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Introducción

En este trabajo estaremos tratando el tema del origen del civismo, conoceremos su
definición, características y como era el civismo en la antigua roma y en la revolución
francesa.
También veremos a los precursores del civismo y como la revolución francesa
influyó, esta significó el triunfo de un pueblo pobre y oprimido sobre los privilegios
de la nobleza feudal y del estado absolutista. Proclamó la Declaración de los
Derechos del Hombre y del Ciudadano basado en los principios de Libertad.
Igualdad y Fraternidad.
Civismo
El término civismo hace referencia a las normas de comportamiento que rigen a una
sociedad. Se lo conoce también por el nombre de urbanidad y abarca las reglas que
regulan una buena convivencia social. El término civismo tiene proviene de las
palabras civis y civitas del latín que significan ciudadano y ciudad.
Para que el civismo exista es necesario que el hombre se relacione con su
comunidad. De la relación entre el hombre con su comunidad, estado y nación surge
la idea de civismo. Las personas necesitan relacionarse con los demás, convivir con
otras personas para experimentar la mejor forma de comportarse.
El civismo apunta a que las personas que conviven en una sociedad se guíen por
una serie de principios: deben respetar a los demás, así como también a la
naturaleza y los espacios públicos. Un buen civismo se basa en una buena
educación y también influye el sentido de cortesía.
El concepto de civismo nació durante la Revolución francesa y estaba relacionado
con todas las transformaciones sociales que tuvieron lugar. Las normas que
conforman al civismo no son iguales en todos lados, aunque en esencia apuntan a
una buena convivencia. Estas normas de convivencia que comprenden el civismo
representan la competencia de vivir en sociedad. Para esto es necesario ser
sumamente respetuoso con los otros integrantes de la comunidad. También es
importante ser educado y seguir las reglas de comportamiento. Es en este último
aspecto donde puede diferir según la cultura o sociedad a la que se pertenezca.
Uno de los requisitos para contar con las herramientas necesarias para saber
convivir es una buena educación. Con una buena educación los ciudadanos sabrán
cómo deben comportarse y actuar en sociedad.

Características del Civismo


El civismo es el compromiso de los ciudadanos en respetar las normas de la
comunidad. Para ello deben respetarse los derechos de los otros, cuando se
convive con otras personas hay que ser considerados con ellos. Además, deben
cuidarse tanto el medio ambiente como el espacio público, porque es algo más que
comparten y tienen en común. Se considera que la base de un civismo adecuado
se encuentra en la educación. Debe enseñarse a las personas desde temprana
edad cómo comportarse y lo que deben respetar. De esta manera es más probable
que comprendan las normas y eviten transgredirlas.
Siguiendo estos postulados del civismo, podemos decir que una persona es cívica
cuando se rige en base al civismo. Esto es, respetar las normas y los demás con
los que comparte la vida en sociedad. A pesar de ello, en la vida cotidiana suelen
darse situaciones donde las normas no se respetan, aunque se conozcan.
La primera instancia para adquirir el conjunto de normas que comprenden el civismo
se encuentra en la familia. La familia es el núcleo de aprendizaje de todo ser humano
desde la infancia. Si en la familia se le explica a un niño cuáles son las normas
básicas de lo moral y se lo educa correctamente, es más probable que adquiera el
civismo y se guíe por él.
Origen del Civismo
No solo Aristóteles, sino muchos pensadores, antiguos y modernos, consideran que
la adquisición de virtudes es primordial para el desarrollo de las personas que viven
en sociedad. Así, también lo consideraban los romanos por medio de su máximo
precursor Marco Tulio Cicerón, que se convirtió junto a Aristóteles en uno de los
precursores del civismo. En la antigua Roma, Cicerón vio la necesidad de crear un
nuevo orden debido al creciente expansionismo del imperio y a la decadencia del
sistema. Él creía necesario mantener un equilibrio entre la nobleza y el pueblo que
garantizara la existencia del sistema republicano.
Sistematizó teóricamente al Estado Romano, diciendo que todo ciudadano romano
tenía dos patrias: la de nacimiento y la de derecho. El ciudadano ya no era el que
participaba, sino él que tenía garantizado unos derechos, que actuaba de acuerdo
con la ley y que esperaba que esta le protegiera. No era un miembro de la polis,
sino un ciudadano del imperio.

