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FORMULA ALEGATOS

Sra. Juez:

DANIEL H. PAGANETTI, por derecho propio y en representación de mi


hijo menor Máximo Paganetti, en los autos caratulados “PAGANETTI, Daniel H. y en
Representación de P.M. c. H.G.C. (Hoyts Salta) – ACCIONES LEY DE DEFENSA DEL
CONSUMIDOR”, Expte. 605.589/17, a SS. respetuosamente digo:

I. ALEGATOS: En tiempo y forma vengo a formular alegatos de


bien probado, conforme a su mérito, manifiesto las siguientes
puntualizaciones.

En estos autos ha quedado acreditado con certeza que la prohibición del


Hoyts demandada como "abusiva" lo es en todos sus términos, fundamentalmente por
ser contraria al Derecho vigente en Argentina a partir de la vigencia del nuevo Código
Civil y Comercial (01.8.2015) a esta parte.

Pero pasemos a hacer mérito de toda prueba existente en este proceso


de consumo que generará convicción en SS., que la abusividad existe en rigor de verdad
y al momento de dictar sentencia deberá ser así declarada, al margen de los otros puntos
del objeto de la demanda de consumo.

1. Relación de Consumo: No se ha controvertido en este proceso la


existencia del contrato de consumo entre las partes, como también la “relación de
consumo” donde se enmarca aquel contrato, ya en los términos del art. 42 de la
Constitución Nacional.
2. Hechos. En particular hubo concordancia sobre la existencia en
general de los hechos fácticos relatados en la demanda, en cuanto a la concurrencia con
mi hijo menor al cine, con 2 entradas en mano y fuimos detenidos o “franqueados” por
dependientes que hacen específicamente eso, es decir a las personas que intentan
ingresar a una de las salas, y no se permite el ingreso con alimentos visiblemente
exhibidos que no sean de su Candy Bar.
3. Tampoco se desconoció que no ingresamos con Máximo a ver la
película por el incidente y que tampoco reintegró, ni ofreció hacerlo, el costo de las
entradas frustradas, en cuanto a su uso fin para lo que fueron adquiridas. Es decir se cobró
la entrada, sin poder haber ingresado a la sala a mirar la película.
4. Documental. Fallo (fs. 97 a 104): La copia impresa de la sentencia
judicial del caso “Lis, Ariel Alberto c. Hoyts General Cinema de Argentina S.A.”, Expte.
1199/2016 del Juzgado Nacional en lo Civil N° 62, en primer lugar es sólo una copia,
también es inaplicable al caso de autos por dos razones simples: 1. Porque los hechos
base del juicio sucedieron antes de la entrada en vigencia del nuevo Código Civil y
Comercial de la Nación, lo que da como conclusión que el contexto fáctico y normativo,
de sustancia en todo proceso, del caso Lis es diferente muy distinto al de los presentes
autos. No puede haber analogía, como sostiene la demandada. Otra razón de peso, es
que se trata de un proceso de daños y perjuicios, distinto al presente, que es una acción
de consumo del art. 52 de la Ley 24240.
Tampoco la demandada ha aportado prueba para acreditar que dicho
fallo se encuentra firme o fue recurrido, situación que SS. no puede tener por existente o
probado de oficio, ya que es una carga procesal del Hoyts que le impone el art. 53, pero,
como vemos, no lo ha cumplido. La prueba en particular no es suficiente para generar
convicción en el Juzgador.
5. Instrumental (fs. 83 a 96; y 105 a 108): La Resolución 133/12 de la
Secretaría de Comercio Interior y el dictamen de la Comisión Nacional de Defensa de la
Competencia N° 660/10, si bien son viejos pronunciamientos de organismos -entre otros-
en los que el cine demandado funda su postulación, pero es preciso sincerar a SS. que los
mismos han quedado virtualmente sin eficacia (casi 20 años pasaron), diría abstracto si
se quiere, en razón de la vigencia de nueva legislación que regula la actividad comercial
del Cine demandado en todos esos años, no sólo en Salta, sino en toda Argentina. Incluso
