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Leer

la Escuela
Evaluación de las condiciones de la institución
escolar para la formación de sujetos de la cultura escrita

Gloria Amparo Rodríguez Barreneche


Claudia Patricia Quintero Alvarado

Leer la Escuela 1
Universidad del Valle
Alcaldía Municipal de Santiago de Cali Instituto de Educación y Pedagogía
Secretaría de Educación Municipal G L O R I A C A S T R I L L Ó N C ASTRO
Subsecretaría de Planeación Sectorial Directora

A POLINAR S ALCEDO C AICEDO “P R O G R A M A DE MEJORAMIENTO


Alcalde de Cali DE LA C ALIDAD DE LA E DUCACIÓN
EN S ANTIAGO DE C ALI :
C ARLOS A LBERTO S AAVEDRA M ACÍA
Secretario de Educación Municipal H ACIA UN P ROYECTO
E DUCATIVO DE C IUDAD ”
L ILIANA V ICTORIA Z ULUAGA
Subsecretaria de Planeación Sectorial
S TELLA V ALENCIA T ABARES
L UZ D ARY E CHEVERRY S ERRATO Coordinadora del Programa
Subsecretaria de Desarrollo Pedagógico
G LORIA R ODRIGUEZ B ARRENECHE
Equipo Interventor Coordinadora del
Subsecretaría de Desarrollo Pedagógico Componente 2: Cualificación de
educadores en lenguaje
Licenciadas:
GLORIA AMPARO MARÍN Autoras
RUTH FANERY MOLINA G LORIA R ODRIGUEZ B ARRENECHE
MARIELA RODRÍGUEZ C LAU D I A Q U I N T E R O A LVARA D O
MARLENE RAMOS
Revisores de texto
AMPARO PINEDA M ARY K LEYNER M UÑOZ
G UILLERMO S ÁNCHEZ

Fotografía Portada
S TUDIO I MAGINING

ISBN:
958-670-473-4

Diseño y diagramación
E L B ANDO C REATIVO

Santiago de Cali - Colombia


Diciembre de 2005

2 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


Prefacio

L
a transformación institucional, promovida inicialmente por
la Ley General de Educación, Ley 115 de 1994, y más adelan-
te por la Ley de Participaciones, Ley 715 de 2001 -materiali-
zada en el Nuevo Programa Escolar- tuvo en la ciudad de
Santiago de Cali un impulso importante a partir de tres acciones
claves para su desarrollo: la construcción de los proyectos educati-
vos de las instituciones educativas recién conformadas, la constitu-
ción de los nuevos gobiernos escolares y la puesta en marcha de
planes de mejoramiento de la calidad de la educación en cada insti-
tución.
En el marco del ordenamiento jurídico y de las acciones menciona-
das, cuya antesala es la Constitución Política de 1991, la Secretaría de
Educación Municipal de Santiago de Cali decide que para el logro de
propósitos y metas relacionados con la cobertura, la calidad y la per-
manencia, y conforme a las exigencias del contexto mencionado, era
preciso emprender una serie de acciones cuya expresión tenía que ser
evidente en el corto, mediano y largo plazos. Para el efecto, en el Plan
de Acción 2003-2004 se propuso desarrollar el Programa de Mejora-
miento de la Calidad de la Educación “Hacia un proyecto educativo de
ciudad” a través de un Contrato Interadministrativo con el Instituto de
Educación y Pedagogía de la Universidad del Valle.
Este Programa contempló cinco componentes básicos de trabajo:
1. Evaluación de la calidad educativa, Pruebas Censales en Lengua-
je y Matemáticas.

Leer la Escuela 3
2. Formación de educadores en Lenguaje y Matemáticas.
3. El Maestro en la ciudad: formación de educadores para un pro-
yecto de ciudad.
4. Mejoramiento de la calidad educativa mediante un Sistema de
Educación Media Técnica.
5. Fomento de una cultura de la ciencia y la tecnología.
Cada uno de estos componentes ejecutó acciones que dan con-
tinuidad a los esfuerzos emprendidos por la Secretaría de Educa-
ción en vigencias anteriores, mediante una Reforma Educativa que
en esta ciudad hemos logrado avanzar tratando de garantizar una
relación sustantiva con el Plan Decenal de Educación 2004-2014
“Hacia un proyecto educativo de ciudad”, cuya formulación se ini-
ció teniendo en cuenta, en parte, muchos de los problemas y prio-
ridades que antecedieron al Programa de Mejoramiento de la Cali-
dad de la Educación.
Las cartillas que ponemos a disposición de las comunidades
educativas de la ciudad de Santiago de Cali, son justamente resul-
tado de este esfuerzo institucional entre la Alcaldía y la Universi-
dad del Valle. Las publicaciones elaboradas en cada uno de los
subproyectos o componentes del Programa mencionado constitu-
yen, conjuntamente con sus otros resultados, indicadores impor-
tantes del quehacer educativo de nuestra querida ciudad, tanto en
la zona urbana como en la rural. Sin lugar a dudas, estas produc-
ciones recogen apartes del proceso de estudio, reflexión e inter-
vención adelantado por nuestros maestros participantes en los di-
ferentes componentes del Programa, con la acertada orientación
de los coordinadores académicos y del equipo de profesores del
Instituto de Educación y Pedagogía de la Universidad del Valle que
tuvieron a su cargo esta responsabilidad.
No sobra reiterar que sólo en la medida en que hagamos esfuer-
zos por garantizar la continuidad en las acciones, lograremos con-
tribuir efectivamente al fortalecimiento de la capacidad de nues-
tras Instituciones Educativas, que fue el objetivo general del “Pro-
grama de Mejoramiento de la Calidad de la Educación: Hacia un
proyecto educativo de ciudad”. Capacidad institucional que ten-
drá que expresarse en términos de su desarrollo pedagógico, de su
permanente relación con el contexto socio-político y cultural, y
del reconocimiento de nuestras características psicosociales y

4 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


multiculturales, lo que redundaría en la calidad y pertinencia del
quehacer educativo del municipio de Santiago de Cali.
Justamente, por su contribución a los desarrollos mencionados,
el Instituto de Educación y Pedagogía de la Universidad del Valle
merece un agradecimiento, puesto que desde el ángulo académico
su aporte ha sido muy valioso.
Para finalizar, de parte de la Alcaldía de Santiago de Cali y la
Secretaría de Educación Municipal, es muy significativo entregar a
las comunidades educativas estas cartillas, que esperamos sirvan
de inspiración y guía de futuros trabajos que pretendan incidir en la
calidad de la Educación en nuestra ciudad.

CARLOS ALBERTO SAAVEDRA M ACÍA


SECRETARIO DE EDUCACIÓN
DE SANTIAGO DE CALI

Leer la Escuela 5
Contenido
Presentación ......................................................................................... 9
Planeación Vs. Prácticas de aula ....................................................... 15
¿Qué textos están llevando los maestros al aula? ............................ 22
El área de lenguaje y el trabajo en valores ....................................... 24
¿Cómo se entienden el leer y el escribir? .......................................... 27
¿Literatura o diversidad textual? ....................................................... 29
Otros criterios para llevar textos al aula .......................................... 31
La lectura y la escritura... propuestas desarticuladas ...................... 33
¿Procesos o contenidos? ................................................................... 35

Biblioteca escolar ............................................................................... 37


En el universo del bibliobanco y
las fusiones... “tenemos bibliotecas” .................................................. 39
Sujeto, espacio y tiempo de las bibliotecas escolares .................... 42
Usos e ideas de biblioteca y de biblioteca escolar hoy .................. 45
El préstamo y los usos significativos de los documentos ................ 49

Nuevas tecnologías de la información y la comunicación ................. 57


Textos -manuscritos, impresos y virtuales-:
su creación y lectura cambia ............................................................... 58
Ni el computador ni el lápiz son la llave de la alfabetización ......... 61

6 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


¿Hay computadores en su institución educativa? ............................. 65
Computador e Internet, ¿para cuántos, quiénes, dónde...? ............. 66
Maestros y directivos: ¿cómo es su relación con las Ntics? ............ 68
Formación en lengua escrita: propuestas
con las nuevas tecnologías ................................................................ 70
¿Qué ocurre con el televisor y
otras tecnologías audiovisuales? ....................................................... 71
Un apunte final: esclarecer lo inútil y generar sospechas ................ 73

Miradas externas, el caso de las Pruebas Censales ........................... 75


Una lectura de “Frida” en la Prueba Censal ...................................... 81
Intratextual ..................................................................................... 81
Intertextual ..................................................................................... 84
Extratextual .................................................................................... 86
“Los niveles” en discusión ................................................................. 88

Anexo .................................................................................................. 95
Bibliografía ......................................................................................... 99

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8 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad
Presentación

E
n principio, esta publicación sobre la evaluación de la cali-
dad educativa en el área de lenguaje iba a retomar la línea
que el Ministerio de Educación Nacional da al tema, cuyo
centro son las Pruebas Saber, comúnmente llamadas censales;
para nuestro caso, la más reciente, aplicada en marzo de 2002 a
todos los niños y jóvenes que en ese momento cursaban quinto y
noveno grado.
No obstante, una serie de consideraciones reorientaron un poco
la idea inicial y siguiendo la nueva ruta llegamos a lo que estamos
presentando ahora: una propuesta para abordar la evaluación de la
calidad educativa en lenguaje. Esta fue expuesta a los directivos
docentes y maestros participantes en el “Programa de mejoramien-
to de la calidad educativa en el municipio de Santiago de Cali:
Hacia un proyecto educativo de ciudad”; con ellos también se dis-
cutió.
Para empezar, en esta propuesta los límites del área de lenguaje
llegan hasta la formación en lectura y escritura. Dejamos pues, por
fuera, a la oralidad, a otros sistemas simbólicos y demás ejes curricu-
lares que puedan regir el trabajo escolar en lenguaje. Cabe anotar, no
obstante, que al achicar el campo de mira de todos modos tampoco
nos alejamos mucho de la perspectiva del MEN, que, como indica-
mos en el capítulo dedicado a miradas externas, con la Prueba Censal
no abarca todo. Consideramos sensato y honesto explicitar el achi-
que, reconocer la complejidad de los fenómenos que se pretenden
evaluar e intentar caminos que conduzcan a parcelas delimitadas mien-
tras ideamos formas de asumir el todo.

Leer la Escuela 9
Estructuramos dicha evaluación de la calidad a partir de una
pregunta ¿cuáles son las condiciones de la institución escolar
para formar sujetos de la cultura escrita? Pensamos que de eso
se trata, de condiciones de calidad, de oportunidades de apren-
dizaje a la altura de lo que en este momento la comunidad aca-
démica y la ley determinan como deseable y válido. Nos acoge-
mos a la premisa que liga calidad a procesos y no tanto a resul-
tados, y es justo allí donde no coincidimos del todo con la cen-
tralidad otorgada a las pruebas masivas. Las condiciones que la
escuela ofrece para conseguir los resultados que luego se eva-
lúan con las pruebas, por lo general se piensan como factores
asociados, en nuestro modo de ver las cosas, son justamente esos
factores los que pueden dar luces para los planes de mejoramiento
en los cuales están cifradas tantas esperanzas. Claro que no esta-
mos hablando de todos los factores asociados, de nuevo juega
la delimitación del campo de observación: nos interesan aquellos
que dependen directamente de la escuela.
Los planes de área, las prácticas de aula, la biblioteca escolar, las nuevas
tecnologías y la interacción de la institución educativa con la ciudad1, más las
mismas evaluaciones masivas (un elemento del conjunto de “miradas
externas”), son los 6 focos de nuestra propuesta de evaluación de
las condiciones de la institución educativa para formar sujetos
que lean y escriban.
Este libro busca exponer la idea, pero no en abstracto, sino
retomando las voces de los maestros y directivos de las institucio-
nes que participaron en los componentes de cualificación y calidad
en lenguaje del programa antes mencionado, cuyo nombre resumido
terminó siendo Proyecto de ciudad. Nos tomó dos años de trabajo,
directo con ellos, el 2004, y medio más, dedicado a revisar los escri-
tos que nos legaron. Llegar a esta orilla supuso de alguna manera
atravesar el desierto de la incertidumbre dada por ese extenso y a
veces inescrutable espacio de la realidad escolar, sin el concurso
de los maestros y directivos no lo habríamos logrado, de verdad
que muchas gracias, esperamos que se reconozcan en las voces que
aquí consignamos.

1. Al foco de “la interacción de la institución educativa con la ciudad” no se le da


desarrollo en este libro.

10 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


Explicamos 5 focos, como decíamos, con el apoyo de las voces
autorizadas de quienes habitan la cotidianidad escolar y en paralelo
con el respectivo soporte teórico que procuramos dar a cada ele-
mento. El ejercicio de leer la escuela en los focos mencionados, (los
cuales pretenden develar condiciones para formar sujetos de la cul-
tura escrita) nos condujo a la construcción de algunas imágenes de
las instituciones escolares de las que teníamos información. Pero,
este reflejo de la realidad no es lo que da sentido al libro. Queremos
ser sumamente enfáticas en esto: no interesan tanto las conclusiones
a las que llegamos sobre los objetos de observación de cada foco,
sino los objetos mismos de observación, porque se trata de sugerir
“sospechas” de aspectos problemáticos que deberían tenerse en
cuenta en las evaluaciones institucionales.
Las interpretaciones que hacemos de las afirmaciones de los do-
centes, coordinadores y rectores, son eso, interpretaciones, intenta-
mos ser muy cuidadosas en ellas y justificarlas todas, pero anticipamos
desacuerdos, es normal que ocurra; sin embargo, independientemente
de todas las discusiones que se susciten (¡que ojalá se susciten!) reite-
ramos que este libro responde por aquello a lo que se compromete:
sentar un punto de vista, documentado y respaldado conceptualmen-
te, acerca de la evaluación de la calidad en lenguaje -escrito-, de modo
tal que pueda ser utilizado para orientar procesos en cada institución
en los que el propósito sea leerse a sí misma (o autoevaluarse).
Hablemos de la información con la que trabajamos. Algunos datos
fueron recabados durante el desarrollo del Proyecto de ciudad y en su
momento se revisó en los grupos 2 , es el caso de los datos sobre
propuestas de aula y el punto sobre la relación personal de maestros
y directivos con las nuevas tecnologías. Otros datos corresponden a
una suerte de trabajo final del Proyecto de ciudad que consistió en un
ejercicio de auto-evaluación institucional. Los instrumentos con los
que se recogieron los datos tienen unas características determinadas
por las circunstancias en las que se dio su creación, a posteriori, al
darnos cuenta de la riqueza de la información con la que contába-
mos, decidimos aprovechar esos registros que en principio habían

2. El “componente dos, de cualificación de maestros en lenguaje”, estuvo conformado


por 4 grupos, y estaba el “componente uno, de evaluación de la calidad en lenguaje”
reunió 6 grupos (dirigido en principio a directivos docentes pero al que terminaron
asistiendo muchos maestros). Todos los grupos tenían casi 30 personas.

Leer la Escuela 11
sido diseñados para ser usados en una interacción oral (de clase, al
interior de unos grupos reducidos) y no escrita como esta (de carác-
ter publicable, dirigida a un grupo abierto de lectores). De hecho,
una de las tareas que se desprende de este primer intento de abordar
la evaluación institucional de lenguaje, desde la perspectiva adopta-
da aquí, es la de refinar dichos instrumentos.
Verán que hemos establecido una convención para cubrir la identi-
dad de las personas e instituciones que amablemente prestaron sus
observaciones y sus puntos de vista. La convención corresponde a un
número con el cual internamente identificamos la institución3 a la
que nos referimos cada vez que un registro le concierne. El argumen-
to que sostiene esta actitud es el indicado antes: las conclusiones
acerca de la realidad -en general, o de X o Y institución, o individuo-
no son importantes, son un pretexto para identificar los matices de
cada foco de atención.
Los capítulos no tienen esquemas ni extensión iguales porque cada
foco, debido a su naturaleza y a los datos de los que disponíamos,
requería de un desarrollo temático particular. Encontrarán también
que el primer capítulo recoge simultáneamente dos focos: planeación
y prácticas de aula, por razones que ahí se explican. No sobra advertir
que en general los capítulos reiteran algunos planteamientos porque, a
pesar de la unidad que conforma el libro, quisimos facilitar su lectura
por partes4. Era inevitable además, terminar en puntos coincidentes en
el recorrido por distintos focos, es el caso, por ejemplo, de la noción
de diversidad de textos, al que se llega tanto en la revisión de prácticas
de aula, como de biblioteca.
El libro fue concebido por el trío que orientó el trabajo de lenguaje
del “proyecto de ciudad”, pero finalmente, por los azares de la vida, nuestra
compañera, la profesora Mary Kleyner Muñoz, no comparte autoría y,
sin embargo, su aporte fue fundamental a lo largo de todo el proceso
de escritura. Igualmente queremos agradecer a otra gran amiga, maes-
tra de la escuela rural de Pavitas (jurisdicción de La Cumbre-Yumbo),

3. Para hacerse una idea del contexto, téngase en cuenta que las instituciones
escolares públicas en Cali suman a la fecha 90 (o 91, según se muevan los acuerdos
sobre las Fusiones) y nuestros datos en algunos casos corresponden a 46 y en otros
a 65 instituciones. El número asignado para identificar cada institución es arbitrario,
los tres dígitos de la convención no tienen que ver con su cantidad.
4. Esa lectura por capítulos es también la razón de haber optado por una enumeración
de pies de página independiente en cada uno.

12 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


Angela María Romero, quien escribió la base del apartado sobre los
“Niveles de logro” de la prueba censal (incorporado al capítulo final).
Ahora bien, la reflexión elaborada en este libro está fundamentada
en una concepción de la didáctica de la lengua escrita que se plantea
las prácticas sociales de lectura y escritura como objeto de enseñan-
za5 , lo cual acarrea preocupación por la distancia que puede darse
entre los usos de lo escrito en la escuela y los usos por fuera de ella.
Ubicarse en esta perspectiva teórica implica asumir puntos claros de
referencia en el tema de la calidad educativa en materia de la interpre-
tación y la producción de textos, lo que supone un horizonte que
orienta la marcha de la escuela hacia su transformación.
Pero el cambio no depende de voluntarismos, los individuos aisla-
dos con su corta capacidad de acción son muy débiles frente a la
tradición. Hay hilos fundamentales que puede mover un maestro (y la
capacitación docente de alguna manera es capaz de influir en ello),
pero hay otros entramados que no dependen de un maestro, son
institucionales. De manera que es menester que la escuela se mire,
que capte las fortalezas que tiene, las contradicciones en las que
incurre, sus vacíos y las carencias en la coordinación de su accionar.
Es decir, de los desarrollos de la didáctica pueden tomarse elemen-
tos que respaldan la necesidad los procesos de auto-evaluación ins-
titucional.
Precisemos desde otro ángulo el nexo entre didáctica y una
aproximación institucional al problema de enseñar a leer y a escri-
bir. Si nos preguntamos por el espacio que abarca el triángulo di-
dáctico cuando sus tres puntas están ocupadas por un educador
(lector experto), un estudiante (lector aprendiz) y una práctica so-
cial de lectura (de un texto), hallamos que el triángulo no se reduce
al aula de clase, y más todavía, se hacen visibles otros espacios
como la biblioteca escolar y el aula de informática. En otras pala-
bras, dado que el centro mismo de la misión alfabetizadora en la
escuela son las condiciones en que cotidianamente circulan los
textos, (las diversas mediaciones entre éstos y los estudiantes) no

5. La base conceptual de los planteamientos que se resumen a continuación se


tomaron de: Rodríguez Gloria A., “Una pregunta para la formación de maestros:
¿en lectura y escritura, qué espacio abarca el triángulo didáctico?”, texto presentado
al claustro de profesores del Instituto de Educación y Pedagogía de la Universidad
del Valle, Cali, noviembre de 2004.

Leer la Escuela 13
podemos ignorar todos esos espacios en los cuales esto ocurre,
porque allí está presente el triángulo didáctico.
Ateniéndonos a lo que se acaba de decir, suena extraño que se
incluya a los planes de área entre los factores que habría que atender,
podría objetarse que allí no hay un encuentro educador-texto-estu-
diante y que por tanto no es un problema didáctico. Sin embargo, sí
lo es. Para explicar esta respuesta debe aceptarse que “Diseñar, pro-
tagonizar o relatar una experiencia de aula no es hacer didáctica, “no
son los hechos en bruto” lo que interesa, “sino los hechos ya interpre-
tados por los participantes de la actividad”6, porque la meta es com-
prender la interacción identificando las concepciones -espontáneas
o no- que les dan sentido”. Y es precisamente esa intención explícita
que se plasma en los planes de área en donde pueden residir elemen-
tos claves de la interpretación que se busca respecto a la actividad
de mediar entre texto y estudiantes.
¿Qué consecuencias conlleva para los procesos de auto-evalua-
ción ignorar los planes de área? Ni más ni menos que renunciar a la
revisión de un elemento esencial en el acumulado experiencial de la
institución. Si se reconoce que el tema de la transformación institu-
cional no es asunto de voluntarismos de sujetos aislados, hay que
propender por trascender los aportes a personas para institucionalizar
las novedades y que lo escrito sea útil para la continuidad, coordina-
ción y crítica de las iniciativas. Dejar de lado este tipo de documen-
tos es aceptar que su escritura sea meramente formal, que no haya
ningún esfuerzo por usar los papeles oficiales en pro del diseño de los
planes de mejoramiento de la calidad educativa.
Intuimos que es conveniente no ir mucho más lejos de este renglón
y dar paso a que decidan ojear algún capítulo, o quizás ya lo hicieron
y ahora están reconsiderándolo a partir de esta presentación ¡nunca
se sabe! ¡pretender gobernar las rutas del lector!... ¡qué vano! ¿Igual
ocurrirá en la tarea de autoevaluar su institución educativa? ¿Será una
bobería aspirar a sugerir un modo de leer la escuela?

GLORIA RODRÍGUEZ Y CLAUDIA P. QUINTERO

6. Camps, Anna. Objetos, modalidades y ámbitos de la investigación en didáctica


de la lengua, en revista Lenguaje No. 32, Universidad del Valle, noviembre de 2004.

14 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


Planes de estudio
Vs.
Prácticas de aula

CLAUDIA PATRICIA QUINTERO A.

Leer la Escuela 15
C
uando decidimos pensar en las con- gustosa a otros visitantes. Conscientes de eso,
diciones que hay en las escuelas pú- apostamos por un programa de cualificación do-
blicas de Cali y que afectan ya sea cente que en su primera fase reflexionará sobre
positiva o negativamente la formación la importancia de retroalimentar nuestro hacer
de lectores y productores de textos, lo primero en el aula con la mirada del par; o como lo deci-
que consideramos fue analizar el aula de clase. mos coloquialmente, de acuerdo con las obser-
El aula no como espacio físico, sino en térmi- vaciones del “colega”. Para esto, continuamente
nos de las interacciones entre el maestro (el nos expusimos como lectores, como escritores
sujeto que enseña), los estudiantes (los sujetos y también como maestros. Uno de estos ejerci-
que aprenden) y el objeto de conocimiento. cios nos permitirá hablar de lo que son y/o de-
Evaluar realmente cuál es el estado de la berían ser algunas de las condiciones en el aula
lectura y la escritura en las instituciones edu- para formar lectores y productores autónomos
cativas a partir de este foco de las prácticas de textos (aunque tangencialmente, dadas las
de aula, implicaría un trabajo de campo. La- salvedades anotadas). Analizaremos reflejos de
mentablemente no tuvimos la posibilidad de la interacción maestro-estudiante-texto/discur-
hacerles seguimiento y registro; todavía los so2; el triángulo didáctico, centro del área de
programas de cualificación docente1 distan de Lengua Materna o Lengua Castellana, con la in-
ello. Además, están las prevenciones de los tención de plantear interrogantes que puedan
mismos maestros a ser observados, porque ser integrados a las autoevaluaciones institucio-
mantienen vivo el paradigma de la evaluación– nales de la calidad de la educación.
sanción, actitud legitimada en parte en los úl- Ahora bien, preguntémonos ¿en qué docu-
timos tiempos por algunas de las evaluacio- mentos propios de la escuela, se develan o de-
nes que a nombre de la calidad educativa se berían develar los propósitos de los maestros
hacen y que terminan por señalar al maestro cuando entran al aula? En verdad son muchos,
como causante del poco desarrollo de pro- las tortuosas planillas evaluativas, los famosos
puestas educativas innovadoras. planeadores, los desterrados parceladores, los
No es de extrañar pues que el aula de clase agotadores cuadernos de los estudiantes, los
siga siendo un sitio inexplorado, sólo habitado descontextualizados planes de área, los planes
por estudiantes y maestros y que rara vez admite de estudio, etc. Pero en concreto, y ya que nos

1. Este trabajo se inscribe en el “Programa de Mejoramiento de la Calidad Educativa en el municipio de Santiago de


Cali: Hacia un proyecto educativo de ciudad” -coloquialmente, “proyecto de ciudad”-. Fue auspiciado por la Secretaría
de Educación Municipal y lo llevó a cabo el Instituto de Educación y Pedagogía de la Universidad del Valle, en el año
2004.
2. “Desde una pedagogía del texto y del discurso, un objeto de trabajo pedagógico será el texto, unidad básica de
significado, entendido como un entramado de unidades lingüísticas organizadas según las reglas del sistema de la
lengua y que responden a una intención de comunicación o de significación... El otro objeto básico del trabajo
pedagógico en producción escrita sería el discurso como unidad de sentido, el discurso entendido como un texto que
está situado en un contexto comunicativo”. Tomado de Pérez Abril Mauricio, “Hacia una Pedagogía del Discurso:
Elementos para Pensar la Competencia Argumentativa en los Procesos de Escritura en la Educación Básica”; en
Bogoya y otros, “Competencias y Proyecto Pedagógico”. Universidad Nacional de Colombia. Bogotá. 2000. Pág. 108.

16 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


interesa la mirada específica de los maestros y Esperábamos que estos interrogantes
maestras del área de lenguaje, creímos y cree- fueran sólo un abrebocas para hacer surgir
mos que el documento que más luces podría otro sin número de preguntas que permi-
dar sobre estos propósitos sería el plan de es- tieran ahondar en la reflexión sobre calidad
tudios del área de lenguaje, que lógicamente educativa de todo el programa y fuesen un
hace parte del plan de estudios de una institu- punto de partida en la escritura del docu-
ción. Fue por esto que consideramos que éste mento que se les propuso como trabajo fi-
debería ser otro de los focos de análisis a tener nal a los participantes de los componentes
en cuenta. de lenguaje (la autoevaluación institucional
¿Qué preguntas podríamos sugerir a los del área). Sin embargo, en la mayoría y en el
maestros para revisar los planes de área de mejor de los casos, las preguntas no fueron
las instituciones escolares donde laboran, en una guía sino un deber-ser (o un deber-ver)
la mira de formar personas que lean y escri- en otros ni siquiera se tuvieron en cuenta.
ban? Insinuamos algunas: Tal vez, y como se afirma en uno de los tan-
• ¿Existe un plan de estudios del área en la tos documentos oficiales 3 con los que se nos
institución? ha saturado, porque: “en muchos establecimientos
• ¿Cómo fue elaborado? el componente pedagógico y curricular es el menos de-
• ¿Quiénes lo hicieron? sarrollado. Lo anterior se explica porque la elaboración
• ¿Reconoce el contexto? ¿Parte de un diag- de los currículos es una actividad que requiere conoci-
nóstico? (¿quiénes son los estudiantes, qué mientos y competencias específicas y no todo el magis-
estamos haciendo, qué queremos hacer?). terio ha sido formado para ello”4 .
• ¿Cuál es la concepción de lenguaje, de lec- Lo anterior, probablemente, es una de las
tura y escritura, que subyace al plan de razones por las cuales no encontramos toda
área? la información esperada en relación con el
• ¿Se tienen en cuenta los Lineamientos Cu- foco de los planes de área, estas escrituras
rriculares elaborados por el MEN para esta del ámbito escolar reflejan que en los pro-
área? ¿Se mencionan como parte de la bi- cesos de construcción del currículo persis-
bliografía? te una tendencia a marginar a los docentes
• ¿Recoge el consenso de la comunidad edu- y que termina impidiéndoles mirarse en lo
cativa? ¿Existe un plan de área unificado? que escriben.
Si existe, entonces ¿Qué dice lo anterior Ha sido muy difícil, por tanto, cuantificar la
sobre el estado del área en su institución? información. Pero además uno de los motivos

3. Nos referimos a los documentos que en los últimos años han sido emitidos por el MEN como los Lineamientos,
Indicadores de logros curriculares, fundamentaciones sobre las pruebas de estado, la “serie guías”, los decretos,
resoluciones, etc., que al ser escritos por diferentes grupos de académicos no unifican el lenguaje y por esto no
aclaran cuál es el norte a seguir.
4. Ministerio de Educación Nacional de Colombia. Lineamientos Curriculares Lengua Castellana, Áreas obligatorias
y fundamentales. Bogotá, Editorial Magisterio. 1998. pág. 18.

Leer la Escuela 17
principales de la dificultad es que al proponer que aprende; todo lo contrario, somos parti-
el foco sobre planeación, la expresión utiliza- darias de que en la escuela, como lo dice una
da dio pie a confusión y algunos maestros de- máxima del ámbito escolar hay que planear muy
sarrollaron este punto en relación con planes bien para improvisar muy bien.
de estudio y no de área de lenguaje, que era en Precisamente, ese planear muy bien implica de-
el que estábamos pensando. La información finir un norte, ante todo unos propósitos determi-
disponible, por ende, es general y ambigua. nados consistentes con concepciones sobre lectu-
No obstante, como en el lenguaje significa tan- ra y escritura, texto y sujeto desde los cuales se
to lo que se dice como lo que no se dice, no pretende orientar la praxis de enseñanza–aprendi-
pudimos dejar pasar de largo muchos de los zaje. Un norte que, se supone, se concreta en los
interrogantes que nos nacieron a medida que documentos que el maestro escribe y que circulan
leíamos las evaluaciones presentadas por los en la escuela. Nos preguntamos por esa relación de
maestros y directivos. las prácticas y la planeación y allí construimos la
Teniendo en cuenta lo sucedido, decidimos oposición que da origen al título de este capítulo.
correlacionar Planeación y Prácticas de Aula. Así que sin más preámbulos empecemos.
Enfrentar los dos focos fue una alternativa que Al inicio del “Proyecto de ciudad” los par-
surgió al comparar lo que los maestros habían ticipantes en el componente de cualificación
afirmado, que no es más que el eco de un se- docente presentaron propuestas de lectura o
creto que circula a voces: una cosa es lo que escritura, y retomando esta actividad, y con-
aparece escrito en los planes de área o de trastándola -cuando se podía- con la planea-
estudio y otra, muy distinta, sus prácticas; ción institucional5 , es que pretendemos plan-
como siempre, del dicho al hecho hay mucho trecho. tear algunas cuestiones en torno a la manera
Pensar la evaluación de las instituciones es- como los maestros interactúan en el aula de
colares en función de “planeación vs. práctica” clase con los estudiantes y con los textos, ese
nos puso sobre el rastro de las ideas que a extraño y oscuro objeto del deseo. Las pro-
continuación desarrollaremos. Aunque sabe- puestas de lectura y escritura fueron grupales,
mos de antemano que si vamos a hablar del en total, sumando todos los maestros partici-
cruce de las interacciones entre maestro-estu- pantes del programa6, se formaron 23 grupos
diante-texto, es imposible pretender que lo de a cuatro a seis miembros. Presentamos el
planeado corresponda a lo ejecutado. De ser registro del colectivo denominado “A”7 :
así, tendríamos a un maestro incapaz de tener “Se les había solicitado a los maestros, para
en cuenta las necesidades y la voz del sujeto una de las primeras jornadas, que llevaran un

5. Los datos sobre planeación son los que presentaron tanto maestros como directivos en las 46 autoevaluaciones
de sus instituciones. Estos trabajos hicieron parte de los dos componentes de lenguaje del “proyecto de ciudad”: el
uno (evaluación de la calidad educativa) y el dos (cualificación docente).
6. La referencia aquí al "Programa" corresponde al componente de cualificación docente en lenguaje del “Proyecto
de ciudad”, en el cual participaron cerca de 120 maestros que hacen parte de 65 instituciones públicas educativas de
Cali. Los 120 maestros se distribuyeron en 4 colectivos de 30 personas cada uno: A, B, C y D.
7.Tomado del informe del colectivo A presentado a la coordinación del Proyecto.

18 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


texto que hubiesen abordado con sus estu- colectivo. A continuación presentamos un cua-
diantes o que lo pensaran hacer en un futuro dro que recoge el trabajo de cada uno de los
próximo. Se dividieron por grupos de cuatro grupos”.
personas y allí cada uno leía su texto y explica- Es importante aclarar que el cuadro que se
ba a sus compañeros por qué razón lo había presenta a continuación es una sistematización
escogido. Después, el grupo tenía que ponerse que hemos realizado quienes orientamos el
de acuerdo, escoger un sólo texto y desarrollar programa, ya que inicialmente las secuencias
la siguiente consigna: se plasmaron sin ningún tipo de división en
Elabore una secuencia didáctica con el tex- hojas grandes de papel Kraft. Eran apuntes
to escogido y para un grado específico, a par- donde cada “actividad”, tanto de lectura
tir del cual cualifique los procesos de lectura como de escritura, se separaba por guiones o
y/o de escritura de sus estudiantes. marcadores ordinales. La categorización en
En seguida se hizo la plenaria, cada grupo textos, criterios para la selección, propuestas
presentaba el texto escogido, explicaba las ra- de lectura, producción textual y preguntas para
zones por las cuales había sido seleccionado y evaluar la comprensión del texto, es a
presentaba la secuencia realizada al resto del posteriori del ejercicio de clase.