Tipos de Ciudadanía
Aunque los tipos de ciudadanía legal (y los derechos y deberes relacionados)
variaron a través de la historia de Roma. los siguientes tipos fueron los más
comunes:
1. Cives Romani
Eran los ciudadanos romanos plenos. Solo ellos podían acceder a la totalidad
de los beneficios y protecciones que la ley romana otorgaba (por ejemplo.
solo los ciudadanos romanos podían usar toga). Estos civis se dividían
básicamente en dos "clases":
 Los "non optimo jure" —quienes solo tenían algunos derechos, tales
como el derecho al comercio y propiedad (tus commerci) y finalmente
al matrimonio con otros ciudadanos romanos (jus connubii).
 Los "optimo jure", quienes adicionalmente tenían derecho a voto (jus
suffragiorum) y a sor elegidos a puestos en la administración pública
jus honorum).

2. Cives Latini
Este grupo estaba constituido por aquellos que eran habitantes de la Liga
Latina. quienes estaban regidos por el derecho "latino" (jus lati). Tenían el
derecho a la propiedad y a ejercer el comercio, asi como ol derecho a libre
movimiento y asentamiento en Roma (jus migrationis) pero no a casarse con
ciudadanos romanos. A posar quo la designación original designaba a
quienes cuyos ancestros provenían de las tierras de la Liga Latina,
posteriormente el término llegó a designar una clasificación legal: los libertos
y aquellos cives convictos de algunos crímenes o incluso los civis que se
asentaban en colonias latinas los fueron otorgados el estatus de "latinos" por
ley.

3. Socii
Socii o "asociados" o "federados" eran los ciudadanos de estados que tenían
ciertas obligaciones legales con Roma, usualmente, existían tratados donde
se les reconocían ciertos derechos a los habitantes de esos estados a cambio
de ciertos servicios (generalmente los magistrados romanos obtenían el
derecho a reclutar soldados para las legiones en esas regiones). Otra
asociación común era la basada en la aceptación del dominio romano sin
mayores tentativas de resistencia. Ciudades o estados que mantenían esa
actitud estaban, generalmente, exentas de pagar tributo. La costumbre
romana en este sentido era, la primera vez que conquistaban a un pueblo,
obtener una compensación única por los gastos de guerra y un tratado de
paz que garantizara los derechos de los ciudadanos romanos (por ejemplo,
paso libre a comerciantes romanos). Las tentativas de repudiar esos
acuerdos eran castigadas duramente, y la totalidad de la población era
reducida a la esclavitud e incluso ocasionaba la destrucción completa de las
ciudades. Una creciente insatisfacción con los derechos otorgados a los socii
y la creciente demanda por legionarios condujo, finalmente, a la Guerra
Social (91-88 a. C.) la que condujo a la Lex Julia (específicamente la Lex lulia
de Civitate Latinis et Sociis Danda. 90 a. C.) la que otorgaba los derechos de
los cives romanii a todos los latini y los socii cuyos estados aceptaran una
paz inmediata o no hubieran participado en tales guerras.

4. Provinciales
Se consideraban "provinciales" aquellas poblaciones que estaban bajo la
influencia o el control romano, pero carecían incluso de los derechos de los
socii, esencialmente solo tenían los derechos del jus gentium.

5. Peregrini
Un peregrinus (plural peregrini) era originalmente el término utilizado para
designar cualquier persona que no era un ciudadano romano, y que se
encontraba en Roma solo de manera temporal. Con la expansión del poder
romano el término empezó a cubrir más y más grupos, incluyendo, por
ejemplo, los latini, los socii y los provinciales, además de cualquier extranjero.