en países de la región los organismos análogos, ya se han expresado en el mismo sentido
que la demanda, pero aclaro que a ellos me referiré más adelante.
Respecto de la Escritura Pública de requerimiento notarial, no virtualidad
con el objeto del presente proceso de consumo, ya que acredita (con nuevo cartel) que
informa a los Consumidores que le van a restringuir sus derechos, en violación al Código
Civil y Comercial. Informar fechacientemente y conforme al art. 4º de la Ley 24240 y 42
de la Constitución Nacional de que el Cine dispone unilateralmente que restrigue la
libertad de contratar, no tiene mucho efecto, sobre todo de carácter jurídico probatorio.
Avisar que se viola una norma, no lo justifica hacerlo. La Ley le impone una prohibción de
conducta, que al llevarla adelante el Hoyts desde el 01/8/2015 a la fecha, debe someterse
a los efectos de la ley violada.
6. Testimoniales de la demandada (Fs. 126 y vta.): Los testimonios de
los mismos empleados del cine demandado, tanto de Rodríguez, como Ramirez Arias,
son coincidentes con el relato de los hechos contenido en la demanda. A, a preguntas del
suscripto a Rodríguez, dijo que desde que él entró a trabajar en el 2009, el Cine prohibe
el ingreso a las salas con productos que no sean de su Candy Bar. Hace 10 años a esta
parte.
Ramirez Arias por su parte aporta algo valioso: indicó con precisión que
los precios del Candy Bar son más elevados que productos similares de terceros (fs. 127),
pero usó el término “un poco” más elevado, por lo que SS. le preguntó “a qué se refiere
cuando dice un poco elevado”, a lo que el testigo respondió: “que si hay una diferencia
de relación, los productos de afuera son más económicos que los del Candy”. Al
preguntarsele; cuánto cuesta 1 litro de gaseosa el testigo dijo que el valor era de $100.
Recuerdo que esa declaración es de marzo de 2018.
Ello acredita sin duda alguna que los precios del Candy Bar al menos con
el ejemplo de la gaseosa, son entre 400% - 500% más caros que los cobrados por la
competencia del cine. Tan sólo coteje SS. con lo que pagamos por las Sprite pequeñas
($17,00) en el Supermercado del mismo Shoping Alto Noa, conforme al Ticket del
Carrefour agregado a fs. 140 de autos
Ramirez Arias ratificó al final de su testimonio que desde que él trabaja
(2005) hay casos esporádicos como el de este juicio.
De esto es de lo que el Cine nada dice en su demanda. El cine deja
consumidor alimentos en las Salas, pero solo de su Candy Bar, y sus precios son mucho
más caros que los alimentos similares de su competencia. En este punto es en donde más
claramente se ve cómo afecta “la libertad de contratar” del Consumidor, que no tiene
otra que ir al Candy Bar del Cine demandado, donde tiene que abonar el precio que fija el
Candy Bar, por ejemplo, $100 una gaseosa pequeña. No tiene otra opción el Consumidor.

En verdad que no obligan a comprar en su Candy Bar, lo que sería un alto


escándalo, pero advierta SS. que con solo pasar un corto tiempo, todo niño promedio
tiene sed en medio de la película y el padre o la madre solo tiene la opción de comprarle
una gaseosa en el Candy Bar de $100, y le es prohibido adquirir la gaseosa de otro lado,
de hacerlo, no lo dejan ingresar con ella nuevamente a la Sala.

Todas estas puntualizaciones son privaciones a la libertad de contratar


que tenemos como Consumidores cuando asistimos al cine Hoyts y justamente el nuevo
Código Civil y Comercial en su art. 1099 vino a poner coto a esa práctica, estableciendo
un principio de libertad de contratación del Consumidor y prohibiéndoles las prácticas
que de cualquier modo limiten o restringan esa libertad de contratar de todo
Consumidor. Esto es lo que hace el Hoyts al prohibir la entrada a las Salas con productos
ajenos a su Candy Bar y es lo que debe ser declarado abusivo. Es contrario al
ordenamiento jurídico vigente en Argentina.