Cuadro No. 1
Preguntas para
Criterios de Propuestas Producción
Texto evaluar la comprensión
selección de lectura textual
del texto

Para Transición
“Los músicos de • A través del cuento • Anticipación. (lectura • Reconstrucción • ¿Cómo se llama el cuento?
Bremen” el niño logra estimu- de imágenes. Portada oral del cuento • ¿Por qué estaba aburrido el bu-
(Edición de lar su fantasía, crear del cuento) por parte de los rro?
Panamericana) imágenes vivenciar • Lectura oral niños. • ¿A quién se encontró el burro?
el cuento, y desarro- • Lectura interpretativa • Realización del • ¿Qué estaba haciendo el burro?
llar su capacidad de de imágenes de ma- dibujo y trascrip- • ¿Por qué estaba triste el gallo?
creación. El cuento nera simultánea a la ción det e x t o s • ¿Dónde estaban el perro y el
se busca como me- oral cortos. gato?
canismo de apoyo • Diálogos sobre suce- • Contar en casa • ¿Por qué decidieron entrar a la
didáctico de acuerdo sos y personajes. el cuento y los casa de los ladrones?
a las necesidades de • Presentación de lámi- padres lo escri- • ¿Cuál es la enseñanza del cuen-
los estudiantes. nas con la secuencia ben . to?
Para favorecer el del cuento. • ¿Si tu fueras el burro ayudarías al
proceso de conviven- • Confrontación de ap- gallo?
cia se trabajan textos titudes de los perso- • ¿Si tienes que ayudar algún ami-
enfocadosenvalores, najes del cuento. go, lo harías?
por ello escogimos (Comparación del • ¿Qué harías por un amigo?
este texto. A partir de texto con la realidad)
él se proponen activi- • Leer el cuento de los
dadesquegenerenre- compañeros.
flexión y cambio de
comportamientos
propiosdelaedad.
Continúa

Leer la Escuela 19
Viene

Preguntas para
Criterios de Propuestas Producción
Texto evaluar la comprensión
selección de lectura textual
del texto

Para Primero
“Mi mamá” • Por ser una lectura • Visualización del tex- •Hacer un dibujo • Cuáles palabras terminan en:
de Gabriela Mistral corta. to (mirar el dibujo que ma, na, is ,da, es, an.
• Por poseer un len- acompaña al texto). • ¿Cómo se llama la mamá del
guaje apropiado • Exploración de imá- niño?
para el niño. genes del texto. • Al frente de cada afirmación es-
• Por estar en capaci- • Lectura individual cribo si, o no, de acuerdo con la
dad de leerlo (de • Preguntas acerca del lectura de “Mi mamá".
acuerdo a las letras texto. • A la mamá de Ema le dicen
que han trabajado). • Diálogo acerca de la Mema___
• Porque permite mamá. • La mami de Luis hace pastel de
trabajar valores. • Diálogo en torno a los coco___
Valores de la mamá • La mami de Inés cuenta cuentos
(respeto, considera- al revés___
ción, obediencia y • La mami de Julián le gusta el
amor). pan___
• Guillermina ama a Mema___

Para Segundo
“El pastorcito • Porque muestra • Realizar preguntas a • Con la colabora- • ¿Cómo se llama la historia?
mentiroso” una problemática los estudiantes sobre ción de los pa- • ¿Qué personajes intervienen en
(Cuento) que se vive a diario lo que entienden de la dres elaborar ellas?
en nuestra aula y palabra honestidad. una cartelera • ¿Qué valor resalta esta historia?
además es fácil de • Las respuestas ante- donde se resalte • ¿Qué le sucedió al personaje por
leer. riores se escriben en este valor y se decir mentiras?
el tablero y entre to- haga una compa- • ¿Qué enseñanza nos deja la his-
dos se define el signi- ración opuesta al toria?
ficado. valor de la hones- • Escribe en qué momentos te has
• Lectura individual del tidad. comportado como el pastorcito
texto. mentiroso.
• Lectura dirigida por los
docentes con la parti-
cipación de los estu-
diantes.

Para Cuarto y Quinto


“La noche del • Fue escogida por- • Presentación del texto • Finalmente cada • ¿Otro título para este texto?
Titanic” que es una historia a los estudiantes. estudiante escri- • ¿Dónde ocurrieron los hechos?
(Texto expositivo) que promueve en el • Cada estudiante lee un be su resumen y • ¿Cuándo ocurrieron los hechos
estudiante muchas párrafo, expresa sus lo complementa • ¿Cuáles son los personajes princi-
expectativas y fo- puntosdevistayescoge con dibujos expli- pales y secundarios?
menta valores. un compañero que le cados. • ¿Conoces el mar? ¿Para qué nos
ayudeaampliarlas ideas. sirve?
• El docente revisa, co- • ¿Qué le agradó y le disgustó de la
rrige ortografía para lectura?
que el estudiantecons- • Si tienes otros comentarios escrí-
truya oraciones con las belos.
palabras corregidas.
Continúa

20 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


Viene

Preguntas para
Criterios de Propuestas Producción
Texto evaluar la comprensión
selección de lectura textual
del texto

Para Sexto
“Las tortugas • Es atractivo e inte- • Motivación acerca de • Mapa Concep-
Laúd” resante para los es- las tortugas. (¿Qué sa- tual del texto (en
(Texto expositivo) tudiantes. ben acerca de las tor- 10 minutos lo
• Transversalidad del tugas? ¿Tienes tortu- elaboran los es-
texto. gas en casa? ¿Cómo tudiantes y luego
• Bien estructurado. las tratan? ¿Cómo las en compañía del
• Lenguaje sencillo y consiguieron?, etc) docente se me-
claro. • Entrega de textos. jora).
• Maneja el tipo de • Lectura silenciosa. • Resumen. Acom-
textos de las prue- • Lectura oral acompa- pañado de una
bas censales y del ñada del docente. ilustración.
Icfes. • Preguntas de com-
• Incursiona a los es- prensión de lectura re-
tudiantes en otro gistro del texto en el
tipo de textos. cuaderno (Trascrip-
ción).
• Vocabulario y expre-
siones desconocidas.
• Uso de vocabulario en
oraciones.
• Consulta acerca de las
tortugas (exponer li-
bremente en clase).
• Evaluación, selección
múltiple con compe-
tencias.

Para Séptimo
“El pato de Oro” • Lo escogimos por- • Hablarsobrelosanima- • Graficar las es- • ¿Cómo es la vida de la agraciada
(Cuento) que a los niños y jó- lesdomésticosycondu- cenas del cuen- princesa?
venes les gusta cir la charla hasta llegar to. • ¿Qué hizo el rey su padre para
aprender por medio alospatos. acabar con la tristeza de la prin-
de cuentos, tiene • Leer el texto a manera cesa?
contenidos en valo- dehistoria. • Realiza la lista de valores que en-
res y se presta para • Sacar las palabras des- cuentres en la lectura.
trabajar y reforzar conocidas(glosario) • ¿Por qué crees tu que el rey no
temas como los • Aprenderamanejardic- cumplió su promesa?
tiempos verbales, cionario. • ¿Cómo fue la vida de la princesa
el adjetivo, el sus- • Realizaroraciones con después de la boda?
tantivo y el nombre. las palabras anteriores
para afianzar la com-
prensióndeltexto.

Leer la Escuela 21
¿Qué textos están llevando Así mismo, en las secuencias registradas
los maestros al aula?8 en el cuadro No. 1 es posible observar que
para el caso del grado primero el texto es ex-
Comenzaremos nuestra reflexión detenién-
traído de un manual escolar; para séptimo el
donos en la primera columna y apoyándonos
texto ha sido trascrito al cuaderno de una estu-
en la tercera para intentar responder a las
diante; en el caso de segundo grado, la maes-
siguientes preguntas: ¿con qué textos carga-
tra cuenta que éste proviene también de un ma-
mos nuestra mochila cuando comenzamos el
nual escolar pero que ella hizo una reelabo-
viaje escolar por el aula? ¿qué criterios pri-
ración quitándole las “marcas” que lo hacían
man cuando escogemos los textos? ¿respon-
ver como tal, trascribiéndolo y proponiendo
den estos criterios a las necesidades de nues-
unas preguntas para un taller (la maestra co-
tros educandos y a los propósitos del traba-
menta que esto lo hizo por economía, pues
jo del área de Lengua Materna, Lenguaje o
el texto original junto con el taller se hallaba
Lengua Castellana?
distribuido en dos páginas); para cuarto y
Lo primero que encontramos es que los
quinto, igualmente el soporte es la fotoco-
textos llevados al aula no conservaban su
pia de otro manual escolar. En cambio, el
soporte original, queremos decir que si por
texto de las Tortugas Laúd ha sido tomado
ejemplo el texto es un artículo de opinión,
de un documento del MEN 9 .
de una columna de una revista como “Sema-
El gran acierto de estos maestros es la
na”, “Dinero”, “El Malpensante”, etc, muy po-
escogencia del material de trabajo, ¡son tex-
cas veces aparece la revista en el salón de
tos!, completos la mayoría, no son fragmen-
clase, los maestros llevan sólo la fotocopia
tos, (en los otros tres colectivos la tendencia
de la página que les interesa para el trabajo
es la misma, en total, de las 23 secuencias
escolar, pero no la revista, igual sucede si se
sólo dos abordaron fragmentos). Esto mues-
trata de un cuento, no aparece el libro con
tra un avance positivo, de parte tanto de las
su pasta dura o blanda, no aparece el objeto
propuestas que hacen los maestros, como de
físico completo, sino que impera el reino, no
las editoriales. Si viajamos en el tiempo, 10
de las tinieblas, aunque podría llegar a serlo,
años atrás, de seguro que los maestros hu-
sino el de las fotocopias. De los 23 grupos
bieran obtenido de los manuales escolares
sólo dos llevaron libros, los demás presenta-
fragmentos de un cuento, de un poema, de
ron fotocopias y uno determinó trabajar con
un texto expositivo, etc. difícilmente se hu-
los “Los Recetarios de Cocina”, pero no presenta-
biesen encontrado un texto completo.
ron uno en concreto.

8. Los planteamientos que se hacen a propósito de los 7 subtítulos que contiene este capítulo aplican exclusivamente
a los datos con los que contamos, no son generalizables. Su importancia radica en los argumentos que ofrecen para
defender que es válido incorporar los temas de los subtítulos como puntos de indagación en las autoevaluaciones de
las instituciones escolares.
9. Nos referimos al documento que se encuentra en la serie, Especial de publicaciones para maestros, denominado:
“Evaluación de Logros en Lenguaje. Lineamientos Teóricos. Pruebas 3°, 5°, 7° y 9°. 1992-1994”.

22 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


A propósito de la completud de los textos ra, de alguna forma les dice a los “niños y niñas”
escogidos, nos encontramos con el caso de que el resto de información que acompaña el tex-
una propuesta para grado once con el texto to (el autor, la colección a la que pertenece, la
titulado “La Eutanasia Activa” (de un colectivo editorial, los subtítulos, etc) no tienen ninguna im-
distinto al que se recoge en la tabla 1). La portancia, se pueden obviar, no interesan, ni inci-
fotocopia mostraba claramente que la lectura pro- den en la comprensión global.
puesta hacía parte, por un lado, de un manual Este mal vicio lector, tan instituido por la
escolar, y por el otro, que el texto primigenio escuela tradicional, se hace más evidente en
había sido desvirtuado, pues en los paratextos10 relación con los otros textos que son presenta-
se plasma: “Adaptado de El País, España. Sección Debate. dos en fotocopia, pues al menos cuando está
Domingo 13 de mayo de 2001”. Las adaptaciones, por el formato original, así el maestro obvie en su
definición, no dejan leer el texto en su totalidad y lectura estos datos, los estudiantes perciben
originalidad ¿con qué criterio se realizan? ¿por visualmente que hay otra información y esta-
qué se prefieren para el aula? -si son versiones mos seguras que algunos de ellos o ellas acudi-
mas bien cojas, mutiladas-. rán a la misma por simple curiosidad (la expe-
Después de las coincidencias encontradas en riencia nos lo ha demostrado); en cambio, en
relación con los textos, es imposible no pregun- los textos fotocopiados, como lo pudimos re-
tarnos: ¿qué implicaciones tiene para la práctica gistrar, la noción de autor se pierde, en tres de
del maestro trabajar con fotocopias y que los es- ellos no aparece ninguna referencia y esto equi-
tudiantes no tengan acceso a los soportes origi- vale a hacer desaparecer de antemano las mar-
nales, ya sea el libro, la revista, el periódico, etc? cas textuales que brindan información sobre
Veámoslo con los ejemplos del colectivo A. el nivel extratextual11 .
En el caso de “Los Músicos de Bremen” (único texto De otra parte, esto contribuye cada vez
presentado en soporte original), cuando la maes- más, a mantener la confusión entre narrador y
tra hace la lectura se detiene en las ilustraciones autor tan frecuente en nosotros y en nuestros
del libro, pero en ningún momento tiene en cuen- estudiantes. Esta última aseveración es con-
ta los paratextos ni la manera cómo éstos son firmada con los resultados de las pruebas
presentados, simplemente lee el título y comienza censales que se aplicaron para grado quin-
a leer la historia en voz alta. Al leer de esta mane- to12 las cuales tenían un grado alto de com-

10. Concepto de G. Genette: relación -normalmente de índole semántica y por lo general de gran importancia para
una correcta lectura del texto- que el discurso en si mantiene con su título general, el de cada capítulo, parte o libro,
y otros elementos como prefacios, notas, “marginalia”, ilustraciones, bibliografías, etc. Estos elementos, en definitiva
también forman parte del discurso.
11. Según los Lineamientos Curriculares de lengua castellana, este nivel tiene que ver con al reconstrucción del
contexto o situación de comunicación en que se producen o aparecen los textos; con el componente ideológico o
político que subyace y con el uso social que se hace de los mismos.
12. Cuando se aplicó la Prueba Censal de lenguaje para quinto del 2002 a los maestros y directivos participantes en
el programa de mejoramiento, al realizar el análisis de las respuestas de la misma, fue notorio que en las preguntas
en donde se generó mayor discusión y en donde había más confusión de su parte, eran aquellas que tenían que ver
con el plano de la narración.

Leer la Escuela 23
plejidad en relación con el nivel enunciativo portada y la contraportada (eso lo hacemos
(quién habla y a quién dirige su discurso). En muy frecuentemente cuando vamos a las libre-
esta evaluación estatal aparecen en el diseño rías).
de las preguntas 25 veces, aproximadamente, Claro, trabajar con fotocopias hace parte
palabras como narrar, narra o narrador y 13 de las innumerables condiciones desfavorables
preguntas de manera directa o indirecta se que citan los maestros de las instituciones edu-
relacionan con el asunto: quién cuenta la his- cativas públicas: “es que a los niños no se les pueden
toria. Una de esas preguntas es la número 21 pedir libros porque no tienen plata para comprarlos”, “es
que fue, según los primeros resultados envia- que como en la escuela no hay libros”, “yo lo saqué de un
dos por el MEN, una de las que obtuvo punta- libro de la biblioteca de mi casa” etc. Si bien no des-
jes más bajos; en el municipio, sólo el 20.4% conocemos tal realidad, hay soluciones posi-
la resolvió correctamente y en el departamen- bles. Por ejemplo, la maestra que hace que sus
to el 21.3%. De igual manera ocurrió con los estudiantes trascriban el texto (esperamos que
maestros cuando contestaron la prueba, en este ejercicio se realice posterior al trabajo de
todos los grupos fue una de las que más res- anticipación y al de la primera lectura) encuen-
puestas incorrectas recibía. tra una manera de que los estudiantes tengan el
Otro aspecto a tener en cuenta cuando texto. Ahora bien, no estamos en contra de las
los textos se reducen a la fotocopia, es que se transcripciones ni de las fotocopias, son nece-
vuelve más difícil para los estudiantes sentir la sarias, pero entonces, trascribamos y fotoco-
diferencia entre leer una novela, una revista o piemos manteniendo una mínima bibliografía e
un periódico porque no perciben la manera intentemos que el texto auténtico circule en el
singular como cada texto se materializa. La aula, que al menos el ejemplar que el maestro
silueta de los textos, los diseños gráficos (y manipula, el que él lee y que está a la vista del
hasta el papel) dicen sobre los textos, coad- estudiante, se encuentre en el formato original.
yuvan en su comprensión ya que activan los Esto es necesario si se tiene en cuenta también
esquemas mentales y disponen para la lectu- lo que se referencia sobre algunos diagnósti-
ra. Asimismo, que se tenga el formato original, cos que aparecen en los planes de área como
le permite al maestro diversificar sus propues- es la apatía de los niños y niñas frente al mundo
tas de lectura; por ejemplo, hacer la lectura de lo escrito y la carencia de una biblioteca en
de un artículo de revista usando como “estra- casa.
tegia de anticipación” la interpretación de los El título de esta primera reflexión es una pre-
marcadores gráficos, como los diferentes ta- gunta, y con esa misma fórmula queremos ce-
maños y tipos de letras que hay entre un título rrarlo... el acercamiento de los maestros a las
y un subtítulo, pudiendo así explicar las rela- fotocopias y no a los textos originales nos hace
ciones de inclusión existentes entre una pro- preguntar: ¿está el maestro vinculado de mane-
posición y otra. Una estrategia alternativa pue- ra vital con libro?
de ser proponer la escogencia de un libro te-
niendo en cuenta sólo los datos que hay en la

24 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


El área de lenguaje y los mismos docentes. El proyecto abarca a los docentes
el trabajo en valores de todas las áreas y tiene la siguiente metodología: Se
ejecuta tres veces a la semana: 2 horas para la lectura
Uno de los tópicos que prevalece para los
y una hora para la escritura... el proceso para la
maestros como criterio prioritario en la selec-
escritura se lleva a cabo en tres etapas: primero el
ción de un texto, es el de los valores (observe-
profesor les lee el texto facilitado por los coordinadores
mos la columna 2 del cuadro No. 1). Les intere-
de los proyectos (el texto está orientado hacia un valor,
sa que este tema sea explícito, evidente y que
ya que el proyecto de Ética y Valores se involucra en
el texto proponga valores positivos. Esto es
este proyecto); segundo, el estudiante produce otro tex-
preocupante, más cuando se comprueba que
to a partir de la lectura, dependiendo de su nivel de
este criterio está por encima de los del orden
escolaridad; se les ha sugerido a los jóvenes de sexto y
estructural o lingüístico que, por cierto, casi
séptimo que escriban textos narrativos o poéticos sen-
nunca aparece.
cillos; a los de octavo y noveno textos expositivos y a
Sabemos que es labor de la escuela formar
los de décimo y undécimo argumentativos” (I.E. 307).
ciudadanos, contribuir a la construcción de
“Respecto al estado del área de lenguaje a nivel de
una sociedad más justa, menos violenta, etc.
primaria cada docente trabaja de forma individual en
No obstante, nos preguntamos si es de esta
su aula, aunque se comparten actividades como elabo-
forma que se logra, con textos de un alto con-
ración de textos con mensajes de reflexión..” (I.E.
tenido moralizante, como “El pastorcito mentiro-
285).
so”, “Mirad a los Gansos” etc, y extrayendo la lista
Curiosamente en los mismos informes so-
de valores de cada lectura. Quizás no se cae
bre estos planes de estudio, en más del 90%
en cuenta que al hacerlo se sacrifica la esen-
se señala que fueron construidos teniendo
cia del cuento, la esencia del texto y del tra-
en cuenta los “Lineamientos de Lengua Castella-
bajo en el área de lenguaje. Dicho en otras
na” y “Los Estándares” en donde prima la fun-
palabras, la prioridad de la intención comuni-
ción comunicativa, que aquí se sacrifica por
cativa de los textos literarios -aquella de com-
la aludida tendencia moralizante.
partir la creación de mundos posibles- se deja
Lo mencionado es consecuencia también
de lado y se reemplaza por una dimensión
de querer darle salida a las múltiples deman-
axiológica.
das que se le hacen a la escuela y en particular
En los planes de estudio también es posible
a los maestros; requerimientos consignados
encontrar esta fusión entre los propósitos del
en los llamados proyectos transversales y asig-
área de lengua Castellana con Ética y Valores,
nados a todas las áreas del conocimiento y a
citemos algunos ejemplos tomados de las au-
todos los miembros de la comunidad educa-
toevaluaciones institucionales que presentaron
tiva: Medio ambiente, Democracia, Recreación
maestros y directivos del “proyecto de ciudad”:
y uso del tiempo libre, Sexualidad, Prevención
“El proyecto de lectura y escritura completa cua-
de desastres y ahora último las denomina-
tro años con este en curso; su principal objetivo es
das Competencias Ciudadanas y Competen-
crear el hábito de la lectura en estudiantes y hasta en
cias Laborales. ¿Cómo hace el maestro, con

Leer la Escuela 25
6 horas de 45 minutos a la semana, en el me- primeros es formación pedagógica general,
jor de los casos, para abordar todo lo ante- pues se les prepara para asumir todas las áreas
rior y atender al mismo tiempo al desarrollo del conocimiento. El simple hecho de que li-
curricular propio del área? ¿No tendría que ser miten los textos que llevan al aula a los que
un proyecto transversal también la formación aparecen en los manuales escolares, sería otro
de lectores y productores de textos? Pero su- punto de partida para seguir ahondando en
cede que “los proyectos del área que persisten en el esta cuestión.
aula no llegan a ser transversales, son: el prensa- En los registros de casi ninguno de los gru-
escuela, mapas y desarrollo del pensamiento, el pe- pos de los 4 colectivos, aparecen cuentos que
riódico mural, elaboración de libros de cuentos, tea- clasifiquen en lo que se ha dado en llamar la
tro y literatura, compresión y relatoría” (I.E. 302). nueva literatura infantil (Anthony Brown, Roal
Como medida desesperada se pretende Dalh, Gloria Cecilia Díaz, Ana María Machado,
contribuir a la solución de los problemas de etc) que en nuestro país viene siendo objeto
convivencia que cotidianamente se presentan de estudio desde hace aproximadamente 20
en el aula de clase y por fuera de ella, con años y a la que en la última década se le ha
obras de superación como las de Cuauthemoc dado un gran desarrollo con el apoyo de Fun-
o Coello, que entran a reemplazar a los clási- dalectura y la “Feria del libro” que anualmen-
cos literarios. Preocupa que al elegir te se realiza en Bogotá. Si nos fijamos en la
sistemáticamente producciones que apuntan literatura que se sugiere tenemos a autores
a la misma moral, se le haga un flaco favor a la como Gabriela Mistral, y obras como Los Músi-
meta de crear ciudadanos críticos, porque cos de Bremen, El Pastorcito Mentiroso, etc (recuér-
puede ocurrir que en ausencia de referentes dese que en el Cuadro No. 1 está la informa-
distintos sea imposible para los sujetos pasar ción únicamente del colectivo A).
por un proceso de disertación y construcción Vale la pena aclarar que no estamos en con-
propia. tra de la tradición, sabemos del valor de traba-
Criterios como estos nos llevan a pensar y jar con los cuentos de hadas, con la literatura
a preguntarnos ¿Cuál es la formación literaria clásica, etc. No obstante, los libros que perte-
que tienen nuestros maestros? O lo que es más necen a la nueva “ola” mencionada está sugi-
complejo ¿Qué están leyendo? Sin contar con riendo nuevas formas de leer, no sólo lenguaje
los elementos necesarios para poder sacar escrito, sino también las ilustraciones y los di-
conclusiones, es conveniente recordar que en seños de páginas, además de una rica
relación con este aspecto podrían tener más intertextualidad precisamente con los cuentos
dificultades los maestros de Básica primaria y tradicionales (véase la reseña de “Club de Lec-
Preescolar que los de secundaria, debido a tura Sin tablero” sobre “Cuentos en verso para
que la formación que brindan las universida- niños Perversos” de Roal Dalh).
des para el maestro de secundaria es forma- Tres preguntas surgen para una posterior in-
ción específica en literatura o en el idioma dagación del estado de la lectura y la escritura
español, mientras que para la mayoría de los en la escuela: ¿Cómo y desde dónde hace cir-

26 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


cular y aborda el maestro los textos auténticos “Para los profesores del área de humanidades, la
en el aula? ¿Responden los textos escogidos a concepción del lenguaje es el acto comunicativo más
propósitos específicos del área de lengua Cas- importante de todo ser humano. Se trabaja por temas y
tellana? ¿Qué formación literaria tienen nues- mucho énfasis en la comprensión de textos” (I.E. 305).
tros maestros y cómo incide ésta en la esco- “El plan de área de lengua Castellana (lenguaje)
gencia de los textos que llevan al aula de clase? de nuestra institución tiene como fundamento teórico
lo propuesto en los Lineamientos curriculares y los
estándares según lo cual el área debe ser comunicati-
¿Cómo se entienden va, semántico y significativo. Esto es, que hay que ir
el leer y el escribir? más allá de la competencia lingüística, lo cual involu-
Ahora, quisiéramos detenernos en uno de cra un amplio conocimiento gramatical” (I.E. 311).
los criterios que se esgrimen para la esco- “Los grados primero siguen en su mayoría el méto-
gencia del texto para el grado primero, en la do de palabras normales, en grados cuarto se trabaja
columna dos se registra: “Por estar en capacidad bajo el método constructivista apoyada en dos horas
de leerlo (de acuerdo a las letras que han trabajado)” semanales con prácticas de operaciones
-ver Cuadro No. 1), columna 2-. Es bien inte- sicolinguísticas, en grados quinto se leen cuentos y
resante poder señalar a través de esta frase desarrollan parte de su práctica en ello” (I.E. 313)..
la concepción de lectura que persiste: leer es Esa confusión se deja ver también en lo
decodificar, es identificar letras con sonidos. siguiente: están circulando en el aula textos
Esta concepción no aparece en los planes completos, pero las propuestas de escritura
de estudio, o al menos eso es lo que se dice que se están haciendo son, en muchos de los
en relación con las 46 instituciones educati- casos, de carácter oracional. Es la percep-
vas que asumieron el reto de preguntarse so- ción que se quiso reflejar con el título de este
bre el estado de la lectura y la escritura. Antes capítulo; en la teoría o sea en los planes de
todo lo contrario, exceptuando tres institu- estudio, se insiste en una concepción sobre
ciones, el resto habla de una concepción de lenguaje, sobre lectura y escritura, que va en
lenguaje acorde con los Lineamientos Curri- contravía o no corresponde a las propuestas
culares de Lengua Castellana y los Estánda- que ejecuta el maestro en el aula.
res, o lo que llaman una concepción comuni- Hagamos el análisis volviendo a nuestro
cativa. Sin embargo, basta con citar algunos cuadro. Para grado primero aunque el texto
ejemplos para darnos cuenta que lo que “sub- escogido lo consideramos apropiado, la ra-
yace” es una situación que tiende a la confu- zón por la que se elige desvirtúa su potencial
sión: y nos recuerda lo que citaba Mauricio Pérez
“La concepción de lenguaje que subyace en el plan Abril sobre la primera problemática de por-
de estudios, es la concepción tradicional, el lenguaje qué los niños y niñas no leen y escriben en la
un instrumento de comunicación, sin mencionar para escuela:
nada su función principal que es la significación, “Problemática 1: No hay producción de
además de la comunicación” (I.E. 327). textos, hay escritura oracional.

Leer la Escuela 27
...Hay una causa que se debe buscar en Ficha No. 13
los primeros grados de la escolaridad, con-
cretamente en los métodos de acercamiento ¿De qué lugar se trata?
a la escritura inicial de los pequeños, en el Adivina en qué lugar pasan todas estas cosas:
primer grado de primaria o en el preescolar. Hay mucho nieve y hielo. Hace mucho frío. En
Si la escuela utiliza métodos silábicos en los invierno, el mar se congela. En verano, el hielo
cuales la unidad de trabajo es la vocal, lue- del mar se derrite y se forman témpanos.
go la sílaba, posteriormente la palabra y fi- En ese lugar viven pingüinos y focas.
nalmente la frase, es esperable que la uni- En invierno las noches son muy largas y hay
dad de comunicación escrita que construye grandes tempestades de viento y nieve.
el niño esté referida a esas unidades”13. Muy pocos hombres viven en esa parte del mundo.
Este tipo de trabajo oracional queda con- (70 palabras)
firmado con la primera propuesta de ese mis- 1. ¿De qué lugar se trata?
mo grado, que aparece en la última columna, 2. Haz una oración con las palabras:
y también, con los criterios sugeridos y las tempestad y derretir.
estrategias de lectura que se hacen para los (El resaltado es nuestro)
grados séptimo, cuarto y quinto: “reforzar temas
como los tiempos verbales, el adjetivo, el sustantivo, y el nozca las oraciones en el texto”. Como puede ob-
nombre”, “Realizar oraciones con las palabras anterio- servarse, de la lectura mental se pasa a la seg-
res para afianzar la comprensión del texto” y “el docen- mentación del texto sin contemplar vías para
te revisa, corrige ortografía para que el estudiante cons- comprender globalmente, por ejemplo, des-
truya oraciones con las palabras corregidas” de lo comunicativo. Parece que no existe la
Otra propuesta didáctica que también se posibilidad de la conversación, la pregunta
hace para grado primero, en un colectivo dis- por el gusto, por la opinión, el comentario
tinto al A, corrobora lo anterior. Para los gra- libre entre maestros y estudiantes, o por lo
dos 1 y 2 se propone primero motivación con el menos no queda abierta la posibilidad en es-
poema La rana y luego la lectura de un texto tas consignas escritas.
de 70 palabras -así lo explicita la maestra que El conteo o la numeración de los párrafos,
lo propone- (ver ficha No. 13). asimismo, no resulta trasparente en el hori-
Otro tanto sucede con la propuesta que se zonte de los aportes a la comprensión de un
hace para onceavo grado, con el texto “La texto. Probablemente este tipo de ejercicios
Eutanasia Activa” (que tampoco está en el cua- tengan la intención de facilitar la identifica-
dro No. 1 porque es de un colectivo diferente ción de proposiciones y la relación entre uni-
al A): 1. "Lea, mentalmente, el texto en determinado dades sintácticas y unidades de significado,
tiempo. 2. Cuántos párrafos tiene el texto? Y 3. Reco- pero cabe la duda sobre su pertinencia como

13. Pérez Abril, Mauricio. Saber. Leer y escribir en la escuela. Algunos escenarios pedagógicos y didácticos para
la reflexión. MEN-ICFES. Bogotá. Febrero del 2003. pág 11.

