Mons.

Ramón Alfredo Dus viaja a Roma para la visita Ad Limina

Los obispos argentinos van a realizar la Ad Limina al Vaticano entre los días 27 de abril y 08 de
mayo. Nuestro Arzobispo Monseñor Ramón Alfredo Dus será parte del primer grupo que viajará a
Roma para estar en la Santa Sede, desde el 27 al 8 de mayo, en el primer grupo
La última visita de estas características se realizó en el 2009. Cada Pastor compartirá un detallado
informe de la realidad pastoral de cada una de las diócesis. Estos informes, fueron ya enviados a
los Dicasterios para con ellos trabajar junto a los integrantes de cada una de estas comisiones
durante el tiempo que estén en Roma.
Los Obispos irán divididos en 3 grupos y en regiones pastorales:
Del 27/4 al 8/5 irán los Obispos de las regiones NEA, Platense y Litoral.
Del 5/5 al 11/5 los Obispos de la región Buenos Aires.
Del 12/5 al 18/5 los Obispos de las regiones Patagonia, Centro, Cuyo y NOA.

¿Qué significa la visita Ad Limina?

- Se trata de una antigua tradición, que establece que el Obispo diocesano vaya a Roma y honre
los sepulcros de los santos Apóstoles Pedro y Pablo, y se encuentre con el sucesor de Pedro, el
Obispo de Roma.
Este viaje recibe el nombre de visita ad limina Apostolorum, (expresión latina que significa "los
umbrales (de las basílicas) de los apóstoles" -Pedro y Pablo), es decir, la visita a Roma, por parte de
todos los Obispos que presiden en la caridad y en el servicio a las Iglesias particulares en cualquier
parte del mundo, en comunión con la Sede Apostólica. Es un modo profundo de expresar nuestra
comunión universal, dando también cuenta de la disposición de las Iglesias particulares de recibir
consejos y orientaciones, y de esta manera estar estrechamente unidas a los miembros de la
Iglesia Universal con su cabeza visible, el papa Francisco, sucesor del Apóstol Pedro.

¿Cada cuánto tiempo se debe hacer esta visita?

- Las normas universales de la Iglesia legislan sobre estas visitas para todos los obispos del mundo.
Allí podemos leer que “Cada cinco años el Obispo diocesano debe presentar al Romano Pontífice
una relación sobre la situación de su diócesis, según el modelo determinado por la Sede Apostólica
y en el tiempo establecido por ella. Además, se señala que el Obispo diocesano, el año en que
debe presentar la relación al Sumo Pontífice, vaya a Roma, de no haber establecido otra cosa la
Sede Apostólica, para venerar los sepulcros de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo, y preséntese al
Romano Pontífice. Se trata de una obligación que el Obispo debe cumplir personalmente, a no ser
que se encuentre legítimamente impedido: en este caso lo hará por medio del coadjutor, si lo
tiene, o del auxiliar, o de un sacerdote idóneo de su presbiterio". Es decir, se procura por todos los
medios que esta visita no deje de realizarse, dada la trascendencia que la misma tiene para el
propio obispo y su Iglesia particular, para el Santo Padre y para toda la Iglesia universal.

¿Viajan a Roma todos los obispos juntos?

- Los obispos argentinos que conformamos las regiones pastorales del NEA, Litoral y Platense,
realiza-remos la visita Ad Limina entre los días 27 de abril y 8 de mayo. El resto de los obispos, de
otras regiones pastorales, viajan en otros dos grupos. Recordemos que la última visita de estas
características se realizó en el 2009.
Esta visita –en sus diferentes momentos litúrgicos, pastorales y de fraterno intercambio– sirve
tanto para el Obispo como para la misma Iglesia particular. Al Obispo le ayuda a acrecentar el
sentido de su responsabilidad, como Sucesor de los Apóstoles, y fortalecer su comunión con el
sucesor de Pedro. Y es beneficioso para la Iglesia porque, por medio de su propio representante,
consolida los vínculos de fe, de comunión y de disciplina que la unen a la Iglesia de Roma y al
entero cuerpo eclesial.

Concretamente, ¿cómo se desarrolla en el Vaticano esta visita?

- El desarrollo de la visita consiste, ante todo, en el encuentro con el Santo Padre, y luego con sus
más estrechos colaboradores. Cada Pastor lleva un detallado informe de la realidad pastoral de su
propia diócesis y también de las Comisiones episcopales que integra, por ejemplo, la de Vida,
Laicos, Familia y Juventud, que integra nuestro arzobispo.
Esos informes ya fueron a los Dicasterios de la Curia Romana, para que sus responsables conozcan
la realidad pastoral de la Iglesia en Argentina y, a partir de ello, poder entablar un diálogo con los
obispos y mediante el intercambio enriquecernos unos y otros. Ellos, con la información que les
proporcionamos los obispos de nuestras respectivas áreas pastorales; y nosotros, con la visión
universal que ellos tienen sobre las mismas. Este encuentro les permite a los pastores compartir
las esperanzas, alegrías y dificultades de la Iglesia universal, y recibir oportunos consejos y
directivas.
Son en total 19 dicasterios con los que se reunirán los obispos durante los 6 días que dura la visita.
Durante esos días se prevé también la peregrinación a las a las 4 basílicas mayores de Roma donde
celebrarán la Eucaristía, el homenaje a las tumbas de los Príncipes de los Apóstoles, Pedro y Pablo,
y el encuentro con el Santo Padre, momento con el que culmina la visita.

Acompañar a los obispos con la oración

Como se puede observar, la visita posee un ritmo muy intenso, a fin de aprovechar al máximo una
gracia tan extraordinaria para nuestras Iglesias particulares y seguramente también para todo
nuestro Pueblo Argentino. En estos días de la visita se ore en las diversas comunidades de la
diócesis por la fecundidad espiritual de esta visita, por las intenciones del papa Francisco, y por las
necesidades de los más pobres y vulnerables que sufren las graves penurias económicas. Mons.
Ramón Alfredo al tener su encuentro con el Santo Padre le comunicará al papa Francisco el afecto
filial de todos los fieles de la arquidiócesis, de lo mucho que lo quiere y reza todos los días por él,
pidiendo a Jesús, Buen Pastor, que los sostenga y cuide en la enorme misión pastoral que está
llevando adelante.-