7. Informativa: El Municipio no ha aportado documentación


respaldatoria requerida en el 2do. Oficio que le fuere librado en ese sentido (fs. 220), de
la que informó al evacuar el 1er. oficio de fs. 47. Si bien ha contestado el 2do. Oficio se ha
remitido a que ya respondió con el 1er. Oficio, evadiendo cumplir con acompañar
documentación respaldatoria de la respuesta dada al primer oficio.

De todos modos, teniendo la obligación de aportar todos los elementos


de prueba a su alcance (art. 53 Ley 24240), el cine demandado no lo ha hecho: No aportó
documentación que es lógica que obre en su poder, respecto del cumplimiento de las
normas de salubridad y seguridad. No podemos saber la verdad ante copias de
impresiones de pantallas que nadie ha firmado.

8. Jurisprudencia Administrativa Peruana.

Reconozco en esta instancia del proceso, por una estrategia procesal, no


he incluido el tema que voy a abordar en este punto, en la demanda entablada, dando
una chance a la demandada, que al contestar lo delcare y manifieste, pero ello no ha
sucedido y habla de la forma en cómo se conduce este grupo económico anónimo en
otros países de la región, donde desarrollan la misma e idéntica actividad comercial.

Se trata de lo actuado por el TRIBUNAL DE DEFENSA DE LA


COMPETENCIA Y DE LA PROPIEDAD INTELECTUAL DE LA REPÚBLICA DE PERÚ,
Sala Especializada en Protección al Consumidor. En concreto es la RESOLUCIÓN 0219-
2018/SPC-INDECOPI, EXPEDIENTE 148-2017/CC2, dictada en fecha 02 de febrero de
2018, por la cual obligó a las cadenas Cinemark y Cineplanet a permitir que los
Consumidores puedan entrar a las salas de cine con alimentos no adquiridos dentro
de la salas, siempre que sean de características similares a los que ahí se expenden.

Dicha Resolución puede leerse en este enlace:


https://www.indecopi.gob.pe/documents/20182/2171519/Res_SPC_Cineplex.pdf/52
72797c-8ce3-d2e8-40ef-7d01943963d3

Casi un año antes, el 07 de febrero de 2017, la Asociación Peruana de


Consumidores y Usuarios (ASPEC) fue la que radicó denuncia de la práctica como abusiva
consistente en la prohibición de entrar a las Salas con alimentos no adquiridos dentro de
las salas, conducta idéntica a la que se denuncia en los presentes autos como abusiva.

Es decir, el Indecopi sancionó, a las cadenas de cine Cineplex S.A.


(Cineplanet) y CINEMARK DEL PERÚ S.R.L. por no permitir a los consumidores ingresar
a sus salas con alimentos y/o bebidas adquiridas fuera del establecimiento comercial.
A través de la Sala Especializada en Protección al Consumidor del
Tribunal del Indecopi (SPC) ordenó a ambas cadenas como medida correctiva en favor de
los consumidores, que se abstengan de aplicar, en contra de sus clientes, cláusulas
limitativas y dispuso retirar de sus establecimientos comerciales (salas de cine), en un
plazo de 10 días hábiles el aviso donde informan la prohibición del ingreso con alimentos
y/o bebidas adquiridas fuera de su establecimiento.
Los Fundamentos de dicha Resolución son imperdibles, de una riqueza
argumental, que es imposible soslayar su contenido en este proceso, ya que no sólo trata
el tema en Perú, sino que se extiende el análisis de la conducta abusiva en otros países de
la región, incluida Argentina. Tan sólo me permito citar estos pasajes de los argumentos
enumerados por la Resolución en cuestión:

“… Sobre la forma como otros países abordan la conducta referida a la


restricción de acceso a las salas de cine con cualquier tipo de alimento y/o bebida que no sea
adquirido en dicho establecimiento.
… 33. Al respecto, este Colegiado considera pertinente tener en consideración
como se ha venido analizando en otros países el tema de la prohibición de acceso a las salas de
cine con alimentos y/o bebidas que no son adquiridos en dichas salas.
Así, la jurisprudencia de países como: Argentina, Bolivia, Chile, Brasil, México
y España, da cuenta que no existe una posición unánime respecto de la licitud o no de la conducta
materia de denuncia a nivel internacional.
… 34. Así, en primer lugar, en el país de Chile, por ejemplo, la restricción de
acceso a las salas de cine con alimentos o bebidas adquiridos en el exterior no se considera una
infracción a la normativa de protección al consumidor. Ello, conforme lo ha considerado el Poder
Judicial, en el proceso seguido por el señor Jaime Lagos Henríquez contra Hoyts Cinemas Chile
S.A.
… 35. Al respecto, en dicho pronunciamiento, la autoridad judicial indicó lo
siguiente: (i) que, la prohibición de acceso de los consumidores a las salas de cine del proveedor
con bebidas o productos alimenticios que no sean adquiridos en su propio recinto constituye una
limitación debidamente informada a los usuarios, que no afecta su derecho a la libre elección entre
los servicios ofrecidos por los proveedores, en el seno de un mercado variado y ampliamente
competitivo; (ii) que, no se había configurado una discriminación arbitraria o ilícita, dado que para
ello habría sido necesario que a los consumidores se les hubiere prohibido el acceso portando
bebidas adquiridas en el propio establecimiento en que se encuentra el cine, en tanto a otros, en
similar situación, se les permitiese el ingreso sin dificultades; y, (iii) que, la restricción analizada
representaría una condición esencial del servicio ofrecido y formaría parte integrante del contrato
celebrado con el cliente, sin que ello infringiera, la obligación que se imponga al proveedor de
respetar los términos o condiciones de la prestación del servicio, conforme a lo que se hubiera
convenido con el consumidor; así como, que, el proveedor no hubiera quebrantado la regla que le
impide negar injustificadamente la venta de bienes o la prestación de servicios comprendidos en
sus respectivos giros en las condiciones ofrecidas1.
…36. En otro extremo, en el país de Brasil, la Primera y Tercera Clase del
Superior Tribunal de Justicia (STJ) en los Estados de Río de Janeiro (Recurso Especial N° 744.602–
RJ (2005/0067467–0) y Sao Paulo (Recurso Especial N° 1.331.948–SP (2012/0132555-6), señaló
respectivamente, en los citados pronunciamientos que prohibir la entrada de los consumidores a
las salas de cine con alimentos y/o bebidas compradas fuera de dichos establecimientos, constituía
una venta atada (venta casada), por tanto, una práctica abusiva que vulneraba el derecho de los
consumidores2.

1 Información extraída de:


http://dominodmz.sernac.cl/Juridico/Sentencias.nsf/c6f901dfeb3dada70425707a00539a17/7005652b
cf973561842572
b40075e8e5/$FILE/Cine%20Hoyts%20ROL%20N%C2%BA%20911-
2001%20Negativa%20a%20prestar%20el%20servicio.pdf. Asimismo debe tener en consideración el
dictamen emitido por la Comisión Preventiva Central de Chile, en la investigación sobre prácticas
restrictivas de la libre competencia por parte de Cinemark y Cine Hoyts, a través del cual
consideró legitima la prohibición impuesta por los citados proveedores. Información extraída
de: http://www.tdlc.cl/tdlc/wp-content/uploads/dictamenes/Dictamen%201125-
2000.pdf.