28 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


actividades iniciales con las cuales invitamos tura como centro del trabajo en el área de
a nuestros estudiantes a interactuar con los lenguaje; y con esta afirmación no creemos
textos. Al decir “de aquí a aquí hay una ora- estar en contra de las propuestas del MEN
ción, por lo tanto el párrafo uno tiene tantas que plantean la diversidad textual.
oraciones”, como lo referencia la actividad La literatura sigue siendo tan importante
tres, no es claro qué se busca. en el trabajo de esta área que no es gratuito
Por todo lo que hemos apuntado bajo este que en el documento actual de propuesta de
subtítulo creemos que es necesario que en las estándares de lenguaje se reserve una colum-
instituciones se estudien las diferentes mane- na denominada “Estética del lenguaje”, exclu-
ras de entender la facilitación de las siva para los textos literarios y éstos además
inferencias y el diálogo con los textos, las es- tengan lugar en la otra columna reservada a
trategias de interpretación, el desarrollo de lectura y producción de textos. Creemos que
competencias, o de las tan mentadas habili- la predominancia de los textos narrativos pue-
dades del lenguaje como son leer, escribir, ha- de ser vista como una dificultad cuando estos
blar y escuchar (palabras todas que según las textos no se ponen en relaciones intertextuales
evaluaciones sobre los planes de estudio, ha- con otros, cuando se privilegian tanto que ter-
cen parte del marco conceptual de las minan siendo los únicos, creando la proble-
áreas). Definitivamente del dicho al hecho hay mática que aparece como dos, en el citado
mucho trecho. texto de Pérez Abril:
“No se reconocen diferentes tipos de textos
[.. ].Hay una tendencia en la escuela hacia la
¿Literatura o diversidad textual? lectura del cuento, el mito, la leyenda, la fábu-
Abordemos ahora la prevalencia de los tex- la, como punto de partida del trabajo pedagó-
tos narrativos literarios sobre otros. No sólo gico en primaria. Todos estos son narrativos en
en el colectivo cuyos datos se exponen en el el sentido de presentar unos personajes, unos
cuadro No. 1, se dio esta situación, de los 23 escenarios y unos acontecimientos organiza-
grupos pertenecientes a los 4 colectivos, 18 dos en el tiempo. La lectura de estos textos, si
se inclinaron por lo mismo, textos narrativos bien tiene mucha importancia, deja de lado
como el mito del Yurupary, la leyenda de “El otros aspectos, como por ejemplo la argumen-
Patón”, cuentos infantiles clásicos como “El tación, propia de otros tipos de texto como el
patito Feo”, “Los Músicos de Bremen”, “El pato de Oro” ensayo o el texto científico o la exposición e
o de escritores reconocidos como Horacio información propia del texto periodístico”14.
Quiroga; narrativos de diferentes tipos, latitu- Las dificultades que se presentan con los
des y épocas. Si consideramos que son maes- textos narrativos literarios tienen que ver, en
tros de lenguaje, creemos que esta práctica primera instancia, con la forma tradicional
es bastante acertada. Abogamos por la litera- como siguen siendo abordados, lo cual es evi-

14. O.P. Cit. Pérez Abril. pág 12.

Leer la Escuela 29
dente en la última columna del cuadro pre- texto está bien estructurado”. Aclaremos que sólo lo
sentado en las páginas iniciales de este capí- cita un grupo y que no especifica qué significa
tulo (No. 1). Ésta nos muestra cómo el único esto, lo que también es preocupante. Nos pre-
plano que se aborda en este tipo de textos es guntamos ¿qué elementos o herramientas tienen
el de la historia y desde una lectura literal o los maestros y maestras a la hora de analizar un
contenidista: ¿Dónde ocurrieron los hechos?, ¿Cuándo texto? Precisamente, las preguntas que hacen
ocurrieron los hechos?, ¿Cuáles son los personajes prin- para la comprensión del mismo ¿no demuestran,
cipales y secundarios?, ¿Cómo se llama la historia?, que para ellos y ellas la estructura se correspon-
¿Qué personajes intervienen en ellas?, ¿Qué valor re- de sólo con el plano del contenido? Además nos
salta esta historia?, ¿Qué le sucedió al personaje por asalta otra duda: ¿Si más del 80% cita en las
decir mentiras? Etc. evaluaciones que se hacen sobre planes de estu-
El plano de la narración, que responde a la dio y área que en sus instituciones educativas se
pregunta central ¿quién cuenta y a quién se trabaja acorde con los Lineamientos Curriculares,
dirige el que cuenta? (pareja de narrador y cómo se explica que los textos no se analicen
narratario) y el plano del relato, ¿cómo se desde lo intratextual, lo intertextual y lo extratextual?
cuenta la historia?, desaparecen por comple- La segunda dificultad es más global ya que le
to de los niveles de análisis del texto que rea- compete a toda la institución educativa. Es creer
lizan los maestros con sus estudiantes. A este que la lectura y la escritura es el campo del cual
respecto una maestra cuando revisa el plan se deben ocupar exclusivamente los maestros y
de área de su institución, y específicamente al maestras de lenguaje. Empero, todos los maes-
referirse a un diagnóstico que se había elabo- tros en sus prácticas pedagógicas abordan tex-
rado en el año 2003 afirma que “en cuanto a la tos, y si leer implica leer diferentes tipos de tex-
lectura de textos se ha llevado más al trabajo tradicio- tos, porque no es lo mismo leer una noticia que
nal de la identificación de personajes, tiempo, espacio, un informe de divulgación científica, entonces
etc, es decir, se ha privilegiado el nivel literal y no se ha cada uno desde su área debería pensar cuáles
hecho énfasis en el desarrollo de procesos que garanti- son los textos que más se abordan desde su pro-
cen la comprensión de los diferentes niveles de sentido puesta pedagógica y desarrollar estrategias de
implícitos en los textos escritos” (I.E. 324). lectura y de producción que les permitan a los
Todo esto es lo que contribuye a generar la estudiantes acceder a este tipo de textos.
problemática 5 también señalada por Pérez Abril: Por ejemplo, textos fundamentales en el
“No se reconocen las intenciones de la comuni- área de ciencias sociales son los mapas, los
cación...Parecieraquenosetrabajaraenasuntos planos, los cuadros de datos estadísticos, etc,
como¿quiénhablaeneltexto?,¿aquiénhabla?, tendrían los maestros de estas áreas que en-
¿paraquéhabla? ”15. señar a sus estudiantes las cualidades de es-
Igualmente creemos que lo anterior está es- tos textos: ¿qué comunican?, ¿cuáles son sus
trechamente ligado al criterio que reza “porque el intenciones?, ¿cómo y para qué se producen?,

15. O.P. Cit. Pérez Abril. pág 15.

30 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


¿cómo deben ser leídos?, ¿es diferente leer un Del mismo modo es hora de revaluar cier-
mapa que un plano?, etc. Esto es lo deseable, tos mitos, como el que se escucha constante-
que la práctica textual sea una propuesta pe- mente entre los docentes del área: que frente
dagógica que incida en la manera de abordar a la poesía no hay nada que decir porque es
los textos de todas las áreas del conocimien- subjetiva (SIC).
to. Afortunadamente hay ya algunos maestros Finalmente y como corolario, es necesaria
que están abriendo un camino a esta opción la diversidad textual en la escuela, sin embargo
en las instituciones donde laboran: no es sólo tarea de los de lengua materna, no-
“Aún así sabemos que el lenguaje debe ser trabajado sotros tenemos nuestros propios textos: los li-
de manera transversal y está considerado como un pilar terarios. Y lo que sí nos corresponde es nutrir a
básico que oriente el trabajo no sólo de esta área sino el nuestros estudiantes con todas las formas lite-
de las demás. Se hace necesario realizar un trabajo con rarias existentes, nuevas y viejas, clásicas y no,
todos lo docentes para que orienten sus prácticas peda- infantiles y juveniles, narrativas como mitos, le-
gógicas hacia la formación de lectores y productores de yendas, toda la variedad de los cuentos desde
textos autónomos. Para esto se requiere romper para- el apólogo hasta el erótico, etc; poéticas como
digmas y dedicar también un buen tiempo a la forma- rondas, nanas, canciones, sonetos, caligramas,
ción de maestros en estrategias de lectura y producción poesía vanguardista, amorosa y finalmente tea-
textual” (I.E. 327). tro, con las tragedias griegas, las comedias del
Sabemos de antemano que ponerse de acuer- absurdo y por qué no los musicales -que tan de
do en ello es una tarea bastante difícil, máxime moda están ahora-. Con lo nombrado y con lo
cuando a los docentes no se les brinda ni tiem- que no alcanzamos a nombrar porque la lista
po, ni espacios institucionales suficientes para es muy muy larga, los maestros del área de len-
hacer planeaciones en conjunto, para intercam- guaje tendríamos suficiente trabajo para ense-
biar ideas, para proponer. Esta es una de las ñar sobre cómo leer y cómo producir estos ti-
quejas que más se leían en las evaluaciones. pos de textos.
De lograr lo anterior los maestros del área
de Lengua Materna o de Lengua Castellana,
podrán ocuparse de la literatura sin sentirse
Otros criterios para
culpables de abordar otros textos sólo como llevar textos al aula
parte de la intertextualidad generada por ella Avanzando en el análisis de las propuestas
misma. Ahora bien, la literatura no se compo- didácticas, hallamos, que la lectura sea corta y
ne sólo del genero narrativo, he ahí el proble- fácil, como criterios que se esgrimen frecuen-
ma ... De los 23 textos escogidos 18 eran lite- temente. Pero, la extensión no es realmente lo
rarios, de estos 18 sólo uno pertenecía al gé- preocupante, pensemos en la riqueza de los
nero lírico, los demás todos eran narrativos. mini-cuentos, sino la idea de que debe ser fá-
¿Qué pasa entonces con los otros géneros li- cil para los estudiantes. Ese fácil va acompa-
terarios o paraliterarios, como el teatro, el en- ñado de frases como “que tenga un vocabulario
sayo literario, etc? apropiado para su edad”.

Leer la Escuela 31
La reflexión que podemos hacer es que si tidianidad, no son diseñados especialmente
siempre seleccionamos textos por el hecho para las pruebas. ¿Por qué llevar estos mis-
de no ser complejos ¿cómo harán nuestros es- mos textos al aula? Por el sano propósito de
tudiantes para acceder a otros textos que re- preparar a los estudiantes para que salgan bien
quieren mayores competencias si no los en- librados de las evaluaciones masivas que in-
frentamos a ellos? La vida cotidiana nos en- fluyen en la apreciación oficial de la institu-
frenta a textos complejos, intente leer un reci- ción educativa, pues se supone que de los re-
bo de agua y luz, una solicitud de préstamo sultados de la evaluación dependerá cierta
bancario, etc. La complejidad es algo que parte de los recursos financieros que la misma
debe aparecer desde los primeros años, el necesita para su buen funcionamiento.
texto tiene que ser un reto para quien lo lee. No se concibe la prueba completa como
Desentrañarlo, comprenderlo, depende no texto -uno más-, interesa entonces, replicar el
tanto de la capacidad del estudiante sino de cuestionario con el riesgo de “adiestrar” -casi-
las estrategias con las cuales acompañemos a los estudiantes frente a este tipo de eva-
esa lectura, de la mediación que los maestros luación; olvidando que sin un análisis pro-
hagan del texto con los estudiantes, en ese fundo sobre cómo esta diseñada la prueba,
valle que es el aula. cómo debe ser leída, qué tipo de textos pro-
“Maneja el tipo de textos de las pruebas censales y pone, si en el aula proponemos ese tipo de
del ICFES”. Este criterio es bien particular, ¿exis- textos, etc., no ofrecemos una preparación
te un tipo de texto especial para las pruebas verdadera.
censales o de ICFES? ¡Vaya mito el que nos
hemos creado! Justamente el grupo que afir-
ma esto ha escogido un texto que se ha hecho La lectura y la escritura...
famoso entre los maestros, “Las Tortugas Laúd”, propuestas desarticuladas
por ser uno de los primeros que se usó en un Estamos de acuerdo en que la escritura y la
modelo de pruebas masivas. lectura suponen procesos mentales diferen-
Si observamos los textos que aparecen en tes, por eso no nos gusta hablar de lecto-es-
las pruebas encontramos cuentos como “Fri- critura. Sin embargo, lo anterior no implica
da” que pertenece al libro “El Terror de Sexto B”, que sus estrategias de aprendizaje no puedan
tiras cómicas, como las de Calvin y Hobbes, que ir de la mano. Esta desarticulación en las pro-
se encuentran a diario en periódicos como “El puestas fue lo que encontramos en los 23 gru-
País” o “El Tiempo”, pinturas famosas como “Los pos de los que nos ocupamos a lo largo de
zapatos rojos” de Magritte, artículos de opinión este capítulo.
como “El signo de la bobada” de Héctor Abad Faciolin- Fijémonos nuevamente en el cuadro No. 1
ce -que hace parte de una columna de este en las columnas sobre propuesta de lectura y pro-
escritor en uno de los periódicos nacionales- ducción textual. A simple vista se nota que hay
Esta visto que los textos de los que se ali- más estrategias en torno a la lectura. Para an-
mentan las pruebas estatales circulan en la co- tes de leer y durante la lectura se proponen 5

32 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


o 6 pasos, en cambio para la escritura sólo se ilustración. No existe una aproximación a la
da una consigna. lectura que se ocupe de la superestructura del
Examinemos en primera instancia las estra- texto, o que logre evidenciar la función comu-
tegias para la lectura. Comenzando, en cinco nicativa del mismo, que muestre los pre-con-
de los seis grupos de este colectivo A inclu- ceptos de los estudiantes, o su enciclopedia
yen estrategias antes de la lectura; 3 de ellas previa en relación con el propósito de apren-
pasan por ser un diálogo temático en relación dizaje, etc.
con el contenido del texto, los otros dos gru- Si continuamos con las estrategias que se
pos desarrollan esta actividad relacionando formulan después de la lectura, es posible
los dibujos o imágenes del texto con la lectu- observar que las solicitudes o las preguntas
ra que se va a realizar. que se hacen a los estudiantes difícilmente
Quisiéramos afirmar que en la mayoría de los ayudarán a la compresión total o global de la
23 grupos de los 4 colectivos, los maestros tie- misma. Dos casos para ejemplificar lo ante-
nen en cuenta la manera de “aterrizar” los textos rior: los cuestionarios y el diccionario. Los fa-
en el salón de clases, pero si bien en los grupos mosos cuestionarios para después de la lec-
del cuadro registran prácticas anticipatorias, no tura (observemos la última columna “Preguntas
ocurrió lo mismo en las 17 restantes. En muchos para evaluar la comprensión del texto”) son listas de
de estos grupos se hace la lectura sin ningún preguntas que no invitan a releer el texto, pues
tipo de mediación previa y en otros casos la éstas son muy puntuales, atienden a una lectu-
propuesta es una “motivación” que no tiene ra literal y únicamente de contenido, por lo
nada que ver con la lectura escogida; parece tanto convocan poco a pensar y desatienden
que esto sucede con uno de los grupos mencio- otros niveles de lectura, como el inferencial o
nados anteriormente, los que tienen como texto el crítico intertextual. Es una práctica tan tra-
eje “¿De qué lugar se trata?” que escogen un texto dicional en la escuela que se ha vuelto monó-
poético sobre la rana para anticipar la lectura tona, tanto que, en ocasiones, cuando el maes-
de un texto informativo sobre los Océanos Gla- tro termina de leer los estudiantes comienzan
ciales. a preguntar “Profe, ¿cuantas preguntas son? o se
A esto nos referimos con desarticulación. escucha un coro remedando la voz de maes-
Estrategias de este tipo podrían evidenciar tro “Taller, primera...”
que no se tiene claro lo que se pretende lo- Por añadidura estos cuestionarios fragmen-
grar con el trabajo de lectura y escritura, pues tan el texto, lo descomponen en elementos
no importa el tipo de texto que se lleve, el que por sí solos no significan, pues en el texto
propósito del trabajo, la competencia que se significan las relaciones de las partes con el
desea desarrollar, el proyecto de aula, lo que todo. Es hora de cambiar estos cuestionarios
esperamos que nuestros estudiantes produz- por lo que se ha dado en llamar consignas de
can después, etc, la estrategia de anticipa- trabajo. Quisiéramos apelar a Isabel Solé
ción parece ser siempre la misma, es por el quien nos complementa, de manera implícita,
título, de carácter temático o a partir de la la visión sobre las consignas de trabajo: “Uno

Leer la Escuela 33
de los innumerables retos que se formula a los Una conversación sobre todos estos as-
profesores que quieren hacer de su aula y de pectos sería útil y necesaria en primera ins-
su centro un contexto letrado, una comunidad tancia para conocer qué formas de aproxi-
de aprendizaje en la que puedan aprender la mación han tenido a este texto, posterior-
lectura y la escritura y se se haga uso de ellas mente tendríamos que idearnos estrategias
para aprender, para disfrutar, para incidir en para la lectura del mismo que vayan más allá
las realidades, es justamente que sean los mis- de buscar los significados de las palabras y
mos alumnos quienes encuentren retadoras las permitan una revisión intratextual de sus ele-
tareasenquedebencomponerycomprender”16 mentos; por ejemplo el uso de las abreviatu-
(El resaltado es de las autoras). ras en este texto, cómo leerlas, cómo leer
El otro caso consiste en la solicitud de los diferentes significados de una misma pa-
buscar las palabras desconocidas en el diccionario, si labra, etc, para llegar a preguntarnos ¿Po-
la consulta es la primera estrategia para re- drían nuestros estudiantes producir sus pro-
solver los problemas de comprensión y si se pios diccionarios? ¿de qué forma y para qué?
recomienda insistentemente, puede ser con- ¿qué diferencias hay entre un glosario y un
traproducente porque saca al joven o al niño diccionario? etc.
del contexto propio del texto, promueve un La desarticulación continúa. Se leen cuen-
sentido denotativo de la palabra y no la ac- tos o textos informativos y se pide como pro-
tualización de la misma. En relación con el ducción un resumen, un dibujo, un mapa con-
diccionario, el grupo que diseña la secuencia ceptual o una cartelera, textos totalmente di-
didáctica para grado séptimo (ver cuadro No. ferentes a los abordados. Al leer un mito y
1 plantea como uno de sus objetivos el uso de comprenderlo, en otras palabras, al destejer
este libro, lo que validamos plenamente, pero sus elementos desde las preguntas ¿dónde y
por eso mismo el diccionario debe ser visto por qué aparecen los mitos? ¿quién habla o
como lo que es: un texto, lo que implicaría quiénes hablan en estos relatos y a quién?
partir de él mismo, de preguntas que parece- ¿cómo se cuenta la historia? y ¿qué cuenta? Se
rían muy obvias, ¿cuándo usan ustedes el dic- aportan elementos para cumplir con el reto
cionario? ¿lo usan sólo en el colegio o tam- de producir relatos de este tipo. Igual, si lee-
bién en la casa? ¿por qué sí o por qué no? mos noticias se empieza el camino para pro-
¿cómo se organizan los diccionarios?, revise- ducir noticias, si leemos mapas conceptuales
mos si están todas las letras de nuestro alfa- que produzcan mapas conceptuales y así su-
beto, ¿cuáles faltan? ¿por qué? ¿quiénes ha- cesivamente, este es uno de los presupuestos
cen los diccionarios? ¿en dónde aparece el de la práctica textual: aprender de textos ex-
nombre de los autores? ¿les gustan los diccio- pertos, por lo tanto auténticos, que se con-
narios? ¿por qué no? ¿qué tipos de dicciona- viertan en modelos (textos ejes) de produc-
rios conocen y han usado?, etc. ción, de escritura para nuestros estudiantes.

16. Solé Isabel, “Estrategias de Lectura”. Graó. Barcelona. 1999.

34 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


Ya para cerrar este ítem, como ya se sugi- S en el último?, ¿Cuál es la definitiva del año?
rió antes, nos sigue preocupando la ausen- Y entonces vienen las fórmulas en las cuales
cia de estrategias para la escritura o pro- los maestros y las instituciones educativas se
ducción textual. Aunque hay ciertos avances han vuelto expertas, fórmulas donde se suman,
respecto a las estrategias de lectura, para la restan, multiplican y dividen letras y lo que es
escritura el panorama es desolador, todavía peor, criterios de evaluación.
no oímos hablar de planes de escritura, o de ¿Qué hipótesis tenemos sobre el por qué, a
rejillas evaluativas (hay ejemplos en los Li- pesar de que se lleva ya quince años de la
neamientos Curriculares del área), o de es- transición de la evaluación cuantitativa a la
trategias de intervención, análisis de pro- cualitativa, hoy en día seguimos anclados en
ducciones, criterios para la autocorrección, el paradigma viejo? Creemos que mucho de
o trabajos de intercorrección, etc. Y aún se esto sucede principalmente porque las pla-
sigue estando muy lejos de la metacognición neaciones que se hacen no han cambiado sus-
(los Lineamientos son claros al respecto), de tancialmente. Esta sospecha encuentra un apo-
la reflexión permanente en el aula sobre yo en el hecho de que frente a los planes de
¿cómo se lee y cómo se escribe? ¿Qué estra- área los maestros estiman como uno de los
tegias de autocontrol uso? logros mayores el poder acordar los conteni-
¡Vaya, todavía nos queda un amplio trecho dos que verán los estudiantes a lo largo de su
por recorrer! vida escolar. Frases de las autoevaluaciones ins-
titucionales como:
¿Procesos o contenidos? “se busca que los contenidos respondan verdadera-
En los últimos 15 años se ha insistido en mente a la necesidad” (I.E.260), “Para determinar los
el país en cambiar el paradigma de la eva- contenidos de cada grado se hizo una reunión y con base
luación, pasar de la evaluación de conteni- en los ejes temáticos dados por los estándares a saber:
dos a la evaluación de procesos. A su servi- sistemas simbólicos, producción textual, ética de la comu-
cio se supone que está todo ese universo en nicación, estética del lenguaje, interpretación textual, se
el que se han acuñado muchos (¿excesivos?) escogieron los temas necesarios para cada nivel.” (I.E.
referentes: indicadores de logros curricula- 324), “todos los maestros de las sedes procuramos tra-
res, competencias o ahora último los tan nom- bajar la misma temática por grados” (I.E. 327), “por
brados (y todavía no oficiales) estándares. escasez de tiempo y espacios de encuentros posteriores a
Tal vez la evaluación siga teniendo uno de esa primera jornada, el trabajo en primaria se dio por
los panoramas más desalentadores, sobre niveles de grado lo que generó diversidad de criterios en
todo cuando al llegar el final del año lectivo cada área. Además de que se concentrara el trabajo de un
se encienden las discusiones en los comités listado de contenidos que se repetían en los diferentes
académicos o en los de evaluación y promo- grados” (I.E. 286), “se trabaja por temas y mucho énfasis
ción para dilucidar cuestiones sobre ¿qué ha- en la comprensión de textos” (I.E. 305), etc.
cer con un estudiante que obtuvo I en el pri- Esto, y la ausencia casi sistemática de la
mer periodo, A en el segundo, I en el tercero y palabra “proceso” de todos los trabajos revi-

Leer la Escuela 35
sados, nos permite afirmar que en nuestros capítulo tomaron como uno de sus referentes
maestros prevalece la tendencia a planear y eva- fotografías instantáneas del primer encuentro
luar temas o contenidos. Lo preocupante es con los maestros del Proyecto de ciudad, sus
que creímos haber hecho hace rato el salto de propuestas de aula, pero no olvidemos que la
la evaluación cuantitativa a la cualitativa, y es película en movimiento es distinta, el análisis
frecuente escuchar afirmaciones de muchos en de las propuestas finales habría arrojado otras
el sentido de que “ese tipo de evaluación no imágenes.
sirvió, hay que volver a los números”. Es necesario ponerle un punto final a este
Las palabras desempeño, logro, indicador, recorrido, no porque se haya terminado, todo
competencia y estándar, parecieran hacer par- lo contrario, lo único que hemos hecho es
te de una moda, un lenguaje técnico que se vislumbar nuevas rutas a partir de las pregun-
tiene que mencionar en los planes de área, un tas que esta primera indagación nos ha deja-
requerimiento del MEN que no logra transfor- do. Rutas menos ingenuas para adentrarse en
mar la práctica del maestro. Esto podría ex- los focos que constituyen los planes de área y
plicar porqué, a pesar del camino recorrido las prácticas de aula, que deriven en alternati-
desde la Nueva Ley General de Educación, los vas al servicio de la evaluación de las condi-
resultados de las pruebas censales y en gene- ciones para formar lectores y productores de
ral los del ICFES, siguen señalando que la es- textos en la escuela. Apostamos a la genera-
cuela todavía no ha logrado formar verdade- ción de conocimientos que puedan convertir-
ros lectores y productores de textos17 . Enca- se en un verdadero aporte, que, parafrasean-
minar la indagación hacia este punto, podría do las palabras de Delia Lerner18 , nos indi-
ser un gran aporte que nos mostrara el camino quen qué de lo que es leer y escribir en las
a seguir para dilucidar un estado de la cues- instituciones educativas de la ciudad de Cali,
tión del área de lenguaje en las instituciones está siendo lo real, lo posible y lo necesario,
educativas. de tal forma que tengamos los elementos sufi-
Ya ad portas del cierre una nota: los cientes para ir cerrando la distancia del tre-
cuestionamientos expuestos a lo largo del cho entre el dicho y el hecho.

17. O.P. Cit. Pérez Abril.


18. Lerner, Delia, “Leer y escribir en la escuela: lo real, lo posible y lo necesario”. Fondo de Cultura Económica,
México. 2001.

36 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


Biblioteca Escolar

GLORIA RODRÍGUEZ BARRENECHE

Leer la Escuela 37
C
uando propusimos a los maestros y permitiera poner los datos en diálogo con
directivos del “proyecto de ciu- planteamientos contemporáneos. Esperamos
dad”1 que incluyeran la biblioteca haber logrado ilustrar que “los usos” son eje
escolar en la autoevaluación de sus central de la noción de biblioteca y que hoy
instituciones escolares, no avizoramos un re- en día, por influencia de las nuevas tecnolo-
sultado tan interesante y fecundo como el que gías, esa noción se ha transformado.
nos regalaron. En este capítulo quisimos re- Por otra parte, hallamos suficientes ele-
flejar esa riqueza. A quienes se animen a leerlo mentos como para cuestionar qué hace la bi-
de cabo a rabo, hallarán que interrogar sobre blioteca para seducir usuarios, puesto que
la existencia o no de este recurso en la institu- está demostrada la necesidad de impulsar
ción conduce a todo un cuestionamiento acer- desde allí iniciativas para que los estudiantes
ca de qué se considera “tener biblioteca es- se sumen a las comunidades de lectores y ade-
colar”. Verán, entre otras cosas, que para des- más sean capaces de producir los textos es-
cifrar los contenidos de los informes de las critos que demanda la vida más allá de la puer-
autoevaluaciones debimos acudir a la ley co- ta de la escuela.
lombiana, porque de otra forma la alusión al Pero las vicisitudes se hicieron patentes
“bibliobanco” quedaba sin piso. y equilibraron un documento que peligro-
En uno de los borradores de este capítulo, samente bordeó el abismo del “deber ser”,
habíamos subtitulado un segmento así: “Tene- en el que siempre temió caer. Particularmen-
mos biblioteca... en la sede central (y otros te nos referimos a las decisiones que hacen
dramas)”. Lo mencionamos para anticipar a parte del proceso de construcción de una
nuestros lectores otro aspecto de los infor- biblioteca cuando se trata de su colección
mes que nos puso a pensar en lo complejo del de materiales, ¿qué hacer con ella, prote-
tema. Parte de los dramas tienen que ver con gerla o prestarla?, para quienes somos ex-
los interrogantes sobre quién está cargo, en ternos a la intimidad de estos espacios has-
qué tiempos abre y qué espacio ocupa, o si ta nos extraña la pregunta y es en verdad
nos permiten una formula precisa para este curioso encontrar, al asomarse a este mun-
último punto: ¿cuánto mide esta biblioteca es- do, que el dilema es de lo más natural. En el
colar? mismo sentido de dilema, surge el proble-
Para estructurar la información que nos en- ma de la constitución en sí del acervo, esto
tregaron los maestros y directivos2 , fue nece- es, el tema de los criterios de selección de
sario reseñar una documentación mínima que los libros o materiales.

1. “Proyecto de ciudad” es la expresión resumida de “Programa de mejoramiento de la calidad de la educación en el


municipio de Santiago de Cali: hacia un proyecto educativo de ciudad”. En el año 2004 fue ejecutado por el IEP -
Instituto de Educación y Pedagogía de la Universidad del Valle-, con el auspicio de la Secretaría de Educación Municipal.
2. La mayoría usó un instrumento de exploración de bibliotecas tomado del trabajo de grado “Diseño de un programa
de animación y promoción de lectura de en una escuela de Cali”, de Angélica Vásquez y Eliana Lemus, Licenciatura
en Educación Primaria, Universidad del Valle, 2004.

38 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


Y una advertencia o aclaración. Dado que diferentes áreas. Su funcionamiento es de 8:30 a.m. a
el objetivo de este libro es proponer unos fo- 5:30 p.m., la persona lo hace de buena voluntad....”
cos de atención para la autoevaluación insti- (I.E. 282).
tucional en el área de lenguaje y en particular “La Institución, cuenta con biblioteca en 3 de sus
en lengua escrita, no nos mueve el interés por sedes, siendo la de la sede principal la mejor dotada y
sacar conclusiones acerca de la realidad, no tiene a su cargo una bibliotecaria. El espacio físico es
nos interesa saber cómo son las bibliotecas adecuado, ventilado e iluminado, cuenta además con ven-
escolares. Buscamos, en cambio, sustentar la tiladores, televisor, VHS y DVD, realizándose a menudo
idea de que es necesario tomárselas en serio cine foros. También cuentan con una fotocopiadora de
como foco de las evaluaciones de la calidad gran alcance y 1 computadora. Sus muebles están en
educativa. Vamos detrás del rastro de razones buen estado siendo muy funcionales y adecuados. El
para estudiar las bibliotecas escolares y de ambiente es agradable, decorado adecuadamente y per-
modos de avanzar en esa indagación. maneciendo aseado. La biblioteca funciona desde las
8:30 a.m. hasta las 5:45 p.m. teniendo acceso tanto la
En el universo comunidad interna como la externa. La Sede XXX no la
del bibliobanco posee aunque ya tienen el espacio y piensan acondicio-
narla este año”. (I.E. 275).
y las fusiones...
En consonancia con el estado de ánimo in-
“Tenemos bibliotecas” dicado hallamos elementos que muestran di-
Contamos con informes de 463 institucio- namismo debido a proyectos de mejora de las
nes educativas (I.E.) públicas, en 37 de ellos condiciones -en los que un yo colectivo es el
afirman que tienen biblioteca escolar, en 6 que motor-. Un par de casos ilustrativos son los
no tienen, en dos no se indica y una respuesta testimonios a continuación:
es ambigua. Esta relativa abundancia que a “En la actualidad, tenemos una vasta colección
todos nos alegra encontrar, está acompañada de libros de literatura universal, los cuales esta-
en algunas casos de apuntes optimistas de los mos tratando de organizarlos por el país de origen
maestros y directivos autores de los informes: del autor” (I.E. 327).
“La sede principal tiene una biblioteca muy buena, “Parece que para este año “hay buenos planes”
esta es la única sede que cuenta con biblioteca ya que las de mejoramiento para la biblioteca pues la coordi-
demás poseen bibliobanco, pero este espacio está abierto nadora ha estado recogiendo las necesidades de cada
para los estudiantes de todas las sedes”. (I.E. 254). profesor con respecto a este punto; además como
“Nuestra Sede principal cuenta con una biblioteca ella ha asistido el proyecto de construcción de ciu-
que podemos considerar buena si la comparamos con dad en la Universidad del Valle, al parecer esto la
otras instituciones, por lo menos cuenta con el espacio, ha puesto a reflexionar sobre el verdadero sentido
muebles, estantes, textos y material didáctico para las de las bibliotecas escolares” (I.E. 274).

3. En Cali actualmente hay 90 instituciones educativas públicas. Preferimos no revelar los nombres de las Instituciones
que nos facilitaron sus autoevaluciones, las identificaremos con una numeración aleatoria.

Leer la Escuela 39
Y la otra cara de la moneda del dinamismo Los restantes introducen un término, biblio-
aparece, no siempre el cambio toma rumbos banco, que es retomado de la ley colombiana,
deseables: “Se contaba con una bibliotecaria que fue el siguiente par de voces es diciente: “En nues-
trasladada en la administración municipal anterior y tra Institución no contamos con una Biblioteca. En es-
no ha sido reemplazada”. (I.E. 279). tos momentos tenemos es un Bibliobanco donde los estu-
Al fin, ¿con qué contamos? ¿qué procesos diantes y docentes consultan. Sin embargo la encues-
se están viviendo? Son interrogantes que invi- ta4 la contestó la comunidad en general como si se
tamos a pensar, ojalá mediados por la pro- tratara de lo mismo, coinciden en que es un espacio muy
ducción de trabajos que les den respuestas reducido, no tiene muebles, sin ventilación, ni una ilu-
completas y confiables, esperamos que esta minación adecuada, pues el servicio es de Biblioban-
primera aproximación ayude. co...” (I.E. 302). “La parte que se refiere a la biblioteca
De vuelta a las rutas de exploración inicia- escolar no salió mejor librada, realmente nuestra insti-
das en el primer párrafo, avancemos en el re- tución no cuenta con ella. En las cuatro sedes hay libros
gistro de los 6 que informan carecer de bi- de consulta, una poca cantidad de literatura infantil y
blioteca escolar. Uno es escueto y tajante: “En en la sede xxxxx hay bibliobanco de áreas como mate-
la institución no hay biblioteca” (I.E. 303). Dos in- máticas (5º), Lengua Castellana (1º, 3º Y 4º ), Cien-
cluyen elementos descriptivos: cias Naturales (3º y 4º) y Sociales (4° y 5º); pero no
“La escuela no cuenta en estos momentos con una suficiente para un grupo completo, los niños deben tra-
biblioteca, se observa un espacio físico en el cual hay bajar en parejas” (I.E. 315).
dos estanterías metálicas con algunos libros de consulta Decidimos clasificar esta respuesta como
para docentes y estudiantes en ediciones poco actualiza- ambigua: “Proyecto para mejorar la biblioteca en
das. El espacio es utilizado la mayor parte del tiempo la institución: aún no se ha planteado ningún proyecto,
como comedor o sala para mirar televisión. Realmente ya que los niños tienen su biblioteca para consultar en
no se ha adecuado una estructura en el momento (logís- el pueblo” (I.E. 337) -suponemos que si es para
tica) para alcanzar este logro" (I.E. 296). mejorar es porque cuentan con una, pero en
“En cuanto a la biblioteca no puedo hablar de un ausencia de palabras explícitas pusimos este
lugar específico, pues carece de una persona idónea y de dato en la casilla de la ambigüedad-.
textos para consultas en todas las áreas, para que la Y allí también la ley es el piso, porque, como
comunidad educativa tenga acceso a este lugar como tal. señalan Calonje y Rodríguez5 , la legislación
Sólo existe un lugar pequeño y cerrado con una estante- oficial en Colombia “establece la obligatorie-
ría y algunos textos, pero existen en más cantidad tex- dad de la biblioteca escolar sólo para aquellos
tos de español los cuales son utilizados por el docente centros educativos que ofrezcan formación por
para realizar lecturas en clase. En conclusión no existe niveles y grados. Los que estén localizados en
un lugar específico como biblioteca” (I.E. 298). municipios con una población igual o menor de

4. Se refiere a las preguntas sugeridas para explorar la biblioteca escolar.


5. “Caracterización de las bibliotecas de las instituciones escolares oficiales de una comuna de la ciudad de Cali:
Condiciones que ofrecen para la formación de lectores”, proyecto de investigación, Universidad del Valle, 2005.

