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ZAIDA ACOSTA VILLABONA

SEMINARIO ELECTIVO LA INVESTIGACIÓN DEL HECHO RELIGIOSO EN OCCIDENTE:


TENDENCIAS, MÉTODOS, ENFOQUES

1. Referencia bibliográfica. MARX, Karl y ENGELS, Friedrich. Sobre la religión. Salamanca,


Sígueme, 1979. Vol. 1, 457 pág.

2. Contexto de la obra

Esta obra es el primer volumen1 de una compilación que surgió ante la necesidad de
comprender el conjunto de la crítica a la religión que se deriva del pensamiento marxista
teniendo en cuenta que este no puede ser entendido como un bloque unificado, sino que
se deben distinguir las diferentes etapas que lo componen. De esta forma, en esta obra se
evidencia el proceso evolutivo del pensamiento marxista sobre la religión, desde sus
escritos de juventud que permiten leer a un Marx humanista que estuvo influenciado por
la obra de Hegel y Feuerbach hasta sus escritos de madurez en donde inauguró un periodo
científico en el cual desarrolló estudios económicos e históricos utilizando el método del
materialismo histórico.

En esta edición, publicada en 1979, se recogen los escritos de Marx y Engels sobre la
religión, no solo aquellos que hablan de forma directa sobre el tema sino también aquellos
en donde se aborda este sin ser nombrado. Su preparación estuvo a cargo del teólogo
brasilero Hugo Assmann y el filosofo español Reyes Mate.

3. Breve biografía del autor

Carlos Marx fue un filósofo, historiador, sociólogo, economista, escritor y pensador


socialista. Nació el 5 de mayo de 1818 en Tréveris, Alemania en una familia de origen judío
que posteriormente se convirtió al protestantismo por las presiones políticas del contexto
(Estado cristiano Prusiano). Se doctoró en 1841 en Jena con una tesis titulada “Diferencia
entre la filosofía de la naturaleza de Demócrito y la de Epicuro”. Posteriormente colaboró
en 1842 junto con Bruno Bauer (una de sus principales influencias) en la edición de la Gaceta
Renana (Rheinische Zeitung).

1
El segundo y tercer volúmenes recogen la obra de autores marxistas posteriores y teóricos marxistas
latinoamericanos destacados, respectivamente.
Tras la censura de sus escritos tuvo que exiliarse en París en donde fundó junto a Arnold
Ruge la revista Anales Franco- alemanes que poco después fue clausurada por las presiones
del gobierno prusiano. Fue en París en 1844 donde conoció a Federico Engels (1820), un
filósofo prusiano influenciado por el trabajo de Hegel y con quien desarrollo gran parte de
su obra que derivó en el desarrollo de la teoría marxista, la teoría del comunismo científico
y la filosofía del materialismo dialéctico e histórico2.

Dentro de su obra conjunta se destacan “La sagrada familia o critica de la crítica critica”, “el
Manifiesto del Partido Comunista” y “El Capital”.

4. Estructura del texto

Como se mencionó anteriormente esta obra está compuesta por una selección de escritos
realizados por Carlos Marx y Federico Engels que están relacionados con el desarrollo de la
crítica a la religión dentro de su pensamiento (si bien no existe un tratado único y especifico
donde se recoja la totalidad de su crítica), incluyendo no solo aquellos textos que abordan
el tema de forma directa sino también indirecta. En total la obra se divide en cuarenta y
siete apartados dentro de los cuales se destacan:

“Composición escrita sobre religión para el examen de madurez, 1835”, “Escritos


doctorales, 1839- 1842” “Contribución a la crítica de la filosofía del derecho de Hegel,
1844”, “Manuscritos económicos y filosóficos, 1844”, “La sagrada familia o critica de la
crítica de Bruno Bauer y Cía., 1844”, “La ideología alemana, 1845- 1846”, “La cuestión judía,
1844”, “El capital (extractos), 1863, 1866, 1867”, “Bruno Bauer y el cristianismo primitivo,
1882”, “Sobre la historia del cristianismo primitivo, 1894”, entre otros. Se debe mencionar
que en su mayoría se presentan extractos de los textos originales que permiten comprender
los momentos esenciales del marxismo indispensables para abordar el tema de la religión.
En líneas generales la crítica a la religión dentro del marxismo puede dividirse en los tres
periodos, ya clásicos, que evidencia la evolución de este pensamiento: critica filosófica,
crítica política y critica económica3. Dentro del primer periodo denominado critica filosófica
se ubican los “Escritos doctorales” en los cuales Marx aborda por primera vez la critica
religiosa. En estos escritos Marx plantea una disertación partiendo de la filosofía epicureista
en donde se realiza una critica a quienes piensan que el hombre tiene necesidad del cielo
encontrando que esta relación se origina en la necedad y superstición humana4. Epicuro
niega la inmortalidad del alma al determinar que esta al igual que el cuerpo está compuesta
por átomos, por lo que al momento de la muerte el alma llega a su fin, en este sentido
Epicuro dará especial importancia a la vida terrenal siento el objetivo de esta alcanzar la
ataraxia5.