2 Información extraída de:


… 37. Bajo tal premisa, el citado Tribunal de Justicia consideró que esta
restricción, se oponía a la libertad de elección de los consumidores de productos y servicios, siendo
que, los proveedores no podían, entre otras prácticas abusivas, condicionar la venta de un producto
o servicio a la compra de otro producto o servicio. Finalmente, indicaron que, la práctica abusiva
(venta atada) quedaba acreditada cuando el proveedor permitía el ingreso de productos adquiridos
en sus instalaciones y prohibía el ingreso de aquellos alimentos adquiridos en otros lugares.
… 38. Por otro lado, es pertinente señalar que en el país de Bolivia, la conducta
materia de análisis en el presente extremo constituye una vulneración al derecho a la libre elección
de los consumidores, contenida en el artículo 24° de la Ley 453, Ley General de los Derechos de
las Usuarias y los Usuarios y de las Consumidoras y los Consumidores 3, norma promulgada en el
2013, siendo que se venía aplicando a las salas de cine desde julio del 20164; por lo cual dicha
conducta constituía una infracción a la normativa en materia de protección al consumidor.
… 39. Asimismo, cabe resaltar que, en Argentina, la prohibición materia de
denuncia, se considera una práctica abusiva que atenta contra la libertad de elección de los
consumidores, así como el derecho al trato digno y equitativo de los mismos5 contenido tanto en los
artículos 8°bis y 37° inciso b) de la Ley Nacional N° 24.240 de Defensa del Consumidor, como en
el artículo 42° de la Constitución Nacional Argentina6.

La infracción declarada abusiva y prohibida en Perú, es la misma e


idéntica práctica denunciada por mi parte en este proceso de consumo. Se trata del
mismo grupo económico que maneja esos cines en la mayoría de los países de la región,
y uno de ellos es Cinemark del Perú S.R.L., es decir la misma empresa demandada en
estos autos y que desarrolla la actividad bajo otra plataforma societaria (S.A.). La
conducta es la misma en todos los casos, sin perjuicio de las normas internas de cada país,
que en definitiva son similares, ya que las Constituciones de cada uno de ellos contienen
un similar texto al art. 42 de nuestra Constitución Nacional.

http://www.stj.jus.br/sites/STJ/default/pt_BR/Comunica%C3%A7%C3%A3o/noticias/Not%C3%ADcias/%
C3%89-pr%C3%A1tica-abusiva-impor-ao-consumidor-a-exclusiva-aquisi%C3%A7%C3%A3o-de-alimentos-
vendidos-em-cinemas y https://www.conjur.com.br/2007-mar-
02/cinemark_nao_impedir_cliente_levar_pipoca.

3 Información extraída de: http://www.elpaisonline.com/index.php/blogs/ellas-y-ellos/item/227829-cines-


ya-no-pueden-prohibir-alimentos-adquiridos-afuera y
http://www.lostiempos.com/actualidad/economia/20160704/sancionan-cines-cochabamba-vulnerar-
derechos-usuarios.
4 LEY GENERAL DE LOS DERECHOS DE LAS USUARIAS Y LOS USUARIOS Y DE LAS
CONSUMIDORAS Y LOS CONSUMIDORES. SECCIÓN VI. DERECHO A LA LIBRE ELECCIÓN DE
PRODUCTOS Y SERVICIOS. Artículo 24. (DERECHO A LA LIBRE ELECCIÓN).

I. Las usuarias y los usuarios, las consumidoras y los consumidores tienen derecho a elegir los productos
y servicios que requieran, al igual que seleccionar o cambiar de proveedor que a su criterio les sea
conveniente.

II. Los proveedores de productos o servicios, no podrán ordenar o inducir a las usuarias y los usuarios, las
consumidoras y los consumidores a contratar con determinados proveedores o quienes proporcionen servicios
auxiliares.
5
Información extraída de: https://www.lmneuquen.com/ahora-se-podra-entrar-al-cine-comida-afuera-
n568347, https://www.infobae.com/tendencias/2017/10/05/cine-y-pochoclo-como-reclamar-cuando-no-
te-dejan-entrar-con-alimentos-comprados-afuera/,
http://www.quepasasalta.com.ar/noticias/salta_26/demandaran-otra-vez-al-cine-hoyts-por-no-dejar-
entrar-con-comida-de-afuera_184619.
La libertad de contratar (1099 CCyC) y la protección de los intereses
económicos (art. 42 CN), como también el deber de otorgarle un trato digno al
Consumidor (8 bis Ley 24240 y 1097 del CCyC), son derechos, garantías y deberes que se
encuentran normas y leyes de orden público en ambos países (Argentina y Perú) en forma
casi idéntica, lo que surge de la lectura de la Resolución del INDECOPI.