40 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


veinte mil habitantes (20.000) tendrán la op- una donación de textos (no actuales) que una líder co-
ción de no contar con una propia, siempre que munitaria dio a la escuela, pues la biblioteca comunal
puedan utilizar los servicios prestados por las no abría al público hace más de 3 años, por cuestiones
bibliotecas públicas, o aprovechar otras alter- presupuestales y estaba siendo desmantelada por los
nativas como la del sistema de bibliobancos, vándalos del sector. Bueno quedó organizado este espa-
concebido desde la legislación oficial como cio, pero en el momento es el archivo de papelería de los
colecciones de textos escolares. En la regla- estudiantes porque en ausencia de coordinadoras nadie
mentación que establece este sistema se cons- se ha apersonado de recuperar este espacio para los
tata también un desconocimiento del papel de niños y darle la organización que requiere, las dos do-
la biblioteca escolar al excluir su participación centes que lideraron ésta idea están ocupadas con los
en la selección de los libros para orientar los cuatro grupos de Educa T.V. ya que a la fecha no han
procesos educativos en tanto ha ‘… de confor- sido posesionados 3 docentes que requiere la prestación
marse con los bibliobancos de textos escolares del servicio educativo. En resumen no tienen biblioteca
y los libros de consulta…’6 . La promulgación escolar los niños es por falta de espacio y de organiza-
de una posición tan ambigua, que es la expre- ción y tampoco la tienen cercana por factores
sión de una política estatal, ha abierto la puer- presupuestales y vandalismo. En la sede principal exis-
ta para que algunas instituciones interpreten te espacio poco o nada conocido por los estudiantes de la
la ley a su conveniencia y se nieguen a crear sede ya que por razones de seguridad no comparten
sus propias bibliotecas mientras puedan des- servicios -en el trayecto de una a otra hay delincuencia,
cargar esta labor en otras entidades, como las consumo de drogas, galladas y delimitación implícita
bibliotecas públicas”7. de zonas"- (I.E. 305).
Ahora bien, puesto que se trata de captar Queda claro, en esta institución educativa hay
su “drama”, la cuantificación de las bibliote- una biblioteca ubicada en la sede principal, pero
cas escolares es un mero punto de partida, los estudiantes de una de las otras sedes no pue-
los elementos contextuales son complemento den beneficiarse de ella, aunque sobre un mapa
indispensable. El siguiente fragmento tomado parezca que sí porque geográficamente están cer-
de un informe realizado por una maestra es ca. Y no es la única en esa situación, otras voces
contundente: hacen eco: “Tampoco las escuelas utilizan el espacio de la
“Hacia finales del año pasado y por iniciativa y biblioteca en la sede central, sólo eventualmente asisten los
compromiso de dos docentes de la sede se reunieron en estudiantes de la nocturna para realizar consultas” (I.E.
un mismo espacio textos, material didáctico y de labo- 324). No obstante, se registran casos opuestos:
ratorio y fue bautizado este espacio como: “Multiaula “El espacio, los pocos libros y videos que existen están concen-
xxxx” con el ánimo de que aunque no hay biblioteca se trados en la sede central, donde asisten estudiantes de las tres
tuviera un espacio para por lo menos recoger textos que sedes a realizar sus consultas. Este servicio se complementa
se estaban deteriorando casi que sin uso, darle uso a con la biblioteca comunitaria” (I.E. 311).

6. Ministerio de Educación Nacional de Colombia, Decreto 1860 de agosto 3 de 1994. Artículo 42.
7. Fundalectura, “La biblioteca que queremos. Una visión para compartir.” Santafé de Bogotá, 2003.

Leer la Escuela 41
Valga esta nota como llamado de atención otras actividades dinamizantes de la lectura o para lec-
para quienes estamos en la búsqueda de datos tores, algunas son desarrolladas por los docentes de
fidedignos, puesto que si no tenemos en cuenta lengua castellana en el salón de clases” (I.E. 311).
los contornos particulares que ha tomado la “En la sede xxxx igualmente se ha adaptado un salón
política de las Fusiones en cada institución edu- para tal fin, se tiene un horario para que las docentes
cativa, habrá equívocos de apreciación de la rea- lleven a los estudiantes. Se tuvo un tiempo abierto para
lidad; en evaluaciones institucionales que em- que los estudiantes pudieran acceder a ella libremente,
prendamos a futuro debemos diseñar instrumen- pero se tuvo el inconveniente que como no hay una per-
tos adaptados a la complejidad del sistema es- sona a cargo de ésta, se perdieron muchos libros y ma-
colar actual. teriales de diversa índole” (I.E. 279). El subrayado
es nuestro.
Al detenernos en el problema del respon-
Sujeto, espacio y tiempo de
sable de la biblioteca, surge la preocupación
las bibliotecas escolares por su idoneidad profesional que depende de
En la intención de comprender la situación la formación. Con la mirada sobre el rastro,
de las bibliotecas de los colegios, un elemen- notamos que fueron infrecuentes en los repor-
to importante es el personal encargado de su tes las afirmaciones como esta: “es atendida por
funcionamiento. De las 37 instituciones que personal especializado” (I.E. 259).
reportan la existencia de biblioteca escolar, En contraste, son más los casos en los cua-
en 23 hay por lo menos una persona asignada, les “no hay una persona encargada que tenga la for-
de 10 dicen que no hay, y respecto a 4 de ellas mación requerida para atender al público, prestar ayu-
no informan. Entre la variedad de reportes en- da y orientar a los estudiantes en las consultas requeri-
contramos diversos estilos. Los hay con adje- das” (I.E. 324), más aún: “En las sedes de primaria
tivos de aprobación, que proyectan una luz existe en cada una un espacio destinado a la biblioteca,
muy escasa para el esclarecimiento de la si- con libros de texto y equipos audiovisuales (televisor y
tuación, V.G. “En cuanto al personal a cargo es exce- VHS). Pero el no poder contar con una persona que se
lente, eficaz, responsable” (I.E. 308) Los hay con encargue del control y atención de estos espacios no
alusiones al número y el tipo de vinculación, permite que funcionen realmente como bibliotecas. Su
con lo cual tampoco se avanza mucho: “perso- uso se orienta fundamentalmente como sala de audiovi-
nal a cargo de la biblioteca: Tres funcionarios, dos nom- suales y como bibliobanco, ya que los profesores sacan el
brados por el estado y otro cofinanciado”. material que necesitan para llevar a su salón de clase y
Y también los hay con apuntes que ponen luego lo devuelven. No se realiza un control minucioso
en discusión algunas aristas del problema: “...la de este tipo de actividades” (I.E. 286). El subrayado
inestabilidad del bibliotecari@ no permite que tenga es nuestro.
buena presentación, aspecto, ambiente, uso, organiza- Curiosamente, si nos atenemos a los infor-
ción o atención a quien la visite. En varias ocasiones mes, en varias instituciones son las auxiliares
permanece cerrada o manejada por personal de servi- de enfermería, las secretarias y los empleados
cios generales, de esta manera no se pueden realizar de servicios varios quienes han asumido el lu-

42 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


gar de bibliotecarios, diversas voces así lo ral tiene experiencia en la materia y quien es reempla-
indican: “la persona encargada lo hace de buena vo- zado anualmente” (I.E. 327), “No existe un responsa-
luntad pues fue nombrada como auxiliar de enfermería ble en propiedad. Un docente lo hace de manera volun-
pero como contamos con el apoyo del Centro de Salud taria, apoyándose en los estudiantes que deben cumplir
que se encuentra enseguida, entonces esta persona se con su labor social. (I.E. 299), “No hay una persona
encarga de la biblioteca. Tiene los textos inventaria- encargada de manejarla, el docente que necesite un
dos...” (I.E. 282). “Este lugar lo atiende la secretaria texto o estar en ella debe asumir el manejo por el mo-
de la institución que es quien controla específicamente mento” (I.E. 322). Ante este espectro, la pre-
el préstamo de los libros. Realmente no existe la figura gunta que nos hacemos es qué repercusiones
de bibliotecaria dado que ella no se encuentra capacita- -positivas y negativas- generan en el servicio
da para orientar a quien lo solicite, según temas o con- que prestan las bibliotecas a la comunidad
tenido específicos. Ella facilita los libros según el área escolar.
pero no asegurando que en ellos se encuentre el tema de Por añadidura y haciendo inferencias de las
consulta” (I.E. 270). observaciones recogidas, quizás sea hora de
Ante las carencias de formación las reac- cuestionar la carencia de concursos de méri-
ciones se convierten en un ángulo más de ese tos en la selección del personal de bibliote-
dinamismo que ya habíamos mencionado: “La ca, puesto que facilitan que ocurran situacio-
bibliotecaria actual, inicialmente fue nombrada como nes similares a la expuesta en seguida: “La se-
enfermera pero como este lugar funcionó por un período ñora “fulana de tal” es la encargada de la biblioteca,
muy corto y no había bibliotecaria ella pasó a desempe- fue asignada por la Secretaría de Educación Municipal
ñarse en este cargo y lo ha asumido con responsabili- sin ningún conocimiento de éstas ni de obras literarias,
dad, asistiendo a cursos de capacitación y a eventos su función se simplifica en pasar los libros que los
programados en la Biblioteca Pública Departamental estudiantes y docentes le solicitan; sin embargo trata de
Jorge Garcés Borrero. Según el diálogo con ella, ha he- aprender y conocer más los libros que posee la biblioteca
cho lo que está a su alcance, organizando los libros por para realizar la función que le dieron” (I.E. 307). La
materia, llevando un registro de los que se usan y misma mano que escribió este informe agrega:
colaborándoles a los estudiantes que solicitan la infor- “Para el mejoramiento de la biblioteca es necesario que
mación o el servicio de los libros que requieren. Alude ella sea dirigida por personal idóneo que verdadera-
que casi no los presta para sacarlos del colegio porque mente promocione la lectura y realice diferentes activi-
en anteriores ocasiones los estudiantes no los han de- dades distintas a la de pasar los libros".
vuelto y se han perdido cerca de 12 textos. Ella se con- Junto al personal, el espacio físico es fun-
sidera buena lectora y le gustan los temas sobre supera- damental en la lista de las condiciones de fun-
ción personal” (I.E. 294). cionamiento de las bibliotecas ¿cuáles son las
Paralelo a lo anterior, aparecen referencia- dimensiones óptimas? Colombia tiene defini-
dos en las autoevaluaciones otros modos de do el tamaño de las aulas, pero no logramos
responder al problema de la responsabilidad hallar la pauta para aquel otro espacio vital
de la biblioteca: “Un estudiante de último semestre de las instituciones escolares. Países como
de Sociales de la Universidad del Valle, que por lo gene- Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña y Es-

Leer la Escuela 43
paña han determinado unas medidas (adelan- tros, según Real Decreto 1004 de 14 de junio
te las indicamos). Pero si no hay referencia (BOE 152 de 26 de junio de 1991) que estable-
oficial las apreciaciones son subjetivas: ce los requisitos mínimos de los Centros que
“En la sede XXX se ha adecuado un salón para este impartan enseñanzas de régimen general no
servicio, es estrecho, y poco aireado, le falta ilumina- universitarias. En Francia no se puede deno-
ción...” (I.E. 279), “En la sede principal la biblioteca minar biblioteca a un espacio con una superfi-
cuenta con un espacio relativamente amplio, iluminado; cie menor de 100 m2 y en USA o Gran Bretaña
bien decorado...” (I.E. 286), “el espacio físico donde se las bibliotecas de centros educativos han de
encuentra ubicada es pequeño en relación con el núme- tener en torno a 500 m2 de superficie. Las re-
ro de estudiantes que atiende la institución (cerca de comendaciones de la Federación Internacio-
2400 estudiantes), durante el tiempo de vacaciones se nal de Bibliotecas, FLA (Carroll, 1991), pres-
hizo una ampliación del espacio, pero este continúa siendo criben un mínimo de 93 m2 de espacio para
insuficiente” (I.E. 320). servicio de los usuarios en centros de menos
Sin embargo, hay criterios de sentido co- de 250 alumnos, 186 m2 para las bibliotecas
mún a los cuales algunos maestros apelaron escolares que deban atender entre 250 y 500
para sustentar su opinión: “El espacio físico desti- alumnos, y 279 m2, para las de más de 500
nado a la biblioteca de la sede XXX es muy pequeño e usuarios”8 .
incómodo, no alcanza a albergar un grupo de 20 estu- Factores que hacen parte del espacio físi-
diantes al mismo tiempo” (I.E. 322), “en este espacio co, como son la ventilación, la iluminación, la
caben entre 12 y 15 estudiantes y los grupos oscilan dotación de muebles, el aseo y los ambientes
entre 45 y 50” (I.E. 294), “...Es compartido con la auditivo y visual se vuelven importantes al
sala de profesores y rectoría” (I.E. 336) -todos los momento de diseñar evaluaciones de las con-
subrayados son nuestros-. diciones de la biblioteca para contribuir a for-
Algunos autores de los informes de las eva- mar estudiantes que lean y escriban. Lamenta-
luaciones institucionales, anotaron las medi- blemente la información acerca de estos aspec-
das precisas de su biblioteca así: “Espacio físi- tos fue muy inconsistente en los informes, de
co: 40 metros frente x 40 fondo, dividido sala de lectura modo que no podemos cuantificarlos. A manera
– sala de referencia”. Pero, ante el vacío de refe- de muestra, copiamos un tipo de respuestas:
rentes en el que estamos, el esfuerzo no tiene
asidero; con el ánimo de vislumbrar reglas más Iluminación Excelente
claras y orientadoras, pasemos revista a los Color Excelente
parámetros de latitudes lejanas (y dejemos a Aseo Excelente
los cálculos de cada quien las conclusiones): Ventilación Buena
“En España un centro [bibliotecario] de Ba- Ambiente auditivo Bueno
chillerato debería tener un mínimo de 90 me- Decoración Regular

8. Gómez Hernández José A.” Los problemas de las bibliotecas escolares de la región de Murcia en un contexto de
crisis del sistema educativo", en Anales de documentación, N.º 5, 2002, PÁGS. 125-156.

44 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


Sin embargo, como suele suceder, los re- el tiempo” (I.E. 279). De nuevo estamos frente
gistros sustantivos orientan más certeramen- a un tema sin parámetros nacionales, el tiem-
te sobre aquello que merece atención: po de servicio de la biblioteca escolar alar-
“...presenta dificultades en la acústica, hay dema- ga la lista de tareas pendientes, ¿A cuánto
siado ruido que influye en la concentración”, (I.E. aspiramos? ¿Cuánto es necesario? ¿Cuánto
324), “Hay mucha interferencia con el ruido exte- es factible?
rior a la sala de la biblioteca, por el mismo problema
de resonancia que se vive en toda la planta física de
la escuela” (I.E. 327), “Debido a la falta de ilumi-
Usos e ideas de biblioteca y
nación la biblioteca sólo se usa como sala de vídeo” de biblioteca escolar hoy
(I.E. 333), “Se requiere de ventiladores porque hace Y las declaraciones en torno a los usos
demasiado calor y el espacio tiene poca ventila- del espacio de la biblioteca complican el
ción” (I.E. 320), “es agradable cuenta con buena panorama del tiempo de servicio especia-
ventilación ya que posee aire acondicionado” (I.E. lizado en su función: “Para la lectura, confe-
307). rencias, seminarios y reuniones de docentes y pa-
En la lectura de las autoevaluaciones nos dres de familia” (I.E. 285), “Este lugar también se
topamos igualmente con el factor tiempo usa para reuniones, atención a padres de familia y
¿Cuántas horas permanece abierto el espa- ensayos” (I.E. 294), “Hace algunos años Plan Pa-
cio de los libros? los afortunados disponen drinos Internacional hizo aportes para que se cons-
de todo el día y aun los sábados: “Lunes a truyera una biblioteca comunitaria en la Sede Prin-
viernes de 7 a.m. a 6 p.m., sábados de 8 a.m. a 6 cipal, hoy infortunadamente se usa como salón de
p.m.” (I.E. 285), “De lunes a sábado. Lunes a vier- clase” (I.E. 333), “Se usa como sala múltiple, re-
nes de 8:30 a.m. a 1:30 p.m. y de 3:00 p.m. a unión de docentes, izadas de bandera, clausuras,
6:30 p.m. Sábados de 9:00 a.m. a 1:00 p.m." (I.E. etc” (I.E. 319), “No hay un buen ambiente auditi-
340), “El horario de funcionamiento es de las 8 vo debido a que la sala es compartida, en ella fun-
a.m. a las 4 p.m.” (I.E. 311). ciona la rectoría, la sala de profesores y es lugar
Los menos afortunados tienen medio de acceso de estudiantes y padres de familia” (I.E.
tiempo: “El horario de atención es de 8 a.m. a 12 336), “Donde existe espacio para la biblioteca no
p.m., aunque este año [a la encargada de la biblio- es sólo para esta función sino que también se em-
teca] le ha tocado ayudar en labores de secretaría” plea para sala de reuniones, audiovisuales, clases
(I.E. 294), “...solo está disponible en horas de la de manualidades o auditorio” (I.E. 317), “La bi-
mañana” (I.E. 333). Y el resto: “No tiene un ho- blioteca no es usada como un espacio de consulta
rario específico, se hacen consultas en momentos que permanente por los estudiantes, su uso se orienta
no interfieran con el trabajo de cada docente” (I.E. más a la proyección de videos” (I.E. 286).
336), “Como no se cuenta con el recurso humano Los usos de la biblioteca apuntan al deba-
para atender este servicio, se ha establecido un hora- te de fondo, que es sobre su concepto, del
rio para que cada docente lleve a los estudiantes a cual hace parte la decisión acerca de si tienen
este espacio y dirija el trabajo, no esta abierta todo o no cabida los audiovisuales -entre otras

Leer la Escuela 45
decisiones-. Es preciso recordar que de ma- escrito de la humanidad en un lugar único
nera elemental y explicable la biblioteca se se revela, no obstante como una tarea im-
asocia en primera instancia a depósito de posible. Al multiplicar títulos y ediciones,
libros, puesto que por razones históricas fue la imprenta ha destruido toda esperanza de
la institución social creada para satisfacer exhaustividad. Por lo mismo, aun para aque-
la necesidad de conservar la información y llos que consideran que una biblioteca debe
hacerla accesible, una información que es- ser enciclopédica, se impone su selección
taba contenida en los libros, en términos [...], Idealmente compuesta por una ‘infini-
del historiador de la cultura Roger Chartier dad de buenas, señaladas y destacadas’
(1994)9 : obras, la biblioteca debe, sin embargo, li-
“el sueño de una biblioteca que reúna to- mitar sus ambiciones y efectuar eleccio-
dos los saberes acumulados, todos los libros nes”.
jamás escritos, atravesó la historia de la ci- En resumen, la biblioteca en su sentido
vilización occidental. Fundó la constitución original es un lugar y una selección 11 . Un
de las grandes librerías10, ya fueran reales, lugar para unos cuantos libros considera-
eclesiásticas o privadas, justificó la búsque- dos esenciales, con el consiguiente con-
da tenaz de libros raros, de las ediciones flicto que acarrea la delimitación de lo in-
perdidas, de los textos desaparecidos. Go- dispensable:
bernó el gesto arquitectónico dedicado a “La tensión entre lo exhaustivo y lo esen-
construir edificios capaces de acoger la me- cial organiza de este modo las relaciones,
moria del mundo”. “Saber conservado, ate- complejas y contradictorias, anudadas en-
sorado, universal”, un espacio para la lectu- tre la biblioteca en su sentido ordinario, es-
ra cuyo umbral está marcado por “una puerta pacial y arquitectónico, y los géneros im-
que separa el mundo de los profanos y de presos (algunos designados como ‘bibliote-
los ignorantes del de los elegidos por el sa- cas’, otros no) que asignan al libro único o
ber, y hacia una estatua alegórica a la anti- en serie, las funciones de acumulación o de
gua, símbolo de la herencia que hay que re- selección atribuidas al lugar”12 .
coger y dominar para posibilitar el surgi- Eco, a propósito de bibliotecas, se luce:
miento de nuevos pensamientos”. “En el pasado, éste fue un lugar dedicado a la
Pero, como a continuación advierte el conservación de los libros, como lo será tam-
mismo Chartier, “Reunir todo el patrimonio bién en el futuro; es y será, pues, un templo de

9. Chartier Roger, El orden de los libros -Lectores, autores, bibliotecas en Europa entre los siglos XIV y XVIII-, Editorial
Gedisa, 1994.
10. Léase como sinónimo de biblioteca, nota que se añade aquí al original.
11. Chartier, en el libro que estamos retomando, completa la noción de biblioteca con un tercer elemento que para
los propósitos que tenemos aquí no es indispensable reseñar (pág. 75).
12. Fragmento citado por Chartier (1994) de Jean Marie Goulemot, “En guise de conclusion: les biliotheques
imaginaires (fictions romanesques et utopies)”, Histoire des biblioteques francaises, tomo II, Les bibliotheques sous
l’Ancien Régime, op. Cit., págs. 500-511.

46 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


la memoria vegetal13. Durante siglos, las bi- exclusivamente impresos, por efecto justamen-
bliotecas fueron la manera más importante de te de las transformaciones tecnológicas que han
guardar nuestra sabiduría colectiva. Fueron y permitido desarrollos en los modos de elabo-
siguen siendo una especie de cerebro univer- ración del conocimiento -y de “empaquetarlo”-
sal donde podemos recuperar lo que hemos en lenguajes distintos a la escritura alfabética.
olvidado y lo que todavía no conocemos. Si me Los audiovisuales, el computador e Internet
permiten la metáfora, una biblioteca es la me- hacen la diferencia entre la antigua biblioteca
jor imitación posible de una mente divina, en conformada por libros y la actual que se conci-
la que todo el universo se ve y se comprende al be como un centro de recursos culturales.
mismo tiempo. Una persona capaz de almace- Especial atención merece el fenómeno de la
nar en su mente la información proporcionada red virtual, puesto que nos devuelve al sueño
por una gran biblioteca emularía, en cierta for- original del acceso a todos los textos, la fic-
ma, a la mente de Dios. Es decir, inventamos ción de Borges en La biblioteca de Babel: “Cuan-
bibliotecas porque sabemos que carecemos de do se proclamó que la biblioteca abarcaba to-
poderes divinos, pero hacemos todo lo posible dos los libros, la primera impresión fue de ex-
por imitarlos”14 . travagante felicidad”15 . En el libro ya citado,
En el ámbito de las bibliotecas escolares Chartier remata con frases que aluden a “un lu-
estaríamos preguntándonos cuáles son los cri- gar donde todos los textos pueden ser convoca-
terios para determinar las condiciones de los dos, reunidos, leídos en pantalla” [...] “una bi-
espacios para albergar los libros y para efec- blioteca sin muros” [...] una dimensión en la cual
tuar la selección, sin perder de vista las funcio- “los textos ya no son prisioneros de su materia-
nes de la institución educativa de la que es una lidad original”16 , una tecnología que resolvería
componente. Pero la respuesta a esas pregun- la eterna frustración de la humanidad que siem-
tas ha de formularse en un marco contemporá- pre padeció la contradicción de elaborar catá-
neo donde el concepto genérico de biblioteca logos que abarcasen el universo mientras sólo
se ha modificado, puesto que los documentos le era dable reunir de manera concreta unos
que contienen información “esencial” no son cuantos libros.

13. El autor se refiere a un planteamiento que ha hecho previamente en el texto: “Tenemos tres tipos de memoria.
La primera es orgánica: es la memoria de carne y sangre que administra nuestro cerebro. La segunda es mineral, y
la humanidad la conoció bajo dos formas: hace miles de años era la memoria encarnada en las tabletas de arcilla y
los obeliscos -algo muy habitual en Egipto-, en los que se tallaban toda clase de escritos; sin embargo, este segundo
tipo corresponde también a la memoria electrónica de las computadoras de hoy, que están hechas de silicio. Y hemos
conocido otro tipo de memoria, la memoria vegetal, representada por los primeros papiros -también muy habituales
en Egipto- y, después, por los libros, que se hacen con papel. Permítanme soslayar el hecho de que, en cierto momento,
el pergamino de los primeros códices fuera de origen orgánico, y que el primer papel estuviera hecho de tela y no de
celulosa. Para simplificar, permítanme designar al libro como memoria vegetal”.
14. Eco Umberto, “De Biblioteca”, en Hojas de Lectura No. 25, diciembre de 1993, Bogotá, traducción de María Teresa
Cristina, conferencia originalmente dictada el 10 de marzo de 1981 en la Biblioteca Comunale de la ciudad de Milán.
15. Borges Jorge Luis, “La Biblioteca de Babel”, Ficciones, Obras Completas, Emecé Buenos Aires, 1974.
16. Op. Cit. Chartier

Leer la Escuela 47
Sin embargo, defender la legitimidad de comunicación e información, amparadas en
la apertura de espacios (y tiempos y recur- la libertad intelectual y las búsquedas de
sos y programas) para los audiovisuales, los conocimiento y estéticas/recreativas pro-
ordenadores e Internet en las bibliotecas, pias de las sociedades democráticas. Este
no significa adoptar un punto de vista apo- tipo de biblioteca se concibe enlazada con
calíptico frente al libro tradicional y los el exterior, en red con todas las alternati-
tipos de lectura y producción que les son vas culturales -desde locales hasta inter-
concomitantes. Tampoco abogamos por nacionales- que requieran sus usuarios (da-
derribar sus templos de culto y convertirlos mos por contestada la duda sobre si ca-
en salas de televisión, de video, de audi- ben o no los audiovisuales en las bibliote-
ción de bandas sonoras, de cómputo o de cas, con lo dicho hasta aquí y con lo que se
conversación en detrimento de las prácti- plantea a lo largo de este capítulo).
cas de lectura de la era Gutemberg. La letra Con el Manifiesto como referencia para
impresa convive en la vida corriente con pensar la biblioteca escolar, notamos un de-
otras formas de expresión y, en conjunto y talle: aunque hay mucho silencio en las
de manera equilibrada, lo percibido como autoevaluaciones de los maestros y directivos
herencia cultural valiosa habría de tener acerca de los modos como las bibliotecas
cabida en los lugares construidos para pre- aportan al proyecto de la institución en gene-
servar ese patrimonio y brindar ocasiones ral y a la formación de lectores en particular,
para que las nuevas generaciones lo disfru- afortunadamente no todos callan. Sin entrar
ten y se lo apropien. en detalles algunos cuentan, por ejemplo, que
La UNESCO, en su Manifiesto sobre Bi- “La biblioteca apoya los proyectos de los diferentes pro-
blioteca Escolar 17 de 1999 recogió los fesores como la hora del cuento, proyecto de lectura en
consensos actuales que definen el sentido voz alta y correo escolar Inter-sedes” (I.E. 254), “Tene-
de este espacio, en primera instancia liga- mos reservado un horario sólo para préstamos de libros
do al desarrollo de los objetivos del pro- de literatura; durante este espacio el alumno puede so-
yecto educativo de las instituciones de las licitar el libro que guste para su lectura; para ello,
que hacen parte; donde la información se semanalmente exponemos el material del que pueden
utilice, se cree y se evalúe, independiente- disponer” (I.E. 327) y “se incentiva la lectura en los
mente del soporte, formato o medio de di- niños, por medio de talleres de lectura” (I.E. 291). Son
fusión. La biblioteca escolar, indica el Ma- notas brevísimas, es cierto, pero resultan úti-
nifiesto, tiene responsabilidad en la forma- les en el propósito de vislumbrar qué elemen-
ción de sujetos que incorporen a sus vi- tos de evaluación de las condiciones para for-
das, de manera permanente, la lectura y las mar lectores sería válido tener en cuenta. Son
bibliotecas para satisfacer necesidades de el germen de un mundo por investigar.

17. Se trata del “Manifiesto IFLA/UNESCO sobre biblioteca escolar” de 1999 (es una reafirmación, con ajustes, de
un original realizado en 1980. IFLA es la sigla en inglés de Federación Internacional de Asociaciones de Bibliotecarios
y Bibliotecas). La dirección en la red donde se halla el texto es: http: //portal.unesco.org/ci/en/file_download.php/

48 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


Paradójicamente, los restantes informes, va” (I.E. 339), “Saben que la biblioteca es un espacio
justo por lo contrario de lo que acabamos de grande con muchos libros donde no debemos hacer bulla
contemplar, refuerzan la convicción de que y se buscan tareas e investigaciones” (I.E. 313). Tal
debemos estudiar la situación: vez, si realizamos sistemáticamente y con ri-
“Desde la biblioteca no se realiza ni se impulsa gurosidad (año tras año) el seguimiento de los
ninguna campaña para motivar los niños a la lectura” sentidos que adjudican los niños y jóvenes a
(I.E. 311), “En ninguna de las sedes existe un progra- la lectura y la biblioteca, algún día tendremos
ma que estimule la lectura de manera libre y espontá- información fiable que nos indique la evolu-
nea, como actividad recreativa e informativa“ (I.E. 279), ción de nuestra situación y los resultados de
“Desde la biblioteca no se planean actividades para nuestros esfuerzos.
motivar a los niños a leer, todavía se cree que esta Los factores a los que les pasamos revista
actividad debe ser planeada por las docentes del área de al principio de este capítulo, como son la ubi-
castellano. Sin embargo en esta lucha por mejorar la cación de la biblioteca, el personal a cargo,
calidad de nuestros estudiantes los docentes de las dife- las características del espacio y el tiempo son
rentes áreas utilizan los textos como medio de investiga- determinantes de los usos, que se concretan,
ción, trabajo y lectura. Falta un espacio para tomar la por una parte, en las actividades y los progra-
lectura desde otra perspectiva, la recreativa, es necesa- mas que se impulsen desde ella. Al listado de
rio cambiar el sentido que se tiene sobre el acercamiento esos factores se le suma la colección de mate-
al texto sólo como medio de conocimiento” (I.E. 282). riales (en los distintos soportes), el acceso a
-el subrayado nuestro-, “Este lugar se utiliza sólo esa colección, su organización, la renovación
por algunos niños como sala de lectura y para consultar y los cuidados que se le otorgan, entre otros.
tareas, pero no existen programas desde la biblioteca
para hacer promoción de lectura”. (I.E. 324), “El 100%
El préstamo y los usos
de los estudiantes asiste a la biblioteca para resolver
tareas” (I.E. 328). significativos de los documentos
Claro está que el problema tiene que ver Describir el acceso en cuanto al préstamo
con la idea que se hacen los estudiantes de de los materiales de la colección, dilucida
lectura y de biblioteca, a propósito algunos algunos rasgos de la dinámica de las prácti-
maestros les consultaron a sus pupilos, las cas escolares de biblioteca. Si nos atenemos
conclusiones que sacan dos de ellos son las a lo que dicen las autoevaluaciones de los
siguientes: “Para la mayoría es un lugar donde se participantes en el proyecto de ciudad, un pri-
debe guardar silencio, donde existen muchos libros que mer grupo está conformado por las institu-
hay que cuidar y que es un sitio en donde se puede ciones educativas donde los materiales se
recibir ayuda para su actividad escolar y de aprendiza- sacan de la biblioteca y se llevan al salón de
je. Se puede observar que lo que más se ha inculcado a clase (se le prestan al docente, es más bien
los estudiantes es que la biblioteca se debe cuidar olvi- el funcionamiento del bibliobanco), en el se-
dando su objetivo principal que es el de consultar o gundo grupo el libro se facilita exclusivamen-
disfrutar de una actividad académica o lúdica formati- te para consulta dentro de la biblioteca (son

Leer la Escuela 49
la mayoría) y el tercer grupo corresponde a carnet estudiantiles; al no prestar los libros para la
las que permiten llevarse el libro fuera de la casa no sufren daños ni bajas y permanecen intactos”
institución (de este servicio en algunos ca- (I.E. 307), “[la encargada, a los libros] casi no los
sos disfrutan los profesores y no los niños, presta para sacarlos del colegio porque en anteriores
no hay datos de préstamos de materiales di- ocasiones los estudiantes no los han devuelto y se han
ferentes a los libros). Así lo expresan: perdido cerca de 12 textos” (I.E. 294). El problema
Grupo 1: “El manejo de estos libros se da directa- es común a todas las bibliotecas públicas, sin
mente por el docente y únicamente dentro del aula, es embargo, el riesgo de robo y el deterioro qui-
decir, no se pueden consultar para tareas” (I.E. 315), zás vale la pena si pensamos que de lo contra-
“Su uso se orienta fundamentalmente como sala de rio la biblioteca no cumple cabalmente su fun-
audiovisuales y como bibliobanco, ya que los profeso- ción. Umberto Eco pone el dilema en estos
res sacan el material que necesitan para llevar a su términos: “Teniendo que elegir entre permitir
salón de clase y luego lo devuelven” (I.E. 286). leer los libros o no, cuando un libro sea dañado
Grupo 2: “El préstamo de los textos para los es- o robado se comprará otro” ...“es un criterio
tudiantes se realiza sólo dentro de la biblioteca, es millonario, pero es un criterio”19 . Si el objetivo
decir, no se pueden sacar para la casa y deben presen- es ganar lectores, perder algunos libros no es
tar el carné escolar” (I.E. 282). “El acceso de los tan grave, peor es no intentar hacer aquello
libros es restringido, sólo la señora encargada tiene que justifica la existencia. Sobra decir que es
contacto directo con ellos, ella pasa los libros que los el punto de vista en el que nos situamos las
muchachos necesitan pero ni siquiera pueden sacarlos autoras de este libro y como todo aquí está
de la biblioteca, no hay sistema de préstamo” (I.E. abierto a la discusión; pero, en todo caso, es
307), “Acceso a los libros: Las personas se acercan a vital que sepamos a ciencia cierta qué ocurre
la biblioteca, buscan el libro que necesitan ya sea con los préstamos, a quiénes se los hacen para
escolar o para leer y realizar su actividad dentro de la usarlos dónde, por cuánto tiempo y cuáles
misma” (I.E. 340). condiciones se ponen, todo ello es necesario
Grupo 3: “Sistema de uso: Dentro de la Institu- en la evaluación de las estrategias de nuestras
ción y en ocasiones en préstamo” (I.E. 285), “Debido a bibliotecas.
que el espacio no es el adecuado, los libros se prestan Por supuesto, las opciones tienen que ver
para llevar a casa”18 (I.E. 336), “Sólo se realizan prés- con dos cosas, por una parte la conciencia
tamos internos a los alumnos; si algún docente necesita acerca del valor del bien público, como acer-
un libro se le permite sacar el material de la institución tadamente lo dice un reporte “hace falta educar
(I.E. 311). a los estudiantes para que traten mejor los libros y
La causa de las restricciones al préstamo adquieran buenos hábitos de lectura” (I.E. 294) y,
externo es la protección de la colección: “Los por otra, los procesos tecnificados de con-
libros circulan dentro de la biblioteca por medio de los trol de la movilidad de cada elemento del