En este periodo el pensamiento de Marx estuvo influenciado por las propuestas de


Feuerbach (de igual forma estuvo influenciado por Bauer) que se caracterizaron por su
oposición a Hegel al invertir la relación entre el espíritu absoluto y la autoconciencia del
hombre como su manifestación. Para Feuerbach, la autoconciencia del hombre no “es” al
ser manifestación de ese espíritu, sino que, por el contrario, es desde su autoconciencia que
el hombre crea el espíritu (Dios) como su proyección. De esta forma el hombre queda
determinado por la naturaleza y por la imposibilidad de aprehenderla, por lo que la religión
surge como una respuesta. Sin embargo, en la época moderna, la religión pierde legitimidad
ya que la ciencia y la técnica otorgan al hombre la posibilidad de dominar la naturaleza6.
La critica de Marx ira mas allá al cuestionarse acerca del ¿Por qué el hombre tiene la
necesidad de proyectarse a sí mismo en esa idea de Dios? La respuesta la encuentra en la
praxis social7, devolviendo la critica que Feuerbach realiza a Hegel en cuanto este busca la
respuesta no en las condiciones concretas del hombre, sino que continua aún en el plano
de lo abstracto planteando el concepto de la especie humana como sujeto absoluto de la
historia8.

En el segundo periodo Marx parte de la necesidad de llevar la crítica religiosa, que hasta el
momento se centraba en consideraciones abstractas, hacia el análisis de la conciencia
religiosa concreta9 por lo que plantea una relación entre religión y política expresada en la
dinámica entre el Estado y la religión, demostrando de que forma desde la política se hace
uso de la religión para alcanzar fines particulares.

3
MARX, Karl y ENGELS, Friedrich. Sobre la religión. Salamanca, Sígueme, 1979. Vol. 1, pág. 12.
4
Ibid., pág. 50.
5
Ibid., pág. 52.
6
Ibid., pág. 160.
7
Marx lo resuelve en desde las contradicciones existentes entre las fuerzas productivas y las relaciones de
producción.
8
Ibid., pág. 15.
9
Ibid., pág. 19.
Un primer elemento es el cuestionamiento que hace al concepto de la libertad de prensa y
la censura del Estado, específicamente del Estado Prusiano, encontrando una manipulación
de la libertad de prensa con el objetivo de acallar la crítica religiosa dentro del contexto de
un Estado que continuaba siendo tradicionalista y fundado en la religión10. Influenciado por
el pensamiento Ilustrado plantea la necesidad de una emancipación política real que acabe
con la confusión de un estado confesional11 mencionando la forma como la religión impide
dicha emancipación.

Un segundo elemento, se centra en explicar de que forma la religión impide la emancipación


política y más aún la misma emancipación humana (que para Marx es la emancipación real),
de acuerdo con Marx, la respuesta al cuestionamiento del porque el hombre se proyecta a
si mismo en la idea de Dios se debe buscar en las condiciones concretas del hombre, de
forma que la religión se convierte en la expresión de la deficiencia del hombre quien es
incapaz de realizarse en su propio ser, de su condición real12. La religión se convierte
además en una protesta por esa condición que es definida como de miseria, en este sentido,
el hombre que se enfrenta cotidianamente a dicha condición se expresa por medio de la
religión, pero más allá de llevarle a la acción la religión se convierte en una protesta que no
transciende en cuanto brinda al hombre una satisfacción y conformidad que le impiden
realizarse a través de su propia conciencia.

El tercer periodo se puede resumir en la critica al capitalismo y la forma como Marx la


vincula con la critica a la religión a través de un concepto central: el fetichismo de la
mercancía. Para Marx, quien evidencia la necesidad de analizar críticamente la religión
desde los contextos y condiciones concretas de cada época, el fetichismo de la mercancía
se presenta como la religión del capitalismo, demostrando de que forma la religión surge
siempre y cuando las relaciones en que vive el hombre se muestran opacas y no
controladas13.

5. Tesis planteadas

- La religión es producto de la autoconciencia del hombre quien tiene la necesidad de


proyectarse a si mismo en la idea de Dios ante la imposibilidad de aprehender desde
la totalidad de su conciencia las condiciones reales en las que se encuentra inmerso.
En este sentido la religión expresa esa disconformidad del hombre con su condición
que ha sido denominada como una condición de miseria.

10
Ibid., pág. 71.
11
Ibid., pág. 18- 19.
12
Ibid., pág. 23.
13
Ibid., pág. 30.
- La religión se convierte en una forma de protesta, es decir, hace que el hombre salga
de su indiferencia y resignación total ante dicha condición. Sin embargo, impide la
acción y la realización del hombre en si mismo al proporcionar un tipo de consuelo,
por lo que se trata de una protesta que reafirma la impotencia del hombre frente a
su situación, se convierte así en “el opio del pueblo”.