El Derecho Romano
En un principio. la ley se basaba en las costumbres de los antepasados y se
transmitía de forma oral. En el siglo V a.C., la plebe (clase social formada por
artesanos, comerciantes y campesinos) obligó a que se recopilaran y se escribieran
las leyes para evitar su manipulación. Una comisión de diez magistrados elaboró la
ley de las Doce Tablas, código que garantizaba la igualdad de todos los ciudadanos
ante la ley y que fue la raíz del derecho romano.
El Derecho Romano constituye un conjunto de disposiciones jurídicas y un sistema
legal que se desarrolló en Roma desde la primera compilación de leyes, en el año
450 a.C., hasta la muerte de Justiniano I, soberano del Imperio Bizantino, en el año
565 d.C.
El Derecho Romano ha tenido una gran evolución, primero fue el derecho de un
pequeño pueblo, para luego ser el derecho de una ciudad y después el derecho de
lodo un país. así como el derecho de un gran imperio. Hoy, constituye el más sólido
fundamento de las legislaciones contemporáneas.
El Civismo en la Revolución Francesa
La Revolución francesa también influyó en el desarrollo del civismo, ya que fue el
cambio político más importante que se produjo en Europa, a fines del siglo XVIII y
que no solo fue importante para Francia, sino que sirvió de ejemplo para otros
países en donde se desarrollaban conflictos sociales.
Esta revolución significó el triunfo de un pueblo pobre y oprimido sobre los privilegios
de la nobleza feudal y del estado absolutista. Proclamó la Declaración de los
Derechos del Hombre y del Ciudadano basado en los principios de Libertad.
Igualdad y Fraternidad.
El término civismo proviene de origen francés, se empezó a utilizar a partir de la
Revolución Francesa, ya que a partir de la misma los hombres y mujeres
comprendieron su rol dentro del Estado, que no era solo el de ser hombres sino
también ciudadanos y por lo tanto se vieron en la necesidad de hacer códigos de
derechos humanos y de derechos cívicos para los ciudadanos, y de esta manera
regir la convivencia en las ciudades por medio de estas normas. Desde el
surgimiento de estas normas fue que los franceses empezaron a sentirse
ciudadanos y entendieron que a la vez que tenían derechos también tenían deberes
que cumplir. Es a partir de este momento que el ser humano empieza a entender y
hablar de civismo.
Los acontecimientos que condujeron a la toma de la Bastilla el 14 de julio de 1789,
permitió que la Revolución Francesa comenzara a expandirse por toda la nación.
La rendición de este bastión, fue sin duda el más importante hito simbólico de los
inicios de la Revolución, más que un factor detonante en sí.

Con anterioridad, la autoridad real ya se había visto mermada por la revuelta de la


nobleza (un hecho recurrente desde la Fronda en el siglo XVII) que se negaba a
financiar los planes de Luis XVI mediante el pago de impuestos. Pero el mayor
detonante fue la formación de la Asamblea Nacional, el Juramento del Juego de
Pelota y la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, que abrían la
vía hacia el fin del absolutismo y de los privilegios de la nobleza. En 1789, el
movimiento se extendió enseguida a las capitales de las provincias francesas.
La Declaración de los Derechos del Hombre, aprobada por la Asamblea Nacional
Constituyente francesa el 26 de agosto de 1789, es uno de los documentos
fundamentales de esta revolución (1789-1799) porque permitió definir los derechos
personales y colectivos como universales. Aun cuando establece los derechos
fundamentales de los ciudadanos franceses y de todos los hombres sin excepción,
no se refiere a la condición de las mujeres o la esclavitud, aunque esta última fue
abolida por la Convención, el 4 de febrero de 1794. Sin embargo, es considerado
un documento precursor de los derechos humanos a nivel nacional e internacional.
No fue hasta que Olympe de Gouges, en 1791, proclamó la Declaración de los
Derechos de la Mujer y la Ciudadana, que las mujeres entraron, por lo menos a
través de un documento no oficial, en la historia de los derechos humanos.
Conclusión

Al finalizar este trabajo podemos concluir que:


 Este trabajo para mi ha sido muy importante ya que aprendí sobre el origen
del civismo y como consideran que la adquisición de virtudes es primordial
para el desarrollo de las personas que viven en sociedad.
 El término civismo tiene proviene de las palabras civis y civitas del latín que
significan ciudadano y ciudad.
 precursor Marco Tulio Cicerón, que se convirtió junto a Aristóteles en uno de
los precursores del civismo.
 La Revolución francesa también influyó en el desarrollo del civismo. ya que
fue el cambio político más importante que se produjo en Europa, a fines del
siglo XVIII y que no solo fue importante para Francia, sino que sirvió de
ejemplo para otros países en donde se desarrollaban conflictos sociales.
Anexos
Índice

Introducción……………………………………………………………………….1
Civismo…………………………………………………………………………….2
Características del Civismo……………………………………………………..2
Origen del Civismo……………………………………………………………….4
Tipos de Ciudadanía……………………………………………………………..4
El Derecho Romano……………………………………………………………...7
El Civismo en la Revolución Francesa…………………………………………8
Anexos……………………………………………………………………………..10
Conclusión…………………………………………………………………………11
Ministerio de Educación
Centro Educativo Evangélico Cuadrangular Bet-el

Trabajo Trimestral de Cívica

Tema: El Origen del Civismo

Profesor: Bolívar Carrera

Alumno: Kendrid A. Vega S.

Nivel: 7ºAño

Fecha: 22/5/2019

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