18. En el espacio de la biblioteca de esta institución funciona la rectoría y la sala de profesores.


19. Op. Cit. Eco Umberto.

50 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


acervo. Pero los indicios que ofrecen los in- abierta, que es aquella en la cual los libros
formes evidencian medios pobres (hasta ru- están al alcance de la mano de los usuarios,
dimentarios) que no se compadecen con los “Sucede que uno de los equívocos que domi-
desarrollos contemporáneos de la na la noción de biblioteca es que se vaya allí
biblioteconomía y la archivística. Demos un para buscar un libro cuyo título se conoce”,
vistazo a las afirmaciones a continuación: advierte Eco20, “En verdad esto sucede con
“Para realizar el control del material cada estudiante frecuencia pero la función principal de una
debe presentar su carné y solicitar el libro, la encargada biblioteca [...] es la de descubrir libros cuya
registra en un cuaderno la hora de salida y entrada. Para existencia no se sospechaba y que, sin em-
el control docente igualmente se registra en un cuaderno la bargo, revelan ser de extremada importan-
hora de entrada y salida de los textos” (I.E. 311). cia para nosotros. Ahora, es cierto que este
“No hay índices de materia, de autor ni de libros, ni descubrimiento puede ocurrir hojeando el
Kárdex, los libros se piden por temas con ayuda de la catálogo, pero nada hay más revelador y
bibliotecaria” (I.E. 261), “Se retiene el carné estudiantil; apasionante que explorar anaqueles [...] y
sino tiene carné se le solicita una autorización de algún encontrar junto al libro que hemos ido a bus-
docente debidamente firmada.... Se tiene un formato que car otro que no buscábamos pero que resulta
controla los préstamos; en él se registra el nombre del ser fundamental”.
estudiante, grado y el título del libro prestado” (I.E. 327). Y esto vale todavía más para los usuarios
La falta de control de la colección se aso- de bibliotecas escolares, para quienes la ex-
cia, en ocasiones, a responsabilidades indi- periencia de vagar entre anaqueles de libros
viduales, en esa cadena interminable de ta- les puede deparar hallazgos que los mar-
reas que se le suman al docente: quen por el resto de sus vidas.
“Entre las dificultades que se tienen para hacer de la Pero, por lo visto, la colección abierta está
biblioteca un espacio funcional, está la falta de compromiso ausente en los espacios de los que dan cuen-
de los docentes para cuidar el material que ahí se encuen- ta los informes que recogemos aquí, y/o no
tra. En la sede se ha perdido mucho material importante y fue objeto de atención y no se le explicitó.
se han dañado libros sin que los docentes se hayan hecho Tres fragmentos son ilustrativos: “Acceso a los
responsables de ellos. Cuando se hacen los inventarios, nos libros: Es limitado sólo para quien maneje la bibliote-
damos cuenta de las pérdidas que hemos tenido. No tenemos ca, no se permite que los niños tomen los libros de
una persona asignada para estar al tanto de lo que ocurre manera libre” (I.E. 322), “El maestro que se interese
con los materiales y cada quien los utiliza de acuerdo a su busca los libros y los lleva al salón para que los niños
criterio” (I.E. 327). trabajen con ellos” (I.E. 327), “La colección es cerra-
Detengámonos ahora en el momento pre- da, de forma que sólo pueda ser manipulada por la
vio al préstamo, el dedicado a la localiza- persona a cargo y algunos maestros” (I.E. 327). Ha-
ción del libro. Los conocedores del mundo cemos este llamado de atención porque pen-
de las bibliotecas recomiendan la colección samos que la distancia puesta entre el apren-

20. Ibid

Leer la Escuela 51
diz de lector y el texto es negativa para el personal: “en forma local, es decir, el bibliotecario
alcance de las metas que nos proponía el organiza y codifica los libros según su criterio. Otra
Manifiesto al cual nos referíamos antes. confiesa que los libros “reposan en desorden” (I.E.
Reconocemos que de nuevo nos hallamos 274), y la que resta ordena los materiales “por
frente a un problema relacionado con la ga- 4 secciones, literatura infantil, libros escola-
rantía de encontrar prontamente los materia- res, literatura (poemas, recitales, obras) y re-
les solicitados, un problema derivado de las vistas libros de manualidades, cocina etc.” (I.E.
técnicas de catalogación, de las cuales de- 340).
pende, en buena medida, que los materiales Y en cuanto a la colección en sí ¿de qué
se refundan o se encuentren. El siguiente frag- está hecha? Identificar cuáles libros hay, si
mento va al meollo: publicaciones periódicas, cintas de video, dis-
“Los libros se han conseguido por donaciones y com- cos compactos (de audio únicamente e ima-
pras de la institución pero aún no se han terminado de gen móvil y audio), mapas, juegos, materiales
organizar según la clasificación Dewey. En este aspecto didácticos, hardware, software, conectividad
se trabaja con la ayuda de los estudiantes como proyecto a Internet, etc., es obviamente, fundamental
de servicio social. Como no existe una buena clasifica- en la evaluación de las condiciones que la ins-
ción no están organizados los ficheros que posibiliten a titución brinda para formar lectores. El inves-
los estudiantes la búsqueda de los textos con mayor tigador Chartier se encargó ya de ponernos en
facilidad” (I.E. 324). guardia frente al delicado asunto de la selec-
Contabilizamos 22 instituciones que hicie- ción de materiales de cada biblioteca, nos hizo
ron alguna alusión al renglón dedicado a los caer en cuenta que la esencia misma de este
modos de organizar la biblioteca y 15 que no proyecto -guiado por la necesidad de ateso-
lo hicieron -recuérdese que trabajamos con rar la memoria que queremos heredar a la hu-
datos de 37 instituciones que reportan “tener manidad- radica en las elecciones realizadas
biblioteca”-. La mayoría, 9, le pone orden de las obras que juzgamos valiosas. Las pala-
atendiendo al área, tema o materia, en 4 ca- bras de alguien que vive una de nuestras insti-
sos aplican calificativos: “los libros se encuentran tuciones educativas por dentro abren una puer-
bien organizados” (I.E. 308), “tiene una correcta orga- ta a la situación (el subrayado no hace parte
nización de los libros” (I.E. 256), “biblioteca bien or- del original):
ganizada” (I.E. 327), en 3 acuden a la cuantifica- “Con respecto a los textos que posee no son acordes
ción: “Tiene los textos inventariados” (I.E. 282), “A para primaria, las necesidades están más atendidas en
comienzos del año pasado, se levantó un inventario” lo que se refiere al nivel de bachillerato, dejando por
(I.E. 299), “Los libros están organizados por numera- fuera a los niños y niñas de las sedes de primaria que
ción” (I.E. 291). pertenecen a la institución. Aunque las sedes se fusio-
2 usan un sistema reconocido, el indicado naron a la institución principal hace más de 2 años,
en el párrafo precedente y ésta: “Clasificación hasta el momento no se ha pensado en implementar una
por áreas sistema Mevil Dewey Decimal (I.E. 285). biblioteca infantil por sede, o abrir un espacio en la
Hay una institución donde prima un criterio sede principal para que los niños y niñas de primaria

52 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


puedan acceder a ella. En la sede xxxxx contamos con actualidad las editoriales ya no tienen en el mercado”.
un lugar muy pequeño donde antiguamente funcionaba Si la persona que escribió el informe se refiere
la dirección, allí, existe una estantería que posee libros a libros de texto, a manuales escolares, como
viejos, que en la actualidad las editoriales ya no tienen tememos, nos preocupa el calado de la con-
en el mercado; estos textos sirven de consulta para ta- tradicción entre las declaraciones acerca de
reas a los niños y niñas de la escuela y de apoyo a la los propósitos del área de lenguaje -y en ge-
profesora de español cuando hay que realizar activida- neral de la formación de lectores- y lo que de
des grupales. Además se encuentra el Baúl de Jaibaná verdad es factible que ocurra en las institu-
que es poco usado por la gran mayoría de los docentes. ciones si no hay diversidad de textos (auténti-
Necesitamos urgentemente una biblioteca escolar para cos) al alcance de los estudiantes. La tenden-
que nuestros niños y niñas conozcan el mundo” (I.E. cia a la sospecha del desequilibrio de la co-
259). lección, determinado por el mayor peso de
Es controversial, por supuesto, la determi- los libros instruccionales, se configura desde
nación de los materiales que debe contener las observaciones referidas a:
una biblioteca escolar, pero algunos acuerdos • Los modos de organizar la colección (las
sobre lo fundamental no son tan complicados varias clasificaciones por tema, área o ma-
de allegar. Por ejemplo, si nos guiásemos por teria, corresponden a divisiones escolares
la cita, tendríamos una agenda de discusión del conocimiento).
inicial interesante. Apunta por un lado a tres • Los materiales más solicitados en las biblio-
tópicos -materiales para hacer tareas, anti- tecas -una respuesta típica: “Los libros de las
guos (¿deteriorados?) y que dejan por fuera áreas de trabajo en los niveles de 2º a 11º y los de
una parte de la población estudiantil-; y, por consulta”- (I.E. 322).
otro lado a materiales desaprovechados como • Los modos de consecución de la dotación
los del Baúl de Jaibaná. (v.g. donación de cada estudiante de un li-
El tópico de “la consulta para tareas” va en la bro por área y por grado).
línea del dilema lectura obligatoria vs. lectura • Los préstamos (algunos restringidos para lle-
“libre” que es explícito en el Manifiesto de la var al aula).
UNESCO. Allí se conmina a atender, tanto las • La existencia de la figura del bibliobanco.
necesidades de biblioteca propiamente suje- Los manuales son libros ex profeso para
tos a los compromisos escolares, como a las la escuela y su exclusividad acarrea el sacri-
que dependen de la libre elección de los ni- ficio de otros textos, los que circulan por
ños y los jóvenes. Ya entrado el siglo XXI es fuera de sus fronteras ¿cuál es el argumento
insostenible ignorar que “leer no tolera impe- que exime a la escuela de su responsabili-
rativos” como dice Daniel Pennac -entre otros dad frente a éstos? si la escuela declara que
muchos-, aunque no es fácil, lo sabemos, por- contribuye a formar ciudadanos, ¿es tan ex-
que si por algo se caracteriza la escuela es traño que se le exija que deje entrar los tex-
por su carácter impositivo. tos que tendrán que encarar mañana sus
Y hay un agravante: “libros viejos que en la egresados?. Entendámonos, los manuales

Leer la Escuela 53
son en sí mismos un tipo de texto, pero está variedad que pueda defenderse requiere
sobreestimada su valía en la construcción reflexiones hondas de parte del colectivo
del conocimiento y en su capacidad para completo de maestros y directivos de cada
servir de puente a la cultura escrita. Los institución. Las observaciones incluidas en
manuales escolares recogen textos, como el capítulo de planeación y prácticas de aula
cuentos, cartas o noticias, pero sobre es- pueden ayudar en la determinación de pis-
tos opera de modo tal que les resta autenti- tas para la selección de textos, y entre las
cidad: les separa de sus soportes originales consultas que requiere esta tarea valdría
(fuera de los periódicos o las revistas, co- incluir la publicación de Jurado y
piada en un libro escolar, la noticia no es Bustamante 21 en el cual proponen los si-
noticia), les relega de las situaciones socia- guientes criterios: potencialidad discursiva
les (determinadas por vectores temporo-es- para generar interlocución en los contextos
paciales) de las que hacen parte y, por aña- escolares y extraescolares, universalidad,
didura, los adapta resumiéndolos o cortán- estructuración no dogmática, capacidad
dolos (diversos trabajos tocan este último para sugerir redes intertextuales e interro-
tema, uno reciente hecho en Cali es el si- gativas, seducción hacia la lectura y la es-
guiente: Calle Beatriz Elena, “Criterios de critura y aportes para la investigación de
selección de textos escolares que abordan los profesores.
la comprensión lectora”, trabajo de grado En una onda coincidente, Bustamante y Díaz
de la Especialización en la enseñanza de la en su análisis de “los libros como factor
lectura y la escritura en lengua materna, Uni- asociable al desempeño” 22 pasan revista a la
versidad del Valle, 2005). bibliografía de la década del 90 en Colombia,
¿Qué criterio seguir en la evaluación de de política educativa, de organismos recono-
las colecciones, bajo la premisa del equili- cidos (Banco mundial, CERLALC, Misión de
brio? (es decir, aspirando a ofrecer un servi- ciencia, educación y desarrollo, entre otros) y
cio por igual a todos sus usuarios, en consi- de recomendaciones de expertos (en enseñan-
deración al derecho a la información y co- za de la lectura y la escritura) que arroja la
municación, según edad, condición de es- conclusión a la cual se suman los autores:
tudiante e intereses diversos). El Manifiesto “También nosotros somos de la idea de que si
puede arrojar luces, (recuérdese, recomien- un niño dispone de material escrito y otro no,
da que la biblioteca ayude al desarrollo del el primero tendría ventajas para desempeñar-
proyecto educativo de la institución, de se en las áreas de conocimiento en la escuela
modo que allí hay un factor diferencial), pero (aquí nos restringiremos al área de lenguaje
el reto de hacer una selección de calidad y que es de la que tenemos información). Es una

21. Jurado Fabio y Bustamante Guillermo, “Por una diversidad de textos en el aula de clase”, Opciones pedagógicas
12, Bogotá, Universidad Distrital Francisco José de Caldas, 1994.
22. Bustamante Guillermo y Díaz Luis Guillermo, “Factores asociables al desempeño de los estudiantes” -Ilustrado para
la evaluación de impacto del plan de universalización en el área de lenguaje-, Universidad Nacional de Colombia, 2003.

54 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


hipótesis ligada a la idea de que la tradición paciones no aplican solamente a nuestras 46
escrita es el mecanismo para trascender el instituciones educativas públicas de Cali, sino
contexto particular hacia la cultura universal y que son presupuestos básicos generales:
que es ella y su código la que predomina en la “...puede ocurrir, por ejemplo, que se reci-
escuela [Mockus et al., 1994]”. ban los libros y se almacenen -so pretexto de
Y sorpresa, sorpresa, contrario a lo que se cuidarlos y tenerlos en buen estado para cuan-
podría esperar, finalmente el estudio de do haya que dar cuenta del inventario de la
Bustamante y Díaz no respalda la hipótesis de escuela- o se mantienen a la vista de en una
que libros y desempeño escolar están asocia- biblioteca que permanece con llave para que
dos. No, no estamos enterrándonos el cuchi- no los dañen... con lo que tal vez no tengan
llo, “el material escrito coadyuvaría al desa- incidencia alguna en el desempeño de los ni-
rrollo de la competencia comunicativa si se dan ños en el área de lenguaje. Esto llama la aten-
ciertas condiciones que los datos disponibles, ción en el sentido de investigar cómo la insti-
por no haberlas buscado, no permiten preci- tución, los directivos, los profesores y los ni-
sar...”23, es decir, la dificultad radica en la in- ños se relacionan para utilizar los libros en la
vestigación misma, en el modo de interrogar escuela, qué vida académica generan, para qué
la realidad; los mismos autores afirman que la son utilizados, quién y con qué criterios los en-
manera cómo influye la disposición de los ma- trega a los niños, si generan lecturas más allá
teriales de lectura en el desempeño escolar de los compromisos del salón de clase, etc”25 .
(medido por pruebas24 ) pasa por los “usos”. “Aunque en cada una de las sedes existe biblio-
Investigar la correlación que tantos dan por teca, me atrevo a decir que se utilizan muy poco, es
existente, exige que a los libros nos acerque- más, desconocemos los ejemplares que en ellas hay”
mos con unas preguntas que trasciendan su (I.E. 272), apunte certero acerca de uno de
existencia en sí para indagar en la interacción los factores de los que depende la posibi-
que sostienen con los sujetos que juegan como lidad de que los materiales de lectura co-
lectores expertos o aprendices. bren vida, lo cual sólo ocurre cuando son
Para los propósitos de este libro, el llama- puestos en relación con lectores. Alguien
do de Bustamante y Díaz resulta muy impor- más añade: “La biblioteca aunque tiene un hora-
tante porque nos advierte la ingenuidad en la rio amplio se 8:00 a.m. a 5:00 p.m. está
que podemos caer si persistimos en ignorar subutilizada ya que no hay comunicación entre los
que son las prácticas de lectura las que for- docentes y la persona encargada. Esta no se cons-
man lectores y no los libros prisioneros de tituye en un apoyo para mejorar el desempeño esco-
fríos estantes. Aunque se reitere lo que ya he- lar“ (I.E. 324). Y otro más complementa: “Re-
mos dicho, vale constatar que estas preocu- conozco que el trabajo en la biblioteca con los alum-

23. Ibídem
24. Jurado Fabio y Pérez Abril Mauricio, “Juguemos a interpretar”, Plaza y Janés, 1998.
25. Op. cit. Bustamente y Díaz

Leer la Escuela 55
nos es pobre, y de que aunque se encuentre en las nes ni tampoco de las interacciones que se
condiciones que está, se puede sacar mayor prove- verifican con ellos, pero, ya lo habíamos di-
cho de ella” (I.E. 270). cho en la introducción, ese no era tampoco el
Y damos por terminado el capítulo. Como objetivo. Lo es, en cambio, identificar sospe-
pudo ver el lector, no es posible, con los infor- chas de aspectos problemáticos que las eva-
mes de los que disponemos, decir nada con- luaciones institucionales sobre condiciones
cluyente acerca de las bibliotecas escolares, para formar lectores podrían abordar, y en esto
los materiales constitutivos de las coleccio- los datos sí fueron muy útiles.

56 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


Nuevas tecnologías de
la información y la comunicación

GLORIA RODRÍGUEZ BARRENECHE

Leer la Escuela 57
L
as Tecnologías de la Información y la ción ideados por el hombre. Que la escritura
Comunicación, las mentadas TICS, es una tecnología lo señalaba hace más de
pueden ser concebidas de maneras 20 años Walter Ong en su libro “Oralidad y
distintas en tanto foco de evaluación escritura”1 :
de las condiciones de la institución escolar “Platón consideraba la escritura una tec-
para formar personas que lean y escriban. Por nología externa y ajena, lo mismo que hoy en
esta razón, decidimos empezar por situar bre- día muchas personas piensan de la computa-
vemente, un punto de vista conceptual que dora. Puesto que en la actualidad ya hemos
dibuja un perfil de esta problemática escolar interiorizado la escritura de manera tan pro-
con ciertas complejidades que nos interesa funda y hecho de ella una parte tan impor-
resaltar. Después, presentamos los datos re- tante de nosotros mismos, así como en la épo-
cogidos por algunos maestros y directivos do- ca de Platón no la había asimilado aún plena-
centes en sus instituciones educativas, duran- mente (Havelock, 1963), nos parece difícil
te el transcurso del “Programa de Mejoramien- considerarla una tecnología, como por lo re-
to de la Calidad de la Educación en el munici- gular lo hacemos con la imprenta y la compu-
pio de Santiago de Cali: Hacia un Proyecto tadora. Sin embargo la escritura (y particu-
Educativo de Ciudad” (2004). Al final, larmente la escritura alfabética) constituye
reconsideramos la unidad del capítulo, pen- una tecnología que necesita herramientas y
sando en el aporte que hace a la idea de in- otro equipo: estilos, pinceles o plumas; su-
cluir las tecnologías mencionadas entre los perficies cuidadosamente preparadas, como
factores asociables al logro en lenguaje. el papel, pieles de animales, tablas de made-
ra, así como tintas o pinturas. Clanchy (1979,
Textos manuscritos, impresos pp. 88-115) trata el asunto detalladamente,
dentro del contexto medieval de Occidente
y virtuales: su creación y
en el capítulo intitulado “La tecnología de la
lectura cambia
escritura”. En cierto modo de las tres tecno-
Es más frecuente encontrar referencias a logías la escritura es la más radical. Inició lo
las nuevas tecnologías de la información que la imprenta y las computadoras solo con-
Ntics, que a las Tics. El adjetivo nuevas no es tinúan: la reducción del sonido dinámico al
gratuito, presupone la existencia de otras, espacio inmóvil; la separación de la palabra
viejas en comparación. ¿Cuáles son las ante- del presente vivo, el único lugar donde pue-
cesoras que nos cuesta ver? la escritura mis- den existir las palabras habladas”.
ma y los antiguos impresos constituyen tec- Al experimentar la invención de la escritu-
nologías y, en contraste, las opciones elec- ra, sobra decirlo, la humanidad vivió una ex-
trónicas resultan verdaderamente una nove- pansión de sus recursos de pensamiento, aun-
dad en esa cadena de modos de representa- que estos no avanzaron en el sentido de pro-

1. Ong Walter, “Oralidad y escritura”, (original en inglés: 1.982), Editoral Fondo de Cultura Económica, 1.996.

58 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


greso porque escribir no es mejor que hablar las creencias, los valores y en general en la
-y ello todavía hay que decirlo-, lo anotaba representación del mundo.
Olson (pág. 15)2 : “La escritura puede ser im- En el marco de la alfabetización, con las Ntics
portante pero puede no serlo por las razones en general nos vemos abocados a un movimien-
que tradicionalmente hemos invocado”. La to que empieza con su repercusión en la forma-
opción del lenguaje escrito, una herramienta ción tradicional de lectores -ligada a la letra
cualitativamente distinta de la oral, ha evolu- impresa- y llega hasta la instauración de una
cionado a lo largo de la historia en el sentido nueva alfabetización -la concerniente a los
de sus posibilidades de difusión -aunque no audiovisuales y al mundo digital del computa-
solamente, claro-; así, los textos, primero ma- dor e Internet. Emilia Ferreiro 3 nos ayuda a
nuscritos, luego multiplicados por la impren- elaborar esta idea en una reflexión que vale
ta y más tarde catapultados al infinito mediante más allá del empuje que dio el invento de
el registro digital han transformado radical- Gutemberg a la escritura:
mente el procesamiento de la información, “Múltiples transmutaciones sufrieron los pri-
tanto que ya se acepta que el hecho constitu- meros textos de arcilla o de papiro hasta con-
ye una revolución que instaura una era, la “so- vertirse en libros reproducibles, transportables,
ciedad de la información” (Castells, 1997). fácilmente consultables, escritos en las nuevas
¿Y la imagen? otra de las formas del lenguas desprendidas del latín imperial y hege-
lenguaje humano que también ha recorri- mónico.
do un larguísimo camino desde las pare- Los lectores se multiplicaron, los textos
des de las cavernas, un origen más anti- escritos se diversificaron, aparecieron nuevos
guo que la escritura. Uno más de los re- modos de leer y nuevos modos de escribir. Los
cursos del pensamiento y de la comunica- verbos “leer” y “escribir” habían dejado de te-
ción, otra tecnología de innegable influjo ner una definición inmutable: no designaban (y
en campos como la publicidad y el entrete- tampoco designan hoy día) actividades homo-
nimiento, por citar sólo dos. Cómic, fotogra- géneas. Leer y escribir son construcciones so-
fía, cine y televisión fueron objeto de análisis ciales. Cada época y cada circunstancia histó-
desde múltiples disciplinas desde mediados rica dan nuevos sentidos a esos verbos” (el su-
del siglo XX bajo la denominación “Mass brayado es nuestro).
media” o “cultura de masas” debido a la rup- Leer y escribir son construcciones socia-
tura que provocaron en las rutas de acceso a les, es decir, prácticas culturales que incluyen
la información y al consiguiente debate ge- materiales, procedimientos, redes humanas,
nerado sobre sus influencias en la vida coti- contextos, reglas y otros elementos que no
diana, el consumo de “la industria cultural”, permanecen estáticos en el tiempo. Todo un

2. Olson David R, “El mundo sobre el papel -El impacto de la escritura y la lectura en la estructura del conocimiento”,
(original en inglés: 1994), Editorial Gedisa, 1998.
3. Ferreiro Emilia, Pasado y presente de los verbos leer y escribir, Fondo de Cultura Económica, México, 2001.

Leer la Escuela 59
problema para una institución como la escue- visual y una sociedad en red (Castells, 1997)
la, a la cual se le demanda con progresiva in- sitúa a la escuela en un contexto de incerti-
sistencia que prepare a los sujetos para enca- dumbres y desasosiegos”.
rar los textos escritos que circulan por fuera Es evidente, “la cultura de masas”, los com-
de sus muros, pero -anota Emilia Ferreiro- sin putadores e Internet han originado diversos
que esta institución haya aprendido del todo problemas a la alfabetización -o de alfabeti-
todavía “a alfabetizar para el periódico y para zación-. La eterna cadena forjada de los mie-
las bibliotecas, debe enfrentar ahora el ver en- dos a que cada avance tecnológico “pueda
trar Internet a las aulas” (ibídem). asesinaralgoqueconsideramospreciosoyfruc-
Aludir a una práctica social que muta con tífero”5 tiene ahora un eslabón pavoroso: nues-
la vida no insinúa indefinición absoluta ni una tros conocidos modos de leer y escribir, liga-
amplitud sin límites. Afirmar que todo se lee, dos al tradicional papel, están amenazados
que todo son signos y que por tanto una ac- por los teclados y las pantallas. Empieza en-
ción fundamental del ser humano es interpre- tonces a oscilar el péndulo de las opiniones,
tar, no resultaría útil. La lectura y la composi- desde un extremo donde se reverencia lo li-
ción de textos escritos circunscriben un terre- bresco y es ignorado y evitado lo nuevo, hasta
no de contornos marcados -aunque tenga el extremo opuesto donde prima la actitud de
nexos con otros códigos-. La mención del au- concentrarse exclusivamente en el mundo de
diovisual iba en la línea de defender la validez las novedades audiovisuales y de los ordena-
de los distintos lenguajes. Así como la orali- dores, asumiendo ingenuamente su bondad y
dad no es menos, más ni igual que la escritura, perdiendo de vista todo lo demás.
lo mismo pasa con la imagen. Cada una de Pero antes de seguirle la pista a las nuevas
estas alternativas de lenguaje tiene su especi- maneras de leer y escribir, intentemos aclarar
ficidad. algo que seguro resulta confuso. Hemos men-
La escritura naturalizada en el libro no mu- cionado otros lenguajes y la escritura, y sos-
rió al nacer la televisión y tampoco será susti- tenemos la centralidad de ésta. Pero no es
tuida por el computador y la red virtual. No nuestra intención mezclar todo, la interpreta-
obstante, nuestros modos de leer y escribir sí ción y la producción de cada forma en que el
que resultan afectados por este par de nuevas lenguaje existe exige procesos distintos: leer
herramientas, y para los educadores ello trae una telenovela, en el sentido crítico, no re-
consigo una consecuencia importante, en pa- quiere los mismos recursos mentales que leer
labras de Carlos Lomas (2005)4 : una noticia del periódico. Las relaciones y los
“La convivencia en el tiempo y en el espacio problemas entre imprenta y “mass media” no
entre una cultura impresa, una cultura audio- son idénticos a las relaciones y los problemas

4. Lomas Carlos, “Comunicación y educación -Otros lenguajes, otros saberes: ¿otra educación?”-, Cuadernos de
Pedagogía, No. 343, No. identificador: 343.012, febrero de 2005.
5. Eco Umberto, “Eso matará aquello”, traductor: Sergio DiNucci, tomado de Internet, sin fecha.

60 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


surgidos entre “la galaxia Gutemberg” y “la so- denador e Internet es sin duda un tema de
ciedad de la información”. especulación efervescente, pero ya nadie
Esta última díada, aquí nos interesa más, defiende que se trate de un hecho rever-
puesto que el antiguo sistema de escritura que sible o irrelevante. Del mismo modo que
tomaba cuerpo en textos sobre el papel, se ha la invención de la escritura supuso im-
visto transformado (revolucionado, según afir- portantes cambios psicosocioculturales
man los historiadores Cavallo y Chartier). Ob- en los individuos y las comunidades, la
viamente el dominio de los otros sistemas de comunicación electrónica está modifican-
signos, entre ellos los audiovisuales, tiene una do diversos aspectos estructurales de la
enorme importancia, pero no es este el espa- comunicación y de su aprendizaje” 6 (el
cio propicio para el desarrollo del tema. subrayado es nuestro).
En efecto, actualmente va en aumento el
Ni el computador ni el lápiz son número de trabajos sobre la transformación
la llave para la alfabetización que se está operando, una muestra es el artí-
Desde la ortografía hasta la idea misma culo de Carmela Domínguez Cuesta, publica-
de texto -que se confronta con la de do en los Cuadernos de Pedagogía en febre-
hipertexto- han sentido “pasos de animal ro de 2005, se titula “El lenguaje de los SMS
grande”, un remezón originado por las Ntics. y del chat en las aulas”. Registra las violacio-
En correos electrónicos, foros virtuales, pá- nes a las normas lingüísticas -más ortográfi-
ginas web, chat y SMS (mensajes cortos cas pero también sintácticas- que se están
intercambiados vía teléfonos celulares, short dando en esos soportes electrónicos debi-
message system en el acrónimo en inglés) do a la necesidad de adaptar el código al
los usuarios usan la lengua escrita con adap- espacio y las urgencias de la comunicación
taciones a las condiciones y potenciales de con una eficiente economía de esfuerzo: hay
los canales electrónicos, apartándose de la sílabas reducidas a una consonante (v.g. d
corrección de la norma lingüística habitual por de), tildes ausentes, espacios entre pa-
validada en siglos de existencia en el papel. labras suprimidos, signos de puntuación re-
Las alternativas son, asumir una posición an- petidos para enfatizar, categorías de la sin-
clada en los viejos referentes o aceptar la taxis perdidas con el fin de simplificar la ex-
realidad: la lengua está viva, la humanidad presión (v.g. preposiciones, artículos, adver-
la reinventa cada vez. En todo caso ya no bios, enlaces), etc.
hay vuelta atrás ni podemos negar esa pre- En el debate acerca de las consecuencias
sencia ubicua, Daniel Cassany observa: de estos cambios para el conjunto de la len-
“El impacto que tiene la actual emigración gua escrita, la autora le apuesta al peso de la
de la escritura con lápiz y papel hacia el or- tradición, y no obstante defiende la necesi-

6. Cassany Daniel, “Enseñar a escribir en el siglo XXI”, en Cuadernos de Pedagogía No. 330, Monográfico, No.
Identificador 330.009, diciembre de 2003

Leer la Escuela 61
dad de reconocer la existencia e importan- da: donde antes sólo había una referencia lin-
cia de las transformaciones -por ejemplo güística, a saber leer y escribir, ahora hay un
como parte de las señas de identidad de los conjunto de competencias difícil todavía de
jóvenes- y la necesidad de estudiarlos para determinar”7 .
su aprovechamiento didáctico; en ese senti- Con un matiz un tanto distinto al de Rodrí-
do remata su artículo así: guez Illera preferimos asumir que justamente
“Nunca será signo de incultura adaptarse a ese saber leer y escribir ahora incorpora nue-
las necesidades del vehículo comunicativo con vas competencias. Pero no tenemos un des-
originalidadeimaginación.Loquesiempreserá acuerdo de fondo con el autor, coincidimos
empobrecedor es limitar el acceso a la comu- en su argumento: “La expresión y la comunica-
nicación a un solo canal y confundir los con- ción en ese mundo [el digital] es cada vez más
textos en los que ésta se produce. En definiti- multimodal y es impensable que vuelva a ser
va, lo que siempre será empobrecedor es no considerada como <sólo lingüística>”. Es
conocer o no querer conocer más escritura que multimodal porque la tecnología permite a
ésta”. cualquier parroquiano hacer composiciones
La mención de contextos en los que la co- de “texto” por ejemplo con imagen, sonido y
municación se produce y la adecuación de la color, además de las palabras, lo que antes
norma lingüística en el artículo de Domínguez, estaba reservado, con limitaciones, a los pro-
introduce elementos fundamentales de los fesionales del mundo de la edición.
acuerdos a los que ha llegado la comunidad Ante el panorama esbozado, lo primero que
académica en torno a la enseñanza de la lec- se nos ocurre a todos es que esa nueva alfabe-
tura y la escritura, y que en Colombia están tización abarca el dominio de contenidos ins-
avalados por documentos oficiales como los trumentales centrados en destrezas técnicas
Lineamientos Curriculares de Lengua Castella- como prender el aparato, controlar el ratón,
na (1998). abrir programas y archivos, imprimir, aprove-
Por otra parte, con las Ntic las opciones char imágenes, enviar correos-e, escanear, bus-
lingüísticas de expresión (que siguen siendo car información en la red, copiar textos, edi-
fundamentales) tienen compañía, lo señala tarlos, etc. Pero con un poco más de elemen-
José L. Rodríguez Illera, “Las consecuencias tos para pensar el tema, autores como Alfon-
(cognitivas, culturales, sociales) del uso habi- so Gutiérrez Martín llaman la atención sobre
tual de los ordenadores y de Internet todavía otros contenidos, los crítico-reflexivos:
están por comprenderse, y en cualquier caso, “...los intereses de Microsoft y su papel de
están y seguirán evolucionando. Pero no cabe monopolio en el mundo; la trascendencia de
duda de que ya han empezado a transformar Google como buscador más usado; la impor-
nuestra idea de qué es una persona alfabetiza- tancia de los programas de mensajería ins-

7. Rodríguez Illera José L. “Nuevas tecnologías en la enseñanza de las lenguas”, en Cuadernos de Pedagogía No. 330,
Monográfico, diciembre de 2003.