- La crítica de la religión no puede desarrollarse dentro del nivel de la abstracción,


sino que debe partir de los contextos y condiciones concretas de cada época, lo que
permite entender que la religión esta presente siempre que el hombre busque la
respuesta a su condición no en si mismo sino en mecanismo externos que
finalmente culminan con su alienación.

- Desde sus interpretaciones económicas Marx desarrolla el concepto de fetichismo


de la mercancía que es entendido a partir de la diferenciación entre el valor de uso
y el valor de intercambio, de acuerdo con esto, cuando la mercancía juega el papel
de equivalente de otra (su valor de intercambio) se enmascara la esencia del valor
real de la mercancía que es ser el producto de un trabajo social. Se trata de un
proceso de abstracción de la mercancía que culmina con la creación de un
equivalente general: la moneda. El fetichismo de la mercancía es considerado por
Marx como la religión que caracteriza la época capitalista en cuando se trata de un
proceso de abstracción que adquiere vida propia y termina alienando al hombre.

- La religión o lo religioso de la emancipación política es algo más profundo y consiste


en la separación inherente al estado burgués: la separación del hombre en
ciudadano y burgués, en miembro del estado social y parte de la sociedad burguesa.
En este punto Marx resalta de que forma el individuo no transciende como parte
real del Estado sino como un individuo privado, característica de la sociedad
burguesa.

6. Base de las fuentes empleadas

Teniendo en cuenta que esta obra es una compilación de los escritos sobre la religión de
Carlos Marx y Federico Engels que integra ensayos, correspondencia, criticas a autores,
extractos de las obras originales de lo autores, entre otros, se puede decir que la base de
las fuentes utilizadas se centra en los trabajos de aquellos autores que los influenciaron o a
los cuales realizaron criticas como Epicuro (entre otros filósofos de la antigüedad), Friedrich
Hegel, Ludwig Feuerbach, Bruno Bauer, Martin Lutero y Friedrich Daumer.

7. Posición del autor frente a la religión


Como se ha venido mencionando la crítica a la religión que se deriva del pensamiento
marxista a traviesa por una evolución que esta ligada, principalmente, al desarrollo de la
obra de Carlos Marx. En este sentido la posición frente a la religión surgida de este
pensamiento posee diferentes matices que pueden condensarse en tres momentos. En un
primer momento la posición que toma frente a la religión es producto del contexto (el
Estado cristiano de Prusia retrasado económica y políticamente respecto de Francia e
Inglaterra) en el cual se encuentra inmerso y se ve influenciado por autores como Feuerbach
y Bauer, así como por los ideales racionalistas y liberales de los Ilustrados. En este sentido
la religión es interpretada como producto de la autoconciencia del hombre, es decir como
una mera representación que parte de la naturaleza (y no a la inversa). Posteriormente y
dando continuidad a esta idea Marx va más allá y tras cuestionarse del porque de dicha
proyección del hombre en una idea de divinidad, interpreta la religión como un fenómeno
alienante que le impide al hombre realizarse en sí mismo ante su condición de miseria y
deficiencia. Finalmente, en su ultima etapa Marx concibe la religión como una conciencia
ilusoria que tiene como esencia la separación y le escisión14, precisamente porque impide
al hombre encontrarse en su propia conciencia separándolo de su propio ser. La religión en
este sentido es creada por el hombre y posteriormente se abstrae de este cobrando vida
propia como una forma mistificadora y falsa.

8. Conclusión

La religión de acuerdo con los planteamientos que se derivan del pensamiento marxista
impide la emancipación humana real en cuanto ofrece al hombre un estado de conformidad
que lo regresa a su condición de imposibilidad en la búsqueda de su propia conciencia. En
este sentido Marx propone un nivel que va mas allá de la emancipación política (separación
Estado- religión) y que culmina en la consolidación de un ateísmo materialista en donde la
eliminación de la religión permita al hombre encontrar las respuestas en sus condiciones
concretas y no en el plano de lo abstracto.

Marx trae la critica de la religión del plano de lo abstracto (teórico) al plano de la realidad
concreta (praxis) encontrando que la legitimación del discurso en la mera teoría lo convierte
en un discurso legitimador de intereses particulares. En este sentido, el Estado burgués en
donde se desarrolla una dialéctica entre religión y economía expresa la contradicción entre
lo teórico que corresponde con el discurso dominante y la praxis, que para Marx
corresponde con los intereses del proletariado como clase universal.

9. Comentarios

14
Ibid., pág. 34.
Esta obra brinda un recorrido por el pensamiento marxista sobre la religión y permite
comprender los diferentes momentos de su evolución. Se debe destacar el trabajo de Hugo
Assmann y Reyes Mate, quienes dan una guía para comprender un gran número de trabajos
que son resultado de diferentes contextos a lo largo de la vida de los autores y que en
consecuencia pueden llegar a ser contradictorios y de difícil comprensión. De igual forma
se debe resaltar que en esta edición que se incluyeron trabajos que sin hablar directamente
de la religión evidencian la posición de los autores sobre la misma.

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