Es decir que el Cine demandado no puede desconocer la Jurisprudencia


Peruana en la materia, aunque sea de índole administrativa, es en esencia la misma
empresa. Me atrevo a decir que ha ocultado esta elemental información en estos autos,
a sabiendas de su existencia, pero es como lógica, trastoca y contradice la postulación
sostenida en la constestación de su demanda.

El art. 53 de la Ley 24240 ordena a los proveedores “aportar al proceso


todos los elementos de prueba que obren en su poder, conforme las características del
bien o servicio, prestando la colaboración necesario para el esclarecimiento de la
cuestión debatida en juicio”. El Cine Hoyts DEBIÓ hacer conocer este extremo jurídico de
Perú en el presente juicio, pero decidió ocultarlo y eso evidencia la maliciosidad de la
conductas observadas antes e incluso en este proceso, lo que abona la aplicación de los
Daños Punitivos, conforme lo solicitado en la demanda inicial.

Confeso que me he permitido no relatar esto en la demanda interpuesta,


con el único objeto de darle la oportunidad al Cine demandado de tomar el camino de la
verdad y hacerlo conocer en este juicio. Pero vemos que nada ha dicho, y ello per se, es
reprochable. Transita a sabiendas de la Jurisprudencia aportada en este punto.

Se trata de información pública, que puede ser objeto de análisis por la


Sra. Juez al fallar en este proceso. En lo personal sin duda alguna es información
imprescindible que aporta gran abono para la sentencia definitiva a dictarse.

CONCLUSIÓN: Me permito concluir a SS. que la conducta denunciada


como abusiva en este proceso, a partir de la entrada en vigencia del nuevo Código Civil,
no quedan dudas que el Hoyts se encuentra en infracción desde el 01/8/2015 a esta parte,
es decir de la vigencia del art. 1099 y ccdtes del Código referido, porque ha venido a
modificar la estructura legal que atrapa la actividad comercial del cine, que si bien goza
de plenos derechos y garantías constitucionales, no puede estar POR ENCIMA de un
Código Civil y Comercial que protege a todo el enorme colectivo de Consumidores
potenciales que concurren anualmente a las salas.

No existe ningún elemento de prueba aportado por el Hoyts que


permitan sostener que con la prohibición no transgrede normas y garantías de mayor
jerarquía que las invocadas por el cine este proceso, en especial la que establecen la
libertad de contratar de todo Consumidor que decide asistir a sus Salas. Es más, en la
extensa contestación no hay ni una mención al art. 1099 del Código Civil. Es el mismo
silencio guardado por el Hoyts por no tener el libro de quejas que le ordena la Ley
provincial 7800 (art. 10).

La estructura del negocio en la forma originalmente diseñada a llegado a


su fin. La empresa precisa un rediseño comercial que se adecúe a la Ley Argentina. Su
Candy Bar debe competir en igualdad de condiciones que la competencia y no cautivar
en silencio a consumidor solamente sus productos en las salas, y no otros, ni aún similares
a los de su Candy Bar.
El tan sostenido modelo o estructura de negocios comprende al Candy
Bar en un 35%-40% de las ganancias, siempre declamado como parte esencial de su
actividad, hoy DEBE cambiar para estar a Derecho en Salta y en la República Argentina.
La violación de las normas por parte del Hoyts data del 01/8/2015 a la fecha en forma
permanente, sostenida y ello no puede suceder ó al menos en lo personal no lo voy a
permitir, y más aún en defensa de los derechos de mi hijo Máximo como Consumidor
damnificado en el caso de autos.

Finalmente sostenemos que EL MODELO DE NEGOCIO que sostiene la


accionada NO PUEDE TENER MÁS JERARQUÍA Y PREFERENCIA DE PROTECCIÓN,
POR ENCIMA DE LOS DERECHOS DE LOS CONSUMIDORES, de raigambre
Constitucional contenidos en el artículo 42 de la Constitución Nacional A LA CUAL EL
HOYTS DEBE SOMETERSE.

Solicito a SS. admita la demanda en todos sus términos, por ser ajustada
a Derecho y a las pruebas rendidas en este proceso de consumo.

SERÁ JUSTICIA.-

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