62 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


tantánea (léase ‘el Messenger’) en la comuni- ción de una auténtica tarea de escritura. Una
cación entre jóvenes; el teléfono móvil como tarea que cuente con una intención de comu-
signo de identidad y pertenencia al grupo; nicación, un interlocutor real (alguien a quien
los intereses económicos en torno a la telefo- decirle lo que se está escribiendo), algo que
nía IP (a través del ordenador e Internet), la decir, un espacio retórico problemático (cómo
necesidad de una televisión de servicio pú- decirlo, por ejemplo, adecuando la organiza-
blico, etc”8 . ción del texto y los recursos -lingüísticos y no
Ambos contenidos, los técnicos y los críti- lingüísticos- a la intención del autor y las rela-
co-reflexivos, asumen las Ntic como objetos ciones de poder y saber con el destinatario).
de conocimiento, una aproximación que de- En esta línea de pensamiento es que
bemos desarrollar. Otro lado de las Ntic es su Gutiérrez Martín afirma que el desaprovecha-
carácter mediador de otros saberes, v.g. his- miento de las Ntics en la escuela está deter-
tóricos, geográficos, biológicos, literarios, minado por el hecho de que “el usuario se re-
matemáticos, etc. En éste caso, los conteni- laciona con el medio, pero rara vez se comuni-
dos técnicos podrían irse adquiriendo en un ca con otra persona”9 , la dimensión interactiva
uso de las Ntic que incorporen contenidos te- se pierde y eso es grave tanto en la era de la
máticos. Pues, si se acepta que se aprende a sociedad en red como en la galaxia Gutem-
escribir escribiendo (y no memorizando reglas, berg y en el mundo del lápiz. En una errada
ni copiando, ni haciendo planas) y que no hay interpretación de la actitud deseable por par-
un estadio inicial de apropiación de la mecá- te de quien aprende, se cae en la propensión
nica de la lectura (decodificación) para luego al uso individualizado de las tecnologías, asu-
pasar a un estadio de comprensión, defende- miendo una concepción del conocimiento
mos aquí que se aprende de las Ntic “para poco cooperativa (en contravía de los postu-
expresarnos mejor” si no nos acercamos a ellas lados del socio-constructivismo de línea vi-
como técnicas vacías -que en un futuro incier- gotskiana y de enfoques de aproximación al
to se llenarán- sino que las usamos para lo texto de autores como Eco, actualmente acep-
que fueron hechas, para comunicarnos y para tados). En consecuencia, las TICS lamentable-
organizar nuestro pensamiento. mente “...pueden potenciar formas de apren-
Es decir, un contenido instrumental cual- dizaje simples, mecánicas, repetitivas, indivi-
quiera, como puede ser copiar un fragmento duales y descontextualizadas”10 .
de texto y pegarlo en otra parte del mismo Fatalismos aparte, pero con la esperanza
documento o de otro, tiene más posibilidad desprovista de espejismos, lo sensato es aten-
de recordarse y hallar sentido en las prácticas der a las reiteradas evidencias de que las tec-
del aprendiz, si se aprende durante la resolu- nologías, viejas o nuevas, no son la salvación

8. Gutiérrez Martín Alfonso, “Sobre usos y abusos de las nuevas tecnologías”, en Cuadernos de Pedagogía No. 343,
No. identificador 342.015, febrero de 2005.
9. Ibídem, Gutiérrez Martín.
10. Ibídem, Gutiérrez Martín.

Leer la Escuela 63
de las injusticias en la distribución de los bie- Esta desigualdad la padecimos -todavía la
nes culturales de la humanidad11. El analfabe- padecemos- con el mundo de la imprenta y
tismo a secas persiste12 y crece aquel que se después de largos debates ya no se duda de
deja ver en los bajos índices de lectura, gusto su origen social y familiar, con las Tics el fenó-
por ella y comprensión -analfabetismo funcio- meno vuelve y juega. A pesar de estar demos-
nal/iletrismo13 -; pese a los esfuerzos de los trada la no poco frecuente participación de la
gobiernos y las entidades internacionales, escuela en la reproducción de los desequili-
mucha gente vive marginada del mundo de los brios sociales, el reto es romper con ello, pues-
discursos escritos. Para colmo, los desarro- to que ante la incapacidad de la familia y la
llos últimos arrastran agravantes, tanto que ya red social de apoyo para ofrecer condiciones
se habla de “la brecha digital”. que favorezcan la alfabetización plena, si no
La World Wibe Web o red de redes, trajo es en la escuela ¿dónde hallarán los niños y
consigo la idea de la accesibilidad ilimitada a jóvenes de sectores populares la oportunidad
la información, discursos “tecnoutópicos” que de acceso a las NTics y a la conectividad a la
prometían equidad y felicidad; en contraste la que tienen derecho?
decepción no se hizo esperar, “... el acceso
diferencial o desigual puede reproducir divi-
siones ya existentes en la sociedad o ser vehí-
¿Hay computadores en su
culo para el surgimiento de nuevos factores de institución educativa?
diferenciación social. Esto es lo que se ha lla- Obviamente, quedan muchos elementos
mado desde diversos lados brecha digital, entre “el tintero” sobre el fenómeno general
segregación digital, división digital ydesigual- de la lengua escrita en el marco de las Ntics
dad infocomunicacional”14 . Al respecto, Juan -comentario al margen: nótese cómo persisten
Luis Cebrián en La red, Taurus, 1998, pág. 98, atavismos más remotos que la vieja imprenta-.
citado por Chavarro, puntualiza: Pero no podemos extendernos más, porque
“las diferencias entre los distintos estamen- nuestro compromiso es llevar la reflexión so-
tos sociales se verán agigantados por esta nue- bre las nuevas tecnologías hacia un lugar en la
va frontera existente entre los ciudadanos en- autoevaluación institucional del área de len-
chufados y los desenchufados. Los elementos guaje, de manera que a continuación presen-
igualitarios de Internet son aplicables sólo a taremos un ejercicio que concreta la propuesta
los primeros y aumentarán, paradójicamente, en torno a la idea de incluirlas allí como foco
las desigualdades respecto al resto”. de atención.

11. El mito del alfabeto como tecnología democratizante fue en otros tiempos igualmente idealizado.
12. “... la humanidad ingresa al siglo XXI con unos mil millones de analfabetos en el mundo (mientras que en 1980
eran 800 millones)”. Ibid. Ferreiro E (2001).
13. Iletrismo es “una realidad muy simple: la escolaridad básica universal no asegura ni la práctica cotidiana de la
lectura, ni el gusto por leer...”, los iletrados: no son lectores en sentido pleno. Ibíd. (Ferreiro).
14. Chavarro Luis Alfonso, “Acceso escolar y usos sociales de artefactos de las nuevas tecnologías de información y
comunicación en Cali”, tesis de Maestría en Sociología, Universidad del Valle, 2004.

64 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


Sugerimos una indagación a los maestros Empecemos por la pregunta sobre la exis-
y directivos que participaron en el “Proyecto tencia de computadores en las instituciones
de ciudad” 15. Esperábamos que las pregun- educativas, 41 reportaron que si hay, 4 que
tas, fueran tomadas como punto de partida no y en un caso el dato no fue claro17 . Dada
para recoger información y reflexionar al res- la aspiración a disponer de una dotación uni-
pecto: ¿hay computadores en su institución? versal de computadores en los colegios, a
¿cuántos estudiantes por computador? ¿hay primera vista estas respuestas alegran por-
servicio de Internet? ¿hay televisor y otras que parece que no está lejano ese ideal y
tecnologías? ¿con qué frecuencia hacen uso más cuando hallamos notas que afirman “El
de estas tecnologías? y ¿qué actividades es- colegio tiene su sala de sistemas muy completa,
pecíficas de formación de lectores y produc- Internet, los estudiantes hacen muy buen uso de estas
tores de texto se realizan con estas tecnolo- salas” (I.E. 254) y “Sí hay computadores en la insti-
gías? tución y están por llegar más” (I.E. 339).
Respondieron 46 instituciones educativas Pero, entre otros, Chavarro (2004) nos aler-
(I.E.)16 oficiales de la ciudad de Cali. Pero an- ta sobre el peligro que se cierne al sobreesti-
tes de exponer la información cabe reiterar mar la importancia de indicadores mínimos
aquí lo dicho para los demás focos: este capí- de infraestructura, pues el mero acceso no
tulo no da cuenta de una investigación, es una garantiza “usos relevantes”. Advierte que, a
indagación informal; los datos recabados co- nivel social, por ejemplo, saber el número de
rresponden a informes presentados por los celulares, computadores y conectividad a
maestros y los directivos de las instituciones Internet por cada mil personas, no da cuenta
a partir de su observación directa, carecemos de las prácticas que involucran. Es interesan-
de un sistema de triangulación para verificar te hallar una especie de constatación de esto
los reportes, y en consecuencia la prudencia en los informes de los maestros y directivos
debe extremarse hasta el punto de abandonar cuando especifican cuántos computadores
la pretensión de extraer afirmaciones conclu- hay, en dónde los ubican, quiénes los usan y
yentes; no obstante, parece sensato tomar en en qué estado se encuentran, aspectos que
serio los planteamientos a manera de puntos abordaremos más adelante.
de partida para pensar la situación y formular Por lo pronto volvamos a mirar esta frase:
a futuro procesos rigurosos de indagación. “¿Hay computadores en su institución?”, en

15. Modo rápido de referirse al “Programa de mejoramiento de la calidad de la educación en el municipio de Santiago
de Cali: Hacia un proyecto educativo de ciudad” -2004- del Instituto de Educación y Pedagogía de la Universidad del
Valle con el apoyo de la Secretaría de Educación Municipal.
16. Protegimos las identidades de las 46 instituciones educativas públicas que entregaron la información (actualmente
en Cali hay 90), e igualmente nos reservamos los nombres de los maestros y directivos autores de los informes. Cada
institución lleva un número de tres dígitos acordado por las autoras de este libro (en una serie que no corresponde
a su cantidad).
17. Quizás contados informes se refieran a sedes y no a instituciones completas, pero era difícil establecerlo. Igual
los datos conservan su potencial como fuente de ideas para pensar la evaluación escolar.

Leer la Escuela 65
apariencia una pregunta simple, un no o un si “.... Solo hay los computadores que utilizan las se-
como respuesta es lo que esperamos, pero la cretarias, dos (2) en la sede central y uno en la sede
manera como contestan en la I.E. 288 descon- satélite xxx. Los cuatro (4) computadores que había,
cierta: “El 60% respondió no y el 40% respondió si”. No fueron hurtados unos y los otros se encuentran daña-
hay misterio, para la elaboración del informe el dos”, (I.E. 311 -tabulada en la categoría de los
autor le consultó a sus compañeros docentes y que declaran que sí tienen computador-).
ese fue el resultado, evidentemente hay una dife-
rencia de opinión entre los del “no” y los del “si” Computador e Internet,
acerca de la existencia de los computadores. La ¿para cuántos, quiénes,
simpleza de la pregunta se desdibuja un poco.
dónde...?
Los informes de algunas otras I.E. ofrecen
En cuanto al interrogante sobre si hay ser-
elementos para especular al respecto. Por
vicio de Internet, 9 dicen que si y 21 que no; en
ejemplo, en el de la I.E. 255 dice: “¿Hay com-
7 informes el tema no se menciona y en otros 7
putadores en su Institución Educativa? Si, 9 para el
afirman que cuentan con la red pero en las
personal administrativo”, pero en el contexto de
oficinas y no en las aulas. Por demás, uno es
la pregunta igualmente alguien había podido
confuso y el restante afirma que el servicio
contestar que no hay porque las 9 adquisi-
que hay está subutilizado (seguro que ambos
ciones se plantaron en las oficinas y no en
casos cabrían en alguna de las categorías pre-
los salones de clase (o de profesores). Qui-
vias, pero no había suficientes elementos para
zás eso sucedió en el 60% de la I.E. 288. Lo
tomar la decisión).
importante, para nosotros, es registrar este
Según estos datos, la conexión a la red se
matiz de los sujetos destinatarios de la do-
encuentra muy por debajo de la dotación de
tación en tecnología18 , puesto que su pre-
computadores (recuérdese que de 46 institu-
sencia en la labor administrativa poco cuen-
ciones educativas, 41 declaran tener compu-
ta como condición para la alfabetización de
tadores, mientras que sólo 16 afirman tener
los estudiantes. Habrá que tener en cuenta
Internet). Quizás allí debamos “poner el ojo”,
este tema al momento de abordar formalmen-
más aún si contamos con investigaciones como
te las evaluaciones institucionales. A propó-
la de Chavarro (2004) en donde se concluye
sito, no sobra recoger una voz que vibra en
que “... La diferencia crucial entre colegios de
esta frecuencia:

18. Una dotación importante que algunos informes indican corresponde al “aula de bilingüismo”, pero dada la
inconsistencia de la información -quizás porque no se puntualizó este referente en el cuestionario de partida-, fue
imposible desarrollar el tema aquí. No obstante queremos dejar constancia de un par de voces:
• “También se cuenta con Laboratorio de Idiomas dotado con 36 cabinas cada una con su respectiva dotación.
Este laboratorio ha enfrentado algunas dificultades de funcionamiento por el tipo de instalación que tiene.
Además se dificulta su utilización porque sólo hay 36 cabinas y los grupos tienen en promedio 45 estudiantes”
(I.E. 286).
• La Sede Central de la Institución cuenta con dos salas con computadores. Una utilizada en bilingüismo ya
que debido al convenio con la Secretaria de Educación no puede ser usada para otras actividades. (I.E. 324).

66 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


modalidad pública y privada se encuentra en embargo, empezaron las dificultades, los padres de fa-
la conectividad. El acceso a Internet resulta milia no enviaban el dinero del transporte, no pagaban
más difícil para estudiantes de colegios públi- el costo de las clases al año que eran $ 10.000=, pero
cos que para aquellos de colegios privados”. los niños si que estaban motivados. Lastimosamente al
Por otra parte, entre los matices que se hace finalizar el año lectivo existía una cartera morosa alta,
necesario distinguir respecto al acceso, están se dio la fusión con el xxx y ellos tomaron la decisión de
“las fusiones” que complejizan el panorama, no contar más con este servicio...” (I.E. 259).
puesto que la aseveración de que sí hay com- A propósito del tema de las fusiones, hay
putadores en la I.E no entraña necesariamen- alternativas en marcha cuya experiencia habrá
te beneficio para los alumnos de todas las de recogerse y analizarse, se trata de las Cen-
sedes y por lo tanto en un seguimiento a las trales Didácticas:
capacidades de nuestro sistema escolar pú- “En las escuelas no existen salas de sistemas pero
blico para formar lectores este punto deberá en la escuela xxx está ubicada la Central Didáctica y
ser tenido en cuenta (el subrayado es nuestro): allí se encuentra una sala de sistemas que presta sus
“Sólo la sede central cuenta con computadores para sus servicios a las otras sedes en jornada contraria a la de
estudiantes...” (I.E. 317). clases. Se enseña esta cátedra a cargo de los docentes
“La sede central tiene dos salas de sistemas, una de provisionales. Esta situación no garantiza continuidad
ellas esta destinada para el aula de bilingüismo. No en el trabajo y el seguimiento de la programación
han funcionado en debida forma porque al instalar unos estructurada” (I.E. 324).
equipos nuevos se tuvo problemas con la energía, ade- Igualmente, el hecho de que el proceso de
más el docente que recibió la capacitación para mane- dotación de infraestructura tecnológica haya
jar el bilingüismo en la jornada de la mañana renunció priorizado las sedes principales de las fusio-
y su reemplazo no conoce el programa. En el central se nes, y que en muchos casos éstas correspon-
tiene la red de Internet. Los niños de preescolar y pri- dan a los viejos colegios de bachillerato, con-
maria no tienen acceso a la tecnología porque no dispo- duce a otro ángulo de esta realidad en nues-
nen de los recursos. Se ha planeado que una vez se tras instituciones, pues los informes parecen
normalice el servicio en la sede central se llevará a los indicar que los computadores están más dis-
estudiantes del grado quinto de xxx al central y se ponibles para los estudiantes grandes que para
instalará una sala con los equipos antiguos en la xxx los chicos. Mientras esperamos que alguien
porque está más distante del central” (I.E. 279). ponga en marcha indagaciones que nieguen o
“En nuestra sede no existe sala de computo, hace ratifiquen esa sospecha, transcribimos un par
aproximadamente unos 3 años, antes de la fusión, los de voces que reiteran el punto: “...Desde ese tiem-
niños y las niñas tuvieron la oportunidad de acceder a po los niños y niñas de la sede xxx no tienen clases de
una sala de cómputo en un convenio realizado con la sistemas. A la sede principal se le ha planteado la
escuela xxx que si la posee. Los niños eran llevados posibilidad que los niños y niñas de las sedes de prima-
cada 8 días por una hora, 2 niños compartían un com- ria puedan acceder a la sala que poseen y la respuesta
putador para un total de 36 alumnos, contaban con una siempre ha sido negativa, porque no hay docentes, ni
profesora, los equipos y el espacio era adecuado. Sin espacio para atender esta población” (I.E. 259).

Leer la Escuela 67
“La institución cuenta con sala de sistemas con “Los cuatro (4) computadores que había fueron
20 computadores para la clase de sistemas pero esta hurtados unos y los otros se encuentran dañados”
solo puede ser utilizada por el docente encargado con (IE. 311).
los estudiantes de bachillerato, los estudiantes de pri- “En la sede principal hay una sala de sistemas
maria no tienen acceso a ella y no se tiene servicio de mal adecuada, que no tiene buena luz ni ventila-
Internet. Se cuenta con sala de Bilingüismo pero tam- ción, consta de seis (6) computadores para cuarenta
bién es de uso exclusivo del bachillerato” (I.E. 320). y cinco (45) estudiantes por grado” (I.E. 311).
La necesidad de mantenimiento, la falta “No hay acceso a Internet por dificultades con la
de salones, el saqueo por hurto, las condi- conexión y por los costos del servicio”. (I.E. 286).
ciones de iluminación y ventilación, el costo “El computador que posee la escuela no se usa
en dinero etc., son aspectos que también jue- porque no está actualizado, no tiene Internet y solo
gan un papel importante en tanto condicio- es para la oficina” (I.E. 259).
nes de infraestructura que limitan el aprove- Entre las limitaciones enunciadas, desta-
chamiento de la tecnología para la alfabeti- ca la cantidad de ordenadores en relación
zación. Así, hallamos reportes que llaman la con la cantidad de estudiantes. Aunque en
atención sobre las limitaciones del servicio 9 informes no mencionan el tema, los demás
que prestan los aparatos por razones varias se reparten en afirmaciones de este tipo:
(los subrayados son nuestros): “Son doce computadores, que para un grupo por cla-
“En mi Institución hay 5 computadores que están se, da más o menos cuatro estudiantes por computa-
al servicio de la secretaría y la rectoría, para el traba- dor” (I.E. 327), “2 ó 3 estudiantes se hacen en cada
jo de los maestros no hay, hemos pedido uno para el mesa para compartir y trabajar en la sala de siste-
aula tecnológica desde hace dos años y aún no lo he- mas” (I.E. 319). Ningún informe indica que
mos recibido. Los niños y las niñas tienen acceso a los cuenten con salas donde la relación sea de
computadores en otro espacio fuera de la Institución, uno a uno, es decir, un estudiante por com-
“la Central Didáctica”, allí se han dado las clases de putador19. He ahí un aspecto más por averi-
sistemas, contamos con 20 computadores, pero en este guar con precisión; pero, apartando gene-
momento no hay servicio pues estos necesitan mante- ralizaciones y posturas a priori, en la pers-
nimiento y la Secretaría de Educación retiró la perso- pectiva didáctica sabemos que una vez las
na encargada de enseñarles a los niños, por lo tanto prácticas se escolarizan necesariamente se
está cerrado dicho espacio” ( I.E. 282). transforman (revisar el concepto de “trans-
“...y si de la sede xxx hablamos, haremos referen- posición didáctica”) por ende, satanizar los
cia a un aula tecnológica que esta subutilizada y en hechos no ayuda, lo que ayuda es compren-
deterioro ya que por la necesidad del servicio debió derlos.
ubicarse allí un grado de primaria restringiendo su
uso” (I.E. 312).

19. Chavarro, en las conclusiones de su tesis, a propósito de la brecha digital afirma: “También es cierto que el
uso puede aquí jugar un papel crucial ya que se ha visto cómo en los colegios públicos se impone el
uso colectivo por sobre el uso individual”.

68 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


Una pregunta para maestros y mediato. Obviamente, de confirmarse una ten-
directivos: ¿cómo es su dencia similar a la expuesta, desde el punto
de vista de la formación de maestros, ello plan-
relación de con las Ntics?
tearía demandas claras e inaplazables.
Otro de los problemas que señalan los
En conexión con esto hicimos un intento de
maestros y directivos en sus informes, tiene
abordar la relación personal que los maestros
que ver con la formación del personal (de
y directivos sostienen con las Ntics, de 113
nuevo el subrayado es nuestro):
personas que contestaron el cuestionario20 26
“La sede que cuenta con una sala de computadores
no respondieron el ítem referido a Internet, 24
es la Principal. Sin embargo, la primaria no accede a
afirmaron que no tienen ninguna relación con la
ella por tener grupos muy numerosos y no disponer de
red virtual, 29 aludieron a prácticas de comuni-
un docente para ello” (I.E. 333).
cación (con familiares y amigos que viven fuera
“En la institución sí hay computadores, televisor y
de la ciudad y/o del país) y 54 mencionan la
video pero los estudiantes hacen poco uso de ellos, más que
investigación en el sentido de consulta. Consi-
todo los de la jornada de la básica primaria, por no tener
derando estos datos y con no poco atrevimien-
personas preparadas en este campo” (I.E. 303).
to, cabría suponer que los que no responden
Afirmaciones de este tipo entrañan expec-
es porque no quieren reconocer que están mar-
tativas que distan de la idea de que las Ntics
ginados del fenómeno objeto de la cuestión, si
en la escuela sean mediadoras de los distin-
eso fuese así tendríamos un aval para sumar los
tos saberes curriculares tal como se plantea-
26 de este grupo con los 24 que de plano afir-
ba páginas atrás, la esperanza de “un docente
man su “desenchufe” de la red; 50 sujetos en
para ello”, un docente de sistemas, encasilla las
total serían los “des-en-redados”.
prácticas potenciales en un estrecho espec-
¿Tendencia positiva o negativa? Difícil con-
tro que descarga de responsabilidad a los
testar, pues sin disponer de puntos de compa-
demás profesores. En consecuencia, a la in-
ración a cualquier postura le faltaría piso, pero
dagación por la dotación de recursos físicos
nos asiste un espíritu optimista y nos resulta
será menester sumar la de las concepciones,
alentador que casi la mitad de los 113 docen-
puesto que si en la mente de maestros o di-
tes y directivos tengan un contacto claro, bien
rectivos prevalece que “La institución requiere de
sea de trabajo o doméstico, con lnternet. Esta-
computadores tanto para dictar las clases de sistemas
mos convencidas que la experimentación per-
como para que los alumnos consulten a través del
sonal con las nuevas formas de comunicarse
Internet” (I.E. 311), y ahí termina la expectativa
que posibilita la red de parte de estos profe-
con la tecnología, verdaderamente hay razo-
sionales, es una condición para que las Ntics
nes para estar preocupados por el futuro in-
franqueen las fronteras de la escuela.

20. Es un cuestionario que indaga en opiniones generales sobre el tema cultural, del cual se retoma aquí el punto 8.
Fue propuesto en las sesiones de trabajo del “Proyecto de ciudad” tanto a maestros como a directivos, por ello aquí
hablamos de sujetos y no de instituciones (aunque el cuestionario en algunos casos fue incorporado a las
autoevaluaciones institucionales).

Leer la Escuela 69
Paralelo a lo anterior, del total de 113, se cultad está en la conectividad 21 , puesto que
registran 63 sujetos que aún no acceden al con- la cantidad se eleva a 50 si el conteo es de las
tacto con Internet. Inquietante el dato, sin duda, personas que no han entrado en contacto con
porque si ellos mismos no han integrado a su la red. Una anotación adicional: no se eleva
vida esta alternativa de las Ntics, es probable gran cosa el número de sujetos que usan el
que en sus propuestas de enseñanza las dejen computador en labores de trabajo (87) frente
de lado (y sigue el desfile de cuestiones que a los que declaraban usar Internet (83).
estudiar).
Acerca de la relación con los computado-
Formación en lengua escrita:
res, del colectivo conformado por 113 maes-
propuestas con las nuevas
tros y directivos, 5 no responden, 15 niegan
nexo alguno, 6 dicen que son un hobby o pa- tecnologías
satiempo habitual, 7 un modo de recreación, Volviendo a las 46 autoevaluaciones insti-
ocio o diversión, 20 un aparato con el que tucionales, falta recoger lo dicho a partir del
resuelven asuntos personales y 87 un elemen- interrogante sobre las actividades específi-
to necesario en su trabajo. Estas cifras repre- cas de formación de lectores y productores
sentan más claramente una tendencia favora- de textos que involucran estas tecnologías.
ble, los computadores no son extraños para 12 cuentan que realizan algún tipo de activi-
la gran mayoría de los profesores, coordina- dad, 5 prefieren contestar que “la actividad es
dores y rectores que diligenciaron el cuestio- poca”, 12 no mencionan el tema o dan res-
nario. Si volvemos a sumar los 5 que no con- puestas que no son claras (incluimos aquí un
testan con los 15 que expresamente dicen que caso en el cual no se pudo establecer qué
su relación es nula con esas tecnologías, sola- denotaba la respuesta: “recientemente algunos
mente 20 de 113 sujetos conformarían el gru- estudiantes están participando del proyecto intercul-
po de los ajenos a los computadores. turanet”, I.E. 311) y 16 contestan categórica-
En comparación con lo dicho acerca de mente “ninguna” o usan expresiones sinóni-
Internet, vemos que merma el número de quie- mas.
nes no responden (pasan de 26 a 5) y si aplica- Acerca del tipo de actividades de forma-
mos el mismo procedimiento atrevido de la ción de lectores y productores de texto, ha-
consabida suma (los 5 que no contestan más llamos descripciones tan parcas que difícil-
los 15 que se declaran separados de los orde- mente comunicaban de qué se trataba, y es
nadores), el total de 20 cuya vida no involucra natural que haya sucedido así, puesto que dar
computadores corrobora que la mayor difi- cuenta de propuestas de enseñanza es una la-

21. Es pertinente recordar la cita de Juan Luis Cebrián -en La red, Taurus, 1998, pág. 98-, citado por Chavarro (2004):
“las diferencias entre los distintos estamentos sociales se verán agigantados por esta nueva frontera
existente entre los ciudadanos enchufados y los desenchufados. Los elementos igualitarios de
Internet son aplicables sólo a los primeros y aumentarán, paradójicamente, las desigualdades
respecto al resto”.

70 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


bor ardua que requiere tanto planificación ¿Qué ocurre con el televisor y
como esfuerzos sostenidos en distintas direc-
otras tecnologías audiovisuales?
ciones. Tal y como anotábamos en el aparta-
En cuanto a los audiovisuales, los reportes
do de prácticas de aula, reiteramos que en
hablan del proyector de acetatos, de videos y
este tema para producir autoevaluaciones fia-
el video-beam; el televisor; el VHS o el Betamax;
bles lo deseable es impulsar proyectos de in-
las cintas de video; el reproductor de DVD; el
vestigación etnográfica y didáctica que inda-
equipo de sonido (de audio) y para transmitir
guen la cotidianidad escolar, de lo contrario
(emisora de radio); la filmadora; el radiotelé-
los lacónicos enunciados prevalecerán:
fono; el fax; la pantalla grande (sala de audio-
“Realizan consultas de biografías de autores litera-
visuales) y las tarimas para espectáculos en
rios cuyas obras están leyendo. Presentan trabajos es-
vivo.
critos de análisis de las obras literarias” (I.E. 336).
Según los informes, el televisor es posesión
“Las actividades a realizar con los equipos de tecno-
de casi todas las instituciones educativas, úni-
logía son: Presentación de trabajos escritos, construc-
camente en tres de las 46 nos quedamos sin
ción de textos como la revista del colegio” (I.E. 339).
saber si tienen o no la cajita mágica porque se
“Las actividades específicas que realizan los estu-
callaron la información; sin embargo este dato
diantes con estas tecnologías son la lecto-escritura (tras-
hay que tomarlo con reservas, puesto que aquí
cripción de textos)” (I.E. 308).
reaparecen las distinciones entre sede/insti-
“La sala de sistemas de la sede central es empleada
tución y primaria/secundaria que ya se habían
todos los días en las tres jornadas y ellos desde su
hecho evidentes cuando revisamos la informa-
trabajo en clase desarrollan la comprensión de textos
ción sobre computadores, estos fragmentos,
instruccionales para interpretar y ejecutar acciones en
entre otros, lo indican: “Hay dos televisores en la
el computador” (I.E. 317).
institución, ni siquiera uno para cada sede. También
Es importante tener en cuenta que el modo
hay dos videos” (I.E. 311), “Las escuelas cuentan con
de elaborar los informes de los que extrajimos
televisor y video pero no hay una sala especializada en
estos datos, (seguro) indujo a ignorar riquezas,
cada una de ellas” [como si lo hay en la sede
complejidades y matices que deben existir pero
central] (I.E. 324).
que un maestro o directivo solo, o con poca
Cabe anotar que algunos, al referirse a la
compañía y pocos instrumentos, no ve. Proba-
dotación de televisores hablan de Educa-TV,
blemente hay más trabajo del que se registra,
que es un programa desarrollado a nivel na-
quizás esos 12 que no tocan el tema en sus
cional. En proyectos de evaluación sistemáti-
informes procedieron así porque no todo lo
ca, sería deseable considerar estos factores
que ocurre en una institución educativa se di-
para hacer descripciones precisas y comple-
funde.... en fin, para nuestros fines lo relevante
tas de la realidad escolar en este aspecto.
es incorporar estas notas a la agenda de discu-
Los educadores que elaboraron los traba-
sión, que tiene que ver con vislumbrar alterna-
jos que recogemos aquí, también reseñan
tivas recomendables para las evaluaciones ins-
otros obstáculos para aprovechar los recur-
titucionales.

Leer la Escuela 71
sos audiovisuales, obstáculos que tienen que Otros, aunque un poco más descriptivos,
ver con calidad, cantidad, seguridad y lugares son un apoyo para insistir en la necesidad de
asignados. Estas aseveraciones así lo atestiguan: realizar proyectos de indagación de la reali-
“En las otras sedes sólo hay un televisor y un video dad escolar que logren dar cuenta de la pro-
para ser usado por los niños pero además no se cuenta puesta y las limitaciones de la didáctica en
con material suficiente o significativo para trabajar” juego:
(I.E. 317). “La sede cuenta con un televisor y un VH “Su uso es constante. Los docentes utilizan videos
subutilizado por la falta de un armazón con seguridad y como medios para ilustrar y ampliar los temas de las
colocarlo en la ludo-teca” (I.E. 259). “Es difícil usar el clases” (I.E. 336).
TV porque está en la sala que guarda los libros (la “¿Qué actividades especificas de formación de lec-
biblioteca) y que en la mayor parte del tiempo es usada tores y productores de textos se realizan con éstas tec-
como salón de clase” (I.E. 274). nologías? Algunos responden ninguna, ver videos y
El video-beam, la emisora, la filmadora, el reconstruir historias, dibujos, cuentos, etc. Secuen-
fax y la pantalla grande, en el otro extremo de cias, producción de textos” (I.E. 327).
la disponibilidad de tecnologías del audio vi- “los maestros afirman que muy poco la sala de
sual, están en el haber de no más de dos cole- tecnología es usada para la formación de lectores, el
gios. La cámara fotográfica nadie la cuenta en VHS sí se usa con más frecuencia para ver cuentos,
su inventario. que ayudan al proyecto en la formación de lectores”
De los usos hay pocas pistas, y menos aún (I.E. 319)
de los modos cómo se incorporan a proyec- “Interpretación del video según lo que entendieron.
tos de alfabetización (tanto en sentidos nue- Se producen sencillas conclusiones hasta producir un
vos como en sentidos tradicionales de la pa- texto corto -contraargumentar- interpretar situacio-
labra). Y de nuevo vale lo dicho en párrafos nes, proponer cambio e ideas” (I.E. 285).
anteriores acerca de Internet y los computa- “Las actividades se hacen de acuerdo a lo que cada
dores, es decir, las respuestas son muy bre- profesor tenga planeado. Se les muestra la película.
ves, dar cuenta de las prácticas requiere pro- En horas de clase se aprovecha para pedirles un re-
cesos complejos, aquí una simple pregunta no sumen sobre lo que vieron, luego se les pide que es-
es el camino correcto hacia información de criban un texto con el nombre de la película y que
calidad. Como ejemplos de enunciados defi- los demás sea invención de cada uno de los alumnos”
nitivamente escuetos tenemos: (I.E. 337).
“La utilización de estas tecnologías mínimas es muy “Existen tres televisores, un VHS, un Betamax y
frecuente ya que los docentes aprovechan al máximo un retroproyector. Estas tecnologías son utilizadas con
estos recursos escasos en pro de la formación de los frecuencia. Con estas tecnologías sólo una [maestra]
educandos” (I.E. 296), “Se cuenta con un proyector de respondió que realiza narraciones y descripciones, las
acetatos, de videos, un video-beam, filmadora para los demás no realizan ninguna actividad” (I.E. 269).
eventos culturales y una tarima apropiada para ello. “Se ven algunas obras literarias en videos precedi-
Sin embargo, no son usados constantemente y poco con- das de un taller de análisis e interrelación de la obra,
tribuyen a lo pedagógico o lo cultural” (I.E. 311). consultando el libro escrito” (I.E. 312).

