Cómo hacer champú natural de Aloe Vera.

El shampoo casero puede ser mucho mejor que el shampoo comercial porque los
ingredientes que lo componen son naturales, mientras que el que utiliza la mayoría
contiene químicos que pueden provocarnos exceso de caspa o la caída del cabello.
Libres de ácidos, siliconas y sulfatos, los shampoos caseros hacen que el cabello luzca
más suave y sano, pues el cuero cabelludo recibe un mejor cuidado al no verse afectado
por los químicos.
Con el uso del shampoo casero, las puntas del cabello no se abrirán y la raíz del cabello se
fortalecerá.
Es preciso que tengas en cuenta que durante los primeros días puede que
sientas mucha picazón o caspa. No te preocupes. Es el proceso que hace el
cuero cabelludo para “volver a la normalidad”. Si esto permanece por más de
quince días, consulta con un dermatólogo, aunque se supone que no puede
ocurrir.

Ingredientes para hacer el champú casero.

Champú de aloe vera natural

 2 tazas (475 mililitros) de agua destilada
 180 mililitros (6 onzas) de jabón líquido de Castilla
 2 cucharadas (30 mililitros) de gel de aloe vera
 ½ cucharadita (2,5 mililitros) de aceite de jojoba
 40 a 50 gotas de aceites esenciales (opcional)
 56 gramos (2 onzas) de hierbas secas (opcional)
Rinde unas 3 tazas (710 mililitros o 24 onzas) de champú

Modo de preparación de este champú natural.

Extrae el gel directamente de la planta de aloe vera. Esto te brindará los mejores
resultados. Si no tienes esta planta en casa, considerar comprar algunas. Para extraer el
gel, empieza cortando una hoja entera de la planta. Corta la hoja para abrirla a lo largo y
separa las dos partes. Extrae el gel espeso y transparente con una cuchara

Solo necesitarás 2 cucharadas (30 mililitros) de gel fresco, el cual puedes extraer
rápidamente y con facilidad. Solo necesitarás algunas hojas de aloe vera para
conseguir esa cantidad.

Usa hierbas secas para lograr beneficios

adicionales (opcional)

vera es un buen humectante y puede promover el

crecimiento capilar de manera natural.[4] Es
excelente si quieres incluir hierbas naturales para
conseguir beneficios adicionales. Puedes usar
cualquier combinación de las siguientes hierbas
secas, en la medida de lo necesario, siempre y
 cuando no uses más de 56 gramos (2 onzas) en total.

 Para el cabello seco, usa ortiga, bardana, romero o caléndula.

 Para el cabello grasoso, usa milenrama, lavanda, toronjil o menta.
 Si tu cabello es rubio, usa caléndula o manzanilla.
 Si tu cabello es oscuro, usa salvia o consuelda.
 Para combatir la caspa, usa romero, tomillo o cualquier hierba para el cabello
seco.
Usa aceites esenciales para darle aroma y beneficios adicionales (opcional).
Los aceites esenciales son extractos concentrados de las plantas naturales.
Muchos de ellos huelen bien y otros podrían tener propiedades medicinales. Hay
bastantes aceites esenciales que podrían ser buenos para la salud capilar y el
cuero cabelludo. Puedes usar cualquier combinación de los siguientes aceites
esenciales en tu champú, pero no uses más de 50 gotas en total.[6]
 Para el cabello normal, usa lavanda, amaro o manzanilla.
 Para el cabello grasoso, usa limón, árbol de té o y lang-ylang.
 Para el cabello seco, usa romero, mirra o menta.
 Para combatir la caspa, usa árbol de té, pachulí o lavanda.[7]
 Nunca uses aceites esenciales directamente en el cuero cabelludo, porque son
productos sumamente concentrados y potentes. En este caso, los otros
ingredientes del champú diluirán los aceites sin problema alguno.

Elaborar el champú
Lleva el agua destilada a punto de
ebullición. Mide 2 tazas (475 mililitros) de
agua destilada. Vierte el agua en una olla.
Coloca la olla en una hornilla a fuego alto.
Lleva el agua a punto de ebullición.[8]

 Si no vas a usar hierbas secas, no es

necesario que hiervas el agua destilada.
Puedes mezclar los ingredientes tal cual.

Agrega las hierbas secas de tu elección. Si vas a

usar cualquier hierba seca en el champú, mídelas
ahora. Recuerda que no debes usar más de 56
gramos (2 onzas) en total. Cuando el agua empiece a
hervir, agrega las hierbas con cuidado en la olla.

.
 Cubre la olla y reduce el fuego para que esté
bajo. Después de agregar las hierbas secas, tapa la olla.
Reduce el fuego para que esté bajo. Esto dejará en
infusión el agua con las hierbas. Deja que las hierbas
reposen en el agua hirviendo de 15 a 20 minutos

Saca la olla del fuego y cuela las hierbas. Apaga el

fuego y saca la tapa de la olla. Ten cuidado, porque es
probable que salga el vapor caliente después de sacar
la tapa. Coloca un tazón grande debajo de un colador.

Vierte el agua caliente con cuidado por medio del

colador. Las hierbas coladas se quedarán en el colador
mientras que el agua pasa hacia el tazón. Después de
colar las hierbas, bota los restos.

Agrega el jabón de Castilla al agua de hierbas. Mide

180 mililitros (6 onzas) de jabón líquido de Castilla.
Vierte despacio el jabón en el tazón con el agua dejada
en infusión. Mezcla las sustancias con cuidado amedida
que viertas el jabón. Es probable que el agua esté muy
caliente, así que ten cuidado de no salpicarte.

Agrega el gel de aloe vera, el aceite de jojoba y

los aceites esenciales. Mide y agrega 2
cucharadas (30 mililitros) de gel de aloe vera y ½
cucharadita (2,5 mililitros) de aceite de jojoba.
Añádelos con cuidado en el tazón uno a la vez,
removiendo constantemente. Mezcla bien los
ingredientes.
 Si vas a usar aceites esenciales, agrégalos ahora.
Recuerda que no debes usar más de 40 a 50 gotas de aceites esenciales.
Remueve bien
 Embotella la mezcla del champú. Usa un embudo
para verter con cuidado la mezcla del champú en
un recipiente de plástico o de vidrio que pueda
contener unas 3 tazas (710 mililitros o 24 onzas) de
líquido. Si usaste agua normal y no dejaste en
infusión el champú con las hierbas secas, puedes
guardar sin problema alguno toda la botella en la
ducha.

Si usaste hierbas secas, guarda la botella en la

refrigeradora. Si dejaste el agua en infusión con las
hierbas secas, debes guardar la botella en la
refrigeradora. Se malogrará si la dejas a temperatura
ambiente por más de uno o dos días. Durará unos 10
días en la refrigeradora. Alrededor del décimo día,
asegúrate de oler la mezcla antes de usarla.

 Si tiene un olor ácido, bótala y prepara una nueva tanda. Si huele bien, todavía
puedes usar el champú.
 Por comodidad, puedes guardar parte del champú en una botellita y guardarla en
la ducha uno o dos días sin que se malogre.

Usa el champú en la medida de lo necesario. El

champú de aloe vera es lo suficientemente suave
para usarlo cada vez que te laves el cabello.
Siempre debes agitar la botella un poco antes de
usar el champú, ya que los ingredientes pueden
asentarse al fondo con el paso del tiempo. Vierte un
poco en la palma de la mano y masajéalo en tu
cabello y cuero cabelludo. Enjuágate por completo.