, la distancia entre dos puntos situados sobre la misma placa (Nueva York y Denver, por ejemplo) permanece relativamente constante,mientras que la distancia entre puntos situados sobre placas distintas, como Nueva York y Londres, cambia de manera gradual. (Recientemente se ha demostrado que las placas pueden sufrir alguna deformación interna, en particular la litosfera oceánica.)
El mosaico de las placas rígidas que constituyen la superficie externa de la
tierra. (Tomada de W. B. Hamilton, U.S. Geological Survey.) Bordes de placa: La mayor deformación se produce en los bordes. Las placas litosféricas pueden tener tres tipos de desplazamiento o movimientos con respecto a otras: de separación o divergencia, de aproximación o convergencia y de deslizamiento.
1. Bordes divergentes: También conocidos como bordes constructivos
donde las placas se separan, lo que produce el ascenso de material desde el manto para crear suelo oceánico.
El caso de un límite de separación se produce en un centro de expansión
mesooceánico, el ejemplo seria la separación de la placa Sudamericana con respecto a la Africana a través de la mesodorsal Atlántica. Aquí a medida que se separan las placas del eje de la dorsal, las fracturas creadas se llenan inmediatamente con roca fundida que asciende desde el manto caliente situado debajo. Este magma se enfria de una manera gradual generando una roca dura y generando fragmentos de fondo oceánico.
2. Bordes convergentes: También llamados bordes destructivos, donde dos
placas se juntan provocando un descenso de la litósfera oceánica debajo de una placa superpuesta, que es finalmente reabsorbida por el manto o también el choque de placas continentales que generan un sistema montañoso.
El caso de un límite de placas de convergencia ocurre cuando una placa choca
contra otra, bajo tres situaciones distintas. Un primer caso se da cuando una placa constituida por corteza oceánica encuentra en su camino una placa constituida por corteza continental; la primera por ser más densa se mete por debajo de la segunda en un proceso que se conoce como subducción de placa. Un ejemplo de esta es la Placa de Nazca que subduce y se pierde por debajo de la Sudamericana. Un segundo caso es cuando chocan dos placas constituidas por corteza continental, no se produce subducción como el caso anterior ya que tienen la misma densidad, generándose una gran deformación en la corteza. El ejemplo más notable es entre la placa de India y la de Asia que origina la cordillera del Himalaya. El último caso es la colisión de dos placas oceánicas que generan el desarrollo de arcos de islas volcánicas por procesos de fusión y que coinciden con grandes profundidades marinas, un ejemplo es el arco de las Marianas del Pacifico.
Zonas de convergencia, A. Oceánica-Oceánica, B. Continental-Oceánica, C.
Continental-Continental 3. Bordes pasivos o de falla transformante: Las placas se desplazan una al lado de otra sin producir ni destruir litosfera, la naturaleza de estas fallas la descubrió Wilson que sugirió que estas grandes fallas conectan cinturones activos en una red continua que divide la superficie externa de la Tierra en varias placas rígidas. La mayoría de las fallas transformantes une dos segmentos de una dorsal centrooceánica. Las zonas de fractura que abarcan las fallas transformantes, se encuentran aproximadamente cada 100 km. a lo largo de la dirección de la eje de la dorsal.
Borde de falla transformante
En resumen pasamos de la teoría del Geosinclinal y el contraccionismo a la
Tectónica de Placas. A partir de los avances en oceanografía física, magnetismo, sísmica y geocronologia de las rocas que conforman el fondo oceánico estos brindaron una importante fuente de datos e información que permitieron primero a la formulación de la teoría de la expansión del fondo oceánico y cerrando con la formulación de la tectónica de placas.