72 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


“Específicamente a través de videos, producción de datos, puesto que las particularidades de nues-
textos -especie de reseñas-” (I.E. 307). tro sistema escolar público configuran un es-
“El 80% responde las docentes de español e inglés cenario complejo. Preguntar simplemente, por
desarrollan programas. El 20% responde se ven pelícu- ejemplo, si hay o no computadores en la insti-
las y se escuchan cuentos” (I.E. 288). tución educativa, nos quedó claro, es inútil,
“Existen también dos salas de audiovisuales bien no sólo por la realidad de las fusiones que
acondicionadas con televisores y videos. Estas dos salas hace necesario distinguir sede central de las
se utilizan para complementar el trabajo académico; ya demás sedes y sector administrativo del pe-
que se proyectan películas de acuerdo a los temas desa- dagógico, sino también por la existencia de
rrollados. Este trabajo audiovisual está encaminado a programas como las salas de bilingüismo -que
la producción de comentarios, toma de apuntes, pregun- tienen destinación específica-.
tas que indagan por la comprensión de los temas pre- El tenue y seguramente muy discutible di-
sentados. El trabajo en audiovisuales se hace con fre- bujo de la realidad que armamos, no es lo que
cuencia y en el área de lenguaje, por ejemplo se proyec- da sentido a este trabajo. Lo relevante son los
tan versiones cinematográficas de obras literarias para aprendizajes para próximas empresas afines
hacer un análisis crítico o intertextual” (I.E. 324). que se impongan como reto formular pregun-
tas más precisas, más aterrizadas. Las sospe-
chas que se ciernen sobre el tema de la co-
Un apunte final: esclarecer lo
nectividad, son una veta interesante a explo-
inútil y generar sospechas rar, justificada de sobra porque desde distin-
A sabiendas de lo incipiente de la reflexión tos frentes nos llegan noticias del problema.
desarrollada aquí, cerramos este capítulo con El acopio de observaciones y planteamien-
la certeza de haber recogido perlas que de- tos registrados en el capítulo, pueden ser po-
nuncian la urgencia de pensar los nexos que tenciales impulsores de hipótesis que se pon-
se dan entre la tarea de alfabetizar y las nue- gan a prueba en las autoevaluaciones. Remiti-
vas tecnologías de la información y la comuni- mos al lector páginas atrás, donde se suelta
cación. esta afirmación: “no se eleva gran cosa el nú-
A pesar de la discontinuidad, notoria a to- mero de sujetos que usan el computador en
das luces, que hay entre la parte inicial -desa- labores de trabajo (87) frente a los que decla-
rrollada en los dos primeros puntos- y la par- raban usar Internet (83)” y le preguntamos ¿será
te siguiente -del tercero al séptimo-, esto es, que el factor que determina la aproximación a
entre la teoría y los datos, creemos que en su la red es disponer de ella en el trabajo? A este
conjunto el capítulo aporta ideas para las eva- tipo de juego pensamos que da pie el trabajo
luaciones del lugar de las Ntics en los proce- realizado.
sos de formación escolar de creadores e in- Ideas tales como: leer y el escribir son prác-
térpretes de texto escrito. Avanzamos al reco- ticas sociales -cambiantes y determinadas
nocer que estas evaluaciones requieren un cui- contextualmente-, se desaprovecha el poten-
dadoso diseño de instrumentos para recoger cial de las tecnologías para el aprendizaje

Leer la Escuela 73
cooperativo cuando ocurre que “el usuario se tan descubrir “las condiciones en que coti-
relaciona con el medio, pero rara vez se comu- dianamente circulan los textos, las diversas
nica con otra persona”, corremos el riesgo de mediaciones entre éstos y los estudiantes”.
que las nuevas tecnologías no garanticen un Los seguimientos de las rutas de apropia-
alivio en los desequilibrios sociales, etcétera, ción de las nuevas formas de leer y de escri-
¿de qué manera se convierten en carne de in- bir son necesarios. Igualmente, aspiramos a
dagaciones realizadas en pro de mejoramien- que las autoevaluaciones se nutran o se
to de la calidad educativa? He ahí una tarea complementen con investigaciones llevadas
pendiente, enorme y con un punto de partida a cabo por agentes externos a las institu-
claro: el ejercicio de recolección de datos ciones, pues ese tipo de indagación en su
consignado en este capítulo no es el camino a realidad podría ofrecer -en algunos casos-
seguir, de esto tenemos suficiente evidencia. información confiable que bien podría ser
Nos inclinamos más hacia enfoques etno- incorporada.
gráficos o estudios didácticos 22 que permi-

22. En el sentido expuesto en la introducción de este libro en cuanto a triángulo didáctico.

74 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


Miradas externas, el caso
de las pruebas censales

GLORIA RODRÍGUEZ BARRENECHE


CLAUDIA QUINTERO ALVARADO
ÁNGELA MARÍA ROMERO OLAVE

Leer la Escuela 75
L
as condiciones que se brindan a los las apreciaciones que otros se forman de ella.
estudiantes para su formación como Claro está, no se trata de que cada institución
usuarios competentes de la lengua educativa recoja acríticamente las conclusio-
escrita, son el centro de la propuesta nes de los demás sobre sí misma, pero sin duda
de evaluación institucional que estamos pre- el retrato que otros le hayan hecho es una ayu-
sentando. Los focos de atención que hemos da en la empresa de mirarse; la propuesta es
incluido aquí son la planeación, las prácticas que quienes en el día a día, desde adentro, le
de aula, la biblioteca escolar y las nuevas tec- van dando a la educación formal sus contor-
nologías. En este capítulo nos centraremos en nos, puedan leer la escuela también con gafas
un foco que, pareciera, no cabe del todo en el ajenas.
cajón de las condiciones mencionadas, se trata ¿Y las pruebas? Por supuesto, cabe objetar
de las “miradas externas”, esas miradas que que las evaluaciones aludidas no son condi-
se posan sobre la escuela, recaban informa- ciones para formar lectores, porque no hacen
ción y producen conocimiento sobre ella. parte de los procesos sino que están en su
Contamos allí las investigaciones de cen- extremo final, son reflejos de productos; sí,
tros y autores reconocidos, los trabajos de sólo que dicha objeción tambalea si recono-
grado de estudiantes de pregrado y, las en- cemos que “Tratar de conocer la educación
cuestas oficiales y las evaluaciones de resul- produce nuevas “cosas” en el campo educati-
tados de aprendizaje aplicadas masivamente vo y contribuye a producirlo y delimitarlo” “...
a los estudiantes -las tradicionales “del ICFES” no es que la investigación educativa sencilla-
a los jóvenes de grado once y las nuevas mente describa la educación, sino que tam-
“Censales o Saber” dirigidas a los grados im- bién ha transformado la educación". (Busta-
pares, empezando desde tercero-. mante y Díaz, 2003).
Hagamos memoria, aquel universitario que Compartimos esta idea, las pruebas no son
pidió permiso para filmar algunas clases (o el pesos muertos, por el contrario, aquello que
recreo, o las reuniones con padres de familia) buscan detectar puede terminar siendo lo que
¿hay algún informe de sus observaciones? y las aparece, en parte, por influencia de ellas mis-
encuestas que contestaron todos en el cole- mas; lo que se quiere medir no necesariamente
gio como parte de X proyecto ¿en qué análisis preexiste en la realidad. Por lo tanto, estamos
derivaron? y las entrevistas sobre X tema, ¿se autorizados a poner las mencionadas pruebas
verificó si con ellas se publicó el artículo pre- en el mismo cajón de las condiciones de la ins-
visto?. Igualmente, una búsqueda juiciosa de titución educativa para formar sujetos de la cul-
bibliografía en las bases de datos de algunas tura escrita. Un tratamiento de este tipo es con-
bibliotecas serviría para determinar un lista- secuente con una apuesta por la calidad edu-
do de insumos para la autoevaluación institu- cativa, es perfectamente válido diseñar una au-
cional. En fin, el punto es que la escuela ofre- toevaluación institucional que tenga fuentes in-
ce mucha información y es justo que exija re- ternas y externas de información.
troalimentación, que aproveche y confronte Justamente este capítulo se concentrará en

76 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


las Pruebas Censales -no hay espacio para ex- cho a evaluar, dada su inalienable deber de
tendernos en las otras “miradas externas”, velar por la equidad en el acceso de oportuni-
aunque ojalá no por ello se las eche en saco dades para sus habitantes.
roto-. Para empezar, permítanos declarar que No obstante, nuestra declaratoria de apro-
en principio concordamos con la idea de eva- bación de la evaluación masiva está plagada
luar los resultados del sistema, hacemos eco de consideraciones que interponen distancias
a José Jimeno Sacristán: “una empresa colecti- entre los ideales sobre lo útil de las pruebas y
va como es el sistema educativo, debe ser con- la factibilidad de que ello se ratifique en toda
ducida bajo escrutinio público porque incum- su extensión en cada evento concreto. La pre-
be a todos”1 . Dado que la educación formal ocupación terrenal por lo que se supone que
es por definición intencional en sus propósi- en nuestro país debe hacer la escuela con las
tos y en sus estrategias, el monitoreo a la es- pruebas, nos conduce a reconocer que el ca-
cuela se torna imprescindible. La evaluación mino es largo y apenas se ha iniciado. La ex-
junto a la planeación, niegan el carácter periencia con las Censales nos da argumentos
espontaneista de esta acción social, halan para afirmar que son más bien incipientes los
hacia un derrotero consciente -controlado- en desarrollos alcanzados. En consecuencia,
un sistema que, por complejo, tiende, con fuer- nuestra propuesta es trabajar para dilucidar
za, más al polo opuesto2 . las posibilidades y las limitaciones que hasta
Pero el problema de la evaluación pasa por el momento tenemos.
el espinoso tema de quién la realiza y qué te- Se abona que desde 1990, cuando se creó
rritorio abarca. Podría observarse que una re- el “Sistema de Nacional de Evaluación de la
pública unitaria como lo es Colombia, en au- Calidad de la Educación (SINECE)”3 , se está
sencia de una evaluación unificada, carecería trabajando en Colombia en la elaboración
de referentes comunes para pensar la calidad de pruebas. Y hoy, ya entrado el 2000, el país
educativa, poco podría afirmarse acerca de la cuenta con una interesante experiencia con
situación nacional, del avance (o no) en el los grados tercero, quinto, séptimo y nove-
dominio de las competencias requeridas por no, las comúnmente conocidas como Censa-
parte de los estudiantes para el ejercicio ple- les o Saber. Dado que antes la única evalua-
no de la ciudadanía. Además, un estado que ción masiva que había era la del grado once,
descentralizó la planeación de los procesos es un hecho que se está superando el carácter
educativos y el manejo de los recursos, en prin- terminal o finalista de la evaluación, para inten-
cipio tendría razones para reclamar el dere- tar cortes que den pistas del proceso.

1. Gimeno Sacristán José, “Resultados escolares y calidad”, Cuadernos de Pedagogía Monográfico No. 326 falta
fecha
2. Para consultar una breve pero sustancial reflexión sobre la importancia de contar con información del sistema
educativo en la consolidación de las democracias, recomendamos: Gimeno Sacristán José, “Información y democracia”,
Cuadernos de Pedagogía Monográfico No. 326. Julio de 2003.0000
3. Bustamante Guillermo (compilador), “Evaluación y lenguaje”, SOCOLPE, 1998. Página 42.

Leer la Escuela 77
Por primera vez, además, los cuadernillos vallecaucanos, en su lugar está una prueba de
que contenían las preguntas se dejaron en las quinto grado aplicada en octubre de 20025 .
instituciones escolares y empezaron a circular En consonancia con esta situación, en vez del
como un texto más en su cotidianidad, dando cuento titulado “Frida” de Yolanda Reyes o de
apertura a una discusión pública que antes uno de los episodios de Calvin y Hobbes, que
era imposible, por ejemplo, acerca de lo que eran los dos textos de referencia que contenía
interroga la prueba, del diseño de las pregun- la evaluación de los cinco departamentos men-
tas, de su cantidad y calidad, del modo en cionados, está un texto llamado “La escuela”
que se afecta la lectura de un cuento cuando de Efraín Gutiérrez Zambrano6 , ¿por qué “la
éste es incorporado a la estructura de un exa- prueba de Frida” no se incluye en la página
men (a propósito, adelante presentamos un oficial del ICFES? ¿dónde está la explicación
ejercicio que apunta a esto). del procedimiento seguido para asimilar la
Para el grado quinto -por centrarnos en un prueba de octubre de 2002 con la de marzo
caso-, las pruebas vigentes todavía en nuestra del mismo año? ¿cuáles son los argumentos
ciudad son las de mediados de marzo de 2002. que demuestran que una y otra prueba eran
Nótese que suena extraño que se apunte “en equiparables?
nuestra ciudad”, puesto que son procesos Ahora bien, en el espectro de conocimien-
evaluativos nacionales, no obstante este dato to que abarca el área de lenguaje, la prueba
es evidencia de que en Colombia estamos en en cuestión es necesariamente limitada. Su eje
un momento todavía experimental o incipien- es la evaluación de la comprensión de lectura
te. Para comprender lo que intentamos decir de textos configurados en lengua escrita, pues
se hace necesario recordar que esas pruebas el cuestionario se organizó en función de dos
de marzo no fueron aplicadas a todo el terri- textos, el primero -un cuento- absolutamente
torio nacional, fueron cinco departamentos formulado en código de letras y el segundo -
solamente los que se incluyeron en este pro- una historieta gráfica-, cuya imagen no es ob-
yecto: Atlántico, Quindío, Risaralda, Santan- jeto de atención en las preguntas. La prueba
der y Valle del Cauca. censal de quinto grado dejó por fuera la pro-
¿Cómo es posible entonces que en la pági- ducción en el sistema verbal escrito y todo lo
na virtual del ICFES se registren resultados del concerniente a la oralidad y a los demás siste-
país entero? Naturalmente a los niños de los mas simbólicos.
demás departamentos les aplicaron una prue- Si miramos la carátula del cuadernillo de la
ba distinta... de hecho, en la página mencio- evaluación de marzo de 2002, hallaremos que
nada no están los textos ni las preguntas del le dice a cada niño dispuesto a contestarla:
cuadernillo4 que contestaron nuestros niños “Esta prueba busca conocer cómo interpretas diferentes

4. “República de Colombia. Ministerio de Educación Nacional. Programa Nuevo Sistema Escolar. Evaluación Censal
de la calidad de la educación, quinto grado de la educación básica, LENGUAJE”, (sin fecha ni otros datos).
5. http://www.icfes.gov.co/
6. http://200.14.205.63:8080/portalicfes/home_2/rec/arc_566.pdf

78 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


tipos de texto”, empero, los textos respecto a los el de la circulación y discusión de resultados.
cuales preguntan son narrativos ambos -un Los participantes, de lenguaje, del Programa
cuento y una historieta-. Lo anunciado no se de Mejoramiento de la calidad educativa en el
cumplió, faltaron textos expositivos, argumen- municipio del Valle del Cauca: “Hacia un pro-
tativos y líricos. yecto educativo de ciudad”, representantes de
Para evitar malentendidos, permítanos acla- 65 instituciones escolares, en su mayoría mani-
rar que la empresa de evaluar comprensión de festaron dificultades en el acceso a los infor-
lectura del texto escrito narrativo nos parece mes. Los segundos informes, por ejemplo lle-
de la máxima importancia, no la demeritamos. garon en una base de datos que está en medio
Entendemos, además, la dificultad (¿imposi- magnético y cuyo programa requiere ciertas es-
bilidad?) que entraña la evaluación censal ex- pecificaciones técnicas y de manejo de las que
haustiva de la comprensión de todos los tipos muchas instituciones carecían, de modo que
de textos escritos, del habla, de la escucha, imprimirlos tardó mucho, además de que para
de la composición escrita y de la expresión y ese entonces ya el interés por el tema de los
recepción de textos icónicos, audiovisuales, ges- resultados se había desvanecido un poco.
tuales, etc ¡uf!. La Secretaría de Educación Municipal hizo
Pensando en un escenario tan complejo, lo que estuvo a su alcance para promover la
interesa mostrar ángulos de la situación de circulación y discusión de los resultados, jus-
nuestro país en el tema de la evaluación na- tamente uno de los objetivos del menciona-
cional de resultados escolares, para situar ex- do programa era ese, no obstante, el primer
pectativas mesuradas en la ambición de que intento que hicimos tropezó con dos piedras
sean fuente de información para las autoeva- iniciales. Una estaba hecha de un polvillo de
luaciones institucionales escolares. inseguridad que nacía al notar las inconsis-
Y si de resultados hablamos, el panorama se tencias entre los promedios y los puntajes
torna complicado. Como se sabe, a principios por niveles de logro y por tópicos (gramáti-
del año 2003, el ICFES remitió a todos los cole- ca, pragmática, paráfrasis y enciclopedia) -
gios y escuelas su informe institucional impre- algo no encajaba si teníamos niveles y tópi-
so en papel y a la Secretaría de Educación se le cos bajos, que desconcertantemente se pro-
entregó un CD con la compilación de la base mediaban en puntajes muy altos-. Estamos
de datos completa. Pero en el año 2004 el MEN hablando, claro, de los primeros resultados.
envió otro documento, esta vez para todos en La otra piedra en el camino era de “materia
CD-Rom, con los resultados corregidos. Se tor- ausente”, es decir, más de las dos terceras
na extraña esta situación, por decir lo menos, y partes de los asistentes a las sesiones de ca-
más con el agravante de que nunca se explicó pacitación del programa no traían los infor-
oficialmente en qué consistieron los errores per- mes impresos que habían llegado a sus es-
cibidos. cuelas y colegios ¿por qué? Razones varias,
Un ángulo importante de los procesos eva- “alguien se los llevó...” o “no ha habido tiem-
luativos nacionales como el que nos ocupa, es po de buscarlos”, etc, etc.

Leer la Escuela 79
Pero la piedra enorme, la que nunca pudi- comprender qué examinan y cómo se catego-
mos romper tiene una sustancia simple: los re- rizar los resultados, para conseguir por ahí
sultados se refieren (los primeros y los “arre- derecho, si juzgamos pertinente, que entren a
glados”) a escuelas y colegios; es decir, a se- jugar como condiciones institucionales para
des, ¡no a instituciones educativas! Se adivina la formación en lectura y escritura.
de inmediato la razón: las pruebas se aplicaron
antes de las fusiones. Y “juntar” resultados es
una tarea delicada de estadísticos y no de
Una lectura de “Frida”
maestros, directivos, funcionarios de Secreta- en la prueba censal7
rías de Educación o especialistas en didáctica Una evaluación de los resultados educacio-
de la lengua. nales puede ser significativa para la escuela, no
No obstante, con piedras o sin piedras las tanto por lo que midió, sino más bien porque
evaluaciones masivas nos siguen interesando, constituye, en sí misma, un indicio de lo que a
pero como procesos completos, desde su dise- futuro continuará evaluándose. La prueba se
ño -con todos los pasos para validar el instru- supone que es reflejo del consenso de la comu-
mento y la previsión de los modos y categorías nidad académica especializada en el tema, y
de procesamiento de las respuestas pasando por por ende puede asumirse como referente de lo
la aplicación de la prueba, la “calificación”, la que se considera importante de ser enseñado.
divulgación de los resultados y la discusión de Así, en el área de lenguaje es bienvenido todo
todo el camino recorrido. Pensada como proce- lo que sirva al esclarecimiento de cuáles son
so, los resultados no son el único elemento de los ángulos más valorados de aproximación a
consideración importante en esta discusión. Per- los textos -objeto de las prácticas de lenguaje-
catarnos de ese potencial significa dar con una . En síntesis, urge multiplicar los canales de di-
mina cuya explotación enriquecería futuros pro- vulgación y debate de las transformaciones, que
cesos de evaluación. Ganancia que a su vez re- se vienen consolidando teórica y legalmente en
dundaría en mejoramiento de la educación, por- el campo de la didáctica de la lengua, para que
que, empataríamos con más armonía lo evalua- interactúen con las prácticas de enseñanza -y
do con lo enseñado. Cuando garanticemos que mutuamente se nutran-.
los estudiantes colombianos gozan de las Con esto en mente, decidimos ensayar la ar-
oportunidades de aprendizaje que les evalúan, ticulación de algunos aspectos de la evalua-
nada le disputará a los resultados el privilegio ción masiva de lenguaje para quinto grado8 con
de ser el máximo centro de atención; por aho- una perspectiva de análisis textual enunciada
ra más vale concentrar nuestros esfuerzos en en el documento oficial de los Lineamientos

7. Este punto incorpora algunos elementos de una conversación que sostuvieron Patricia Calonje, Sonia Castro,
Ingrid Muñoz, Gloria Rodríguez y Claudia Quintero el 1 de septiembre de 2003, en el Instituto de Educación y Pedagogía
de la Universidad del Valle.
8. “República de Colombia. Ministerio de Educación Nacional. Programa Nuevo Sistema Escolar. Evaluación Censal
de la calidad de la educación, quinto grado de la educación básica, LENGUAJE”. Marzo de 2002. Instrumento aplicado
en el Valle del Cauca y otros 4 departamentos

80 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


Curriculares de Lengua Castellana9 . Tomamos abarcaremos en la presente lectura de “Frida”
como objeto de análisis el texto titulado “Fri- (ver cuadro en la parte inferior).
da” (ver anexo) que hace parte de la prueba
censal de quinto grado del 2002. Al empren-
El nivel intratextual
der este ejercicio inevitablemente corrimos el
riesgo de incurrir en “destrozos” fragmentán- (el texto mirado en sus límites)11
dolo; dejamos a nuestros lectores que juzguen • Microestructuras: “Signos ortográficos, sig-
en qué medida logramos ser coherentes con nos de puntuación”, (entre otros).
el criterio de procurar interpretaciones que • Superestructura: “La forma global como se
aspiren al todo como unidad. organizan los componentes de un texto. El
Para introducir los referentes del análisis, esquema lógico de organización del texto”
remitimos a la tríada conformada por los ni- Apenas abrimos el cuadernillo de la prue-
veles “intratextual, intertextual y extratex- ba y antes de que empiecen las preguntas,
tual” 10 . Los elementos constitutivos de cada topamos con un texto, uno narrativo litera-
nivel son múltiples y no podemos ocuparnos rio, pero ¿qué pistas, qué información da la
de su totalidad, tanto por la extensión -dis- prueba respecto a qué tipo de texto es el
ponemos de poco espacio-, como por el he- que se va a leer? Lo primero que encontra-
cho de que su desarrollo desbordaría los lí- mos es una afirmación en tono imperativo y
mites determinados por lo que es significati- mayúsculas, “LEE ATENTAMENTE EL SI-
vo de cara a la prueba. Por consiguiente, hi- GUIENTE TEXTO” e inmediatamente abajo,
cimos una reducción del cuadro que aparece con la misma letra está la palabra “FRIDA”,
en la página 63 de los Lineamientos para re- sin ningún signo ortográfico entre uno y otro
gistrar exclusivamente los elementos que enunciado. Con esta información hay un ade-

Nivel de Análisis Componente Se ocupa de... Que se entiende como...

Intratextual • Sintáctico • Microestructuras • Signos ortográficos, signos de puntuación


• Semántico • Superestructura • El esquema lógico de organización del texto

Intertextual • Relacional • Relaciones con otros • Estilos tomados de otros autores de otras
textos épocas

Extratextual • Pragmático • Contexto • Intención del texto


• Usos sociales de los textos en contextos de
comunicación

9. Lineamientos Curriculares. Lengua Castellana. Ministerio de Educación Nacional. Numeral 4.2 “Un eje referido a
los procesos de interpretación y producción de textos” (páginas 61 a 72). Bogotá, editorial Magisterio, 1998
10. Ibídem, páginas 61 y 62
11. Esta categoría corresponde a la gramática del texto. Ver Van Dijk, Estructuras y funciones del discurso, México,
Siglo XXI editores, 1989.

Leer la Escuela 81
lanto nulo sobre la tipología textual a la cual hizo en vacaciones, recurriendo a su reciente
se va a enfrentar el lector, quien solamente y novedosa historia de amor con Frida, una
ve un título con un nombre femenino; antici- niña extranjera; pero que termina sorprendien-
par si se trata de una biografía, una noticia, do porque en vez de leer de su romance en
un poema, una crónica, un cuento, etcétera, voz alta cuando el profesor se lo solicita, se le
no es posible todavía. oye la manida composición que afirma “en
En los datos bibliográficos que aparecen estas vacaciones no hice nada...”.
al final encontramos entre paréntesis: “Re- No cabe duda, el tipo de texto correspon-
yes, Yolanda. “El terror de Sexto B”. Bogotá, de a un cuento, pero ¿qué hay con ello? ¿cómo
Alfaguara, 1999, pág.. 13-18”. Estos datos si- profundizar en la afirmación de que el texto
túan al texto en relación con la autora. Ha- entre manos es un cuento? Al leer a FRIDA el
bría que tener noticias de quien es Yolanda lector avanza sin tropiezos, fluidamente, tiene
Reyes para saber del ámbito literario de sus la sensación de que es fácil; sin embargo, el
producciones. El hecho de que señale algu- calificativo de simple no le cala del todo al
nas páginas indica que FRIDA circula origi- texto debido a que en su diégesis12 está im-
nalmente como parte de una publicación de- bricado el desarrollo de dos historias parale-
nominada “El terror de Sexto B”, pero de allí las. ¿Cómo así? Para aclarar esta observación
a predecir que se trata de un cuento es muy necesitamos echar mano de los tres planos
poco probable, aunque la expresión “terror” que componen todo texto narrativo literario13 .
haga pensar en esa emoción que atrae al ser El primero, el plano de la narración, tiene que ver
humano. Seguimos sin elementos suficientes con quién y a quién se cuenta la historia; el
para clasificar el texto. Finalmente, la obser- segundo, el plano del relato, resuelve cómo se
vación general de la silueta dice que está cuenta la historia; y el tercero, el plano de la
escrito en prosa distribuida en párrafos, que- historia, es el contenido o lo que se cuenta.
dan así descartados algunos tipos de texto, Para el análisis intratextual que pretendemos
como la poesía en verso y los avisos publici- elaborar es necesario detenerse en la com-
tarios corrientes. plejidad que presenta el texto en el primer
Necesitamos leer el texto completo para plano, siguiendo su camino despejaremos al-
enterarnos que habla de un estudiante, San- gunas piezas de los otros dos.
tiago, en su primer día de clases de un nuevo La consideración del primer plano revela
año escolar; quien, aparentemente, resuelve un narrador que participa de la historia que
el ejercicio de la típica redacción de lo que cuenta -tradicionalmente llamado “narrador

12. “Es un universo más bien que una encadenación de acciones (historia): la diégesis no es por consiguiente la
historia, sino el universo donde ella sucede”. Serrano Orejuela Eduardo en “La narración literaria”, Colección de
autores vallecaucanos editada por la Gerencia para el desarrollo cultural de la Gobernación, Cali, 1996), citando a
Gérard Gennette.
Diégesis, según el diccionario de la Real academia española (versión digital, 2005, http://www.rae.es/): “En una obra
literaria, desarrollo narrativo de los hechos”.
13. Idem, Serrano.

