“Ley 41 del 1 de julio de 1998, ley General de ambiente de la

República de Panamá”

Resumen

A través de la ley 41 de 1 de julio de 1998, se establece que la

administración del ambiente es obligación del estado y por lo tanto es
necesario su protección, conservación y recuperación.
Además, esta ley mediante el órgano ejecutivo reglamenta las
auditorías ambientales y los programas de adecuación y manejo
ambiental.

Titulo VI
De los Recursos naturales.
Capitulo II
Áreas protegidas y diversidad biológica.

Mediante la Ley 41 de 1998, en el artículo 66, se reafirma la creación

del Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SINAP) y se determina a la
Autoridad Nacional de Ambiente (ANAM) como ente rector del mismo.
Los municipios, gobiernos provinciales, patronatos, fundaciones y
empresas privadas podrán destinar concesiones de administración y
servicios conforme con los estudios pertinentes ya realizados.

El Sistema Nacional de Ambiente (SINAP) está conformado por 65

áreas protegidas, lo que representa el 34.43% del territorio nacional,
además el SINAP cuenta con dos Reservas de la Biosfera, dos Sitios
de Patrimonio Mundial Natural, dos Sitios de Patrimonio Mundial
Cultural los cuales son las fortificaciones de la costa caribeña de
Panamá: Portobelo-San Lorenzo, y tres Sitios RAMSAR.

Al estado le corresponde colaborar con la conservación y quehacer de

las diversidades biológicas en su habitad original, sobre todo de
aquellas especies, ya sea de fauna o flora, que tienen condición única
o singular.
La República de Panamá posee un alto grado de diversidad biológica
en todos sus niveles. Se caracterizan 13 zonas de vida con una variedad
de hábitats que contienen una alta riqueza de especies y diversidad
genética que varía.
Panamá es considerado el vigésimo octavo país en el mundo con mayor
diversidad biológica.

El estado podrá crear áreas protegidas en terrenos o propiedades

privadas, a través de un sistema de incentivos fiscales como créditos
canjeables por reforestación con especies nativas.
Esta practica beneficia tanto a la economía de las familias como al
medio ambiente.

El reglamento también indica el cobro de tarifas por el uso de los

servicios naturales dentro de las áreas protegidas, dichas tarifas son
pagadas a la Autoridad Nacional del Ambiente.

La Autoridad Nacional de Ambiente creo un plan de concesión de

servicios y de administración a las áreas protegidas.
El ANAM es la máxima autoridad en este medio relacionado al ambiente
ya que esta autorizado para normar, controlar y regular el acceso y uso
de los recursos biológicos y así preservar el buen estado de estos y su
durabilidad por muchos años más.

La Autoridad Nacional de Ambiente debe asumir las funciones

otorgadas al Ministerio de Desarrollo Agropecuario mediante la ley 8 de
1995.

La función principal del ANAM es asegurar el cumplimiento y la

aplicación de las leyes, los reglamentos y las políticas nacionales en
materia de ambiente.

Además de las funciones ya mencionadas anteriormente tenemos:

 Dirigir y coordinar las instituciones y organismos con
competencia ambiental.
 Proponer políticas, leyes y normas de gestión ambiental.
 Brindar información ambiental.
 Orientar e Impulsar nuevos estilos de desarrollo.
 Asesorar respecto del mejor uso de los recursos