82 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


protagonista”- aunque la evidencia es aprehen- criban con esfero azul y buena letra, una com-
sible sólo a partir del cuarto párrafo que co- posición sobre las vacaciones...” Ya en el ter-
mienza: “En mis vacaciones...”, donde el uso cer párrafo desaparece el guión, lo que quiere
del adjetivo posesivo plural “mis” es el que in- decir que ha retomado el discurso la voz ante-
cluye a quien narra como participante de la his- rior, la del narrador, que declara el problema:
toria que cuenta. “Nadie tiene preguntas. Ni respuestas. Sólo
Pero antes del cuarto párrafo ¿cómo deter- una mano que no obedece órdenes porque
minar cuál es la voz cantante? (o “narrante”, si viene de vacaciones.”
se nos permite la expresión) quien dice en el Y de nuevo estamos en el párrafo cuatro.
primer renglón “de regreso al estudio...” ¿es Comienza con unas comillas “«En mis vacacio-
la misma voz que hace la aparición en el cuar- nes... »” estas se cierran en el párrafo 13 y en el
to párrafo?, ¿qué marcas textuales permiten 14 la narración continúa: “Levanto la cabeza
afirmarlo o negarlo? A diferencia de ese pá- del cuaderno y me encuentro...”. Sólo es posi-
rrafo cuatro, en estos primeros enunciados no ble afirmar que quien habla, desde el primer
hallamos microestructuras específicas, como párrafo hasta el último (exceptuando los pá-
el posesivo aludido, que aclare este aspecto. rrafos que comienzan con guión), es el misma
Implícitamente el hecho de afirmar: “De regre- persona porque al decir “levanto” se incluye
so al estudio. Otra vez primer día del cole- en el discurso, es un yo que se ha develado a
gio.” informa que quien habla pertenece a una lo largo de todo el texto como un estudiante
institución educativa, aunque no descarta un que escribe sobre “el viejo tema de todos los
observador que desde el exterior contempla años”, «¿Qué hice en mis vacaciones?»”. “«En
la escuela. En el primer caso la conjetura em- mis vacaciones conocí a una sueca... »”.
pieza por un maestro o un alumno, sin embar- Respecto a ese primer plano de la diégesis,
go se regresa al estudio y estudiar es labor de la prueba censal hace un gran énfasis, para
estudiantes. Además, quien está hablando dice convencerse basta contabilizar las 24 veces
“El profesor no preparó clase...” de modo que que en el cuestionario se registra la palabra
el maestro es objeto de habla y no sujeto (se narrador (sin incluir la que se expresa como
habla del profesor, él no habla). Se descarta “la voz que narra” en el ítem 21) y las 13 pre-
entonces que la voz de los primeros renglones guntas que de manera directa o indirecta se
sea la de un maestro, pero la información pre- relacionan con el asunto de quién cuenta la
sentada hasta terminar el primer párrafo no historia. Pero fijémonos que decidir quién es
da la certeza de que la voz sea la de un estu- el narrador del texto requirió de la compren-
diante. sión global del mismo, fruto no sólo de la con-
En el segundo párrafo hallamos un signo currencia de la noción de narrador sino tam-
ortográfico: el guión. Una señal de que el na- bién de saberes gramaticales, como es el sa-
rrador, que es el “dueño del cuento”, ha cedi- ber sobre las funciones del guión y las comi-
do el discurso a otra voz (la del maestro, aho- llas en tanto signos ortográficos (claro está
ra si) que ordena “-Saquen el cuaderno y es- que esa comprensión está fundada en otras

Leer la Escuela 83
muchas operaciones -como por ejemplo el se- otra (aunque no sabemos todavía por qué),
guimiento de la referencia, del qué se dice-, contrasta con la del final del párrafo tres: “«qué
pero ya precisamos al empezar que nuestro hice en mis vacaciones»”, una suerte de título
interés no es hacer un análisis minucioso de para la composición, pero a la vez una forma
las alternativas de interpretación de FRIDA, de retomar la consigna del maestro para la
sino aportar elementos que ayuden a diluci- tarea; en todo caso, una voz que adquiere un
dar la lectura sugerida en la prueba en co- matiz distinto a la voz normal del narrador.
nexión con lo planteado en los Lineamientos). En cambio, en el párrafo 8 la función de las
A propósito de lo gramatical, en síntesis y comillas es más transparente. Allí Santiago ha-
reiterando algunos planteamientos previos, la bla del beso con la europea y afirma “... fue tan
lectura pasa por comprender el particular fun- rápidoquenotuvetiempodepensar«quéhago»
cionamiento en FRIDA de los guiones y las como pasa en el cine con esos besos
comillas. La ausencia de marcas ortográficas larguísimos”. Y hay transparencia también cuan-
en los párrafos 1, 3, 14 y 17 hace saber que lo do en el 9 nuestro narrador se lamenta “Casi
que allí se dice corresponde a la voz del na- no pudimos estar solos Frida y yo. Siempre es-
rrador, que en este caso coincide con el per- taban mis primas por ahí, con sus risitas y sus
sonaje protagonista. De otra parte, el uso de secreteos, molestando a «los novios». Sólo el
guiones, que sólo se marcan en los párrafos 2 último día, para la despedida nos dejaron en
y 15 muestran que el narrador -Santiago- per- paz.” En este último caso, las comillas indican
mite la aparición de la voz de otros persona- que la expresión no es del todo la adecuada,
jes, en este caso, la voz del profesor. Final- que quien la menciona tiene cierta resistencia
mente, el uso de unas comillas que comienzan a utilizarla (Santiago se resiste a poner su re-
en el párrafo cuatro y se cierran en el 13 seña- lación con Frida en términos de noviazgo),
lan algo que la pregunta 21 de la prueba se mientras que en el primero el “«qué hago»” es
encarga de iluminar: ¿se trata de escritura? una fórmula de citación, una manera de citar-
¿es una ensoñación? “¿una voz distinta que na- se a si mismo trayendo unas palabras hipoté-
rra la aventura del narrador con Frida?”, hasta ticas que habría pronunciado -pensado más
aquí no tenemos asidero para contestar. El bien- si se hubiesen dado las circunstancias.
hecho es que entre el cuarto y el treceavo pá-
rrafo está contenida la experiencia excepcio-
El nivel intertextual
nal en vacaciones de Santiago con la sueca
Frida. (relaciones con otros textos)
Análogamente, custodiadas por las comi- “....Estilos tomados de otros autores, o de
llas del párrafo 16, Santiago consignó su ex- otras épocas.”
periencia vacacional pero rutinaria: “«En mis Para este segundo nivel tomaremos como
vacaciones no hice nada especial. No salí a punto de partida la pregunta 21 de la prueba
ninguna parte...»”. Este uso de las comillas para antes mencionada -y a esta altura ya famosa-.
introducir la propia voz, que en el fondo es La dificultad para poder responder la pregun-

84 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


ta correctamente, está en que el estudiante porales, narrada en una forma que se parece
tiene que acabar de reconocer la función de más a lo escrito que a las formas conversa-
las comillas en el texto apoyándose en el diá- cionales o coloquiales de la oralidad. Esta
logo con otros textos que le permitan com- información tampoco es definitiva y sin em-
pletar el sentido de aquel. El saber sobre otros bargo, estas consideraciones en el contexto
textos narrativos literarios finalmente es la base de las condiciones de producción del cuen-
para formar un criterio que permita decidir si to adquieren otro cariz.
las comillas que demarcan la historia del ro- El contexto aludido tiene que ver con
mance, determinan un texto escrito, una evo- Yolanda Reyes, una colombiana contempo-
cación, una ensoñación o una voz distinta. ránea, quien muy recientemente, en 1996,
Según el ICFES la respuesta correcta es la compuso “El Terror de Sexto B”, y en su
A, las comillas están indicando “la evocación marco a Frida. Sucede que esta autora hace
que escribe el narrador”. El termino evoca- parte de una generación de escritores que
ción no es problemático, pero sí lo es asumir tienen conciencia de los recursos para que
que esa evocación ha sido escrita. ¿Qué ele- la escritura adquiera la connotación de pen-
mentos contiene el texto para respaldar esta samiento, sabemos que si lo que se preten-
hipótesis? No muchos. En primer lugar una de es escribir evocaciones, recuerdos o el
información que otorga el párrafo once en monólogo interior de un personaje, existen
donde el protagonista afirma: “Seguro está formas que recurren por ejemplo a los sal-
dormida mientras yo escribo aquí, esta com- tos temporales y a la fragmentación del re-
posición” (el subrayado es nuestro), “aquí” lato para causar este efecto, tal como lo
lógicamente señala el lugar, el salón de cla- han hecho grandes escritores como Juan
ses y “esta” que es un adjetivo demostrativo, Rulfo en “Macario” o en “La Muerte de Artemio
señala que la composición es esa, la que tie- Cruz” o William Faulkner en “El Sonido y La
ne justo ahí, y pues no es otra que la que Furia”. Si lo que la autora realmente quería
habla de Frida. mostrar era una evocación, hubiera recurri-
También contamos con las comillas. Una do a estas convenciones propias de la lite-
de las funciones de estos signos ortográfi- ratura que son hoy en día corrientemente
cos es “citar” lo que ha sido dicho por suje- usadas en novelas y cuentos. Es precisamen-
tos distintos a quien emite el discurso, de te el no uso de esta convención lo que nos
modo que la defensa de la escritura se de- avala la hipótesis de que lo que está entre
bilita y caemos nuevamente en la ambigüe- comillas no es una evocación o un recuerdo
dad. sino un escrito de Santiago.
Pero la organización de lo que está ex- Es aquí donde “reconocer las relaciones
puesto en el extenso camino de letras que va existentes entre el texto y otros textos: pre-
de las comillas que abren a las que cierran, sencia de diferentes voces en el texto, refe-
ofrece pistas para adherir a la hipótesis en rencia a épocas y culturas diversas, citas li-
cuestión. Es lineal, coherente, sin saltos tem- terales referencias indirectas, formas de otras

Leer la Escuela 85
épocas y otros autores”14 se vuelven necesa- El nivel extratextual
rias para completar el sentido del texto, por
(o contextual)
eso el componente es relacional como se in-
dica en el cuadro inicial. ¿Es indiferente que “Frida” circule en una
Como corolario del análisis de estos dos colección de cuentos que tiene por título “El
niveles podemos decir: terror de Sexto B” a que lo haga como parte
• Que Frida es un texto narrativo literario a de la Evaluación Censal de la Calidad de la
manera de cuento. Educación? En el primer caso el prólogo del
• Que el texto tiene un sólo narrador que par- libro es un buen índice de las intenciones del
ticipa de la historia y es el protagonista de texto. La autora ahí afirma que es un texto
la misma. pensado para jóvenes en etapa escolar, que
• Usa como recursos literarios la descripción por lo tanto pretende recoger historias que
y el diálogo. a ella misma le han llegado y que desea hacer
• Cuenta dos historias, la de lo ocurrido en el llegar a todos para su disfrute. El título de la
primer día de clases, donde los personajes colección de cuentos responde a esa inten-
son un maestro y Santiago, y que trascurre ción y público. Sujetos del mundo de la es-
aproximadamente en una hora y media (du- cuela fácilmente determinan que “sexto B”
ración promedio de dos horas de clase). Y la no es la nomenclatura de un edificio o uni-
segunda historia, que se narra a través de la dad residencial, sino la de un aula de clases.
escritura del recuerdo del protagonista so- La autora ha jugado con un imaginario de
bre lo que le sucedió en vacaciones con re- maestro asociado a monotonía, repetición,
lación a una amiga sueca llamada Frida. carencia de creatividad, predecible y afin-
• En relación con la manera como se cuenta cado en su autoridad “...que para salir del paso
la historia, el plano del relato, se hace uso ordena con una voz aprendida de memoria: -Saquen el
del recurso de la retrospectiva, en donde cuaderno y escriban con esfero azul y buena letra una
el narrador va del presente, del aquí y aho- composición sobre las vacaciones. Mínimo una hoja
ra del salón de clases, al pasado, lo ocurri- por lado y lado, sin saltar renglón. Ojo con la orto-
do durante las vacaciones. grafía y la puntuación. Tienen cuarenta y cinco mi-
• El uso de signos ortográficos marcan parti- nutos. ¿Hay preguntas?”. En el contexto del li-
cularmente en este texto lo que ocurre. Así, bro, y aún en la prueba, para los estudiantes
el guión sólo aparece para dejar hablar al este ángulo podrá ser divertido.
maestro, las comillas para mostrar los tex- Pero por fuera del “Terror de sexto B”, in-
tos escritos por Santiago y los párrafos que corporado a un proceso nacional de evalua-
carecen de estas marcas cuentan lo que el ción masiva y considerado desde el punto de
narrador percibe en el salón de clases cuan- vista de lectores distintos a ese destinatario
do no está escribiendo. original, se comprende que lo divertido que-

14. Lineamientos Curriculares, Op. Cit. pág 62.

86 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


de por lo menos interrogado. Sucedió con uno de los estudiantes que contestaron la prue-
un grupo de maestros15 que analizaba la prue- ba entendieron y aceptaron el circuito comu-
ba, algunos se sintieron molestos y hasta agre- nicativo de la Evaluación Censal de la Calidad
didos, pues la imagen que se presentaba de de la Educación?
ellos no era nada positiva. En opinión de al- Sucede que la prueba es un texto en sí mis-
gunos, ese texto no ayuda a consolidar bue- mo que recoge otros textos y para los desti-
nas relaciones con sus estudiantes, se pregun- natarios primarios de la evaluación, así sean
taron qué pretendía el Ministerio de Educa- los mismos niños para los que escribió Yolan-
ción Nacional al elegir un texto que contribu- da Reyes, el texto de FRIDA está determinado
ye a sostener una mala imagen del maestro y por ese contexto. En un proceso de evalua-
que es repartido en todas las instituciones del ción de carácter oficial -el logotipo del MEN
país. así lo indica-, una evaluación distinta a la que
En síntesis, en la edición de Alfaguara pri- pueden estar habituados los estudiantes, las
ma la intención de la autora del cuento, pero interpretaciones son menos libres. La autori-
puesto en contextos comunicativos distintos, dad del emisor del mensaje se materializa a
hay nuevos sujetos involucrados que necesa- través del mismo cuadernillo 16, por ejemplo,
riamente proponen sentidos ajustados a su dando instrucciones en tono de orden “...Una
punto de vista. No obstante, la consideración vez hayas elegido, escribe la letra correspon-
de los usos sociales de “Frida” nos pone de diente en tu hoja de respuestas”. La prueba
cara a otro hecho conexo: a los niños se les funciona como tal si encuentra un destinata-
está pidiendo también una lectura especial rio capaz de entender todo esto y que se aco-
cuando se les “invita” a sumergirse en un cuen- mode a las expectativas, es decir, interesado
to, no principalmente para disfrutarlo, sino fun- en obtener los mejores resultados. Para que
damentalmente para pensarlo en los términos de verdad las respuestas de una persona exa-
que le señalan las preguntas del cuadernillo minada sean el reflejo de lo que sabe, para
donde aparece y para actuar, en consecuen- que su lectura sea juzgada como su mejor es-
cia, de una determinada manera -demostran- fuerzo, debe garantizarse que pueda y quiera
do así sus aprendizajes y, de paso, suminis- cooperar con el juego que le están propo-
trando información (indirecta, pero de peso) niendo, ¿cooperaría el 100% de los niños eva-
acerca del trabajo de sus profesores, de las luados en el 2002?, ¿alguien lo sabe?.
escuelas donde estudian y del sistema escolar Para dar paso al punto final de esta re-
del país-. Vale entonces cavilar: ¿todos y cada flexión sobre FRIDA en la Prueba Censal, sólo

15. Se trata de un grupo de maestros de Cali que en el año 2003 cursó el “Programa de mejoramiento docente en
lenguaje escrito y la escritura” en el Instituto de Educación y Pedagogía de la Universidad del Valle. Los planteamientos
están reseñados en el trabajo de grado (en curso) de las estudiantes de la Licenciatura en Educación Primaria Ingrid
Muñoz, Martha Parra y Sonia Castro.
16. La autoridad del emisor del mensaje está expresada además y quizás principalmente, por vías de hecho (no
textuales): los materiales de la prueba llegan, se explica oralmente, se deja de lado lo que se hace habitualmente y
se dedican a la prueba , etc.

Leer la Escuela 87
resta reiterar que hemos intentado aportar un con los eventos y acciones que lo apoyan.
ejercicio práctico donde se evidencia que, en • 8.517 (el 49% aprox.) en el nivel D, pueden
parte, le subyacen presupuestos teóricos indi- relacionar las partes de un texto con el tema
cados desde hacía 5 años en los Lineamientos global para determinar una hipótesis sobre
Curriculares de lengua castellana. La premisa la intención comunicativa del autor; reco-
que nos alentó es que si estamos de acuerdo nocen información no dicha en el texto.
con las orientaciones de este documento ofi- Con estos datos estadísticos se podría afir-
ciales y en general en el enfoque discursivo mar que a los estudiantes de las instituciones
del lenguaje, sería coherente estar muy aten- educativas oficiales de la ciudad de Cali, en la
tos a la manera como en nuestras prácticas prueba de lenguaje de quinto grado realizada
escolares de formación de lectores, estamos en el 2002:
considerando a los textos “por dentro” (el ni- • Les fue muy mal, pues de 17.381 evaluados,
vel intratextual), a los textos en relación con el 10% (1.738) ni siquiera comprende la in-
otros textos (el nivel intertextual) y a los tex- formación literal de los textos y solamente
tos en función de los contextos (el nivel extra- 8.517, que es menos del 50%, tienen un buen
textual). nivel de lectura global.
• No les alcanzó para estar a la par de los
“Los niveles” en discusión resultados nacionales, dado que en el nivel
De acuerdo con los resultados entregados D (el más alto) su porcentaje llegó al 48.70%
por el MEN, los 17.381 estudiantes evaluados mientras que Colombia registra 52.53% (3.83
en el año 2002 que cursaban quinto grado en puntos por encima).
las instituciones oficiales del municipio de Cali, • Se les ubica entre quienes tuvieron un re-
se ubican así17 : sultado satisfactorio dado que están en po-
• 1.738 estudiantes (el 10% aprox.) en el Ni- siciones comparables con el resto del país
vel X, es decir, no alcanzan el mínimo logro, y hasta ligeramente por encima, obsérvese
no comprenden la información literal de los que superaron en 0.24% el puntaje nacio-
textos. nal en el nivel C (el del medio), que fue de
• 15.643 (el 90% aprox.) en el nivel B, logran 84.75%.
comprender información ubicada en partes • Se merecen una felicitación porque pasa-
específicas de los textos. ron la Prueba Censal, pues el 90% logró ubi-
• 14.773 (el 85% aprox.)18 en el nivel C, recono- carse por encima del nivel X.
cen las partes de un texto que cumplen la fun- ¿Interpretaciones discutibles y con cierto
ción de desarrollar el tema y las relacionan grado de incompatibilidad? ¡obviamente! ¿con

17. MEN-ICFES, Informe de resultados de las pruebas censales de lenguaje y matemáticas de 2002-2003, distribuido
en CD en el año 2004 (resultados corregidos).
18. Recuérdese que los niveles B, C y D son incluyentes (igual sucede con el E y el F del grado noveno); por ejemplo,
el 84% del nivel C está incluido en el 89.9% del nivel B (no se suman). Los niños que se ubican en el nivel C ya están
contados en el nivel previo, es decir, situarse en un nivel supone haber alcanzado el anterior.

88 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


cuál quedarse? Ese es justamente el proble- sus efectos, debilitándose de esta forma uno
ma, porque los mismos resultados estadísti- de los mecanismos más poderosos que poseen
cos se pueden usar para respaldar puntos de las democracias para abordar y resolver los
vista que van desde matices ligeramente di- problemas colectivos”.
vergentes hasta alternativas francamente Lejos de pretender abordar las compleji-
opuestas. Autores como Bustamante y Díaz lla- dades implicadas en el tejido que nos ocupa,
man la atención al respecto: “Los resultados queremos, no obstante, entrar a ella desde
no están allí para ser aprehendidos, sino que, uno de sus hilos: en qué consisten los Niveles
en gran medida, son producidos por la interpre- de Logro. Para empezar, nos dicen que hay
tación”19, por ello invitamos a poner en discu- 1.738 estudiantes en el Nivel X, que sería el
sión las posibles interpretaciones acerca de nivel A, el más bajo, ese que en las gráficas de
lo que dicen los “Niveles de Logro” en materia resultados resalta con un tenebroso color ne-
de lectura. gro, la X de “tachado”, “anulado”, “errado”,
En la experiencia internacional hay llama- un grupo al que, siendo estrictos, no aplica la
dos similares, recomendaríamos revisar el bre- idea de Nivel de Logro en lectura. De acuerdo
ve artículo del chileno José Joaquín Brunner, con el informe de resultados, los niños que se
“Límites de la lectura periodística de los re- ubican en el Nivel X son los que no lograron
sultados educacionales” 20 que devela cómo superar el 60% de las preguntas del Nivel B
“nos encontramos frente a un ámbito saturado (que es realmente el primero).
de interpretaciones contradictorias...”, en don- Y ¿por qué tantos niños no leen ni siquiera
de hay “un ingenuo pacto implícito de objeti- en el nivel más superficial? ¿pesarán razones
vismo” que borra las complejidades y dificul- de motivación? la premisa aquí es que nadie
tades del proceso evaluativo para resaltar va a esforzarse en resolver exámenes si no tie-
unilateralmente el producto final que son los ne su proyecto de vida en la escuela, si sabe
puntajes ubicados en un esquemático ranking. que pronto la abandonará como les sucede a
Y puntualiza Brunner: “Con esto se banaliza la muchos niños que por circunstancias econó-
información que aportan los estudios naciona- micas dejan de estudiar pronto (y quinto gra-
les o internacionales de medición del desem- do sigue siendo en nuestros esquemas el fin
peño escolar y, lo que es más grave, se de una etapa, un momento propicio para de-
distorsiona la deliberación pública y se limitan sertar)21. Cabe también la especulación acer-

19. Bustamante Guillermo y Díaz Luis Guillermo, “Factores asociables al desempeño de los estudiantes” -Ilustrado
para la evaluación de impacto del plan de universalización en el área de lenguaje-, Universidad Nacional de Colombia,
2003.
20. Tedesco Juan Carlos (Editor), “Evaluar las evaluaciones. Una mirada política acerca de las evaluaciones de la
calidad educativa”. Buenos Aires, UNESCO – IIPE, 2003.
21. En uno de los talleres de divulgación del los resultados de las Pruebas -realizado en la Universidad del Valle- una
maestra relató que un chico no tardó ni cinco minutos en devolver la prueba (sabemos que disponían de un plazo de
1 hora y 40 minutos) ante su extrañeza le explicó: su familia, más allá del quinto de primaria no le iba a dar estudio,
su futuro próximo era un empleo y ese mismo día agradecía poderse ir temprano para ayudar en su casa.

Leer la Escuela 89
ca de la falta de costumbre en la interpreta- me de resultados no se discriminan las pre-
ción de las instrucciones, el manejo del tipo guntas de acuerdo con esos niveles de logro
preguntas y la reflexión que promueven; en (mientras sí se clasifica cada ítem en relación
otras palabras, la prueba no logra sintonizarse al tópico -gramática, pragmática, etc-, que es
con este 10% de estudiantes de instituciones otro grupo de resultados). Con ese vacío en
oficiales porque está muy distante de sus for- medio es difícil aclarar qué refleja la ubica-
mas de leer; ¿será entonces que lo evaluado ción de unos niños aquí y otros acullá. Debe-
es muy distinto a lo enseñado?, ¿que las pre- mos entonces volver al instrumento22 con el
guntas habituales de comprensión de lectura que evaluaron para intentar identificar qué
dirigidas a los niños en sus clases de todos los preguntas corresponden a qué nivel, por ello,
días, no concuerdan en lo más mínimo con las a manera de ejercicio revisaremos a continua-
preguntas de la prueba? ción tres preguntas que en la prueba aluden al
Una vía para entender qué sucedió es mirar siguiente episodio de la historieta conocida
qué exigen los otros niveles. Pero en el infor- como “Calvin y Hobbes”.

22. Ministerio de Educación Nacional, Prueba censal de la calidad de la educación. Nuevo sistema escolar. Quinto de
primaria. Lenguaje. Marzo de 2002. Instrumento aplicado en el Valle del Cauca y otros 4 departamentos.

90 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


El documento de fundamentación de las estableciendo relaciones secuenciales, causa-
pruebas (ICFES, 2000) afirma que para respon- les y de implicación que superan una compren-
der acertadamente a las preguntas del nivel B, sión localizada del texto”.
el estudiante debe retener e identificar partes La pregunta 28, en nuestra opinión, exige
de la información contenida en los textos de un nivel más avanzado de lectura y puede in-
manera local y hacer uso de sus saberes pre- cluirse en el Nivel C, pues pide entender no
vios para reconocer información que aparece sólo la intención del enunciado, sino la rela-
de manera explícita en el texto. Consideramos ción entre las proposiciones locales en trán-
que la pregunta 26 entraría en esta clasifica- sito hacia una comprensión global. Veámoslo:
ción, pues requiere identificar contextos y si- 28. En el recuadro 7, el niño dice: <<no sabe-
tuaciones comunicativas locales: mos casi nada de las culebras>> porque:
26. De la expresión <<¿Será venenosa?>> A.Nohavistoloquepuedenhacerlasculebras.
se puede deducir que el tigre: B. Él y su amigo no han podido responder
A. Sabequetodaslasculebrassonvenenosas muchas de las preguntas que se han hecho.
B. Suponequeningunaculebraesvenenosa C. su amigo le ha dado a entender que es
C. Sabequealgunasculebrassonvenenosas un ignorante.
D. Suponequetodaslasculebrassonvenenosas D. en vacaciones no se debe saber sobre
Para encontrar la respuesta correcta, que temas escolares.
es la C (o clave, en la jerga de los infor- La clave es la B y para dar con ella hay que
mes), el estudiante debe reconocer la si- considerar no sólo la situación comunicativa
tuación comunicativa local sin que se le local, sino también las proposiciones anterio-
exija aún formular hipótesis sobre las in- res -las preguntas que “él y su amigo no han
tenciones globales del episodio comple- podido responder”, este ítem exige movilizar-
to, puede responder adecuadamente con- se entre las diferentes partes de la historieta;
siderando sólo el enunciado particular relacionar la afirmación del recuadro 7 con
<<¿Será venenosa?>> en función de su las preguntas que acerca de las culebras se
saber lingüístico acerca de los cuantifica- han hecho los personajes.
dores “todos, algunos y ninguno” y los ma- El Nivel D, “Comprensión global del texto”,
tices distintivos de “saber y suponer”. de acuerdo con el mismo documento “se agru-
El nivel C en el citado documento del ICFES pan los estudiantes que han superado el Nivel
se describe así: “En este nivel se encuentran C, es decir, los estudiantes que han logrado
los estudiantes que logran superar el Nivel B, construir una hipótesis de lectura global sobre
es decir, aquellos que logran construir, rela- los textos y además movilizan información en
ciones de los elementos locales, una primera relación a otros textos. En este nivel el estu-
determinación global de lo que dice el texto. diante está en capacidad de establecer rela-
En este nivel, el estudiante está en capacidad ciones lógicas sobre lo dicho por el texto de
de responder por el tema global del texto po- manera local y global para deducir, inferir y pre-
niendo en interacción componentes locales y suponer lo no dicho, en la superficie textual,

Leer la Escuela 91
pero motivado por ella. En este nivel el estu- complejidad de los resultados de las pruebas y
diante no sólo logra identificar el tema textual, como tal de la discusión de sus alternativas de
sino también lo que se dice de él en las distintas interpretación. La sugerencia para los lectores es
unidades significativas que lo componen”. intentar hacer el ejercicio extensivo al cuestiona-
Un ejemplo de pregunta de este nivel se- rio completo del cuadernillo, de esta manera se
ría la número 30, pues exige formular una hi- arrojarían luces acerca de un aspecto que es cru-
pótesis sobre la intención global del texto: cial en los planteamientos actuales de la didácti-
30. La historieta en su totalidad, busca que el ca de la lengua -y aquí sí asumimos posición-, la
lector: claridad acerca de las mediaciones que requieren
A. Aprenda un método de investigación los distintos niveles los convertiría en una dimen-
basadoenlaobservaciónylacomprobación sión de las condiciones de la escuela para formar
B. Se convierta en un perito sobre las cule- lectores.
bras, es decir que se convierta en culebrero A propósito, es claro que los Niveles de Lo-
C. Reflexione sobre la relación entre el gro en lectura no se inventaron para las Pruebas
aprendizaje y el juego Saber. Estas recogen una concepción que la bi-
D. Se interese por el estudio y la conserva- bliografía especializada en el tema señala tiem-
ción de la naturaleza po atrás23. También, por experiencia profesional
En este caso se solicita un trabajo inter- los maestros reconocemos al menos dos nive-
pretativo, que al centrarse en la intención-que les: la lectura “de piso”, es decir, la decodifica-
es la respuesta al interrogante sobre para qué ción, el deletreo, y la “lectura comprensiva”, que
se dice lo que se dice- pone al lector en la accede al sentido. Tradicionalmente se han abor-
obligación de aportar lo que en el texto no se dado como dos tipos de lectura separados y
registra explícitamente pero que se puede in- sucesivos, de modo que se enseñan primero las
ferir si se considera su totalidad. Es una pre- letras y mucho más tarde la comprensión. Estas
gunta exigente, pues su resolución pasa por prácticas han sido invalidadas por investigacio-
descartar opciones como la A y la D, que de nes que han demostrado su improcedencia me-
alguna manera son enunciados verdaderos diante la reconceptualización de lo que es leer y
pero a nivel particular. Llegar a la clave, que el seguimiento del proceso de alfabetización que
es la C, implica formular una hipótesis sobre viven los niños24 , quienes desde sus primeras
toda la historieta, superando la lectura frag- aproximaciones a la lengua escrita inventan in-
mentaria. teligentemente hipótesis acerca de lo que re-
Hasta aquí nuestro ejercicio de búsqueda de presentan las formas -lo que comunican, sus
correspondencias entre las preguntas y los nive- sentidos- y no se limitan a traducir las formas
les, un paso recomendable en el análisis de la gráficas a las sonoras dejando para un incierto

23. Cfr. Jurado F., Bustamante G. y Pérez Abril M, “Juguemos a interpretar -evaluación de competencias en lectura y
escritura-”, Plaza y Janes editores, Colombia, 1998.
24. Ferreiro Emilia y Teberosky Ana, Los sistemas de escritura en el desarrollo del niño. México, editorial Siglo XXI,
1979.

92 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


después la tarea de averiguar “qué dice allí”. trata?, la mediación escolar texto-aprendiz de
La categorización en niveles, está ligada a lector en el aula y más allá ¿qué perfiles ad-
una relación de cooperación activa entre el lec- quiere cuando integra la conceptualización de
tor y el texto, que involucra diversas competen- los niveles de logro en lectura? Por supuesto
cias tanto del reconocimiento y distinción de códigos, que no es pertinente pretender en estas pági-
como del uso comprensivo y de la explicación del uso. nas alguna respuesta y tampoco tenemos es-
Esta clasificación es necesaria para los momen- pacio para hacerlo en un libro dedicado a su-
tos evaluativos y para realizar un trabajo cons- gerir elementos para la autoevaluación esco-
ciente de enseñanza hacia la comprensión en lar -por demás, muchas publicaciones se ocu-
su pleno sentido. Pero cabe advertir, como ex- pan justamente de eso-.
plica Fabio Jurado (2000:99)25 que “el funcio- Al margen, y para concluir esta pequeña
namiento de las competencias no es de carác- reflexión sobre los niveles de logro, sólo que-
ter gradual sino simultáneo; es decir, en contex- remos agregar un comentario: a los datos nu-
tos genuinos, como los de la vida práctica, es- méricos habrá que hacerles seguimiento para
tas competencias se activan simultáneamente; ver si a futuro remontamos los puntos de par-
así, todo lector, y más aún los lectores expertos, tida que la censal del 2002 mostró. Por ahora
leen a la vez desde las perspectivas literal (la será suficiente contribución si nos ayuda a ver
lectura básica), inferencial (reconstruyen ana- que urge revisar el significado de lo que es
lógicamente los textos y producen conclusio- leer. De lo contrario, no habrá armonía entre
nes) y crítico-intertextual (asocian los saberes las prácticas cotidianas de la escuela y las
aprendidos con los saberes que el texto movili- evaluaciones de sus resultados, y sin coordi-
za, asumiendo una determinada posición)”. nación entre esas dos instancias, las pruebas
No se trata pues de enseñar el Nivel B, lue- terminan siendo una especie de trampa don-
go el C y después el D, entonces ¿de qué se de inexorablemente caemos todos.

25. Bogoya y otros “Competencias y proyecto pedagógico”, editorial Unilibros, Universidad Nacional de Colombia,
2000. El artículo de Jurado F. es “El lenguaje y la literatura en la educación básica y media: competencias y desempeños
en la búsqueda del asombro de los niños y jóvenes de hoy”.

Leer la Escuela 93
94 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad
Anexo

Leer la Escuela 95
FRIDA
1 5
De regreso al estudio. Otra vez, primer día Para venir desde Estocolmo, capital de Sue-
de colegio. Faltan tres meses, veinte días y cia, hasta Cartagena, ciudad de Colombia, tuvo
cinco horas para las para las próximas vaca- que atravesar prácticamente la mitad del mun-
ciones. El profesor no preparó clase. Parece do. Pasó tres días cambiando de aviones y de
que el nuevo curso lo toma de sorpresa. Para horarios. Me contó que en un avión le sirvie-
salir del paso, ordena con voz aprendida de ron el desayuno a la hora del almuerzo y el
memoria: almuerzo a la hora de la comida y que luego
apagaron las luces del avión para hacer dor-
2 mir a los pasajeros, porque en el cielo del país
-Saquen el cuaderno y escriban con esfero por donde volaban era de noche.
azul y buena letra, una composición sobre las
vacaciones. Mínimo de una hoja por lado y 6
lado, sin saltar renglón. Ojo con la ortografía Así, de tan lejos, es ella y yo no puedo dejar
y la puntuación. Tienen cuarenta y cinco minu- de pensarla un solo minuto. Cierro los ojos
tos. ¿Hay preguntas? para repasar todos los momentos de estas
vacaciones, para volver a pasar la película de
3 Frida por mi cabeza.
Nadie tiene preguntas. Ni respuestas. Sólo
una mano que no obedece órdenes porque 7
viene de vacaciones. Y un cuaderno rayado de Cuando me concentro bien, puedo oír su
cien páginas, que hoy se estrena con el viejo voz y sus palabras enredando el español. Yo le
tema de todos los años “¿Qué hice en mis va- enseñé a decir camarón con chipichipi,
caciones?” chévere, zapote y otras cosas que no puedo
repetir. Ella me enseñó a besar. Fuimos a mue-
4 lle y me preguntó si había besado a alguien,
“En mis vacaciones conocí una sueca. Se como en las películas. Yo le dije que sí, para
llama Frida y vino desde muy lejos a visitar a no quedar como un inmaduro, pero no tenía
sus abuelos colombianos. Tiene el pelo más ni idea y las piernas me temblaban y me puse
largo, más liso y más blanco que he conocido. del color de este papel.
Las cejas y las pestañas también son blancas.
Los ojos son de color cielo y, cuando se ríe, se 8
le arruga la nariz. Es un poco más alta que yo, Ella tomó la iniciativa. Me besó. No fue tan
y eso que es un año menor. Es lindísima. difícil como yo creía. Además fue tan rápido

96 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad


que no tuve tiempo de pensar “qué hago”, tos once años de mi vida sin ella. No se cómo
como pasa en el cine, con esos besos larguísi- hacer para vivir de ahora en adelante. No exis-
mos. Pero fue suficiente para no olvidarla ja- te nadie mejor para mi. Paso revista, una por
más, así me pasen muchas cosas de ahora en una, a todas las niñas de mi clase (¿las habrá
adelante. besado alguien?)

9 13
Casi no pudimos estar solos Frida y yo. Siem- Anoche me dormí llorando y debí llorar en
pre estaban mis primas por ahí, con sus risitas sueños porque la almohada amaneció moja-
y sus secretos, molestando a los “novios”. Sólo da. Esto de enamorarse es muy duro...”
el último día, para la despedida, nos dejaron
en paz. Tuvimos tiempo de comer raspados y 14
de caminar a la orilla del mar, tomados de la Levanto la cabeza del cuaderno y me en-
mano y sin decir ni una palabra, para que la cuentro con los ojos del profesor clavados en
voz no nos temblara. los míos.

10 15
Un negrito pasó por la playa vendiendo -a ver Santiago. Léanos en voz alta lo que
anillos de carey y compramos uno para cada escribió tan concentrado.
uno. Alcanzamos a hacer un trato: no quitar- Yo empiezo a leer, con una voz automática,
nos el anillo hasta que volvamos a encontrar- la misma composición de todos los años:
nos. Después aparecieron otra vez las primas
y ya no se volvieron a ir. Nos tocó decirnos 16
adiós, como si apenas fuéramos conocidos, “En mis vacaciones no hice nada especial.
para no ir a llorar ahí, delante de todo del No salí a ninguna parte, me quedé en la casa,
mundo. ordené el cuarto, jugué fútbol, leí muchos li-
bros, monté en bicicleta, etcétera, etcétera”.
11
Ahora está lejos. ESTO ES EL COLMO DE LO 17
LEJOS”, ¡en Suecia! Y yo ni siquiera puedo ima- El profesor me mira con una mirada lejana,
ginarla allá porque no conozco ni su cuarto ni incrédula, distraída. ¿Será que él también se
su casa ni su horario. Seguro qué está dormida enamoró en estas vacaciones?
mientras yo escribo aquí, esta composición.
(Reyes Yolanda. El terror de sexto “B” Bogotá:
12 Afaguara, 1999, págs. 13-18. Se Transcribe de la
Prueba Censal -con párrafos numerados y otros deta-
Para mi la vida se divide en dos: antes y
lles diferentes del original-.)
después de Frida. No se cómo pude vivir es-

Leer la Escuela 97
98 Hacia un Proyecto Educativo de Ciudad
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